Florentino López-Cuevillas - La civilización céltica en Galicia

Page 141

Florentino

López

Cuevillas

La civilización

céltica en Galicia

1 9 7

196

en algunos lugares, aquellos procedimientos arcaicos de extracción, pero dejó asimismo como recuerdo suyo una gran cantidad de joyas, que comienzan a aparecer en los primeros tiempos dei metal, pero que se multiplicãn de manera potable en el período de los castros, regido en parte culturalmente por las tribus celtas que invadlèròn nuestra tierra en la primera mitad dei siglo vi antes de nuestra Era. çsw (<• Gustaban estos celtas de adornarse con preseas que lucían en los combates y que ofrecían a veces en los altares de los dioses, y al encontrarse instalados en el noroeste peninsular, país rico en el metal precioso, crt&rdn en él un centro de producción joyera tan importante como el dei Rhin o el dei Sur de las Galias, produciendo una serie de .tipos entre los que destacan los torques, los -brazaletes, las arracadas, las diademas, las lúnulas, los collares y otras piezas de uso indeterminado. Se fabricaron la inmensa mayoría de estas joyas cojLoro, y las menos se trabajaron en plata y más rara vez en bronce, circunstancia que se explica fácilmente por la gran cantidad de aquel metal que existia en nuestro país, y por la falta de platá, debiendo proceder de seguro la que aqui se empleaba de los ricos yacimientos de la cordillera mariánica. Las joyas que más abundan en nuestros inventários y las que en consecuencia hemos de considerar como más usuales en el tiempo de los castros, son los torques, nombre con que designamos con poca propiedad, a todos los collares rígidos, lo mismo a los funiculares, que es a los que corresponde justamente, que a los formados por varillas de sección circular, romboidal o cuadrada, que en realidad no son torques pero a los que viene dándosele tal nombre consagrado hoy por el uso. Parece estar cojnprobado que en los países celtas dei Centro y dei Oeste de Europa^fueroji estas joyas adorno de m u j & e s durante todo el primer período de La Téne, y que sólo hacia el afio 300 antes de nuestra Era se convirtieron en distintivo de guerreros. Por Io que respecta al NW. hispânico la presencia de torques en los cuellos de las estatuas de guerreros de Montealegre y dei castro de Rubiás, nos indica con claridad que estas joyas eran usadas por los hombres en el tiempo en que se esculpieron las

referidas estatuas, ignorándose sLcon anterioridad las usaron las mujeres o si las personas de los dos sexos se adornaron siempre con ellas. Pero de un modo o de otro es indudable que debieron alcanzar una boga extraordinaria, ya que pese a las muchas fundidas por plateros ignorantes, causando su pérdida como documentos únicos, y de proceder la casi totalidad de los ejemplares catalogados de hallazgos más o menos casuales en lugares de habitación, su número es ya considerable y aumenta sin césar. Tiene la totalidad de los torques encontrados en nuestro círculo cultural, la varilla encorvada en forma de C, que a veces, como sucede en uno de los que aparecieron en el castro de la Recadieira y en otros de Melide, de San Lourenzo de Pastor y de la Capelada, se abre mucho hasta lograrse casi una elipse, cerrándose en otras ocasiones, pero sin tocarse nunca los extremos como suele pasar en piezas similares de La Téne, dei Oeste y Centro de Europa. Por lo general las varillas disminuyen de grueso desde la porción media hacia los extremos; pero en ciertos ejemplares, como en tres dei tesoro de Foxados y en algún otro, se engruesan asimismo los dos extremos, cerca dei punto de inserción de las cabezas. El predomínio deJas_varillas macizas con sección cuadrada, romboidal o circular, sobre, las constituidasjgor alambr^ trenzado ès completo, pareciendo reservarse estas últimas para los collares de plata (Mondofiedo, Cortinhas, trás de Bagunte), empleándose tan raras veces en los de oro, que sólo podemos citar para el caso una de las piezas dei Cruceiro da Crufia, que al parecer presentaba como la de Mondofiedo expansiones en forma de ocho de los alambres constitutivos dei funículo. Las varillas de sección romboidal y las circulares se registran casi en el mismo número, pero en cambio las cuadradas no aparecen más que en uno de los torques de Foxados, en el de Santa Maria de Rendar y en uno dei Museo de Pontevedra, que quizá proceda de la colección dei canónigo de la catedral de Orense, sefior Arteaga. El grueso y la manera de hallarse desarrolladas y construídas estas varillas varia mucho, habiéndolas toscas como la dei rio Verdugo o Oitaben y la de Rendar, observándose en otras ejecutadas


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.