APLICACIÓN DE LA NATAMICINA EN LA SÍNTESIS DE NANOFIBRAS PARA FABRICAR ENVASES ACTIVOS La fabricación de envases activos para los alimentos es sin duda el campo de mayor futuro en investigación de la ciencia aplicada al sector de la alimentación. Por eso los estudios sobre nuevas tecnologías con las que fabricar la nueva generación de envasado que optimicen la dosis y la eficacia de las sustancias que contienen, como la natamicina, son muy abundantes. En este caso se trata de un estudio científico llevado a cabo en Brasil y publicado recientemente en la revista SN Applied Sciences. El estudio se llevó a cabo con la técnica de electrospinning (electrohilado) para fabricar nanotejidos a los que se aplicaron diferentes sustancias antifúngicas. Se reveló que entre cinco compuestos testados, la natamicina es la que tenía mayor influencia en las medidas de las nanofibras. Gracias a esa mejor interacción con el microtejido, las muestras que contenían natamicina presentaron mejor actividad antifúngica. La natamicina tiene como ventaja ante otros antifúngicos su baja toxicidad y amplio espectro de acción, es decir que es útil para eliminar muchos tipos de hongos diferentes sin afectar la calidad y seguridad del alimento. Los modelos de crecimiento para hongos se hicieron en medios como el agar con leche desnatada y también en muestras de queso blando, para su aplicación en la industria alimentaria. Y los resultados demuestran que las nanofibras enriquecidas con natamicina son buenas plataformas para eliminar las levaduras y los hongos filamentosos de estas superficies. Todavía hay poca información sobre cómo incorporar la natamicina u otras sustancias antifúngicas a las nanofibras. El polímero elegido para este estudio está basado en la PCL (poli-ε-caprolactona) , y diferentes variantes de este polímero fueron ensayadas para conocer sus propiedades físicas y químicas de cara a aplicar las nanofibras recubiertas de natamicina en el envasado alimentario.