NAUTICART2009. Otra forma de ver las cosas. © 2009 ainhoasanchez Cangas de Morrazo-Pontevedra GALICIA-ESPAÑA 1ª Edición español-inglés Fotografía y diseño: Ainhoa Sánchez Maquetación: Modesto Martínez y Ainhoa Sánchez Traducción: Carraig Traducciones Impreso por C.A. Gráfica - Mos-Pontevedra www.ainhoasanchez.com www.nauticart.es Depósito Legal: PO-xxxxxxxxx Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra, ya sea por medio mecánico o electrónico, sólo puede ser realizada con la autorización de su autora: Ainhoa Sánchez Vidales.
NAUTICART2009
Otra forma de ver la cosas... Seeing things a different way...
A mis padres... sin ellos nada de esto sería posible. Gracias... A mis hermanos... por su apoyo incondicional. A todos aquellos que me quieren y que un día me dijeron que sería capaz de hacerlo. For my parents… without them none of this would have been possible. Thank you… To my brothers…. for their unconditional support. To all of those who love me, and one day told me that I’d be able to make it..
El sueño de Ainhoa
Ainhoa’s dream
Perseguir un sueño es la única manera de alcanzarlo. Ainhoa lo sabe, y en 2009 decidió invertir buena parte de su mucha energía en caminar hacia el suyo. Cámara en mano, y con poco más que su ilusión, viajó a Alicante a mediados del mes de mayo para probar suerte como fotógrafa náutica en un circuito de regatas internacional. No era la primera vez que fotografiaba barcos en competición, pero si la primera que lo hacía con el firme propósito de convertirlo en su forma de vida.
Following a dream is the only way of achieving it. Ainhoa knows it, and in 2009 she decided to dedicate a major part of her boundless energy in striving towards her own. Camera in hand, and with little more than her enthusiasm, she travelled to Alicante in May to try her luck as a photographer on the international regatta circuit. It wasn’t the first time she’d taken photos of yachts in competitions, but it was the first time she’d done so with the firm intention of making it her way of life.
Ayudada por sus padres y animada por sus amigos, pero sobre todo convencida de querer mostrar al mundo su “otra forma de ver las cosas”, Ainhoa comenzó a hacer lo que mejor sabe: disparar fotos y aplicarles ese toque personal que distingue su trabajo del de otros fotógrafos. “Ni mejor, ni peor... sólo diferente”.
With the help of her parents and the encouragement of her friends, but above all convinced of wanting to show the world her “other way of seeing things”, Ainhoa began to do what she knows best: shooting pictures and giving them that personal touch that sets her work apart from that of other photographers. “No better, no worse… just different.”
A Alicante le siguieron Cagliari (Cerdeña, Italia) en julio, Portimão (Portugal) en agosto, Cartagena en septiembre y Palma de Mallorca, donde en octubre el Mundial de TP52 cerraba el círculo iniciado cinco meses atrás. Ainhoa acompañó a las flotas de TP52 y GP42 por media Europa para retratar a estos colosos de fibra de carbono, y de paso intentar hacerse un hueco en la exclusiva comunidad de los fotógrafos náuticos. En el camino compartió experiencias con algunos de los mejores, como Nico Martínez, Ian Roman, Chris Cameron, Richard Walch, Carlo Borlenghi,... Con ellos disfrutó y de ellos aprendió, logrando de paso que su nombre y su trabajo comenzara a sonar con fuerza tanto entre la comunidad de fotógrafos como entre la de regatistas.
Alicante was followed by Cagliari (Sardegna, Italy) in July, Portimão (Portugal) in August, Cartagena in September and then Palma de Mallorca, where in October the TP52 world championship brought an end to the season that began five months earlier. Ainhoa accompanied the flotillas of TP52 and GP42 over half of Europe, to photograph these colossuses of carbon fibre, and at the same time to try to carve out a niche in the exclusive community of yachting photographers. On the way she shared experiences with some of the best, like Nico Martínez, Ian Roman, Chris Cameron, Richard Walch, Carlo Borlenghi,… She had fun with them, and learned from them, and at the same time her name and her work began to make waves amongst the photographers and yachting community alike.
Las fotografías de Ainhoa son mucho más que momentos congelados, mucho más que ejemplos de la belleza plástica de un deporte todavía incomprendido. Con su cámara y su ordenador logra una simbiosis única con la que es capaz de plasmar en foto la fuerza de una maniobra, el dramatismo del enfrentamiento bajo un cielo encapotado, la violencia de un casco golpeado por un mar embravecido, el esfuerzo en el rostro de quien lucha contra los elementos, la calma tras la tempestad, la pasión del deporte, la felicidad del triunfo, la frustración del fracaso,... Sus fotos cuentan historias, y para interpretarlas sólo piden que el espectador abra la mente e intente leer entre líneas. Este libro consta de cinco bloques, cinco perspectivas diferentes con las que su autora nos sumerge en el mágico universo de la vela con la intención de contagiarnos ese placer que se aprecia en la mirada de quienes la practican. Cada capítulo muestra un matiz de algo que trasciende lo deportivo: comienza con una selección de retazos impersonales, detalles, sombras, FANTASMAS que se escapan a la vista no entrenada pero que Ainhoa ha atrapado para que entendamos su otra forma de ver las cosas; el segundo capítulo se asoma a la competición para mostrarnos cómo se preparan hombres y máquinas AL ACECHO para saltar al terreno de juego; el tercer capítulo es el de la acción, el fragor de la batalla, POTENCIA PURA; en el cuarto episodio nos ofrece una visión privilegiada de los últimos metros de la carrera, EL ÚLTIMO ESFUERZO de los protagonistas para superar a sus rivales; por último, un repaso gráfico a todo lo que ocurre después de la regata, la reacción de los ganadores, el descanso de los gladiadores, el repaso al material, LA RECOMPENSA,... Una selección de piezas únicas que Ainhoa extrajo del mar para tallar y convertir en joyas. Si estás leyendo esto, es porque quieres descubrir esa otra forma de ver las cosas. Te invito a que le concedas unos segundos a cada foto y que lo hagas con la mente abierta, como cuando entras en un museo dispuesto a dejarte sorprender. Pasa la página y disfruta... Entras en el sueño de Ainhoa. Bienvenido...
Ainhoa’s pictures are much more than moments frozen in time, much more than examples of the artistic beauty of a sport that is still misunderstood. With her camera and her computer, she achieves a unique symbiosis with which she is able to capture all of the power of a manoeuvre, the drama of a challenge beneath an overcast sky, all the violence of a hull battered by a stormy sea, the exertion in the face of a yachtsman fighting against the elements, the calm after the storm, the passion of the sport, the joy of victory, and the frustration of failure… Her pictures tell stories, and in order to understand them, all they ask is for the viewer to open their mind and try to read between the lines. This book consists of five sections, five different perspectives through which its authoress immerses us in the magical world of sailing, with the aim of infecting us with the pleasure seen in the faces of those who take part in it. Each chapter displays a nuance of something that goes beyond sport: it begins with a selection of impersonal snapshots, details, shadows, GHOSTS that escape the untrained eye, but which Ainhoa has trapped so that we can understand her other way of seeing things; the second chapter explores the world of competitions, showing us how men and machines are prepared, POISED FOR ACTION; the third chapter refers to the action, the heat of battle, PURE POWER; the fourth chapter offers us a privileged view of the last metres of the race, THE FINAL PUSH by the protagonists to overcome their rivals: and finally, we are shown scenes of what happens after the regatta, the reaction of the winners, the gladiators at rest, checking over the equipment, THE REWARD… a selection of unique images that Ainhoa has brought from the sea to shape and convert into jewels. If you’re reading this, it’s because you want to discover this other way of seeing things. I invite you to dedicate a few seconds to each picture, and to do so with an open mind, in the same way as when you enter a museum, ready to be surprised. Turn over the page and enjoy… You are entering Ainhoa’s dream. Welcome...
Una profunda bocanada de aire fresco
A truly a deep breath of fresh air
Conocí a Ainhoa directamente en el campo, lo que para los que nos dedicamos a este trabajo significa un puerto, un pantalán,... algún lugar donde se desarrolla una regata. En este caso fue en Portimão (Portugal), con motivo de la cuarta etapa del Circuito Audi MedCup 2009.
I met Ainhoa directly in the ‘field’, which for those of us dedicated to this work means a port, a jetty, somewhere where a regatta is being held. In this case it was in Portimão (Portugal), during the fourth leg of the Audi MedCup 2009 Circuit.
He de admitir que me sorprendí al verla. La fotografía de regatas no es un trabajo sencillo, y dar los primeros pasos en él resulta especialmente duro. Por supuesto que tengo otras colegas femeninas, y algunas realmente buenas, pero aún así no parece ser un trabajo popular entre las mujeres. Además, las nuevas generaciones parecen inclinarse por intereses muy diferentes, por lo que una chica desconocida en una neumática es algo que hace tiempo que no veo... entonces, un buen día, me presentaron a Ainhoa Sánchez.
I must confess that I was surprised to see her. Taking photos of regattas is not an easy task, and getting a foot in the door is especially tough. Of course I have other female colleagues, some of whom are really great photographers, but even so it doesn’t seem to be a popular job amongst women. Also, the new generations seem to tend towards very different interests, and so it’s been a while since I’ve seen an unknown girl in a dinghy… and so, one fine day, I was introduced to Ainhoa Sánchez.
Llevo treinta años dedicado a este trabajo, y cada día, cada regata, me he esforzado por pensar en algo nuevo, en hacer algo distinto. Siendo así, ¿cómo podría no apreciar a una fotógrafa como Ainhoa? Con riesgo de parecer presuntuoso, debo decir que demasiado a menudo los fotógrafos, especialmente los más jóvenes, se limitan a intentar copiar el trabajo de otros. Ainhoa, haciendo gala de un coraje del que debería sentirse muy orgullosa, apareció un día en el campo de regatas y comenzó poco a poco a hacer el trabajo a su manera, con un estilo original y muy personal. Creando fotos con un toque muy pictórico, casi de tiempos pretéritos, pero combinado con nuevas tecnologías creativas que controla a la perfección.
I’ve been doing this job for 30 years, and every day, in every regatta, I’ve made every effort to think about something new, to do something different. This being the case, how could I fail to appreciate a photographer like Ainhoa? At the risk of sounding presumptuous, I have to say that photographers, especially the youngest, limit themselves all to often to trying to copy the work of others. Ainhoa, displaying a bravery she must feel very proud of, turned up one day in the world of regattas and little by little began to work in her own way, with an original and highly personal style: creating photos with a highly pictorial touch, seemingly from a bygone age, but combined with new creative technologies that she masters to the point of perfection.
Ainhoa es una pintora, y eso puedes apreciarlo en cada una de sus fotos. Pero a diferencia de otros pintores, en vez de limitarse a dibujar una y otra vez los mismos Clase-J, y tal vez exponerlos en el puerto de Saint-Tropez, ella prefirió armarse de cámara, saltar a una neumática y comenzar a seguir a los TP52... Cada día regresa a tierra con sus “pinturas”, pero además disfruta del placer del viento soplando en su cara.
Ainhoa is a painter, and this is something that can be seen in each and every one of her photos. But unlike other painters, instead of just painting the same J-Class yachts over and over again, and maybe displaying them in the port of Saint Tropez, she preferred to grab her camera, jump into a dinghy and start to follow the TP52… Every day she steps back on dry land with her ‘paintings’, but she also enjoys the pleasure of the wind blowing in her face.
No voy a decir que amo todas las fotos de Ainhoa, por supuesto, pero para alguien que ha sacado y visto millones de fotografías a lo largo de su vida, Miss Sánchez es, creedme, una profunda bocanada de aire fresco...
I’m not going to say that I love all of Ainhoa’s pictures, of course, but as someone who’s taken and seen millions of pictures throughout their life, believe me, Miss Sánchez is a truly a deep breath of fresh air…
Carlo Borlenghi Fotógrafo náutico
Carlo Borlenghi Yachting photographer
Fantasmas... Ghosts...
Fan
Al Acecho... Poised for action...
Potencia Pura... Pure Power...
El Ăşltimo esfuerzo... The final push...
La Recompensa... The reward...
Gracias...
Thanks to...
Javier Sobrino, por su apoyo, por su
Javier Sobrino, for his support, his
cariño, por su amistad. Pedro Sardina, por “adoptarme” en los primeros pasos.
Nico (mi Nico), Richard, Jesús, Chris... y todos los fotógrafos que me
ayudaron y me hicieron sentir como uno más. Carlo Borlenghi, por sus palabras, por su sabiduría.
Fernando Iñigo, Sabina, Carmen, Mónica... y todos los que forman el equipo del Circuito Audi MedCup, porque me
hicieron sentir como en casa. Juan Carlos Landín, por ayudarme a mostrar al mundo mi trabajo. Fernando Rey, por sus enseñanzas y por apostar por mí. Modesto, por ayudarme a materializar todo este sueño.
A todos aquellos que me quieren.
love, and his friendship.
Pedro Sardina, for “adopting” me in the
early days. Nico (my Nico), Richard, Jesús, Chris,... and all of the photographers who helped me out, and made me feel like one of the family. Carlo Borlenghi, for his words, for his wisdom. Fernando Iñigo, Sabina, Carmen, Mónica,... and all of those in the Audi MedCup Circuit team, for making me feel at home. Juan Carlos Landín, for helping me to present my work to the world. Fernando Rey, for everything he has taught me, and for believing in me. Modesto, for helping me to make all of this dream come true. To all of those who love me.