La dinámica del mundo actual exige cada vez más gente dispuesta a liderar en diferentes aspectos de la vida. No se trata únicamente del gran presidente de empresa o del guía espiritual que nos indica el camino. Y cada uno de nosotros tiene un papel fundamental en la gestión de su propio destino. ¿Es el impulso del liderazgo una inspiración para pocos? ¿Se pueden educar personas líderes para que guíen procesos positivos de cambio? Los expertos están convencidos de que los líderes se hacen, a base de disciplina y una enorme dosis de autoconocimiento. Javier Fernández Aguado ha escrito varios libros sobre el tema y en esta ocasión nos da una guía sobre esa receta necesaria para hacer de cada colombiano un buen líder, en beneficio de las empresas y el país. ¿Un líder nace o se hace?
El liderazgo es un hábito y puede ser adquirido. Obviamente será mucho más fácil asumir los hábitos adecuados en la medida en que haya una inclinación innata precedente. Por eso definí la metáfora del idioma para facilitar la adquisición del liderazgo. Propongo que el liderazgo es un idioma compuesto por unas 250 palabras y comportamientos. Es decir, hábitos que se deben aprender y ejercer. ¿Qué habilidades debe desarrollar un líder en el actual contexto económico del continente?
En primer término, exige preparación técnica en función de la responsabilidad que se asuma. En segundo lugar, hay que adquirir y desarrollar habilidades comportamentales: negociación, empatía, presentaciones en público, gestión del tiempo, etc. La tercera parte imprescindible es la ética. Si falta, no hay un líder, sino un
manipulador. La ética -la decencia- marca la diferencia entre un líder y un agitador de masas. No faltan los alborotadores que confunden el liderazgo con un simplón populismo que daña gravemente a las personas y a las organizaciones. Con ocasión del ochenta aniversario de la ascensión de Hitler al poder estoy ultimando un análisis detallado de ese siniestro personaje para diferenciar el liderazgo y la manipulación. Muchos van a verse reflejados en ese libro. Pocas personas han marcado tanto un siglo como Hitler. Pero no fue un líder, porque le faltó cuando menos conocer lo que es la ética. ¿Cuáles son las claves para ser el líder en una pequeña empresa?
En este contexto las personas son radicalmente importantes. En una gran organización es más fácil camuflarse, en una pyme todo el mundo debe dar lo mejor. Quien no lo hace queda pronto en evidencia. ¿Qué estrategias existen para que el líder permita que los miembros de su equipo potencialicen sus capacidades?
Líder es quien llega a un grupo humano y lo transforma en un equipo pero también lo traslada a un lugar mejor de aquel en el que estaba cuando llegó. No lidera quien no desarrolla las capacidades de sus colaboradores. ¿Qué papel juega la pasión en un líder?
Sólo un dirigente que traslade pasión -entusiasmo- a su equipo podrá convertirse en líder en sentido pleno. Un organigrama ha de estar impregnado de pasión para convertirse en un proyecto por el que merece la pena esforzarse. Ese plus de pasión, sólo lo aportan los líderes.