DESARROLLO DE UNA ESCALA DE EVALUACIÓN DE ENFERMEDADES Guía de Estudio
A. Introducción: La cuantificación del nivel de enfermedad presente en un cultivo permite tomar decisiones oportunas sobre prácticas de manejo, así como valorar el efecto de la aplicación de las mismas, tanto en situaciones comerciales como en experimentos. En una población de plantas, la enfermedad se puede cuantificar mediante dos variables: incidencia y severidad. La primera variable se refiere a la proporción o porcentaje de unidades enfermas (plantas, hojas, frutos, etc., según sea el caso). La determinación de la incidencia es fácil y objetiva, pero no da una indicación sobre qué tan enfermas están cada una de las unidades consideradas. La severidad es una medida de la proporción de tejido enfermo. Esta da una idea más real del nivel de enfermedad, pero su determinación es más lenta y a menudo más subjetiva, pues en la práctica se hace a ojo. El uso de escalas pictóricas ayuda a eliminar parte de la subjetividad de la medición, y a aumentar la rapidez de la evaluación. Además, al proveer referencias estandarizadas para comparar, el uso de diagramas incrementa la precisión, la confiabilidad y la consistencia de la evaluación, en relación a la evaluación visual sin ayuda pictórica. Los diagramas deben representar unidades de evaluación con una severidad conocida, y una escala debe tener varios diagramas con niveles conocidos de severidad, desde 0 hasta 100%. El desarrollo de diagramas estandarizados se puede realizar de varias maneras. El método más sencillo consiste en pesar un papel de área conocida y uno con la forma de la unidad por evaluar (hoja, fruto, etc.), para obtener el área foliar, y luego añadirle a copias de éste último distintas cantidades de "lesiones" de área conocida, hasta completar los porcentajes requeridos de área enferma. Este método funciona bien en el caso de enfermedades que producen lesiones aproximadamente redondas. Otro método consiste en dibujar hojas sobre papel milimétrico y determinar su área, y luego dibujar lesiones de área conocida, simplemente contando el número de cuadros del papel milimétrico. Finalmente, en caso de lesiones que avanzan desde la orilla hacia el centro de la hoja, se puede desarrollar un diagrama estandarizado pesando una hoja para obtener el peso equivalente a 100% de tejido sano (0% de área enferma), y luego recortando áreas que representen lesiones, pesando la hoja incompleta y repitiendo el procedimiento hasta obtener un ámbito adecuado de severidades. En esta práctica se usará este último método. Una versión computarizada y menos tediosa es la utilización de imágenes digitalizadas de hojas enfermas, determinándose el porcentaje de área enferma como la proporción de "pixeles" correspondientes al tejido enfermo en relación con los "pixeles" totales. Existen algunos programas de cómputo que hacen esto. Se demostrará uno de ellos. B. Objetivos: Al completar el ejercicio el estudiante estará en capacidad de: 1) Desarrollar una escala diagramática para cuantificar severidad de una enfermedad. 2) Utilizar una escala de evaluación de severidad