Colombia cuenta con un estudio que identifica claramente cómo afecta emocionalmente el desplazamiento a un niño, una niña, un hombre y una mujer en Cartagena, Tumaco y Quibdó. Hasta la fecha sólo existían estudios generales que impedían conocer con detalle en qué se diferencia lo que padece un niño y un adulto frente al mismo hecho violento: el desalojo de sus tierras.