Ramón Vargas es quien desvía el rumbo de Wilfrido hacia el merengue. En el momento en que Los Beduinos ganaban popularidad con la balada “Tu Una Flor” Ramón Vargas su padre, le ha hecho una advertencia profética.
“Querido hijo: no sabes como me llena de gloria tu iniciativa y ver glorificado tu talento – le escribió Ramón desde Altamira-, pero la senda musical tomada para tu carrera no me parece la más correcta, pues la música que me has enviado no presenta en sustancia, la música de consumo del pueblo dominicano. Te estoy enviando éstos textos para que los musicalices si te gustan, a ver que pasa”. Las letras y melodías correspondían a los merengues “Búscame Mi Ropa Que Me Voy”, “Charo”, “El Calor” y “Las Avispas” entre otros. Este sería el génesis del particular estilo de Wilfrido Vargas que desarrollaría desde su primer long play para Karen Records.