MARIKUGA ENTRE HISTORIA Y MEMORIA, Salustio Saldivia D.

Page 44

Imperial, Angol y Concepción. (Guarda, 1999, p. 60) Según consta en el primer leguario del Camino Real de 1647, Mariquina fue la última escala antes de Valdivia. (Guarda, 1999) La construcción de los Fuertes “Virgen de la Presentación de Nuestra Señora” y “San Luis de Alba de Cruces” La construcción de fortificaciones fue otra de las formas que adoptó la ocupación hispana del Valle de Mariquina durante el siglo XVII. En 1648, se funda el Fuerte de la “Virgen de la Presentación de Nuestra Señora”, que sería la primera instalación militar de los españoles en el Valle. Diversas son las razones que explican su construcción: Mariquina era la última escala antes de Valdivia, en el Camino Real que lo unía a Concepción, además, estas tierras eran el centro de un fértil Valle que permitía su fácil explotación por los naturales que, por esta razón lo habitaban con cierta densidad; por último, y según el cronista jesuita Diego de Rosales, el cacique de Mariquina Juan Manqueante, solicitó se construyera un fuerte para su protección contra los indios alzados, en un lugar llamado Tanacura, hasta donde podían llegar embarcaciones, a dos leguas de las casas del cacique. (Guarda, 1999) Sin embargo, la ubicación demasiado anegadiza del Fuerte de la “Virgen de la Presentación de Nuestra Señora”, determinó su traslado al puesto de Cruces en 1649. No obstante, al parecer no es abandonado del todo, pues el Fuerte es mencionado en 1655, año en que con ocasión del alzamiento general, es despoblado, pasando su guarnición a Cruces y de allí a Valdivia. En la primavera de 1649, tomando tal vez el Verano de 1650 se construye el Fuerte San Luis de Alba14, a orillas del Río Cuyinhue que es navegable por cualquier embarcación durante todo el año. Su emplazamiento convierte el Fuerte San Luis de Alba en la última posta del camino Concepción -Valdivia; desde la fortificación se toma la ruta fluvial, 14

40

de fácil tránsito y que ofrece seguridad a los viajeros. La insistencia en la instalación de una fortificación hispana en Mariquina, no sólo respondía a la necesidad de mantener la conectividad entre Valdivia y Concepción, además, el Valle ofrecía amplias praderas para alimento del ganado y fértiles tierras para la cosecha de maíz y cereales. Las misiones, la evangelización y su contribución a la expansión territorial hispana en el Valle de Mariquina Si bien la construcción de caminos y fortificaciones sirvieron para el control de los williches en el Valle de Mariquina, al mismo tiempo la instalación de las misiones tuvieron un rol trascendental en esta tarea por medio de la implantación de la religión. La actividad evangelizadora fue retomada inmediatamente con la repoblación de Valdivia. La tarea correspondió a los jesuitas. Saldivia (2010), plantea que a partir de mediados del siglo XVII la Iglesia Católica inicia un proceso de instalación. El Parlamento de Mariquina (1646), permitió a los jesuitas incursionar en el Valle desarrollando labores de evangelización, inclusive se llega a construir la primera capilla en el Valle de Mariquina. Con la construcción del Fuerte de la “Presentación de Nuestra Señora de Tanacura”, la actividad misional se incrementó, en especial, por el interés del cacique Manqueante, cuyo bautismo constituyó un poderoso incentivo para la conversión de los williches del Valle. Posteriormente, junto al Fuerte San Luis de Alba se instaló, en una fecha no precisada, la primera Residencia Misional de los Jesuitas, que estando a cargo de dos Padres, abarcó los territorios de mar a cordillera, desde el Río Valdivia hasta Toltén Bajo. Si bien, en 1683, la Residencia Jesuita de Cruces se traslada a Toltén Bajo, la tarea de evangelización en el Valle de Mariquina no cesó, asumiendo esta actividad los capellanes del Fuerte San Luis de Alba, apoyados por los jesuitas de Toltén Bajo. Con la fundación de establecimientos misionales

En 1658 la fortaleza era conocida como “Fuerte de San Luis de Alba de las Cruces”, sin embargo, hacia 1729 ya se le designa como “Castillo San Luis de Alba de Cruces”. Llama la atención en rango de Castillo que poseía la fortaleza, pese a la simplicidad y dimensiones de su estructura; las razones son su importancia estratégica y la conveniencia de lograr su mando por un Castellano. (Guarda, 1999)


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.
MARIKUGA ENTRE HISTORIA Y MEMORIA, Salustio Saldivia D. by María Isabel Aguilar - Issuu