PUNTO FINAL Un capitán muy gallo

Un capitán muy gallo Esfuerzo, pasión y entrenamiento duro.

Gil Alcalá nació en Tepatitlán, Jalisco. Desde pequeño le ha fascinado el fútbol y gracias a su esfuerzo y dedicación, así como al apoyo de su familia, con 28 años es el portero y capitán de Gallos Blancos de Querétaro. En su vida siempre ha tenido la cultura del deporte, gracias a ello está en donde está. En nuestra entrevista, Gil nos platicó de la importancia de no rendirse, del trabajo duro y de la dedicación: “Siempre hay que luchar por los sueños, porque en este deporte hay que hacer grandes sacrificios. Hay que luchar para conseguir lo que uno quiere. Todo el esfuerzo vale la pena cuando estás en la cancha jugando para un equipo”.

Uno de los sueños de Gil es poder jugar en canchas europeas, en equipos como el Arsenal o el Atlético de Bilbao. Quiere representar a su país en tierras extranjeras, pero sabe que eso se logra con trabajo y perseverancia. El atleta experimentado le debe todo a Gallos Blancos, el equipo que le ha dado la oportunidad de ponerse a prueba, de dar todo en la cancha, de obtener victorias y aprender de las derrotas. Gil siempre hace un espacio para pasar tiempo con sus fans, para dar un autógrafo o tomarse una foto.

Ya con ocho años viviendo en Querétaro (su nueva casa), Gil se siente queretano de corazón y está eternamente agradecido con la afición que lo recibió con los brazos abiertos. El entrenamiento duro, el esfuerzo y la pasión, que entrega en cada partido, es una forma de agradecerle a Querétaro todo lo que le ha dado. Gil disfruta de estar en casa con su esposa y sus perritas, compartir tiempo con ellas significa que ya dio el 100% en su entrenamiento y puede relejarse, ya que se encuentra en las mejores condiciones para jugar en los partidos.