El lazarillo según Tercero de ESO del Vandelvira

EL LAZARILLO SEGÚN TERCERO DE ESO IES ANDRÉS DE VANDELVIRA CURSO 2020-2021 Baeza, Jaén

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Joven mendigo o Niño espulgándose es una obra de Bartolomé Esteban Murillo fechada entre 1645-1650. Fuente 1

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INTRODUCCIÓN ¿Qué puedes encontrar en este libro digital? Ángeles camuflados, marajás indios, enfermos que superan sus dolencias, historias de amor, viajes a través del océano, resiliencia… Cientos de “amos” a los que han servido nuestros particulares lazarillos, salidos de la imaginación del alumnado de 3º ESO del IES Andrés de Vandelvira (Baeza, Jaén).

A partir de una tarea de preparación de la lectura del clásico (y posterior juicio teatralizado a Lázaro de Tormes por consentir “el caso”) cada uno de los alumnos y alumnas ha creado su propia versión del Lazarillo de Tormes, un clásico universal que supuso la primera novela realista moderna y nuestro libro de lectura del 2º trimestre.

Las consignas eran sencillas: continuar narrando en primera persona la historia a partir de las primeras oraciones del prólogo del libro, y terminar sus narraciones desde “la prosperidad y cumbre de toda buena fortuna”.

Lo que ahora puedes leer es la versión mejorada por el propio alumnado de sus narraciones. Los relatos que han sido enviados a tiempo están incluidos por orden alfabético, y solo han sido corregidos ortográficamente (en las ocasiones en que ha sido necesario). Hemos incluido las 4 estrellas con que la clase puntuó a las historias más llamativas, de manera que también reconocemos la labor de lectores críticos realizada en el aula.

Pronto comprobaremos si nuestras hipótesis (tan personales y esmeradas) se cumplen. Sea como sea, el alumnado ha practicado la narración activando la lectura de un libro fascinante, y por ello… ¡os felicito de corazón!

Y a ti, que lees estas líneas... ¡Esperamos que disfrutes!

María Antonia López Santos Profesora de lengua castellana y literatura IES Andrés de Vandelvira (Baeza, Jaén)

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¿¿QUÉ DICEN LAS PERSONAS QUE LOS HAN LEÍDO??

Autor-a del relato

Comentario de su fan anónimo/a ;) Muy buen contada y redactada

Bautista Jáuregui, Ailyn Alexandra 3º C

Pues que es muy creativa y me gusta la historia que cuenta y cómo la cuenta.

Su redacción es increíble, no me puedo creer como esta niña puede tener tanta imaginación. Me alegro de tener una amiga así.

Cabrera Sánchez, Laura Muy buena historia, no le fue mal a Lázaro con sus señores.

3º A

Me encantan los criterios que les diste a los cantantes Lo que más me ha gustado es la historia porque está muy bien redactada y con

Cahuchola Ríos, Raúl 3º

mucha imaginación

A

Me ha gustado mucho en general la redacción y todo bien detallado con buen vocabulario

Catena Cejudo, Alejandro 3º A

Es muy realista y original Esta muy bien y se nota que ha trabajado mucho en ella

Díaz Franco, Nuria, 3º A

La creatividad.

Me ha gustado que mezcle varias profesiones en un mismo texto Los consejos de los amos están muy bien.

Lo que me gusta de su redacción es que ha puesto personajes conocidos y la historia que tiene con ellos.

El nacimiento de Lázaro concuerda con las fechas en las que sirvió a sus amos

Díaz Franco, Antonio 3º (está bien escrito en cuanto a la época).

A

Me ha gustado y está muy entretenida. Además lo ha redactado muy bien.

Lo que más me ha gustado personalmente es que ha utiloizado personajes muy conocidos y me ha hecgo mucha ilusión leerlo ya que he recordado a Kobe o a Bad Bunny

Dragomirov Draganov, Víctor Simeón 3º A El Orche, Brahim, 3º C

Me encanta los amos que has cogido. El lazarillo es “un máquina” Expresa muy bien los sentimientos y lo que siente Lázaro en todo momento.

Me gusta como se desarrolla la historia Me gusta mucho cómo introduce y se dedica a hablar de las personas a las que sirve.

Flórez López, Gonzalo

Elabora muy bien los diferentes párrafos y cuándo cambia de amo

3º A

Me ha gustado los personajes que ha elegido como Emilio Butragueño y también Musk.

Me gusta cómo está estructurada la historia. Se parece a la del Lazarillo de

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verdad ya que se ve como de un niño que nace siendo pobre llega a vivir una vida de rico.

Gallego Garrido, Laura

Me ha encantado cómo describe los lugares donde está el personaje principal y

3º C

los detalles que da de la cultura egipcia Me ha gustado esa historia ya que es muy sentimental.

Gandía Moreno, Jaime

Sus personajes

3º A

Me gusta cómo desarrolla el texto, y cómo van transcurriendo las historias.

Me gusta mucho la historia que se relata.

Gandía Sánchez, Marina, 3º A García Garrido, Javier 3º B

Me ha gustado porque habla de la ciencia y es un tema muy interesante.

Me ha gustado mucho porque esta relacionada con la vida real

Garrido Medina, José 3º Su redacción me ha encantado porque está muy bien redactada y además he A

aprendido cosas de la Historia de España que desconocía.

Tiene buena imaginación y las referencias de la historia están muy bien

Guijosa López, Marcos 3º C

enlazadas con la época en la que se basa.

Me gusta la historia y se nota que se ha esforzado.

Historia interesante

Jiménez Raya, Marta María 3º A

Muy buena historia, y un bonito final

Jordán Garrido,

Es original

Santiago 3º A

Su historia es la más similar a su personaje

Kharbouch Ezziri, Sara 3º C

Es una historia muy creativa y se nota que la ha hecho con mucho interés, ojalá lea otro de ella.

El contenido es interesante

Martínez Romero, Juan

Las ideas son muy originales.

Luis 3º B

Es bastante original.

Méndez Murillo,

Es muy creativa y también realista

Nazaret 3º C

Interesante

Moreno Marín, Ángel, 3º C

Es divertido

¡SÉ TÚ QUIEN DECIDA CUÁL ES TU HISTORIA FAVORITA!

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ÍNDICE ALFABÉTICO DE AUTORES-AS Arcos Moreno, Rocío Bautista Jáuregui, Ailyn Alexandra Cabrera Sánchez, Laura Cahuchola Ríos, Raúl Catena Cejudo, Alejandro Ceacero Garrido, Francisco Jesús Cózar Juárez, Juan Díaz Franco, Antonio Díaz Franco, Nuria Dragomirov Draganov, Víctor Simeón El Orche, Brahim Flórez López, Gonzalo Gallego Garrido, Laura Gandía Moreno, Jaime Gandía Sánchez, Marina García Garrido, Javier García Gutiérrez, Adrián Garrido López, Miguel Garrido Marín, Ángel Garrido Medina, José Garrido Navarrete, David Guijosa López, Marcos Jiménez Raya, Marta María Jordán Garrido, Santiago Kharbouch Ezziri, Sara Martínez Romero, Juan Luis Méndez Murillo, Nazaret Molino Ruiz, José Antonio Moreno Marín, Ángel

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3º A 3º C **** 3º A **** 3º A 3º A 3º A 3º B 3º A **** 3º A **** 3º A 3º C 3º A **** 3º C 3º A **** 3º A **** 3º B 3º B 3º A 3º B 3º A 3º C **** 3º C **** 3º A 3º A 3º C **** 3º B 3º C 3º C 3º B

Sueño de un pequeño artista: El lazarillo según Rocío Arcos Moreno Pues Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue algo de esperanza en una familia humilde donde sólo parían mujeres, así que la venida de un varón en primer lugar mantenía el linaje y, más adelante, a la familia.

A lo largo de mi vida he servido a varios señores, fueron largos y duros años, siendo niño mi padre me pone en manos de un artista para convertirme en su ayudante, voy creciendo en la casa de mi señor D. Diego Rodríguez de Silva y Velázquez en la andaluza ciudad de Sevilla, ciudad que me vio desarrollarme como persona.

Cuando se traslada a Madrid sigo a su servicio hasta el nacimiento de su segunda hija, cuando recibo noticia de mi familia por la que tengo que volver a Sevilla. Una enfermedad larga y sin tregua se lleva la vida de mi padre. Por ello, tomó las riendas de las cargas familiares, tomó contacto con señores de la zona que buscan a alguien que sepa moverse en el círculo de las artes.

De ahí que conozca a D. Juan Martínez Montañez, con mi señor abriéndose paso dentro de la nobleza y tomando contacto con la iglesia, logró hacerse nombre como buen escultor. Mi señor me convierte en enlace para poder ayudarle tanto en los talleres como en la corte. Era como la sombra, como el oído, que se escondía detrás de los muros. Muros fríos y que escondían tantas y tantas cosas…

Con los años fui tomando contacto con otros ilustres que necesitaban a alguien que supiese de todo y como buen andaluz que tuvo que aprender a leer y a manejarse de la nada, contacté con el señor D. Ortiz de Zúñiga. Mi señor se manejaba entre libros, eso que a mí me faltó para ser alguien.

Aprendí tanto a su lado, era como siempre la manos que llevaban y traían, el que entraba y salía de las grandes casas, palacios y templos. Cuánto he visto en mi vida, pero nada he disfrutado, pues vine para mantener un linaje y conmigo se ha acabado. Mi vida siempre ha sido estar pendiente de mi señor, vida entre corteses y artistas y no darme cuenta de que era un simple siervo, que lo único que hice fue trabajar y ganar sabiduría. Hoy soy feliz aunque solo y sin más familia que los hijos de mis hermanas, a los que adoro, y les he guiado, para que tengan mejor vida, vida que a mí se me ha pasado tan rápido que lo único que echo de menos es volver a jugar en los charcos.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y la cumbre de toda buena fortuna.

Arcos Moreno, Rocío 3º A

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Diego Velázquez : pintando el cuadro “Las Meninas” en el año 1656. Fuente.

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Sueño de un gran luchador : El lazarillo según Laura Cabrera Sánchez Pues Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue muy complicado, nací en plena calle. Como no contábamos con ningún recurso, al poco tiempo mi madre murió. Al rato, una muchacha joven, de unos 20 años, me cogió y me llevó hasta su casa, donde sus padres me acogieron y me cuidaron hasta mi mayoría de edad, ya que una bomba estalló cerca y ellos tres murieron.

A lo largo de mi vida he servido a señores como Franco, a quien no volvería a servir nunca, ya que me obligaba a todo, y era, bajo mi punto de vista, un hombre demasiado estricto. Él, al ver que yo no estaba por la labor de ayudarle y servirle decidió echarme.

Días después de esto, vi que pasaba mucha gente por la calle, una cosa extraña por aquellos entonces, ya que todo el mundo solía estar en sus casas. Al poco rato, distinguí entre toda la multitud una figura robusta a la que le guardaban admiración, Bob Marley. Este, al verme sintió que me necesitaba y me pidió que si quería servirle, yo acepté y pensé que era un hombre muy afortunado de tener a Marley como mi señor.

Lo acompañaba a todo tipo de giras, ya se organizaran dentro o fuera del país, viajaba junto a él y le ayudaba a componer sus canciones, una de las más famosas, la compuse junto a él, los dos juntos. A este señor lo he ayudado en todo lo que he podido y lo he acompañado hasta el final de su vida. Perderlo fue una tristeza enorme, porque cantaba muy bien y era un excelente amigo. Lo llevaré siempre en mi corazón.

Años después de la muerte de Marley pasó por allí el que sería el último señor al que serviría, Michael Jackson. Iba a dar un concierto en la zona, al acercarme le pregunté que si le podía servir y le prometí todo, ya que yo necesitaba servir a algún señor para ganar algo de dinero y poder, por lo menos, comer y no morir de hambre. Él aceptó porque me necesitaba urgentemente. A diferencia de Bob Marley, este señor tenía mucho más carácter, pero también era muy buen Volver al índice

amigo. Michael era una increíble persona y muy generoso, también cantaba de maravilla. Al cabo de un tiempo la vida se lo llevó a un lugar mejor, supuestamente.

Después de su muerte, toda su familia estuvo de acuerdo en darme una parte de la herencia por haber servido a Michael, aunque no por mucho tiempo. Ya sí, acabé de servir a señores ya que tenía el dinero suficiente para poder vivir, gracias a la herencia de Michael.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna. Mi vida ha sido muy complicada, sí, ya que solo pude contar con mi madre, a la que vi apenas unos segundos, y con aquella chica y sus padres hasta mis 18 años. Ahora soy más feliz que nunca, como se dice: “Primero deberíamos ser mayores y luego niños”.

Cabrera Sánchez, Laura.

3º A https://www.hola.com/biografias/michael-jackson

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El sueño de un trabajador Al lazarillo según Raúl Cahuchola Rios.

Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relato mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue muy esperado en la ciudad, ya que mis padres buscaban descendencia desde hacía un largo tiempo. Tuve una infancia muy feliz, pero mi adolescencia se vio truncada por la muerte de mi madre, por ello, mi vida cambió rotundamente.

A lo largo de mi vida he servido a señores como a un hortelano de avanzada edad, al que le costaba mucho recolectar las verduras y hortalizas de su enorme huerto.Este me hacía trabajar sin descanso día tras día, por lo cual decidí abandonarlo.

Sin embargo, no tardé en encontrar un nuevo señor, este era un capitán de caballería, con el que trabajaba en las cuadras limpiandolas y aseando a los caballos. Aunque este trabajo no me resultaba muy duro decidí dejarlo, ya que no tenía un sueldo que me permitiese vivir dignamente y con una buena calidad de vida.

Por lo tanto decidí de nuevo buscar otro trabajo, aunque no fue una tarea fácil.

Con el paso del tiempo encontré a un señor arquitecto que necesitaba un sirviente, para atender su casa y cuidar los jardines de su enorme mansión, ya que su mujer se encontraba enferma, así que no podían realizar todas las tareas, meses después nos fuimos conociendo y entablando una buena amistad, con la que cogimos muy buena confianza.

Un día me pregunto qué por qué no me proponía volver a estudiar, ya que de eso dependía mi futuro. Yo me planteé esa pregunta durante mucho tiempo, y al final decidí hacerle caso y ponerme a estudiar de nuevo.

En fin, ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna, al haber realizado esos estudios y pelear por un puesto de trabajo que me diera calidad de vida.

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Raúl Cahuchola Rios, 3ªA

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https://pxhere.com/es/photo/702228

Lazarillo realizado por Alejandro Catena Cejudo Pues vuestra merced me ruega que relate y escriba mi caso por extenso me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue el día 6 de noviembre del 1973 en Holanda lugar donde me crie durante mi infancia. A los 15 mis padres me dejaron abandonado ya que mi padre tuvo que irse a trabajar fuera y mi madre me dejó en una iglesia para que los curas y los feligreses me cuidaran. Mis primeros amos fueron unos curas que estaban de prácticas pero no me cuidaban mucho ya que tenían mucho lío en la iglesia y con sus estudios. Al no alimentarme bien, yo siempre pensaba en comer y comer y al no comer hacía muchas trastadas y le quitaba la comida a mis amos. Lo estuve haciendo durante mucho tiempo, tanto con pan, vino, fruta, etc.

Mis amos, al darse cuenta, me golpearon durante unos 15 minutos. El clero, al enterarse de esta infracción a la santa madre iglesia, los echaron y a mí me destinaron a otra iglesia en la que mi amo por suerte era un arzobispo muy rico y muy bueno. Él sí me alimentaba muy bien y me cuidaba mucho pero al poco tiempo de estar con él, se murió y yo me quedé solo durante varios meses. Un día por la mañana dando un paseo y al acecho de un poco de comida (ya que aquella noche no había podido comer ni beber) me encontré a mi padre vendiendo patatas fritas en la puerta de una vieja casa en la que residía. Él vendía fruta y verdura, yo fui corriendo muy rápido hacia él y le di un gran abrazo pero de primeras no me reconoció ya que cuando me abandonó era muy pequeño. Él me acogió en su casa durante bastante tiempo hasta que yo me buscase un amo nuevo. Por suerte él también me trataba bien aunque a veces pasábamos algo de necesidad pero era normal ya que mi padre era una persona bastante humilde y buena. Una tarde un hombre se presentó en mi casa diciendo que se había enterado de que yo buscaba un nuevo amo. Aquel hombre parecía un poco oscuro pero a la vez se le veía con cara de ser buena persona, al principio, al llegar a su casa me sorprendí ya que era una casa demasiada vieja pero bastante grande. El hombre se llamaba Andrés y era un humilde maestro de escuela que se encontraba a las afueras del poblado no cobraba mucho pero lo que lo que cobraba lo aprovechaba para mantenernos. El hombre al poco de acogerme en su humilde hogar encontró pareja una tal Nuria muy guapa y resultó ser mi madre. Cuando la vi se me saltaron las lágrimas, ella se echó a llorar y nos fundimos en un largo abrazo. Al saber que era mi madre estuve con esta familia durante muchos años pero un día la desgracia llegó a mi casa, me enteré de que mi padre tenía cáncer y le quedaba unos cinco meses de vida. Mi madre aún no lo sabía pero mi amo me dijo que no que dijese nada a mi madre que ya se lo diría él. Mi madre al enterarse se echó a llorar, a los cinco meses murió y he estado viviendo con mi madre guardando el luto a mi antiguo amo hasta que se reencontró con mi padre y se volvieron a casar y esta ha sido mi vida, un trajín de ir de casa en casa y trabajar muy duro para sobrevivir, pero ahora estoy en mi prosperidad y cumbre de toda buena fortuna.

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Pequeñas pero grandes recompensas: El lazarillo según Antonio Diaz Franco Pues Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona (…)

Mi nacimiento fue el 20 de enero de 1978 en una pequeña ciudad de Francia llamada Trappers. Fue el día que empezó mi vida, todo salió bien y dentro de lo normal. Mi infancia durante unos años fue la que todo niño esperaba, pero más tarde algo terrible sucedió. Mis padres fallecieron en un accidente de coche. En ese momento todo el mundo se preocupaba por mí ya que querían que tuviera un futuro digno. El orfanato me esperaba (…)

A lo largo de mi vida he servido a señores como uno de los mejores jugadores de baloncesto, Kobe Bryant. Le hacían llamar la Mamba Negra ya que trascendió como leyenda en la NBA bajo dicho apodo, con el cual se buscaba hacerle honor a sus capacidades dentro de la cancha. Era muy querido entre sus fans, Kobe fue una gran persona, fuerte y amigable. Murió en un accidente de helicóptero, cuando se dirigía a ver jugar a su hija. Ese día tuve la suerte de no estar con él. Me contó los mejores consejos para jugar dentro de la cancha que nadie más sabía.

Más adelante serví a Will Smith uno de los mejores actores de cine. Era una persona graciosa, sociable y admiraba por muchas personas. Participó en grandes películas como Bad Boys for Life o Soy Leyenda entre otras más. Siempre me decía que empezará a rodar películas porque era lo mejor que le había pasado. El cine fue su mayor experiencia.

Por último, serví a Bad Bunny, el mejor cantante de reggateon. Una de sus cualidades era la gran personalidad que tenía y lo seguro que era de sí mismo, eso le hacía diferente de los demás cantantes. Tuvo grandes éxitos gracias a canciones como Amorfoda entre otras. Me enseñó el mundo de la música y que todo lo que se propuso lo consiguió. Esa fue una de sus grandes metas.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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KOBE BRYANT, un ejemplo a seguir. https://cdn.pixabay.com/photo/2020/06/06/04/08/cartoon-5265163_960_720.jpg

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LA MALDICIÓN QUE ME SALVÓ: El lazarillo según Nuria Diaz Franco Pues Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona (…)

Mi nacimiento fue en Estados Unidos, el 2 de marzo de 1967. Fue demasiado rápido y difícil, ocurrió algo que ninguno esperábamos: mi madre se quedó ciega al darme a luz. No fue fácil superar aquel lamentable día, pues cada vez empeoraba más. 6 años después ella falleció, tristes nos fuimos a dormir y al día siguiente mi padre se quedó ciego también. Acudimos al hospital y lo atendieron rápidamente. Estuve 1 año esperando y el día de mi cumpleaños me anunciaron la muerte de mi padre. Mi infancia fue una maldición, es lo que todo el mundo piensa. No obstante, siempre me pregunto el por qué no me ha ocurrido lo mismo, nunca lo entenderé. En suma, me vi obligado a ponerme a trabajar.

Así, a lo largo de mi vida he servido a señores como el mejor violinista de aquellos tiempos. El me guió con la música y me enseñó lo importante que era para él.

Siempre me decía que las melodías que él tocaba, harían que superara mi pasado.

Fue una persona decidida y tenía claro que debía seguir sus sueños. Antes de marcharse me dijo: “Recuerda, el pasado siempre será pasado, céntrate en el presente y no en la maldición que nubló tu futuro”.

Meses después, me tocó servir a un psicólogo. Él era un hombre muy inteligente y ordenado, siempre tenía las ideas claras y no le gustaba que le interrumpieran mientras estaba hablando. Yo siempre decía que todo lo que argumentaba era la realidad de cada persona que trataba. Al despedirme de él, me dijo una frase que me marcó por muchos años: “Mi trabajo no es escuchar los problemas de los demás, sino que me fijo en los ojos, sí, en sus ojos y me doy cuenta de que me transmite más que mil palabras”.

Después de un tiempo, serví a una gran deportista. Ella era una persona extrovertida, hacía todo tipo de deportes y tenía un gran futuro por delante. Me ha ayudado a mejorar mi físico y sobre todo mi salud mental. Siempre le decía que era una persona que todo lo que se proponía lo conseguía. No tenía temor a nada, eso lo hacía ser valiente y capaz de enfrentarse a su futuro, qué era lo que se proponía.

Al finalizar mi servicio, se despidió y me dijo en el oído: “Confía en quién eres y en quién debes ser, pues algún día te toparás con dos caminos y yo ya no estaré”.

He aprendido de los consejos de aquellas personas. Ahora puedo decir que soy feliz y que lo he superado. No ha sido fácil, pero he logrado pensar en mi futuro y ciertamente en mi vida, pues como yo siempre digo: “Las personas más importantes

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no se buscan, la vida te las presenta”. En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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http://institutviladomat.cat/portfoli/16rocioterradez/wp-content/uploads/sites/127/2018/12/Lazarillo-deTormes-13-973x549.jpg

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UNA COMPLICADA BUENA SUERTE El lazarillo según Francisco Ceacero Garrido Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona y quede constancia de que yo ,ahora y siempre ,insisto e insistiré con esta historia de mi vida y las dificultades que hubo.

Ahora seguiré con la historia: Mi nacimiento fue en 1964, un nacimiento difícil ya que mi madre murió tras el parto por una mala intervención médica,y mi padre tuvo que hacerse cargo de mí.

A los meses se empezó a notar la falta de dinero ya que yo acaparaba tiempo y dinero y finalmente cuando tenía dos años mi padre decidió dejarme en un orfanato y acabé con ocho años de sirviente en casas de señores y gente de mucha importancia.

A lo largo de mi vida he servido a señores como Franco después al rey Juan Carlos y un tiempo a Felipe sexto. Finalmente acabé sirviendo a un torero importante cuyo nombre me prometí no repetir.

No lo repetiré ya que me resulta doloroso volver a recordar la imagen de como lo encontré aquel día, muerto y por culpa solo mía. Esto ya es otra historia así que seguiré con mi narración .

Después de toda experiencia en mis tres últimos años como servidor ,antes de que pasara lo que pasara lo que pasó , estuve sirviendo a un hombre mudo que vivía en una triste y deteriorada casa a las afueras de valencia, donde recibí la mejor noticia de mi vida.

Después de 2 años y medio sirviendo allí él me pagaba con lo poco que tenía y hacía de todo; planchar ,lavar,cocinar…

A los meses de estos dos años y medio murió y a los dos días del entierro me llamó un notario explicándome que mi señor había dejado parte de su herencia en mi nombre. Cuando fuí,esperaba no recibir nada del otro mundo pero el notario me informó de que me había dejado la cifra de 8.463.898 euros ,numerosas fincas de olivos y diversas propiedades: pisos,casas y talleres.

En fin ,que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna agradecido de por vida a mi ultimo señor y del que agradecido de por siempre seguiré estando. Nunca olvidaré el día que me llamaron para allí servir.

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Juan Cózar "El Lazarillo según Juan C J” Pues Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue en Roma, porque era hijo del emperador César Augusto, pero hubo un problema, que yo nací con cáncer. Desde muy pequeño los mejores médicos de Roma buscaron una solución, pero no la encontraron. Entonces mi padre optó por darme a un hombre ciego porque se avergonzaba de tener un hijo enfermo en su castillo.

Este hombre tenía desconfianza de mí y entonces me regañaba y no me dejaba comer, por eso era cruel y malvado conmigo. Pero gracias a ello aprendí a ser astuto, tramposo y engañar a las personas a beneficio mío.

Mi enfermedad seguía avanzando cada día más deprisa y me iba encontrando cada día más débil, pálido. Las palizas del ciego no las podía soportar más, así que decidí escaparme, refugiarme en una iglesia. Allí un clérigo me recogió y me adoptó como si fuera suyo. Me convirtió en monaguillo para sus misas.

Ahora me encuentro más contento, creo que mi suerte va a cambiar porque el clérigo se ve mejor persona que el ciego, seguro que no me pegará y compartirá su comida conmigo, pensé. El clérigo me buscó un médico que iba a estudiar mi enfermedad para curarme. Pero no es oro todo lo que reluce, iban pasando los días, las semanas, los meses e iba viendo cómo el clérigo no era tan distinto al ciego, no me pegaba, pero si buscaba su propio interés, de lo de pasar hambre ni os cuento...El caso es que me vendió al médico, el cual me llevó a Florencia. Allí había más medios, tenía más recursos para curarme del cáncer, que seguía sin detenerse. Así que marché a Florencia con el doctor Braulio, por fin estaba en buenas manos. Pero lo cierto, una vez más, estaba equivocado, este buen doctor le importaba muy poco mi enfermedad o que me curara o no. El doctor sólo quería enriquecerse con el estudio hecho sobre el cáncer.

Me estaba muriendo porque el cáncer estaba yendo demasiado deprisa, pero el doctor no me lo quiso decir. Me estaba quedando debilitado, no tenía ganas de nada. De todo aquello me enteré, gracias a un fraile que estaba en el hospital de Florencia, como enfermero cuidando de los enfermos. El fraile me contó que estaban esperando mi muerte para coger mis órganos para donarlos.

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No quería estar más en ese sitio, así que, junto con el fraile, pensamos un plan para escapar de allí. El fraile me preguntó que cuál era mi sueño. París (Francia) contesté.

Durante semanas estuvimos ideando distintas formas de huir y de conseguir dinero para escapar de allí. El fraile tenía unos ahorros y estaba dispuesto a viajar conmigo a París.

Pero... ¿cómo haríamos para abandonar el hospital sin que el doctor se diese cuenta?

El momento mejor era la noche porque es cuando el doctor está descansando, así que me cambié por mi almohada, salí corriendo en la noche dejando para siempre aquel horrible lugar acompañado de mi amigo el fraile.

Pasados unos días, llegamos a París me sentía sin fuerzas, paseamos por sus calles en busca del capellán de la iglesia de Notre Dame, que era nuestro contacto en París y nos iba a ayudar a curarme. No me quedaba mucho tiempo, había que actuar rápido.

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El capellán pertenecía a la nobleza y tenía muchos contactos con médicos muy buenos. Estaba interesado en curarme y lo hizo.

El médico, amigo del capellán, me devolvió la vida, con el paso de los días me encontraba mejor, con ganas de vivir la vida. Fue un auténtico milagro.

Al final me quedé a vivir en París con el fraile y el capellán.

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UNA LARGA VIDA DE FORTUNA El Lazarillo según Víctor Simeón Dragomirov Draganov

Pues Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue como cualquier otro, todo muy normal, los hospitales un poco saturados por aquel entonces. Había sido una época de flores de color de rosa, ya que mi nacimiento fue muy esperado. Sin embargo, cuando llegué a los 16 años, mis padres me abandonaron y tuve que buscar un trabajo para poder vivir.

A lo largo de mi vida he servido a señores como el pintor Pablo Picasso. Por aquel entonces, él era un pintor muy famoso en España, así que en cierto modo, tuve suerte, ya que él tenía muchos lujos, una mansión, mucha comida,... Fueron nada más que cinco años, y se acabó porque murió en Mougins, Francia. Él era un hombre que viajaba mucho y por eso conocí tantos sitios, países por Europa, conocí a mucha gente,... Pero cuando murió todo se vino abajo y tuve que encontrar a otra persona para servirla y, mientras, trabajaba en servicios comunitarios.

Por aquel entonces, gracias a Pablo Picasso, conocí a Salvador Dalí. Era un hombre bueno hasta que descubrí cómo era por dentro. Me acuerdo de que él necesitaba a un hombre, para que lo ayudase a cualquier cosa, y ahí entré yo. Todo fue medio bien porque yo ya lo conocía aunque fueron unos años bastante duros.

Dalí me exigía mucho y no cada cosa que me decía iba a ser más fácil. Aún así, yo vivía sin problemas sociales, sin nada que me faltase y así me tiré durante diez años. Dejé de servirle porque ya se pasó muchísimo conmigo y además me despidió por otro hombre, que parecía un señor apañado, pero no. Estaba hecho un señor muy desorganizado y al final lo despidió, se arrepintió, y además me estuvo buscando durante dos años. Por cualquier sitio me buscó, hasta en el mismo rincón de la ciudad.

Pero lo que no sabía es que yo ya me había marchado a otra ciudad, a mi ciudad natal. Y es que ahí ya encontré a otros amos para servirles, que eran muy especiales para mí ¡Eran mis queridos padres! Llevaba mucho tiempo sin verlos, desde que me abandonaron. Ellos ya tenían una cierta edad, unos setenta y cinco años y ya no podían hacer casi nada. Así que aproveché e hice esto durante diez años. Eran ya unos señores muy mayores y ya no aguantaban nada más

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Al cabo de esto, llegó el día en el que se murieron, ambos el mismo día. No me acuerdo de qué se murieron, pero fue un día terrorífico. Era un día nublado, que parecía que iba a llover, la gente no salía a la calle, en fin un día triste. Lo bueno de todo esto es que heredé todas sus riquezas, sus casas,...

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna. .

Dragomirov Draganov Víctor Simeón, 3ºA https://wikiart.org

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EL SUEÑO DE UN EMIGRANTE: El lazarillo según Gonzalo Flórez López Pues Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue el 12 de julio de 1968, en Baeza, provincia de Jaén. Como mi familia era muy pobre y no teníamos casi ni para comer, no pude ir al colegio, por lo que a la edad de 14 años entré a servir a casa de José García, un agricultor que tenía muchos olivos y que necesitaba un criado para ayudar en las tareas del hogar a su mujer, que era ciega. José, aunque me daba de comer, era muy bruto y no me trataba demasiado bien, incluso algunas veces me pegaba cuando no hacía las cosas exactamente como él quería.

Un día, yendo de paseo con mi amo y su mujer, un forastero que había venido de turismo a Baeza, vio cómo mi amo me golpeaba. Este hombre para mí entonces desconocido, se enfrentó a mi amo y me dijo que no me preocupara y que me fuera con él a Madrid para servirle. Me fui a la capital de España con él y resultó que este hombre era Don Emilio Butrageño, un famoso jugador de fútbol del Real Madrid. Allí en Madrid pasé varios años en su casa cuidando de sus hijos que llegaron a quererme mucho. Era tal el aprecio que me tenían, que iba de vacaciones con ellos.

En un viaje a Estados Unidos con toda la familia, fue tanta la impresión que me causó ese país, que le dije a Don Emilio que quería quedarme allí y él, con mucha pena lo aceptó.

Como tenía que buscarme la vida, fui a California y me presenté en casa de Elon Musk, un famoso inventor y empresario, duelo de la empresa Tesla, a pedir trabajo. Dio la casualidad de que el señor Musk era muy aficionado al fútbol y cuando le dije que había estado viviendo en casa de Emilio Butrageño me contrató inmediatamente como su ayudante personal. Como soy una persona muy servicial y eficiente, el señor Musk me aprecia mucho y me ha regalado un vehículo Tesla último modelo y un apartamento en San Francisco, donde actualmente vivo muy feliz.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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Gonzalo Flórez López 3ºA https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Emilio_Butrague%C3%B1o,_Institutional_R elations_Director,_Real_Madrid_C.F._(16978671940).jpg

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El Lazarillo según Laura Gallego Pues vuestra Merced me ruega que le escriba mi relato por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue un 15 de enero en Egipto, fui el tercer hijo que esperaban mis padres, pero por mi desgracia estos eran fugitivos buscados y perseguidos por todo el pueblo egipcio. Apenas tengo recuerdo de ellos, al pensar en ellos solo recuerdo como una mañana de julio, dos soldados mandados por el rey irrumpieron en la casa llevándose a mis padres delante de mí y de mis hermanos, diciendo estos soldados que se verían pronto con Anubis.

Después de unas horas de lo que había ocurrido, entró una mujer a la casa preguntando por mí y por mis hermanos, nos dijeron que nos separarían y nos llevarían a nuevas familias o con gente que nos quisiera.

Por eso, a lo largo de mi vida he servido a señores como a un famoso arquitecto que fue quien me acogió en su casa y me trató como a su hijo pero con la condición de que tendría que ayudarle a los trabajos que le fueran encargado. Los primeros días fueron especialmente fáciles pero los siguientes que me esperaban fueron duros y agobiantes, debido a la carga de trabajo que había. Aparte, se decía que pronto una desgracia le pasaría a alguien tuviera la riqueza, esto me sonaba un poco a mentira pero se hizo realidad: al día siguiente, cuando me levanté, el estudio estaba destrozado y mi señor no estaba. Salí a la calle buscando ayuda pero nadie me ayudaba, anduve un rato y llegué a una casa con una peculiar dueña.

Esta señora se llamaba Salan y era una fanática de los gatos, pero su preferido era uno llamado Catar, un gato grande y con un pelaje parecido al oro, Y ella me contó que ese arquitecto tenía las horas contadas ya que antiguamente era un esclavo que escapó de la miseria, pero suplantó otra vida y se cambió de nombre y de forma de se. Me dijo que me podía quedar unas semanas con ella, si le ayudaba a cuidar a Catar y a los otros gatos a cambio me daría comida y un sitio donde dormir para no vagar por las calles como vagabundo.

Los días fueron pasando y poco tenía que hacer, de vez en cuando alimentaba a los gatos y jugaba con ellos,pero en unas tardes cuando me tocaba encargarme de los caprichos de Catar me di cuenta de que dicho animal se sentía mal pues no movía la cola como lo hacía antes.

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UN HUÉRFANO EN LA ALEMANIA NAZI: El Lazarillo según Jaime Gandía Moreno Pues Vuestra Merced me ruega que se escriba y relate mi caso por extenso, me pareció bien empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona y mi historia durante mi estancia en este planeta.

Mi nacimiento fue en 1925 en Berlín, Alemania. Al nacer, por lo que sé, mi madre murió en el parto quedándose mi cargo mi padre. Él me cuidó durante un tiempo, pero me tuvo que dejar en un orfanato a mis tres años de edad debido a la situación económica en la que se encontraba. Fui creciendo en este lugar en el que no me trataban muy bien. ¿Qué hacía en este agujero? Pues sobre todo cumplir órdenes, cosa a la que me acostumbré y me acabé dedicando en el futuro. Trataba de hacer amigos y conocer sus historias de cómo habían llegado a este lugar. De hecho, hice unos cuantos de los cuales le cogí aprecio a un niño de pelo rubio que nada más que con enseñar su sonrisa daba paz a cualquier persona. Se llamaba Derek y trabé una muy buena amistad con él convirtiéndose en mi mejor amigo. Los años fueron pasando y cuando cumplí los 16 años me trasladaron de lugar.

A lo largo de mi vida he servido a señores como, por ejemplo, Adolf Hitler, al cual serví sobre el año 1941. Había salido de aquel orfanato con la esperanza de dar a parar a algún lugar mejor, cosa que no pasó. Me trasladaron a una mansión a las afueras de Alemania que se encontraba al lado de un recinto amplio y extraño en el que se encontraban muchas personas. Me encargaron hacer las tareas del hogar en aquella casa llena de lujos, a lo que yo no opuse queja ninguna debido a la inquietud que me daba ese lugar. Todo parecía normal hasta que un día vi entrar por la puerta al que era en ese momento dictador de Alemania. Me quedé con la boca abierta, no tenía ni idea de que era una de las tantas casas que tenía. Un día, mientras limpiaba y pensaba si iba a vivir allí por el resto de mi vida, entró un militar de unos 18 años cuya cara me sonaba. Él se me acercó con entusiasmo y me dijo que si me acordaba de él. Pronto caí en que era Derek; llevaba sin verlo al menos 6 años, desde que lo sacaron del orfanato. Estuve hablando con él y me dijo que me podía sacar de allí con un poco de suerte. A los pocos días vino una persona a hablarme de que mi trabajo allí había terminado. Se lo agradecí eternamente a mi amigo él me comentó que sin trabajo iba a tener problemas fuera, así que me recomendó que fuera a una casa que se encontraba en medio de un bosque famoso del país, en la que podría apañármelas. Sin más remedio le hice caso y decidí ir a ese lugar.

Tenía 19 años por aquel entonces y todavía no había pasado nada bueno en mi vida. Esto cambió cuando llegué a esta casa en la que me recibió una anciana bastante agradable que me comentó que podía trabajar para ella ayudándola en la casa. Yo, sin más remedio, acepté, ya que en un lugar mejor no iba a estar. Allí, ya estaba trabajando una bella mujer de 20 años llamada Alice. A medida que la conocía y trabajaba con ella me iba enamorando más y más. Ella también se acabó enamorando de mí y empezamos a estar cada vez más juntos. Todo iba bien hasta que un día la anciana murió debido a su larga edad. Nos sentimos apenados y tuvimos que irnos a otro lugar. El problema era que no teníamos apenas dinero así que decidimos buscar algún lugar donde trabajar juntos como habíamos estado haciendo anteriormente.

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Tras un tiempo buscando encontramos otra gran casa en Berlín en la que nos ofreció trabajo una familia rica. Ocultamos nuestra relación por si pudiera afectar a nuestro nuevo trabajo. Durante 5 años estuvimos sirviendo a esta familia y recaudando dinero para futuros planes al mismo tiempo. También nos hicimos amigos de los niños que vivían allí y empezamos a plantearnos formar una familia separados del resto de personas. A los 6 años de estar trabajando para esta familia, decidimos comprar la casa en la que nos conocimos.

En fin, ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna. Alice y yo tuvimos dos hermosas niñas y vivimos en paz y armonía en mitad de este bello bosque en el que somos felices.

ALEMANIA NAZI Fuente: https://pixabay.com/es/images/search/alemania%20nazi/

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LA ESENCIA DE LA CREATIVIDAD DE LA CIENCIA EL LAZARILLO SEGÚN MARINA GANDÍA SÁNCHEZ Pues vuestra merced me ruega que le cuente mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue precioso, aunque un poco triste. Ese día mi madre estaba muy enferma, era todo una exageración, ella en el parto tuvo que estar con una mascarilla, aunque creáis que no, es un agobio. Cuándo nací y fui creciendo no entendía porque tenía que llevar la coma pero no solo era ella la llevaba, sino todo el mundo, y esto es porque había un virus contagioso en todos los países del mundo. Todos los hospitales del pueblo estaban llenos de gente contagiada del virus y, aparte, también había gente que estaba ingresada por otro motivo, y estaban en riesgo de contagiarse. Cuando fui creciendo me interesé por la ciencia y por eso quise estudiarlo.

A lo largo de mi vida he servido a señores como el señor William Osler. Él era el médico más famoso por el público, era canadiense y fue el médico que investigó el caso del coronavirus, este es el nombre del virus punto a mí siempre me ha gustado el mundo de la medicina pero nunca se me había dado bien aunque tuve la posibilidad de conocerlo en una de las excursiones que hice en mi curso de medicina. Cuando fui, me agrado mucho, dijeron que las personas con mejores calificaciones, serían los que irían al laboratorio del señor William Osler en Canadá.

Todos estábamos muy nerviosos aunque solo algunos pudimos ir. Cuando estuve allí yo solo pensaba en conocer al doctor y me sorprendí al ver que también estaban dos grandes científicos: Albert Einstein y Marie Curie, en aquel momento solo conocía al físico Albert Einstein y al señor William Osler, a Marie Curie no la conocía mucho. Si es verdad que tenía algunos conocimientos sobre ella, como que era pionera de la radioactividad y cuando tuve el placer de conocerla me fui interesando más por ella, por sus opiniones, sus gustos ya que eran parecidos a los que a mí me gustaba dedicarme en el futuro y por sus experiencias por el trabajo.

Allí en el laboratorio nos enseñaron las muestras de la vacuna para combatir ese virus, al ver que un frasco tan pequeño podría cambiar la vida de tantas personas realmente se me pusieron los pelos de punta. Desde ese momento mis ganas de seguir estudiando medicina aumentaron. Mi vida dio un giro cuando Marie Curie me propuso trabajar con ella en un nuevo proyecto que podría cambiar la historia de la química. Después de un largo período de tiempo el invento que cambió mi vida solo era el principio de un sueño que poco a poco se hacía realidad.

Uno de los inventos que más me marcó, gracias a todas las mujeres que ayude, fue el antídoto a la cura del cáncer de mama o también llamado carcinoma. Todo empezó en un pequeño laboratorio de Washington. Eran altas horas de la noche y

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mi apetito ganó mi cansancio así que decidí comer algo. En la radio anunciaban noticias de todos los días; accidentes, catástrofes naturales y pobreza. Decidí no darle importancia, hasta que anunciaron en las noticias. Una mujer de 28 años moría a consecuencia de un cáncer, específicamente el de mamá. Desde allí supe que mi próximo proyecto sería por y para ella. Después de largos meses trabajando junto a mi equipo llegó el momento de saber si todo ese tiempo había merecido la pena. Helen Brown, diagnosticada con cáncer de mama 2 meses atrás fue la primera voluntaria para el tratamiento a la posible cura de la enfermedad. Todo fue un éxito y al igual que Helen salvamos a miles de mujeres con esta terrible enfermedad.

En fin, ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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Javier - EL LAZARILLO SEGÚN JAVIER Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona, tal y como soy.

Mi nacimiento fue en Córdoba (ESPAÑA).

El parto fue perfectamente, cuando nací lo primero que hice fue mirar para todos lados. Nací con el pelo negro y rizado. Toda mi familia estaba loca por verme. Tenía y tengo unos padres perfectos, adoro a mis abuelos y a mi hermano. Cuando yo tenía 7 años, iba a tener un hermanito. Mi hermano Antonio y yo estábamos deseando que naciera mi hermanito. Yo tenía mucha ilusión de tener otro hermano.

El 12 de agosto, mi hermano nació. Le pusieron de nombre Alejandro. Era rubio y se parecía mucho a mí, tenemos los mismos lunares. Yo seguía creciendo hasta que, cuando tenía 9 años, hice mi primera comunión. Después nos mudamos a Baeza (Jaén), por trabajo de mi padre. En mi primer día de clase me di cuenta de que yo era muy tímido y mi tutora era nueva también. Todo fue bien, hasta que yo estaba en 6º de primaria, y mi abuelo cayó enfermo. Todo se me fue a pique. El 17 de agosto de 2017, mi abuelo murió. En ese momento, mi corazón se rompió en mil trozos, yo pense muchos días que yo no iba a volver a ver mas a mi abuelo. Ese año quedará marcado en mi. En 2019, vino una pandemia mejor conocida como covid 19. Estuvimos encerrados confinados en nuestras casas. Estuvimos mucho tiempo con la pandemia. Ahora hace 5 años de eso y ahora estoy sirviendo a señores.

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A lo largo de mi vida he servido a señores como THE ROCK, REY FELIPE VI DE ESPAÑA, WILL SMITH Y RUUD GULLIT. El primero fue Ruud Gullit, es un exfutbolista, uno de los mejores futbolistas de la historia. El segundo fue The Rock. un actor y ex luchador de la WWE. El tercero fue Will Smith, un actor y mi favorito, fue una de las mejores experiencias, y el último fue el REY FELIPE VI DE ESPAÑA, fui como agente de seguridad hacia él y su familia. Fui a muchos actos importantes.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna: tengo una mujer perfecta y dos hijos, y termine mi vida habiéndome dedicado a lo que más me gustaba.

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Adrián- EL LAZARILLO SEGÚN ADRIÁN Mi nacimiento fue en 1890 y fue especial porque vino un hombre sin conocer a nadie y me secuestró hasta llevarme a su casa fuera de la ciudad. Yo hasta los 7 años, no supe que él no era mi padre ni nadie de mi alrededor, pero me trató muy bien. Cuando supe eso no paré de buscar para saber quiénes eran mis padres verdaderos, pero no encontraba nada, así que fui a comisaría para saber si sabían algo del secuestro y me dijeron que esta búsqueda se cerró hace mucho tiempo, pero la policía empezó de nuevo a buscar quien era el que me secuestro. Cuando el secuestrador se enteró que fui a comisaría, recogió todo y huyó a otro país.

A lo largo de mi vida he servido a señores como el alcalde de Madrid para ganarme la vida como pudiese, ya que no encontré a mis padres. El señor me trató muy bien, me dio hogar, comida, cama…

También serví a un gran hombre que, cuando tenía 18 años, él fue el que me acogió hasta tener un trabajo y estoy muy agradecido a él por lo que hizo. Finalmente, trabajé para un señor mayor que necesitaba a alguien que le cuidara y vi un anuncio un día y llamé para solicitarlo. Ese hombre me trataba bastante bien, ya que yo le llevaba a todos sitios, hacía todos los recados, nos dábamos vueltas juntos,...pasamos buenos ratos, hasta que un día iba a despertarlo y no despertaba . Me asusté mucho y llamé a un médico.

Cuando llegó estaba igual que antes y eso significó que había muerto.Me entró mucha pena porque aquel hombre era la única persona que se preocupaba por mí y era él único apoyo que tenía yo.

Al día siguiente, en el entierro, me encontré con una mujer bastante guapa. Ella se acercó a preguntarme que si era yo el que cuidaba de él y le dije que sí y ella me saltó una sonrisa.

Me dio su número por si quería hablar algún día y a la semana la llamé y quedamos un día.

Fui quedando con ella mucho tiempo hasta ser mi novia y luego decidimos casarnos.

En fín que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna, vivo con mi mujer, tenemos una casa y tengo una buena familia, estoy viviendo los mejores años de mi vida, y muy contento

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José - EL LAZARILLO SEGÚN JOSÉ GARRIDO MEDINA Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue en un lujoso palacio en Vizcaya, en una habitación que estaba frente a un bonito jardín. Mis padres eran nobles de la zona de País Vasco. Mi infancia, al principio, fue fácil: sirvientes, manjares exquisitos y todos los juguetes que un niño podría desear. En el año 1869 nací yo. Por esa época España estaba muy dividida social y económicamente así que aparte de mis lujos, me tocó vivir una época muy difícil. En el año 1875, cuando yo tenía seis años, asaltaron el palacio provincial que mis padres tenían en San Sebastián, ya que en ese momento los nobles en algunas zonas estaban muy mal vistos. Mis padres, agobiados y sin dinero,me abandonaron y huyeron a Madrid, ya nunca los volví a ver.

A lo largo de mi vida he servido a señores con muchas diferencias, pero en lo que todos coinciden es que eran soldados. Recuerdo a mi primer amo, un capitán carlista. Tras malvivir en las calles unos pocos meses, un soldado carlista se apiado de mí. Se llamaba Fernando de Larraña González. Estuve unos meses con ese capitán que era rudo, fuerte, parlanchín y un poco bromista, pero eso sí, cuando había que luchar por sus ideas era serio como el que más. Con él no pasé grandes penurias, solo fatigas que alguna vez sufrimos con las tropas boinas rojas. En el asedio de Irún, mi amo se batió como un león, con sable y con fusil en mano como si le hubiese poseído el mismísimo diablo. Era emocionante cómo daba órdenes y cómo nuestros soldados cargaban los cañones. Sepa vuestra merced que Dios quiso llevárselo al paraíso pues un liberal le disparó en en la sien y mi buen amado Fernando en su agonía y después de haberse reconciliado con Dios, murió pronunciando una frase que nunca olvidaré:”Por Dios, por la patria y el rey” y tras decir esa bonita frase sucumbio y pasó a mejor vida. De ahí el odio que le tengo a los Isabelinos liberales.

Tras estar unos tres años vagabundeando por las calles de Madrid (me mudé allí después de perder a mi dueño Fernando), encontré a un noble militar y teniente del ejército español. Se llamaba Saturnino Martín Cerezo. En seguida me acomode en su casa y me dí cuenta de que detrás de esa serias cara, se encontraba un hombre amable y simpático. Con él viví bien hasta mis aventuras en 1898. De vez en cuando nos marchabamos a alguna otra provincia, por ejemplo de Madrid a Jaén, de Jaén a Cuba y de Cuba otra vez a Madrid. En 1898 unos cincuenta hombres, el capitán Enrique las Morenas, mi amo y yo fuimos a Filipinas a aplastar una rebelión.

Qué ilusos éramos los jóvenes. Fueron los peores años de mi vida. Todavía me acuerdo de comer ratas e insectos, ahí, once meses atrincherados en una antigua iglesia luchamos esos cincuenta hombres¡POR ESPAÑA! en Baler, hasta que mi amo descubrió que Estados Unidos había comprado las Islas Filipinas. Si no recuerdo mal murieron diecinueve españoles, todavía tengo una herida de bala en mi hombro. Al volver a España mi amo murió de tristeza viendo que España iba en declive.

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Me enrolé en el ejército y a los treinta años me casé con una bella mujer de Cádiz llamada Elena. De manera muy rara, la historia de España en el siglo XX empezó a escribirse en el norte de África, y previendo grandes futuros pedí destino allí. Al principio fue un poco raro: Calor, rebeldes, los valles del abandonado Rif, no sabías cuando podías caer en una emboscada. Luché allí a duras penas hasta que en 1920 se creó un nuevo cuerpo de combate llamado “ Cuerpo de voluntarios” que posteriormente se pasó a llamar La Legión. Allí me incorporé de sargento y conocí a un gran hombre cuyo nombre era José Millán Astray.

En África gané medallas y dinero pues cuando se creó este cuerpo yo era un curtido y veterano soldado. Me retiré del ejército en 1930 y me compré una bonita finca. Mis hijos también son militares y espero que mis nietos lo sean también. En fin, ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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UNA VIDA DE MALAS NOTICIAS El lazarillo según Miguel Garrido López

Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue en Vivar en el año 1072. Fue muy complicado ya que era un parto delicado. En estos años había un riesgo de muerte muy alto porque no contábamos con los recursos necesarios. Mi madre murió en el parto o eso es lo que le dijeron a mi padre porque no nunca vio el cuerpo.

A lo largo de mi vida he servido a señores como el Cid, a un abuelo ciego y a un pésimo señor llamado David. Como os estaba contando en una mañana del 1072 nací en un parto complicado donde mi madre murió. Iban pasando los años y mi padre y yo cada vez teníamos menos medios para sobrevivir. Mi padre no trabajaba y tampoco le daban oportunidades ya que la gente no confiaba en él porque estaba todo el día mendigando para darme de comer. Yo siempre lo he considerado un buen hombre pues me daba de comer siempre que podía, incluso llegaba a estar días sin comer por mí. Mi padre me consiguió un amo para que le sirviera. Era un viejo amigo de él y decía que era una buena persona. Al conocer a mi amo me explicó que era ciego y me dijo que con él iba a aprender mucho. Los primeros días fueron muy complicados ya que yo estaba acostumbrado a comer aunque fuera dos veces al día y mi amo solo me daba de comer una vez al día. Lentamente me fui acostumbrando, aunque cada vez tenía menos fuerza para hacer las tareas que me pedía el ciego.

Aguanté 2 años y por aquel entonces yo tenía 12 años mis ganas de abandonar a mi amo e irme con mi padre eran inmensas así que decidí irme de casa y encontrar a mi padre. Un día me llegaron rumores de que mi padre se había mudado de ciudad así que estuve caminando por las ciudades cercanas con la esperanza de encontrar a mi padre. También tenía que ir mendigando ya que no tenía nada para comer. Una noche que estaba durmiendo en una cama de paja en una casa que se caía a trozos me vino un hombre de estatura alta y delgado y me ofreció ir a su casa. Cuando estábamos en su casa observé que era amplia y de repente abrió un cuarto en el que escondía todas sus riquezas: había mucho oro y comida. Pasaron unos meses y me di cuenta de que este amo era peor que el ciego ya que me daba de comer 4 veces y encima tenía para servirme como un hijo del mismísimo rey.

Acabé robando o eso intentaba, porque me pilló justo cuando iba a empezar a robarle. Tras eso mi amo me metió una paliza y volví a mi ciudad natal Vivar. Ahí conocí al Cid. Él me ayudaba en todo lo que podía y me contaba toda su vida desde sus batallas hasta cómo conquistó a su mujer. El me decía que conoció a mi madre y que era una mujer de 10, Un día que iba caminando por el bosque me encontré a una mujer con síntomas de lepra y me decía que yo era su hijo, que me estaban engañando y yo, siguiendo los consejos de mi padre que me dio de pequeño, me alejé de aquella persona.

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Tras varios años viviendo del Cid y aprendiendo a ser un buen caballero me dieron la noticia a los 16 años de que mi padre lo había asesinado y que tenía que ir a una especie de entierro. En el entierro me encontré a una mujer que me confesó que ella estuvo en el parto y que mi madre no murió sino que la aislaron de la ciudad porque tenía la enfermedad de la lepra.

Yo no me lo podía creer empecé a pensar en aquella vez en el bosque y me suicidé.

En fin, que ahora NO estoy precisamente en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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EL LAZARILLO SEGÚN ÁNGEL Pues vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue en el año 698. Nací con un hermano gemelo que murió en el parto porque no respiraba. Mi padre nos abandonó a mí y a mi madre cuando yo tenía 6 años, él se fue con otra mujer de la familia de mi madre. Yo a los 8 años me puse a trabajar para conseguir dinero.

A lo largo de mi vida he servido a señores como a mi vecino, que se llamaba, José Paldos, al que le trabajaba en el campo ayudándole con las hortalizas o con el ganado aunque no me pagaba mucho.

A los 12 años comencé a servir al rey cristiano Carlos El Misericordioso siendo uno de sus caballeros. A mi madre no le gustaba la idea de que fuera caballero siendo tan joven.

Un año más tarde de empezar a ser caballero empecé a vigilar los reinos del sur de España. Un día llegaron los musulmanes para conquistarnos y de hecho lo hicieron consiguieron conquistar los reinos del sur de España.

En la guerra en la que nos conquistaron mataron a todos mis compañeros. A mí no me mataron por mi edad, pero me secuestraron y me llevaron para que fuera esclavo de un rey musulmán con mucho dinero.

Mi último señor al que serví fue un rey musulmán llamado Abdul Kness al que estuve sirviendo durante 3 años hasta que la hija de un noble de alta nobleza se enamoró de mí.

Al cumplir yo 17 y ella los 18 nos casamos y entonces dejé de ser esclavo y empecé a ser caballero.

Al cumplir los 20 fui a una batalla contra los cristianos en la que 4 cristianos secuestraron al rey. Yo los seguía de lejos y cuando se pararon los maté. El rey se sintió tan agradecido que me prometió que cuando muriese me dejaría todos sus reinos ya que no tenía hijos.

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3 años más tarde mi esposa Laura y yo tuvimos nuestro primer hijo, al que llamamos José en honor a mi primer señor. Unos meses más tarde el rey Abdul murió, así que me pusieron a cargo de todos los reinos del sur de España.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda fortuna.

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LAS MEMORIAS DE LÁZARO EL LAZARILLO SEGÚN AILYN Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

A continuación, le relataré mi historia, con cada uno de los detalles. Mi nacimiento fue en un pequeño pueblo a las afueras de Madrid. Mis padres me esperaban con ansias y mucha ilusión, hasta que llegó el día más esperado. El 24 de marzo de 1910, oficialmente, vine al mundo, fue un día muy importante para mis padres y un día que les cambió la vida.

Ellos trabajaban atendiendo a una familia adinerada: mi madre era ama de llaves y cocinera y mi padre era mayordomo.

Supuestamente todo iba bien, hasta mi llegada, porque a mi madre se le empezó a complicar el trabajo y los jefes no estaban muy satisfechos. Mis padres,al ver la situación, dejaron el trabajo y se quedaron a la deriva. Transcurrieron varios meses difíciles y de incertidumbre hasta que un día volvió la calma y la tranquilidad, porque encontraron un trabajo, incluso mejor que el de antes, con una familia de mayor prestigio y con un salario más alto y lo mejor es que nos daban vivienda.

Así transcurrieron varios años en los cuales fui feliz rodeado de la naturaleza y de jardines grandes y preciosos, de los que cuando llegaba la primavera, crecían unas flores extravagantes. Y algunas veces cuando no estaban los amos, jugaba con sus hijos, y en nuestro mundo no había distinciones, solo nos divertíamos, pero eran increíbles e inolvidables momentos. Hay que recordar que, en esa época había varias reglas, con las diferentes categorías sociales, la relación de los jefes con los sirvientes tenía que ser la mínima, no tener confianza y tratarlos por su clase social, había algunos que eran diferentes, pero de esos había muy pocos.

Cuando cumplí los 18, empecé a trabajar para un señor, para así poder pagarme lo que me quedaba de la escuela. Fue mi primer amo. Al principio iba bien, mi trabajo era más o menos ser su secretario, pues al ser un hombre de negocios necesitaba alguien que le ayudara a llevar todo planificado. Después de cinco meses empezó a ir mal: al no irle bien en la empresa cobraba menos, por lo que me pagaba menos, empezó a beber y, a veces, cuando estaba borracho me insultaba y me pegaba.

Fueron unos meses duros pero aún así seguí resistiendo, porque necesitaba el dinero.

En marzo de 1936, mis padres fallecieron por un trágico accidente. Pasé una época muy mala, debido a que ellos eran la única familia que tenía. Y ahí fue cuando se me ocurrió la idea de atender a sus amos, servirles como mayordomo. Y así dejé al [Señor Robert] y empecé a atender a la familia Vaño. La verdad es que ellos eran muy amables conmigo, así que era cómodo y entretenido trabajar para ellos. Todo iba bien hasta que fueron asesinados. Los señores ricos en esa época tenían que ser matados por la guardia roja y así fue.

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Al ver la situación una de las hijas me ofreció servirle, a lo que yo acepté. Recién se habían casado y eran una pareja excepcional, eran unas personas super nobles y sencillas.

Y así fue cómo conocí a mi mujer, ya que ella trabajaba como personal de limpieza.

Se llamaba Alicia. Era como un ángel de lo linda y buena que era. Me adapté muy fácilmente a este trabajo y así transcurrieron los años, hasta que la familia de los amos empezó a ampliarse, vinieron los niños, con los que me encariñe mucho y ellos también tenían un trato y confianza diferente conmigo.

Eso me animó a tomar un gran paso decisivo en mi vida y decidí casarme con mi gran amor, Alicia. Fue un día especial para los dos y de ahí empezamos a formar una familia. Y era muy feliz, con mi mujer y mis dos hijos.

Así transcurrió el tiempo y me fui haciendo mayor, vivía feliz con mi familia y mi trabajo, que más que un trabajo era como estar en casa y con mi familia.

Un día inesperado, mis jefes me llamaron a su despacho y me dieron la gran sorpresa de que por mis años de dedicación y de buen servicio me regalaron una casa. No me lo podía creer, estaba súper asombrado y feliz, porque tenía algo mío y así podría cambiar la situación de mi familia y vivir en un lugar mejor, uno más cómodo y bonito. Mi esposa y mis hijos no se lo podían creer, la verdad que pocos amos tienen esos gestos de agradecimiento, ellos eran únicos, cambiaron mi vida y la de mi familia.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna: mis hijos crecieron y les pude dar para que estudiaran una carrera. Ana tiene 20 años y es doctora, y Luis tiene 18 años y está preparándose para ser policía.

Actualmente no me puedo quejar de mi vida, vivo tranquilo, por mi economía estable y también por ver a mis hijos realizados, y sobre todo teniendo la dicha de seguir al lado de mi querida esposa.

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David EL LAZARILLO SEGÚN DAVID GARRIDO NAVARRETE Pues Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue algo esperado por toda la comunidad hindú, aunque acabó siendo una decepción para todas las personas, os pondré en contexto: Corrían los meses finales del año 1866 cuando mi padre (el monarca o gobernador general de la India) y mi madre (la mujer del monarca) me concibieron, pero mi padre murió durante el embarazo de mi madre, dejándola así a ella como la regente monarca a la espera de mi nacimiento. El parto transcurrió sin problemas y nací un 16 de julio del año 1867, pero al saber mi tío que yo había nacido varón una fuerte ira le llenó por dentro, ya que él siempre había querido ser el monarca del país. Así que reunió a sus más cercanos seguidores y me mandó asesinar, pero mi madre y una sirviente que trabajaba en el castillo, en las cocinas, me ocultaron y protegieron de ser asesinado, entregando al hijo de la sirviente en mi lugar y declarándome hijo de la sirviente, aunque por supuesto, mi tío no podía declarar que había intentado asesinar y asesinado al heredero de la corona de India, así que él le dijo al pueblo que yo había muerto durante el parto, heredando así él la corona y convirtiéndose en el monarca de India.

A lo largo de mi vida he servido a distintos señores y personas, el primero de ellos, mi propio tío; me crié en el castillo pero como hijo de una sirviente, no como el monarca que debería haber sido, aún así durante mi infancia fui feliz jugando con los demás hijos de las sirvientes y siempre estuve arropado por el calor de las madres y por un cariño especial que me tenía la reina emérita (la cuál en aquel entonces yo no sabía que era mi madre). Servíamos al monarca pero disfrutábamos en compañía. Cuando yo tenía 14 años la reina emérita enfermó de gravedad y bajó a las cocinas del castillo a hablar conmigo, y fue en aquel momento cuando descubrí toda la verdad y mi vida cambió. Tras contarme que yo realmente era su hijo, que el actual monarca era mi tío y que cuando nací me mandó asesinar porque yo era el legítimo monarca, me quedé tan anonadado, que no me percaté de que la conversación que mi madre y yo estábamos teniendo estaba siendo escuchada por un niño que me odiaba, ya que yo era mejor que él en la mayoría de actividades y, además, la reina emérita me tenía un gran cariño; el niño corrió a contárselo al rey y eso provocó que mi tío me mandara encarcelar, por lo que tuve que huir del país para no ser encarcelado; antes de marcharme todas las sirvientes y niños se despidieron con gran cariño de mí, por todo el tiempo que habíamos pasado juntos, y por último, fue mi madre quién me dijo unas palabras de despedida: “Ve lejos, vive tu vida, sé feliz, pero recuerda tus orígenes y a tu gente”.

Tenía que alejarme de la India así que partí junto con un grupo de peregrinos hacia el oeste y acabé llegando a Europa. Tras pasar por diferentes países acabé llegando a Alemania en el año 1882, a la edad de 15 años . Allí viví durante los siguientes 5 años de mi vida. En Alemania aprendí muchos y nuevos conocimientos, además de conocer a grandes personas a las que serví. En mi etapa en Alemania aprendí lo que eran los rayos catódicos y lo estudié todo junto a Phillipp Lennard y otros físicos, de hecho, más tarde descubrí que Phillipp Lennard ganó el premio Volver al índice

Nobel de Física en 1905 gracias al estudio de estos rayos catódicos, aunque yo nunca fui nombrado en su trabajo, fue un placer servir y ayudar a Phillipp Lennard y al resto de físicos en sus estudios y experimentos sobre aquellos innovadores rayos.

En el año 1887 decidí dejar Alemania y embarcarme en aquellos, para mí, innovadores barcos de vapor, que habían sido inventados unos años antes; trabajé en un barco durante un par de años y me convertí en el segundo al mando del capitán del barco, al cual serví con gran honor y del cual aprendí muchas cosas y muchas historias de las que todavía me acuerdo. En aquel barco conocí a la que se convertiría en la madre de mi hijo y en mi mujer, Fátima, la hija del capitán del barco.

Durante uno de nuestros viajes en barco decidimos que era momento de cambiar de vida y desembarcamos en Londres, donde concebimos un bebé, que 9 meses más tarde, nacería como varón. Mientras esto sucedía encontré trabajo en una empresa de embotellamiento, que no es el mejor trabajo, pero gracias a mi jefe y a mi familia ascendí rápido y acabé enseñando a los demás el trabajo que durantes unos años mi jefe, al que yo servía con gusto, había estado enseñándome a mí.

Pero no acaba así mi historia, ya que en el año 1985 llegó a mi un periódico y con él, información, que me hizo recordar mi pasado.

En el periódico hablaban sobre la muerte del monarca de India (mi tío) y sobre el gran revuelo que había en el país ya que no había ningún sucesor al trono; fue entonces cuando recordé las últimas palabras que me había dicho mi madre: “Ve lejos (y fui lejos), vive tu vida (y eso hice), sé feliz (y sin lugar a dudas lo era), pero recuerda tus orígenes y a tu gente”, y yo eso último no lo había cumplido, así que entonces fue el momento de volver a mi lugar de origen a reclamar el trono y a cuidar y a liderar a mi gente. Tras un año de viaje llegué junto a mi mujer y a mi hijo a la India, donde estaba todo descontrolado a falta de alguien que pusiera orden en el país; cuando llegué al castillo, en la capital, reconocí a mis amigos y conocidos del pasado, los cuáles me recibieron con una calurosa bienvenida. Una vez hablé con mis amigos, hablé ante el pueblo y el país, y les conté mi historia, para que vieran que yo era el heredero de la corona, y todo el mundo me aceptó con gratitud gracias a la buena fama de monarcas que se habían ganado mi padre y mi madre; pero tras contarle a la gente toda mi historia, me percaté de lo mucho que había vivido y de que era momento de descansar y de ceder el trono a la siguiente generación, a mi hijo Brahim (tenía el mismo nombre que el padre de mi mujer, aquel capitán de barco que tanto me enseñó).

Me hallo descansando y disfrutando la vida con mi mujer, mientras que aconsejo a mi hijo para convertirlo en el mejor monarca posible. En fin; que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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Marcos EL LAZARILLO SEGÚN MARCOS GUIJOSA LÓPEZ Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relate mi por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia.

Mi nacimiento fue un 15 de Mayo en el 1850, en una calle de bajo poder económico de Londres, donde raramente se podía ver un rayo de sol cruzando esa extensa humareda que escondía del cielo.

Este no llegó a cambiar durante toda mi infancia y fui poco a poco que vivía en el pleno auge de la Revolución Industrial, donde el vapor era el rey y todos los demás su mano de obra.Desde que era un renacuajo fui forzado a trabajar en las fábricas durante innumerables horas, por un sueldo que no daba ni para una miga de pan.Mi familia y yo vivíamos como ratas, siempre corriendo de grieta en grieta, mendigando y pidiendo limosna. A lo largo de mi vida he servido a señores como elegante burgués, un alto cargo de la fábrica de donde trabajaba, diciendo que me daría una mejor vida, si le ayudaba con algunas durante unos meses asumiendo que el fuera mi señor, obvio que acepte ya que era mi oportunidad de salir del vertedero de donde vivía y poder ayudar a mi familia.

El primer dia con este rico burgués, fue intenso y angustioso, parecía que el que me iba a dar una oportunidad para tener una mejor vida, resultó siendo uno de los más importantes exportadores de carbón y a lo que se refería como salir de la miseria, terminó en trabajar casi doce horas, aun teniendo trece años.Después de esa dura jornada, llegué a lo que sería mi nueva casa por esto meses, era grande, espaciosa, estaba situada en una zona donde el humo de las chimeneas de las fábricas no inundaba todas las calles y lo más importante, había aire fresco.

Al entrar a la casa, mi señor se me presentó por primera vez, es raro que no lo hubiera hecho antes de ponerme a trabajar, pero ya se le notaba que escondía algo, solo con ver de qué fachada estaba hecho. Pero después de unos días mientras trabajaba en su fábrica, uno de los trabajadores empezó a decir que el dueño y jefe había abandonado la ciudad, al terminar la dura jornada de ese día, cuando llegue a la casa todos los muebles estaban tapados y no había nadie en esa espaciosa casa, esperándome lo que estaba pasando, fui como una bala al despacho de mi señor, enfrente de esa robusta puerta de roble, sentí un escalofrío pero sin pensarlo abrí la puerta encontrando una habitación vacía con una nota en el suelo, donde a duras penas se podía ver unas fechas de importación provenientes de Asia de carbón que no era nacional. Al ver esto, ya puede deducir que todo esto era ilegal y el que me ofreció una segunda oportunidad y hogar se había esfumado sin dejar rastro alguno.

Ya pasaron algunos años desde ese acontecimiento. Creo que si ahora siendo siervo de la señora Melissa, una burguesa de alto estándar y muy exigente con todo lo que le rodea y lo más importante, no perdona ningún error aunque sea leve.Pero ante todo esto era amigable y muy cariñosa, bastante diría yo.Esta me contaba que perdió a su hijo, unos cuantos meses atrás, por culpa de un tiroteo entre dos bandas, que hubo en el barrio. Poco a poco comprendí que yo era el sustituto de su Volver al índice

hijo para ella, esto me sorprendió y me llenó de dudas al mismo tiempo.Cómo una persona de ese poder económico podía ser ese tipo de revolución si nisiquiera compartir la misma sangre.Esto me llevó a ir entendiendo su situación.

Después de esta noticia, durante unos días estuve cuidando a Melissa que por cierto, era la señora que ayudaba, esta estuvo enferma de gravedad hasta hace unos pocos días, por una enfermedad que está golpeando al país de una forma muy dura y nefasta que se estaba tendiendo como la espuma, entre las calles esta noticia se esparció de boca en boca.Pero ya se estaban realizando estudios sobre esto para mejorar la calidad de vida.

Pero, lamentablemente, sabiendo todo esto, Melissa volvió a caer enferma y esta vez más profundamente. La señora, viendo lo que podía pasar, empezó a cambiar los papeles de la herencia, decidió dármelo todo a mí a la única persona que las estuvo acompañando durante sus últimas minutos de vida.Pero ante todo esto no cambió nada debido a que, los familiares, de esta aparecieron ante esta decisión, echándome de la casa y dejándome en la calle sin nada, para sobrevivir debía rastrear y robar de nuevo.

A los pocas horas de esto, vi a un hombre saliendo de un antro y se le cayó la cartera, sin pensarlo la cogí rápido y se la devolví, este me dio las gracias y viendo la apariencia que llevaba en ese momento me ofreció tratarlo como mi nuevo señor.

Este me dio una tarjeta con la dirección de donde vivía si me interesaba.

Ya hace unos días que este día rondaba mi cabeza, así que me preparé y me vestí de la mejor forma que podía para el primer día o eso creo. Cuando llegué a ver a Robert que el nombre de este señor, tumbado, fumando un puro mientras miraba a la nada. Me acerque a donde se encontraba y pregunté qué quería que hiciera. Él simplemente me dijo que fuera a la parte trasera y cogiera todo, que él ya estaba cansado de todos, no aguantaba nada más la realidad que vivía.

Cuando llegue a la parte de atrás vi unas enormes maletas llenas hasta el tope de billetes, viendo la oportunidad que tenía ante mis propios ojos, mayor que las que habían ofrecido anteriormente, cogí todo lo que pude y me fui con la nueva oportunidad que tenía.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda mi fortuna.

Encontrándome en unas pequeñas islas del caribe lejas de la que fue mi vida hace unas décadas atrás, hoy con 55 años y lo que podría decir, como en la plena cumbre me siento exitoso, gracias a las oportunidades que me fueron ofrecidas, pero aún queda volver a Londres y ayudas a otras personas que estuvieron en mi misma situación, alomejor podria empezar saliendo de un antro.

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EL LAZARILLO SEGÚN MARTA JIMÉNEZ RAYA Pues vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento se complicó, casi muero al nacer porque venía con dos vueltas en el cuello y tres en la rodilla del cordón umbilical. Mi padre nos abandonó a mis cuatro hermanos y tres hermanas y también a mi madre, fue algo extraño que ocurrió según me cuentan. Mi madre contaba que simplemente cuando vivió con mi padre lo único que mereció la pena fue tenernos, todo lo demás era inservible. Ella lo pasó muy mal porque vio cómo su marido se metió en las drogas y como dicen y decían, es un tema en el cual si entras, ya no sales.

Mi infancia fue muy extraña por el tema de mi padre al que yo ni le conocí. Éramos una familia que, bueno, gracias al trabajo de mi familia podíamos vivir bastante bien.

Mi madre al principio fue campesina, antes de suceder lo de mi padre. Al cabo de los 14 años, cuando yo tenía esa edad, mi madre se enamoró de un noble, guapo, moreno con ojos marrones, muy buena personalidad. A los 6 años, tras convivir juntos, se casaron y todo fue más bonito que el pasado, mis hermanos y hermanas pudieron estudiar lo que ellos quisieron y ahora me toca a mí.

A lo largo de mi vida he servido a señores como a grandes reyes, reinas, alto clero… Como os estaba contando, mi infancia fue realmente dura. Cuando fui un poco más mayor iba a la escuela del pueblo, donde yo vivía, aprendí muchas cosas,

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disfruté de mi adolescencia porque fue bastante buena, y cuando llegó el momento de pensar a lo que yo quería dedicarme en un futuro, pensé y volví a pensar y decidí ser profesor de universidad. En aquellos tiempos había muy pocas universidades.

En aquellos tiempos había muy pocas universidades pero yo quería dedicarme a eso aunque fuera en alguna de ellas. Dediqué mucho tiempo de mi vida a la carrera que estudié pero al final lo conseguí. Tras pasar los años yo dí mis clases en una universidad de una pequeña ciudad de Jaén llamada Baeza. Allí me encontré con muchísima gente, la cual no conocía. Conocí a mi abuelo, el padre de mi madre. Era un hombre muy formal, muy bien vestido y agradable, aquello para mí fue una cosa impresionante. También conocí a mi tío, el hermano de mi madre, del que no se sabía nada desde hacía tiempo e incluso años, porque se fue a estudiar y después no regresó al pueblo. Y al cabo de muchos años conocí a un hombre sin recursos y con pinta de ser un siervo o de ni siquiera llegar a eso. Según me contó procedía de un pueblo de Málaga llamado Torremolinos. Le pregunté por su nombre y se apellidaba con uno de mis dos apellidos, yo me llamo Lazarillo de Tormes Sánchez y él se llamaba Hugo de Tormes Lázaro. A mi pensar: “Y si fuera mi padre”, pero sinceramente lo dudaba mucho. Él me preguntó que de dónde era yo. Lo intuí pero no estaba seguro. Pasaron los días y nos seguimos hablando, hasta que un día yendo para la clase de filosofía, que era la asignatura que yo daba me dijo: - A ver, Lazarillo, de esto no digas nada a nadie, pero te voy a decir la verdad.

Yo soy tu padre y esa mujer de la que me estabas hablando era mi mujer, tu madre. Yo me quedé asombrado porque no lo llegaba a creer. Me acuerdo que desde aquel momento yo no le hablaba como antes. Mi padre me dijo: - Hijo mío ¿qué te pasa?

- Cuéntamelo, para eso soy tu padre.

Yo me negué y en seguida se lo conté a mi madre, que estaba en el pueblo y a mi tío y mi abuelo, que en aquel momento estaban allí tras lo sucedido. Yo le dije al hombre que de mí se olvidará para siempre. Le dije: - ¡Tu no eres mi padre! Mi verdadero padre es el marido de mi madre, el que me ha criado, cuidado y me trata bien, no como tú, que me abandonaste!

Y dije: “O te marchas de aquí o me marcho yo”. Todo el mundo decía que se marcharía él porque yo no tenía culpa ni me merecía de que él fuera así. Al final, él se fue y yo me quedé dando clase.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna y bastante bien, aunque vivo solo porque mi mujer murió hace cuatro años, pero estoy con mis hijos, el mayor llamado Pedro, el mediano, Luis, el segundo más pequeño, Mauro y la pequeña Paula. Voy a sus casas algunos días y, bueno, con 74 años estoy muy bien. ¡Y espero conservarme así de bien! ¡Y sin pillar la Covid-19!

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Santi - El Lazarillo según Santiago Jordán Garrido Pues vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue un tanto complicado pues mi familia era pobre y no teníamos recursos para pagar un médico porque si, en esos tiempos había que pagar el médico. Por ese entonces vivíamos en una cabaña sin luz ni agua, bueno ya os imagináis cómo fue….

A lo largo de mi vida he servido a señores como “El Rubius”, él fue el que me hizo aprender cómo manejar el mundo de las redes sociales, y me enseñó el que ahora es el videojuego de mi vida, “Fornite”, un juego “Battle Royale” que consiste en que saltas de un autobús a una isla junto a 100 jugadores y tienes que ser el único superviviente.

Este juego ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida pues me ayudaba a sacar lo mejor de mi y hacerme olvidar mis penas. Yo cuando era un chaval y apenas conocía este mundillo simplemente lo jugaba como diversión pero ahora que sé que puedo ganar dinero hace que me guste.

“El Rubius” y yo creamos un “team” competitivo de este videojuego. El clan se llamaba “Forze” y donde, con el paso del tiempo, fuimos fichando a gente de todas las partes del mundo.

A día de hoy subo contenido a mi canal de “Youtube” y hago directos en “Twitch” charlando con mis seguidores.Esto se ha convertido en mi trabajo y la verdad que no me quejo, pues me ha dado la oportunidad de mudarse a Andorra y vivir en una casa con mi “team””FAZE”.

En fin, que ahora estoy donde siempre he querido estar y he podido sacar a mi familia de la pobreza.

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UNA VIDA DIFÍCIL EL LAZARILLO SEGÚN SARA Pues vuestra merced me ruega que escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezar desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue la mañana del 28 de enero del año 1920. Nací en una familia de la clase alta española. No me acuerdo muy bien de mis primeros años de vida, pero sí me acuerdo de que crecí en uno de los barrios más ricos de Madrid de aquella época. Mi madre era una mujer muy guapa o eso creo, ya que casi nunca la veía.

En cambio, de mi padre solo me acuerdo de que tenía un carácter terrible y que siempre que estaba en casa todo el mundo solía estar algo inquieto. A mí me criaron los trabajadores de la casa, teníamos varias criadas, un cocinero, un mayordomo, una niñera...

Cuando solo tenía seis años nos mudamos a Londres por el comienzo de la guerra civil, a mí me inscribieron en un internado, y estuve allí desde los nueve hasta los veinte años. Cuando salí me comunicaron que mi familia había quedado arruinada, que mi padre había tenido que alistarse al ejército y que mi madre trabajaba en una fábrica de coser. Comprendí que tenía que ponerme a trabajar o alistarme al ejército; elegí la primera.

A lo largo de mi vida he servido a señores como Andrew Red, un famoso actor de aquella época en Londres. Me contó que venía de una familia pobre y que nunca había tenido tanto dinero, el pobre se puso a comprar propiedades y a despilfarrar el dinero como si no hubiera un mañana y acabó en bancarrota, como ya no le contrataban para películas porque estaba demasiado viejo para ello, acabó muriendo de un paro cardíaco a la edad de 70 años.

Después serví a la mismísima Isabel II, por aquel entonces era princesa todavía y yo solo solía llevarles la comida y recoger la mesa. Yo era algo mayor que ella, pero eso no impidió que mantuviéramos un apasionado romance a escondidas de su familia cuando su padre se enteró me echó a patadas... ¡del país! así es como acabé en Francia Yo ya estaba bastante mayor, rondaba el año 1960 y buscaba una mujer con la que casarme y formar una familia, lo típico. Acabé conociendo a una apuesta muchacha que trabajaba de modelo en la capital parisina, nos enamoramos y bla, bla, bla... El día de nuestra boda me contó que era una espía norteamericana y me dijo que si quería trabajar con ella. ¡Yo quedé helado! Y salí por patas de esa boda. ¡Vaya que hasta el día de hoy sigo soltero!

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna, a pesar de los amoríos fallidos que tuve, las vidas destrozadas que presencié, mi desencuentro con el rey de Inglaterra y una familia algo desestructurada

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La dura vida de un joven pirata: EL LAZARILLO SEGÚN JUAN LUIS

Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nombre es Lázaro, tengo 78 años, mi nacimiento fue el día 20 de abril del 1700.

Nací en uno de los barrios más pobres de Londres, mi padre nos abandonó a mí y a mi madre, quien tenía que trabajar por la noche en la taberna para mantenernos a mi hermano y a mí.

Una noche a las 4 de la madrugada me despertaron los gritos desgarradores de mi hermano que estaba siendo engullido por el fuego provocado por la banda de los Kenedy que saldaron la deuda del préstamo que había pedido mi madre años antes quemando nuestra casa. Cuando conseguí escapar del incendio fui a buscar a mi madre pero estaba borracha, como siempre.Ya no quise saber nada más de mi madre y me vi solo en la calle, vagando como un alma en pena y comiendo cáscaras de naranjas hasta que me encontré a dos hombres que me ayudaron y me reclutaron como pirata en el navío de Jack Sparrow.

Allí en la Perla Negra yo era el condestable, es decir, el que vigilaba las provisiones de comida y armas, pero alguien me la jugó.

Por esos tiempos yo tenía 15 años y el capitán me decía que vigilase bien y no dejara entrar a nadie a la bodega a menos que él lo permitiese. En el barco había un prisionero al que torturaban atado al mástil para sacarle información de su tripulación. Este hombre, lleno de lágrimas y cicatrices, me rogó que le diese un trozo de pan y, tonto de mí, acepté. Esa misma noche mientras todos dormían entré en la bodega y lo cogí, sin embargo, cuando fui a dárselo chilló con todas sus fuerzas y despertó a todo el barco, haciendo que me descubriesen y me tirasen al mar a mi suerte.

Después de pasar 3 días inconsciente por el Atlántico escuché que alguien en la lejanía gritó: ¡Veo un náufrago!

En ese momento empezó mi etapa dorada sirviendo al famoso pirata Barbanegra, con quien desarrollé un gran vínculo de amistad y vencí a más de 21 barcos de la Compañía Británica de las Islas Orientales, por lo que conseguimos un enorme botín, pero eso pronto se acabó.

Habíamos causado demasiados problemas para Inglaterra y ya estaban cansados de nosotros, nuestras caras estaban por todos lados en forma de carteles y el único lugar seguro era el mar, pero por poco tiempo. Los británicos nos mandaron 7 barcos llenos de soldados de los cuales acabamos con 4, y los restantes mataron a Volver al índice

todos los piratas menos a mí, pues sabían que destacaba en todas las disciplinas relacionadas con el combate y me dieron dos opciones: morir o unirme a ellos y, como no podía con el enemigo, me uní a él.

Pasé de ser un pobre y vulgar pirata a un habilidoso soldado que se ganó la confianza del general Samuel Wesley, quien organizó la masacre del barco de Barbanegra. El alma de pirata nunca había salido de mí y en un arrebato de ira le clavé mi puñal en el corazón mientras estaba distraído. Salí como si nada de las instalaciones del ejército británico después de tomar venganza y emprendí mi ruta hacia una nueva vida.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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La Perla Negra.

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Brahím - El lazarillo de Tormes según

Brahim el Orche Pues vuestra merced me ruega que escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezar lo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona.

Mi nacimiento fue un tanto especial: yo nací en un día muy caluroso, era una cosa muy rara porque en la zona en la que yo vivía nunca hizo calor. Mi padre era el alcalde del pueblo, y miadre se dedicaba a cuidar de la casa. Lo más raro de mi nacimiento fue que nací ciego. Mi padre, al ser alcalde, tenía muchos problemas causados por sus oponentes que fueron los asesinos de mis padres. Cuando los asesinaron yo tenía 23 años, estaba confuso, no sabía qué hacer. Así fue que partí a la ciudad, Bobby me dirigía, que era mi perro y, también, mis ojos. Pasé varios años en la ciudad y me acostumbré. Un día, de repente, me levanté, me lavé la cara y me sorprendí porque veía todo mi alrededor ¡Se me habían curado los ojos!

Estaba feliz, ya que podía trabajar estudiar para ganar la vida. En realidad no sabía qué hacer, si trabajar o estudiar. Estuve pensando mucho tiempo hasta que me decidí, iba a ser lázaro, porque sabía el dolor y la tristeza que uno sufre al no poder ver el mundo que lo rodea.

A lo largo de mi vida he servido a señores coronel alcalde de la ciudad. Este era un hombre al que sigo odiando hasta ahora, pues, cuando estábamos solos me trataba muy bien, pero cuando se juntaba con sus amigos, juntos, se reían de mí. Él tenía muchos lázaros que solo los utilizaba para presumir de ellos delante de sus amigos. Estaba ya cansado así que hice un plan para terminar con eso. Así fue que mientras íbamos a casa de sus amigos, lo dirigí hacía un charco muy profundo, al caer en él todos nos reímos.

Mi segundo amo era una persona humilde por lo que decidí ofrecerle mi servicio gratis, aunque era muy humilde era muy buena persona, el único defecto que tenía era que cuando recibía algo de dinero lo gastaba en drogas. Pensé que le vendría bien una mano de ayuda, así que le ofrecí a su mujer todo el dinero que había recaudado del amo anterior para que está pueda cuidar de su marido e hijos.

El tercer amo era una persona especial, era el ayudante del rey David. En realidad no estaba ciego, pero me llamó porque iba a ser ciego: el rey le había castigado a que le quitasen los ojos por intentar matarlo. Él me contó que eso era falso y no era verdad y me pidió ayuda a cambio de todo lo que deseara. Comencé a investigar, primero averigüé quién le comentó al rey de que s ayudante planeaba su muerte; era el alcalde, mi primer amo. Yo conocía muy bien a ese hombre estaba seguro de que todo lo que decía era falso. Pero no tenía pruebas. Volví a preguntar a mi nuevo amo, le dije que si conocía al alcalde está en el puesto en el que está por su culpa, porque lo pillo violando a la hermana de la esposa del rey. Ya tenía una prueba que me demostraba que el alcalde odiaba al ayudante del rey, pero necesitaba más pruebas, que no conseguí.

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Yo me sentía triste, los ojo de mi amo fueron arrancados, sentía mucha vergüenza, no podía mirarle a la cara a mi amo. Este, al contrario, me vio y me dijo que era la mejor persona que jamás había conocido.

En fin que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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El Lazarillo según Nazaret Méndez Murillo Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona. Mi nacimiento fuel el 16 de marzo de 1978. Nací en Úbeda, Andalucía, España. Me estuve criando en Baeza hasta cuando tuve 10 añitos, que un ciego me pidió ayuda para cometer atentados y si no lo ayudaba sus otros sirvientes matarían a mi familia. Entonces tuve que ceder para que no mataran a mi familia, nuestro primer atentado fue en Madrid en un coche de policía.

Perdonad, vuestra merced, se me ha olvidado decir cómo se llamaba aquel señor.

Ese señor se llamaba Alejandro. Estuve con él durante doce años atentado tras atentado. Si me arrepiento de algo fue de todas las vidas que hice que volarán al más allá.

Cuando murió, aquel señor ciego volví con mi familia, y resultó que tenía un hermano. Estuve con él dos años hasta que un día llamaron a la puerta dos señores para que me fuera de soldado a un campamento militar. La segunda noche que estuve ahí hubo un ataque sorpresa por otros militares que empezaron a tirar bombas y a disparar. Las únicos que sobrevivimos fuimos mi mejor amigo y yo que resulto que de mi mejor amigo se iba a convertir en mi jefe.

No se me pasaba por la cabeza que mi mejor amigo me iba a azotear, pegar y pegar puñetazos y yo contra la pared. Estuve sirviendo hasta que conocí a los más bello y de buen cuerpo, mi ex mujer. Estuve con ella mucho tiempo hasta que me entere que era infiel conmigo. Tuve que irme de esa casa que compramos con lo puesto, no sabia donde ir ni donde quedarme. Donde me quedase esos señores me podrían convertir en su esclavo. Efectivamente, no me faltó razón.

Primero paré en una casa de pobres y no es que me hicieran su esclavo sino que fui yo el que decidió ayudarlos. Tenían dos niños pequeños y esos niños estaban muertos de hambre. Decidí ir a buscarles comida y antes de que llegara me raptó una banda de madrileños, porque había oído hablar de mí muy bien. Yo pensaba que cuando me soltasen estaría en mi casa pero no fue así.

Me llevaron a un sitio oscuro maloliente y encima lleno de pinchos en el suelo.

Aquellos madrileños me convirtieron en su esclavo y más tarde pare me vendieron a otras personas y de ahí a otro sitio hasta que pare donde estoy hoy, con mi señor Ruy. Llevo con él tres años, pero él no es como los demás: él me da de comer buena comida, tengo una cama donde dormir. Ayer conocí a otra chica, es tan guapa o más que la anterior. Mi señor me ha dejado hoy ir a verla.

Hemos decidido casarnos pero le he dicho que no me puede ser infiel conmigo, que si me quería no podía ser así conmigo como mi antigua mujer. Ya se lo he explicado a mi señor y le ha parecido bien mientras que no deje de trabajar y le he dicho que con todos los cuidados que me había dado nunca lo iba a dejar.

En fin que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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El lazarillo según José Antonio Pues Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia entera de mi presencia.

Mi nacimiento fue entre medias de la edad media. Nací en una pequeña casa con dos hermanos, en mi casa no teníamos mucho dinero, así que mis dos hermanos y yo, teníamos que salir a trabajar: mi hermano mayor, Roberto, salía a talar los árboles cerca de la zona, mi hermano menor ayudaba a madre en casa, al ser el más pequeño. Yo acompañaba a Roberto al bosque. Mi nombre es Lázaro, ayudaba a mi hermano mayor a talar y con el dinero que conseguíamos era suficiente para vivir. Habían pasado 10 años desde que nací, la vida era buena hasta que… un dia, yendo a talar, ocurrió lo peor que podía pasar: mi hermano mayor estaba talando un gran árbol, yo le dije que era demasiado grande, pero no me hizo caso, yo le ayude a talarlo, pero al terminar de cortarlo se cayó hacia Roberto. Él intento evitar que le cayera encima pero al salir corriendo, se le quedó el pie atorado entre unas grandes raíces, intente ayudarle, pero fue demasiado tarde, el cuerpo de mi hermano fue totalmente aplastado por el Gran Árbol. 5 años después, mi hermano pequeño murió por una terrible enfermedad, 5 años después, mi madre, ya casi a los 30 años, mi padre. Parecía que Dios quisiera que se muriera toda mi familia.

Ya cuando tenía 36 años seguía talando, ya yo solo.

Estaba en medio de un bosque a punto de talar un árbol hasta que un oso apareció y aunque parezca raro morí por el oso, pero paso algo que puede que os sorprenda, vi una luz antes de cerrar mis ojos para siempre y entonces vi a Dios y me dijo que si hacía buenas acciones, me podría devolver a la vida. Sé que es algo loco pero si le estoy escribiendo esta carta es porque digo la verdad.

A lo largo de mi vida he servido a tres amos.

Desperté en mi casa y fui a buscar, a hacer algún buen acto. Salí a buscar por el río y encontré a un hombre, aproximadamente de 47 años, ahogándose en el río.

Pensé que ese seria mi primer buen acto, cuando lo saqué del río, me agradeció que le salvara. Pero entonces había humo que salía de la aldea. ¡Era mi casa! Se incendió por algún motivo. El hombre que salvé me ofreció quedarme en su casa, considere al estar en su casa, que ese hombre era mi primer amo, pasaron muchas cosas, yo le ayudé, él me ayudó, lo pasamos bien hasta que un día mi amo desapareció, no lo pude encontrar, solo desapareció sin decir nada.

Al siguiente día estaba pescando cuando algo empezó a tirar de la caña. No sabía qué era pero tiraba muy fuerte, lo suficiente como para tirarme al río y llegar a ahogarme. Entonces vi la silueta de una mujer, su nombre era Marianna, era una mujer joven de unos 23 años. Ella me sacó del agua y me rescató. Ella me preguntó si estaba bien, yo le dije que sí. Me pregunto si tenía casa, me lo pregunto por la ropa en la que vestía, yo le respondí que no, que se incendió y que no supe la razón. Ella me invitó a quedarme en su casa, era igual que con mi primer amo, yo consideré que ella era mi segunda ama, me cuidó, me dio ropa, me trató muy bien.

Yo la ayudaba en todo en lo que podía, iba a pescar con ella. Un fatídico día Marianna cayó enferma. Yo gasté algo de mi oro en medicina para ella, pero aun

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faltaba algo, una hierba medicinal que está en medio del bosque. Salí al amanecer en busca de la hierba, crecía en zonas de poco viento y mucho. Pasaron las horas hasta el mediodía, por fin la encontré. Volví para hacer la medicina, pero era demasiado tarde: murió antes de que pudiera darle la medicina.

Ya en la calle, lamentando la pérdida de Marianna, vi a un pobre anciano siendo atacado por unos ladrones, fui a defender a ese pobre anciano y también me lo agradeció. Esto empezó a ponerse repetitivo, me ofreció vivir con él. El me enseñó muchas cosas, yo le acompañaba a comprar, le protegía de la mala gente que hay por la calle y talando para darle algo al anciano. Vivir con él era relajante. Con el estuve durante un año entero. Nos intentaron atacar algunos ladrones pero me las apañé, el anciano era ya muy mayor y un día de estos mientras dormíamos, él estiró la pata, se sumió en un sueño eterno.

Entonces apareció una luz y vi de nuevo a Dios que me dijo que esas personas que serví eran cada uno un ángel y que me estaba poniendo a prueba. Me dijo que había sido una buena persona, me perdonó todos mis pecados y me dijo que tendría una buena vida.

En fin, que ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

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El lazarillo según Angel Moreno Marin Pues vuestra merced me ruega que le escriba y relate mi caso por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona que se llama Alfred Pennyworth.

Mi nacimiento fue en 1970 un 7 de febrero en Nuevo México. Mi padre nos abandonó ya que mi madre tiene cáncer de pulmón y él no podía hacer nada.

Cuando cumplí los 12 años decidí ser mayordomo para pagarle el medicamento a mi madre, por eso decidí irme a EEUU para que me pagasen justamente.

A lo largo de mi vida en EEUU he servido a señores como: Gustav Schwarzenegger, el mismísimo padre de Arnold Schwarzenegger. estuve 8 años con el. Cuando me pagaba, la mitad era para la medicación y alimentos de mi madre.

Otro señor al que he servido es Harrison Ford, era muy buena gente, pero me hacía trabajar mucho. Un dia cuando me pagó decidí llamar a mi madre a mi madre pero me dijeron que 2 días antes había muerto, pero aun así no me quedé parado e intente buscar otro señor. Encontré, después de muchos meses un señor pero no un señor normal:¡era el mismísimo Batman! Es el mejor señor al que he servido a lo largo de mi vida, actualmente sigo disfrutando con sus aventuras.

En fin, ahora estoy en mi prosperidad y en la cumbre de toda buena fortuna.

Ángel Moreno Marín 3ºB

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