José Joaquín Gallardo

José Joaquín Gallardo Crónica de una vida dedicada a su profesión y a sus compañeros

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José Joaquín Gallardo Crónica de una vida dedicada a su profesión y a sus compañeros

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MarĂ­a Aristoy Remedios MĂĄlvarez

Gracias Decano

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1998-1999 11

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Pablo José Abascal Monedero

Coordinador Turno Protección Social del ICAS

Jose Joaquín es una persona de fe y creencias profundas, ajeno a las modas del momento, buen compañero y amigo, con la mano siempre tendida a tus propuestas, sugerencias e iniciativas. Él, más que nadie, busca la defensa del ciudadano y del justiciable. Nunca se lo he preguntado pero creo que es de lo que piensan que el derecho es el arte de lo bueno y de lo justo.

Es nada más y nada menos que un gran abogado, buscando incansablemente, la justicia sobre todo. Como decía Fray Domingo de Soto “…a la justicia pertenece dar a cada uno lo que es suyo; pues siendo el derecho objeto de la justicia, sucede que mire de igual modo a cada uno. Por lo cual no se ha de distinguir o entre el padre y el hijo o entre el señor y el siervo...”

Gracias de corazón compañero, por tus años y el prestigio que nos ha dado como decano, abogado y al Colegio Profesional en esta nuestra ciudad.

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Max Adam

Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Gracias Decano.

Mi Decano me enseñó el pasado siglo -cuando aún estaba yo cursando el primer curso en nuestra Escuela de Prácticas Forense- que el Derecho se ejerce hablando y dialogando antes que pleiteando y que la palabra está para llegar a acuerdos.

Entrado el milenio, mi Decano me animó a fundar el primer turno específico del ICAS dándome toda libertad y confianza para abanderar el Servicio de Asistencia y Orientación Jurídica a Inmigrantes de nuestro Colegio.

El pasado año, cuando busqué apoyo institucional en la causa de nuestros tres bomberos sevillanos acusados de salvar vidas se encargó personalmente de remover a cuantas autoridades locales, regionales y nacionales hizo falta para implicaros en la causa y ayudar a resolver satisfactoriamente el asunto con todos los informes precisos de apoyo de todas las instituciones posibles.

Tres ejemplos puntuales a toda una labor de ayuda y servicio al colegiado y al compañero.

Insuperable.

Gracias Decano.

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María Luisa Alejandre Durán

Presidenta Sala Contencioso Administrativa de Sevilla del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía

Gratitud ante todo en nombre de la Sala de lo Contencioso- Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, por este largo período que has dedicado en cuerpo y alma al Decanato, prestando un gran servicio a la Administración de Justicia.

Gratitud por estar siempre ahí, cuando has sido llamado o invitado a cualquier acto, premio, jubilación, de todos y cada uno de los que forman parte de este noble servicio público mostrando tu cariño en nombre del Colegio de Abogados de Sevilla.

Te echaremos de menos, pero nos alegramos contigo en esta nueva etapa que inicias, contento por el deber cumplido, en la que tendrás más tiempo para dedicar a tu familia, profesión y aficiones y sobre todo par seguir creciendo como persona, aunque el Gran ya lo tienes por delante.

Gracias otra vez José Joaquín y un fuerte abrazo.

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Paz Almeida Lorences

Ex Tesorera de la Junta de Gobierno del ICAS

Es difícil traer a la luz algo nuevo o desconocido de la semblanza de nuestro Decano porque, debido al tiempo que lo hemos tenido al frente de nuestro Ilustre Colegio, creo que lo conocemos bien en esa brillante faceta, a la que ha dedicado su juventud, pero quizás no se conozca a José Joaquín.

Recuerdo que fue en la primavera de 1994, sobre la una de la tarde, en la terraza del hotel “La Casa de los Mercaderes”, tomándose él un café solo y yo una copa de Rioja, cuando me propuso acompañarle en la aventura de formar parte de su candidatura. Mi primera reacción fue preguntarle: ¿no crees que somos demasiado jóvenes? Piénsatelo, me dijo él. A la vuelta de las vacaciones le dije que sí, a pesar del difícil tiempo por el que transitaba mi vida por aquel entonces, pero confiaba plenamente en él. Fue el día 1 de diciembre de 1994, la cola para votar llegaba hasta la plaza de El Salvador, así se mantuvo la afluencia de votantes hasta que se cerraron las puertas del Colegio y todos los compañeros nos agolpamos en el patio, de forma tan prieta que recordaba a las bullas de Semana Santa.

Por fin llegó el recuento y la candidatura liderada por él se alzó con una aplastante mayoría; 1.165 votos fueron para José Joaquín; el siguiente de los candidatos a Decano, de los ocho que se presentaron, consiguió 388. Me enorgullece constatar que esta humilde Letrada que se presentaba como Tesorera fue la segunda más votada, pues el cariño de mis compañeros me otorgó 1.085 votos.

Los dieciséis años que permanecí contigo, como Tesorera de tu Junta de Gobierno, aunque hubo ocasiones duras y difíciles, pues fueron tiempos de muchas reformas y algunas vicisitudes, no los olvidaré jamás y los guardaré en mi corazón con sumo cariño y siempre con saudade.

Tengo delante la fotografía oficial de aquella primera candidatura, ¡¡qué recuerdos, que nostalgia, que jóvenes, que guapos!!. Gracias a tu maestría en la selección de aquellos y sucesivos compañeros de Junta, hoy mantengo grandes y entrañables amigos, con los que me prodigo poco por culpa de esta nuestra apasionante profesión a la que somos adictos y nos ocupa un tiempo nada saludable.

Todos conocemos a José Joaquín como Decano, pero yo quiero destacar aquí su humanidad, su capacidad de compasión. José Joaquín no sé si alguna vez te dije lo importante que fuiste para mi en el momento más difícil de mi vida, en aquel año 1995 me sentí amparada por ti y por tu familia en todo momento. Gracias, José Joaquín, amigo y Decano.

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Manuel Damián Álvarez García

Presidente de la Audiencia Provincial de Sevilla

Me enorgullece dedicar unas líneas a un hombre de bien, que hace honor a su apellido “Gallardo” y al que tengo en altísima estima.

Cuando iniciaba su andadura como Decano de la Abogacía sevillana en 1995, tuve la fortuna de comenzar a disfrutar de su inigualable categoría humana, personal y profesional. Era entonces un fumador empedernido, un cafetero recalcitrante, un devorador compulsivo de periódicos; ahora ha cambiado la nicotina y la cafeína por el móvil y sus múltiples aplicaciones, pero sigue siendo una persona comprometida y respetuosa con el valor de la Justicia, un gestor incombustible, un optimista contagioso. Sus múltiples distinciones honoríficas lo atestigüan: medalla de la Ciudad de Sevilla, Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort, Rey Gaspar en 1998, Sevillano del año en 1999.

No es bético ni sevillista: sólo currista. Siente un inmenso fervor por las tradiciones sevillanas, una increíble devoción por sus cuatro mujeres (nueve si contamos a sus nietas), y una intensa veneración por La Macarena y su Soledad de San Lorenzo.

Es humilde porque conoce sus debilidades y limitaciones, trabajador incansable, afable, cercano y generoso en el trato, sencillo y servicial. Siempre tendré presente su impagable dedicación a la Fundación Villacieros.

Muchas gracias José Joaquín, y suerte a Óscar el nuevo Decano.

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Juan José Barrios Sánchez Procurador

Eres un crack José Joaquín.

Gran persona y excelente amigo.

Siempre preocupado y ayudando todo lo que puedes.

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Cristina Borrero Gaviño

Ex Diputada de la Junta de Gobierno del ICAS

Soy una de tantos y tantos compañeros que hemos recibido el apoyo, la ayuda, la escucha, la llamada, la mano de José Joaquín, además, tuve la fortuna de formar parte de dos de sus Juntas de Gobierno, descubriendo, junto al Gran Decano a la Magnífica Persona.

Ha sido un orgullo tenerle como Decano durante este casi cuarto de siglo.

Gracias José Joaquín.

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Amalia Calderón

Coordinadora Turno contra la Violencia de Género del ICAS

A José Joaquín, mi Decano, mi agradecimiento por su cercanía, su disposición y confianza.

Pero a José Joaquín, la persona, jamás podré expresarle suficientemente mi gratitud.

Su amabilidad y atención, continuos detalles, generosidad y demostrado cariño hacia mi maestra de la vida no pueden compensarse en forma alguna.

Todo mi respeto y reconocimiento para una persona profundamente humana.

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Juan Calle Martín

Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Pocas palabras bastan para describir a tan gran persona, y elegiría tres: COMPAÑERO. Dicha de esta manera, con mayúsculas, orgulloso de serlo y de predicar con el ejemplo, nunca ha mirado a otro compañero por encima del hombro, ni ha dejado de estar a su servicio, siempre ha representado el ejemplo que todo abogado y persona debe estar orgulloso de ser, espejo en el que todo letrado y persona de bien querría verse reflejado.

MAESTRO. No solo en el saber jurídico, sino en el ejercer como persona, mediador, amigo en el que confiar, padre al que pedir consejo, y sobre todo apoyo y sostén de todo aquel que pudiera necesitarle, siempre con una sonrisa amable en el rostro. nunca olvidare, desde el día de la jura como letrado oír el consejo (mandamiento) que en varias ocasiones me repitió: “Tu deber es luchar por el derecho; pero el día en que encuentres en conflicto el derecho con la justicia, lucha por la justicia.”

PERSONA. Pocos conocerán todas las facetas de nuestro decano, porque siempre lo será aunque otro compañero este en el cargo. Siempre ha llevado a efecto el evangelio de San Mateo, capítulo 6, versículo 3: “No dejes que tu mano izquierda sepa lo que hace la derecha”.

La generosidad es íntima, forma parte de la esencia de cada persona, y no debe ser aireada, y por ello, es incontable el numero de compañeros que pueden haber recibido su ayuda desinteresada y sincera, las llamadas a altas horas previo mensaje: ”¿estas despierto, puedo llamarte?” siempre venían seguidas de una llamada que terminaba con un rotundo “Tenemos que solucionarlo”, o un “Hay que ayudarle”, con el que ya sin remedio te enroló en la misión, haciéndola tuya también.

Esa vocación de servicio, ese darse a los demás encuentra detalles tan íntimos y de agradecer que solo él y el Señor de San Lorenzo pueden conocer, poco más puedo decir de esta gran PERSONA, de este inconmensurable MAESTRO y amigo, y por encima de todo de este COMPAÑERO con mayúsculas.

Gracias por tanto.

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Javier Alfonso Cano Bravo

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Me viene a la memoria el momento vivido con mi querido amigo y Decano José Joaquín Gallardo: Año 1994. No recuerdo el mes ni el día. Era de noche y el rítmico trac-trac de nuestro tren invitaba al recogimiento. A mi lado, en silencio, José Joaquín Gallardo, sumergido en sus pensamientos.

Viajábamos a Santander para participar en las I Jornadas de Juntas de Gobierno de Colegios de Abogados, preparatorias del VI Congreso de la Abogacía, celebrado en La Coruña en 1995. Yo acompañaba a nuestro Decano, José Ángel García Fernández, en mi calidad de Diputado 2º de su Junta de Gobierno y José Joaquín Gallardo en calidad de Secretario de la misma Junta.

En cierto momento de la noche, José Joaquín rompió su silencio y, volviéndose hacia mí, sentenció: “amigo Alfonso, antes de volver a Sevilla tengo que tomar una decisión definitiva: si me presento o no a las elecciones como Decano de nuestro Colegio”.

Nunca olvidaré esa confidencia. Con ella, mi querido José Joaquín me transmitió su aprecio y amistad, haciéndome partícipe de sus más íntimos proyectos.

Desde aquella fecha he recibido otras numerosas muestras del cariño de mi Decano y, por mi parte, me he esforzado en no defraudar nunca esa amistad y corresponderla hasta donde me ha sido posible.

Y así será hasta que nuestras togas cambien de color.

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Ignacio Cañal de León

Ex Secretario de la Junta de Gobierno del ICAS

Creo José Joaquín, que una de las experiencias más ricas de mi vida, es la que compartí contigo en el Colegio. Y te la debo a ti, pues fuiste tú quien me eligió y me comprometió.

Tú en el Decanato y yo desde la Secretaría, junto con los demás miembros de esa Junta de Gobierno que diseñamos y la magnífica plantilla de empleados, hicimos una buena tarea: defensa de la dignidad de la Abogacía ante Juzgados y Tribunales; reorganización del Decanato y la Secretaría; modernización de la Tesorería y las Vocalías; constitución de las Comisiones de Extranjería, Penitenciario, de Familia, Disciplinaria, de Honorarios....

Una obra a la que dedicamos nuestro tiempo, energía e ilusiones, con buenos momentos (Fiestas Patronales, Congresos de La Coruña y Sevilla; reuniones de Juntas de Gobierno en Santiago, Gerona y Valencia...) y otros bien tristes: la noche negra y lluviosa de los asesinatos de Alberto y Ascen, algún incidente grave en Juzgados, manifestación ante nuestra sede colegial.... Pero todo bajo tu impulso, tu dedicación generosa y tu plena disponibilidad. ¡Gracias, José Joaquín!, mi Decano y el de todos durante estos años, el mandato más largo de nuestra vida colegial.

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Miguel Carmona Ruano

Vocal del Consejo General del Poder Judicial

Querido José Joaquín: Quienes organizan esta pequeña sorpresa han elegido como título general el de “Gracias, José Joaquín”; no podían haber elegido otro mejor.

Hemos coincidido en innumerables ocasiones. Mientras fui presidente de la Audiencia Provincial compartimos un sinfín de tareas, desde proyectos de reformas a juras de nuevos colegiados, actos judiciales y colegiales, fiestas y eventos ciudadanos, patronatos de la Fundación Villacieros…, sin contar con todos los encuentros personales que, antes y después, hemos tenido en Sevilla, en Sanlúcar y en tantos otros sitios, y en la ayuda desinteresada que tú y yo sabemos que me has prestado cuando me ha hecho falta.

Tras todos estos encuentros tendría que mencionar muchos aspectos de tu persona.

Pero déjame que resalte uno: tu saber estar. Siempre has tenido la actitud y la palabra adecuadas, has respetado a los demás, has sabido ayudar sin proclamarlo, y siempre ha sido fácil el trabajo y la relación contigo.

Por eso no puedo sino volver al inicio: ¡Gracias, José Joaquín!, por todos estos años en que he tenido la fortuna de conocerte, de apreciarte y de aprender de ti. Y estoy seguro de que esta fortuna continuará. Un fuerte abrazo.

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Juan Espada Cejas Alcalde de Sevilla

JosĂŠ JoaquĂ­n Gallardo, excelente Decano y mejor persona, infatigable defensor de los abogados sevillanos a los que como instituciĂłn supo representar de manera ejemplar y con una sensibilidad propia de quienes disfrutan con lo que hacen.

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Mariló Caro Pastor Secretaria del Decanato

La primera vez que oí hablar de José Joaquín fue por un comentario que sobre él me hizo un magistrado conocido suyo: “Que dice mi mujer que no quieres ejercer y que a ver si te puedo orientar un poco. Creo que podrías acercarte al Colegio de Abogados y preguntar por el secretario José Joaquín Gallardo, que es amigo mío y es muy buena persona y seguro que te atiende”.

Y no se equivocó: sin conocerme de nada y sin tener referencia alguna sobre mí, aquel entonces muchacho de treinta y pico años me escuchó e incluso me presentó al entonces decano Don José Ángel García Fernández. Ese breve encuentro cambiaría por completo mi vida tiempo después.

Sin duda alguna aquel día la suerte estuvo de mi lado. Comenzaría bastantes meses después un largo camino de 26 años al lado de un hombre esencialmente bueno que tanto me ha ayudado a crecer en lo profesional y en lo personal, aprendiendo de su trato cercano con todo el mundo, de su humanidad, de su gran capacidad para resolver problemas, de su enorme trabajo y esfuerzo diarios y, sobre todo, de su amor por la profesión y por el Colegio de Abogados.

Cuando en la última celebración de nuestra Patrona dijo públicamente que yo era la persona que más cerca había estado de él durante todos estos años y que había sido su mano derecha, no había mejores halagos para mí, porque eso era justamente lo que yo había pretendido todo ese tiempo: hacer cuanto estaba en mi mano para que siempre estuviera bien atendido, intentando que todo estuviera controlado en el decanato con mucha motivación y entusiasmo, porque he sido y soy muy feliz en mi puesto de trabajo.

Tengo mucho que agradecerte, José Joaquín: tus enseñanzas, tu continuo reconocimiento, tu amistad, tu preocupación por la familia, el cariño inmenso que nos das a todos en esos dolorosos momentos en los que no se encuentra consuelo, pero en los que no nos falta tu abrazo más sincero.

Que afortunada me siento de haber trabajado con alguien tan difícil de olvidar.

Estarás siempre en mi corazón y en el de mi familia.

Ahora solo desearte todo lo mejor para esta nueva etapa de tu vida: que disfrutes mucho de Reyes, de tus niñas, de tus nietas…de tus mujeres, como siempre dices. Os quiero mucho a todos.

Un beso enorme.

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Pepe Castilla

Abogado y Mediador

Querido José Joaquín, quería escribirte estas breves líneas para poner en valor lo vivido juntos desde que me colegié en 1996. En tantos años, he podido disfrutar de tu cercanía, tu interés y tu atención inmediata a cualquier llamada de mi parte.

Te agradezco de corazón tu colaboración en estos años, especialmente porque en algunos momentos has tenido que confiar en mí y en mi criterio, concediéndome alto grado de autonomía en algunos casos por tratarse cuestiones ajenas a tu ámbito de conocimiento.

Así hemos podido impulsar juntos proyectos colegiales importantes como, por ejemplo, la puesta en marcha del Servicio de Orientación y Asistencia Jurídica Penitenciaria de Sevilla en 2001 (que siempre ha sido un referente de calidad y rigor en Andalucía y España); o el desarrollo en sede colegial de un programa de Justicia Restaurativa con personas condenadas, pionero en todo el país y que ya se empieza a extender por otros puntos de España.

Espero que disfrutes ahora de la nueva etapa que se abre para tí a nivel profesional y personal.

Un fuerte abrazo

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Óscar Cisneros Marco Decano del ICAS

Hace veinticuatro años José Joaquín me invitó a formar parte de la candidatura para la Junta de Gobierno que el lideraba como decano, y repetidamente me lo fue pidiendo en sucesivas elecciones hasta completar este periplo, en el que deja el cargo.

No puedo estar más que agradecido por la oportunidad que me dio de conocer en profundidad la institución colegial y de enseñarme la función y los fines del órgano directivo de nuestra Corporación, que no es otro que la constante y decidida voluntad de servicio al compañero.

Así, desde distintas responsabilidades, he procurado hacerlo durante todo este tiempo, para lo que me dio libertad y confianza, y he querido corresponderle, aunque no sé si lo habré conseguido, con lealtad y trabajo.

Si tengo al menos la certeza de que apostó por mí para que fuera un digno sucesor suyo, de lo que no puedo más que sentirme enormemente orgulloso.

Gracias José Joaquín, porque aun rayando en la subjetividad, no tengo más remedio que afirmar que, como decano, va a ser muy difícil superarte.

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Francisco Ciudad Martín

Gerente del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla

Pocas cosas se pueden decir de ti que no se hayan dicho ya, José Joaquín, pero en mi condición, primero de amigo tuyo, y en segundo lugar como Oficial Mayor del ICAS (como a ti te gusta “anunciarme”) quiero poner de manifiesto que han sido 32 entrañables años (8 de Secretario y 24 de Decano del ICAS) durante los cuales, además de haberte ganado la amistad y el reconocimiento de todo el colectivo, has ido poco a poco, desde que tomaste posesión del decanato, subiendo el nivel o listón profesional cada día un poco más hasta que, en la actualidad, has conseguido que este Colegio de Abogados se encuentre en una de las primeras posiciones de los principales estamentos sevillanos, y todo ello ha sido gracias a tu íntegra dedicación y entrega absoluta a esta querida causa, el colectivo de tus abogados…, los tuyos, como tú dices, como muchas veces has predicado cuando defendías los intereses de todos y cada uno de ellos ante cualquier mesa de trabajo y ante cualquier organismo o instancia, siempre los tuyos... que son los que verdaderamente te importan y por los que siempre has luchado.

Con tu cese como Decano, quedamos de alguna manera desprovisto del que ha venido siendo durante tantos años nuestro querido “pater familias” profesional (dicho sea sin ánimo de ofensa y con el debido respeto al nuevo Decano y su junta), protector de todos y siempre dispuesto a ayudar a cualquier compañero o persona que así te lo solicitara, incluso sin que te hiciesen esa ”solicitud formal”, sólo con enterarte que alguien precisaba de tu ayuda, ahí estabas, y si no podías por tus propios medios, pedías esa ayuda a un tercero para darle una solución a quien lo necesitara. Tu fin siempre ha sido la plena dedicación y ayuda incondicional a los demás de manera altruista. Eso se llama “calidad humana”, la que tú posees. Sólo escribo lo que he visto y vivido en primera persona durante tantos años.

Las fotografías que contiene este libro no son más que una pequeña reseña gráfica de la multitud de actos en los que has participado activamente, y otros muchos que no aparecen que no fueron captados por el “objetivo” de la cámara porque así lo recomendaba la privacidad del acto. Es imposible desglosar en esta breve síntesis tu valioso trabajo diario, porque ello conllevaría escribir varios volúmenes de muchas páginas cada uno. Este libro sólo ha sido una breve “pincelada” de tu entrega abnegada al frente del decanato y como máximo representante de este colectivo que tanto tenemos que agradecerte.

Muchas gracias por todo, que ha sido muchísimo.

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Manuel Clavero Arévalo Abogado

Conocí a Don José Joaquín Gallardo cuando era estudiante y ya se percibía en él extraordinarias cualidades, no solo como abogado, sino como persona capaz de dirigir un Colegio tan antiguo y prestigioso como el nuestro.

Nunca olvidaré que bajo su Decanato me fue concedida la primera Medalla de Honor del Colegio.

Tampoco olvidaré que la segunda Medalla fue concedida por nuestro Colegio a una persona extraordinaria como D. Manuel Olivencia al que hace un año arrebató la muerte.

Quiero también recordar la deferencia que conmigo tuvo el Decano cuando me nombró miembro de un complicado arbitraje, que formamos parte bajo su presidencia D. Óscar Cisneros y yo.

D. José Joaquín creo que ha batido el récord de permanencia en el Decanato del Colegio, y esa permanencia siempre por elección, la desempeñó con acierto que queda evidenciado por los muchos años que ocupó el Decanato.

El Decanato del Colegio de Abogados no es fácil de desempeñar y los largos años en los que D. José Joaquín estuvo al frente, fue el reconocimiento de nuestros compañeros de que era el Decano ideal para desempeñarlo.

Le ha sustituido D. Oscar Cisneros que también formó parte del arbitraje al que antes me referí.

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Julio Coca Blanes

Ex Secretario de la Junta de Gobierno del ICAS

José Joaquín Gallardo, abogado y decano eterno de nuestro Colegio, es ante todo un amigo pero también una persona cabal, de gran sensatez, que representa con rigor los valores fundamentales de la abogacía sevillana.

De temple sereno y valiente, como el genio de la tauromaquia —y currista— que es. Pueden nombrarse muchas virtudes de José Joaquín pero, por encima de todas, quiero destacar su compromiso.

Comprometido con sus compañeros, con su Colegio, con su familia y con la suerte de los demás.

Porque, en estas fechas de aniversario machadiano, acierto si lo defino como un hombre bueno, en el mejor sentido de la palabra, que siempre ha sido y será un referente humano y profesional, alguien de quien aprender cada día.

Personalmente, solo puedo tener palabras de agradecimiento por su apoyo firme y su cariño.

Sevilla y su barrio de San Lorenzo pueden sentirse orgullosos de tener un hijo como él.

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Carmen Cuadra Sola

Secretaría Técnica. Consejo Andaluz de Colegios de Abogados

Miro este pequeño trozo de papel y pienso que es imposible expresar en las pocas palabras que aquí caben lo que para mi ha significado y significará siempre José Joaquín Gallardo.

Cientos, miles, millones de imágenes, momentos, sensaciones y sentimientos se agolpan en mi mente y no se como puedo escoger algunas y dejar tantas otras ahí sin hacerles justicia… Muy en el fondo de mi mente me veo muy joven, casi una niña, cuando iba a conocer al Decano del Colegio de Abogados de Sevilla. ¡De Sevilla! Una mezcla de respeto y temor...

De ninguna forma podía imaginar entonces que detrás de aquel enorme Decano se escondía una de las personas que más me han enseñado, que más me han dado y que más cerca he sentido.

Sigo viéndome, cercana aquella primera época, sentada en un escalón de un monumento cualquiera, de cualquier ciudad Andaluza, en un receso de cualquier reunión del Consejo, tratando de absorber el conocimiento y la experiencia de aquel Decano, sentado en ese rincón, hilvanando en unos pocos minutos una nota de prensa perfecta, las palabras justas, la síntesis exacta... Fue un honor enorme y una escuela impagable trabajar contigo y tenerte a mi lado como Presidente del Consejo en aquellos días y siempre.

Porque... sigo buceando en mi mente y te veo al otro lado del teléfono, tantas tardes, tantas noches de largas conversaciones en las que nunca parecías tener prisa, aunque seguro había mil urgencias. Como si tu tiempo fuera inagotable, como si fuera para cada uno de nosotros más que tuyo.

Y entonces, sigo mirando y veo un millón de rincones de Sevilla a tu lado, al lado de toda tu familia, de tu madre, de Reyes, de tus hijas, de tus hermanos... y se me inundan los ojos de lagrimas porque siento en mi corazón vivamente cada imagen, cada sonido, cada aroma, cada palabra, cada silencio... El caminar acelerado para alcanzar cualquier esquina, el paso apresurado en busca de la casa de tu madre, teniendo allí conmigo a la mía, el abrirse paso entre el gentío para alcanzar la casa de tu hermano y que allí, a tu lado, con alguna de tus nietas encima de una sillita y con los ojos como lunas, me rozara la punta de los dedos el Señor del Gran Poder.

Y entonces ya no buceo en mi mente sino en mi corazón porque es ahí donde están grabadas a fuego las experiencias más increíbles que me has regalado y todo lo que me has dado a lo largo de estos más de veinte años. Has sido un maestro excepcional, trabajar a tu lado ha sido un privilegio pero, por encima de todo, eres una de las personas más generosas y cálidas que he conocido y uno de los mejores amigos que he tenido.

Te quiero mucho José Joaquín, a ti, a Reyes y a toda tu familia, porque me la has dado como mía y así la siento en mi corazón ayer, hoy y siempre.

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Adolfo Cuéllar Portero

Vicedecano del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla

Como en la vida todo es cuestión de perspectivas quiero traer a estas notas tres recuerdos: »»El día que José Joaquín Gallardo fue elegido por primera vez Decano, después del recuento de votos a la primera persona que se encontró en el patio del Colegio de Abogados fue conmigo; nos fundimos en un fuerte abrazo, al que se unió el ex-Decano y querido Pepín Moreno Suárez, muy emocionado porque había perdido las elecciones su buen amigo Eugenio Alés. »»A raíz de conocerse que uno de los objetivos del terrorismo etarra en Sevilla era José Joaquín, como Decano nos convocó a la Junta de Gobierno y nos explicó la situación. En esa reunión pude comprobar con nitidez lo que era de verdad el miedo físico, en estado puro, ante un anuncio tan terrible.. Al poco todo se serenó. »»Al fallecimiento de mi padre, Adolfo Cuéllar Contreras, que cumplía en esas fechas cincuenta años de ejercicio profesional, el comportamiento de José Joaquín como compañero, amigo y Decano fue extraordinario. Inolvidable.

Me consta que son muchísimos los compañeros que en circunstancias similares, pueden decir lo mismo. Esa humanidad y compañerismo, unido a su buen hacer en el ámbito de sus competencias no se olvidarán.

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José Antonio del Barco Aumesquet Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Querido José Joaquín, si bien a través de este medio, otra muestra más de agradecimiento, justamente reiterada como reconocimiento múltiple a una vida generosísima, gratuita y ejemplarmente dedicada a los demás, en general y a la abogacía en particular.

Siempre agradecido. Un fuerte abrazo.

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Lorenzo del Río Fernández

Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía

La huella dejada por José Joaquín Gallardo tras tantos años como decano del Colegio de Abogados será difícil de olvidar.

Su total entrega y dedicación al Colegio de Abogados de Sevilla es un ejemplo del trabajo bien hecho.

Conversador, afable y mediador, José Joaquín ha vivido la gran transformación de su profesión y de la Justicia, de la que ha sido un firme defensor y buen colaborador.

Es un honor participar en la despedida de este profesional que ha sabido ganarse el afecto de sus compañeros durante 24 años y trabajar por el buen hacer de la abogacía sevillana y de la justicia en general.

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Deborah Delmás Lirola Tesorera del ICAS

Qué difícil expresarte todo lo que me gustaría decirte.

Empezaré a hablar de ti como profesional, como compañero. Eres una gran ejemplo de admiración para mi y para todos los que te conocen.

Tienes la habilidad de resolver cualquier asunto que se te pregunte y aunque en algún momento se te pueda escapar algún dato, buscas soluciones siempre ajustadas y con buen criterio. Eres de admirar por tu gran trayectoria como abogado desde tus inicios como ejerciente.

Como decano has sido un gran ejemplo, no solo para este Colegio de Sevilla, sino también a nivel nacional. Dejas una gran huella por donde vas. Siempre se ha hablado de tu acercamiento hacia el colegiado tanto en los aspectos profesionales como en los personales. De hecho nunca has faltado a ningún acto colegial, y lo que es más difícil has estado con el compañero que te necesitaba.

Como persona y amigo, quiero darte las gracias porque eres alguien muy especial que siempre has estado a mi lado. Me has dado mucho y significas para mi una gran apoyo. Nos hemos reído mucho, pero también hemos llorado. Y a pesar de todo, incluso en los momentos malos, he estado tranquila contigo.

Darte las gracias por todo, lo que he aprendido a tu lado y en esos paseos buscando a nuestra Esperanza Macarena y el Gran Poder. Nos enterábamos de alguien que lo estaba pasando mal, nos llamábamos y allí nos íbamos a rezar y darles las gracias.

Gracias por tu compañía, apoyo, comprensión y sobre todo la paz que me infundes, sabiendo que siempre, estás ahí. ¡Qué arte tienes JJ en todos los aspectos!

Aunque no sé si quedaré bien al decir esto.,. tendrías que ser 5J porque eres de las personas más buenas que he conocido en mi vida.

Termino diciendo gracias amigo, gracias a tu familia que la considero como mía, y como diría mi padre “tes quiero JJ”. ..

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María Luisa Díaz Quintero

Coordinadora del Servicio de Orientación Asistencia Jurídica Penitenciaria del ICAS

Mis inicios en esta apasionante profesión siempre irán unidos a tu debut como Decano, bendita coincidencia; a partir de ahí... ¡toda una vida¡ Yo me sentía pequeñita en este mundo tan desconocido... pero ahí estabas tú, siempre tan cercano, sencillo y dispuesto, al otro lado del teléfono o tras las puertas de tu despacho colegial y con las palabras adecuadas para cada momento, buenos y no tan buenos.

Poco a poco se fue labrando una fantástica relación profesional que dio paso a la familiaridad y la amistad de la que hoy podemos presumir. No sé como haces para seguir recordando “el vasito de leche con miel” y tantas anécdotas que hemos ido acumulando durante “estos pocos años”.

Y es que lo tuyo, querido amigo, es un “Don” especial que pocos poseen. Y yo, he tenido la gran suerte de disfrutarlo.

Gracias por tu confianza, por tu apoyo, por estar siempre, por enseñarme tanto. ¡¡¡Ah y no olvides que te espero en mis 25 años colegiales... Será un placer compartirlos contigo, mi querido amigo José Joaquín!!!

Fdo. Marisa

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Amparo Díaz Ramos

Coordinadora del Turno contra la Trata y otras formas de explotación del ICAS

Querido José Joaquín, en este largo tiempo en el que hemos compartido proyectos y retos relacionados con la igualdad entre hombres y mujeres y la violencia de género, he aprendido muchas cosas de ti y no es fácil resumirlas en pocas palabras.

Nadie como tú para integrar a personas dispares y para abrir el colegio a realidades sociales.

Gracias a tu apoyo la igualdad y el feminismo, que es lo mismo, ha entrado en nuestro colegio sin hostilidad, como parte de los derechos humanos a los que nos debemos.

Gracias a tu talante hemos podido crear lazos de colaboración no solo con instituciones públicas y jurídicas, sino también con organizaciones sociales como ONGs y Corporaciones Religiosas que llevaban más que nuestro colectivo trabajando por la igualdad. Gracias a tu apertura de mente hemos podido desarrollar un aprendizaje mutuo con otras disciplinas sin las que el derecho pierde claridad, como la psicología y la sociología.

Y me consta además que en este proceso te has ido reconociendo como feminista.

Gracias por todo eso y por poder seguir contando contigo.

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María Auxiliador Duque Ordoñez

Letrada de la Administración de Justicia del Juzgado Decano de Sevilla

Querido José Joaquín: Ha sido un honor para el Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla, al que por vínculos familiares me he encontrado siempre unida, el haberte tenido tantos años como Decano del mismo.

Es difícil reunir en una persona tantas cualidades, y te lo digo con total sinceridad, tu magnífica profesionalidad en el mundo jurídico tanto nacional como sevillano no tiene lugar a dudas, tu humanidad menos aún, puedo dar fe de como te he visto preocupado por todos los colegiados sin excepción, tanto en los momentos tristes como en los alegres, tú siempre has estado ahí.

A todo ello hay que añadir tu fino humor sevillano con el que tan buenos ratos hemos pasado y el que a veces, en reuniones profesionales cuando las situaciones se volvían mas tensas y, sin nunca olvidar el carácter profesional de lo que se estaba tratando, servía para relativizar y poner sensatez y cordura en los ánimos de los que allí estábamos.

Contigo las personas que trabajamos en los Organos de la Administración de Justicia siempre hemos encontrado un gran colaborador.

Termino estas palabras deseándote que aquel que está en San Lorenzo te bendiga para que en está nueva etapa de tu vida disfrutes junto con Reyes de tu maravillosa familia.

Con todo mi cariño, un beso.

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Antonio Dorado Picón

Letrado de la Administración de Justicia. Sección Octava Audiencia Provincial de Sevilla

Querido Jose Joaquín, me piden unas líneas en este libro homenaje.

Para mi supone un sentimiento encontrado, por una parte una gran alegría que me pidan participar en él, pero por otra me pone ante la realidad de tu marcha.

Durante esta etapa has sabido prestigiar un cargo ciertamente difícil, y lo has hecho con rectitud y con unas exquisitas maneras, siempre con una sonrisa y evitando las aristas, cuestión nada fácil cuando al mismo tiempo se hace manteniendo el rumbo y sin hacer dejación de tus funciones.

En esta etapa siempre encontré en ti un amigo con el que era fácil resolver cuestiones ciertamente complicadas. Tu ayudastes decididamente a poner en marcha la modernización tecnológica de las comunicaciones en justicia.

Siempre con espíritu constructivo, para que el abogado tuviera un mejor servicio que le permitiera realizar mejor su trabajo. Hoy esa realidad tecnológica es en parte obra tuya.

Sólo el paso del tiempo nos permitirá reconocer en su exacta medida tu extraordinario trabajo.

Creo que tu paso por el Colegio ha marcado un antes y un después tanto en la gestión como en las formas. De ello se han beneficiado, no solo los abogados y toda la famila jurídica sevillana sino la sociedad en general, tú has sido un decano con proyección en la ciudad a la que nunca distes la espalda, muy al contrario estuvistes muy presente en ella, consiguiendo que la institución a la que representas este presente en el día a día de la ciudad.

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Isabel Escartin García de Ceca

Decana Ilustre Colegio de Procuradores de Sevilla

Excelentísimo Señor, Gallardo decano, querido José Joaquín, amigo y compañero hermano: Era la noche del veinte de diciembre de dos mil trece, cinco días antes de la Natividad del Señor, al momento de ser elegida decana del Colegio de Procuradores, cuando recibí una llamada de teléfono, la primera la tuya, y ya me tendías la mano, ofreciéndote para cuanto necesitara y lo que pudiera precisar de ti la procura, encarnando una auténtica vocación de servicio personal y entre colegios profesionales fraternos.

Así fue el comienzo de muchas vivencias compartidas que atesoro, regalándome ser testigo, también destinataria, de tus inolvidables virtudes, atención exquisita, justicia en el trato, inteligencia, finura, ayuda, cercanía, y todo y más coronado con tu bendito buen humor.

Más de treinta años de entrega, cual artesano, es tu legado, ante el que las personas de bien se descubren reconociéndote con admiración. Guía y faro, ejemplo bizarro, apuesta sevillanía y galante inspiración. ¡Vaya si has dejado honorable y alto el listón!

Gracias y a la recíproca, maestro, que eres, querido José Joaquín, por siempre decano, de los abogados de Chapineros y de todos los sevillanos.

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Luis Fernández Arévalo Fiscal Jefe de Sevilla

Querido José Joaquín: las relaciones de la Fiscalía de Sevilla con el Colegio de Abogados de nuestra ciudad siempre han sido fluidas y cordiales en todos los periodos que he conocido desde mi llegada de Málaga en 1988, tanto durante la jefatura de Alfredo Flores, de María José Segarra, como en el poco tiempo transcurrido desde mi regreso como fiscal jefe.

Esa cordialidad institucional ha venido muy facilitada por la tradicional cortesía forense que siempre ha presidido la actuación ante los Tribunales de Justicia de Abogados y Fiscales en esta provincia, pero sin duda se ha reforzado por el mutuo respeto institucional, del que constantemente tu has sido en todo momento generoso adalid.

Tu capacidad para generar ententes y tu continuada preocupación no solo por la defensa del Colegio de Abogados, sino también por la mejora de la propia Administración de Justicia sevillana, a la que tanto has querido, quieres y querrás, han constituido una referencia que todos debemos esforzarnos por mantener.

Hay cargos que otorgan las plumas a quien los encarna; pero en tu caso, esas plumas eres tu quien se las has dado al cargo que ostentaste todos estos años.

Muchas gracias por tu incansable labor, que todos deseamos que continúes desarrollando aunque sea desde otro plano, porque prescindir de tu experiencia es un lujo que no nos podemos permitir.

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Alfredo Flores Pérez Abogado

Apenas cien metros de Chapineros a Chicarreros y en ellos se condensan los mejores recuerdos de mi vida sevillana y subiendo la pequeña cuesta me detengo ante el Colegio de Abogados y en las paredes del patio saludo a mis maestros, porque lo fueron, me cruzo con una figura gigante, viste de negro y una toga revolotea y le envuelve, va corriendo, es José Joaquín, es el Decano sin más aditamentos, va con el tiempo justo a cualquier acontecimiento, pero siempre llega, nunca falla, la mano tendida y esa media sonrisa que le identifica.

Veinticuatro años al frente de un colectivo de profesionales de alto nivel jurídico. Con el objetivo de servir a los ciudadanos en el ejercicio libre de sus derechos y hacer visible para la Ciudad la existencia de la Institución,.

He tenido ocasión de escuchar en boca de José Joaquín el ultimo de los consejos que el jurista uruguayo Eduardo Couture ofrece a los abogados “Trata de considerar la Abogacía de tal manera que el día que tu hijo te pida consejo sobre su destino, consideres un honor para ti proponerle que sea Abogado” José Joaquín porque ama la justicia, ama su profesión y por muchos años será un buen ejemplo de lo que significa ser abogado.

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Reyes Gallardo Navarro Ex Bibliotecaria del ICAS

Cuando me preguntaban de niña que quería ser de mayor nunca tenía claro la respuesta pero con el transcurso de los años lo tengo clarísimo. ¡Yo de mayor quiero ser como tú!

Tengo la suerte de tener el mayor maestro que existe en el mundo a mi lado.

El mejor profesional, la persona con mayor capacidad para dar capotazos y que mejor aplica el sentido común en el día a día. ¿Una cualidad tuya que me gustaría llegar a conseguir? Tú sexto sentido para todo, tu claridad, tu sinceridad, tu capacidad para estar en todos los sitios con las mismas ganas sin dejar a ningún compañero de lado, tu entrega incondicional a ellos.

Porque si algo admiro de ti es el respeto que todos los tuyos te tienen y tú forma de entender la institución por la que tanto has dado. Quieres a tu colegio, y eso se palpa nada más mirarte y escucharte, quieres a tus compañeros y no te cansas de entregarte a ellos y defenderlos por encima de todo.

Solo puedo darte gracias como letrada que soy por todo lo que has hecho por este colegio, por siempre tu colegio porque siempre serás referente e historia del ICAS.

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José Ángel García de la Rosa

Delegado de la Mutualidad General de la Abogacía del ICAS

Alguien escribió que la gratitud en silencio no le sirve a nadie; no puedo estar más de acuerdo.

Tu despedida en nuestra revista colegial a mi padre, e inmediato antecesor tuyo, fue un conmovedor ejemplo de amistad, compañerismo y gratitud, que está grabado en mi memoria y siempre te agradeceré.

Cierto es, como bien decías entonces, que quienes tienen el privilegio de desempeñar el cargo de decano pasan a ser parte significativa de la historia colegial. Pero hay muchas formas de pasar a la historia, y tú, querido José Joaquín, eres historia viva y amable, historia de servicio constante a tus compañeros, a “los nuestros” como te gusta llamarnos.

Desde luego que no defraudaste a quien te enseñó a amar y respetar a nuestro querido Colegio, y a trabajar incansablemente por los abogados y por la profesión desde la “soledad” del Decanato, como él te decía.

Todavía me parece oír su voz cuando proclamaba que no hay mayor honor para un abogado que haber sido decano de su Colegio. Ese honor te corresponde, y también el reconocimiento, el respeto y el cariño de los compañeros, entre los que, honrado además con tu amistad desde hace muchos años, me encuentro.

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Carmen García Rivero Abogada

Profundo conocedor de nuestro gremio.

Nunca juzgó, siempre terció y confió.

Entendiendo las flaquezas, amigo de los detalles ante duelo o enfermedad, no envidiando la gloria ajena, te recordaré de guardia con tu inmediata disposición y evitando la beligerancia.

Como un “pater familia” siempre me respetó mostrando su cariño y confianza por encima de las históricas diferencias de política colegial entre nosotros.

Gracias por tu persistente amistad.

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Miguel Ángel Gómez Martínez Abogado - Economista

Me piden que en un breve párrafo resuma más de 50 años de amistad con José Joaquín; »»que hable de su brillantez intelectual que pude compartir con él en el Colegio de los Maristas; que mencione sus juegos periodísticos de juventud y la entrevista que le hicimos a José María Requena; »»que recuerde su abandono temprano de la ingeniería, pidiéndome los apuntes de las asignaturas de primero de Derecho, su verdadera vocación; »»que valore su entrega ilimitada (personal y profesional) a sus compañeros estableciendo un punto de inflexión en el concepto del Decanato; »»que dimensione su capacidad de trabajo a deshoras y a costa de su salud; »»que no me olvide de Reyes y sus tres hijas, con las que ha compartido absolutamente todo; »»que admire su jornada de 25 horas, único secreto de dedicación a los demás (entre los que me encuentro).

Lo siento, pero soy incapaz.

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Amanda Gónzalez de Aledo

Presidenta de la Asociación de Periodistas Judiciales de Andalucía

José Joaquín Gallardo fue durante sus 24 años como decano del Colegio de Abogados una ayuda insustituible para los periodistas de tribunales. Siempre encontraba el punto medio entre el secreto de las actuaciones y el derecho a la información.

Nos orientaba sobre el letrado que pudiera llevar un determinado asunto, nunca se negaba a hacer unas declaraciones y comprendía la urgencia del periodismo, donde casi todo se necesita “para ya mismo”. Es de las pocas personas de las que puedes tener la certeza de que, si está ocupado y no te contesta al teléfono, siempre te devuelve la llamada.

Creo que José Joaquín dio al Colegio de Abogados una relevancia social en Sevilla de la que carecen otros colegio profesionales que, a priori, podrían tener más cosas que decir sobre asuntos de actualidad.

Las buenas relaciones de José Joaquín con la prensa se transmitieron de alguna manera a todo el colectivo y los abogados sevillanos han sido grandes colaboradores de los periodistas. La gran mayoría han entendido nuestra urgencia de conseguir una sentencia a tiempo para entrar en los informativos y nos han salvado los contenidos en muchos casos secretísimos como el Arny. Creo que juntos hemos descubierto lo que es un caso mediático y un juicio paralelo.

Con independencia de Madrid (por razones obvias como sede del Tribunal Supremo, el Constitucional o la Audiencia Nacional), Sevilla ha sido la capital informativa judicial de España en los últimos 30 años y toda la historia jurídico-periodística de Sevilla es la historia de una buena colaboración.

El papel de José Joaquín ha sido decisivo para que nuestras noticias tuviesen un nivel aceptable en las difíciles condiciones en las que muchas veces trabajamos.

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Fernando Ángel Gónzalez de la Peña Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

JJ, TIENES EL CIELO GANADO En mis primeros años de ejercicio fui atendido profesionalmente por José Joaquín (en adelante JJ, como decimos en los escritos) en más de una ocasión y a plena satisfacción, atención que intentaba corresponder votando a la Candidatura que él encabezaba.

Posteriormente he mantenido un contacto más intenso, desde que hace más de doce años fui elegido, entre los abogados de mi entonces despacho Garrigues, para acompañarlo en la Junta de Gobierno. Tres han sido los mandatos.

A los pocos días comprendí que mi experiencia anterior no había sido una afortunada casualidad.

JJ era así con todo el mundo. Desde el Magistrado más prestigioso al más humilde de los justiciables.

Un día, al observarlo atendiendo una descabellada pretensión de alguien y como si fuera el mayor de los asuntos propios, comenté al compañero que tenía al lado: “Este hombre tiene el cielo ganado”.

Esa percepción fue ampliándose al verlo trabajar incansablemente y luchar por la Abogacía, en estos convulsos y globalizados tiempos que nos ha tocado vivir.

Y también porque, como señala el decálogo que recitaba en las Juras de nuevos letrados, JJ tiene fe en la LIBERTAD, sin la cual no hay Derecho, ni Justicia, ni Paz.

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María José González Rodríguez Miembro subcomision SOAJPS del ICAS

Al intentar expresar con palabras estos años compartidos, únicamente me salen palabras de gratitud, cariño y reconocimiento, y no porque todo haya sido bonito en esta larga trayectoria, para nada,…..en muchas ocasiones todo lo contrario, pero bien es cierto que nuestro Servicio de Orientación y Asistencia Jurídica Penitenciaria es hoy lo que es, en buena parte, gracias a ti.

No es nada fácil dejar hacer, respetar el trabajo de los y las demás, dar a cada cual su sitio, y tú siempre lo has hecho.

Sin conocernos, hace cerca de 20 años, confiaste en cuatro jóvenes que luchaban por ofrecer una asistencia jurídica, gratuita y especializada a las personas privadas de libertad en las cárceles de nuestra provincia. Confiaste, nos dejaste trabajar, y ya hace tiempo que el sueño se hizo realidad.

Gracias José Joaquín, gracias, por estar a nuestro lado, yo no lo voy a olvidar.

Te voy a echar mucho de menos, un abrazo muy fuerte compañero.

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Francisco José Guerrero Suárez

Magistrado Juez Decano de los Juzgados de Sevilla

Significa para mi un alto honor y responsabilidad tratar de decir, en pocas palabras, lo que comporta la figura insigne, polifacética y poliédrica de José Joaquín Gallardo. Seguramente me quedaré corto.

En todo caso, agradezco profundamente la invitación, en mi nombre y en el de los magistrados y magistradas de los Juzgados de esta Ciudad.

Como figura excelsa, tiene una intuición digna solo de mentes claras y precisas. Y pese a que ha recibido, y recibirá, multitud de distinciones, condecoraciones y reconocimientos, es cercano, afable y, sobre todo humilde; y con esa capacidad reservada a pocos, ha sabido “captar e infundir el espíritu” de Sevilla, imprimiendo a su quehacer de una facilidad pasmosa, tanto como Abogado como Decano eterno del Colegio de Abogados de Sevilla.

Su buen gobierno se debe a que, en busca de lo mejor para todos, siempre es cordial. Y desde la emoción, cultiva el amor a su Familia, la amistad, el sentido cofrade y el ejercicio de rey mago.

Es una persona que “sabe vivir”, en el sentido platónico del concepto de la búsqueda del bien.

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Pablo Gutiérrez- Alviz y Conradi Notario de Sevilla

Siempre he sentido respeto y admiración por la profesión de abogado, no solo por tradición familiar sino porque es un pilar básico en cualquier sociedad civilizada. Ángel Ossorio, antiguo Decano del Colegio de Madrid, decía que “el alma de la toga” se compone de independencia, integridad, competencia y responsabilidad. Y añadía que la rectitud de conciencia del letrado es más importante que el tesoro de sus conocimientos.

José Joaquín Gallardo ha representado “el alma de la toga” sevillana durante casi 25 años.

Ha sido un cabal Decano del Colegio de manera permanente, sufriendo muchas veces la “agravante” de la nocturnidad y siempre dando certeros consejos. Como notario de Sevilla doy fe.

Además, ha sabido ejercer el cargo con una sencilla y ejemplar elegancia. Reitero fe.

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Carmen Hermosin Bono

Ex Consejera de Justicia y Administración Pública de la Junta de Andalucía

Me han pedido una pequeña aportación para el homenaje a José Joaquín Gallardo. ¿Qué añadir a lo que puedan escribir sobre él quienes han sido sus amigos de la juventud, del Colegio, de la Universidad, sus colegas de profesión, sus compañeros en la Junta del Colegio de abogados de Sevilla durante 24 años, sus compañeros cofrades, su familia… en fin más de media Sevilla podría escribir algo bueno sobre José Joaquín.

El Presidente de la Junta de Andalucía me nombró Consejera de Gobernacion y Justicia en 1994, y más tarde Consejera de Justicia y Administracion Pública. Los temas de Gobernacion y de Administración Pública eran ya conocidos y gestionados por la Junta de Andalucía. En Justicia solo había una Dirección General por si algún día teníamos en Andalucía esas competencias. Competencias que fueron reclamadas y obtenidas del Gobierno de España, gracias a todo el equipo de aquella Administracion y sobre todo del que era Viceconsejero Jose Antonio Sainz-Pardo.

Es entonces cuando aparece el Decano del Colegio de Abogados de Sevilla, que también lo fue de Andalucía. Aparece para mí, claro. Yo no venía del mundo del derecho, sin embargo nuestra relación de trabajo fue intensa y muy fructífera para la gente. Se modificó y dignificó todo lo concerniente con la Justicia Gratuita la que se ocupa de las personas con menos medios para defenderse. Las mujeres maltratadas, los emigrantes, las gentes sin recursos económicos vieron como se mejoraba su Defensa.

También en la formación de abogados/as jóvenes, colaboramos estrechamente con los Colegios gracias a la iniciativa y al tesón de su Decanato por mejorar a estos profesionales.

Durante esos años asistía a la reeleción una y otra vez de José Joaquín como Decano del Colegio.

No había ningún truco, sencillamente quienes votaban lo hacían por el que mas confianza inspiraba.

Yo me alegraba de su reelección, porque además de un gran abogado y de un gran Decano era y es un gran amigo.

José Joaquín es andaluz y sevillano del barrio de San Lorenzo, que creo es un elemento crucial de su biografía con el que me identifico mucho. Sevillana de la Macarena comprendo su sincretismo civil-religioso, su apego a lo cercano, a las personas, a sus problemas, a la búsqueda de soluciones mas por el acuerdo que por el pleito. El es uno de los imprescindibles y lo seguirá siendo después de esta larga y fructífera etapa.

La que inicia ahora aunque él todavía no lo sepa será igual de ilusionante y la podrá disfrutar con mas tiempo y todo el cariño de su familia y sus amigos y amigas.

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Rafael Hidalgo Romero

Presidente del Colegio Oficial de Graduados Sociales de Sevilla

Querido Decano, Parece que ha pasado toda una vida defendiendo los intereses de nuestros respectivos colegios y participando en la vida judicial y civil de nuestra ciudad. Cuando llegué a la presidencia hace 13 años, tú ya llevabas años defendiendo con la pasión y la entrega que te caracterizan a los abogados de Sevilla. Ahora llega 2019, y el periplo como representantes de nuestros colectivos finaliza al unísono, dando paso a nuevos compañeros, nuevas luchas, nuevos logros y nuevos lugares comunes como los que hemos cohabitado todos estos años de trabajo.

Quiero aprovechar estas líneas para darte las gracias como Graduado Social por el respeto, el talante, el dialogo y el apoyo que siempre has brindado a nuestro Colegio cada vez que lo hemos necesitado. Pero también quiero darte las gracias como sevillano, porque durante estos años la historia de esta ciudad te debe mucho.

Hemos coincidido en muchos actos de la esfera civil, judicial, religiosa y militar y siempre regalaste horas de más a cualquier iniciativa que engrandeciera el nombre de Sevilla.

Y es que nadie lo dude, en esta ciudad decir Derecho y Justicia, es decir José Joaquín Gallardo.

Deseando volver a encontrarnos en las nuevas páginas que nos esperan, recibe un afectuoso abrazo de tu querido amigo y compañero.

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Pedro Izquierdo Martín

Presidente Sección 1ª Audiencia Provincial Sevilla

Mi relación con José Joaquín abarca tanto los iniciales contactos durante el ejercicio de las funciones respectivas de la jurisdicción, como seguidamente los más cercanos durante el desempeño por mi parte de tareas de gestión con el Consejo Andaluz de Colegios de Abogados, así como los ya más entrañables relacionados con encuentros personales de los que tengo un grato recuerdo.

En cuanto a los primeros poner de manifiesto su corrección y buen hacer en el noble ejercicio de la Abogacía. Pero ha sido en los segundos cuando pude percibir que debajo de esa permanente corrección había una gran pasión por la Institución que representaba y su esforzada confianza en mejorar la Justicia.

Respecto a los más personales destacar su atención con las inquietudes de los demás, su gran calidad humana, y la proclamación orgullosa de su condición de padre y ahora también abuelo.

Personas como José Joaquín, con su dedicación, son un ejemplo para los que asumen prestar un servicio en beneficio de todos.

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Guillermo J. Giménez Sánchez

Colegiado. Vicepresidente emérito del Tribunal Constitucional

He disfrutado desde hace años del privilegio de estar presente en diversas ocasiones en las que las palabras de José Joaquín Gallardo, con elocuencia y acierto, han puesto de relieve la significación de homenajes tributados a destacadas personalidades del mundo jurídico y a compañeros de limpia y dilatada trayectoria de ejercicio profesional.

Pero quizá de todas las intervenciones de nuestro Decano me han parecido singularmente oportunas aquellas con las cuales ha resaltado perseverantemente, en los solemnes actos de la jura de nuevos colegiados, la dimensión constitucional del derecho a la defensa y a la asistencia de letrado, uno de los derechos fundamentales que la Ley de leyes española (arts. 24.2, 53 161.1.b y 164.1) garantiza con mayor amplitud y que se consagran en la Declaración Universal de los Derechos Humanos (art.

11.1, in fine), en el Pacto Internacional de Derechos civiles y Políticos (art. 14.3.b y d), en el Convenio Europeo para la protección de los Derechos Humanos y Libertades Fundamentales (art. 6.3.c) y en la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea (art. 48.2).

Para mí, y para cuantos las hemos oído, estas palabras dan inequívoco testimonio de la trascendencia que José Joaquín atribuye al compromiso vital con la defensa de los derechos y los intereses legítimos confiados a su tutela asumido por el abogado merecedor de tal título y nos exhortan a hacerle honor.

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Federico Jiménez Ballester

Magistrado de la Audiencia Provincial de Sevilla. Ex Juez Decano

Conocí a sus hermanos antes que a José Joaquín, jugábamos al baloncesto, cuando llegué destinado a Sevilla a los Juzgados de lo Social en la calle Niebla y fuimos presentados, tuve la ocasión para, desde el primer momento, comprobar que estaba hecho de la misma buena madera que Miguel, Paco y Jesús.

Después cuando coincidimos ambos como Decanos de Abogados y Jueces, nuestra relación se hizo más estrecha y hoy tengo el privilegio de contar con su amistad.

Como máximo representante de la abogacía sevillana ha realizado una encomiable labor en favor del prestigio de la profesión, en defensa del colectivo y de reivindicación constante de la mejora de la Administración de Justicia en nuestra provincia, reivindicaciones que casi nunca tuvieron una respuesta satisfactoria, pero no por ello cejó en el empeño.

Sus relaciones con los jueces sevillanos han sido modélicas y hoy podemos afirmar sin duda que unos y otros remamos en la misma dirección, trabajando juntos para mejorar este servicio público tantas veces preterido.

Gracias Decano por todos estos años y que el Señor de San Lorenzo cuide de tí y de tu maravillosa familia.

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Carmen Limones-Bernal

Asesora Jurídica de la Cámara de Comercio de Sevilla

Si existe algo que caracteriza a José Joaquín sobre todo es su vocación de servicios a los demás, el día con sus 24 horas y el teléfono abierto a todos los que lo hemos necesitado, intentando siempre conciliar posturas, señalando el camino a quien se encontraba perdido, buscando soluciones e intentando siempre que el trabajo y las vidas de los que hemos recurrido a él sea siempre más fácil.

Nos ha transmitido que la profesión de abogados debe estar marcada por un principio fundamental cual es la ética profesional, eso que hoy día parece algo perdido en el tiempo, para José Joaquín es la linea que nos marca nuestro día a día.

Ha marcado un antes y un después en nuestro querido Colegio, primero como Secretario y a lo largo de todos estos años como Decano.

Conocerlo ha sido un privilegio, trabajar con él una bendición de Dios, GRACIAS.

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Patricia Martínez-Conradi Álamo

Ex Diputada de la Junta de Gobierno del ICAS

Espero y deseo que el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española incluya una nueva acepción, que sería la tercera, de la palabra DECANO: “José Joaquín Gallardo Rodríguez”.

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Santiago Martínez-Vares García Magistrado Tribunal Constitucional

CUANDO TE CAMBIAN LA VIDA. Constituye para mí enorme satisfacción ser requerido para participar en este libro homenaje a José Joaquín Gallardo, Decano durante veinticuatro años -entre 1995 y 2019- casi un cuarto de siglo del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla.

Su gran virtud ha sido siempre su vocación de servicio a su dignísima profesión, tanto en el Foro, en contacto permanente con el demandante de justicia ante los Tribunales, como al servicio de la Corporación que integra a quienes la solicitan. No en vano, también, fue Secretario de su Junta de Gobierno durante ocho años.

Todos en algún momento a lo largo de nuestra existencia, tomamos decisiones que deciden nuestro futuro.

Eso le ocurrió a José Joaquín, cuando Licenciado en Derecho en 1979, en el inicio del maravilloso otoño sevillano, se dirigió a mí, joven Magistrado de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Territorial, junto con otra persona, para recabar información sobre la oposición a Técnicos de Administración Civil, hoy Administradores Civiles del Estado, que yo preparaba. Lo recuerdo muy bien. Les recibí en mi domicilio, y les expliqué, como podía lograrse esa meta.

Años después, él me lo ha recordado en varias ocasiones, supe que ese día cambié su vida para bien. Renunció a ese primer deseo, y se convirtió en el gran Abogado que es, y en la gran persona que siempre ha sido.

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José Antonio Montero Fernández Magistrado del Tribunal Supremo

Querido, entrañable y admirado José Joaquín: Mis primeros recuerdos sobre ti son maristas. De niños, en nuestro Colegio, jugando en los patios, allí junto a los hermanos Gallardo… qué tiempo, cuantas ilusiones, cuantos proyectos.

Parece tiempo casi tan lejano como aquel día en que te felicité en los aledaños de la Audiencia, con el cariño y orgullo que da la complicidad de la infancia, te acababan de elegir Secretario del Colegio de Abogados. ¿Cuántos años hace? Una barbaridad.

Desde entonces sirviendo a la Abogacía, expuesto al escrutinio público, y ahora décadas después dejas tu querido Decanato, te vas airoso y vencedor de tan difícil reto, en lo más alto, reconocido por tus compañeros, por la comunidad jurídica, por la sociedad sevillana… no termina una etapa del Colegio, acaba una época irrepetible, en la que has estado no ya sólo al frente sino construyéndola día a día.

Mi reconocimiento personal es incondicional, sin fisuras y notorio.

A la par mi reconocimiento profesional. Siempre por delante tu integridad y honestidad, consciente del papel vital que la sociedad ha encargado al Abogado. Siempre comprometido con el lado justo de las cosas, al que te has sometido cualquiera que hayan sido las circunstancias. Todo, además, con amabilidad, sin estridencia, con mucha prudencia, con sincera cordialidad.

No quiero excederme del encargo, sólo añadir que para ser un buen Abogado primero has de ser un buen hombre, y tú estas entre los mejores que he conocido.

Un fuerte abrazo y a la pelea.

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José María Monzón Ristori

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Durante cinco mandatos sucesivos, he tenido la fortuna de haber sido Diputado 2º de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Sevilla, siendo Decano José Joaquín Gallardo.

José Joaquín es persona con trayectorias muy definidas. Entiendo “trayectoria” –como decía Julián Marías- “el ámbito propio de la libertad humana allí donde se despliega y realiza la vida, entre las circunstancias imprevistas y la vocación propuestas”. Al haber compartido tantos años cerca de José Joaquín he tenido ocasiones de ver de cerca algunas de sus trayectorias.

La primera, es su poderosa vocación de entrega al Colegio y a la abogacía. Ha sido total, con enorme generosidad. A servicio de todos los letrados que le han necesitado; vivido sus problemas como propios. Capaz de ir adaptando el colegio a la evolución de los tiempos, con nueva legislación, nuevos medios de comunicación. Pleno conocimiento de los problemas que se han presentado a la profesión y en vanguardia y con espíritu de servicio.

Memorables sus discursos a letrados en actos de juramento a ingreso en la profesión. Destaco “Ama a tu profesión” y “Ten fe en el derecho como instrumento para la convivencia humana; en la justicia, como destino normal del Derecho; en la Paz como sustituto bondadoso de la Justicia y, sobre todo, ten fe en la Libertad, sin la que no hay Derecho, ni Justicia, ni Paz“. Representativas de su categoría como letrado, Decano y hombre de bien.

Otra, más íntima, que he percibido de cerca, es su amor a su familia, su mujer Reyes, sus tres hijas, su madre y padre (q.s.G.g), hermanos y nietas. José Joaquín es él y su familia.

Otra personalísima: Fe en Dios, dedicación a la Iglesia Católica, a Cáritas, devoción al Señor del Gran Poder, a su hermandad con Ntra. Sra. de la Soledad de San Lorenzo y a la Inmaculada Concepción, patrona del Colegio.

Mi gratitud por haberme tenido cerca en sus sucesivas juntas de gobierno durante veinticuatro años y por la amistad y el cariño entrañable que compartimos.

Recuerdos inolvidables.

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Juan Antonio Mora Cabo

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Gracias, muchas gracias por tu dedicación, por tu entrega, por tu compañerismo...y sobre todo, gracias a tu familia, que nos dejó compartir su amistad durante estos años.

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Rosa Morán Abogada

“Se torea como se es” Así lo ha concebido José Joaquín Gallardo como Decano del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla.

Bondad. Inteligencia. Responsabilidad. Amor al prójimo. Humildad. Paciencia. Temple. Diligencia.

Así su tauromaquia.

Doy fe.

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Antonio Moreno Andrade

Magistrado. Presidente de la R.A.S. de L. y J. Of Counsel del despacho Nertis Legal.

Adiós Decano, amigo.

Lo conocí hace muchos años. Cuando tomó posesión yo servía el entrañable Cinco de Instrucción, vecinas sus dependencias a las del Colegio, modestas ambas. Nuestra vieja amistad ha transitado siempre de forma creciente como una marea. Lo conozco bien, le tengo “ley”. Y podría destacar muchas virtudes y ninguna sombra. Pero …

Su obsesión por la salvaguarda del prestigio institucional. La defensa de la vinculación del Colegio a su Patrona, la Inmaculada. La protestación de fe de los letrados el 8 de diciembre ante los evangelios en la Capilla Real. La visita de la Corporación a la Iglesia de San Antonio Abad la mañana del Jueves Santo a depositar su bastón ante María Santísima de la Concepción, a la que acompañará durante su Estación de Penitencia en la Madrugada. La titánica defensa de la necesidad de la imposible Ciudad de la Justicia sevillana. Su exitoso afán para compatibilizar la lealtad con las autoridades judiciales y su permanente disposición en la defensa de los intereses colegiales y de los colegiados …

Te echaré menos, aunque gane más horas para disfrutar nuestra limpia amistad.

Reyes gana y, con ella, tus hijas y nietas. Compartiré tu tiempo con tu sucesor, mi nuevo Decano, que sé que lo hará como hubiera querido su padre…

Que Dios te bendiga, maestro, compañero, amigo siempre…

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Carmen Moya Sanabria

Ex decana del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla

Mi muy querido José Joaquín, Hace muchos años que nos conocemos. La primera vez fue cuando una jovencísima letrada fue a hablar contigo como secretario del Colegio, de la Fundación Villacieros y de la Finca Palmaraya que llevaba mi entrañable Pedro Parias, que en paz descanse. Pero nuestra verdadera amistad, nace de una noche en el bar Baco del Duque ¿recuerdas? Donde Ignacio Cañal, otro amigo de los de verdad y tú me propusisteis en un momento muy duro de mi vida, pues acababa de morir mi queridísimo Josele, el vicedecanato.

Quedé asombrada, pero como entonces era una mujer valiente, dije sí.

Empezó entonces una relación entrañable, como persona me acogiste en tu casa. ¡Ay Reyes que tiempos!, como si de mi familia fuera. Aprendimos a querernos mucho, e igual fue en lo profesional, no podíamos pasar el uno sin el otro.

Recuerdas.. la mañana del Arny cuando fuimos a hablar con nuestro fiscal Jefe, nuestro también querido Alfredo Flores, el congreso de Sevilla de la Abogacía, y tantas tantas cosas, teníamos una Junta de Gobierno maravillosa, de las que nombro a todos y cada uno de ellos en mi pensamiento.

En fin, fueron unos años que no hay palabras. El papel se acaba. Siempre te he querido y te quiero.

En mí tendrás siempre a alguien incondicional.

Que la vida te siga dando todo lo bueno que te mereces, tú siempre amiga Carmen.

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Antonio Muñoz Ruiz Compañero

Maestro, hermano, amigo, compañero, son algunas de las palabras que se me ocurren para hablar de José Joaquín Gallardo.

Pero además, persona cabal, referente de la abogacía nacional y extraordinaria persona.

Mi afecto y gratitud, siempre, José Joaquín.

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Manuel Muruve Pérez

Ex Decano del Colegio de Procuradores de Sevilla

Los años que compartimos Decanato fueron inmensamente fructíferos, tanto a nivel profesional como personal.

Tu espíritu abierto y conciliador hizo posible una perfecta compenetración entre nuestros Colegios.

Para mí ha sido un enorme privilegio haber podido compartir contigo tantos buenos momentos en nuestra vida profesional lo que ha supuesto forjar entre nosotros una inquebrantable amistad.

Desde estas líneas te transmito mi más profundo agradecimiento.

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Juan Antonio Navas Córdoba

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Querido y respetado Decano: Con estas letras desearía saber transmitir, pretensión no sencilla, el agradecimiento, consideración y merecimientos que te corresponden, por ser de justicia.

Ante todo, ha sido para mí un placer y honor formar parte de la Junta del Colegio de Abogados que acertadamente has dirigido, siempre con alarde de virtudes como: espíritu de trabajo, abnegación y ejemplaridad que forjan la esencia de tu personalidad.

Has sido un Abogado más, entregado a tus compañeros. Tu despacho y móvil han estado a disposición, día y noche, de todo Abogado para solucionarle cualquier problema profesional y personal y, en todo caso, aportarle una certera solución o recomendación.

José Joaquín, personalmente, te estoy muy agradecido de los consejos, ayuda y cariño que me has dispensado. Gracias.

Finalmente, desearía que estas breves frases de despedida no supongan un punto final, sino que me otorgues siempre tu amistad.

Un fuerte abrazo.

Y, quedo a tus órdenes.

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Andrés Ollero Tassara

Magistrado del Tribunal Constitucional

Pocos aspectos más elocuentes a la hora de calibrar la categoría personal y humana de un profesional que el reconocimiento por parte de sus compañeros.

Una clara oportunidad para constatarlo lo ofrece el ámbito corporativo de los colegios profesionales, donde los periódicos procesos electorales ponen a prueba la confianza merecida por los sucesivos candidatos. Bastarían esos datos para desterrar la idea de que fuera mi agradecimiento personal a una generosa amistad lo que pudiera estar condicionando tal valoración. Haber superado ese contraste a lo largo de veinticuatro años en cinco mandatos consecutivos sitúa el listón a una altura realmente insólita.

Personalmente no tengo el honor de pertenecer al Ilustre Colegio de Abogados hispalense, pero bastó mi condición de sevillano, antiguo alumno de la Facultad en la Avenida del Cid, y mi vinculación institucional al ámbito de la Justicia, como portavoz parlamentario en la Comisión correspondiente del Congreso de los Diputados y, más tarde, en mi actual desempeño como Magistrado del Tribunal Constitucional, para que José Joaquín Gallardo me hiciera sentirme en mi casa en actos del Colegio que me han dejado honda huella.

Me abrió sus puertas hace ya varios lustros para presentar uno de mis libros, con la plural compañía de Antonio Enrique Pérez Luño y Amparo Rubiales, y tuvo el detalle de ofrecerme hace años participar en la entrega del bastón de mando colegial ante el palio de la Virgen de la Concepción en la mañana de un inolvidable jueves santo; ceremonia que he compartido luego reiteradamente.

Sobrado motivo para que me sienta orgulloso de poder dejar de ello constancia.

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Victoria Ortega Benito

Presidenta del Consejo General de la Abogacía Española

Elogio a un hombre bueno Un sevillano ilustre, Antonio Machado, dejó dicho aquello de que “todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar”.

Muchos pensamos que estos versos no se escribieron para José Joaquín porque siempre quedaba.

Siempre como ganador. Y quedaba siempre porque lo querían sus compañeros, que cada cuatro años ponían “Gallardo” en su papeleta.

Hasta que se fue cuando quiso y porque quiso; si no, hubiera sido decano hasta la eternidad.

Pienso que el gran mérito de José Joaquín ha sido ser, además de un gran abogado, el decano de cada letrado y letrada de Sevilla: el que felicitaba, el que recibía, el que solucionaba problemas, el que acompañaba en los duelos, el que defendía a los suyos. Siempre y a cualquier hora. Su famoso “hola, ¿eres compañero?” al coger el teléfono lo resume bien. Pero con todo, si algo le define es su generosidad. La última vez que tuve oportunidad de comprobarlo fue en el homenaje a otro gran decano, como es Juan José Domínguez.

La calle de Chapineros queda huérfana de un compañero que siempre fue respetuoso, firme, cercano y humano.

Un gran abogado, un excelente decano, un leal consejero de la Abogacía, pero, sobre todo, una gran persona, el mejor amigo.

Un hombre, en el mejor sentido de la palabra, bueno.

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Felisa Panadero

Secretaria Coordinadora Provincial de Sevilla

Querido José Joaquín, quiero aportar mi granito de arena a este homenaje que todos queremos hacerte, por tu excelente gestión como Decano del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla.

El permanecer durante tanto tiempo al frente de tan importante labor, no es casualidad, ello sin duda es debido a tu talante y talento, a tu saber estar, tu carácter conciliador, dialogante, sobre todo a tu exquisita educación.

Para mi, como Secretaria Coordinadora, has sido en todo momento un colaborador necesario e incondicional, siempre ayudando al servicio de la administración de justicia, con responsabilidad y lealtad.

Estimado José Joaquín, has dejado muy alto el listón, estoy segura que tus compañeros se habrán sentido muy bien representados en todos los ámbitos sociales a los que tu siempre has asistido. Te agradezco de corazón tu trato, tu compresión, tu cariño, y tu disponibilidad, estando ahí siempre que te he requerido para cualquier cuestión o problema que haya surgido en mi trabajo diario.

Eres un magnifico profesional, y algo más importante aún, una estupenda persona, muchas gracias.

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Alejandra Pantoja Rivero

Ex Diputada 13º de la Junta de Gobierno del ICAS

Querido José Joaquín hoy quiero dedicarte estas palabras, aún a sabiendas de que nunca podrán reflejar cuánto has significado para este Colegio.

Siempre tienes las palabras oportunas para cada ocasión, recuerdo el discurso que pronunciaste el día de la celebración de mi jura, salí del acto orgullosa de ser abogada, orgullosa de pertenecer a este grandioso Colegio de Abogados.

Poco tiempo después, contactaste conmigo para ofrecerme incorporarme a la candidatura para formar parte de la Junta de gobierno. En este tiempo he podido conocerte y ver la gran persona que eres, la dedicación a la profesión, al colegio y a todos sus integrantes, la ilusión y entrega que pones en cada proyecto.

Muchas gracias por haberme dejado compartir todos los momentos vividos en estos últimos años, que me han hecho crecer como persona y como abogada y conocer de forma tan cercana al mejor Decano que ha tenido este Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla.

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Teresa Pavón Rodríguez Abogada

Lo sé porque lo he visto, porque lo he oido, porque lo he vivido.

Desde el otro lado de la mesa de tu despacho he visto la “ingeniería” de coger varios teléfonos a la vez, atención amable y personal solucionando de forma asombrosamente eficaz los problemas e inquietudes que te planteaban no sólo nuestros compañeros, si no también sus familiares, amigos y ciudadanos en general.

Tu labor como Decano no cesaba nunca y era prioritaria. Entretanto se intercalaba tu trabajo como Abogado y parecía que le faltaban horas al día, por eso las tardes se confundían con las noches.

Recuerdo los cafés casi a la hora de la cena...

Te admiro por ese espíritu de servicio y entrega a los demás y por tu sabiduría profunda en todas las ramas jurídicas: lecciones de Derecho, lecciones de vida.

Me he impregnado de todo ello y ahora humildemente lo llevo conmigo en mi día a día.

Gracias.

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Manuel Pérez Cuajares

Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Gracias José Joaquín. Me da pudor exponer públicamente lo ya te he manifestado en la intimidad, pero no quiero dejar de hacerlo ya que me brindan la oportunidad.

Sabes que te estaré eternamente agradecido por acordarte de mi aquel 2006, -en un momento personal difícil- , y enseñarme, como tú solo sabes, lo que es y debe ser un Colegio de Abogados y una Junta de Gobierno, que únicamente tiene sentido - que Master nos has impartido- desde la vocación de servicio al compañero y la defensa a ultranza de nuestra profesión.

Un abrazo enorme DECANO.

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Mariano Pérez de Ayala Conradi

Presidente Caritas Diocesana Regional de Andalucia

Las sociedades maduras son aquellas en que sus mejores ciudadanos se comprometen en los distintos campos de la vida social para poner su granito de arena en beneficio del bien común.

José Joaquín Gallardo es un ejemplo significativo de ello: alguien que con su dedicación, generosidad y buen hacer no solo ha contribuido a trabajar en pro del colectivo de los abogados sevillanos, sino que su labor ha trascendido la de su colegio profesional para ser una persona clave en el progreso de la ciudad de Sevilla.

En los años en que tuve responsabilidad política en nuestra ciudad y ahora desde mi compromiso en una entidad como Caritas, siempre y en toda ocasión fue José Joaquín alguien dispuesto a colaborar con cuantas iniciativas se le planteaban en beneficio de la sociedad.

Los abogados sevillanos lo echarán de menos, la ciudad también.

Pero estoy seguro que en esta nueva etapa nunca dejaremos de contar con su compromiso y generosidad.

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María Pérez Galván

Ex Diputada de la Junta de Gobierno del ICAS

Querido José Joaquín: Gracias por tantos años dedicados al Decanato, al Colegio y a todos los compañeros que te hemos necesitado, a los que siempre has atendido y dado soluciones.

Gracias por contar conmigo en aquella candidatura que con tanta ilusión trabajamos, consiguiendo salir completa y formar un equipo estupendo, del que he disfrutado doce años.

Para mí fue toda una sorpresa y un orgullo que me pidieras formar parte de la nueva Junta con compañeros de tanta talla jurídica, humana y buen hacer. Ese legado será siempre nuestro. Juntos trabajamos en esas sesiones en las que terminábamos de madrugada, afrontándolas con ilusión y esfuerzo, asistíamos de buena gana a las Jornadas de Junta de Gobierno, hacíamos más horas en nuestros despachos para compaginar nuestros quehaceres con la Junta y, si bien es verdad que te costaba delegar y has estado en mil sitios en un mismo día, has ayudado en todas las iniciativas que hemos ido proponiendo, consensuando siempre en pos del beneficio del Colegio.

Particularmente quiero darte las gracias, entre otras muchas cosas, porque en los 23 años que se han venido celebrando en Sevilla las ya emblemáticas jornadas de Derecho de Familia, con la colaboración de la Asociación Española de Abogados de Familia (AEAFA) y de nuestro Colegio, siempre has estado con nosotros.

Gracias por dejar tan alto el listón de nuestro Colegio en el Congreso de la Abogacía de Sevilla, en el que tuve la suerte de colaborar con nuestra Vicedecana Carmen Moya, primera mujer con ese cargo en la historia del Colegio. Todavía, compañeros de otros colegios que asistieron, elogian lo bien organizado y lo bien que resultó. ¡Qué tiempos aquellos en los que las editoriales nos financiaban y que bien pedía nuestra Tesorera Paz Almeida!

Gracias por tantos ratos compartidos, por hacernos partícipe de los eventos de tu familia, por alegrarte con nuestros éxitos, por consolarnos en nuestro dolor, por dejar que te acicalara para las fotos y te riñera por no llevar lustre en los zapatos, por estar siempre al otro lado del teléfono y, cómo no, también por tus enfados cuando considerabas que algo no debía ser. ¡GRACIA DECANO, MI DECANO! Mis mejores deseos para esta nueva etapa. Un abrazo grande.

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Antonio Pérez Marin Abogado

Escribir sobre una persona excepcional que une a su innata bondad en el sentido que la define Antonio Machado: “en el buen sentido de la palabra, bueno”, la de ser un sevillano auténtico, (no la desafortunada caricatura que se tiene del sevillano), es difícil en tan poco espacio cuando también quiero hablar del Decano y también Abogado, que por eso fue Decano. José Joaquín ha sido fiel, primero como Abogado y después como Decano, a las exigencias que Raymond Poincaré decía de los abogados resumidas en una frase: “El hombre libre que no tiene de tejas abajo otro señor que la Ley”, ha seguido la regla no escrita que tenemos todos los abogados como Carlos Carnicer destaca: “El abogado ha sido y es el primer Juez. Se banaliza la función del Abogado cuando solo se afirma que es el intermediario entre los ciudadanos y el Juez. La afirmación es cierta, pero sesgada.

El Abogado es mucho más. Una norma no escrita nos obliga a los abogados, previamente a la interposición de una acción judicial, a intentar la solución del conflicto extramuros de jurisdicción”.

En efecto, José Joaquín une en su persona la legitimación de origen de cinco elecciones seguidas por sus compañeros de profesión y los más de 24 años de legitimación de ejercicio, intentando en todos los foros, privados y públicos, resolver los conflictos mediante la mediación y la concordia, y solamente cuando no era posible, armado con los instrumentos de la Ley y del Derecho los ha hecho valer ante los jueces con lealtad total a sus clientes y también a la Institución. Pero además, Jose Joaquín ha dejado para la Historia una obra difícil de superar. Me refiero a dotar a la Revista La Toga de un porte y unos contenidos insuperables, convirtiéndola en la tribuna que le da voz a los fundamentales operadores jurídicos: Abogados y Jueces.

Y para terminar en mi larga experiencia colegial he podido constatar que nunca, ni en la transición, ha tenido el Colegio de Abogados de Sevilla mayor presencia pública en todas las instituciones, reclamando lo que es justo para la ciudad y para la Justicia. Y ha podido llevar adelante esta gigantesca tarea sin jamás dejar de contestar la llamada de un compañero o su e-mail o su wasap, así como su acompañamiento ha sido siempre de forma presencial, constante tanto en momentos tristes como en los alegres.

José Joaquín merece pasar a incorporar el libro de Abogados Ilustres que recoge la Historia de la Abogacía Española recientemente publicado bajo la Dirección del Excmo. Sr. Santiago Muñoz Machado. Un abrazo José Joaquín.

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Virginia Pérez Pino

Ex Bibliotecaria de la Junta de Gobierno del ICAS

Por medio de estas palabras tengo la oportunidad de poder expresar lo que la persona de José Joaquín Gallardo significa para el mundo de la abogacía y de los diversos sectores de la sociedad, de los que refiero a título ejemplificativo a las Hermandades, a los Colegios Profesionales, a las Universidades, a la Administración de Justicia y demás administraciones públicas, a la Jefatura del Estado y demás instituciones representativas de intereses colectivos.

Ha sido para mi un regalo de la vida haber conocido a José Joaquín Gallardo con quien tuve la oportunidad de compartir diversas Juntas de Gobierno colegiales desde el año 1999 hasta el año 2009 y de quien me sorprendieron unas virtudes casi inexistentes en la sociedad actual, dedicación desinteresada a los problemas colegiales y de cada uno de sus compañeros con absoluta humildad.

Para José Joaquín existía una prioridad destacable: atender al compañero a cualquier hora, con paciencia, accesibilidad inmediata y sin intermediarios.

Asimismo, solidaridad con sus compañeros en situaciones personales complejas, de salud y espirituales. Como curiosidad, asistia a todas las misas de difuntos de cada uno de los colegiados de Sevilla a quienes les expresaba cariño y consuelo.

José Joaquín otorgaba confianza a las nuevas generaciones y apoyaba sus ilusiones, dando oportunidad a quienes iniciaban el camino del ejercicio profesional para participar en los actos colegiales y desarrollar su carrera, sin prejuzgar sus capacidades.

Amabilidad siempre en el trato a todos los compañeros y al personal del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla, dejando huella en el corazón de todos quienes le conocen.

Finalmente, no me gustaría acabar estas palabras acotadas por razón de la intervención de las numerosas personas que lo conocen, sin mencionar su lado profesional.

Un gran Decano abierto siempre a la mejora y reconocimiento del ejercicio de la abogacía, dignificación de la profesión y del papel que los abogados desempeñan en nuestra sociedad, quienes ejercen derechos fundamentales de la persona.

Todas estas virtudes enunciadas han hecho que le otorguen el reconocimiento cofrade por la Hermandad de las Siete Palabras, telegrama de felicitación del Jefe del Estado, entre otras numerosas medallas al mérito de la Abogacía y lo más importante ha marcado el corazón de sus compañeros colegiales.

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Eusebio Pérez Torres

Abogado del Estado-Jefe en Andalucía

Desde la Abogacía del Estado en Sevilla y Andalucía nos unimos muy gustosamente al homenaje a José Joaquín Gallardo Rodríguez con motivo de la culminación de su mandato como decano del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla.

En general, las competencias que, conforme a las leyes, ejerce el Colegio sobre el ejercicio de la profesión son asumidas directamente por la Administración respecto de los que trabajamos para ella, participando en su desempeño quienes ejercemos alguna responsabilidad de jefatura.

Por eso, siento una comprensiva solidaridad con quien ha debido afrontar los muchos problemas de funcionamiento que envuelven nuestro trabajo durante veinticuatro años de ejercicio en el cargo, a los que José Joaquín ha decidido poner punto y final voluntariamente, rodeado del reconocimiento de todos.

El trabajo de abogado entraña discusión, disputa y hasta confrontación.

En medio de esa insoslayable dialéctica, José Joaquín ha transmitido y propiciado siempre entendimiento, cordialidad y diálogo, situando la empatía personal por encima de las diferencias que provocan los distintos roles que desempeñamos cada cual en este mundo de la Justicia.

Por su esfuerzo, labor y méritos, y, muy particularmente, por cultivar la concordia en un ámbito donde es tan necesaria, vaya para él nuestra gratitud y nuestra enhorabuena.

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Jorge Piñero Gálvez Ex Vicedecano del ICAS

Invitado a participar en un libro-homenaje a José Joaquín Gallardo, y adherido entusiásticamente a tan justa iniciativa, tengo claro que de su rica y polifacética personalidad cabe destacar, de entrada, su arraigado sentido de la justicia, de la libertad, de la igualdad y de la solidaridad humanas; su generosidad y permanente disponibilidad; su elevadísimo concepto de la amistad y del compañerismo con exclusión de toda idea corporativista; su habilidad en la gestión colegial, que ha revolucionado el modo en que debe funcionar un Colegio de Abogados; su atención y asistencia permanentes a los miles de colegiados que la han necesitado a lo largo de decenas de años; su asombrosa capacidad de trabajo y su indiscutible habilidad y abierto talante para el sostenimiento de relaciones cordiales y de respeto mutuo con toda clase de instituciones y autoridades. Todo ello siempre aplicado conforme a unas profundas e irreductibles convicciones éticas.

Pero no quiero olvidarme de otras de sus muchas virtudes, de las que se habla menos, que son igualmente admirables y de cuya puesta en práctica he sido frecuentemente testigo directo y privilegiado.

Ante todo, es un inmenso abogado, como tiene sobradamente demostrado tanto en su propio ejercicio profesional como en su facilidad para captar y resolver de modo inmediato las problemáticas más inextricables que los compañeros le someten en sus consultas. Atesora, además, una capacidad creativa verdaderamente asombrosa y envidiable, pues se le ocurren a cada instante ideas, proyectos e iniciativas que solo están al alcance de los elegidos, y, encima, los pone inmediatamente en práctica.

Y asimismo, pone de manifiesto constantemente extraordinarias dotes para la improvisación y para la adopción velocísima y acertada de toda clase de decisiones y soluciones.

De ese modo ha llevado el decanato a un nivel altísimo, aunque, afortunadamente, su sucesor –Óscar Cisneros- es, además de una gran persona y excelente abogado, un veterano experto en la gestión colegial, curtido en ella durante muchos años precisamente al lado del propio José Joaquín.

Concluyo dejando constancia -junto a la admiración que siempre he sentido hacia José Joaquínde mi eterno agradecimiento por la generosidad, desinterés y sacrificio personal que derrochó en la impagable y exitosa defensa de mi persona con ocasión de un lamentable episodio judicial que complicó extraordinariamente mi vida durante varios años.

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Fernando Piruat de la Barrera Ex Vicedecano del ICAS

El Decanato de José Joaquín Gallardo constituye un punto de inflexión en nuestra historia colegial, no sólo por el tiempo en que asumió esta responsabilidad, sino por la forma y contenido de su ejecución.

Veinticuatro años de Decano sucesivamente reelegido, constituye un caso único e irrepetible.

Muchos se preguntan por la causa de este éxito arrollador. Conocimiento profundo de la dinámica colegial, cariño al Colegio, capacidad de trabajo, dedicación y un largo etc., han contribuido a cumplir su cometido con plena eficacia.

Pero factor esencial ha sido su dedicación preferente y proximidad a los colegiados. Permanecí en la Junta del Colegio veinte años, cuatro de vicedecano, y he mantenido un contacto permanente con José Joaquín. Viví su entrega sin límite a los problemas de los compañeros, que hizo suyos.

Es lógico que este reconocimiento se plasmará en un apoyo mayoritario. Su proximidad y espíritu de servicio fueron excepcionales.

No puedo extenderme más. La limitación de espacio lo impide. Concluyo estas breves líneas expresándole mi admiración, cariño y gratitud por la atención personal que me prestó.

Gracias José Joaquín por cuanto hiciste por el Colegio, la abogacía y tus compañeros. Ha sido un honor y una satisfacción colaborar contigo durante el tiempo que formé parte de las sucesivas Juntas que presidiste.

Mi enhorabuena y felicitación sincera.

Un abrazo muy fuerte de tu siempre buen amigo y compañero.

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Antonio Piruat Palomo

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

“¡Estudia!”

Es uno de los principios que se recuerda a los abogados el día de su jura, porque el abogado está en constante aprendizaje; esto que siempre he tenido presente, se me ha hecho más patente en mis años de pertenencia a la junta de gobierno del colegio de abogados debido, fundamentalmente, a lo que he aprendido de D. José Joaquín Gallardo, y no solo por sus mensajes en los actos, reuniones y juntas que hemos compartido, sino más aún por su actitud y ejemplo permanente.

De él he recibido grandes lecciones de pasión por la abogacía, de conocimiento de la institución que la dirige, del ejercicio a través del trabajo, de entrega y servicio al compañero, de confianza en las personas que se eligen para llevar a cabo cualquier actividad, como lo ha sido, en nuestro caso, una junta de gobierno, ….

Muchos más méritos se le reconocen, pero sin duda todos los anteriores abundan en quien dedico estas palabras y que,- como estoy seguro responden a una profunda convicción suya- ha sido capaz de transmitir de forma natural a quien le ha acompañado estos años, entre ellos, indudablemente, a mí, que he asimilado tales enseñanzas desde un punto de vista profesional y personal.

Por tanto, José Joaquín, me siento profundamente agradecido por el ejemplo que me has dado, por lo que he aprendido y por la confianza que me has demostrado, esperando haber respondido a dicha confianza y haber estado a la altura.

Para mí siempre será un orgullo decir que yo fui diputado en una junta de José Joaquín Gallardo, “El Decano”, “Mi Decano”.

Un fuerte abrazo.

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José Manuel Ramos Cardona

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Han pasado bastantes años cuando tuve la inquietud de conocer los entresijos del Colegio de Abogado y como Decano me puse a tu disposición para cualquier tarea que fuera menester.

Antes de entrar en tu Junta de Gobierno me aceptaste como colaborador trabajando en la Sala adyacente a tu despacho.

Durante ese tiempo pude comprobar tu forma de atender a los compañeros; ¡Qué cantidad de tiempo les dedicabas!, incluso, y gran medida, cuando nada tenían que ver con la Institución; al final el compañero se iba con una solución, que quizás no fuera a instancia tuya sino que surgía de su propia reflexión.

He aprendido contigo que los problemas, en gran medida, se pueden solucionar compartiéndolos con alguien en quien confías y ciertamente has sido y seguirás siendo, el Decano, compañero y amigo de confianza.

Gracias Decano.

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Emilio Ramos Martín Ex Oficial Mayor del ICAS

Desde el ya lejano 1960, desde que dediqué mi vida laboral al Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla, he conocido a once decanos.

El 15 de junio de 1961 se inauguró la primera sede del Colegio en un piso de la calle Muñoz Olivé, núm.

6. El Colegio tenía ya casa propia, fuera de la primera secretaría y sala de togas que tenía en la Audiencia Territorial, en el edificio de la Plaza de San Francisco y todo ello gracias al Decano Don Adolfo Cuéllar Rodríguez y su Junta de Gobierno. Se trataba de un gran piso que se reformó por completo, dotándolo de una amplia biblioteca que servía de sala de juntas y reuniones, despacho del decano y una acogedora sala, estancia para los letrados. Entonces, los decanos eran normalmente conocidos y famosos abogados, tanto por sus compañeros como por la magistratura y público general.

José Joaquín entró rompiendo moldes, al ser elegido secretario en la Junta de Gobierno de Don Manuel Rojo sin ser apenas conocido. Pero en los años en los que fue secretario -con su esfuerzo interior y exterior, su ejemplo de cada día resolviendo los asuntos colegiales y de los compañeros, su siempre presta ayuda, su amabilidad y su buen hacer- se ganó pronto el respeto, la confianza y el cariño de todos los colegiados, siendo ya plenamente conocido por todo el colectivo. Se presentó a su primer decanato y fue elegido por una amplísima mayoría, como igualmente ha ocurrido en las sucesivas elecciones del Colegio gracias a su trabajo diario año tras año, con su acentuado sentido del deber, su ética profesional y su inconfundible e insobornable espíritu democrático respecto a defender o ayudar al compañero.

Ha dado a conocer el Colegio a todas las instituciones administrativas, públicas, sociales y medios de comunicación y su flamante sede colegial es conocida y respetada por la sociedad civil sevillana.

Ha sido presidente y directivo del Consejo Andaluz de Colegios de Abogados, como igualmente ha pertenecido desde su primer decanato al Consejo General de la Abogacía Española como consejero muy cualificado y respetado.

Desde que fue elegido secretario del Colegio y jefe del personal laboral del Colegio, los empleados han sido tratados con el máximo respeto, benevolencia y cariño. Estaba siempre pendiente de sus necesidades y su bienestar, tanto las suyas propias como de sus familias, como si de compañeros se tratara.

Hablar de José Joaquín Gallardo y su trayectoria en el decanato en pocas palabras es imposible. En el Colegio, en las instituciones administrativas y judiciales, todo el mundo sabe quien es y no necesita más título ni cargo. Su trato afable, cariñoso y respetuoso con todos le ha valido ser reconocido con importantes premios y condecoraciones por todos conocidas.

Solo me resta dar las gracias al discípulo de Don Manuel Rojo que, como en el evangelio de los talentos, no nos lo ha devuelto duplicado, sino mucho más. Amén.

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Antonio Reinoso y Reino Magistrado jubilado

No es fácil hablar brevemente de José Joaquín Gallardo. Lo intentaré.

La profesión de abogado no se distingue precisamente por su corporativismo y, sin embargo, José Joaquín ha conseguido a lo largo de su dilatada etapa como Decano del Colegio de Abogados de Sevilla vivificar el Colegio, uniendo a todos los abogados. Ello se debe, sobre todo, a la intensa labor y a la denodada lucha por potenciar el mismo llevada a cabo por su Decano y la Junta de Gobierno durante todo el extenso mandato.

Ha conseguido la completa dinamización del Colegio, estando atento a los cambios sociales y a las numerosas modificaciones legislativas, contribuyendo de forma incansable a implementar y dignificar la profesión. Los abogados le deben mucho, pero también los demás profesionales jurídicos.

Constituyó para mí un enorme orgullo y satisfacción haber tenido un estrecho contacto institucional con José Joaquín durante mi etapa de Representante del Poder Judicial.

Su profesionalidad, su preparación, su trato exquisito y su afabilidad le honran no sólo a él, sino a cuantos le tratan y especialmente a la Justicia.

Para mí constituye un enorme orgullo saber que conté y cuento siempre con su cariño y su amistad.

Muchas gracias querido Decano y querido amigo.

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Luis Revilla Pérez

Letrado de la Administración de Justicia Director de Servicios Comunes de la Audiencia Provincial de Sevilla

Querido José Joaquín: … Muchas gracias Cuando me brindaron la oportunidad de dirigirme a ti con ocasión de tu inminente despedida como Decano, inmediatamente una palabra me vino a la cabeza: “gracias”.

Han pasado ya aproximadamente treinta y tres años, cuando, allá por 1986, en Lebrija, tuve la suerte de conocerte y de comenzar la que desde sus inicios ha sido una magnífica relación tanto personal como profesional.

Como persona he de destacar que en ti se aúnan las virtudes de bondad, solidaridad y seriedad, aliñada con un fino sentido del humor, virtudes a las que se añade el don de la bilocalización (capacidad de encontrarte en diversos lugares de forma simultánea) y que te ha permitido cumplir con la práctica totalidad de compromisos institucionales que tu agenda te vino imponiendo. Nunca olvidaré ni dejaré de agradecer tu presencia en los momentos más importantes de mi vida profesional.

Aunque resulten notorias tus cualidades, destacaré, como ejemplos vividos en primera persona, que tu preocupación por la vida de las personas, aun siendo contrarios en un proceso penal, te llevó a buscar soluciones conciliadoras incluso en días y horas inhábiles, cuando aún no existía la telefonía móvil, tratando por todos los medios de evitar su ingreso en prisión…. o cómo te desviviste e implicaste profesional y personalmente, de forma altruista, en la defensa de un desgraciado caso de violencia doméstica con resultado mortal acaecido en el Bajo Guadalquivir.

Como Letrado de la Administración de Justicia igualmente no tengo más que palabras de gratitud en mi propio nombre y en el de mi colectivo profesional, al que siempre diste su lugar: Han sido casi tres décadas asistiendo a las celebraciones navideñas del Colegio de Abogados, colaborando contigo y con tu Junta Directiva tanto como Presidente de Inter Iuris como individualmente, colaborando en múltiples actividades docentes, … y tu forma de ser, cariñosa y hospitalaria han sido decisivas para conseguir que, en cada visita a la sede, me sintiera como en mi propia casa.

Con tu manera de ser has conseguido algo que ya tuve la oportunidad de decir públicamente: Que la relación con el colectivo profesional que presides resulte sumamente fácil en el trabajo diario, contribuyendo de manera decisiva a que, sin perder el respeto mutuo, nuestra relación personal y profesional se base en la flexibilidad, la confianza y la amistad.

Muchas gracias y mucha suerte querido amigo.

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María Begoña Rodríguez Álvarez

Representante del Poder Judicial en Andalucía Occidental Presidenta de la Sala de lo Social de Sevilla

La honradez, la rectitud, el coraje…, aunque son conceptos antiguos, no son conceptos trasnochados, porque la actitud valiente y noble en la manera de relacionarse con las personas y enfrentarse a las situaciones, sigue siendo la medida de la calidad humana de cualquier persona.

José Joaquín Gallardo en su larga trayectoria como Decano, ha demostrado, no solamente la calidad profesional que ha requerido el cargo, sino una calidad humana extraordinaria, lo que ha permitido tal cercanía y cordialidad en su trato que cuesta mucho trabajo despedirle.

No es momento de evocar detalles, (el espacio material que me dan para escribir no lo permite), pero esa forma suya de acercarse con autoridad y prudencia a las situaciones ordinarias y a las extraordinarias, a las dificultades que hay que superar para conseguir el objetivo; esa forma de resolver de manera eficaz complicaciones inesperadas y esa forma de mostrar su satisfacción cuando las cosas, - no solo las suyas-, han ido bien, ha colocado el prestigio del Colegio Abogados de Sevilla en el lugar que merece y le ha hecho a él acreedor del respeto general.

En la despedida, solo puedo desearle la mayor de las venturas y que su Excelsa Patrona, de la que no se olvida nunca, le permita disfrutar de lo que mas le satisfaga.

Un abrazo fuerte, José Joaquín, hasta siempre y muchas gracias.

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Pedro Rodríguez López de Lemus DPD del ICAS

Querido Decano: Dado que tengo que resumir mucho estas palabras que quiero dedicarte por tu extensa y prolífica labor al frente de los abogados de Sevilla, voy a centrarlas en lo que siempre me ha llamado más la atención, y que he valorado como una acción heroica por el esfuerzo y dedicación que requieren: tu entrega al Colegio y a los colegiados que lo formamos.

No hay reunión que hayamos mantenido, o incluso, momento en que nos hayamos encontrado, en los que no hayas recibido llamadas de compañeros abogados con algunos de los muchos problemas que son inherentes a nuestra profesión.

Y siempre has atendido la llamada de la mejor forma, y dedicado todo tu tiempo y esfuerzo en solucionar el problema o solicitud en cuestión, sin importarte si estabas trabajando en tus asuntos profesionales o dedicado a tus momentos de ocio.

Por todo ello, muchas gracias por ser un ejemplo de entrega a los demás en estos tiempos en los que suele primar el interés individual frente al colectivo.

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Chelo Rodríguez Torné

Ex Diputada de la Junta de Gobierno del ICAS

Guardo tu felicitación navideña de estas Navidades del 2018 como un tesoro, José Joaquín, y no porque haya sido la última que iba a recibir de ti como Decano de mi querida Junta de Gobierno, sino porque en ella defines perfectamente el hilo musical que acompaña nuestra relación y, a su vez, supone una definición absoluta de tu carácter: la empatía.

Es verdaderamente difícil encontrar a una persona que lleve tantos años ocupando un cargo de estas características que no haya modificado su carácter y personalidad por estar siempre expuesto al alago y agasajo continuos, pero no es este tu caso, querido amigo: sigues siendo tan cercano y humano como seguramente lo fuiste el primer día que tomaste posesión como Decano de este colectivo de artistas como somos los abogados; estoy convencida de que si por ti fuera te desprenderías de la toga y de las puñetas porque crees que tanto adorno te aleja del semejante y de tu objetivo, que es y será “siempre ayudar”, sin fisuras y con total entrega, a quien lo necesite, sin distinción de cargo y edad; tu humanidad y cercanía son las de siembre, José Joaquín, y es un privilegio haber aprendido contigo que la humildad y la sencillez no están reñidas con ningún cargo, y que la vocación de servicio debe ser inherente al ser humano, y no solo al abogado.

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Santiago Romero de Bustillo Magistrado Jubilado

A José Joaquín Gallardo Rodriguez: Muchas gracias por tu intensa y extensa laboriosidad, que, además, es manifiesta en tu imagen frecuente por las calles de Sevilla con el móvil enchufado como si del chupe de un niño se tratase. Afortunadamente ya sin el cigarro del que antes abusabas.

Muchas gracias por tu equilibrio y serenidad ante lo problemas que se te presentan, sin exaltarte por el éxito ni apesadumbrarte por el rechazo.

Muchas gracias por tu sonrisa permanente y contagiosa que, asimismo, ha transmitido a tus familiares, al menos a los que conozco.

Por todo ello, mi felicitación porque, si en los jueces es exigible “claridad, precisión y congruecia(LEC)”, en los abogados es transcendente que sean “convicentes”, como has conseguido y durante tantos años se te viene reconociendo.

Un abrazo.

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Benito Saldaña Barragán

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Si algún adjetivo define la personalidad de José Joaquín es “conciliador”.

Le conocí cuando era secretario de nuestro Colegio allá por finales de los años 80 y yo me incorporé a la Junta de Gobierno con la candidatura de José Angel García, por lo que coincidimos en dicha Junta dos años, durante los que pude conocerle bien.

Procedente de la factoría jurídica de otro ilustre decano, D. Manuel Rojo Cabrera, atesoraba las virtudes de su maestro: rigor jurídico, templanza, imaginación y mucha conciliación. Era difícil que en cualquier conflicto entre compañeros, o entre clientes y abogados o incluso entre instituciones, no encontrara José Joaquín un punto intermedio, un acuerdo. Era un bombero de los conflictos.

José Joaquín ha dignificado la profesión, haciéndose oír desde su cargo de decano de los Abogados ante instituciones de todo tipo e incluso opinando sobre decisiones de orden legislativo y de carácter logístico como la ubicación de la tan deseada y necesaria Ciudad de la Justicia. Siempre tuvo cordiales pero firmes relaciones con los cargos políticos que ateñían a los intereses de la abogacía.

Nunca ha rehuido decir las cosas como las sentía. En fin, llenaba el cargo de Decano en toda su plenitud.

En el trato personal era cercano. Su despacho, bien el profesional o bien el decanato siempre estaba abierto a todo compañero que lo requiriera. Ayudaba a superar incluso crisis personales.

Aconsejaba a los más jóvenes y ponía a disposición de quien lo necesitase los medios de los que dispone el Colegio.

Siempre me gustó un detalle que tenía con todos los que alguna vez pertenecimos a la Junta de Gobierno: tantas veces como he apadrinado a algún nuevo compañero que se incorporaba a mi despacho, tantas veces como hacía que me pusiera la medalla, me subiera al estrado del salón de actos y desde ese estrado salieras a acompañar al jurando, volviendo después a tu lugar inicial. Una señal de respeto hacía quién había ocupado un cargo en la Junta de Gobierno.

En fin, José Joaquín encarna resumidas las virtudes de un gran abogado en toda su dimensión y ha representado con toda dignidad el máximo cargo de una centenaria corporación imprescindible en cualquier sociedad avanzada.

Un abrazo para mi compañero y amigo.

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Germán Saldaña Espejo

Coordinador de Extranjería del ICAS

Muchas gracias por tu ejemplar dedicación durante todo este tiempo.

Contigo sabíamos que siempre podíamos contar para solucionar cualquier problema que pudiéramos tener, siempre nos atendías con atención y gran compañerismo.

Ha sido un inmenso placer tenerte como Decano.

Un abrazo muy fuerte.

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José Manuel Sánchez Carrillo

Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Decir “José Joaquín” en los últimos lustros en la Ciudad de Sevilla, en la Magistratura, en la prensa y en la sociedad sevillana, en suma, inopinadamente siempre se ha identificado con la persona a la que le dirijo estas breves palabras.

Decir “Decano” en España, con el permiso de Pedrol Rius (q.e.p.d.), nos ha llevado a la figura de este ser intenso y constante en la representación del Abogado.

Pero otro tanto le pasa en su círculo cercano, cuando se habla de “esposo” y “padre”, ejemplar en todos los aspectos donde los haya. No digamos si nos referimos a la palabra “abuelo”, relativo reciente estado que me temo es el que le ha llevado a que deje a la Abogacía sevillana desolada, sin querer volver a presentarse a nuevas elecciones colegiales.

Y decir “amigo”,…, decir Amigo para todos los compañeros de esta bendita profesión, forzosamente nos representa a la persona incansable que nos ha venido asesorando, aconsejando, apoyando, con su móvil a disposición de todos, a cualquier hora del día y la noche, incluso arropándonos y consolándonos a todos y cada uno, cuando desgraciadamente la mala fortuna se ha hecho presente, arrebatándonos a un ser querido.

Parodiando a Miguel Hernández,…, decir amigo, se me figura que es el Decano con quien tanto y de tanto aprendimos.

Dios, él y mi elogio saben a quién encarecidamente encomio.

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María José Segarra Crespo Fiscal General del Estado

Querido Jose Joaquín. En algún momento bromeamos con nuestra paralela y larga trayectoria, tú como Decano de los abogados sevillanos, yo como Fiscal Jefe en esta ciudad tan querida.

Bromeamos en alguna ocasión, conjurándonos en una renovación a seguir mientras el otro siguiera, pero ambos teniendo claro que era porque todavía sentíamos que teniamos algo que aportar a nuestras respectivas profesiones.

Y es algo sabido que tú lo has dado todo.

Te he visto cansado, sin tiempo siquiera para tu vida privada, pero a la par transmitiendo una disponibilidad absoluta hacia todos. Desde luego y siempre para defender el ejercicio de la abogacía y desde luego y siempre, para defender el ejercicio imparcial de la jurisdicción. Para ello has transmitido a tu colegio alma de cooperación, has abierto la casa de los abogados a todos los operadores jurídicos con interesantes reuniones de coordinación e intercambio de inquietudes en todas las áreas jurídicas y en todas aquellas socialmente trascendentes a nuestro trabajo.

Has dado alas a proyectos que han permitido situar tu colectivo de abogados a la vanguardia de áreas de especial sensibilidad y has sabido tejer respeto y admiración a todos los que te conocemos.

Sin duda, gracias.

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Rosa Selva Morán

Ex Secretaria de la Junta del Gobierno del ICAS

Dicen que el agradecimiento es la memoria del corazón y, como ahí te llevo, desde ahí agradezco que me hayas brindado la oportunidad de aprender tanto durante estos años a tu lado.

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Pilar Sepúlveda García de la Torre Vocal del Consejo General del Poder Judicial

Querido José Joaquín, después de compartir contigo toda una vida de ejercicio dedicado a la abogacía, en la que has liderado este Colegio con eficacia, justicia y cariño; llega la hora del descanso merecido de esta responsabilidad. No dudo, que quien llega lo hará bien; pero echaré de menos el carácter directo y colaborador que siempre tuviste, tu templanza y tu buen hacer.

Cuando ya tenemos una edad, los recuerdos se agolpan, me viene a la mente con cariño, que en 1998, tuve que liderar la organización del Congreso Estatal de Mujeres Abogadas en Sevilla, te pedí la ayuda y puede contar contigo, aún me viene a la mente recibiste a más de cien letradas en las dependencias de Chapineros, a quien le ofreciste el Colegio con toda simpatía.

Hemos compartido cenas de colegio, problemas, alegrías, jornadas y formación y recuerdo recientemente el I Encuentro entre la Abogacía Española y la Comisión de Mediación del Consejo General del Poder Judicial, al que como siempre con tu generosidad, ofreciste todo el apoyo del Colegio para dicho evento.

Mucho son los recuerdos que me acompañan contigo, pero si hay uno que jamás olvidaré, fue la jura como letrado de mi hijo Luis, que presidiste y como te dirigiste a todos las y los jóvenes abogados que ese día juraron o prometieron su ejercicio de la abogacía, tus palabras, tu compañerismo y tu llaneza que solo demostraban tu sabiduría y tu humanidad.

Gracias por todas las cosas vividas, gracias por estar allí.

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Germán Venegas Díaz

Coordinador del Turno de Justicia Juvenil del ICAS y Vocal de la Comisión del Menor del ICAS

A veces, las palabras no alcanzan para abarcar una relación de colaboración y cordialidad que comenzó hace más de catorce años.

Y si, de algún modo, pudiera calificarse brevemente este largo camino recorrido junto a José Joaquín, sólo se me alcanza decir que encontré en mi Decano compromiso, sentido común y lealtad.

La labor singular que realizamos los Letrados de Menores, siempre fue bien entendida y acogida y nada hubiera sido igual, sin su apoyo incondicional y constante.

No deja atrás a unos meros compañeros de profesión, sino a buenos amigos que nunca habrán de olvidar su inmensa dedicación.

Muchas gracias, querido Decano, pues todos estamos en deuda contigo.

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Eduardo Ybarra Mencos

Abogado. Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Recuerdo, como ayer, noviembre de 1995 la llamada nocturna de José Joaquín Gallardo (vivía de noche) compañero de colegio en los Maristas toda la vida y compañero en la Facultad de Derecho de Sevilla. Me proponía formar parte de una candidatura para las elecciones en el Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla.

- Lo pienso y te contesto. Había niños pequeños y trabajo.

- Bien - me dijo- mañana te llamo.

Al día siguiente estaba embarcado con otros compañeros para una larga singladura de siete años.

De la dedicación y logros conseguidos por José Joaquín Gallardo para nuestro colegio poniéndolo en el sitio que le corresponía, no hay aquí espacio y creo que todos tenemos conocimiento.

Solo me queda agradecerle el que me llamara, pues fue una experiencia enriquecedora, actos de representacion, asistencia a congresos, recuerdo especialmente Gerona y Valencia y las reuniones mensuales donde además de tratar de solucionar problemas había que lidiar con las impugnaciones de honorarios, expedientes que llegaban a nuestros despachos y una vez estudiados los exponíamos haciendo estas reuniones interminables por lo complicado de muchos de ellos.

Terminada esta etapa, a la postre además de la experiencia me quedan los recuerdos y el haber hecho buenos amigos , ¡qué ya es importante!

Un abrazo.

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Consuelo Carrizosa, Reyes Morales y Juan Carlos García Amigos

Un decano como de la familia Nunca ha dejado de llamarnos la atención la naturalidad con la que se percibe en casa la presencia de José Joaquín en todo lo que concierne a su amada abogacía y a la defensa de sus compañeros, que mandato tras mandato le han brindado su confianza. Multitud de debates y temas de actualidad, amén de infinidad de actos en los que su opinión y presencia han hecho que la profesión en Sevilla tenga una voz reconocible y reconocida, en todos los sentidos.

Naturalidad porque en las distancias cortas José Joaquín siempre nos ha transmitido la verdad y el afecto sincero con que se expresa en público. Ya sea asistiendo puntualmente a su cita con la tortilla de jamón en Casa Morales, o en la terraza de su casa, cuando se mezclan las confidencias, las risas y las burbujas, con la Giralda como testigo. Por supuesto, con el añadido del cariño de una amistad que dura desde siempre.

Un amigo que, junto con Reyes, y sus hijas, Reyes, María y Laura, siempre está ahí. Un amigo nuestro y de nuestras familias. Sí, también de nuestros hijos, a los que tanto hacía reír de niños, cuando improvisaba disparatados discursos en las comidas familiares. Una amistad de familias que, una vez ampliadas con una buena ristra de nietas, nos sigue congregando para compartir todos juntos ratitos buenos, inolvidables, en Villanueva, en Sanlúcar de Barrameda, o donde se tercie.

Unos amigos con los que disfruta tanto en las maduras, que cuando vienen las duras su compañía reconforta como una buena mesa camilla a la que sentarte en un frío día.

Su gran labor como decano todos estos años es sólo comparable al privilegio y la alegría que nos supone, día a día, contar con la amistad, ser familia elegida, de una de las mejores personas que hemos conocido en nuestra vida.

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Agradecimientos por orden alfabético

Pablo José Abascal Monedero

14

Max Adam

18

María Luisa Alejandre Durán

22

Coordinador Turno Protección Social del ICAS

Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Presidenta Sala Contencioso Administrativa de Sevilla del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía

Paz Almeida Lorences

26

Manuel Damián Álvarez García

30

Juan José Barrios Sánchez

34

Cristina Borrero Gaviño

40

Ex Tesorera de la Junta de Gobierno del ICAS

Presidente de la Audiencia Provincial de Sevilla

Procurador

Ex Diputada de la Junta de Gobierno del ICAS

425

Amalia Calderón

44

Juan Calle Martín

48

Javier Alfonso Cano Bravo

52

Ignacio Cañal de León

60

Miguel Carmona Ruano

64

Juan Espada Cejas

68

Mariló Caro Pastor

72

Pepe Castilla

78

Óscar Cisneros Marco

82

Coordinadora Turno contra la Violencia de Género del ICAS

Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Ex Secretario de la Junta de Gobierno del ICAS

Vocal del Consejo General del Poder Judicial

Alcalde de Sevilla

Secretaria del Decanato

Abogado y Mediador

Decano del ICAS 426

Francisco Ciudad Martín

86

Manuel Clavero Arévalo

92

Julio Coca Blanes

96

Gerente del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla

Abogado

Ex Secretario de la Junta de Gobierno del ICAS

Carmen Cuadra Sola

100

Adolfo Cuéllar Portero

108

José Antonio del Barco Aumesquet

112

Lorenzo del Río Fernández

116

Deborah Delmás Lirola

120

María Luisa Díaz Quintero

126

Secretaría Técnica. Consejo Andaluz de Colegios de Abogados

Vicedecano del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía

Tesorera del ICAS

Coordinadora del Servicio de Orientación Asistencia Jurídica Penitenciaria del ICAS

427

Amparo Díaz Ramos

130

María Auxiliador Duque Ordoñez

134

Antonio Dorado Picón

138

Isabel Escartin García de Ceca

142

Luis Fernández Arévalo

146

Alfredo Flores Pérez

152

Reyes Gallardo Navarro

156

José Ángel García de la Rosa

160

Carmen García Rivero

164

Coordinadora del Turno contra la Trata y otras formas de explotación del ICAS

Letrada de la Administración de Justicia del Juzgado Decano de Sevilla

Letrado de la Administración de Justicia. Sección Octava Audiencia Provincial de Sevilla

Decana Ilustre Colegio de Procuradores de Sevilla

Fiscal Jefe de Sevilla

Abogado

Ex Bibliotecaria del ICAS

Delegado de la Mutualidad General de la Abogacía del ICAS

Abogada 428

Miguel Ángel Gómez Martínez

168

Amanda Gónzalez de Aledo

172

Fernando Ángel Gónzalez de la Peña

176

María José González Rodríguez

180

Francisco José Guerrero Suárez

188

Pablo Gutiérrez- Alviz y Conradi

192

Carmen Hermosin Bono

198

Rafael Hidalgo Romero

202

Pedro Izquierdo Martín

208

Abogado - Economista

Presidenta de la Asociación de Periodistas Judiciales de Andalucía

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Miembro subcomision SOAJPS del ICAS

Magistrado Juez Decano de los Juzgados de Sevilla

Notario de Sevilla

Ex Consejera de Justicia y Administración Pública de la Junta de Andalucía

Presidente del Colegio Oficial de Graduados Sociales de Sevilla

Presidente Sección 1ª Audiencia Provincial Sevilla

429

Guillermo J. Giménez Sánchez

212

Federico Jiménez Ballester

216

Carmen Limones-Bernal

220

Patricia Martínez-Conradi Álamo

224

Santiago Martínez-Vares García

230

José Antonio Montero Fernández

234

José María Monzón Ristori

238

Juan Antonio Mora Cabo

242

Rosa Morán

246

Colegiado. Vicepresidente emérito del Tribunal Constitucional

Magistrado de la Audiencia Provincial de Sevilla. Ex Juez Decano

Asesora Jurídica de la Cámara de Comercio de Sevilla

Ex Diputada de la Junta de Gobierno del ICAS

Magistrado Tribunal Constitucional

Magistrado del Tribunal Supremo

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Abogada 430

Antonio Moreno Andrade

254

Carmen Moya Sanabria

258

Antonio Muñoz Ruiz

262

Manuel Muruve Pérez

266

Juan Antonio Navas Córdoba

270

Andrés Ollero Tassara

276

Victoria Ortega Benito

280

Felisa Panadero

284

Alejandra Pantoja Rivero

288

Magistrado. Presidente de la R.A.S. de L. y J. Of Counsel del despacho Nertis Legal.

Ex decana del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla

Compañero

Ex Decano del Colegio de Procuradores de Sevilla

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Magistrado del Tribunal Constitucional

Presidenta del Consejo General de la Abogacía Española

Secretaria Coordinadora Provincial de Sevilla

Ex Diputada 13º de la Junta de Gobierno del ICAS

431

Teresa Pavón Rodríguez

292

Manuel Pérez Cuajares

300

Mariano Pérez de Ayala Conradi

304

María Pérez Galván

308

Antonio Pérez Marin

312

Virginia Pérez Pino

318

Eusebio Pérez Torres

322

Jorge Piñero Gálvez

326

Fernando Piruat de la Barrera

330

Abogada

Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Presidente Caritas Diocesana Regional de Andalucia

Ex Diputada de la Junta de Gobierno del ICAS

Abogado

Ex Bibliotecaria de la Junta de Gobierno del ICAS

Abogado del Estado-Jefe en Andalucía

Ex Vicedecano del ICAS

Ex Vicedecano del ICAS 432

Antonio Piruat Palomo

336

José Manuel Ramos Cardona

340

Emilio Ramos Martín

344

Antonio Reinoso y Reino

348

Luis Revilla Pérez

352

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Ex Oficial Mayor del ICAS

Magistrado jubilado

Letrado de la Administración de Justicia Director de Servicios Comunes de la Audiencia Provincial de Sevilla

María Begoña Rodríguez Álvarez

Representante del Poder Judicial en Andalucía Occidental

360

Presidenta de la Sala de lo Social de Sevilla

Pedro Rodríguez López de Lemus

364

Chelo Rodríguez Torné

368

DPD del ICAS

Ex Diputada de la Junta de Gobierno del ICAS

433

Santiago Romero de Bustillo

372

Benito Saldaña Barragán

380

Germán Saldaña Espejo

384

José Manuel Sánchez Carrillo

388

María José Segarra Crespo

390

Rosa Selva Morán

394

Pilar Sepúlveda García de la Torre

398

Germán Venegas Díaz

404

Magistrado Jubilado

Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Coordinador de Extranjería del ICAS

Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Fiscal General del Estado

Ex Secretaria de la Junta del Gobierno del ICAS

Vocal del Consejo General del Poder Judicial

Coordinador del Turno de Justicia Juvenil del ICAS y Vocal de la Comisión del Menor del ICAS

434

Eduardo Ybarra Mencos

408

Consuelo Carrizosa, Reyes Morales y Juan Carlos GarcĂ­a

412

Abogado. Ex Diputado de la Junta de Gobierno del ICAS

Amigos

435

MarĂ­a Aristoy Remedios MĂĄlvarez

Gracias Decano

Sevilla, 13 de junio de 2019