La planificación debe entenderse como un proceso de preparación de las decisiones empresariales y de los medios para llevarlas a cabo. Tiene por objeto poner a disposición de los dirigentes de una organización, en el momento oportuno y por el procedimiento más económico, los medios de acción comercial que sean necesarios para su implantación en uno o varios mercados, asegurándole una independencia permanente y una libertad de acción en el terreno de los negocios. En síntesis, la planificación empresarial es el centro de la actividad gerencial de una organización. Sin un desarrollo correcto de esta función, la empresa carecerá de orientación, definición y de dirección.