016 nqn 09082015 output

Page 1

NEUQUÉN

16 LMNeuquén

domingo 9 DE AGOSTO DE 2015

Hay siete focos de conflicto con mapuches por tierras Se registran legítimas demandas pero también intereses económicos. FRANCISCO CARNESE carnesef@lmneuquen.com.ar NEUQUÉN

El recrudecimiento del conflicto entre la comunidad mapuche Campo Maripe, el gobierno provincial e YPF sobre las hectáreas en las que se asienta el yacimiento Loma Campana, punto neurálgico del desarrollo de la formación Vaca Muerta, puso otra vez de relieve los interminables litigios que se dan en el territorio neuquino, con diferentes actores y un denominador común relacionado con los reclamos de propiedad de la tierra. En la actualidad, la Provincia registra al menos siete focos de conflictividad de distinta índole que mezclan legítimas demandas históricas de parte de los pueblos originarios con fuertes intereses económicos, en el que están involucrados no sólo las empresas o el Estado, sino también las propias comunidades. En Loma Campana, frente a la afirmación de los Campo Maripe de que 11 mil hectáreas en esa zona les pertenecen, se acordó un relevamiento realizado por un equipo interdisciplinario integrado por antropólogos que tuvo distinta interpretación. Por un lado, la Confederación Mapuche dice que el informe reconoce la ocupación ancestral de la familia, mientras que el Gobierno sostiene que no hay “datos objetivos y comprobables” de eso. Entre los elementos que presenta el Ejecutivo figura un expediente de 1940 del ex Ministerio de Agricultura de la Nación, que ratifica el asentamiento en 1927 de los ciudadanos chilenos Pedro Campos y Celmira Maripe, abuelos de Albino Campos (actual demandante). Allí, el propio Pedro Campos reconoce como “único dueño de las tierras que ocupa al Superior Gobierno de la Nación”. No obstante, se les concedió a los Campo Maripe 63,8 hectáreas y la posibilidad de otorgarles 640 más. La discusión está centrada en las inhóspitas tierras de la meseta que comunican con el yacimiento, donde la comunidad asegura que tiene animales, mientras que el Gobierno afirma que los pocos que se ven por el lugar con marca y señal corresponden a un criancero llamado Orlando Izaza y no a los Campo Maripe. Para la Provincia es caso cerrado, y lo seguro es que el tema pasará a una instancia judicial en la que se deberá determinar quién tiene razón.

Denuncias cruzadas

Mientras las comunidades mapuches sostienen que tanto los proyectos petroleros como los turísticos avanzan de manera inconsulta sobre tierras que les pertenecen, del otro

En Loma Campana el conflicto por la tierra se desató cuando se firmó el acuerdo entre YPF y Chevron.

lado se alzan voces que señalan que algunos dirigentes indígenas lo que buscan es sólo un rédito económico. Fuentes vinculadas a las empresas de servicios petroleros aseguran que muchas veces son presionadas para contratar alquileres de maquinarias y vehículos de propiedad de estos representantes mapuches para poder ingresar a trabajar en algún yacimiento. Incluso, también trascendieron casos en los que una determinada contratista de una operadora y un dirigente mapuche actúan como socios en desmedro de otra firma de servicios petroleros. Un caso curioso se da a unos 10 kilómetros de Rincón de los Sauces, en el área Cerro Hamaca que opera YPF. En el lugar, habita una comunidad Tehuelche que ya fue

reconocida como originaria de esas tierras. Sin embargo, otras dos comunidades que se autodenominan mapuches y que se presentaron como Auca Huenú y Auca Liguén iniciaron recientemente el reclamo de derechos ante la petrolera estatal. La preocupación de un futuro conflicto es que allí se está desarrollando un proyecto no convencional importante, del que participan también las empresas Total y Exxon.

Otros reclamos

El bloqueo al istmo de Mari Menuco es otro punto de conflicto, donde interviene la misma comisión interdisciplinaria que actuó en el informe sobre Loma Campana y que deberá expedirse a corto plazo respecto de las conclusiones. Fuen-

CIFRA

3 comunidades mapuches

tienen títulos en trámite. Están ubicadas en la zona de Zapala. Se trata de los Namuncurá, Gramajo y Calfucurá. Hace tres meses obtuvo su escritura la comunidad Rams, en Las Coloradas.

tes del Gobierno sostienen que, de no haber acuerdo, el tema pasará al ámbito del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), aunque lo que diga esta entidad no será vinculante. En el lugar, permanece

sobre el ingreso al Yacht Club parte de la comunidad Kaxipayiñ, que también reclama para sí las tierras de Loma la Lata y que no deja entrar camiones, materiales ni nada vinculado a la construcción. Ellos aseguran que habitaban esas tierras antes de la existencia del lago artificial. En la zona sur de la cordillera, los viejos reclamos en Chapelco involucran a las comunidades Vera y Curruhuinca. Ambas cobran una compensación económica por el uso de la tierra que está concesionada a la empresa que administra el cerro. Allí, la Fiscalía de Estado tiene a cargo la mensura para que los Vera puedan tener su escriturara, algo que los Curruhuinca ya obtuvieron de parte de Nación. Un problema lo representan los límites territoriales que reclama para sí cada comunidad, además del pago que cada tanto solicitan por el paso de vehículos camino al cerro (tema que llego a la Corte Suprema de la Nación y que falló que esa ruta está excluida del título de propiedad de los mapuches). El otro conflicto que puede explotar, una vez finalizada la temporada de invierno, es el de los negocios de alquileres de equipos que tienen los mapuches dentro del área del concesionario. Hay un fallo judicial a favor de los administradores del cerro, lo que no hará tardar la llegada de la orden de desalojo. En Villa La Angostura, está el reclamo de la comunidad Paichil Antriao sobre tierras ubicadas en el cerro Belvedere. Tienen personería jurídica, otorgada por la Nación antes de la Ley 26160 de Relevamiento Territorial de Comunidades Indígenas, y se los relevará junto a otras 52 comunidades que ya solicitaron este trámite

.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.