280
M A N U A L DE D I S E N O E D I T O R I A l
9. Comienzos de capítulos. Especialmente en las obras editadas eii inglés, se suele comenzar el primer párrafo de cada capítulo con una o va. rias palabras en versalitas. Aunque a veces se escribe así gran parte drl renglón, normalmente esto debe limitarse al primer sustantivo, junto con el artículo y los adjetivos que le corresponden:
EL H O M B R E era alto y tan flaco que parecía siempre de perfil. Su piel era oscura, sus huesos prominentes ysus ojos ardían con fuego perpetuo. Calzaba sandalias de pastor y la túnica morada que le caía sobre el cuerpo recordaba el hábito de esos misioneros que, de cuando en cuando, visitaban los pueblos del sertón bautizando muchedumbresde niños y casando a las parejas amancebadas. Era imposible saber su edad, su procedencia,su historia, pero algo había en su facha tranquila, en sus costumbresfrugales, en su imperturbable seriedad que, aún antes de que diera consejos,atraía a las gentes.lo' José Martínez de Sousa afirma que las versalitas deben afectar únicamente al primer sintagma:
mente, por lo menos en la forma de grandes letras sin decorar. El menosprecio por estas letras iniciales no nos libra de la necesidad de marcar con eficacia el principio de un nuevo capítulo, componiendo,tal vez, la primera palabra con una mayúscula seguida de versalitas...»'"' Normalmente, los capítulos se abren con un blanco amplio, sobre todo si el diseñador acepta la recomendación tradicional de poner el primer renglón del texto en la línea áurea; arriba estará sólo el título, dominando la página. Estos dos indicativos son más que suficientes para que el lector se entere de que está ante el principio de un capítulo, así que no me parece tan necesario redundar agregando grandes iniciales y versalitas. En realidad, las versalitas son muy útiles para estos principios cuando, por razones de espacio o por la complejidad del diseño, ha surgido una necesidad imperiosa de reforzar la indicación de que se está abriendo un nuevo capítulo. Pero, si se cuenta con espacio y claridad, no son más que un toque estético; por lo tanto, la importancia que Tschichold le concede cs, desde mi pu.nto de vista, un tanto excesiva. 10. Ortografía de las versalitas. Las versalitas se usan exactamente
Los programas de autoedición ...; G R A N B R E T A Ñ A confirmó la presencia...; A L E J A N D R O M A G N O condujo las tmpas...IOI Este uso de las versalitas es muy antiguo, como se puede ver en la figura 104. Jan Tschichold defendió esta letra con entusiasmo en las ediciones que realizó durante su breve gestión (1947-1949) como director de tipografía en la editorial inglesa Penguin Books. En Ausgewühlte Aufsützls über Fragen der Gestalt des Buches und der Typographie (citado aquí en 1;) versión inglesa titulada The Form of the Book), asegura que el primer ptirrafo de cada capítulo merece un tratamiento especial: Aunque [las letras iniciales] también son ornamentos, en primer lugar sirven para distinguir los puntos de arranque importantes. Hoy en día prácticamente han caído en el desprestigio, pero deberían usarse nueva'O0 'O1
V A R G A SL LOSA , Mario: La guerra delfin del mundo, Barcelona, Sei:w Barral, 198: M A R T ~ N ED ZE S O U S A ,José:, Manualdeedición..., p. 132.
bajo las mismas reglas ortográficas que las minúsculas, así que deberán llevar inicial mayúscula, tildes, diéresis o cualquier otro signo ortográfico que les corresponda según las reglas generales.
USO
DE LAS NEGRITAS
Las negritas prácticamente no tienen funciones propias. Puestas dentro de un texto, normalmente distraen, exigiendo constantemente la atención del lector. Pero lo peor es que, al aparecer una palabra o frase en negritas, se produce u n deplorable efecto psicológico: la reducción en la fuerza del resto del escrito. Pensemos en un lector que termina una página, da la vuelta a la hoja y se encuentra d e pronto con que cinco párrafos in6s adelante hay una palabra destacada. Puede suceder que interrumpa (-1 flujo de la lectura para enterarse inmediatamente de qué palabra se trat:i y por qué está así; o bien, puede seguir leyendo sin interrupciones, pero