La zona segura, una obra de Maribel Maseda

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COSMO DENUNCIA SITUACIONES DISTINTAS, MISMAS SECUELAS

Este hecho lo compruebo por mí misma al entrar al local que la asociación Generando Igualdad (generandoigualdad.com) tiene en Madrid. Montse Casasempere, técnico en igualdad, me recibe como si acabase de entrar en el salón de su casa. Una sonrisa, dos besos y un abrazo de esos que se dan con ganas. Son las cinco y media de la tarde y, como cada martes, aquí se reúnen mujeres maltratadas para compartir y compartirse. Hoy han venido Soledad, Marian, Conchi y Laura. No callan. Están sentadas alrededor de una mesa de madera redonda cuando Montse me presenta. Me siento con ellas y ellas, generosas, me aceptan. Son muy distintas. Soledad tiene 67 años y 27 de ellos vivió con un hombre que jamás le puso la mano encima, pero que la anuló como persona: “Llega un momento en que no sabes qué hacer porque tanto si haces una cosa como si haces lo contrario, estará mal”. Conchi tiene 58 y apenas habla de sí misma. No habla, pero asiente como reconociéndose en los recuerdos que van lanzando las demás. Marian de 54 años y Laura de 25 son las más participativas, también son las historias más duras. En su caso, ambas sufrieron malos tratos físicos y psicológicos. Ambas se enamoraron de hombres mucho mayores que ellas, que las sometieron, las controlaron y les dejaron secuelas que aún hoy les perturban: “Yo sigo teniendo miedo a que vuelva, han pasado doce años desde que se marchó, pero le conozco y sé que, tarde o temprano, volverá a por mí” dice, con la tranquilidad del que asume, Marian. “A mí, apunta Laura, me ha dejado marcada. Me he dado cuenta con mi nueva pareja. Es bueno conmigo, pero yo he perdido la inocencia y desconfío de todo”. Desconfía y, muchas veces, no sabe cómo reaccionar al amor: “Me cuesta estar sola. Mi pareja me da libertad e independencia, pero yo no estaba acostumbrada a tenerla y me siento rara”. Escuchándolas comprendo que, aunque no haya un perfil de mujer maltratada, las consecuencias que el abuso deja en ellas son las mismas para todas. Y, en su mayoría, son psicológicas.

UN DELITO DIFÍCIL DE PROBAR

En los tres primeros meses de 2013, según un informe del Observatorio Contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial, se registraron 25.729 denuncias que se traducen en 31.482 delitos. Según el Código Penal, hay diferentes tipos de delitos: vejaciones, lesiones leves, graves o muy graves, coacciones, insultos, amenazas… Este reportaje me ha enseñado que, aunque no siempre que hay

El primer trimestre de 2013 se registraron en España 25.729 denuncias por maltrato psicológico, y 31.482 delitos por vejaciones, insultos, amenazas...

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QUÉ HACER SI SABEMOS QUE UNA MUJER ES VÍCTIMA DE VIOLENCIA PSÍQUICA Hay que enfrentarse a esto con delicadeza, de lo contrario es probable conseguir el efecto contrario:

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Estar a su lado sin cuestionarla ni presionarla.

Ofrecerle por escrito el teléfono de algún recurso de atención a mujeres víctimas de violencia de género para que lo lleve siempre encima por si lo necesita en algún momento.

Lo más complicado es acreditar el maltrato psicológico, y sobre todo la habitualidad del mismo. Sin eso, no hay condena.

maltrato psicológico hay maltrato físico, siempre que hay violencia física hay violencia psíquica. Por eso, cuantificar los Si decide acudir a un malos tratos psicológicos centro, ofrecerle nuestro es prácticamente imposiacompañamiento para que ble. Probarlo ante un trinunca se sienta sola. bunal, aún lo es más. En los casos en los que Elena, la abogada vosea necesario, acudir a un luntaria de Generando juicio a testificar. Sin miedo. Igualdad, me explica que No caer en el síndrome lo más complicado es del experto evitando el acreditar el maltrato psi“lo que tienes que hacer es…” cológico, y especialmente Analizar con ella cómo ha la habitualidad del miscambiado su vida social, mo, y sin ello no es posifamiliar, laboral y personal desde ble una condena por malque mantiene esa relación para trato habitual. Después comparar el antes y el ahora. de escuchar las historias Recomendarle películas, de las mujeres que, mienlibros, exposiciones, tras hablo con la letrada, charlas, etc. que traten sobre el están en pleno taller de tema para que se reconozca. autoconfianza, me ha Es importante que sienta quedado muy claro que la que no es la única que mayoría de los maltratos está pasando por algo similar. tienen lugar en la intimiReforzar sus dad del hogar, sin testigos. potencialidades, La violencia que no se ve especialmente la capacidad de es, además, la violencia tomar decisiones. que más destruye. ¿Cómo se puede probar algo que, normalmente, se hace sin que nadie lo vea? Elena ciñe los labios en una sutil sonrisa y asiente en silencio. Sí, es surrealista. Como también lo es el hecho de que una mujer tuviera que soportar que su pareja le dijera que era una hija de puta, una zorra, un lastre al que nadie quería y que su maltratador orinara cada día en el lavabo del baño y lo justificaba con un: “aquí es donde me gusta mear y si

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