Tanto los picaportes como las manijas de las puertas pueden aflojarse o moverse con el tiempo, por lo que cuando ocurre este inconveniente, no debe preocuparse pues es un incidente raro y sumamente desagradable. Sin embargo, estos problemas se corrigen mejor lo antes posible, porque si no se reparan, pueden permitir que ocurran otros inconvenientes de manera rápida, además de suprimir una parte fundamental de su infraestructura de seguridad. Aquí hay una guía para reparar perillas o manijas de puertas rotas, preparada por los técnicos especialistas en reparación de cerraduras de Madrid Cerrajeros. Apretar un tornillo interno
Primero, retire la manilla o perilla suelta. Determine si tiene una perilla o manija con un tornillo de montaje que está escondo o expuesto. Si está expuesto, desatornille el tornillo de fijación y sencillamente quite el mango, entonces apriete los tornillos en su interior. Posiblemente también deba quitar la placa frontal. Si la perilla o la manilla tienen tornillos de montaje ocultos, va a deber localizar los retenes que sujetan la perilla o la manilla a un husillo sin tornillos visibles. Estos retenes se pueden eliminar presionando sus resortes, dando acceso al interior del mecanismo donde puede manejar los tornillos interiores. Nuevamente, posiblemente deba eliminar una placa frontal para conseguir acceso. Apriete el tornillo de fijación Esta es una estrategia fácil. El tornillo de fijación sosten la perilla o manija al husillo y solo está en su sitio en aquellos con tornillos de montaje expuestos. Un indicador de que su tornillo de fijación está desalineado es si el pestillo no se mueve cuando se gira la perilla o la manilla de la puerta. Simplemente busque el tornillo de fijación en el interior o retire los tornillos expuestos para encontrar el tornillo de fijación y apriételo. Reparación de mecanismos dañados Los problemas pueden deberse al desgaste de otros mecanismos internos esenciales de la perilla o manilla de la puerta. El husillo puede tener inconvenientes mecánicos, o la moldura de la perilla de la puerta puede haber amontonado óxido o suciedad. Solo puede determinar realmente el inconveniente real una vez que se desmonta la perilla o la manija de la puerta. Si estos son los problemas, es una simple cuestión de ponerse en contacto con un especialista en cerrajería con licencia para reemplazar las piezas rotas, o sencillamente utilizar la solución de limpieza conveniente para suprimir cualquier residuo acumulado que esté afectando el uso conveniente de Aprende más aquí la manija o perilla de la puerta.