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ISIDRÍN SE ADAPTA A LOS NUEVOS TIEMPOS

El popular escanciador eléctrico, comercializado por COEM, ha querido rendir su particular homenaje a los “héroes” de la pandemia, personalizando sus diseños y demostrando por qué se ha convertido en un personaje tan emblemático.

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Isidrín, el popular escanciador eléctrico comercializado por COEM, sabe como nadie adaptarse a los cambios sociales. La crisis por el coronavirus no podía pasar desapercibida para este personaje camaleónico que, durante la pandemia, se ha convertido en un médico o, en su versión femenina, en una enfermera, ambos, por supuesto, con mascarilla incluida. Una idea que surge de los propios clientes, que las hacen llegar a COEM, para que la artista Beatriz Bada, las convierta en realidad. Unas personalizaciones que, como manifestan desde la propia empresa, sirven para “llegar mucho más al cliente, ya que hace más auténtico el escanciador y crea un mundo infinito de posibilidades, ya que en cualquier faceta que se personalice resulta muy

curioso y atractivo”.

Más de una década de historia

Pocos son los que no conocen a un personaje tan querido y entrañable, que, con su aspecto bonachón, transmite buen rollo a la gente que disfruta tomando un buen culín de sidra. Isidrín pertenece a la tercera generación de escanciadores de su familia, saliendo al mercado tras el modelo manzana y el modelo tonel. Su comercialización ha supuesto un gran avance para la expansión de la sidra, sobre todo, fuera de la región, ya que son muchos los turistas que se sienten atraídos por él y lo compran para poder consumir luego sidra en su casa. Además, estos escanciadores también han servido

para acercar la sidra a otros establecimientos que no son sidrerías, pero que de esta forma pueden servirla y venderla. Hace siete años, en 2013, la empresa asturiana COEM, especializada en el mundo de la sidra, con más de 25 años de experiencia en el sector, adquirió la patente de este producto, anteriormente comercializada por el Grupo Eolo. Cuando se hicieron con la patente, su estrategia principal se basó en potenciar y mejorar la calidad del producto, pensando, sobre todo, en las necesidades del cliente, especialmente de los hosteleros, principales impulsores del invento.

El darle forma humana fue cosa del escultor Felipe del Campo, al que le llevaron una manzana y le pidieron que le pusiese cara y cuerpo para esconder la botella. Del Campo, que tenía una fotografía de Einstein colgada en su estudio, pensó que como el mecanismo era complejo, le iba a poner la cabeza de alguien complejo y de ahí su parecido con el artífice de la teoría de la relatividad. Su nombre también esconde una curiosa historia, ya que realmente Isidrín es el resultado de la adaptación al asturiano de la expresión easy drink, con la que se buscaba facilitar su expansión fuera de nuestras fronteras. De hecho, el producto ya ha llegado a México, Rusia, Japón, China o Estados Unidos.

El producto va más allá del diseño, como siempre COEM busca la excelencia y ha ido evolucionando sus componentes internos de Isidrín para conseguir el mejor escanciado, desde la bomba hasta el filtro antiimpurezas. Además, la posición inclinada del vaso permite que la sidra rompa contra su borde, acentuando así todas sus cualidades.

Un personaje camaleónico

Una de las cualidades que más sorprenden de Isidrín es su aspecto camaleónico, personalizándolo con la cara de personalidades importantes del mundo del deporte o siendo capaz de vestirse con los colores de cualquier equipo de fútbol. Además,

es normal verle con diferentes trajes regionales (asturianu, pixuetu, llaniscu, peregrino…) o con el uniforme de trabajo de profesiones tan variadas como la de minero, cocinero o albañil. Tampoco se pierde ninguna fiesta, desde el Descenso Internacional del Sella a los sanfermines. Así hasta llegar a más de 150 tipos diferentes de personalizaciones. Por todo esto, ya se ha convertido en un personaje emblemático de la cultura asturiana y, por extensión, de la española. ¿Quién se iba a imaginar a una enfermera escanciando sidra? Pues Isidrín lo ha conseguido y ha vuelto a demostrar que es capaz de adaptarse a cualquier situación.

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