El Orden de la vida

Yo hablo escribiendo en páginas en blanco. Esto es una carta abierta. Las cartas son un modo de hablar con tranquilidad. En solitario. En profundidad. Sin límites. … Nos dicen que debemos seguir el camino que se nos va mostrando… y nuestros pasos no dejan huellas en las partidas. Tampoco hay un camino con indicaciones. Estamos de nuevo solos… como el día en que llegamos…

Todo es ordenado en el Universo. El día y la noche. Los que nacen un día; tienen también un día para despedirse y regresar.

Hay un orden en los que nacen, crecen y viven y se preparan para partir...

Los más pequeños tienen un tiempo para crecer y en ese tiempo los que les dieron vida se despedirán. Es el orden de la vida y de la muerte. De la nada se nace, y en polvo te conviertes.

Pero la gente llora en las desgracias… Llora de pena porque no entiende… Se sorprenden los que se marchan… y más se sorprenden los que quedan.

Por aquello no previsto, por lo inesperado... Pero la muerte es algo natural.

Hay un tiempo para cada cosa… Un tiempo para llegar y un tiempo para partir... Un tiempo para venir al mundo; y un tiempo para despedirse y regresar… En realidad para ir de regreso. La muerte es esperada e igualmente repentina. Que Dios no pille confesados, dice la gente… _ ¿Qué quiere decir eso?.

Que estemos ligeros de equipaje, que para donde vamos no necesitamos ni mucho, ni poco. Cuando lleguemos tendremos lo que es necesario.

Lo que no podemos llevar lo dejamos encargado.

_ A ellos les dejamos algunas cosas materiales que son pocas...

Lo que teníamos que dejarles, se los fuimos entregando de a poco.

Los vestimos…, les enseñamos… los enviamos a la escuela. Los preparamos. Cuando la tarea estuvo cumplida es la hora de partir…, que no es la hora de partir sino de estar dispuestos… De vivir con aquello que reci- bimos y con aquello que fuimos juntando de a poco.

Según como estemos, viviremos algo más, algo menos… ¿Hay algo más…?

Esto de prepararse sirve para todo y para todos… Sin embargo lo olvidamos o no hablamos. Nos da miedo. Tiritamos de frío y del tiempo helado. Hay que prepararse para el invierno. El invierno es oscuro triste, helado, doloroso. El día final será como el invierno. Frío.Tiempo de desnudar el alma y también el cuerpo. Y sin embargo no sentiremos frío. Sentiremos un vacío grande… Benditos los que aprendieron a jugar con cartas…

Podemos jugar la última carta y alguien recoger las que faltan... Y nosotros quedarnos sin nada. Ahí termina el juego.

Generalmente el que pierde se levanta y se va.

En el juego de la vida el que pierde se levanta y se pierde en la noche…

Un día nos volveremos a encontrar, si sabemos el camino. _ ¿Qué dicen los que dicen…? _ Algún día lo sabremos...