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Jueves, 4 Junio 2020

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academia@cronica.com.mx

EL DATO | TITULACIÓN VÍA REMOTA Ismael Fabián Soria Reinoso es el primer alumno de maestría en titularse, vía remota, del Posgrado de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM. El jurado le otorgó mención honorífica y consideró su tesis como la mejor del año

Conanp tiene 10 pesos por hectárea para resguardar las Áreas Naturales Protegidas

v Encargada del cuidado de las zonas silvestres más importantes del país ha sufrido un recorte del 86% en menos de una década v Ahora enfrenta reducción del 75% en gasto operativo

[Isaac Torres Cruz ] E n los últimos siete años, los recursos públicos destinados a la protección de las Áreas Naturales Protegidas (ANP) en México han sufrido un recorte del 86 por ciento. En México hay 182 ANP que cubren 90 millones de hectáreas y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) es responsable de su administración y manejo. Este año cumple su 20 aniversario.

La dependencia de gobierno cuenta con un presupuesto equivalente a 9.6 pesos por hectárea, a pesar de que en 2016 dicha institución señaló que para un manejo efectivo, se requieren al menos 74 pesos. Actualmente, la institución, al igual que otras como la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) se encuentran al borde de la inoperatividad debido al recorte presupuestal planteado por la Secretaría de Haciendo y Crédito Público a dependencias de gobierno.

De acuerdo con el reporte Cuidar lo que importa: Presupuesto para el patrimonio natural, entre 2012 y 2018, el 75 por ciento del gasto destinado a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) se destinó a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), mientras que el 2.5 por ciento fue destinado a la Conanp.

Al término de este periodo, el presupuesto aprobado del sector se redujo en 46 por ciento de lo asignado el primer año, representando menos del 1 por ciento del gasto programado. Así, el presupuesto de la Conanp se redujo en 18 por ciento, mientras que la superficie protegida aumentó 71.8 por ciento.

“Actualmente, se observa que el cuidado del medio ambiente sigue sin ser una prioridad, ya que la tendencia continúa a la baja en este nuevo sexenio, lo que se refleja en la drástica reducción de menos 28 por ciento a la Conanp, debido a que un presupues

presupuestal, el documento refiere que existen vías para mantener un presupuesto saludable en la dependencia, mediante los siguientes seis puntos, entre los que se encuentran obtener los recursos autogenerados:

Asignar los recursos necesarios para la operatividad de las ANP; establecer un mecanismo de coordinación entre la Semarnat y SHCP para el reintegro de recursos provenientes del cobro de derechos. Establecer el fondo para integrar el cobro de multas e infracciones ambientales de manera transparente por parARCHIVO te de la Profepa. Cuatro: Promover una adecuada gestión entre la Profepa y la SHCP para asegurar el cobro de las multas e inONGs alertan sobre la falta de recursos de la institución y hacen propuestas en el reporfracciones y su integración en te Cuidar lo que importa: Presupuesto para el patrimonio natural. el fondo. Definir y publicar los criterios para asignación presuto aprobado en 2018 de mil 176 Historia Natural Niparajá A. C. y puestal al interior de la Conanp, millones de pesos pasó a 843 miPronatura Noroeste A. C., y preparticularmente entre ANP. Y, llones en 2019, en cifras reales”, sentado por el grupo Noroeste Sofinalmente, generar, sistematiseñala el documento elaborado ciedad Civil para la Sustentabilizar y publicar el gasto ejercido por el Centro de Análisis e Investidad Ambiental (NOSSA). por cada ANP por parte de los gación de Fundar, la Sociedad de No obstante la precariedad sujetos obligados.

EL MIEMBRO DE EL COLEGIO NACIONAL Y PREMIO CRÓNICA PARTICIPÓ EN LA SEMANA DEL MEDIO AMBIENTE

“Sólo con conocimiento científico se obtendrán políticas públicas útiles para la sociedad”: Sarukhán

[ Isaac Torres Cruz ]

g La ciencia y la investigación científica debe ser la base de la toma de desiciones y de políticas públicas, enfatizó una vez más José Sarukhán, miembro de El Colegio Nacional y ex rector de la UNAM. El ecólogo más importante del país, Premio Crónica, participó en la Semana del

Medio Ambiente en Tiempos de PandeEL COLEGIO NACIONAL mia, que se lleva a cabo esta semana en El Colegio, y puntualizó que sin conocimiento científico “no hay manera de que las políticas públicas sean sostenidamente útiles y adecuadas para el beneficio de la sociedad, y no a intereses políticos o económicos”.

El coordinador y fundador de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) añadió que si bien se deben tomar consideraciones políticas, no pueden ser determinantes y deben basarse por otra parte en el mejor conocimiento científico.

El Premio Nacional de Ciencias y Artes señala lo anterior al frente de una de las instituciones más importantes en la generación de ese conocimiento, Conabio, la cual sufriría una reducción presupuestal del 75 por ciento en su gasto operativo al igual que otras dependencias de gobierno, algunas del sector medioambiental serían las más afectadas, como Conanp.

En videoconferencia, el científico refirió por otra parte que la ciencia debe ser traducida a un lenguaje entendible, creíble y asumible por las personas para que se vuelva parte de su cultura y participen en ella. “No ha ocurrido, por ello existe una distancia entre la comunidad científica y gran parte de la población, lo cual es culpa en gran medida de los investigadores, obstaculizada por los intereses que no quieren que ese conocimiento sea apropiado. Es algo que debemos resolver”.

Resolverlo, dijo, significa un trabajo adicional de los académicos para generar información, datos, resultados experimentos exitosos. “Eso significan una demanda adicional en el trabajo de los investigadores, pero ahora más que nunca es indispensable para que la sociedad comprenda el beneficio de esa actividad para ellos, los bienes que resultan de la ciencia”.

R i c a r d o E s p i n o z a T o l e d o *

En México, la reinvención del sistema de salud público nacional es una de las rutas en la reconstrucción del Estado. La lucha contra la corrupción es condición indispensable. El propósito es hacer más eficaz el desempeño del Estado con base en la participación social, así como en la renovación del servicio público y de su mística

VOCES DE LA UAM

Un Estado para el desarrollo

La pandemia del coronavirus ha alterado la vida de las personas y los sistemas políticos en el mundo. Todo se ha vuelto más vulnerable. A causa del nuevo virus, ahora está en juego no sólo la salud de las personas, sino su vida misma. Sin vacuna ni curación a la vista, por su capacidad extraordinaria de contagio, tampoco hay maneras efectivas de prevención, más que el encierro. Y la amenaza no desaparece, sólo se mitiga, hasta donde se puede. Pero el SARS Cov-2 que genera el COVID-19, con su cauda de desgracias, se sumó a una serie de problemas derivados de políticas en favor de los privilegiados tomadas por los gobiernos nacionales.

En México, el desmantelamiento del Estado pregonado por el credo neoliberal, presentado como programa de modernización, incluía desaparecer el sistema de protección social contenido en los servicios públicos de salud. Aunque se financian con recursos públicos, “le salen muy caros al Estado”, sostenían sus defensores. Había que dejar que los individuos se las arreglaran como pudieran. Después de todo, así era en Estados Unidos de América, el gran referente. Quizás el ejemplo más claro del proceso de privatización sea la subrogación de los servicios de salud.

Se impuso también la creencia según la cual lo producido en el extranjero era mejor y más barato. Se adoptó la globalización sin previsiones ni mecanismos que impulsaran el desarrollo nacional. En realidad, lo nacional era visto como un estorbo. Si queríamos ser modernos debíamos dar el salto. No interesaba ser autosuficientes en nada, pues todo se podía adquirir en el extranjero.

Ese programa fracasó. En Estados Unidos, junto a los desatinos del gobierno del presidente Donald Trump, están viviendo una crisis social sin precedentes. La muerte de una persona de origen afroamericano a causa de la brutalidad policiaca es sólo la gota que derramó el vaso de la conflictividad acumulada. La violencia extendida a muchos estados de esa nación, injustificable como es, tiene por resortes una serie de agravios entre los que están la marginación y las desigualdades sociales.

El todavía país más rico del mundo ha tenido que irse alejando del fundamentalismo neoliberal que ellos mismos impusieron al mundo como verdad única. La intervención del Estado en materia financiera y comercial se ha convertido en pivote de la estabilidad y del funcionamiento de la economía; socialista llamaron al presidente Barack Obama sus detractores por esa acción. Trump, a su vez, ganó la Presidencia por su cuestionamiento a la globalización y al liberalismo depredador.

Europa experimenta un fenómeno parecido, agudizado ahora por la pandemia. La tendencia es a un mundo más centrado en estructuras económicas nacionales. Esa acción no puede ser soportada ni modelada por los grupos privados. La naturaleza de la empresa privada es la ganancia, no el servicio público. De hecho, la empresa privada fue el motor de la globalización.

Como exigencia social, se está

“La emergencia sanitaria vino a acelerar los cambios en curso a nivel mundial”

dando el giro en favor de Estados más interventores en el diseño del marco y de los mecanismos que estructuren y protejan la vida y el bienestar de la mayoría de los adultos. Al Estado no le toca hacer todo, desde luego, ni intervenir indiscriminadamente. Por su capacidad y vocación, le corresponde llevar a cabo las acciones sociales fundamentales como la de hacer de la salud un derecho efectivo, al igual que la educación o la seguridad pública.

En México, la reinvención del sistema de salud público nacional es una de las rutas en la reconstrucción del Estado. La lucha contra la corrupción es condición indispensable. El propósito es hacer más eficaz el desempeño del Estado con base en la participación social, así como en la renovación del servicio público y de su mística. Ni todo el mercado, ni todo el Estado. La intervención del Estado tiene que darse en rubros que impulsen el desarrollo.

Por ello, es ineludible la regeneración del Estado bajo la forma de reconstrucción con orientación al bienestar de las personas. Un objetivo es la recuperación de la soberanía alimentaria y de la energética. Depender de los vecinos del norte es un proyecto fallido. El Tratado de Libre Comercio no llegó a ser el puntal que jalara al país al desarrollo económico. Quedó como un circuito cerrado al sector exportador, que era exitoso desde antes del Acuerdo. Su renegociación como T-MEC logró, al menos, preservar esa ventaja.

La emergencia sanitaria vino a acelerar los cambios en curso a nivel mundial. Gobiernos y sistemas políticos están experimentando presiones inesperadas. Redescubren que el mercado libre afecta a las mayorías, redistribuye mal y acaba por distorsionar la libre competencia y concurrencia. Redescubren, con ello, la función social del Estado, intervención necesaria incluso para la reproducción del capital.

En México, ayuda económica directa, tandas y créditos van paralelos a grandes proyectos de infraestructura, obra pública también pensada para crear empleos e impulsar áreas geográficas muy depauperadas, que se conjugan como parte del programa de un Gobierno que requiere construir un Estado para el desarrollo.

*Profesor-investigador del Departamento de Sociología,

Área de investigación de Procesos Políticos y docente del Posgrado en Estudios Sociales de la Unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana

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