Revista 360 / 124

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Noviembre 2019 • Año 12 • Número 124 • www.revista360grados.mx • 35 pesos

[edición de nuestro XII aniversario]








6EDITORIAL

Editorial

B

ien, lo logramos. Cumplimos 12 años llevando las Instrucciones para vivir en Puebla. Nuestro décimosegundo aniversario, que se lee fácil, pero la verdad no lo ha sido. Tampoco nos quejamos, honestamente han sido los mejores años que hemos invertido en esta vida. Les confesaré algo en esta carta editorial —que no debería escribir—, pero ya estamos más allá del bien y del mal: me encantan esos editores o dueños de revistas que aparecen por ahí con su actitud altiva y fifí (dijeran en la 4T), hablando como si tuvieran papa en la boca o sintiéndose nuevos mirreyes. La verdad es que hacer una revista es una obra de artesanía. No es para lavar lana. Ni para aparentar ser socialmente buenos. Esto es periodismo y el periodismo es un arte. Y sí, sí es presunción. Es un trabajo difícil porque compites contra la gente que no lee, contra los políticos que piensan que una revista solo es un panfleto político, contra los memes de internet que, aunque algunos son muy buenos, honestamente otros no aportan nada. La Revista 360º Instrucciones para vivir en Puebla no vive de hacer memes de cemitas, ni tampoco de escribir el primero de la temporada, ni tampoco de burlarse de los tlaxcaltecas, ni mucho menos de hacer menos a las colonias como San Ramón o Amalucan. No, nuestra revista vive de sus contenidos. Sí, con humor, pero no con bulliying. Para nosotros, Puebla no es una cemita ni una ida al centro comercial, tampoco nos gusta la idea de hacer menos a las colonias que son de escasos recursos, mucho menos nos interesa burlarnos de la gente de Tlaxcala y sentirnos superiores. Es que no saben cómo abundan páginas de internet y fan pages de Facebook que juegan a eso solo para obtener su like. Una revista es un trabajo fino dentro del periodismo, porque es atemporal. Una buena revista se conserva, se guarda, se vuelve a releer. Los diarios impresos que son imprescindibles terminan en algunos casos en la hemeroteca,

pero muchos envolviendo chiles o aguacates o sirven para limpiar los vidrios. No es que no usemos los periódicos impresos y menospreciemos el trabajo de nuestros colegas. En lo personal trabajé en algunos diarios y, en serio que los leo, me gustan y los respeto, pero al final un periódico impreso escribe una historia al instante y va cambiando. Las revistas son antidemocráticas por naturaleza, se hace una junta editorial, se determina el trabajo, se realiza, se escribe, se diseña y, al final, sale al público. No juega necesariamente a agradar a la gente, porque el público sabrá si nos sigue o no, no se hizo una consulta pública para proponer la portada, no se hizo ni siquiera un estudio de mercado ni le pedimos la opinión al Papa. Quizá ese sea el encanto de las grandes revistas, no buscan necesariamente agradar a la mayoría, están hechas para gente que disfruta de leer, de admirar el diseño y la fotografía. Revista 360º nació para Puebla y los poblanos. Critica las actitudes aspiracionales, la hipocresía, la doble moral, promueve el amor verdadero y se burla de los que piensan que con sacar fotos suyas en Facebook en verdad piensan que están enamorados. No, Revista 360º no nació para jugar a ser los niños buenos del salón de clase, tampoco los malos, simplemente es lo que es, para informar y entretener. Les confesaré que, para la 4T, las revistas son menospreciadas, porque pareciera que apuestan a los memes, las fake news, los 140 caracteres y a dividir a una sociedad. Ojalá me equivoque, pero es lo que aparentan. Aun así, y a pesar de todo ello, el mercado es cada vez más complejo para los medios impresos, pero estamos vivos y eso es gracias a los lectores, clientes, diseñadores, reporteros, impresores, repartidores y todos los que gustan de las Instrucciones para vivir en Puebla. Así que levanto un caballito de tequila y brindo por todos los que han colaborado con esta publicación que nació bajo el signo de escorpión un 5 de noviembre del 2007. ¡Salud!

Zeus Munive Rivera editor





10CONTENIDO

Nuestra selección de aniversario

Directorio Zeus Munive Rivera Director General Uriel Zuloaga Asesor de Recursos Humanos La Aldea. Edición y Diseño Edición, corrección y diseño editorial

Año 12, No. 124, noviembre de 2019. Revista 360° Instrucciones para vivir en Puebla es una publicación mensual editada y distribuida por Grupo Editorial Revolver S. de R.L. de C.V. Calle 9 Poniente 2519-2, colonia La Paz Puebla, Pue., C.P. 72160. Teléfono (222) 2303239 y (222) 7853800. Editor responsable: Zeus Munive Rivera. Reserva de Derechos al Uso Exclusivo No. 04-2012-091814274100102 otorgado por el Instituto Nacional del Derecho de Autor. Número de Licitud de Título y Contenido 16759 expedido por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Impresa por Pincel Digital, Priv. 37 Norte, col. Amor, CP 72140, Puebla, Puebla. Revista 360° Instrucciones para vivir en Puebla es una marca registrada. Este ejemplar se terminó de imprimir el 30 de octubre de 2019 con un tiraje de 10 mil ejemplares. Las opiniones expresadas en la revista por los autores o columnistas no reflejan la postura del editor. Los listados y demás datos comerciales son solo de carácter informativo y el editor no asume ninguna responsabilidad respecto de la calidad, confiabilidad, veracidad o cualquiera otra característica de los productos o servicios anunciados. Todos los derechos reservados © 2019. Queda estrictamente prohibida la reproducción de los contenidos sin previa autorización del editor. Para quejas, sugerencias, comentarios y felicitaciones: @revista360 Revista360º Instrucciones para vivir en Puebla @revista360grados revista360grados@gmail.com

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Al llegar a nuestros 12 primeros años de vida, decidimos hacer una selección de algunos de nuestros mejores textos y diseños que hemos publicado a lo largo de nuestra historia. Es difícil hacer esta selección, porque es como cuando a una persona le dicen que elija sus 10 mejores películas, o las 10 mejores canciones que le gustan, es tanto lo que uno vive, observa y disfruta, que a veces somos injustos con dejar fuera tanto. Esta vez hicimos una selección del 2012 al 2019. La razón: no por menosprecio del trabajo anterior ni mucho menos, ni porque queremos ser como Ozzy Osbourne cuando regresó a Black Sabbath y dejó fuera el trabajo de Dio que fue maravilloso. Es que desde octubre del 2012 se generó una nueva época de la revista. Se creó una nueva era. Insistimos, no se menosprecia porque todo suma, el trabajo que se hizo antes fue extraordinario, pero quisimos hacerlo desde esa fecha. Así que, sin más preámbulos, va nuestra selección con los debidos créditos correspondientes por tantos y tantos colaboradores que han pasado por estas páginas. Ojalá sea de su agrado.


CONTENIDO11

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Crónicas para los últimos días CRÓNICAS

El señor de los leones NO FICCIÓN

¿Qué demonios quieren las mujeres? GUÍA

Olimpia y la batalla contra el ciberacoso sexual GUÍA

2 imágenes de la paternidad NO FICCIÓN

Los 12 mandamientos del romántico a la antigua GUÍA

¿Qué dice Puebla? Matrimonio igualitario GUÍA

Instrucciones para publicar desde el corazón en Revista 360º NO FICCIÓN

Centro Histórico solo para iniciados GUÍA

“Fui violada por 43 mil hombres” EN CORTO

Hecho en el Centro EN CORTO

Monólogo sobre crónicas negras, incinerados, desollados y más CRÓNICA


12CRÓNICA


CRÓNICA13

Terremotos, meteoritos, erupciones volcánicas, avistamientos de ovnis y elecciones presidenciales, son el caldo de cultivo para que la semilla de las profecías mayas germine. Para muestra, estas crónicas apocalípticas escritas por cuatro modernos oráculos que hicieron a un lado sus proyectos literarios, para atreverse a imaginar el fin de los tiempos.


14CRÓNICA

PRÓLOGO AL FIN Fueron

tiempos de penuria. Y cada día trajo consigo nuevos signos. Una a una, las profecías se cumplieron. Una mañana el estruendo de la Tierra se deshizo de los templos como torres de naipes tiradas por una mano minúscula (7 de agosto, Año Telcel, 18:42); al otro, los mercados financieros colapsaron y dejaron sin razón a los Estados y a sus defensores/detractores (14 de julio, Año del Auto de Lujo, 9:57); los volcanes expulsaron su furia en todos los rincones del orbe, inseminándolo a su paso con vidas de piedra (2 de septiembre, Año del Gran Dictador, 04:19); la energía menospreció su uso, y nadie nunca más volvió a leer a la luz de una bombilla (11 de diciembre, Año del Auto de Lujo, 19:46); unos pocos se alimentaron de lo que había sido abandonado a su suerte en algún supermercado, los más lo hicieron de lo que hallaron en el camino (8 de febrero, Año del Auto de Lujo, 7:03); la alineación Pléyades-Sol-Nibiru-Luna-Tierra, en el centro de la galaxia, imbuía las conciencias con incertidumbre (21 de diciembre, Año Telcel, 23:58). El eje del planeta se modificó, y arriba fue abajo (21 de marzo, Año del Gran Dictador, 13:21). Los avistamientos, abducciones y contactos extraterrestres se convirtieron en charlas previas a la caza (Centuria I, Año del MacBook, sin hora). La desolación reinó en el alma de cada ser humano. Fueron tiempos de cambio. La televisión mostró rostros sonrientes y fluidas conversaciones entre las personalidades más dispares, las naciones más distanciadas. Los líderes y sus pueblos por fin se comprendieron y estrecharon sus manos como

signo fraternal de renovación. A todo ello lo envolvió un armónico soundtrack de ukulele, y la luz se reflejó en cada vibrante pupila. Fueron tiempos de hermandad (Horas de la Nueva Vida, Año del Contacto, Presagio 83). La yoga se practicó en ágoras atestadas, y la alimentación de los hombres rechazó al animal. Se privilegió el ejercicio, y la buena voluntad invadió las acciones. La utopía se hizo terrenal, y el disentimiento fue acuerdo, fructífero diálogo de pastos verdes y bóvedas celestes únicas… Q. despertó tembloroso, temiendo su muerte y posterior juicio en el último día. Se vistió y bajó las escaleras. Salió a la calle con un portafolios apretado contra su pecho. Notó que el mundo aún palpitaba. Miró a cada homínido ejecutar su acción. Observó a cada uno abordar el transporte que les trasladaría a su jornada. Vio a los que caminaban, a los que mendigaban, a los que discutían, a quienes lloraban o sonreían. Los miró a todos. Y subió al tren que lo llevaría al trabajo. Su intuición solo era un estado del alma. Hacía mucho tiempo que el mundo había llegado a su fin.


CRÓNICA15

Este

es otro fin del mundo, uno que te promete la nostalgia por lo que aún no sucede. Daño cerebral: “There’s someone in my head but it’s not me”. Entro a un bufete de comida china con el pretexto de abrir una galleta y conocer mi fortuna. Hay suertes que se conjugan al crujir los vehículos que la cifran: Crack. Leo el papel doblado hasta el ridículo y recuerdo la frase de Ray Loriga en Tokio ya no nos quiere, en la que señala que la memoria es un perro estúpido al que le arrojas un palo y te devuelve cualquier cosa. Tomo un respiro y salgo del restaurante, envuelto por el aroma a sudor y comida; voces chillantes y sonidos de cubiertos; platos y ollas que chocan unas con otras, que activan un clank inmediato al olvido. Me siento en la banca de un parque, tomo una libreta y anoto: El recuerdo es el plano cartesiano del sonido, sus ejes nos dan una falsa orientación. Pienso en la mirada de quienes vieron cabalgar a Lady Godiva, luego le pongo un sonido: mordida de manzana. También imagino las reflexiones de Einstein para cifrar el universo y sí, le pongo un sonido: colibrí que vuela dentro de una caja de cartón. Me levanto y sigo mi camino. Llego a la esquina donde espero el autobús, busco en mi bolsillo unas monedas y encuentro el papel: lo vuelvo a leer y percibo el sonido de la madera húmeda: “Aprende a olvidar”. Entonces “olvido” el primer fin del mundo que presencié, aquel que me mostró la película Las profecías de Nostradamus que transmitía Canal 5 cada fin de año. Daño cerebral: “I’ll see you on the dark side of the moon”. Cuando era

niño pensaba que el Apocalipsis sucedería como en la televisión: con una pantalla negra dándole crédito a la humanidad por su participación. Claro, como en toda película de bajo presupuesto la del fin del mundo tendría errores de producción, y veríamos que la especie humana no ha sido más que un conjunto de extras que dotan de sinsentido frenético el devenir. • El fin del mundo inicia con las promesas no cumplidas; luego, la resignación. • El fin del mundo sí sucedió. Estamos condenados a vivir como hasta ahora: impávidos, inoperantes, injustificables... • Cada recuerdo mal conjugado es, en sí, el inicio del fin del mundo. • El fin del mundo es sonámbulo. ¡Cuidado y se despierta! • Por las mañanas el fin del mundo rehúsa a verse al espejo, sabe que hizo algo de lo que es mejor no acordarse. • El fin del mundo, siempre tan exagerado, hace tormentas en vasos de agua. • El fin del mundo es punk, llega cuando le da la gana. • “¿El fin del mundo, qué es eso?”, pregunta Buzz Lightyear mientras surca el infinito. Ahora sólo queda escuchar a Louis Armstrong cantar que el mundo es hermoso, mientras todo se desmorona en slow motion.

W O L S

I T O M

N O


16CRÓNICA

El

último viernes el hombre se despertó temprano. Aunque su familia ya no vivía con él y, entonces, el origen de su estrés doméstico sólo tenía que ver con el equilibrio de las pilas de trastes sucios, decidió limpiar la casa antes de irse. Las calles estaban solitarias. En lugar de un barullo general existían breves batallas del eco. Dos tiendas abiertas allá, un restaurante sirviendo comida caliente, un puesto ambulante que se resistía a cerrar. Esa contención vital, paradójicamente, magnificaba la vida urbana. El hombre había hecho la llamada luego de vestirse y cuando el vapor del baño se resistía a la sepultura de gotas frías sobre el techo o los muebles cercanos a la ducha. Dijo “hola”, y luego de dos frases pidió hablar con su hijo. Le hizo bromas, le prometió un viaje al zoológico el sábado y estuvo durante diez minutos escuchando pacientemente el relato de monosílabos, gruñidos y onomatopeyas de su primogénito. Cuando colgó la idea de tomar el auto y recorrer las seis horas para verlo volvió a su mente. No, se dijo con firmeza luego de un estira y afloja con la imposibilidad. De alguna forma, también debía pensar en él. De alguna forma, ese viernes se trataba de eso: de asumir la condición fatal de individuos. Como había pensado, encontró las iglesias y dos templos de una religión que presagiaba el fin del mundo abiertos. Nunca desees terminar tus días en un hospital ni en una iglesia, mucho menos en la fila de un banco, le había escuchado decir a su padre. Recordó, sin orden, sus días en la universidad, la luna de miel en Moscú, el cubículo sucio de su primer trabajo, la lucha eterna con el cigarro, las sonrisas de su hijo y, sobre todo, la duda e incomprensión hacia todos esos temas de la vida sobre los que había reflexionado sin encontrar solución. A

pesar de tantos cabos sueltos y espacios en blanco, no pensó en pedir más tiempo. En ese instante supo que el verdadero engaño era esa intención de apropiarse de todas las respuestas. Tuvo la intuición salvadora de que sus siguientes treinta años, si los tuviera, se tratarían de lo mismo que los cuarenta que había vivido. Nada más. De todas las cosas ilegales o no que pudo hacer durante esas dos horas sólo eligió tomar un trozo de ladrillo y escribir sobre una pared blanca en medio de la plaza principal: “Fuimos rebeldes y audaces”, la única parte que recordaba de un verso escuchado en su juventud. Lo miró unos minutos y se fue. En algún momento se aburrió. La expectativa de los últimos días, la larga y cansada discusión con su ex mujer ante la renuencia de dejarlo ver a su hijo, las filas para inscribir su nombre, ocupación y una frase que lo describiera en aquel archivo (una desesperada máquina del tiempo como la que entierran los niños en el jardín), la planeación y ejecución de las veinte últimas cosas que quería hacer antes de morir, y la reflexión sobre la vida y la muerte (que sólo al final encontró consuelo en una novela, La muerte del padre de Karl Ove) le habían arrebatado todas las fuerzas. Ahora, esa caminata es una suerte de parpadeo final para nunca olvidar aquellas calles. El hombre estaba solo. Ingenuamente había fantaseado con el consuelo de hallar un pequeño ejército de esforzados ciudadanos que se reunirían para el último respiro. En la televisión había visto cómo los supermercados cerraban, por fin, luego de esperar clientes desperados por hacer la compra. Nadie había decidido llenar sus alacenas. Al hombre le pareció algo sabio y esa idea que la colectividad esbozó la sintió esperanzadora. Antes de dar la vuelta en una esquina el hombre se topó con otro hombre. Se miraron un instante para tratar de reconocerse pero no lo lograron. Debido a la cercanía, optaron por darse la mano y, luego, quizá enternecidos, se atrevieron a escenificar un abrazo como si fueran hermanos. El primer hombre intuyó que había exagerado pero el otro se mostró conmovido y le dedicó un “gracias” mientras se separaban. Ahora comienza el frío (que no durará más de unos segundos), y mientras el hombre camina veinte pasos, que resumen un par de complejos pero breves miles de años, el mundo acaba.

...OCURRIRÁ UN VIERNES


CRÓNICA17

THIS IS THE END (ESCÚCHESE CON MÚSICA DE FONDO DE THE DOORS)

Si

Unos minutos antes, seguramente, si pensara de manera muy optimista sacaría una botella de vino, unos quesos, un me preguntan qué estaría haciendo si lle- jabugo cortado en laminitas, pondría un gara el fin del mundo, no, no sería muy poco de jazz, Stan Getz o Charlie Parker elaborado. Si tuviera una novia, quizá la estaría bien. abrazaría muy fuerte hacia mí tratando Un poco más melodramático sede protegerme y de protegerla. Si el daño ría con Astor Piazzolla, no sé por qué es inminente quizá lloraría, recordaría en pienso en el jazz para acompañar el fin ese instante todo lo que hice en mi vida. del mundo. Quizá la de “Desafinado” Esperaría la muerte aterrado, sabría que de Stan Getz la recibiría gustoso antes voy a morir, pediría perdón mentalmente de que todo se acabe, antes de todo el o algo así. Perdón, el pinche perdón, esa cataplum. situación religiosa e impuesta, el perdón Pero esa es una visión muy optimista, y por lo mismo me vendría la culpa, es quizá sea más radical lo que ocurra, quizá decir, estaría avergonzado, saben, de doyo esté solo y vea las fotos de mis papás y lor también se avergüenza uno. mi hermano en un viaje que hicimos a Tendría miedo. Acapulco por allá de los años noventa. No sé qué será, si una luz blanca que A lo mejor recordaré a un perro de me ciegue o simplemente que se apague raza extraña que se llamaba Nixon y que todo tipo de brillo y que caiga en una tese mordía la cola todo el tiempo y al rrible oscuridad. cual quería yo mucho. No sé, pensaré en mi tío Carlitos y en sus copitas de vino Tres Coronas, su tocadiscos escuchando ópera y su olor a viejo, a siglo pasado. Recordaré el bullying en la escuela a un hijo de puta que me desvió el tabique de la nariz cuando traté de golpearlo y me ganó en la partida, creo que se apellidaba Lechuga, pues al hijo de puta de Lechuga lo recordaría. Caminaría descalzo por la casa, mientras probablemente sienta o perciba que algo raro sucede. No sé, a veces todos los días siento que se acaba el mundo, porque siempre camino descalzo en mi casa y siento que algo raro sucede. Pensaría si hice bien o hice mal, esa maldita incertidumbre que ronda a cada rato mi cabeza, creo que ese sería mi peor momento, cuando yo esté con esas voces hablándome en mi cabeza diciendo: no, hiciste mal, eres un pendejo, la cagaste y su opuesto. Terminaría hablando solo, lo sé. No me imagino cómo sería el fin de los tiempos. A veces pienso en los clichés que nos han impuesto en las películas, polvo, tierra, gente corriendo en las calles, violencia, fuego, una persona incendiándose, temor, sirenas, gente tratando de entrar a fuerza a las casas, todo sería caos, desesperación. No, no me imagino las imágenes de los libros que los testigos de Jehová regalaban en donde aparecen unos negritos con sus panzotas a reventar, y unos soldados, un güey tirado en la cama en señal de enfermedad y un tsunami azotando en un puerto. No,

esa imagen se me ocurre como lámina de la escuela de las Sunrise y me da hasta risa. Miraría por última vez el Facebook, cómo sería el Facebook del fin del mundo: Mark Zuckerberg pondría un anuncio diciendo “got ya, ass-holes”. No sé, seguramente stalkearía a varias chicas que me gustan y vería qué están haciendo. Quizá en ese momento me anime a decirle que he estado enamorado secretamente de ella, que siempre pensé que era la protagonista de mi comedia romántica. Me metería a Twitter, pondría la cuenta de @soymargarito que diría, cómo escribiría sus últimos tuits. @EPN hablaría de orden y paz social, @AMLOSI anunciaría que aún en la cuarta guerra mundial con palos y piedras seguiría Morena. No me puedo imaginar el fin de los tiempos. No puedo pensar en cómo sería el cataclismo, por fin admitiría que soy un católico de clóset, para que no me caiga la voladora en el juicio final. Regalaría toda mi colección de CD y DVD así como mis juegos de Xbox y Playstation, ese entonces sería el acabóse de los tiempos. Quizá le miente la madre al universo, a lo que llaman el creador por destructor, quizá simplemente salga corriendo a la calle y sea uno más en esa imagen. A lo mejor no ocurre nada. Y sólo sigo escuchando jazz, comiendo un queso y tomando vino. Stan Getz sonaría siempre en mi playlist mental y nunca le diría a esa chica en Facebook que estoy enamorado secretamente de ella. Es decir, quizá siga esa monotonía aplastante y que genera vergüenza, porque, saben, la monotonía genera vergüenza. Entonces, quizá así sea el fin del mundo, que siga todo igual.


18NO FICCIÓN

2 imágenes de la

paternidad Estas son algunas de las historias, testimonios y visiones sobre la figura paterna. Múltiples y diversas, amplían el panorama de las diferentes formas de ser padre. Por Alvaro Hernández, Zeus Munive, Edmundo Velázquez / Fotos Jorge Patiño e Iraís Fernández


NO FICCIÓN19

ALVARO HERNÁNDEZ: UN PAPÁ ENAMORADO DE SU HIJA No me resulta nada sencillo hablar o escribir sobre mi paternidad. A decir verdad, éstas son las primeras líneas que me permito en los ocho meses que mi esposa (qué raro me resulta decirle así) lleva de embarazo. ¿Qué se puede escribir sobre el tema que no se haya escrito antes? ¿Qué más agregar a la enciclopedia de lugares comunes que todo padre repite –como si fuera un mantra– ante la inminente llegada de su hijo o su hija? Empezaré por decir que la idea de la paternidad, durante los primeros meses del embarazo, es sólo eso: una idea. Un paquete emocional que se compra de manera espontánea, casi sin pensar, en el tianguis ideológico que llamamos inconsciente colectivo. Incluye una larga lista de nociones preconcebidas, pautas de conducta, agenda de actividades y, por supuesto, un compendio con frases a la medida para cada ocasión. Como todo lo que es social, este paquete se impone desde afuera y hay a quienes les calza y a quienes no. Me ubico como parte de estos últimos. Diré, además, que estoy convencido de que la vivencia del padre es radicalmente distinta a la de la madre. Que durante esta primera etapa los papás estamos social y culturalmente excluidos. Que no tenemos baby shower ni días de incapacidad. Que los consejos del médico, de las abuelas, de los libros y revistas especializadas no están dirigidos a nosotros ni a nuestras necesidades. Y, lo que es peor, que la relación con nuestro hijo o hija será, durante varios meses, sólo a nivel intelectual. No importa cuánto

hayamos deseado ser padres ni las expectativas que a nivel emocional cubra nuestro nuevo estado. La naturaleza nos ha excluido de la experiencia de amor y dolor que supone el tránsito del embarazo y el parto para las mujeres. Y eso nos deja –al menos por este periodo– fuera de la jugada. No sentiremos crecer ni moverse a nuestro hijo, no experimentaremos las incomodidades, el cansancio, el dolor de sus primeros meses de vida. Se nos ha privado del privilegio de compartir su existencia. Y, ante tal frustración, solamente nos queda la metáfora. Por eso, muchos hombres aseguramos estar embarazados, cuando en realidad somos sólo fieles testigos del embarazo de nuestras parejas. Toda mujer moderna sabe que en la Apple Store existe una aplicación llamada Baby Center, que informa a la madre puntualmente, semana tras semana, lo que debe esperar de su cuerpo y mente durante cada etapa del embarazo. Como para esto de ser papá no existen aplicaciones ni caminos trazados, comparto un poco de mi experiencia personal durante estos nueve meses de espera. Semana 1 a 12

En nuestro caso, la noticia del embarazo no nos tomó por sorpresa. La decisión de tener un bebé la habíamos tomado en pareja, varios meses atrás; de modo que comprar una prueba casera fue la respuesta lógica una vez que los primeros síntomas se hicieron presentes. Son muchas las cosas que se piensan durante los minutos que preceden a la respuesta de una prueba de embarazo. Por mi cabeza desfilaban todas las veces en que la posibilidad de ser padre supuso una sombra de duda o preocupación, y en las que, enfrentado a las mismas circunstancias, la marca azul que confirmaba un resultado positivo se vislumbraba como el peor escenario.


20NO FICCIÓN

Es curioso, pero en ese momento caí en la cuenta de que, en esta ocasión, mis anhelos se ubicaban justo del lado contrario: quería ser papá. Supe entonces que, independientemente del resultado del test, la prueba de la madurez emocional había sido, por fin, después de 37 años, totalmente superada. No recuerdo bien lo que siguió. Hubo abrazos y lágrimas acompañadas de una sensación extraña, que, incluso ahora, me resulta difícil de describir. Y aunque sin duda estaba emocionado –yo diría, más bien, conmocionado–, mis primeras reacciones fueron eminentemente de carácter racional. Preguntar por un ginecólogo de confianza, concertar una cita, sacar los proyectos pendientes, trazar una ruta crítica para los siguientes nueve meses. Aunque nos reservamos la noticia del embarazo durante estas primeras semanas, hubo quien me dijo que durante esos días me veía raro, contento, feliz. Aunque, más que felicidad, creo que la sensación que me embargaba era de plenitud: esa certeza de estar en el lugar correcto, con la persona correcta, en el mejor momento. Semana 12 a 24

Por lo regular, es a partir de la semana 12 que los pa-

dres adquieren la suficiente confianza para compartir la noticia con la familia y los amigos. A medida que las muestras de cariño y solidaridad se multiplican, la madre, que para ese momento ha comenzado a experimentar los primeros síntomas del embarazo, suele convertirse en el principal objeto de atención; mientras que el padre gravita alrededor en calidad de satélite. “Y tú, ¿cómo te sientes?”, te preguntará la gente al final, casi por compromiso. Y uno buscará inútilmente palabras que describan un estado de ánimo donde la claridad y la confusión coexisten con la incertidumbre y la certeza, la tranquilidad y la excitación. Frustrado ante las limitaciones del lenguaje, se dirá cualquier cosa (si es cursi, mejor), y luego, cuando la atención del interlocutor se dirija de nueva cuenta hacia la protagonista de la historia, uno esbozará una sonrisa tonta, feliz. Si existe algún punto culminante para un padre durante el embarazo, éste, sin duda, está marcado por la experiencia del primer ultrasonido. Es en ese momento que la idea abstracta de la paternidad comienza a adquirir forma, dimensiones, peso. No imagino lo que debió ser para nuestros padres la


NO FICCIÓN21

experiencia del embarazo sin la parafernalia médica que hoy en día te permite conocer al bebé desde las primeras etapas de su formación. En la actualidad uno puede ver y escuchar el corazón de su bebé; observar cómo crece y se desarrolla su organismo en el vientre de su madre; e incluso, en las etapas finales de la gestación, es posible obtener una fotografía en tercera dimensión de su rostro. Exiliado de la conexión física con su bebé, ésta será la experiencia más cercana que experimentará el padre a lo largo del embarazo. Y a partir de ella, mes con mes, comenzará a construirse la relación de amor con ese ser humano al que apenas conoce. En el refrigerador de mi casa conservo a la vista, como un tesoro, la foto de ese primer ultrasonido. Cada vez que la veo me devuelve a ese estado de perplejidad, admiración y, hasta cierto punto, incredulidad, ante eso que la gente suele nombrar como “el milagro de la vida”. Semana 24 a 36

Hay una cosa maravillosa que pasa en el segundo trimestre del embarazo: el sexo del bebé. Y con el sexo, la posibilidad de ponerle un nombre y asignarle –aunque sea en nuestra imaginación– una personalidad. En nuestro caso, la foto del refri se convirtió en la foto de Camila. Y su cuarto, su ropa y sus accesorios, adquirieron tonalidades cálidas, tirándole al rosa. Es increíble la forma en que un nuevo ser humano se abre cancha en la vida. Camila todavía no nacía y ya tenía propiedades: ropa, juguetes, muebles, vaya, hasta un vehículo de ruedas. Tenía también un

espacio, el mejor de la casa, el más grande, el más silencioso y, por supuesto, el más soleado. Aunque aún permanecía en el vientre de su madre, nos había obligado a hacer muchas cosas, como, por ejemplo, mudarnos a un departamento más amplio, cambiar algunos hábitos alimenticios, suspender nuestros periodos vacacionales, y ahorrar, ahorrar mucho. Ante la imposibilidad de establecer una relación física directa con Camila, a mí me dio por pensar, durante este periodo, en cómo y desde dónde quería construir mi relación afectiva con ella; en el papel que quiero desempeñar en su vida; en las preguntas que algún día me hará y en el tipo de respuestas que tendré que ofrecer. Imaginé su primer día en la escuela, sus fiestas de cumpleaños, las películas que veremos en familia, las tardes que pasaremos jugando Xbox. Vaya, hasta planeé el viaje que haremos juntos a Nueva York cuando ella cumpla 15 años. Y en ese proceso de especulación en estado puro, me descubrí de pronto como un tipo enamorado de su hija. No de la idea de su hija, aclaro, sino de su hija tal y como su personalidad se revela desde hace semanas en el vientre de su madre: inquieta, curiosa, atenta, comunicativa y, hasta cierto punto –espero no equivocarme–, obediente. A veces, cuando aproximo mi rostro a la panza de Myriam y comienzo a hablarle, Camila me responde con un pataleo enérgico que me cimbra en lo más profundo. Y aunque sé que es imposible que me entienda, yo murmuro despacio, casi para mis adentros: Camila. Soy tu papá. Estaré contigo siempre.

Semana 36 a 40

Me encuentro justo al final de la semana 36. Si el doctor no se equivoca, para cuando este texto haya sido publicado, seré un padre con todas las de la ley. La gente me pregunta si estoy nervioso y yo no encuentro la manera de explicar que, más allá de la preocupación natural que me genera el episodio del parto, me siento tranquilo y hasta optimista. Me recomiendan que duerma y no tengo ganas de dormir. Que aproveche para salir y no tengo ganas de salir. Que vaya lo más posible al cine… y bueno, sigo yendo al cine, como siempre. En la última década fui testigo de cómo los niños cambiaron la vida de sus padres. De cómo algunos cancelaron carreras, dejaron trabajos o, en el peor de los casos, se vieron obligados a tomar dobles turnos para ofrecer a sus hijos mejores oportunidades. Vi a mis mejores amigos alejarse sin culpa del resto del grupo para consagrarse a la tarea de edificar una familia. Los vi comprar un auto familiar, hacerse de una hipoteca, endeudarse para salir de vacaciones. Y, aunque en ese momento me pareció incomprensible, debo reconocer que nunca, como entonces, los vi más felices. Estoy a punto de pisar ese territorio desconocido. Lo hago sin miedo, con ganas de que todo suceda. Desearía poder explicar mejor la vorágine de sentimientos y de ideas que se aglutinan en mi cabeza. Pero no puedo, la emoción me supera. Camila, hija mía, no veo la hora de tenerte en mis brazos.


22NO FICCIÓN

PEDRO PLAZA: NO ADOPTÉ, ME ADOPTARON

Proveniente de una familia numerosa, Pedro Plaza creció rodeado de sus seis hermanos en el ambiente típico y feliz. De ahí vino su irremediable necesidad: formar su propio clan, sin permitir que el hecho de no estar casado fuera un impedimento para poder cumplir su sueño: “Yo jamás me iba a casar únicamente por tener familia”, eso lo tenía claro. Exitoso en los negocios y con un paso por el servicio público, Pedro Plaza podía decirse completo, pero la intención de llevar a cabo ese sentimiento de paternidad le condujo a explorar todas las vías con tal de confirmarse que podría ser padre. El tema de la adopción no le era ajeno, ni tampoco le ha presentado escándalo. Así que emprendió la tarea de investigar acerca de legislaciones y casas hogares adonde ya asistía como donador. Entonces, se acercó para ubicar los requisitos necesarios para ser candidato a padre adoptivo. “Hay mucha gente que cree que no se puede. Para mi sorpresa, a los cinco meses me llamaron y me dijeron que el consejo de adopciones había aprobado mi solicitud. ¡Realmente yo estaba muy emocionado!”, dice con una sonrisa que le ilumina el rostro, como si enfrente tuviera nuevamente la imagen del momento. Pedro fue citado y le confirmaron que su solicitud había sido aprobada, también le hicieron entrega de un expediente con la fotografía de Josué, el niño que, a partir de ese momento, se convertiría en su hijo; de inmediato fue presa de una gran emoción. “Es increíble, pero desde que lo ves por primera vez encuentras muchos parecidos”, comenta. —¿Te hacen pasar por algún periodo de prueba? —No te ponen a prueba; sino, que lo que está muy bien en el tema de adopciones, es que cuando ya te aprueban tienes que entrar en una

etapa de convivencia. Porque no puede ser de la noche a la mañana, que te presentas: ‘¡Hola, soy tu papá!’ Y ya estás. No. Entras en una etapa de convivencia de fines de semana o de dos o tres días a la semana. Cuando Pedro conoció a su hijo Josué, éste apenas hablaba. “No decía nada, no expresaba nada. Al principio yo no sabía ni qué decir, pero después ya empezamos a relacionarlos. Él me empezó a conocer más, pasé algunos meses sin saber ni cómo lloraba, ni cómo era una cara feliz, ni cómo era una cara triste”. Un pequeño que padecía grandes problemas tanto emocionales como de lenguaje y un padre soltero, son los elementos que hacen una experiencia que, sin duda alguna, debió ser difícil para ambos. Acudieron a la ayuda de una psicóloga para poder superar los baches por los que se veía obstaculizada su relación; sin embargo, Pedro nunca se desanimó. “Yo sabía que era mi hijo y que tenía que trabajar muy duro para que él superara todas estas etapas. Entonces te das cuenta de lo que es la paternidad: vas a hacer todo lo que tengas que hacer para que tu hijo recupere los años en que no tuvo papá.”


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Tuvo que transcurrir algún tiempo desde que empezaron a ir juntos a terapia y fueron varios los ejercicios a los que se vieron sometidos para fortalecer su relación; pero, sin duda, los esfuerzos realizados rindieron frutos. Después de cinco meses de convivencia el pequeño Josué pudo abrirse para contarle a Pedro una experiencia de su pasado, cuando él aún no era su padre. “En definitiva, el convertirte en padre debe ser una experiencia que cambia completamente tu manera de ver la vida”, cuenta Pedro. Y recalca un hecho: no existe alguna diferencia entre el amor que se tiene por un hijo natural y uno por adopción. “A partir de que te conviertes en papá se modifica tu visión de la vida, y todo lo que haces es por tu hijo, y todo lo que trabajas es en función de tu hijo, y te cambia totalmente; el momento que tienes que cuidarlo, que tienes que alimentarlo, tienes que convivir, tienes que enseñarle este mundo.” Pedro sabe que el apoyo de su madre ha sido fundamental en su etapa como papá soltero, y admite haber recurrido a ella en busca de algún consejo. Recuerda con tono afligido haberla llamado porque se sentía muy mal; le gritó a su hijo y éste se había puesto a llorar. ¿Cuáles fueron las palabras de su madre? “Éste es tu hijo y lo tienes que educar; con tus defectos y con tus virtudes, así que edúcalo sin miedo, nada más siempre basado en el amor, en el respeto”, esa fórmula la ha seguido hasta hoy. Hoy Josué tiene 12 años y vive en Atlixco con

su padre; quiere ser chef cuando sea grande pero, mientras tanto, está muy emocionado porque próximamente estudiará la secundaria en Puebla. Pedro, orgulloso de su hijo, piensa apoyarlo en todo, ya que su única prioridad es entregar a este mundo a una persona feliz. “Es un chavo muy abusado, muy emprendedor, es una maravilla de chavo. Yo me sorprendo cada día más y me sorprendo más con mis amigos que lo conocen y me dicen: ‘¡es que es igualito a ti! ¡Habla igual que tú! ¡Habla como tú y actúa como tú!’. “Siempre he dicho. Yo no adopté, Josué me adoptó.”


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Más allá de la catedral, la plazuela de Los Sapos y el Barrio del Artista, el perímetro del centro poblano abarca innumerables espacios arquitectónicos, testigos de acontecimientos históricos, leyendas y misterios ocultos. Por Tania Leal CASA DE LOS HERMANOS ROUSSET UBICADA EN: 9 PONIENTE ENTRE 16 DE SEPTIEMBRE Y 3 SUR

Siempre que escuchamos acerca de la Revolución de México, los poblanos reconocemos con orgullo que fueron los hermanos Serdán, de origen poblano, como nosotros, los que dieron inicio a esta lucha armada que cambiaría el rumbo de nuestro país. Sin duda, deben existir cientos de personajes que participaron dentro de esta lucha y que no cuentan con el reconocimiento histórico que merecen por su labor. Éste es el caso de los hermanos Rousset. Hombres muy delgados, vestidos pobremente pero muy gallardos, los Rousset eran apegados a Aquiles Serdán y dejaron de lado una buena posición económica gracias a la construcción de muebles y la fotografía por el activismo político; guardaban armas en su casa y se dedicaron a realizar propaganda política en las calles de nuestra ciudad. Ligados a los clubes maderistas de México, descubren una conspiración en contra de Madero, en la cual pretendían asesinarlo. Gracias a su pronta intervención, el atentado no se llevó a cabo. Eran activistas, pero no de los líderes, sino de los que trabajan debajo, los que realmente crean las redes y las simpatías. Una vez que Serdán fue apresado, fueron ellos quienes consiguieron al abogado que intentaría su liberación. Ya muerto Serdán, continuaron organizando

manifestaciones y haciendo trabajo político en la ciudad; incluso, Benito Rousset llegó a ser regidor del ayuntamiento y, aunque hay fotografías que lo demuestran, en las actas no existe registro. A pesar de los ideales y la lucha que mantuvieron por defender a la Revolución, una vez que ésta triunfó, les dio la espalda; las pocas tierras que les quedaban les fueron expropiadas por la reforma agraria, lo que los llevó a alejarse de la gente y a pasar la mayor parte del tiempo encerrados en su casa. Al morir en la década de los cincuenta, su historia se volvió cada vez menos conocida, hasta hace unos pocos años, cuando se colocó una placa de reconocimiento en el domicilio en donde vivieron.

CINE COLONIAL UBICADO EN: 2 PONIENTE 1108

Antes de que el Cine Colonial proyectara películas para un gusto muy específico, era uno de los cines más imponentes de nuestra ciudad. Fundado por los hermanos Arellano, quienes cambiaron el negocio familiar del aserradero para convertirlo en un cine en el que se podían proyectar los sueños que se fabricaban en una de las industrias más grandes del país. Con una arquitectura impresionante de estilo barroco, el Cine Colonial es una copia del Alameda de la Ciudad de México. Contaba con un juego de luces que pasaba del día a la noche, con estrellas en el techo que creaban la ilusión al espectador de que se encontraba en un espacio abierto.

Lugar ideal para encontrarse a la sociedad poblana de la época, y en donde acudían vestidos con la ropa más elegante que poseían; también ideal para hacer gala del poderío económico. Cuando gozaba de gran éxito, aparecieron los magnates que manejaban la industria del cine en esa época y comenzaron a presionar a los hermanos Arellano para que se sujetaran a lo que ellos ordenaban que se exhibiera en las salas del país; cosa a la que los hermanos se negaron. Al pasar el tiempo, los Arellano no resistieron las presiones a las que se veían expuestos por parte de quienes manejaban en su mayoría la industria del cine en el país, y fue así como decidieron vender el cine.

LA CASA DE LOS MUÑECOS UBICADA EN: 2 NORTE CASI ESQUINA CON JUAN DE PALAFOX Y MENDOZA

Antes de ser un conocido restaurante, la historia de esta casa se remonta hasta el siglo XVIII. Perteneciente a las monjas de Santa Mónica, quienes se mantenían gracias a la renta de propiedades. Más adelante, con la Ley de Reforma, estas propiedades son retiradas y pasan a pertenecer a particulares. La historia popular dice que un regidor del ayuntamiento, don Agustín de Villavicencio, buscaba hacer esta casa más alta que la del Cabildo poblano, cosa que no era posible, ya que en ese entonces la más alta era la del Palacio


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SE HA TENIDO LA CREENCIA DE QUE EXISTEN TÚNELES QUE PASAN POR DEBAJO DEL PRIMER CUADRO DE LA CIUDAD, PERO NO SE HA COMPROBADO

Municipal, que era una representación de la Casa Real; es así como se ve suspendida esta obra, lo que lleva a don Agustín a un pleito en la Real Audiencia. Al ganar la audiencia y continuar con la obra, coloca elementos decorativos con forma de unos muñecos grotescos, que se creía eran una burla hacia los regidores que habían cancelado su construcción. Gracias a investigaciones se ha comprobado que las figuras representan los trabajos de Hércules, ya que el dueño anterior de la casa, el conde de Castelo, en su heráldica familiar llevaba a Hércules, pues era originario de Cerdeña, una isla que se creía había sido creada por este ser mitológico.

ANTIGUA SEDE DEL BANCO ORIENTAL DE PUEBLA UBICADO EN: 2 NORTE Y JUAN DE PALAFOX Y MENDOZA

Lo que había sido una bella casa colonial fue destruida para construir la sede del Banco Oriental de Puebla. Un banco emisor que hacía sus propios billetes y monedas de las que aún

pueden encontrarse ejemplares en el barrio de Los Sapos. El dinero que aquí se hacía tenía representada la imagen de Esteban de Antuñano, quien fuera uno de los primeros impulsores de la industria textil moderna en México y que vivió en la Casa de los Muñecos. Este Banco Oriental pudo emitir sus propios billetes que tenían gran aceptación en Puebla, en varios estados, e inclusive en el extranjero hasta 1914, con el gobierno de Carranza, cuando se dejaron de emitir los billetes, pues el Banco de México se hizo cargo de ello.

LA CASA DEL QUE MATÓ AL ANIMAL UBICADA EN: ESQUINA DE LA 3 ORIENTE Y 2 SUR (AHORA EL SOL DE PUEBLA)

Una bella casa estilo señorial era el hogar del mayorazgo Pérez Salazar Méndez Mont y que ahora es conocida como La Casa del que Mató al Animal. La leyenda dice que año con año bajaba a la ciudad un monstruo de gran tamaño y al que todos los habitantes temían; una serpiente que devoraba personas,

pero que guardaba un gusto especial por los niños. La desgracia cayó a la familia de Pérez Salazar, cuyo hijo menor fue devorado por la serpiente. Ante el dolor de haber perdido a su hijo, ofreció la mano de su hija y la mitad de su fortuna a quien matara a esa serpiente que atormentaba a la ciudad año con año. Finalmente, fue un valiente joven que había pretendido a su hija mayor y que fue despreciado por su pobreza, quien, vestido como caballero medieval, puso fin al monstruo que devoraba gente. La realidad es que las escenas representadas son parte de la decoración, grabadas en piedra por mano indígena, ya que esta hermosa casa tiene también arte indígena en la fachada.

LA CASA DEL MENDRUGO UBICADA EN: 4 SUR 304

Recién abierta al público como un espacio para la cultura de Puebla, fue construida en el siglo XVIII y cuenta también con elementos arquitectónicos del siglo XVI.


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Llamada así, ya que se dice que fue construida por los jesuitas con “mendrugo”; o sea, con limosna de la gente. La realidad es muy distinta, pues haciendo una investigación histórica se descubrió que la casa fue comprada por los propios jesuitas alrededor de 1760 con los sobrantes de la buena administración de los bienes que tenían para mantener el Colegio de San Jerónimo; un sinónimo de sobrante es “mendrugo”. La propiedad fue habilitada como casa habitación y las partes bajas para el comercio. Con el dinero de las rentas se sostenían las becas para los seminaristas en el Colegio de San Jerónimo. Al ser expulsada la orden, esta casa pasó a formar parte de la administración de una iglesia, y después formó parte del Colegio del Estado (Benemérita Universidad Autónoma de Puebla). Por situaciones desconocidas, el

Colegio del Estado las vendió a finales del siglo XIX y siguen siendo parte de la propiedad privada hasta nuestros días. Un investigador narra que de ahí salió Agustín de Iturbide cuando estuvo en Puebla antes de que se consumara la Independencia de México; tomó la ciudad el 5 de agosto y salió de la Casa del Mendrugo hacia Córdoba, Veracruz, para encontrarse con el virrey O’Donojú para firmar los Tratados de Córdoba y dar por consumada la Independencia. Durante la restauración de esta maravillosa casa se encontraron enterramientos prehispánicos del preclásico de la cultura olmeca; restos óseos, ofrendas en rituales y cerámica que datan aproximadamente del 2500 a. C. En el basurero de la casa se descubrió cerámica vidriada (lo que conocemos como talavera), la cual ya ha sido estudiada y data del

siglo XVI, cuando apenas se conocían pocos ejemplares. TÚNELES SUBTERRÁNEOS Durante muchos años se ha tenido la creencia de que existen túneles que pasan por debajo del primer cuadro de la ciudad y que comunican grandes distancias, cosa que no se ha comprobado. Una razón podría ser que eran túneles para que, a través de ellos, se pudiera escapar en caso de guerra y que se abrían en forma clandestina, por eso es que no existen planos ni registros de ellos. Muchas veces, lo que se confunde con túneles es la parte que se construía como cisternas para el drenaje y es lo que se ha encontrado en las excavaciones. Actualmente, varias casas han convertido éstas en cavas, ya que funcionan como cámaras de refrigeración natural. Hay personas que afirman la existencia de dichos túneles; personas que vivieron en la Casa del Deán aseguran que sí eran túneles los que comunicaban la casa con la Catedral.

LA LEYENDA DICE QUE UN MONSTRUO DE GRAN TAMAÑO BAJABA A LA CIUDAD; UNA SERPIENTE QUE DEVORABA PERSONAS, CON UN GUSTO ESPECIAL POR LOS NIÑOS



30NO FICCIÓN

El señor

leones de los

¿Quién vive en el castillo azul de Cholula?, es la pregunta que asalta la mente de todo

transeúnte cuando pasa frente a la casa de Diego Gaona, conocido también como “El brujo de Cholula” o “El mil amores”, un

hombre que adivina el futuro por medio de los astros y que alguna vez tuvo dos leones, porque representan poder. Por Éric David Montero


NO FICCIÓN31

@ericdmontero

Un

castillo de 72 habitaciones es el hogar que Diego Gaona ha compartido con varias mujeres a lo largo de su vida. Una construcción extravagante, que tiene estatuas de leones en una de las entradas; inmediatamente sigue una escalera con un pasamanos en forma de serpiente pintada de azul cielo, ahí también hay dos improvisados guardianes de la Edad Media. El inmueble no tiene estilo arquitectónico, sólo el que él ideó al paso de los años. De hecho, empezó a construirlo con la ayuda de uno de sus hijos, José Luis, allá por 1976. Gaona es un hombre acostumbrado a la constante visita que le hacen los medios de comunicación para que adivine el futuro, o la suerte que traerá el año en curso. La habitación no miente, pues en una de las paredes tiene pegadas páginas amarillentas delos diarios a los cuales les ha otorgado entrevista, porque eso es lo que hace, “decir la verdad desde hace 30 o 40 años”, con el único fin de ofrecer orientación a cambio de una cooperación voluntaria. TENGO 84 NIETOS Su vestimenta es muy ordinaria: panEn un principio el adtalón de vestir, playera a rayas con cuello jetivo “brujo” le producía 22 BISNIETOS Y 4 sport; pero hay algo que le da un poco de coraje, pero poco a poco misterio: unos lentes oscuros que ocultan se fue acostumbrado, y TATARANIETOS, 80 AÑOS una mirada con cataratas y una cadena aclara: con un sol de nueve picos que cuelga de —Si lo fuera ya huDE EDAD, HARTA PINCHE su cuello. biera embrujado a todo el La plática es interrumpida por uno cabrón gobierno pa’ que le MARIHUANA (BROMEA). de sus bisnietos, que se asoma a la oficina dé chorrillo. para pedirle dinero. Diego saca una moEl “Mil Amores” es un AQUÍ TUVE VIVIENDO 18 neda de 5 pesos y se la da, pero le exige personaje de quien se ha que nos salude. El niño sólo responde con escrito demasiado, al igual MUJERES Y HASTA UN PUTO, un “¡oooooora!”. que de sus predicciones y sus romances; su nombre LO ÚLTIMO NO LO PONGAS. HE TENIDO 18 MUJERES Y HASTA UN aparece en diarios como PUTO La Jornada, El Sol de BUENO SÍ. Ver tantas entrevistas y fotografías en su Puebla, incluso en el seoficina me hizo titubear sobre las pregunmanario amarillista Insólito y El Universal, espetas que ya había preparado, incluso me interrumpe antes de que cialmente en la década de los ochenta y noventa. lance el cuestionamiento “¿qué más quieres saber, compadrito?”. Al —Mira todas las pendejadas que me traen. ver que dudo ataja: Diego saca la prenda interior de una mujer. —Tengo 84 nietos, 22 bisnietos y cuatro tataranietos, 80 años de —Pero yo no hago esas porquerías, a las muedad, harta pinche marihuana (bromea). Aquí tuve viviendo 18 mujeres les digo, “para qué sufres por ese pendejo, jeres y hasta un puto, lo último no lo pongas. Bueno sí. ¡Total! mejor búscate otro”, a los hombres también, yo Para convencerme de que aún es vigoroso saca una bolsa llena no hago ese tipo de trabajos, yo baso todo en los de papel higiénico usado y la coloca sobre el escritorio. números. —Mira. Todo esto es de pura chaqueta, perdón que lo haga, pero es que si no, no me crees. Para coger hago nueve movimientos y paro. Para mí el nueve lo es todo, mi castillo tiene 72 habitaciones, si sumas el siete y el dos te da nueve; tuve 18 mujeres, uno y ocho son nueve. Es el único número que al multiplicarlo con otro, el resultado final será el 9, por ejemplo, nueve por cinco son 45, súmalo y el resultado será el mismo, y así por el que quieras. ¿Qué más quieres saber, compadrito?

¡TOTAL!


32NO FICCIÓN

Arriba hay un corazón con dos iniciales, se percata de mi curiosidad y relata que en 2006 vivió con él una menor de 16 años. Asegura que la adolescente le pidió que le enseñara lo que se sentía tener sexo. Diego no lo pensó dos veces y su oficina era donde tenía a la joven, sin obligarla a nada. Según él no intentó conquistarla, de hecho a ninguna conquista, no sabe cómo hacerlo. Asegura que todas llegan por su propio pie. Todo eso incluso le acarreó problemas legales de los que ya salió librado. Diego interrumpe de nuevo la entrevista y sale de su castillo a saludar a los turistas “gracias por visitar Cholula”, los pasajeros del turibús no dejan de sacar fotos a su castillo que construía cada que había luna tierna. Después de su cortesía con los visitantes, regresa para reiniciar la plática. NO HABLE CONTRA EL CLERO NI LA POLÍTICA

Los días en que Diego Gaona fue panadero y cargador en el mercado quedaron en el recuerdo, las noches que pasó durmiendo en el parque también. El adivinar la suerte le dio fama, la televisora local lo ha invitado a algunos programas, pero con la condición de no hablar mal del gobierno ni del clero, de ahí en fuera lo que quiera. Algunos aciertos fueron publicados en La Jornada de Oriente en diciembre de 1996, en esa

ocasión dijo que el PAN llegaría a la presidencia de la República en el año 2000 y que el expresidente Carlos Salinas de Gortari no sería juzgado por los mexicanos, además vaticinó un 1997 lleno de rencores políticos y venganzas. Diego no deja pasar más de un minuto de silencio, se deja ver como un personaje pintoresco que agarra la parranda cada que se le ocurre, el olor de su oficina lo delata; adicto al sexo y al mambo, que baila para sentir los senos de quienes bailan con él, o dar un “restregón”. Las voces se apagan y suelta la última frase de la entrevista: —Si ya no tienen más que preguntarme les adivino la suerte. Pregunta mi fecha de nacimiento y me intriga saber de mi porvenir. Mientras eso pasa, comienza a consultar los números de su escritorio y los que están pegados en otra de las paredes.



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Los 12 mandamientos del

romántico a la antigua (Con el perdón de Roberto Carlos) En aquellos años, que eran buenos, uno no “estalqueaba” por internet. En aquellos años uno no usaba frases hechas copiadas de algún muro de Facebook. En aquellos años se usaba la imaginación hasta para masturbarse y no la computadora. Aquí dejamos unos breves consejos para aquellos que, por vivir en un mundo de redes sociales, internet y teléfonos inteligentes, hemos olvidado que el amor no ha dejado de ser gandalla y, por tanto, tienes que ponerte sobres para que las damitas caigan como moscas. Ojo, no todos son infalibles. Advertidos están, señores. Por Staff 360

o

Alcohol y amor no se llevan. Para declarar tu amor, nunca, nunca, nunca lo hagas bajo los influjos de Don Pedro Domeq, de Don Julio, de Jack Daniel’s, de Johnny Walker o del Señor Bacardi. Y menos lo hagas en un antro. Es el peor escenario y la peor situación. La damita en cuestión primero dudará de tus intenciones y después creerá que es víctima de un borrachazo tuyo. Así sí que no quieres. Ni inbox, ni tuits, ni frases poéticas al muro. Primero, porque la chica en cuestión sabrá que son directamente para ella. Segundo, te vas a ver ridículo, es peor que poner imágenes de gatitos. ¡Te vas a ver ridículo! Y tercero, ten huevitos y mejor díselo a la cara.

Las flores nunca han pasado de moda ni pasarán. Lúcete con un ramito, un arreglo (aunque sea de la Acocota) y asegúrate de que llegarán al destinatario. Ahora que si quieres ponerte fresa y cuentas con el presupuesto, manda un buen arreglo del tamaño de una pared a su oficina. Ella quedará encantada y tú vas a marcar el territorio con sus compañeros de oficina. Es-

pera su llamada gritando de gusto. Ahí sabrás que fue misión cumplida. Nota: Aun así puedes quedar como el verdadero idiota que eres, porque seguramente el jefe se la está beneficiando. Ni frijoles, ni tacos, ni garnachas. Compadre, cene ligero. En buena onda, si vas a tener una cita nunca le atices a los frijoles veneno, ni a los tacos Roger, ni a las garnachas de Doña Mary, neta no lo hagas. Está bien que una flatulencia es un suspiro de un traserito enamorado, pero no exageres. Meses después, cuando entren en confianza, seguro te aguantarán tus fuegos pirotécnicos. Ubica a tu tipo de dama. Hay tres tipos de muchachas. Uno, las lobukis que te llevas al antro y al motel. Dos, las que ocultas porque simplemente no terminan de encantarte y solamente las llevas a Cruz del Sur para ir al cine, con las que casi sales con gabardina y gafas. Y tres, las que vas a presentar a tu casa. Identifica bien qué tipo de chica estás ligando para evitar errores y horrores.


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No presumas tu trabajo ni tu sueldo. Mientras tengas para pagar ese primer café, cena o comida, si la damita aceptó a salir contigo es porque simplemente quiere pasar un buen momento. Así que ni le presumas el poder adquisitivo y tampoco des detalles de más. Y menos si eres nini o aún vives con tus papás. Olvídate de tu teléfono. Y de preferencia, apágalo. Nada de WhatsApp con tus cuates ni estés pendiente de tus notificaciones de Facebook. Mucho menos le contestes las llamadas a tu mamá. Uy, y un factor importante: no fisgonees a su celular, porque va a creer que eres un novio psicópata en potencia.

No desvíes la mirada ante el atractivo. Que tus ojos no te traicionen. Por lo menos en la primera cita procura contener la testosterona, carnal. Bájale dos rayitas a tu calentura por mucho que te encuentres chamacas de buen ver. ¡No te va a perdonar si desvías la mirada de sus ojos! Por muy guapa que sea la chica en cuestión, contente. Seguro te encanta y de reojo ya le checaste todos y cada uno de sus rinconcitos. Pero, aguas, te puede tachar de depravado. Así que vela siempre de frente y a la cara.

Evita hablar de tus exnovias y tus ligues. Aunque tu ego te lo exija, tú casi eres virgen. Si tu plan es serio con esa chica, sé sencillo y auténtico. Aunque tu inconsciente te traicione, no hables de la exnovia que te destrozó la vida y mucho menos hables de alertas de embarazo o de la paternidad no deseada. No te muestres como Casimiro Godínez. No te quejes de los dramas de oficina, ni digas que te hacen bullying en tu trabajo. Tampoco presumas el tupperware con el lunch que te puso tu mamá. Y menos te quejes porque ya es fin de quincena y no traes un clavo.


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LA HISTORIA DE KARLA, UNA VÍCTIMA DE TRATA EN PUEBLA

“Fui violada por 43 mil hombres” Por Edmundo Velázquez | @mundovelazquez


EN CORTO37

A

sus 16 años, Karla sufrió al menos 43 mil violaciones durante cuatro años que fue víctima de trata de personas mientras era prostituida en las calles del Centro Histórico de Puebla. En un día tenía que atender a 30 hombres. En cuatro años vivió un verdadero infierno, fue captada en las calles de Pino Suárez en el Distrito Federal para ser trasladada a Puebla por “su novio”, un padrote del que prefiere no hablar mucho. Karla tenía 12 años cuando la enamoró su padrote de alrededor de 21 años, quien la sacó de la vida que llevaba como hija de una familia disfuncional. Este hombre la comenzó a observar y poco a poco la fue abordando en la calle. De él prefiere recordar cómo, en un inicio, la llenó de elogios, le decía que se casarían y tendrían una vida de ensueño. “Yo decía wow, qué vida me espera... no podía creerlo”, dice Karla hoy, 10 años después. Pero cuando la sacó de su casa, la llevó

a prostituirse en Puebla y Tlaxcala. En la ciudad de Puebla vivió varios meses siendo trasladada intermitentemente entre Zacatelco y el Centro Histórico de la Angelópolis. Le asignaron un cuarto en el hotel La Roca de la 14 Poniente. A partir de entonces tuvo que prostituirse bajo amenazas. Si no trabajaba como mercancía sexual con mínimo 30 hombres por día matarían a su familia. Cada servicio no era cobrado por más de 100 pesos y, obviamente, de ese dinero no veía un solo centavo. En el lapso de su trabajo, a los 14 años tuvo un primer embarazo. “Iba a tener gemelos, los perdió en un aborto”, detalla Rosi Orozco, presidenta de la asociación Unidos Contra la Trata, con la que Karla sirve como vocera ante otras mujeres y jovencitas para relatar su caso. Hac epoco fue parte de las asistentes a la firma de un convenio de la organización civil con el Comité Ejecutivo Estatal de Nueva Alianza.

El corredor Puebla-Tlaxcala

Los padrotes no tienen piedad de las niñas que captan. Una vez trasladadas a su lugar de trabajo no desperdiciarán un solo día. El corredor Puebla-Tlaxcala, según datos de Unidos Contra la Trata, es el segundo con más casos a nivel nacional debido a que en la zona se capta, se traslada y se prostituyen mujeres de al menos 11 estados del país. A estas mujeres se les hace trabajar arduamente y en los fines de semana pueden duplicar sus faenas diarias de trabajo sexual en servicios de máximo 30 minutos. “Los padrotes no tienen piedad, ni cuando están menstruando las dejan sin trabajar. Les introducen una esponja con vinagre para que puedan seguir trabajando sin que sangren”, detalla Rosi Orozco. Tampoco les interesa si las niñas terminan embarazadas en algún accidente donde se rompió el condón o porque el cliente se haya puesto necio al no ponérselo.

Karla volvió a embarazarse. La segunda vez fue amenazada con que le quitarían a su hija, la matarían o se la arrebatarían para que cuando creciera también fuera prostituida. “Te dicen por años que van a matar a tu familia. Estuve ahí también por mi hija, una niña que tuve, hermosísima, por cierto. Esa experiencia que te deja esto te va a dejar un pasado muy horrible. Pero un futuro muy bello. “Soy sobreviviente de trata de personas y me empezaron a prostituir desde los 12 años hasta los 16 años. (...) Es algo muy difícil. Mucha gente cree que muchas de las chicas están ahí por gusto. Y no es así. A veces nos tapamos los ojos y nada más tenemos la venda. No nos fijamos de todo lo que pasa cuando


38EN CORTO

vemos a una chica simplemente por usar falda y tacones. No ha sido fácil, cuando te maltratan, te pegan, te chantajean”, dice Karla que solamente usa su nombre de pila en las reuniones donde aparece ya recuperada, jovial y esperanzada en ayudar.

Soportar un batallón

Las niñas que son captadas para trata de personas se ven sometidas a todo tipo de ultrajes. A Karla le tocó ver cómo niñas no desarrolladas, de 10 años aproximadamente, eran operadas para implantarles senos y comenzar a ser prostituidas por los padrotes. Niños también, entre los 8 y 10 años eran utilizados para satisfacer los deseos se-

xuales de hombres que pagaban más caro por esos servicios. De acuerdo con la asociación Unidos Contra la Trata, 85% de las víctimas de explotación sexual son mujeres, mientras que un 15% son varones. Las edades más ubicadas entre las rescatadas de la zona PueblaTlaxcala son niñas de entre 12 y 16 años, precisamente la edad que pasó Karla en los burdeles del Centro Histórico de Puebla. “Fue en ahí, en la 14 Poniente, también en la zona del Ferrocarril, en la 11 Sur. Y también en la 8 Poniente”, recuerda Karla de las zonas donde la hacían prostituirse, ya sea en hoteles o a veces en la calle.

Una de las peores anécdotas que sufrió Karla fue a manos de un grupo de agentes ministeriales, quienes en un operativo fueron sobornados por el padrote para hacer uso de las mujeres en el hotel. Un grupo entero de judiciales pasó por encima de Karla. “El agente del Ministerio Público estaba ahí, el dueño del hotel permitió que los ministeriales violaran a Karla y muchas jovencitas más. Un grupo entero de judiciales. Eso fue en el sexenio de Mario Marín. Hoy el cambio es sustancial. El delito en Puebla ya se persigue, por lo menos hay 30 sentencias condenatorias a padrotes”, detalla Rosi Ocampo. De acuerdo con la Procuraduría General de la República, Puebla es el segundo estado que concentró más denuncias por el delito durante el 2014, con 16 casos. Según la Procuraduría General de Justicia, durante el 2015 se han realizado seis operativos contra la trata de personas en su modalidad de explotación sexual. Se han rescatado 43 víctimas. Solamente cuatro probables responsables han sido presentados y se han asegurado dos inmuebles. En este año el Tribunal Superior de Justicia ha emitido cinco sentencias condenatorias a tratantes de personas.

Aleccionando el escape

–¿Cómo es que escapaste? –se le pregunta. –Fue por un cliente. El señor tenía 60 y algo de años. Una persona muy grande. Me convenció. Era una persona que solamente pagaba para platicar conmigo. Me convenció de que podía ser más que un objeto sexual para los hombres y también para las mujeres. Ese hombre era Jorge Calvario Becerra. El anciano prácticamente pasó un año hablando con Karla. Pasaba a verla casi todos los días y poco a poco la convenció de salir del hotel un día y acompañarla. Tras años de terapia Karla hoy es un ejemplo de que la trata de personas puede combatirse con información y haciendo visible el delito. Gracias a Unidos Contra la Trata, Karla ha dado charlas en el extranjero, ha estado en dos ocasiones en El Vaticano visitando al Papa, ha conocido a la reina Rania de Jordania, a la duquesa de Cornwell, Camila Parker y al

príncipe Carlos de Inglaterra; su historia ha sido plasmada en un libro y hoy destella tranquilidad en su sonrisa. “El caso de Karla ha sido emblemático y Puebla va bien. En 2010 comenzaron a cambiar las cosas con la entonces diputada Malinali García y la iniciativa local contra la trata. Va mejorando. Después del Distrito Federal y Chiapas es el estado que más sentencias presenta: 30 al menos contra padrotes. Pero si no hay denuncias no se pueden desmantelar las bandas. Hay por lo menos 47 bandas delictivas dedicadas a esto. Y hay que detenerlos”, asegura Rosi Orozco. En caso de cualquier denuncia de explotación sexual, la activista y titular de Unidos Contra la Trata pide que los casos sean reportados a la línea ciudadana 01 800 5533000. *Este texto fue originalmente publicado en Periódico CENTRAL el 9 de abril del 2015.


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Recientemente el caso de Karla fue retomado por el diario español ABC y la cadena Univision en Estados Unidos le dedicó un segmento completo en el prime time con el programa Aquí y Ahora, donde fue entrevistada por la reportera Hena Cuevas, quien, junto con el equipo de producción viajaron desde Los Ángeles, California, para conocerla y escuchar su historia de viva voz. Karla hoy se asume como una vocera y ha emprendido junto con Unidos Contra la Trata la campaña “Hoja en blanco”, donde las supervivientes de este delito comparten con otros líderes la idea de un nuevo comienzo.


40GUÍA

¿QUÉ DEMONIOS

QUIEREN LAS

MUJERES? UNA BREVE GUÍA PARA SABER POR DÓNDE SÍ Y POR DÓNDE NO CON LAS DAMITAS (DICTADA POR ELLAS MISMAS) Por Staff 360o

La mente femenina siempre ha sido un verdadero enigma para los hombres. ¿Qué es lo que quieren las mujeres? ¿Por qué me mandó al demonio mi última cita? ¿Qué hice mal si todo parecía estar perfecto? ¿Por qué me dijeron “intenso”? Sin inhibiciones, Revista 360º hizo un sondeo entre varias poblanas y rescatamos cinco personalidades que nos ayudaron a entenderlas un poco más. Aquí te enterarás de qué es lo que piensan sobre el hombre perfecto, sobre qué es lo que piden en la cama y por qué nos mandaron a la friendzone. La verdad es que cuando ellas lo cuentan así, de frente y a calzón quitado, sin bloqueos del “qué dirán”, puede que las entendamos más y nos apliquemos un poco para no regarla tanto. Obviamente, por cuestiones de seguridad y privacía cambiamos el nombre de las amigas que se sometieron a nuestro cuestionario y nos relataron la cruda realidad. Así que hombres, caballeros, jóvenes, pongan atención y tomen nota.


GUÍA41

NO ME LUZCO EN LA CAMA, PARA NO ESPANTARLO OFELIA, 28

Profesionista, con una vida económica holgada y el futuro prácticamente asegurado. Trabaja como ejecutiva de ventas en una agencia de viajes. Está recién casada y por el momento se siente plena con el éxito profesional y el apoyo de su pareja.

¿Qué debe de tener tu hombre ideal? Sentido del humor, un trabajo estable. No queremos vividores. Nunca vamos a querer vividores. Aunque no lo crean. En lo físico me conformo con que tenga dientes limpios. Que se bañe, obviamente, que tenga higiene. ¿El tamaño importa en el hombre ideal? ¡Obvio, sí! Sí importa el tamaño. Bueno, pero que lo tenga bien proporcionado, bien procurado, limpio. Que sepa para qué sirve. ¿A las cuántas citas sueltas prenda? Hasta la sexta. Así como mínimo. Y las cuento, eh. Yo soy de las difíciles. Porque son de lo peor los hombres. Si se aburren y se van, pues no son para ti, porque una se toma su tiempo, una debe perderle el asco. En la primera vez que echan pasión y van a la cama... ¿te luces? No me luzco, prefiero no hacerlo. Ni tanto que queme al santo ni tanto que no lo alumbre. No hay que hacer que piensen que es demasiado, vaya, ni que te crean una tarada que no sabe nada, ni una loca con demasiada experiencia que terminen espantados. ¿Cuándo le das boleto a alguien para la friendzone? Ay, cuando son intensos. Que sean insistentes o que se enojen por nada antes de que sean algo, o intenten ponerte demasiada atención cuando hasta tú sabes que no lo mereces. Si se ponen intensos, bye... Igual si es muy soso y sin iniciativa. O prepotente. O cuando te cuenta mucho de la exnovias. Odiamos eso.

¿Pero los dejas en la friendzone o les eres honesta? Ay, yo soy muy ojete. Les digo la verdad. Procuro que quede en amistad, pero les digo desde un inicio que no me gusta para eso, así no pierden su tiempo. ¿Qué debe de tener el hombre para que digas: “Sí, me caso”? La visión que tenga de su futuro. Cuando tiene bien definido qué quiere, no necesariamente todo, pero que sabe lo que quiere. Y te dices: “Este güey sí sabe qué pedo”. Ahí ya la armó. ¿Cuándo mandas a la fregada a un hombre? Cuando le cachas que no es honesto. Que todo lo que te dice son mentiras o que no es coherente. Cuando no tiene proyecto. ¿Y si te pone el cuerno? No, bueno... Ya con el simple hecho de que te ponga el cuerno es porque ya no hay interés. Y si se dan cuenta de que la regaron y ofrecen disculpas, pues ya no es lo mismo. ¿Te han puesto el cuerno? No. No me ha pasado. O bueno, no sabría decir si sí o si no. Lo que sí es que yo no he puesto el cuerno, relativamente en mi pasada relación casi... pero no pasó. Ya lo había mandado a la fregada y había sacado sus cosas de mi casa... ¿Puedes agregarle ahí un: “Te odio, imbécil”?


42GUÍA

SI QUIEREN COMPROMISO A LA TERCERA CITA, HUIMOS; NO SEAN INTENSOS MARINA, 35 AÑOS

Rubia, ojos claros, despampanante y con un sentido agudo de la moda. Marina acaba de pasar por un divorcio y también ya bateó al primer hombre con el que salió formalmente tras la ruptura de su matrimonio. “¿Casarme? ¿Otra vez? ¡Ni loca! El matrimonio no fue lo que esperaba. No volvería a ser la chacha de nadie”, dice. ¿Cuál es tu hombre perfecto? Quiero un hombre emprendedor que haga ejercicio, que le guste leer y le guste viajar. Y comer bien. Igual y no existe, pero eso quiero. ¿Desde cuándo sabes que vas a mandar a un hombre a la friendzone? Uy, desde la primera cita te das cuenta. Se nota inmediatamente qué es lo que quiere un hombre contigo. O sea, si salen y cuando te dicen: “Vamos para tu casa”... Tú piensas: “Mmmta, ya sé qué quiere”. Pero cuando farolean, eso es el primer paso para que se vayan a la fregada. O igual es obvio cuando te llevan a ciertos lugares como para presumirte como su conquista, para que vean con quién van. Pero en general odiamos a los faroles. Si yo veo un farol, huyo. Si es intenso, huyo. Para ti, ¿qué es “ser intenso”? Pues ya sabes, si quieren compromiso a la tercera cita, huimos. Si ya casarse contigo o presentarte a la mamá; si son celosos pues también. Odio que me celen. ¿Pero por qué mantienes a un cuate con las esperanzas? ¿Por qué lo mandas a la friendzone y ni le avisas? Porque es una velita prendida, algo para tu propia seguridad. Aunque él ya sabe que no vamos a salir formalmente, pues ya sabes que cuentas con él por cualquier cosa. Ya sé, suena horrible, pero él mismo lo sabe desde que tú lo tratas como tu mejor amigo. ¿A las cuántas citas sueltas prenda? Cuando me gusta puedo soltar a la primera cita. No lo hago, bueno sí, pero pocas veces. Y depende, si hay química, y también depende de qué tanto sepas, si él quiere solo sexo y si tú quieres solamente eso. Si me gusta mucho puedo hacerlo esperar hasta diez salidas o mínimo cinco citas. ¿No es mucho? Si en verdad quiere algo, va a esperar. Si quiere algo en serio, quizás hasta la segunda o tercera. Pero porque hay química y porque ambos sabemos que va en serio.

¿Es cierto que fingen ser muy modositas y tratan de no mostrar mucho ímpetu cuando tienen sexo por primera vez? ¡Yo no! Si ya estoy ahí me tengo que lucir. Si cree que soy muy atrevida, entonces no es el tipo para mí. ¿Te han roto el corazón? No. Ya no me lo rompen. Apenas estaba saliendo con un güey y le dije “ya no quiero”. Me gustaba mucho. Y cuando le dije que ya no, él me mandó a la fregada y pues lo que me dolió fue el orgullo. ¿Te han puesto el cuerno? No me han puesto el cuerno o no me he enterado, pero si corto con alguien y sé que ya sale con alguien o si tengo el orgullo herido hablo con alguien para no quedarme sola y salgo todos los días para que se arrepienta. Y me vea como si nada. ¿Si ves al otro con una chica nueva? Ay, siento el típico hueco en la panza. Después se me pasa. Y entonces entro en otro mood. Sé que tengo que bailar padrísimo esa noche, ser la persona más interesante y me tiene que ver espectacular. ¿Qué más odias en los hombres? Que no nos digan la verdad, lo odiamos. Que me salgan con pretextos cuando no responden los mensajes. Que sean celosos e impuntuales. Yo puedo ser impuntual, pero él no. Si sé que llego tarde, aviso. ¿Qué debe de tener físicamente tu hombre ideal? Barba. Buen corte de cabello. No precisamente un hombre de comercial. Cuerpo de crossfit, si es que se puede. Que se sepa vestir bien y que huela rico. Buenos brazos. Porque así sé que me puede cargar. No tengo daddy issues, pero mi papá es un intelectual, así que mínimo debe ser culto, saber de todo, de cine, que lea, que platique por horas.


GUÍA43

EL TAMAÑO ES UN MITO, MEJOR QUE SE PREOCUPEN POR SER CABALLEROS NADIA, 40 AÑOS

Profesionista, académica, madre de dos hijos y madura. Con buenos ingresos y buena amiga del padre de sus hijos, Nadia tiene ahora en puerta una nueva relación que le ha hecho tener esperanza en los hombres. “Me trata muy bien. Había olvidado el efecto que provocaba un caballero en mí. Me ha sorprendido y me siento renovada”, asegura emocionada con su recién iniciada relación. ¿Es complicado que te atraiga un hombre? Primero, para que me guste ya hay una lista muy definida. Debe de ser un hombre inteligente, que le aprenda algo, que sea independiente y que lo admires. Si no lo admiras, vale madre. Físicamente me guío mucho por las manos y los ojos. ¿Y en el equipo? ¿Hay una medida estándar? Muchas mujeres no nos fijamos mucho en el órgano sexual. Es una falacia. No necesariamente aceptamos el meñique, pero lo que pide la mujer es atención. Si eres caballeroso ya la hiciste, aunque lo tengas chiquito. ¿Entonces el tamaño no importa? El tamaño es un mito. Al final existen muchas cosas con las que puedes divertirte. ¿A las cuántas salidas puedes tener sexo? La primera vez que tuve una relación sexual fue a los cuatro meses de salir. Con mi segunda pareja formal ya fue como a los dos meses. Ya a los 40, en esta última relación fue a la primera. Ya no tengo nada que perder. Y me encantó. ¿Te liberaste de tabús? Me liberé del tabú de hacerlo a la primera. Porque él ya es una persona adulta, sin broncas, separado, que no está buscando estabilidad, es alguien a quien admiro y quiero. Y lo admiro y lo quiero porque trabaja duro, es independiente y sin complejos. Y es un caballero para todo. Atento, educado y lindo. Me tiene sorprendida. ¿Cuándo te ha partido la madre un hombre? Fue con mi exmarido. ¿Te puso el cuerno? No, ni eso. Fue por desobligado y desatento, por valemadrista y vivir sin esfuerzos. Es una persona muy capaz, pero no podía admirarlo, porque no destacó. Y eso me dolió más que si me pusiera el

cuerno. Cuando te ponen el cuerno es porque algo no se hace bien como pareja, pero si hace algo contra sí mismo y su desarrollo, es un pedo personal y ya no puedes hacer nada por él. Y si él no tuvo el empuje, te contamina. Está cabrón. Así que mejor lo corrí de la casa. ¿Cuándo pensaste que podías empezar de nuevo? Pues apareció otra oportunidad sin querer. De repente notas cuando alguien es atento contigo y te gusta y no se planea... Había esperado por muchos años y en tres salidas se dio. Maravilloso, la verdad. ¿Has aplicado el friendzone? ¿Cuándo lo haces? Ay, cuando ves que tienen las mismas garras todas las semanas. Cuando perdieron ese arreglo a sí mismos que ni se cambian ni se bañan. O cuando les preguntas qué aman hacer y dudan. Pues entonces no saben nada. Alguien me preguntó si yo era feliz. Y dije que sí, que a pesar de todo. La palabra clave es saber exactamente si ese hombre es feliz. Y si no es feliz lo mandas directo a la chingada, porque de lo contrario te contamina. ¿Así de plano? No. Porque no es que seas culera. Es que ellos lo permiten. La mujer puede ser muy difícil y complicada. Cuando una mujer dice no es no. Y ya. Y no hay poder humano que la convenza, simplemente no te atrae. Cuando algo te gusta vas por él. A los hombres les gusta lo complicado o lo difícil, quizás porque lo valoramos más. Pero eso tiende a tronar. A fuerzas nada... ¿Cuándo tienes sexo por primera vez con un hombre? ¡Si sacas todas tus técnicas se asustan! Me ha tocado que sí se asustan. Porque hay como etapas. Hay quienes hacen de todo y de prisa. Pero hay otros que les gusta el cortejo, la seducción, el juego, y eso es muy padre porque hay erotismo, se vuelve algo muy chingón. La persona con la que salgo, pues revivió mi parte erótica y esos juegos de seducción. Y pues ahora no me hago la disimulada. Jamás me hago de la boca chiquita, eso sí. A ellos les gustan las gargantas profundas. Primero me dicen: “Ay, ¡no lo creo!” y luego piden más. ¿Hay fecha de caducidad para un hombre? Hay fecha de caducidad para el amor. Si las cosas andan mal no le das más oportunidades. Es preferible mandar a la chingada todo, porque en cuanto das una oportunidad se genera un círculo vicioso y no vas a salir de ahí. Jamás vuelvo a dar una oportunidad. Hoy mi sonrisa es para otro.


44NO FICCIÓN

MATRIMONIO IGUALITARIO


NO FICCIÓN45

¿Qué piensan los poblanos sobre el matrimonio gay y la adopción de niños por parte de estas parejas? ¿Seremos los poblanos tan cerrados como nos ha estigmatizado el país entero? ¿Vamos a favor o en contra? Aquí la encuesta de Mas Data. Por Mas Data y Edmundo Velázquez | @mundovelazquez

D

esde el 17 de mayo, fecha en que el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, presentó la propuesta para reformar al artículo 4 de la Constitución para incorporar el criterio de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de reconocer como un derecho el matrimonio igualitario, sin importar la orientación sexual y sin discriminación, el país entero se ha volcado en el sí o no a las uniones entre parejas del mismo sexo. La propuesta, que provoca la discusión del tema en todos los congresos locales del país, aterrizó ya en Puebla causando polémica. Este mes, en Revista 360° Instrucciones para vivir en Puebla presentamos los números de una encuesta proporcionada por la empresa Mas Data, donde se plasma qué piensan los poblanos acerca de la propuesta de Peña sobre el matrimonio gay y la adopción de niños por parte de estas parejas. ¿Seremos los poblanos tan cerrados como nos ha estigmatizado el país entero? ¿Vamos a favor o en contra? Contrario a lo que se pudiera pensar, la postura conservadora histórica con la que se relaciona a los poblanos persiste, pero se matiza al

preguntarles su opinión con relación a los matrimonios del mismo sexo. La empresa Mas Data practicó alrededor de 800 cuestionarios a poblanos, a quienes se les preguntó: “¿Qué tan de acuerdo está con los llamados matrimonios igualitarios o entre personas del mismo sexo?”. La mayoría contestó “En desacuerdo total”. No es de extrañarnos. La respuesta obtuvo la mayoría con 32.8%. Sin embargo, no muy lejos se encuentra la respuesta “Acuerdo parcial”, con un 25.5%, y después le sigue “Acuerdo total”, con un 24%. Finalmente se encuentra el “no, parcial”, a las uniones del mismo sexo, con 12.5%. El acuerdo representa, sumadas ambas opciones, un total de 49.5%, mientras que el desacuerdo entre ambas opciones, parcial y total, suma apenas 45.3%. Sumados los acuerdos y desacuerdos, se revela que los poblanos están, en mayoría, de acuerdo con los matrimonios de parejas del mismo sexo. Pero la lectura cambia cuando se plantea y cuestiona sobre la adopción. A la pregunta “¿Qué tan de acuerdo está con que parejas homosexuales puedan adoptar a menores?”, los poblanos responden con un tajante no. El “Desacuerdo total”

gana con 46.6%. Casi la mitad de los poblanos lo desaprueba. Le siguen las opciones de “Acuerdo total”, con 17.1%, y “Acuerdo parcial”, con 17%. Mientras que el “Desacuerdo parcial” queda en el cuarto sitio, con 15%. Al final, 4.3% prefirió no responder o decir que no sabrían qué contestar al respecto. En este caso, el desacuerdo total y parcial sumados representan más de la mitad de los poblanos, 61.6% de los encuestados no están de acuerdo en que las parejas gays en Puebla adopten. Si a este espinoso tema se le cruza con la política, se tiene otra lectura. A los encuestados se les preguntó: “¿Usted votaría por un partido o candidato que promoviera la adopción de menores por parejas homosexuales?”. La respuesta mezclada al contenido político provoca igual una respuesta tajante. “Definitivamente no” gana con 44.1%, “Tal vez sí” se quedó en segundo sitio, con 20.4% de las preferencias, mientras que “Definitivamente sí” alcanzó 16.1% y “Tal vez no” 13.9%. Las personas que no quisieron contestar o no supieron qué decir se quedaron en un porcentaje de 5.5%. A las cifras, sigue el debate.


46NO FICCIÓN

¿Qué tan de acuerdo está con los llamados matrimonios igualitarios o entre personas del mismo sexo?

5.3%

No sabe / No contestó

12.5%

Desacuerdo parcial

24% Acuerdo total

¿Quiénes contestaron esta encuesta? Del 9 al 11 de julio del 2016, la encuestadora Mas Data, que dirige José Zenteno, se dedicó a preguntar a los poblanos de las 25 distintas secciones electorales en Puebla, cuál es su punto de vista sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo, así como qué opinan sobre la adopción de niños por parte de estas parejas. Hablamos de un universo de casi mil encuestados, en los que 48% corresponde al sexo femenino y 52% restante se trata de hombres. Las personas abordadas tienen una edad entre los 18 y 56 años de edad. El 20.5% corresponde de los 18 a los 25 años; 27.3% de los 26 a los 39 años; 30.8% va de los 40 a los 55 años y 21.5% tiene más de 56 años de edad. De la muestra también se desprende que la mayoría de los que respondieron esta encuesta, 27.3% de los encuestados, trabajan por su cuenta o se autoemplean. Otros rubros más altos de acuerdo a lo que se dedican los encuestados son ama de casa, en 17%, 11.8% son estudiantes y 10.3% son empleados en una empresa privada.

25.5% Acuerdo parcial

32.8% Desacuerdo total


NO FICCIÓN47

¿Qué tan de acuerdo está con que parejas homosexuales puedan adoptar a menores?

17.1% Acuerdo total

46.6%

4.3%

No sabe / No contestó

17%

Acuerdo parcial

Desacuerdo total

15%

Desacuerdo parcial

¿Usted votaría por un partido o candidato que promoviera la adopción de menores por parejas homosexuales?

44.1% Definitivamente no

20.4% 13.9% 16.1% Tal vez sí

Definitivamente sí

Tal vez no

5.5%

No sabe / No contestó


48NO FICCIÓN

Buscan negar visibilidad a las familias diversas BRAHIM ZAMORA ODESYR

P

ara Brahim Zamora, vocero del Observatorio de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr) —la organización no gubernamental que ha apoyado distintas causas civiles, desde la lucha antitabaco, el señalamiento de casos de feminicidios y la defensa de las personas pertenecientes a la comunidad lésbico gay transexual y transgénero en Puebla—, el discurso de odio propagado por el Frente Nacional de la Familia está cubierto de esta lucha por los niños. “Yo creo que no es obligación de la sociedad entender o no entender el avance de los derechos, pero sí es obligación de los tomadores de decisión, es decir, estamos frente a una intensa y muy bien orquestada campaña de difamación, especialmente contra la defensa de los derechos sexuales, es sistemática porque no solo tiene que ver con la agenda LGBT. Tiene que ver con la agenda de los derechos de reproducción de las mujeres y con la agenda de educación sexual, y se ha orquestado una campaña dirigida a clases medias y se está promoviendo en escuelas de clase media católicas y también en las parroquias, en las iglesias, en redes sociales y en las escuelas y en las universidades, se han creado organizaciones de facto, como Frente Nacional por la Familia, bajo el argumento de la defensa de la familia para atacar la concepción de derechos, específicamente de atacar

la iniciativa de Enrique Peña Nieto”, comentó Zamora en entrevista para Revista 360°. En términos reales, la iniciativa de Peña Nieto no ayuda en nada, asegura Zamora, ya que los derechos por los que pugna se han conseguido, a empellones, gracias a la Suprema Corte de Justicia de la Nación. “Eso hay que tenerlo muy claro, Peña Nieto no es ‘el salvador’, lo que hace es tomar una postura sobre un derecho ya ganado en las Cortes y no en los Congresos. Los legisladores, en ningún estado del país salvo en Coahuila y en el Distrito Federal, estuvieron a la altura de las circunstancias de las demandas y del marco constitucional. En todos los estados se opusieron por sus demandas religiosas y desde los grupos empresariales. Y prefirieron escuchar a los grupos de poder”. Para el vocero del Odesyr, las organizaciones de derecha que se han concentrado en el Frente Nacional por la Familia mantienen una argumentación muy pobre sobre los derechos de otras personas y por qué se les debería de negar la inclusión en otros, como la adopción. “No hay un solo argumento sólido para atacar el matrimonio igualitario en nuestro país, a mí me parece un poco simpática la postura, es decir, defendemos a la familia porque no queremos que se institucionalice... la familia. Cuando tenemos familias de

todos los roles. Hay un tema de fondo y es lo que no quieren decir, y ahí es donde está la piedra angular del discurso y la raíz homofóbica que tienen los conservadores, es decir, todas las argumentaciones que se han dado y podemos discutirlas todas, desde la idea absolutamente ridícula de que la familia existió antes que la sociedad. Antes de la familia estuvo el clan y la tribu y antes hubo otros modelos familiares, este modelo familiar de padre, madre e hijos es un modelo que ni siquiera es latinoamericano, ni siquiera es latino, es anglosajón”. ¿Cuál es el problema desde mi punto de vista? La visibilidad. Jefri Weeks lo llama “pánico sexual” y lo define como todas las regulaciones sexuales, morales que lo que generan es la negación de una práctica o la censura simple y sencillamente, porque no queremos verla, no porque no exista, sino porque hay un prejuicio por pánico. Es decir, el argumento son los niños: ¡qué va a ser de ellos! Nosotros sembramos el odio en los hijos, y para que no lo buleen, mejor que no tenga padres gays, los niños son un pretexto. ¿Cuál es el pánico? El pánico es que mi hijo lo imite, porque esta gente conceptualiza la homosexualidad como una enfermedad y contagiosa. Entonces ese es el problema, tanto dudan de su heterosexualidad que prefieren no ver lo evidente”, comentó Zamora.


NO FICCIÓN49

Cada derecho conseguido ha costado mucha sangre MARCO ANTONIO MORENO M AT R I M O N I O I G U A L I TA R I O M X

E

l abogado Marco Antonio Moreno es miembro de la organización Matrimonio Igualitario MX, que ha promovido amparos colectivos a nivel nacional para que personas de la comunidad LGBTTTI puedan casarse cuando ellos lo deseen, sin necesidad de que sea aprobada una legislación como la propuesta por Peña Nieto, por ejemplo. “El presidente de la República se vio obligado a poner el tema sobre la mesa. El PRI dice que nosotros somos los culpables de su desgracia y que por eso perdieron las elecciones del 2016. Bueno, la nación entonces tiene una gran deuda con la población LGBTTTI y lo que no pasó en el 68 lo hicimos nosotros”, dice entre risas Moreno. El matrimonio igualitario y cada uno de los derechos de la comunidad le han costado sudor y sangre a la comunidad LGBTTTI, considera Moreno. “Desde que encerraron en prisión al yerno de Porfirio Díaz la historia de México nos negó espacio. Y pues hemos empezado en la historia de este país, hemos empezado a salir a las calles, no tenemos mucho creando

y gozando de instituciones, gozando de la salud más amplia, de decidir. No era posible decidir siquiera nuestras vidas, eso es lo que me parece bien relevante, que en el cuento ya se hable de colores”. En Puebla se han ganado ya cinco amparos de personas que buscan casarse con su pareja a pesar de ser del mismo sexo, ya que el Código Civil en Puebla todavía no ha sido modificado y se mantiene en la congeladora del Congreso local otra iniciativa para legalizarlo. “¿Qué pasará con los amparos? Ya se ganaron cinco amparos para que las parejas puedan acceder al matrimonio, y aun así el Congreso local metió un recurso a revisión. Porque la argumentación fue un poco distinta, ya que nosotros lo que buscamos era evidenciar que quien fue discriminatorio y era responsable, era el Congreso. El Congreso local tiene que quitar la discriminación de los hechos”. A pesar de las trabas que pudiera generar el Congreso en Puebla, es posible el matrimonio igualitario. Con el marco normativo nacional y la postura confirmada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que ubica al Código Civil

en todo el país como discriminatorio. “Ya no voy a necesitar de un amparo, este derecho ya se ganó”, agrega. Para el activista, la postura del Frente Nacional por la Familia son patadas de ahogado y también la considera homofóbica. “Dicen que no son homofóbicos, pero piden que no se llame matrimonio, porque hay que seguir guardando las distancias y eso no es otra cosa que decir ‘no podemos ser iguales’. Ese es su discurso, su discurso es no igualitario. Si yo quiero acceder a esa figura igual que tú, que se te permite, son derechos superfundamentales para cualquier proyecto de vida”. Para Moreno, la lucha del movimiento LGBTTTI se plantea desde “el orgullo”, desde lo costoso que ha sido para la comunidad el conseguir a cuentagotas los derechos con los que el resto ha vivido sin problemas, como el derecho a la identidad o a una unión civil. “El orgullo es ser gay, por eso es un movimiento transgresor, hasta la fecha ningún otro movimiento, ni siquiera el feminismo, ha logrado en tan poco tiempo lo que ha logrado el movimiento gay”.


50NO FICCIÓN

Hecho en


NO FICCIÓN51

el Centro Por Carlos Rocha / @rochapress y Marco Calderón Fotos Raúl Bravo / @raulbravogil

Ellos son los pilares de la tradición. Cuando las calles del primer cuadro de la ciudad estén abarrotadas de comercios de franquicia o anuncien sus ofertas en inglés, volveremos a ellos para rescatar la memoria. Quizá en el futuro estos oficios desaparezcan, pero que a nadie le quepa duda de que ellos son la resistencia, el último bastión de lo que fuimos.


52NO FICCIÓN

Guadalupe Gutiérrez TALABARTERA

M

i oficio es el de la talabartería, nos dedicamos al trabajo en cuero y en piel. El trabajo la mayoría son cinturones, fundas de celulares, de navajas y trabajos especiales que las personas pueden ir pidiendo. Si alguna persona quiere algún diseño se le hace, solo se cobra el material y la mano de obra. Mi papá trabajó aquí muchos años, yo fui aprendiendo desde pequeña, y ya después de grande estuve trabajando al mismo tiempo con él. Este negocio tiene unos 78 años, todos en la misma calle de la 2 Oriente. Antes estaba a un costado del Hotel San Leonardo. Ahora ya estamos aquí en la 2 Oriente 801. Yo tengo aquí 23 años trabajando sin parar. Soy una de las dos personas de oficio talabarteras que quedan en el Centro Histórico de Puebla.

La piel o el cuero que se trabaja se compra en las peleterías del Centro. Ahí se venden las piezas completas del color que se pide: hay negro, café natural, o café chocolate. Y aquí ya se trabaja para darle forma de cinturón, de navaja, de celular o de portafolio. El producto que más se vende ahora son las fundas para celular, esto ha cambiado. Antes eran las fundas para navaja, pero como ya casi no se usa... pues ahora para el celular. El cinturón siempre ha estado, ese siempre ha sido constante, por el material que sale bueno la gente regresa y se lleva otro. Tengo clientes de años, han regresado ahora los hijos de las personas que antes venían con mi papá, ahora regresan con la misma tradición. Mi papá les hacía mochilas de cuero que duraban mucho y ahora regresan con sus hijos, no son muchas ya. Pero al menos dos al año sí hago. Esas mochilas aguantan más, no es necesario estar comprando a cada ratito. Este oficio no creo que desaparezca, tal vez los nietos de los que alguna vez lo trabajaron continúan. Aunque ahorita ya solo quedamos tres o cuatro talabarteros. En el Centro Histórico solo dos, antes éramos tres, pero apenas falleció una persona. Yo le he enseñado a mi hijo, de vez en cuando viene, cuando hay trabajo me viene a ayudar. Pero hasta ahora no sé si se lo voy a heredar o algo. No lo puedo forzar, depende de él. El producto más económico son pulseras que cuestan desde 25 pesos, las fundas de navaja tienen un costo de 75 pesos, hay monederos en 80. Lo más laborioso son los portafolios o fundas de libros que piden especiales y que rondan los mil pesos. Todo lo que se pida, siempre estamos aquí trabajando, no hay falla.


NO FICCIÓN53

Jaime Gordillo ZAPATERO

L

legué a este oficio por herencia de mi papá. Fuimos diez hermanos, de los cuales yo soy el mayor; cuatro de nosotros aprendimos el oficio y heredamos nuestro negocio: uno de ellos está ubicado en la 8 Oriente 410; otro está en Avenida de las Torres de Plazas Amalucan; yo, en la 2 Oriente 1011 y otro entre la 13 y la 19 Poniente, por la UPAEP. Ya llevo 52 años en este lugar: desde los 15 años, saliendo de la secundaria, mi papá me dijo “o estudias o trabajas”, y me incliné al oficio un año, que ya de por sí lo ayudaba a ratos, pero ya cuando me dijo “te voy a poner tu negocio”, sí sentí feo, porque de 15 años independizarse no fue fácil. Entonces tres años fueron con sufrimiento, porque no entra mucha chamba, no creen en uno como chamaco, no hay la confianza, y uno también se siente inseguro. El Centro ha cambiado mucho: anteriormente había muchas vecindades, muchos callejones que ahora tienen negocios, antes estaban habitados por gente de los barrios. Pero de repente se comenzaron a volver muy aglomerados, las familias eran numerosas. Yo todavía alcancé a ver el río de San Francisco, que poco después fue entubado para hacer el bulevar [5 de Mayo]. Así que, imagínese, este ha sido mi paso de todos los días desde hace más de 50 años. Mi oficio ha cambiado mucho: ahora hay nuevas máquinas, nuevos materiales, sobre todo por el zapato que entra del extranjero, como el chino. Yo veo que ya cada vez somos pocos los que nos dedicamos a esto. Pero yo creo que sí tiene futuro, finalmente todos calzamos. Ahorita mi hijo ya está aquí conmigo aprendiendo el oficio y ya Dios dirá después cómo vendrá el tiempo.


54NO FICCIÓN

Alejandro Hernández “El Chino” PESCADERO

L

levo 32 años en la misma empresa, y en ese tiempo he visto que ahora ya hay más puestos, antes nomás eran tres negocios, pero ahorita ya hay bastante competencia. Tenía como 17 años cuando empecé. En este tiempo también he notado que ha llegado mucha gente de fuera: de Tampico, de Veracruz, de Chiapas, de Sinaloa; ellos traen producto, antes era poca gente la que venía de esos lados, pero ahora ya están viniendo bastante. Yo vivo en San Bartolo y me hago media hora todos los días en metrobús. Normalmente me levanto a las 3:30, ya en la tarde voy saliendo como a la una o dos de la tarde. Aquí en el Centro siempre ha habido mucho tráfico, más en esta calle. A mí no me gustaría que las calles se hicieran solo para peatones, porque precisamente los carros que pasan son los que ven que tenemos producto y se detienen a comprar. No creo que funcionaría si los edificios como este o los que hay alrededor los convirtieran en departamentos; finalmente esta es una zona comercial y siempre ha funcionado así. Además, las zonas de alrededor son un poco peligrosas para la gente que no conoce por aquí: tenemos muy cerca el barrio de San Antonio, la 22, que ya ve que tienen su fama. A nosotros no nos hacen nada, pero siempre es bueno andarse con cuidado. Me gusta mucho mi trabajo, me gusta gritar las ofertas, vender, atender bien al cliente. A veces también voy a ayudar a algún otro negocio, o a don Vicente a descargar camarón. Tengo aquí también trabajando a dos de mis hijos: Tito y Nando, ellos estudian y trabajan, uno estudia Fisioterapia y el otro Sistemas, yo les he dicho que ser pescaderos no es malo, pero precisamente quiero que estudien para que tengan un futuro mejor que el mío.


NO FICCIÓN55

Luis Mora ELEVADORISTA

D

esde hace 20 años trabajo en el primer rascacielos que hubo en la ciudad de Puebla: el edificio María. Soy el vigilante del edificio, y también trabajo en el elevador de siete de la tarde a nueve de la noche. Posteriormente cierro el edificio y me quedo a dormir aquí. Durante la mañana y el día están dos personas más. El elevador en el que trabajo es de 1948, igual que el edificio María. El dueño fue un español, Juan Jumarada, originario de Santander, España. Es un elevador manual, funciona con una palanca: a la izquierda es subir y a la derecha es

bajar. Además están los frenos para detenerlo, y ya está calculado cuando se va manejando, antes que rebase el piso se suelta la palanca y el elevador cae en el piso que piden. Básicamente el elevador es un carro, a veces falla, se atora, y entonces hay que desatorarlo, siempre mantener la calma para que el pasaje no se espante, se altere y empiece a gritar. El técnico viene de vez en vez a darle mantenimiento, principalmente a los cables. De la cabina nos encargamos nosotros. El elevador recorre seis pisos, aunque el edificio tiene siete pisos más la planta baja y la azotea. Al inicio, cuando el carro era nuevo, entraban nueve pasajeros y diez con el operador. Pero ahora, únicamente subimos a seis personas y siete con el chofer, porque los cables ya tienen tiempo. Cuando hay mudanza, la mudanza queda abajo y hay un horario para que suban o bajen las cosas. Si es que caben, ya si no pues por las escaleras y a pulso. Pero cuando suben las cosas en el carro, yo también tengo que ir en el elevador manejando. Me ha tocado transportar de todo, aquí estuvo Melquiades Morales cuando era gobernador, también venía Jesús Morales. A propósito, la propina a veces se acostumbra, dan 5 o 10 pesos. Pero no todas las personas. Antes de estar aquí, trabaje 14 años en un elevador del primer banco Bancomer que hubo en Puebla. Ahí era fácil porque ya era automático, pero así como este ya quedan pocos.


56CRÓNICA

Olimpia y la batalla contra el ciberacoso sexual

Una poblana impulsa la Ley contra el Ciberacoso Sexual que está por pasar en la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México, la cual tipificará un catálogo de delitos sexuales cibernéticos y plantea penas para aquellos que lucren o se diviertan a costa de la dignidad de mujeres y hombres. Por Edmundo Velázquez / @mundovelazquez / Fotos Raúl Bravo / @raulbravocid


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n el 2013 la vida de Olimpia Coral Melo cambió con la desaparición de su celular entre el equipo de su trabajo. Un video donde aparecía teniendo sexo con su novio fue tomado del móvil y difundido. Todo mundo lo sabía. Menos ella. Orgullosa serrana, oriunda de Huauchinango, aprendió de la experiencia y hoy impulsa una ley contra el acoso sexual cibernético con el objetivo de apoyar a las víctimas de este tipo de comercio sexual virtual, y con la cual se generará un catálogo de delitos sexuales cibernéticos. Ello permitirá sancionar a aquellos que lucren, exhiban y se conviertan en depredadores cubiertos por el anonimato de la red.

Hoy es una mujer segura de sí misma, de 27 años de edad, politóloga y próxima abogada. Dejó atrás la experiencia amarga de ser acosada para formar el Frente Nacional por la Sororidad, con el que llama a las mujeres a apoyarse entre sí mismas. En entrevista con Revista 360º admitió relatar la amarga historia que significó ser víctima del ciberacoso sexual. “Yo tenía 80 personas a mi cargo y todos lo habían visto. Se lo rolaron por WhatsApp y yo ni enterada. Una vez me acuerdo que llegué a unas carnes asadas y ellos cuchicheaban. Cuando llegué se quedaron callados. Me sentía muy incómoda porque no sabía qué pasaba.”

Para noviembre del 2013 Olimpia acababa de romper con su novio. Estaba a punto de participar en un concurso de debate y recibió la llamada de una amiga: “Acaban de pasarme un link de YouTube donde hay un video tuyo amiga (…) Sales tú y tu ex”. Lo primero que hizo Olimpia fue llamar a su expareja. Él le dio la espalda. Pasaron tres meses y a pesar de la forma en que él se portó cuando Olimpia tuvo el primer aviso de que el video se encontraba circulando entre sus conocidos, retomaron su relación. En enero volvieron y en febrero del 2014 comenzaron a circular capturas de pantalla con las imágenes en grupos de Facebook como Rólalas Huauchinango.


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Hasta su casa llegó un familiar de su pareja con el video en mano. “¿Sabes qué es lo peor? ¡Que no soy yo el del puto video!”, le reclamó. Olimpia sintió su vida acabada. De ahí en adelante todo fue una avalancha de lodo. Su suegra le recomendó que lo negara: ”Hasta Niurka tiene un video. Pero a partir de ahora no eres tú (…) A ver hasta dónde aguantamos la mentira”. “Y yo como Mario Marín, sí soy yo pero no soy yo…”. Pero después poco a poco todos lo encontraron, sus primos, sus hermanos. Todos se enteraron. Pero la gran lección se la dio su mamá. “No, tú no te vas del país. Ni te desapareces. Todos cogemos. Y el único problema es que a ti te vieron. ¿Eso te hace menos mujer? ¿Eso te hace una mala persona?”, le dijo su mamá. El apoyo y la defensa de su familia fue elemental. “Me mandaban fotos de penes. Me escribían diciéndome cosas horribles. Me pedían sexo oral a cambio de bajar el video. Siguió el acoso y la sextorsión. Muchas chicas caen en la desesperación, sientes que vas en la calle y que te ven desnuda, que ven tu cuerpo, tu celulitis, se te va la vida. Mi inseguridad era el triple de la que vive una mujer. Llegué en tener un odio infinito a la gente y amanecía preguntándome por qué estaba viva.” Después corrió otro riesgo, intentó denunciar y se encontró con lo peor: la inutilidad del


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sistema de justicia para atender a una víctima. El agente del ministerio público le demostró la insensibilidad. “¿Y qué quieres que haga? ¿Que le hable a Mark Zuckerberg?”, dijeron. Pero Olimpia recibió la llamada de un amigo que le recordó de lo que estaba hecha: “¿Y ya viste todas las páginas que hay? ¡Ya viste toda la gente que está como tú? Todas las mujeres que lo sufren, porque no eres la única. A ti te dieron un don, el don de la palabra, has ganado concursos de oratoria, de debate y le has mentado la madre a cuanto político. Hoy sabes que no hay leyes para proteger a las mujeres y que todas las que están sufriendo esto, como tú, son las putas de la ley.” La llamada le devolvió el aliento. Se limpió las lágrimas, abrió la laptop y comenzó a buscar las páginas. La primer imagen que encontró en estas páginas de Facebook fue una joven con Síndrome de Down de quien se burlaban y veían como objeto sexual, un tema terrible de odio contra la mujer. Pero no solamente le daban like a

esas páginas los hombres que trataban así a las mujeres. Olimpia descubrió que las mismas mujeres revisaban quién se encontraba en esa página. “Son mercados virtuales de explotación sexual. Se quedan sin contenido y piden a víctimas que se les envíen otros videos para bajar tus propias imágenes. Son grupos para divertirse a costa de la dignidad humana.” Así que Olimpia comenzó a contactar a todas las mujeres exhibidas ahí para hacer un frente común. Después fue invitada para hacer una propuesta legislativa para el Congreso local de Puebla y ella propuso plantear una iniciativa contra el ciberacoso sexual, armar un catálogo de delitos virtuales sexuales y generar un violentómetro virtual. “Había entendido que la ley debía de voltear a ver a este tipo de violencia del siglo XXI. Porque es un concurso de violencias a la vez. Todo pasa, te acosan, te extorsionan. En esa presentación fueron las chicas a las que busqué y dije que esa propuesta de reforma era por ellas. No

por mí. Por ellas (…) Tenía que salir una causa. Nosotras no teníamos la culpa. Vergüenza los que compartieron el video, los que compartían esas imágenes.” Irónicamente, en Puebla, en el pleno del Congreso local, la iniciativa no pasó. Pero Olimpia jamás se rindió. En Tlaxcala está por presentarse nuevamente, en Jalisco también le han solicitado presentarla y está por ser aprobada en la Ciudad de México. Además, próximamente planteará el proyecto de ley en Argentina del 13 al 17 de septiembre del 2017 con distintos grupos que apoyan a víctimas del ciberacoso. Aquellos que quisieron hacerle daño a Olimpia lograron exactamente lo contrario. La volvieron en su peor pesadilla. Hoy, con el Frente Nacional por la Sororidad, organización que fundó para hermanar a las mujeres y crear una comunidad de apoyo mutuo, también ha logrado detener casos de ciberacoso sexual y exhibir incluso a aquellos que se sirven de la dignidad de las mujeres.


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Instrucciones para publicar desde el corazón en Revista 360º Por Julieta Lomelí / @julietabalver

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n día nublado de 2014, con un clima caprichoso, pero no por ello menos placentero característico ce la Angelópolis, tenía una cita con Zeus Munive director de la Revista 360º Instrucciones para vivir en Puebla, en ese entonces su revista cumplía siete años de existencia, con un número que se imprimía desde el inicio en papel, y también un portal que era alimentado diariamente con noticias, reportajes, opinión política

y contenido de coyuntura. La idea de Zeus era fortalecer el contenido cultural en su revista, ese era el motivo de nuestro encuentro en aquella tarde que se abría con nubes, clausurando el sol con una fuerte lluvia. Llegué temprano a nuestra cita, el edificio estaba situado en Reforma, también había otras oficinas, recuerdo que era un edificio solitario, el elevador era silencioso e incluso tétrico, había unos sillones blancos en la

recepción del edificio, estaba nerviosísima, no sabía bien que esperaba Zeus de mi perfil. Él tardó un poco más porque estaba en radio en alguna otra parte de la ciudad. En ese entonces yo llevaba casi cinco años, semana tras semana, escribiendo sin cobrar. Primero en La Jornada Aguascalientes y después en un periódico de Puebla. Siempre pensé que escribir gratis era un tipo de abuso de los editores y dueños de


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las redacciones, sin embargo, también sabía que no era la gran escritora y que esos espacios me servirían de ejercicio para pulir la pluma. Para ensayar la creatividad y la profundidad en mi escritura, pero no por ello devaluar la belleza, la complejidad de la vida y sobre todo la inteligencia del lector, usando la típica estrategia de escribir textos simples, con polémica gratuidad, o sobrada superficialidad podría atrapar rápidamente la mirada de muchos ojos. Mi idea siempre fue escribir sobre cultura, crítica literaria, filosofía, arte y esos “grandes” temas de la cultura que a veces, por la inmediatez y la coyuntura política, no logran salir mucho en papel o en los portales de prensa, porque pareciera que no son muy rentables, o que no hay la suficiente paciencia, disciplina lectora y creatividad por parte del autor para exponer a su público dichos temas. Pero de que siempre hay lectores esperando contenidos de mayor calidad, alguna recomendación editorial, alguna película, reflexión crítica de la época que nos atraviesa a todos nosotros, o una sutil sugerencia existencial para cambiar cómo ven su vida, siempre los hay. Un poco cabalgaba en esta “poética de la escritura” esa tarde nublada en la que vería a Zeus. El director decidió contratarme, y así pude dejar algunas cosas, porque en ese entonces trabajaba de todo, freelanceaba, editaba libros de textos, escribía acá y allá, dejando mis letras fantasmas y de autoría anónima en cosas que poco, o incluso nada, tenían que ver con la filosofía y ni siquiera con el ámbito cultural. Estaba muy desilusionada y cansada de escribir por pedido. Ese día conocí a Zeus y a su revista, él sí pagaba, y me dio la libertad de escribir como mi consciencia, que sí peca de rebelde y no tiene muchos escrúpulos morales, me lo dictara.

Trabajo con la revista desde abril de 2014 y festejo hoy con optimismo estos doce años, no sin antes agradecer todo lo que he aprendido aquí, porque en algún sentido, y volviendo a la baraja de pensamientos que atravesaban mi espera aquella tarde nublada en Reforma, también deje de lado mi estricta “poética de escritora”, dándome la oportunidad a mí misma y a otros, al diálogo de coyuntura, pero no por ello cayendo en la banalidad de la grilla y el chayote. Fue en Revista 360º donde aprendí a hacer periodismo en un sentido más amplio, dejando la pomposidad intelectual de siempre escribir ensayos, críticas literarias, columnas de divulgación de la filosofía, o reseñas librescas, para también comenzar a hacer reportajes, crónicas, entrevistas y todo ello que implica el diálogo de más autores, de más ideas vivas conviviendo en una página. Agradecida estoy con la Revista y con su director por ser mi primera escuela formal de periodismo. Quiero también mencionar que a pesar de que el contexto laboral mexicano nunca ha sido fácil para una mujer porque generalmente se naufraga en el mar complicado de la misoginia y el machismo editorial, he encontrado en Zeus un puerto seguro, uno alejado de esas prácticas sin ética que vuelven a las mujeres inseguras por los comentarios de jefes envidiosos que quieren sobajar su inteligencia. En Zeus he encontrado sobre todo mucho apoyo, respeto y reconocimiento de mi creatividad e inteligencia. Zeus ha sido un editor y un jefe que siempre me ha dado ánimos cuando no me la creo, y luz verde a toda idea, por muy loca o disruptiva que parezca. Agradezco, pues, esa libertad que el director me ha dado y el respeto

no solo a mi trabajo y a mí como persona, sino también a cada uno de los párrafos que han sido publicados en su revista, porque jamás ni por error, se le ha ocurrido censurarme una sola palabra. Es gracias también a 360º que ahora he podido partir al mar con una veleta segura, porque no solo he conocido muchos artistas, escritores, académicos, políticos, y lectores de la Angelópolis gracias a la divulgación de mis textos en el portal y en las páginas impresas, sino que también, he conseguido publicar en otros espacios. Por lo cual, y una vez más, reconozco la ética de su Director, quien jamás ha envidiado o reprimido mi trabajo para pedirme exclusividad, permitiéndome así sembrar mis palabras también en otros espacios. La Revista 360º Instrucciones para vivir en Puebla, ¡cumple una doce años de existencia! Y ahí he escrito cosas buenas y también seguro otras no tan buenas, he armado guerra cultural, he hecho entrevistas incisivas y también constructivas, reseñas y anti-reseñas, he ganado enemigos, pero sobre todo he ganado amigos y lectores, curriculum y experiencia. También quiero agradecer a mi querida Puebla y a su gente, porque es una ciudad que amo y siempre llevo en mi corazón. El tiempo transcurre, pero yo sigo manteniendo mis raíces muy puestas en la Angelópolis, porque fue mi casa y siempre lo será, regalándome momentos de felicidad, aprendizajes inolvidables, y muchos, muchos lectores inteligentes. Parte de mi sigue ahí gracias a gente que ha confiado en mi trabajo y en mis letras, como Zeus Munive y su revista. La vida se mueve, los años pasan, pero nosotros permanecemos. ¡Felicidades!


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Monólogo sobre crónicas negras, incinerados, desollados y más onardo González Rodríguez

Por Diego Leonardo González Rodríguez

Nena, no te pongas pesada / no me apagues el televisor Es la hora de las noticias / quiero saber de los muertos de hoy. Háblame de horror, 1280 Almas

“T

e puedo hablar de policías a los que he entrevistado y que me confiesan que han asesinado pandilleros, policías que han vapuleado gente, policías que han torturado gente”, dice. Daniel Valencia no ha presenciado el inicio de un desastre, pero siempre ha llegado puntual a ver a los heridos, los muertos, las cenizas de las casas en llamas o la sangre en el pavimento. Ha hablado con pandilleros, reos, criminales de todas las calañas, políticos de todas las cloacas. Ha conversado con las madres de las víctimas y de los victimarios. Ha cubierto historias perturbadoras y dolorosas, historias de impunidad, corrupción, indolencia. Su trabajo es reportear, escribir, investigar, echar el cuento, meter los pies dentro del barro, pisar la sangre fresca para tomar la fotografía de la muerte recién ensabanada. Es parte del equipo del diario digital Elfaro.net, edita y escribe artículos policiales, notas rojas, crónicas negras. Valencia hace periodismo en San Salvador, uno de los países más violentos del mundo, donde criminales y policías le han hablado al oído de lo inconfesable.

La muerte se convierte en un espectáculo público, estamos tan acostumbrados que para nosotros es un espectáculo público más. Es como ir a un partido de futbol. Es como ir a escuchar el concierto. Ver al artista. A falta de acceso lúdico de divertimento para nuestras sociedades, la escena del crimen es un acontecimiento social, después de la escena del crimen en las comunidades todo mundo va a medir tu relación con la comunidad sobre la base de: ¿fuiste a la escena del crimen? ¿Viste al muerto? ¿Viste quién era? ¿Te acordás quién era él? Y a comentar: ¿por qué lo habrán matado? Sabemos que lo mataron por esto. Es decir, es un evento social, es la normalización de la violencia en nuestra región.

La cosa es que no fue que los policías incendiaron la cárcel, sino que a la hora del incendio, los policías penitenciarios, lejos de auxiliar a los reos que estaban atrapados y que estaban quemándose, dejaron las puertas cerradas y no les dieron chance de salir. Los policías no dieron oportunidad de nada, ni de abrir los portones de la cárcel para que ingresara el camión de bomberos. Los policías no querían que se les escapara ningún reo. Entonces, decidieron comenzar a dispararles a los prisioneros que rompieron los techos en búsqueda de algo de aire. La quema de la cárcel de Comayagua (Honduras) fue algo increíble de verdad, es decir, ahí murieron más de 300 personas calcinadas. La escena, el olor de la escena, el tratamiento de las autoridades hacia los cadáveres, hacia las familias que llegaban a preguntar por ellos. Creo que hay una imagen que yo nunca voy a olvidar, es después de que han recogido todos los cadáveres y se los llevan en furgones hacia Tegucigalpa, la capital de Honduras. Está el millar de familias esperando saber si alguno de los muertos es su hijo o su primo, su padre, su hermano. La cosa es que los furgones se arruinaron porque eran demasiados cadáveres, entonces se arruinaron y la morgue de Tegucigalpa tampoco tenía espacio para 300 cadáveres, entonces estos furgones, que en teoría tienen que tener temperatura helada para mantener los cuerpos, se arruinaron y lo que tenían era la imagen de un millar de personas en una pendiente, una calle un poco empinada, el furgón estaba hasta arriba en el extremo superior de la calle, toda la gente estaba abajo, entonces lo que tenías era el furgón con las puertas abiertas. Las abrieron porque prefirieron tenerlas abiertas con el olor que eso destilaba, porque cerradas hacía que se deterioraran aún más los cuerpos. Entonces tenías la escena de cadáveres allá apilados en esos furgones con las puertas abiertas y de ahí bajaban unas correntillas —fluidos corporales— que cruzaban por los pies de todos los familiares y se escurrían en una alcantarilla.


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El primer tema que se me ocurrió cubrir era tratar de responder a esta pregunta: ¿por qué en la guerra de las pandillas los jóvenes son tan violentos y capaces de matarse, unos tan chicos, y hacerse cosas tan bestiales tipo película Saw, o de cortarse partes del cuerpo, o arrancarse piel de cara, desfacelarse? Tratar de responder esa pregunta sobre la base de las concepciones generales que se tienen sobre ellos: “es que son malos”, “es que hacen pacto con el diablo”. Hace como dos años incluso hacíamos la broma en el equipo de la Sala Negra que aquellos casos que nosotros llegamos a conocer como historias de éxito como la de Little Scrappy, la de Jovel Miranda, nos los fueron matando, uno por uno; es decir, creo que tenemos alrededor de ocho fuentes, expandilleros que se salieron por la libre, que digamos, se salieron del mundo de las pandillas, ya no estuvieron delinquiendo, que al final por una u otra razón terminaron asesinados. Es casi que una tara o la necesidad de pagar sus propios clavos. Conozco uno en Guatemala, él está vivo, él es de las primeras generaciones, tendrá 45 años, él está vivo, pero siempre está obligado a tener un pie dentro, un pie fuera de la pandilla. Otro caso que conozco, aquí en San Salvador, uno de los primeros pandilleros retirados, tiene como 40 años, se fue a Estados Unidos, estaba viviendo allá, ya se había calmado, en Estados Unidos lo deportan por alcohólico, se peleó en una calle, lo agarran y lo deportan. Ha regresado al Salvador. No se mete con la pandilla, que ahora son unos niños que él les lleva una distancia como de 20 o 25 años. Más si son jovencitos. Él no se quiere meter; pero la orden que tiene es de no salir del territorio porque si sale del territorio, la pandilla contraria, que está arriba de su colonia, lo va a matar y eso para su clika es una ofensa. Estando dentro del territorio tiene que cumplir ciertas reglas. Una de estas es no pelear, si pelea lo castigan porque está rompiendo las reglas del barrio y como no aporta nada para el barrio, es decir, prácticamente este tipo vive preso en su casa, pero está vivo. No sé si eso es una historia de éxito, creo que no, está jodido vivir en tu propia colonia y ser una persona casi que presa en tu propia colonia. Éxito en cuanto a que viven, que su vida sea con un final menos trágico así como este, si no conozco. La verdad no conozco.

He llegado a entender la posición de un pandillero, entiendo su furia y su resentimiento y hasta cierto punto hasta lo comparto, es decir, imagínate que eres un joven de escasos recursos que no tiene ningún futuro, que vives en una comunidad en la que sabes que no vas a tener ningún futuro. Uno, porque tu escuela es muy mala y tu acceso inmediato para una mejor educación no existe; tu entorno familiar no te va a seguir sosteniendo cuando ya cumplas la mayoría de edad; porque tu mamá es muy pobre, tu abuela es muy pobre, tu papá no está; las expectativas de futuro y de vida para un joven de escasos recursos en El Salvador son bien jodidas y, sin duda vivir, en ese entorno y encontrarte con la oferta de las pandillas por un lado es algo más inmediato y algo que te puede solucionar en el corto plazo la vida, a sabiendas que la estás arriesgando por un futuro que es a corto plazo. Su furia y su resentimiento a la sociedad es entendible pero a leguas. Ahora, yo no comparto y no estoy de acuerdo con ellos en su guerra, en su cultura y en la gran lavada de coco que les dan los pandilleros más viejos a los más jóvenes para que se metan a eso. Es un sinsentido que existan para eliminarse. Que la 18 (la pandilla del Barrio 18) exista para matar a la MS (Mara Salvatrucha) y viceversa.

Ves tanto, ves tanta cosa podrida que lo más que te queda es seguir denunciando esas cosas podridas, porque si no se hace, casi que eres parte de lo podrido


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De las cosas que yo más agradezco en estos años de reporteo ha sido tener la certeza de que estas no son historias de buenos y malos, de que en el mundo de la violencia ni el policía es tan bueno, ni el pandillero es tan malo. Hay una gran escala de grises en las que se mueven todos, desde el pandillero, el policía, el fiscal, el médico forense. La adrenalina es un arma de doble filo, porque a veces uno se deja de llevar y si no tienes bien planificadas las cosas o al menos los colchones que te permitan sortear eventos que pueden ser bien riesgosos, la adrenalina te puede jugar en contra. La adrenalina te puede jugar malas pasadas, lo importante son las lecciones que nos han quedado de esta cobertura: no dejarnos ir sin tener garantías o salvavidas. Si vamos a entrar en una zona de conflicto tenemos que ir con gente que conozca la zona, que conozca el terreno, con contactos dentro de la zona de uno o del otro bando. Se te rompe algo de la sensibilidad. Ya no te afecta tanto ver al muerto, oler al muerto, que eso también puede ser un riesgo, porque muchas veces cuando te curtes tanto de algo, probablemente pierdes ese olfato que te puede llevar a nuevas aproximaciones o a nuevas preguntas que hacer en el reporteo. Se te van rompiendo algunas fibras y es como que ya hay cosas que ya no te afectan, que ya no te quitan el sueño o que probablemente sí lo hacen, pero vienen a manifestarse mucho tiempo después.

Es un sinsentido que existan para eliminarse. Que la 18 (la pandilla del Barrio 18) exista para matar a la MS (Mara Salvatrucha) y viceversa En el equipo —Sala Negra del Faro.net– a la mayoría nos ha afectado en menor o mayor rango, yo creo que he sido de los más afectados por ese tema, porque creo que se mezclaron una serie de cosas en un momento determinado entre 2012 y 2013, que desembocaron en mi conducta y en mi forma de conducirme, unas cosas bien raras, como apatía, falta de ganas de ir al trabajo, especies de miedo o paranoias sobre lo que le podía pasar a mi círculo familiar más cercano. Yo creo que era como resultado de estar tan expuesto a esta espiral de violencia. Hay cierto punto en que dices ¡puchica, esto ya no tiene arreglo! Pero que sigamos haciéndolo creo que es casi que una rebeldía o un acto masoquista, por decirlo de alguna manera, de creer que las cosas sí pueden cambiar. Está como esa dualidad. Ves tanto, ves tanta cosa podrida que lo más que te queda es seguir denunciando esas cosas podridas, porque si no se hace, casi que eres parte de lo podrido.




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