Consejos para ser una buena esposa
Ser una mejor esposa puede llevar a una mejor interacción, más íntima y sana, e impactar en áreas que nunca imaginaste. En una pareja, tus deseos, aunque son importantes, son secundarios con respecto a las necesidades de la pareja como unidad. Ser una mejor esposa significa no buscar siempre la satisfacción personal, sino la de buscar apoyar, amar y potenciar a la familia. Tener un centro espiritual saludable es la base de todo.
Se segura de tí misma. Ponerte tú misma por delante de él, es otra forma de insultar a su gusto en las mujeres. Si él está contigo, es porque él quiere. Él te encontrará sexy
- La familia debe ser un regalo y un tesoro único. - Debes dar lo mejor de ti todos los días.
Expresa tus sentimientos y necesidades. Salvo en el caso extraordinario de que tu marido fuese un “psíquico”, no esperes que tenga poderes para leer la mente. Si quieres algo, pídelo. Si algo está mal, dilo, pero no acuses a tu marido de las cosas.
- Tienes que estar dispuesta y saber que puedes estar poniendo todo tu amor, atención y esfuerzo por algo que puede no reportar satisfacción a corto plazo. - El objetivo debe ser lograr paz a largo plazo, intimidad, alegría, afecto, etc. y la única manera de lograrlo es comprometerse a seguir un objetivo a largo plazo.
No esperes la Luna. Él tiene que seguir intentando, tú necesitas seguir intentando, pero ninguno de nosotros es perfecto. Las expectativas insatisfechas tienden a frustrar a todo el mundo. Sin embargo, si ambos trabajan por el matrimonio, siempre te sentirás cubierta, incluso cuando uno de nosotros sea un poco corto.
Ser una esposa mejor es comprender las individualidades e inculcar la necesidad de un plan en conjunto donde la suma de los esfuerzos lleven a un objetivo provechoso común.. Ser una mejor esposa significa tener maneras efectivas de comunicarse con tu compañero o miembros de la familia. No impongas tu manera de pensar. Conversa y discute, llega a un acuerdo.
Mantén tu vida sexual interesante. Asegúrate de hablar sobre tu vida sexual con él. Además, no tengas miedo de hablar de cualquier cosa que tú podrías estar interesada.
Eres la líder de la familia, actúa como tal. Por sobre todo, recuerda que todo se basa en el amor mutuo. Recuerda que todo lo que decimos y hacemos son expresiones de amor.
Acéptalo. Sólo mediante la aceptación de él como él es, ¿tienes tal profundo respeto y gratitud por él que tú nunca querrías que él cambiara de ninguna manera por ti?. Él tiene mucho que ofrecer si le das el espacio para ser él mismo. Sé un alivio para el estrés, no una fuente de estrés. Los hombres (y las mujeres) se conducen con estrés todo el día y cada uno de los días. Tienen que padecer el estrés No le pidas explicaciones acerca de sus acciones o cuesen el trabajo y en casa. Haz lo que esté en tus manos para tiones su juicio o integridad. ayudarle a hacer frente al estrés de la vida cotidiana. Anima a tu marido a poner en práctica sus aficiones e interuna buena esposa siempre le mantiene preparada una eses y sírvele de apoyo sin ser excesivamente insistente. comida deliciosa para cuando él regrese del trabajo; especialmente, su plato favorito. Si tú tienes alguna afición, intenta no aburrirle hablándole de ésta, ya que los intereses de las mujeres son triviales tiene que tener el cuidado de hablarle con tono bajo, comparados con los de los hombres. relajado y placentero. se tiene que mantener bella para que el se sienta bien de El desayuno es vital para tu marido si debe enfrentarse al tener una mujer linda a su lado y para quete encuentre mundo exterior con talante positivo. muy interesante. Salúdale con una cálida sonrisa y demuéstrale tu deseo por complacerle.
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Escúchale, déjale hablar primero; recuerda que sus temas de conversación son más importantes que los tuyos.
En cuanto respecta a la posibilidad de relaciones íntimas con tu marido, es importante recordar tus obligaciones matrimoniales.
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