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Nuevos ropajes par nuestras figuras
Nuevos ropajes para nuestras figuras
Tras acometer una profunda remodelación a las instalaciones de la corporación, principalmente la cocina y la sala de figuras, los hermanos de la Historia de Tobías creímos que el próximo proyecto de envergadura para desarrollar, aprobado en Junta General Ordinaria, fuera la remodelación de los ropajes de nuestras figuras bíblicas. Ya que, junto con el Señor de la Humildad y Paciencia, son nuestra enseña, nuestra bandera, lo que mostramos en la calle y por lo que estamos aquí. Veinte años son los que cumplieron las ropas la pasada Semana Santa. Sin ningún añadido, sin ningún retoque. Pensamos que era el momento idóneo para que en la Semana Santa 2011 las figuras de El Pez presentaran aires renovados. Durante todo el verano, los hermanos de la comisión han trabajando para tal efecto. Así tras varios presupuestos y varias reuniones con diferentes sastres de prestigio y de garantías, decidimos romper con los cánones normales de Puente Genil y encargar este arduo trabajo a un sastre Cordobés: Rafael Rubio Peláez. Constante colaborador en la confección de las vestimentas de las imágenes del reputadísimo imaginero Antonio Bernal Redondo. Se deseaban unas figuras distintas a lo típico de nuestro pueblo, pero que no perdiera el sello de Puente Genil. Es decir, los ropajes se tenían que adaptar a la época en la que vivieron los personajes. Telas naturales y muy sencillas. Se quitarían terciopelos, rasos, oros, agremanes, bordados y diademas. Y así fue. Aprobados los bocetos por mayoría en Junta General, se comenzó a trabajar en la elección de las telas y conjunción de colores hasta conseguir el estilo que, se tenía en mente. Ha costado muchos viajes, varias discusiones y quebraderos de cabeza, pero el resultado ha sido el esperado. Cuando leas este artículo todavía no estarán presentadas, pero estamos seguro que el próximo Jueves Santo, la Historia de Tobías, representará como nunca a sus personajes bíblicos, naturalidad y sencillez en sus vestimentas; y como siempre, impecables en su desfile.
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