NATGEO Junio - 2014

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Su inspiración proviene de China. Hace más de 1000 años, durante la dinastía Tang, los granjeros desarrollaron un intrincado policultivo de carpas, cerdos, patos y vegetales en sus granjas familiares, utilizando el estiércol de patos y cerdos para fertilizar el estanque de algas con las que se alimentaban las carpas. Luego las carpas eran arrojadas en los arrozales inundados; ahí engullían plagas de insectos y malas hierbas y fertilizaban el arroz. Este policultivo arrozal-carpa se convirtió en un pilar de la dieta tradicional de arroz y pescado de China. Aún se utiliza en más de tres millones de hectáreas de arrozales en el país. En la costa de Columbia Británica, Cross ha ideado por sí mismo un policultivo. Alimenta solo una especie: el bacalao negro. Un poco más adelante, corriente abajo de sus corrales, ha colocado canastas colgantes llenas de berberechos, ostras y vieiras nativos, así como mejillones que se alimentan de las finas excreciones de los peces. Junto a las canastas cultiva largas líneas de kombu de azúcar, empleado en sopas y sushi; estas plantas acuáticas filtran el agua aún más, convirtiendo casi todo el fósforo y los nitratos restantes en tejido vegetal. En el fondo del mar, 25 metros por debajo de los corrales de peces, los pepinos de mar –considerados un manjar exquisito en China y Japón– absorben la basura orgánica más pesada que las otras especies pasan por alto. Sin el bacalao negro, explica Cross, su sistema podría utilizarse en las piscifactorías existentes para servir como un filtro gigante que produciría alimento y ganancias extras. Perry Raso, ostricultor de Rhode Island, emplea un monocultivo, no un policultivo, pero no les proporciona ningún tipo de alimento a sus animales acuáticos y aun así ha obtenido 12 millones de ejemplares. Un elemento clave para la sustentabilidad es aprender a alimentarnos de productos que se encuentran en las partes bajas de la cadena alimentaria. Los mariscos están solo un paso arriba del fondo de esta. Y además de cultivar un producto sano, bajo en grasa y alto en omega 3, los acuicultores de crustáceos eliminan nutrientes excesivos del agua. Raso inició su piscifactoría en su último año de universidad y pronto estaba vendiendo sus

ostras en los mercados de productores. Raso ahora atiende en el verano a 800 personas diariamente en el Matunuck Oyster Bar. Mientras tanto, la Universidad de Rhode Island lo ha enviado en viajes de enseñanza a África, donde la acuicultura está en rápido crecimiento y la gente necesita con desesperación proteína saludable y asequible. Unos pocos kilómetros hacia el norte, en las heladas aguas de la bahía Casco, dos barqueros de Maine, Paul Dobbins y Tollef Olson, han descendido aún más en la cadena alimentaria. Tras ver cómo el cierre de las pescaderías comerciales, una tras otra, devastaba las comunidades costeras de Maine, comenzaron en 2009 su primera granja comercial de kelp en Estados Unidos. Empezaron con 900 metros lineales de línea de kelp y el año pasado cultivaron 9000, con tres especies que pueden crecer hasta 13 centímetros diarios, incluso en invierno. Su compañía Ocean Approved vende kelp, congelado inmediatamente después de su recolección, como verdura para ensaladas sumamente nutritivas, ensalada de col y pasta a restaurantes, escuelas y hospitales a lo largo de la costa de Maine. Delegaciones de China, Japón y Corea del Sur han visitado la granja; la industria de las algas marinas es un negocio de 5000 millones de dólares en Asia oriental. ¿Que todos comamos kelp? “Decimos que las algas son el vegetal virtuoso –agrega Dobbins–, porque podemos crear un producto alimenticio nutritivo sin tierra cultivable, sin agua dulce, sin fertilizantes y sin pesticidas. Y estamos ayudando a limpiar el océano mientras lo hacemos. Creemos que el océano lo aprobaría”. j El futuro de los alimentos EN LA RED

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Compañías ricas están com prando tierra agrícola en África.

La revista agradece a la Funda ción Rockefeller y a los miem bros de National Geographic Society por su generoso apoyo a esta serie de artículos.

¿Puede la tierra de cultivo fértil de África alimentar el mundo?

e l f u t u ro de l a c om i da

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