MALAS DECISIONES AFECTAN LA ECONOMIA VENEZOLANA Para el año 2002-2003, Venezuela sufrió un impacto tanto social como económico que marcó la vida y la historia del venezolano; este hecho es conocido como “Paro Petrolero” o “Sabotaje Petrolero” y, consistió en un paro indefinido de toda actividad laboral para solicitar la sustitución de la nueva reforma económica planteada por el presidente Hugo Chávez, o bien, que el mismo presentase su renuncia a la presidencia de la República. Dicho movimiento estuvo liderizado por miembros de la oposición, quienes fueron los encargados de convocar a la ciudadanía a unirse a esta causa, sin embargo, no escatimaron las posibles consecuencias de estos actos que llevaron a Venezuela por 3 meses a un declive económico y a la miseria social. Las medidas arbitrarias del presidente para obtener la hegemonía nacional en los eventos previos a esta fecha fueron cocinando esta terrible decisión donde el más perjudicado fue el pueblo, ya que como consecuencias de estas acciones, los venezolanos experimentaron altos índices de desempleo y desabastecimiento por la falta de producción y distribución de todo tipo de producto y, aunque el Gobierno Nacional no admitía que el país estaba atravesando una fuerte crisis, no se pudo tapar el sol con un dedo, ya que en las calles venezolanas se evidenciaba cómo los centros comerciales, empresas, negocios y otros entes del aparato productivo, se encontraban cerrados en apoyo al paro. Por su parte, los medios de comunicación privados unidos a la protesta solo transmitían las manifestaciones de la oposición dando a entender el éxito del paro, de igual manera, lo hicieron los medios impresos y la emisoras radiales privadas. Sin embargo, este auto flagelo social significaba pérdidas tanto materiales como humanas que pudieron evitarse, pero la negación a ceder de ambas partes, trajo consigo nefastas consecuencias a Venezuela y abrió la brecha entre la oposición y los oficialistas sembrando el odio en el pueblo, llegando al punto de dividir familias. Esto, que solo fue un reproche de algunas personas que no querían acatar las nuevas medidas, llevó a que los más inocentes pagaran las consecuencias, ya que a la oposición se le escapó de las manos tan grande jugada que al final no encontró la