BOLETÍN No. 19 13 DE FEBRERO DE 2011
RECIÉN LLEGADOS: •Arguedas, Alcides (2006). Raza de bronce. Caracas: Biblioteca Ayacucho •Kapuscinski, Ryszard (2007). Encuentro con el otro. Barcelona: Anagrama •Varios (2001). Manual de estilo de publicaciones de la Americas Psychlogical Association. México: Editorial El Manual Moderno •Vegas, Federico (2010). Sumario. Caracas: Alfaguara •Quiroga, Horacio (2008). Cuentos Escogidos. Buenos Aires: Alfaguara
EVENTOS:
• Visados por la libertad. Contaremos con esta exposición desde el 03 hasta el 17 de febrero en los espacios de la Biblioteca. • La Guerra contra los judíos. Exposición documental que narra parte de la historia, de lo que conocemos como Holocausto o Shoá, a través del testimonio de 20 sobrevivientes. La exhibición estará desde el 22 hasta el 29 de febrero en los espacios de la Biblioteca.
LECTURA RECOMENDADA: • Seis personajes en busca de autor (comedia por hacer) de Luigi Pirandello Lleva muchos años al servicio de mi arte (aunque como si fuese desde ayer) una criadita muy espabilada y, pese a ser tan joven, muy ducha en el oficio. Se llama Fantasía. Algo fastidiosa y burlona, si bien le gusta ir de negro nadie puede negar que a menudo viste como una excéntrica, ni tampoco creer que siempre lo hace todo en serio y de una sola manera. Se mete la mano en el bolsillo, saca un gorro de cascabeles, se lo encasqueta, rojo como una cresta, y sale corriendo. Hoy aquí, mañana allí. Y le divierte traerme a casa, para que yo saque de ellos cuentos
ENTRE LIBROS Dra. Elizabeth Izaguirre UN LIBRO: CUANDO SE TIENE QUINCE AÑOS: 20.000 leguas de viaje submarino de Julio Verne PARA VIAJAR EN AVIÓN: Cualquiera de John Grisham PARA CRECER COMO PERSONA: Camino de San Josemaría Escrivá de Balaguer PARA SER SIEMPRE NIÑO: El Principito de St. Exúpery PARA SER LEÍDO VARIAS VECES: Nuevo Testamento PARA REGALAR A UN AMIGO: Poemas de Andrés Eloy Blanco PARA SER MÁS INTELIGENTE: No existe
PARA CREER EN DIOS: Cruzando el umbral de la esperanza Beato Juan Pablo II PARA LOS HIJOS: Cualquiera que a mí me haya gustado a su edad PARA DESCONECTARSE DEL MUNDO: Harry Potter de J.K. Rowling PARA LLORAR: Corazón de E. D’ Amici CLÁSICO: Don Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes PARA UN ABOGADO: El Testamento de John Grisham PARA UN ADMINISTRADOR: No se me ocurre
PARA LEER EN UN PARQUE: Cualquiera de Alistar Maclean
PARA UN COMUNICADOR: Cuentos de G.K.Chesterton (“La taberna errante”; “El Napoleón de Notting Hill”)
PARA RECOMENDAR A UN ESTUDIANTE: Camino de San Josemaría Escrivá de Balaguer
PARA UN EDUCADOR: Mal de escuela Daniel Pennac
PARA ENAMORARSE: No se me ocurre ninguno
PARA VENEZUELA: Mensaje sin destino de Mario Briceño Iragorry
BOLETÍN No. 19 13 DE FEBRERO DE 2011 y novelas y comedias, a la gente más descontenta del mundo, hombres, mujeres, niños, enredados en extraños casos de los que no encuentran la forma de salir; contrariados en sus propósitos; defraudados en sus esperanzas; y con quienes, en resumen, el trato suele resultar verdaderamente penoso.
RESEÑAS DE LIBROS Comunidad de saberes y de personas Rafael María de Balbín El Ideario Institucional (n.2) de la Universidad Monteávila afirma una doble dimensión en la vida universitaria: “Entendemos que la Universidad es una comunidad de saberes (universitas scientiarum) y una comunidad de personas (universitas magistrorum et scholarium), que se orienta hacia la búsqueda y difusión de la verdad en todas las áreas del saber”. En la Universidad la comunidad de saberes contribuye a la comunidad de personas y viceversa. Lejos de oponerse entre sí, ambos aspectos se exigen mutuamente. El amor y búsqueda de la verdad constituye un fuerte vínculo de unión entre las personas. En cambio la indiferencia ante la verdad, el relativismo, contrapone y separa. Aquí vienen como anillo al dedo los conocidos versos de Antonio Machado: “¿Tu verdad? No, la verdad. Y ven conmigo a buscarla. La tuya, guárdatela”. La búsqueda de la verdad construye la comunidad de saberes. No una búsqueda aislada e individualista, mi verdad, sino el empeño arduo y amoroso por alcanzar la verdad, cuya adquisición es paulatina e imperfecta (imperfecta no quiere decir falsa ni inalcanzable). A la vez se hace patente la necesidad de la comunidad de personas: y ven conmigo a buscarla. Ya que la conquista de la verdad requiere el esfuerzo mancomunado de muchos y su adquisición es dialógica, se lleva a cabo en amistoso diálogo. El amor a la sabiduría cuenta con el amor de amistad entre las personas.
QUÉ SE ESTÁ LEYENDO EN LA UMA? Profesora Mercedes González de Augello Facultad de Ciencias de la Comunicación e Información Asignatura: Realidad y conocimiento • Scaramouche de Rafael Sabatini • Filosofía mínima de Rafael Ayllón Profesora Jois Ochea Rísquez Facultad de Ciencias de la Comunicación e Información Asignatura: Literatura Iberoamericana • Nuestra América de José Martí • Ariel de José Enrique Rodó
Universidad Monteávila. Final Av. Buen Pastor, Boleíta Norte. Tlf. 234.48.78 / 235.23.71 Ext. 221
El amor y la verdad van de la mano. San Pablo lo propone como un programa práctico de vida cristiana: <Veritatem facientes in caritate: Realizando la verdad en el amor> (Efesios 4,15). Eso es muy importante. El que se sabe poseedor de la verdad puede caer en la tentación de la tiranía, de la imposición violenta a los demás. Y todas las personas merecen el máximo respeto a su dignidad y a su libertad, aun suponiendo que estén el en error o que no actúen rectamente. Ésa es una característica esencial de la vida universitaria: el máximo respeto al parecer de los demás, el diálogo amistoso de quienes buscan la verdad y no se sienten con el monopolio de ella. El modo de realizar la verdad cuenta con el intercambio amigable de los esfuerzos de unos y de otros. Sin ello no habría comunidad, ni de saberes ni de personas. El Papa Benedicto XVI ha señalado, en su Encíclica Caritas in veritate (n. 2), “la necesidad de unir no sólo la caridad con la verdad, en el sentido señalado por San Pablo de la «veritas in caritate» sino también en el sentido, inverso y complementario, de «caritas in veritate»”. ¿Qué quiere decir esto? Que el amor que forma la comunidad de personas ha de ser verdadero, no aparente ni superficial. “Por esta estrecha relación con la verdad, se puede reconocer a la caridad como expresión auténtica de humanidad y como elemento de importancia fundamental en las relaciones humanas, también las de carácter público. Sólo en la verdad resplandece la caridad y puede ser vivida auténticamente. La verdad es luz que da sentido y valor a la caridad. Esta luz es simultáneamente la de la razón y la de la fe, por medio de la
cual la inteligencia llega a la verdad natural y sobrenatural de la caridad, percibiendo su significado de entrega, acogida y comunión” (Ibidem, n. 3). Así como el escepticismo o relativismo es el gran enemigo de la comunidad de saberes, el sentimentalismo amenaza a la comunidad de personas. Al faltar profundidad en el afecto no se valora a las personas por sí mismas, sino sólo en función de conveniencias o inconveniencias, simpatías o desagrados. “Sin verdad, la caridad cae en mero sentimentalismo. El amor se convierte en un envoltorio vacío que se rellena arbitrariamente. Éste es el riesgo fatal del amor en una cultura sin verdad. Es presa fácil de las emociones y las opiniones contingentes de los sujetos, una palabra de la que se abusa y que se distorsiona, terminando por significar lo contrario. La verdad libera a la caridad de la estrechez de una emotividad que la priva de contenidos relacionales y sociales, así como de un fideísmo que mutila su horizonte humano y universal. En la verdad, la caridad refleja la dimensión personal y al mismo tiempo pública de la fe en el Dios bíblico, que es a la vez «Agapé» y «Lógos»: Caridad y Verdad, Amor y Palabra” (Ibidem).
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