Con qué situación o dificultades se encontró al tomar el cargo? -Nadie es “monedita de oro”, como se dice popularmente respecto a la aceptación de una persona. Muchas fueron las actitudes, razonables todas: Escepticismo, expectativa, apoyo y confianza. Lógicamente lo que para unos era una debilidad de mis posibilidades, el ser uno de afuera, para mí era y es una fortaleza ya que no vengo con prejuicios sobre nadie, no tengo preferencias o antipatías, mas al contrario, vengo a descubrir amigos/as, compañeros/as de trabajo y hermanos/as en la fe y estoy convencido, que si Dios escuchó nuestra oración, es porque nos da una gran oportunidad para servir a la sociedad uruguaya, como Mabel lo hizo con la sociedad boliviana, desde la solidaridad generacional. Veo hacia adelante un panorama alentador. ¿Cuáles son sus expectativas para el futuro del hogar? -Deseo unirme al esfuerzo, valores y principios de todos los que, junto a los pioneros, construyeron esta micro sociedad, ejemplo de tolerancia, servicio y llena de vida experimentada. Pretendo contribuir a seguir ofreciendo calidad de vida, calidad de relaciones y dignificación de los/las ancianos/as. Ayudar a equipar a los funcionarios con herramientas técnicas y éticas para el servicio que ofrecen y también, generar iniciativas institucionales que permitan “devolver” a la sociedad productos de calidad mediante la sistematización de la experiencia de 81 años de trabajo del hogar, ayudando a formar acompañantes, nutricionistas con especialidad en dieta geriátrica y también otro personal especializado en la atención a los/las ancianos/as. Pensamos en “alianzas estratégicas” con instituciones académicas y de formación técnica de la sociedad, que nos permitan calificar recursos humanos para este servicio. Entrevista: VERONICA BIECH Secretaria de Comunicaciones (VB)
Teléfonos de contacto: 4570 5002 – 4575 2133. José G. Artigas s/n. Colonia Miguelete. Dpto. Colonia. Uruguay. Teléf.: 4575 2020. Diagramación e impresión: Cecilia Michelin Salomon. Editor responsable: el Consistorio. Correo electrónico del Consistorio: miguelete.consistorio@gmail.com. Cuenta Caja de Ahorro BROU: 084 11409. Iglesia Evangélica Valdense de Miguelete.
“Unidos en Cristo” Boletín de las comunidades valdenses de Colonia Miguelete, Colonia Larrañaga, Cardona y Santa Catalina Nº 60 Enero-Febrero 2015
Bendiciones Ya estamos transitando un nuevo año, y auguramos que el Señor brinde sus bendiciones para todos nosotros. Por cierto, a lo largo de nuestras vidas a pesar de las circunstancias a veces (o muchas) adversas, Dios nos acompaña siempre. La Biblia nos narra diversos tipos de bendiciones que Dios ha dado a los creyentes. Algunos ejemplos: la bendición a Abraham, la hermosa bendición sacerdotal del Números 6: 24-26, las grandes bendiciones de Deuteronomio 28:1-14 , o las que encontramos en el Nuevo Testamento, cuando Jesús bendice a los niños ( Mateo 19 : 13-15) o bendice el pan y el vino (Lucas 22:7-23 o la bendición de 2 Corintios 13:13 : “Que la gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la participación del Espíritu Santo, estén con todos ustedes”. La Bendición de Dios no es simplemente “bien decir” sino que nos trasmite con palabras, gestos, actos; por así expresarlo; “la fuerza, la energía de la vida misma”. Dios nos ofrece diversas bendiciones, que si bien incluyen beneficios de tipo material (bienes por ej), la descendencia (hijos) tiene un sentido espiritual que trasciende lo material. Por otra lado, cuando el ser humano exclama por ejemplo:” Bendito sea el Señor” la bendición tiene un sentido de humildad, reconocimiento, gratitud hacia Dios.
Entre las bendiciones también encontramos la bendición de la pareja humana. Al respecto nos gustaría detenernos un momento. Como sabemos, la iglesia valdense – como la gran mayoría de las iglesias protestantes- reconoce solo dos sacramentos: el Bautismo y la Cena del Señor. Lo hacemos así, porque de acuerdo con la Biblia, Jesús se bautizó e instituyó la Cena o Eucaristía. Ello significa que para nuestra iglesia, el matrimonio no es un sacramento. Y aunque muchas veces las parejas dicen “nos casamos por la Iglesia Valdense”, en realidad lo que realizan es un pedido de Bendición. En efecto, nuestra iglesia “no casa”. El casamiento tiene lugar en un Juzgado Civil, luego de lo cual si se desea, se solicita la Bendición. Esta bendición no es por así decirlo, un acto que la Iglesia por si misma pueda ofrecer como si fuera de su propiedad o un acto meramente humano. Solo Dios bendice y la iglesia – a través de sus laicos o pastoresinvoca, pide, solicita al Señor la bendición, para una persona, grupo o pareja. La Bendición máxima que Dios nos ha dado es Jesucristo mismo. Jesús abre el sentido de la Bendición para todos los seres humanos, sin distinción de raza, edad, sexo, condición social. Jesús es la máxima bendición de Dios porque ha muerto y resucitado por toda la humanidad sin exclusiones. En El se nos da la vida. Miguel Ángel Cabrera