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Ceremonia de clausura Secundaria
“La educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo” Nelson Mandela
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Hoy es un día muy especial para mí, el ser portavoz de cada uno de sus profesores me llena de una gran alegría. Dirigir estas palabras llenas de emotividad a una generación, que ha logrado sus metas a través del esfuerzo, constancia y compromiso hace que la labor docente se sienta orgullosa de los alumnos que día a día se preparaban para ser los líderes de un mañana exitoso.
He de comentarles que el alma de sus profesores se nutre de los recuerdos, vivencias, travesuras y logros que cada uno alcanzó. Ustedes fueron escribiendo en nuestros corazones un “no me olvides” y agradeciendo con una sonrisa cada conocimiento adquirido.
Ningún maestro, de cualquier nivel educativo, puede olvidar las caras de asombro, enojo, emoción o motivación que se generan en los alumnos al pedir proyectos, trabajos o ejercicios, los regaños por incumplimientos, las risas por uno que otro chiste, las tristezas generadas en ustedes con la amiga, amigo, novia, novio. Las palabras de aliento que les brindaban para poder ayudar o calmar su tristeza. Pero al final nos quedamos con la satisfacción de habernos cruzado en sus vidas, ya que sus profesores también aprendieron con ustedes.
Gracias por permitirnos dejar una semilla en su existencia que brindará frutos maravillosos. Son una generación llena de capacidades, actitudes y aptitudes, dispuestos al cambio constante y sobre todo comprometidos a aportar algo para mejorar este mundo, no me cabe la menor duda que en ustedes, próximos médicos, arquitectos, ingenieros, licenciados, profesores; está el futuro de nuestro maravilloso país.
A todos aquellos alumnos que no se han dejado vencer por la terrible situación por la que estamos pasando, gracias en verdad por ser un gran ejemplo de resiliencia ante las adversidades.
Deseamos encontrarlos en un futuro siendo personas exitosas pero, sobre todo, felices y agradecidos con cada una de las circunstancias que sucedan en su vida, ya que todo ello nos ayuda a ser mejores, audaces e íntegros.
¡No olviden! Que la única finalidad de sus profesores es educar desde el afecto y firmeza, brindando experiencias diarias que desarrollen las habilidades para la vida y dejen grandes aprendizajes en ustedes.
Deben luchar por sus sueños y no detenerse hasta cumplirlos, que nadie les diga que no lo pueden lograr, la diferencia está en intentarlo hasta lograrlo.
El equipo docente y directivo, quienes nunca dejamos de seguir haciendo lo que nos gusta les decimos: “Nunca borren ningún día de su vida, los días bellos les han dado felicidad, los malos les han brindado experiencia y los peores te han enseñado a vivir”.
¡Hasta pronto queridos alumnos, se les extrañará!
Nuestros recuerdos de ayer durarán toda la vida. Tomaremos lo mejor, olvidaremos el resto y algún día descubriremos que estos fueron los mejores tiempos de la generación 2018-2021.
Llegó el momento de concluir un capítulo en nuestra vida académica, social y personal. Estamos seguras de que cada uno de ustedes que conforma esta generación, recordará cuando inició escribiendo sus primeras líneas que darían forma a un capítulo de esta nueva etapa.
Lo hicimos con incertidumbre, emoción, nuevas expectativas y con grandes deseos de cumplir nuestros sueños; mismos que fuimos concretando gracias a un gran compañerismo, empatía y admiración que caracterizó a cada uno de los integrantes de esta excepcional generación.
Cabe destacar que en el ámbito académico desarrollamos diferentes habilidades, destrezas y atributos del perfil de la comunidad IB que practicamos día a día y gracias a ello concretamos proyectos, trabajos, tareas y actividades en las cuales veíamos reflejadas nuestras metas planteadas al inicio de este maravilloso capítulo de nuestra preparación académica que hoy con una gran nostalgia concluimos. Por lo anterior, estamos agradecidos por la labor que realizaron todos y cada uno de los docentes que en su momento nos guiaron en el sendero del conocimiento para ver en nosotros, no solamente una generación más, que tarde o temprano tenía que marcharse; si no alumnos que dejan una huella imborrable en el Instituto La Paz por su tenacidad, por ser audaces y adaptarse a lo que en su momento la vida nos presentó. Ya que en estos tiempos de pandemia, ser docente en línea es un acto de valentía y amor que juntos lo compartimos.
Por tal motivo, la generación les da las gracias a los profesores diciéndoles: Nunca olviden que enseñar es escribir en el corazón de un niño. Damos gracias de todo corazón a nuestros padres y tutores que nos apoyaron en este proceso de aprendizaje y nunca nos dejaron caer. Cada regaño valió la pena porque el día de hoy concluimos con la secundaria de manera exitosa. Dicen que detrás de cada niño que cree en sí mismo, hay un padre que creyó en él primero y consideramos que ustedes son el claro ejemplo de esto. Apreciamos todo el esfuerzo que realizan y los consejos que nos brindan, los cuáles nos alentaron a seguir adelante incluso en los momentos difíciles.
Gracias por el apoyo incondicional y la confianza que han depositado en nosotros sin pedir nada a cambio. A partir de hoy, iniciamos una nueva etapa en la que seguiremos agradeciendo que estén en nuestras vidas animándonos y ayudándonos a ser mejores personas.
Compañeros, parece irreal pensar que de nuestros 3 años de Secundaria, la mitad la pasamos en línea. Todas esas noches de estrés en las que parecía que el esfuerzo no valdría la pena, condujeron a éxitos y logros que hoy celebramos.
En esta, la clausura de nuestro último ciclo escolar en el Instituto La Paz, queremos felicitar a cada uno de ustedes. ¡Lo lograron! Terminaron esta etapa de manera exitosa.
Tantos recuerdos juntos y situaciones que a todos nos pasaban como cuando olvidábamos la cartulina en casa o cuando en la salida comprábamos con Don Papas. Incluso cuando en las ventas de comida corríamos para no tener que esperar en las filas tan largas que se hacían. ¡Y cómo no extrañar los miércoles de molletes!
Pero bueno, seamos honestos, a todos alguna vez nos llegaron a quitar la sudadera por no llevar el uniforme.
Gracias por todos los momentos que pasamos juntos a lo largo de estos 3 años y que siempre llevaremos en nuestros corazones.
Nunca olvidaremos las risas y las lágrimas que compartimos como generación, ya que una de las cualidades de esta, es nuestra unión y compañerismo. Desde ahora inicia un nuevo ciclo, en el cual tendrán que poner en práctica todas las habilidades y aprendizajes que desarrollaron y adquirieron a lo largo de su estancia en el colegio.
Para finalizar, les deseamos mucho éxito en todo lo que está por venir.
Cada persona en esta sala sabrá cómo enfrentarse a las dificultades que se le presenten, para así poder cumplir sus sueños. No se rindan. Trabajen por lo que quieran y si se caen, levántense y vuelvan a intentarlo diez veces más. Ya que un ciclo escolar que termina no es una página que llega a su fin, es un peldaño más que subir. La oportunidad comienza de nuevo; no es el fin, solo es el inicio de tu porvenir.
¡ Gracias por todo Instituto La Paz !
