DÍA INTERNACIONAL DE LAS PERSONAS DE EDAD (1 DE OCTUBRE) DATOS NACIONALES El 14 de diciembre de 1990 la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 1º de octubre como Día Internacional de las Personas de Edad, el cual se conmemora anualmente y tiene como objetivo reconocer la contribución de los adultos mayores al desarrollo económico y social, así como resaltar las oportunidades y los retos asociados al envejecimiento demográfico. Por tal motivo, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), presenta un conjunto de indicadores que muestran las condiciones sociodemográficas de la población de 60 y más años. MONTO Y ESTRUCTURA POR EDAD En las Asambleas Mundiales del Envejecimiento, organizadas por la Organización de Naciones Unidas, especialistas en la materia han concluido que: “aunque envejecer no es nada nuevo, el interés por el tema del envejecimiento y la vejez surge de los problemas que se van observando y de los que potencialmente se presentarán derivados de la creciente presencia de personas mayores”1. Nuestro país no está exento de este proceso, cifras de la Encuesta Intercensal 2015 indican que el monto de la población de 60 y más años es de 12.4 millones y representa 10.4% de la población total. En las últimas décadas, este porcentaje ha ido aumentando, y de acuerdo a las proyecciones de población que estima el Consejo Nacional de Población (CONAPO), aumentará 14.8% en 2030, lo que significa un monto de 20.4 millones. Esta tendencia brinda la oportunidad de reflexionar sobre los desafíos que trae consigo el envejecimiento demográfico y así desarrollar políticas públicas que mejoren la calidad de vida de las personas que transitan o transitarán por esta etapa de vida. La relación hombres-mujeres permite constatar que el monto de varones es cada vez menor conforme avanza la edad, y ello se debe a la mayor sobrevivencia femenina. En el grupo quinquenal de 60 a 64 años esta relación es de 88.4 hombres por cada 100 mujeres y disminuye a 72.8 en el grupo de 85 y más años. Dado que el envejecimiento es un proceso que marca la pérdida gradual de las capacidades motrices y cognoscitivas, hay cada vez un mayor número de mujeres que llegan a una vejez avanzada y que necesitan de la familia para cubrir sus necesidades. POBLACIÓN EN HOGARES La mayor parte de los adultos mayores (88.1%) forma parte de un hogar familiar, es decir, viven en hogares nucleares, ampliados2 o compuestos3. La estructura de parentesco en los hogares nucleares indica que 62.9% son jefa(e) del hogar, mientras que 35.8% son esposa(o) o compañera(o) y solo 1.3% son hijas(os). En los hogares ampliados y compuestos la configuración del parentesco cambia, ya que surgen otras figuras asociadas a las personas en edad avanzada, como es el caso de los abuelos o de la suegra(o), entre otras. Uno de cada dos adultos mayores (52.3%) que vive en un hogar ampliado o compuesto es considerado como jefe (a) del hogar; 19.0% es cónyuge del(a) jefe(a); 13.9% es madre o padre, 5.2% son suegra(o); 9.2% tiene otro parentesco y 0.4% no tiene lazos sanguíneos con el (la) jefe(a) del hogar. Distribución porcentual de la población de 60 y más años por tipo de hogar familiar según parentesco con el jefe(a)
1
Saldaña Ibarra, Sandra Areli. Educación de adultos mayores; en: Organización de Naciones Unidas (ONU). Asambleas Mundiales del Envejecimiento. Reseñas. Recuperado julio de 2016, de: https://www.uv.mx/pampedia/numeros/numero-5/envejecimiento.pdf. 2 Hogar familiar conformado por un hogar nuclear y al menos otro pariente, o por un(a) jefe(a) y al menos otro pariente. 3
Hogar familiar conformado por un hogar nuclear o ampliado y al menos un integrante sin parentesco.