Modelo de desarrollo inclusivo: por un México en donde nadie se quede atrás

Por José Medina Mora Presidente Nacional de Coparmex

Es una realidad que nuestro país enfrenta múltiples retos y problemáticas urgentes de atender.

Después de un periodo de pandemia por el virus de covid-19 que prácticamente paralizó la economía, generó la pérdida de millones de empleos y la caída de empresas, así como el incremento de carencias sociales en términos alimentarios, educativos, de salud, y mayores desigualdades, en Coparmex consideramos que el momento actual nos llama más que nunca a reflexionar juntos y repensar en la forma en la cual estamos atendiendo nuestros problemas, para buscar nuevos caminos, teniendo como base al diálogo y la colaboración.

Uno de los elementos importantes para tomar decisiones y actuar de manera diferente, es pensar en un México más inclusivo en el futuro, en donde todas y todos participemos y nadie se quede atrás.

Para aportar a la reflexión y al diálogo sobre cómo lograr ser una nación más inclusiva, los empresarios mexicanos hemos dialogado sobre la necesidad de construir la visión de un nuevo modelo de país que no solo se base en factores de crecimiento económico, sino también en desarrollo social y desarrollo ambiental, poniendo al centro a las personas.

Contemplar al desarrollo social y ambiental nos puede ayudar a reducir los grandes problemas sociales que siguen creciendo en nuestra nación, como la pobreza y la desigualdad, además de lograr un crecimiento económico vinculado al equilibrio con el medio ambiente, al producir alimentos y generar servicios usando los recursos naturales con responsabilidad y cumpliendo cabalmente las normas.

A partir de una reflexión plural, le hacemos a la sociedad mexicana, a las empresas e instituciones la propuesta de desarrollar un nuevo modelo más integral, que trascienda lo económico y nos permita trazar un mejor futuro.

Una de las motivaciones que como empresarios tenemos para hacer esta propuesta, es el ver rebasado al modelo actual de desarrollo, con una atención limitada de los problemas sociales, y además, en lugar de tener un país unido tenemos varias ver- siones de México, unas regiones con más oportunidades y otras con mayores limitaciones. Por ello, necesitamos partir de una visión completa de país, del México que juntos podemos construir, transitando hacia un modelo de Mercado con Desarrollo Inclusivo (MDI).

La idea de este modelo es poner al ciudadano al centro de las decisiones, considerar a la empresa como vehículo de cambio y transformación social, y al gobierno como un facilitador del cumplimiento de la ley, la organización social e institucional y garante de las condiciones para el desarrollo.

Los principios básicos del MDI son: la solidaridad, dignidad humana, la libre competencia y la subsidiariedad.

El Modelo de Desarrollo Inclusivo contempla 20 elementos que nos parecen indispensables:

1. Libertad de emprender, de invertir, de competir.

2. Respeto a los derechos humanos, igualdad ante la ley y fomento de la equidad, inclusión y diversidad.

3. Respeto a los derechos de propiedad privada.

4. Respeto y garantía de la libertad de expresión.

5. Sistema político democrático de derecho, con instituciones sólidas.

6. Gobiernos e instituciones eficaces, transparentes, que rindan cuentas.

7. Seguridad pública garante de los derechos de las personas, de la convivencia social y de la actividad económica.

8. Combate a la corrupción y a la impunidad.

9. Respeto y responsabilidad solidaria de las empresas con colaboradores, clientes, accionistas, proveedores.

10. Sistemas públicos, privados de salud, pensiones y vivienda solidarios, incluyentes y de calidad.

11. Educación de calidad.

12. Políticas públicas en beneficio de la población en condiciones vulnerables.

13. Acceso a la conectividad digital para el desarrollo.

14. Políticas públicas sobre cuidado del medio ambiente y actividad económica sostenible.

15. Políticas económicas sustentables.

16. Sistema tributario justo y equitativo en el cual todos aporten según su capacidad económica.

17. Garantía de condiciones para incentivar la inversión nacional y extranjera.

18. Impulso, inversión e incentivos para la investigación, desarrollo científico y tecnológico.

19. Impulso al desarrollo regional, económico y social para propiciar el progreso y el vocacionamiento.

20. Impedimento y sanción a las prácticas monopólicas y oligopólicas públicas y privadas.

Para hacerlo realidad, es importante que participemos y cooperemos entre empresarios, el gobierno, la academia y la sociedad civil, poniendo como base el diálogo, la escucha y el compromiso. Los empresarios, nos comprometemos a aportar desde la empresa para mejorar las condiciones de vida de las personas. Desde Coparmex, a través de nuestros Centros Empresariales y delegaciones en todo el país, trabajaremos para que todas nuestras empresas socias respeten los derechos de los trabajadores, cumplan todas sus obligaciones, propicien el crecimiento personal y profesional de los colaboradores y abonen a la reducción de graves problemas como la pobreza y el rezago educativo a través de esquemas solidarios de oportunidades.

Este modelo está en etapa de diálogo con diversos actores sociales y gubernamentales, para discutir sobre esta nueva visión de desarrollo, abriendo totalmente el proceso para retroalimentar las 20 propuestas iniciales, y asumiendo compromisos tangibles para hacer realidad el cambio.

Desde el sector empresarial estamos convencidos de que los grandes desafíos sociales deben unirnos para dialogar, escuchar y buscar soluciones benéficas para todos.

El país nos necesita unidos y dialogando para consolidar el Modelo de Desarrollo Inclusivo, fortalecido con propuestas y compromisos de cada uno de los sectores, para asentar el futuro de un México con más oportunidades, más inclusivo, solidario, que no deje a nadie atrás.