Formación de la HOAC
Plan Básico de Formación Cristiana Después de la formación inicial, la formación básica siste m á tica está estructu rada en sus elementos fundamentales en dos planes de fo rmación: el Plan Básico de Fo rmación Cristiana (PBFC) y el Plan Básico de Formación Política (PBFP).
E
l PBFC plantea los elementos básicos y fundamentales de una existencia cristiana, subrayando que ésta es una propuesta de realización y felicidad humana. A través del diálogo fe-vida pretende que quien realiza el Plan se vaya planteando esos elementos, experimentándolos en su vida y asumiéndolos progresivamente como la forma natural de ser, vivir y actuar: desarrollar una forma de sentir, pensar y actuar como la de Jesucristo. Lo que hace el PBFC es una propuesta de vida que se expresa, y a la vez se construye, en la realización de una misión, como ocurrió con Jesús: es para los otros porque es para la voluntad amorosa de Dios. Acoger y vivir en la realidad obrera una forma de vida acorde al hecho de que somos personas llamadas a vivir en comunión. Con el PBFC se trata de «aprender» a construir así la vida. Para ello, el PBFC está estructurado en cinco partes:
ción de comunión y fraternidad que nos humaniza). Se trata de responder una pregunta: ¿qué es lo que obstaculiza nuestra humanización y felicidad? Para ello se abordan los siguientes contenidos: Explotación - Clasismo - Individualismo Abuso de Poder - Servilismo - Egoísmo Inmoralidad - Fariseísmo - Hedonismo Segunda: La Utopía del militante cristiano. Los fundamentos de la Vida Nueva En segundo lugar, el PBFC propone la utopía que queremos acoger y construir, el ideal que queremos realizar (hacia dónde queremos ir). Subrayando que si en la primera parte se ha profundizado en los aspectos negativos que existen en la vida cotidiana del mundo obrero (lo que deshumaniza), en ésta se trata de aprender a descubrir los aspectos positivos (lo que humaniza), que también existe en esa realidad. Se trata de asumir práctica y vital-
Primera: Crítica evangélica de la sociedad El Plan propone en primer luga r afianzar en nuestra vida una visión crítica y cristiana de la realidad personal, ambiental e institucional en la que vivimos (dónde estamos). Esto se hace a través de una lectura cristiana de lo que pasa hoy en el mundo obrero. En esa lectura se va descubriendo, de un modo práctico y vital, a partir de la realidad de la vida cotidiana del mundo obrero y del trabajo, que las causas profundas del mal (de lo que nos deshumaniza) están en la negación de la dignidad de la persona, en la negación de Dios y en la negación de la moral (de la rela1