Estación ferrocarril de villajoyosa

“Villajoyosa y su “Camino del Hierro Secundario”, de vía estrecha (1908 – 1966)” Lola Carbonell Beviá

Índice

Capítulo I 1. Un proyecto hecho realidad.

1.1. El ferrocarril elemento condicionante para el despegue económico de Villajoyosa.

1.2. El incisivo apoyo del gobierno municipal vilero en pro del proyecto ferroviario.

1.3. El rey Alfonso XIII en Villajoyosa: 13 de febrero de 1911.

1.4. La adhesión del gobierno vilero hacia la figura de Alfonso XIII. Capítulo II 2. Las obras del ferrocarril.

2.1. El cambio de la fisonomía urbanística de Villajoyosa.

2.2. La estación: un edificio ecléctico con espíritu decimonónico.

2.3. La llegada del tren: 28 de octubre de 1914.

2.4. Problemas entre Ayuntamiento y empresa concesionaria del ferrocarril.

2.5. República y Guerra Civil: historias humanas ligadas a la vía férrea.

2.6. La decrepitud del ferrocarril.

Capítulo III 3. Apéndice gráfico.

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Capítulo I 1. Un proyecto hecho realidad.

Desde las últimas décadas del siglo XIX ya existía el planteamiento de crear un tejido ferroviario en la provincia de Alicante, que comunicase las poblaciones industriales del interior con la costa; además de la línea férrea ya existente que fue inaugurada en mayo de 1858, con la visita a Alicante de la reina Isabel II, -quién bajó en cada una de las estaciones de la línea de la M.Z.A (Madrid-Zaragoza-Alicante) para proceder a su inauguración.

Las primeras gestiones fueron iniciadas por una empresa británica en 1892, siendo Villajoyosa el destino del ferrocarril entre Alcoy y la costa, hecho que no fructificó, dada su proximidad con el puerto de Alicante, desviándose el proyecto hasta Gandía, con la inauguración del ferrocarril Alcoy-Gandía (1): “(…) Las aspiraciones comerciales del puerto de Villajoyosa se truncan definitivamente con la inauguración en 1892 del ferrocarril AlcoyGandia y el puerto de esta ciudad, promovidos por una compañía inglesa. La conexión de Alcoy con un puerto de mar era una necesidad evidente, difuminada por los graves conflictos sociales que sufrió Alcoy a finales del siglo. Se barajaron las conexiones con Villajoyosa, que era la de más tradición, la de Denia, que también estaba proyectando un puerto comercial, pero con peores conexiones terrestres, y la de Gandia, que con menos condiciones náuticas, acabó con ganar la partida.

La excesiva proximidad de Villajoyosa al entonces floreciente puerto comercial de Alicante fue sin duda uno de los motivos por lo que las autoridades de Fomento no llegaron a apoyar la conexión Alcoy-Villajoyosa. Para 1873 ya existían estudios definitivos, realizados por el ingeniero Antonio Mª. Jaúdenes, para la mejora de la carretera de Alcoy a Alicante, así como el proyecto de ferrocarril entre ambas ciudades, seguramente con la idea de concentrar las inversiones portuarias en Alicante y evitar la dispersión de estas en el puerto de Villajoyosa (…)”.

El segundo intentó de comunicación férrea también nació a finales del siglo XIX. Esta vez mediante la unión de la ciudad capitalina de Alicante con Villajoyosa (2): “(…) Por lo que se refiere al ferrocarril, el alicantino Juan Bautista Lafora [(1823-1911); abogado, profesor del Instituto de Segunda Enseñanza de Alicante, Diputado a Cortes y Senador del Reino] solicitó en 1882 y obtuvo en 1889 del Ministerio de Fomento la venia para enlazar por vía férrea Alacant y la Vila Joiosa.

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Los intentos de Lafora pareció que comenzaban a cristalizar al asociarse con José Carbonell Morand, de Denia, catedrático de la Escuela de Minas, pero sufrieron numerosas interrupciones debido a negligencias, atascos administrativos e intrigas de todo tipo, hasta que, en 1910, la sociedad hubo de renunciar a la concesión a la par que se creaba una “Compañía de Ferrocarriles Estratégicos y Secundarios de la provincia de Alicante” que se hizo cargo de los derechos que pertenecían a Boffinet, Solms y Compañía, concesionarios del ferrocarril Denia – La Vila Joiosa, y del compromiso de prolongar dicha línea hasta Alacant.

Así, y por fin, se decidió la construcción de un ferrocarril de vía estrecha que desde Denia enlazara les Marines con L´Alacantí, y la adjudicación de las obras se hizo a la empresa franco – belga Societé Internationale des Travaux Publics.

José Canalejas, diputado por Alcoi, jefe del partido Liberal [Eo fue ajeno a esta decisión el peso político de don Gaspar Mayor, jefe de los Liberales de la Vila] y presidente del Consejo de Ministros fue el avalista de este proyecto destinado a cambiar la economía y la vida de la zona.

La Vila, agradecida, le homenajeó dedicándole el carrer Eou, que pasó a llamarse Canalejas, y donde ahora vive el autor de este libro.

Con ocasión de un viaje a Alicante, el rey Alfonso XIII y José Canalejas se desplazaron a la Vila el 13 de febrero de 1911, siendo alcalde Jaume Llinares Xerri, para colocar la primera piedra de la estación del ansiado ferrocarril, que por fin se inauguró en octubre de 1914, implantándose desde 1916 un tren diario de mercancías entre Alacant y Denia.

Esta nueva vía de transporte y la neutralidad española durante la primera guerra mundial (1914-1918) fueron factores decisivos en el progreso y desarrollo de la Vila. [Esta obra también tuvo una importancia coyuntural nada desdeñable, ya que entre 1911 y 1913 hubo una gran sequía y mucha gente pudo evitar la emigración a la que se veían abocados gracias a conseguir trabajo en las obras del ferrocarril].

También cambió la orientación comercial de nuestro pueblo, que de estar dirigido hacia L´Alcoià pasó a hacerlo a la Marina Alta y l´Alacantí (…)”.

1.1. El ferrocarril elemento condicionante para el despegue económico de Villajoyosa.

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En los primeros años del siglo XX fue creada la “Compañía de Ferrocarriles de Alicante a La Marina S.A”, fundada en 1902 y desaparecida en 1910, la cual tan sólo dejó construidos 1.500 metros de vía férrea. Pero el proyecto continuó bajo la dirección de una nueva empresa adjudicataria denominada “Sociedad Boffinet, Solms y Cia”, cuya razón social fue la “Compañía de los Ferrocarriles Estratégicos y Secundarios de Alicante”, la cual subcontrató a la empresa francesa “Societé des Travaux Publics” para reanudar las obras (3): “(…) La última empresa ferroviaria que se instaló en Alicante fue la del denominado Ferrocarril de La Marina, línea de vía métrica que llegaba –y llega- a Denia.

En sus orígenes, nuevamente encontramos a Juan Bautista Lafora, el cual, una vez vendida la concesión del tramo Alicante – Murcia a Andaluces, pensaba hacer lo propio con el de Alicante a Denia.

A tal fin, estableció oportunos contactos con D. José Carbonell Morand, ingeniero de minas que representaba a la Compañía de Ferrocarriles de Alicante a La Marina, S.A., fundada en 1902.

Las obras se iniciaron inmediatamente pero la quiebra de la casa bancaria francesa que finalizaba la operación obligó a detener los trabajos cuando solamente se llevaban tendidos 1.500 metros de vía.

Durante ocho años se mantuvo la inactividad, lo que trajo consigo la finalización de esta sociedad y la caducidad de esta concesión en 1910.

Mientras tanto, la línea existente que iba desde la entrada del puerto hasta el emplazamiento de la actual estación, se desvió hacia la cantera existente, al pie de la Serra Grossa con la finalidad de transportar la piedra extraída hasta el muelle de Levante para las obras de su ampliación.

Durante cierto tiempo estuvieron utilizándose vías y material móvil en estos menesteres, hasta el cambio de titularidad de la extinguida empresa.

Ya en el mismo año de caducidad, el tramo Villajoyosa – Denia fue declarado “estratégico”, con lo que se abrían las puertas para subvenciones estatales, particularmente del Ministerio de la Guerra. Fue adjudicado a la Sociedad Boffinet, Solms y Cia., quienes volvieron a solicitar nueva concesión sobre el tramo caducado, Alicante – Villajoyosa, en Julio de 1911, bajo la denominación de “secundario”. Se creó así una nueva empresa cuya razón social era la de Compañía de los Ferrocarriles Estratégicos y Secundarios de Alicante. Se contrató a la empresa francesa Societé des Travaux Publics para llevar a cabo la reanudación de las obras. En la colocación de la primera piedra de la estación de Villajoyosa estuvo presente el rey Alfonso XIII (…)”.

1.2.

El incisivo apoyo del gobierno municipal vilero en pro del proyecto ferroviario.

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Desde 1908, la Corporación Municipal que gobernaba el Ayuntamiento de Villajoyosa mostró su incisiva y continua adhesión al proyecto del ferrocarril, porque supieron que gracias a la llegada de este medio de transporte, sería factible el despegue económico de la población.

Las primeras reuniones tuvieron lugar en Gandía, y para ello, el Ayuntamiento vilero dispuso que una comisión de representantes del gobierno municipal tuviera su representatividad en dicha asamblea (4): “(…) En este estado de orden de la presidencia fue leída por mi el Secretario una carta circular del Señor Alcalde de Gandía fecha diez y ocho de Marzo actual por la que con el carácter de Presidente del comité ejecutivo de propaganda del Ferro-carril de Valencia – Gandía – Alicante en proyecto ruega se de cuenta a esta corporación para que conceda utilizar todos aquellos recursos que se quieran e interponga todas sus influencias para llegar a que sea un hecho la realización de la vía férrea en cuestión. La Corporación enterada acordó adherirse a la solicitud de dicho comité ejecutivo de propaganda haciendo constar hallarse dispuesta esta corporación a cuantos sacrificios sean necesarios al propio tiempo que compatibles y dentro de las atribuciones de esta corporación (…)”.

Tras su participación en Gandía, los representantes vileros trasmitieron a la corporación municipal el acuerdo aprobado en Gandía de solicitud al gobierno, de la inclusión en el “Plan de Ferrocarriles Secundarios”, uno de vía estrecha, que uniese las ciudades de Valencia y Alicante por la costa (5): “(…) Por la Presidencia se manifestó que cumplido el acuerdo del Ayuntamiento la ocasión designada por el Ayuntamiento que había tenido el honor de presidir había llevado a efecto la honrosa misión de representar a esta Corporación en la Asamblea celebrada en Valencia el día 23 de Abril último en cuya trascendental acto se había tomado el unánime acuerdo de solicitar del Gobierno de S.M. la inclusión en el plan general de Ferro-carriles secundarios, uno de vía ancha que enlace directamente las dos Capitales de Valencia y Alicante, la cual había de pasar por esta población. El Ayuntamiento acordó por unanimidad se conceda un voto de gracia á la dignísima comisión que tan acertadamente había cumplido el encargo que le fue confiado (…)”.

La respuesta del gobierno central recayó en el rechazo de la petición cursada, pero la respuesta de las autoridades de Villajoyosa, por el contrario, fue la de no amedrentarse y luchar a favor del proyecto del ferrocarril. En principio, mediante la actuación de sus representantes políticos en la Diputación y en las Cortes (6) : “(…) El Señor concejal Don Jaime Llinares Xerri usó de la palabra con la venia de la presidencia para manifestar que creía procedente ante la resolución recordada por el Gobierno contraria á la concesión de la vía férrea directa de Valencia Alicante que el Ayuntamiento acordase reunidas con el consenso del 5

Diputado a Cortes por este distrito el movimiento iniciado por las diputaciones provinciales, Ayuntamientos y demás Corporaciones de esta provincia y de la de Valencia, agotando todos cuantos medios sean necesarios al fin de que se persigue de conseguir la realización de lo que es la aspiración común de las dos provincias. Discutida suficientemente la proposición del Señor Llinares Xerri por unanimidad se aceptó para que teniendo en cuenta que se están realizando gestiones en tal sentido por los Senadores y Diputados de las Provincias, se aplaza toda resolución hasta la sesión próxima a fin de conocer el resultado de los trabajos que están realizándose (…)”.

El Diputado alicantino José Jorro Miranda, comunicó al Ayuntamiento las gestiones que estaba realizando y le solicitó su apoyo mediante el envío de telegramas dirigidos al Consejo de Ministros y al Ministerio de Fomento, haciéndoles llegar sus requerimientos (7): “(…)

Por orden de la Presidencia se dio lectura á una carta particular dando cuenta el Diputado del distrito Don José Jorro Miranda de las gestiones que se están llevando á cabo para lograr la consecución del Ferro-carril directo entre las Ciudades de Valencia y Alicante pasando por esta población que en tan gran manera beneficiaría los intereses de toda esta comarca o región de la marina salvándola de la desesperante situación económica y postración en que por ello se halla. El Ayuntamiento por aclamación acordó ver con simpatía los esfuerzos que en pro de los intereses de las dos provincias Valencia y Alicante están realizando los Senadores y Diputados representados de ellas para la consecución del Ferro-carril antes citado, y que por medio de telegramas se exponga a los Señores Presidente del Consejo de Ministros y Ministro de Fomento la apurada situación económica de esta Comarca que solo podría salvar la construcción del Ferro-carril de referencia y suplicando respetuosamente atiendan nuestras justas reclamaciones que expondrá en el Congreso el Diputado de este distrito señor Jorro Miranda, también se acordó se invite a los Señores Alcaldes de los pueblos del partido judicial para que sin demora acudan en igual sentido a los poderes públicos (…)”.

La respuesta del Ayuntamiento vilero no se hizo esperar y en breve cursó la referida comunicación explicando los motivos de la necesidad de la construcción de la vía férrea (8): “(…) Se da cuenta a esta Alcaldía por el Comité ejecutivo de propaganda del Ferrocarril de Valencia Alicante por el litoral encareciendo la necesidad de que por medio de muchos [ilegible] el derecho de petición se llegue a las gradas del trono y a los centros ministeriales demostrando la necesidad del ferrocarril directo de Valencia a Alicante por el litoral y su consecución sea en beneficio de la aspiración común de las dos provincias se convoque en esta población a todas las clases sociales de ellas el día 27 del mes actual y se acuerde dirigir telegrama en el acto a los Señores Presidente del Consejo de 6

Ministros y Ministro de Fomento solicitando se incluya en el plan de Ferrocarriles a que se refiere la ley de 26 de Marzo último el de Valencia Alicante por el litoral y se designe a dicha reunión una Comisión de representantes que asista a la asamblea que tendrá lugar el Domingo diez de Enero en el teatro principal de aquella ciudad de Gandía, al mismo tiempo que se interese del Diputado a Cortes por este distrito y Senadores de la provincia para que asistan a dicho acto.

Enterada la Corporación y discutido el asunto se acordó poner en conocimiento de dicho comité ejecutivo que en cuanto al primer punto de su carta antes referida lo lleva ya cumplido este Ayuntamiento por cuanto con fecha catorce de los corrientes este Ayuntamiento y por su invitación los del partido judicial de esta villa en virtud de acuerdo de trece de este mismo mes, telegrafiaron respetuosamente al Señor Presidente del Consejo de Ministros y Ministro de Fomento en igual o parecidos términos á los indicados en la carta de referencia, y como segunda parte se designó una comisión del Ayuntamiento que la compondrán los Señores Alcalde y Concejales Don José Antonio Aragonés Llinares y Don Jaime Llinares Xerri para que estrechase en representación del Ayuntamiento en cuanto sea referente al fin que se persigue del mismo tiempo que el Señor Alcalde Presidente se invite a los Presidentes de las sociedades legalmente constituidas en esta población para que envíen su representación en sesión a la que designara el Ayuntamiento á la Asamblea que tendrá lugar el Domingo diez del próximo mes de Enero en el teatro principal de la ciudad de Gandía, acto de gran trascendencia para las legítimas aspiraciones de conseguir el Ferrocarril directo de Valencia Alicante por el litoral (…)”.

(9): “(…) En este estado se dio cuenta de una comunicación de la Comisión provincial de Alicante manifestando el agrado e interés demostrado por este pueblo a favor de que se construya el ferrocarril por el litoral y el Ayuntamiento acordó en su vista conste su agradecimiento a dicha Corporación provincial por sus muestras de simpatía al lado de la cual se hallara insigne este Ayuntamiento amparando con ella a la concesión del Ferrocarril interés primordial de esta comarca (…)”.

El 6 de enero de 1909 tuvo lugar una nueva reunión en Gandía, para la consecución del ferrocarril, a la que acudieron los concejales del Ayuntamiento de Villajoyosa: José Antonio Aragonés Linares, Álvaro Llinares Esquerdo, Jaime Linares Xerri y Vicente Sellés Llorca, dado que previamente el Alcalde había rechazado su asistencia por motivos de salud (10): “(…) Seguidamente la presidencia hizo presente que por el Señor Diputado a Cortes de este distrito Don José Jorro Miranda se habrá invitado a esta Corporación municipal para que enviase su representación a la reunión que con los demás representantes de los Ayuntamientos del partido judicial y Diputados provinciales del mismo habrá de celebrarse en el Palacio de la Diputación provincial de Alicante el día de mañana, y 7

en la que previas explicaciones que de dicho Señor Diputado del Estado de las gestiones que se llevan a efecto con el fin de conseguir del gobierno de S.M. la consecución de la vía férrea directa entre Valencia y Alicante con paso por esta región de la Marina, oiga las aspiraciones que sobre el asunto de los representantes de los pueblos de este distrito, manifestando al propio tiempo la presidencia que no permitiéndole su estado de salud formar parte de la Comisión que se designe suplicaba a la Corporación le dispensara de ello.

El Ayuntamiento enterado acordó por unanimidad designar para formar parte de la comisión referida a los señores Concejales Don José Antonio Aragonés Linares, Don Álvaro Llinares Esquerdo, Don Jaime Linares Xerri y Don Vicente Sellés Llorca (…)”.

La reunión tuvo sus frutos y el día 9 de enero de 1909, tres días después de haber tenido lugar la asamblea de Gandía, el Ayuntamiento recibió un telegrama del Diputado alicantino José Jorro Mirando, en que les comunicaba la aprobación del proyecto del ferrocarril, cuya publicación ya había tenido efecto en la Gaceta del 8 de enero de 1909 (11): “(…) En este estado el Señor Presidente manifestó que habiendo recibido un telegrama del Diputado a Cortes por el distrito Señor Jorro Miranda insertando la publicación en la Gaceta de ayer, de la real Orden sacando a consenso el Ferrocarril estratégico de Villajoyosa a Denia, se habrá visto en el deber de convocar al Ayuntamiento a Sesión Extraordinaria para hacer saber tan fausto acontecimiento y con tal motivo presentaba a la consideración de la corporación la moción [ilegible] de la que dada lectura de ella por mi el Secretario es como sigue: El Presidente del Ayuntamiento en vista de la grata nueva anunciando haberse publicado en la Gaceta de ayer la Real orden abriendo concurso para la construcción del Ferrocarril estratégico de Villajoyosa a Denia propone al Ayuntamiento lo siguiente, telegrafiar a los Excelentísimos Señores Presidente del Consejo de Ministros y Ministro de Fomento manifestándoles la satisfacción con que se ha recibido la inserción en la Gaceta del concurso del ferrocarril estratégico de Villajoyosa a Denia = Se telegrafíe su igual sentido a los Señores Don José Canalejas y Don José Jorro rogándoles hagan extensivo el voto de gratitud a todos los representantes en Cortes de esta provincia que intervinieron acerca del Gobierno para conseguir este deseado consenso, y a todas aquellas personalidades que el Ayuntamiento [ilegible] mostrarles su reconocimiento, e igualmente al Señor Gobernador civil de la provincia dándole cuenta de este acto. = Que conste en acta la importancia que para esta comarca tiene la construcción del ferrocarril que ha de sacarla del triste aislamiento en que se encuentra y rogar a los Diputados y Senadores que por ella se interesan eviten en lo necesario toda prórroga para que el ferrocarril de Alicante a Valencia sea un hecho dentro de los plazos 8

legales, evitando el pernicioso procedimiento de repetidas prórrogas que determinan de considerar los concursos como nuevas promesas que hacen perder a los pueblos la fe que debiera inspirarles estas concesiones. = [ilegible] remita certificación de este particular a los representantes en Cortes de esta provincia que han mostrado su interés por la línea férrea de que se trata para que sepan las justas aspiraciones de este Ayuntamiento que por ser de los más interesados, se cree fiel intérprete de las de toda la comarca.

El Concejal Don Jaime Llinares Xerri, en nombre de la [ilegible] liberal del Ayuntamiento hizo constar que esta se adhiera invitado a la moción de la presidencia de que acaba de darse lectura.

Puesta a discusión y después de usar de la palabra varios señores Concejales se acordó unánimemente aprobar en todas sus partes la moción presentada por la presidencia que con ella ha sido fiel intérprete de los sentimientos de la Corporación municipal, y que por la misma presidencia se ejecute este acuerdo (…)”.

En marzo del mismo año 1909, desde la alcaldía de Alicante se le requirió al Ayuntamiento de Villajoyosa, que realizase un estudio del nuevo trazado, al igual como el resto de poblaciones de la provincia, por donde debía pasar la línea férrea, para que, igualmente, se incluyera en el “Plan de Ferrocarriles Estratégicos” (12): “(…) Dióse cuenta de una comunicación de la Alcaldía de la ciudad de Alicante, hecha diez del mes actual, manifestando que teniendo en cuenta las grandes ventajas que esta provincia sea de reportar con el ferrocarril directo de Valencia Alicante por la costa y la conveniencia de que estando próxima a caducar la concesión del ferrocarril de aquella capital a esta villa, se solicitase del poder público la cantidad de dicha concesión y que los Ayuntamientos interesados hicieran su estudio de nuevo trazado que incluido también en el plan de ferrocarriles estratégicos [ilegible] la línea de Valencia Alicante a cuyo fin [ilegible] a el Ayuntamiento a coadyuvar a las gestiones que en tal sentido va a comenzar el de aquella capital y inscribir las instancias que hayan de elevarse al Ministerio de Obras Públicas. La Corporación Municipal enterada y después de decidido el asunto, recordó por unanimidad adherirse [ilegible] en escrito se propone por el Ayuntamiento de Alicante en el edicto [ilegible] de que acaba de darse lectura y tomando parte en cuanto [ilegible] se establezca y [ilegible] las solicitudes que se eleven por aquella Corporación, e invitar a los demás pueblos de este distrito a que presten su concurso, acordándose también de que este particular se remita certificación a la Alcaldía de la referida ciudad de Alicante y otra igual al representante en Cortes de este distrito Don José Jorro Miranda, al propio tiempo que se le interese coopere con su [ilegible] actividad y valiosas influencias a las gestiones que se hagan en el sentido acordado (…)”.

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Durante 1910, las gestiones del Ayuntamiento vilero continuaron apoyando la construcción de la línea férrea, y para ello creó una comisión de representantes del propio Ayuntamiento encargado de informar sobre todo lo relativo al ferrocarril (13): “(…) Acordóse designar una comisión del seno del Ayuntamiento y que la formen el Señor Alcalde Presidente y concejales Don Miguel Guardiola Martí y Don Jaime Soler Urrios, que asociados a los señores Don Antonio Ruiz Muñoz, y Don Antonio Lloret Lloret, lleven la representación del Ayuntamiento y con ella la del pueblo de Villajoyosa, en cuantos actos y sesiones se celebren con motivo de tratar sobre asuntos referentes al proyectado ferrocarril de la Marina y sea invitado este Ayuntamiento a quien afectan muy de cerca y son de supremo interés todos cuantos asuntos se refieran a la cuestión de que se trata (…)”.

Los representantes vileros informaron a la corporación municipal, el 27 de marzo de 1910, tras acudir a la reunión celebrada en Alicante, que había caducado la concesión de la “Compañía de Ferrocarriles de Alicante a La Marina S.A.”, y que se había tomado la decisión de acudir al Ministerio de Fomento para solicitar la prolongación del ferrocarril hasta Villajoyosa (14): “(…) Dio cuenta la presidencia de que con los señores Don Miguel Guardiola Martí Concejal y Don Antonio Ruiz Muñoz, habían asistido en comisión representante de este Ayuntamiento a la reunión celebrada en la ciudad de Alicante el día veinte y dos del corriente mes con el objeto de tratar sobre la caducidad del ferrocarril de esta villa a Alicante, y en cuya reunión donde estuvieran representadas las fuerzas vivas de aquella Capital se tomó tras detenida y concienzuda discusión el acuerdo de que provenga sin detención de ninguna clase el expediente de caducidad de la consecución de la línea citada y al mismo tiempo se acuda al Ministerio de Fomento solicitando la prolongación del proyecto de ferrocarril estratégico de Denia a esta villa hasta la ciudad de Alicante pues en ello verá la única forma y manera de que sean un hecho los múltiples proyectos y estudios que sin resultado alguno han venido haciéndose hasta el día. La Corporación municipal acordó por unanimidad acordar haber visto con agrado la conducta observada por la comisión que tan dignamente la ha representado en la reunión de que se ha hecho mérito (…)”.

La “Compañía de Ferrocarriles Estratégicos y Secundarios de la provincia de Alicante” se hizo cargo de los derechos que pertenecían a Boffinet, Solms y Compañía, concesionarios del ferrocarril Denia – La Vila Joiosa, y del compromiso de prolongar dicha línea hasta Alicante. Por ello, el Ayuntamiento vilero solicitó que Villajoyosa fuese incluida en el proyecto (15): “(…) La presidencia propuso que motivo las dos que había sido por el gobierno S.M. Declarada la consecución del ferrocarril de Alicante a esta villa [ilegible] del caso que el Ayuntamiento debiera acudir 10

al Ministerio de Fomento por medio de instancia, solicitando que el mencionado ferrocarril se incluyese en el plan general de secundarios, y el Ayuntamiento de conformidad a la moción de la presidencia así lo acordó y que la propia presidencia en nombre y representación del Ayuntamiento acuda en la forma por ella propuesta (…)”. “(…) Dada cuenta del expediente instruido en virtud del oficio del Señor Ingeniero Jefe de Fomento de la provincia de 28 de Abril último y circular del Señor Gobernador Civil inserta en el Boletín Oficial del mismo día de la que resulta que en virtud de lo prevenido en el artículo 4 del Reglamento aprobado por Real decreto del 14 de Enero de 1909 por la aplicación de la Ley de Ferrocarriles secundarios y estratégicos fue abierta en dicho Gobierno Civil información pública por plazo de treinta días para admitir reclamaciones acerca del proyecto del ferrocarril estratégico de esta villa a Denia, interesándose a dichos efectos se publicase un anuncio por esta Alcaldía al objeto de que en el referido plazo de treinta días pudieran estar admitidas las reclamaciones que se presentasen e informar al Ayuntamiento en cuanto al mencionado ferrocarril pudiera afectar a los servicios de este Municipio, resultando de dicho expediente no haberse presentado reclamación alguna por lo que es llegado el caso de que el Ayuntamiento proceda a cumplimentar lo ordenado. La Corporación enterada, estudiado y discutido suficientemente el asunto, por unanimidad acordó informar que el proyecto de ferrocarril estratégico de esta población a la de Denia lo consideran altamente beneficioso a los intereses de esta población tenga que oponer nada en contra del referido proyecto (…)”.

El 2 de octubre de 1910, el proyecto del ferrocarril volvía a ser una realidad más que nunca, y para ello, el Ayuntamiento agradecido telegrafíó su muestra de gratitud a los políticos partícipes en la defensa del ferrocarril, exponiendo la dedicatoria de una calle y la colocación de una placa en el salón de actos de la casa consistorial (16): “(…) Reunidos en las Casas Consistoriales con el laudable objeto de testimoniar su profunda gratitud a los señores que habíanse interesado y cooperado a la realización del proyecto de ferrocarril de Villajoyosa a Denia cuya Comisión entregó emanar de la Presidencia un pliego conteniendo conclusiones que resumen las espiraciones de los representantes y literalmente dicen: Primera = Suplicar al Señor Alcalde Presidente de la Corporación municipal, telegrafíe en nombre de los manifestantes á los señores Canalejas, Jorro, Díaz Moreno, Tomás Ortuño y Palomo, dándoles las gracias por la actividad y entusiasmo con que han cooperado a la realización del proyecto de ferrocarril de Villajoyosa a Denia. Segunda = Se telegrafíe asimismo al señor Sánchez Guerra que como Ministro que fue de la Gobernación, firmó el decreto comprendiendo el ferrocarril de que se trata en la red de los estratégicos y con ello se ha dado lugar á que sea este 11

pueblo el primero en recibir sus inmensos beneficios. Tercera = Rogar al Ayuntamiento que en los festejos que deban celebrarse con motivo de la inauguración de las obras del ferrocarril citado, figure como número principal del programa dedicar al señor Canalejas la calle que mira la estación con el pueblo y la colocación de una lápida en el Salón de sesiones de la Casa Ayuntamiento que exprese y perpetúe la gratitud de Villajoyosa para los señores Canalejas, Díaz Moreno y Jorro.

El Ayuntamiento en vista de todo ello, por unanimidad acordó adherirse á las conclusiones leídas, se lleve a efecto cuanto se pide en las mismas y después de entusiastas frases pronunciadas por Don José Antonio Lloret Lloret que llevaba la voz de la Comisión y las mociones elevadas de la Presidencia (…)”.

Las actuaciones de apoyo del consistorio vilero continuaron durante el mes de diciembre de 1910, mediante su asistencia a una reunión celebrada en Alicante (17): “(…) Acordóse también el pago de la cantidad de cincuenta pesetas a que ascienden los gastos ocasionados a la Comisión que en representación del Ayuntamiento se trasladó en el día veinte y dos de Marzo último a la ciudad de Alicante con el objeto de asistir a la reunión celebrada en dicho día sobre asuntos del ferrocarril de Villajoyosa a Alicante las que con el objeto indicado se abonen a Gregorio Verdú Baldó portero del Ayuntamiento y con cargo al capítulo 11 del presupuesto municipal (…)”.

(18): “(…) A continuación se acordó autorizar al señor Alcalde Presidente para que intervenga y represente al Ayuntamiento en cuantos asuntos le afecten o interesen referentes a las obras que verifiquen la Compañía constructora del ferrocarril de esta población a la de Denia y a la ciudad de Alicante (…)”.

Igualmente, el año 1911, comenzó con una sesión plenaria de apoyo al ferrocarril, en la que se ratificaron los beneficios del mismo para Villajoyosa (19): “(…) Se dio cuenta del expediente instructivo en virtud de oficio del Gobierno civil de la provincia de 28 de Diciembre último con referencia al acuerdo relativo al proyecto del ferrocarril secundario de Alicante á esta Villa presentado por Don José Carbonell Morand solicitando su tramitación como tal y con garantía de interés con sujeción a la Ley de 26 de Marzo de 1908 y Reglamento dictado por la ejecución de la misma y en cuyo oficio interesa el señor Gobernador civil se remita dentro del plazo de diez días el informe de esta Corporación acerca del expresado proyecto en lo que a término municipal afecta. El Ayuntamiento enterado y, después de la oportuna discusión acordó por unanimidad, informar que el proyecto de ferrocarril secundario de Alicante a Villajoyosa lo encuentran beneficioso a los intereses de este término municipal sin que consideren deba oponerse nada en contra del indicado proyecto (…)”.

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1.3. El rey Alfonso XIII en Villajoyosa: 13 de febrero de 1911.

La población de Villajoyosa comenzó a organizar los festejos para la colocación de la primera piedra del ferrocarril desde finales de 1910, pero específicamente la tarea se incentivó en febrero de 1911, mediante la creación de un programa de festejos que abarcaron en un primer momento los días 11 al 13 de febrero. Para ello, el Ayuntamiento designó una comisión de personas que se dedicasen exclusivamente a ello, formada por los concejales Ignacio Zaragoza Zaragoza y Jaime Soler Urrios. En un principio, la corporación pretendió que fuese denominada calle de Canalejas, -en honor al presidente del Consejo de Ministros-, al tramo situado entre la calle Cervantes en dirección a la estación del ferrocarril; pero al no hallarse urbanizado, decidieron que fuese la calle “Nueva”, -una de las principales del núcleo urbano-, la que recibiese el nombre de calle de Canalejas, y cuya placa recordatoria sería colocada el día 11 de febrero (20): “(…) La presidencia hizo presente que en sesión de dos de Octubre último se acordó dedicar al ilustre hombre público Don José Canalejas y Méndez, como testimonio de profunda gratitud por la actividad e interés demostrado en pro de la realización del proyecto del ferrocarril de esta Villa a la de Denia, la calle que mirase la Estación con la población y figurara como número principal del programa de los festejos que se celebrasen con motivo de la inauguración de las obras del referido ferrocarril. Como quiera que ha llegado este caso, con la salvedad de que el emplazamiento de la estación no permite llevar a efecto lo acordado por el Ayuntamiento por cuanto el trayecto que arrancando de la calle de Cervantes ha de dirigirse a la Estación no está urbanizado tiene el honor de proponer a la Corporación que se modifique el acuerdo de referencia en el sentido de que sea una de las principales calles de la localidad que a su parecer pudiera ser la que en la actualidad lleva el nombre de Eueva la que se (dedique) digo adelante ostente el de “Canalejas”. El Ayuntamiento por aclamación acordó aprobar la proposición de la presidencia y por su ejecución se coloque en la vía de que se trata una lápida con el nombre acordado la cual sea descubierta el día 11 de Febrero próximo a cuyo acto asista el Ayuntamiento y se invite al pueblo figurando el repetido acto en el programa del primer día de festejos que han de celebrarse con motivo de la inauguración de las obras del ferrocarril mencionado y revista la mayor solemnidad cual corresponde a la presidencia del insigne hombre público a quien se dedica.

Seguidamente acordó el Ayuntamiento designar una comisión compuesta de los concejales Don Ignacio Zaragoza Zaragoza y Don Jaime Soler Urrios para que asociados a los señores que la presidencia acuerde invitar pasen al vecino pueblo de Orcheta, el día que sea necesario al 13

objeto de saludar en nombre del pueblo de Villajoyosa y acompañar en su entrada á esta población al Excelentísimo e Ilustrísimo Señor Arzobispo de la Diócesis y que la Presidencia con los señores concejales que se dignen hacerlo salgan en el mismo día a las afueras de la población a esperar y dar la bienvenida al Ilustre prelado.

También acordó el Ayuntamiento que para solemnizar el fausto acontecimiento de la venida Regia á esta población, se celebren festejos en los días once doce y trece del mismo mes de Febrero próximo y para su mejor organización se forme una Junta de festejos que con la Comisión del mismo ramo del Ayuntamiento acuerde el programa de ellos y hecho lo presente a la aprobación de esta Corporación.

Y no habiendo más escritos que tratar el Señor Presidente levantó la sesión de que yo el Secretario certifico (…)”.

El Gobernador Civil mostró su satisfacción por la nueva denominación de la calle, enviando una misiva a la corporación (21): “(…)

Dióse cuenta seguidamente de la comunicación del señor Gobernador Civil de la provincia de tres del corriente mes por la que dicha Autoridad da las gracias más expresivas al Ayuntamiento por su demostración de gratitud á los grandes beneficios que tiene recibidos del eminente hombre público Don José Canalejas Presidente del Consejo de Ministros (colocando) digo acordando dar el nombre de “Canalejas” a la calle que se distinguía con el de Eueva y la Corporación acordó quedar gratamente interesada (…)”.

Dado que el rey Alfonso XIII llegó a Alicante el mismo día 11 de febrero y los actos le impedían estar presente en Villajoyosa ese día, -junto al presidente del Consejo de Ministros, José Canalejas-, la comisión de festejos propuso que fuese inaugurada igualmente la placa que hacía mención a la “Calle Canalejas” el día 10 de febrero de 1911, a las diez de la mañana, aunque la visita regia a Villajoyosa se produjera el 13 de febrero de 1908. E igualmente, que la placa conmemorativa con la denominación de “Calle de Alfonso XIII” fuese descubierta el día 16 de febrero, a las once horas de la mañana, acudiendo al acto todos los miembros de la corporación municipal y la vecindad (22): “(…) Se dio lectura del programa redactado por la Junta de festejos para los que han de celebrarse con motivo de la inauguración de las obras del Ferrocarril estratégico de esta población a la de Denia y visita de S.M. el Rey los cuales fue acordado por el Ayuntamiento se celebrasen en los días del 11 al 13 del mes actual y la Presidencia hizo notar que como en el día primero de los designados coincide la llegada de S.M. á Alicante y con este motivo han de asistir representación oficial de esta Villa y lo hará igualmente parte del vecindario a fin de que el acto de descubrir la lápida que ha de dar el nombre de “Canalejas a la hoy llamada Eueva” revista mayor solemnidad y mas consecuencia al acto, proponía a la Corporación 14

modificar el acuerdo tomado en la sesión anterior sin el sentido de que el acto de que se trata se lleve a efecto a las diez de la mañana del día diez dándose principio con el a los festejos públicos que lo habían de dar en el inmediato y la Corporación por unanimidad acordó de conformidad a la proposición de la presidencia (…)”. “(…) El Ayuntamiento acordó también por unanimidad que el acto de descubrir la lápida que por acuerdo de veinte y ocho de febrero último ha de dar augusto nombre de Alfonso XIII á la calle convenida hasta ahora por la de la Mar, se verifique el día diez y seis del corriente mes á las once horas concurriendo el Ayuntamiento y autoridades a fin de que el acto remita la solemnidad digna de la Augusta persona a quién se tributa el homenaje (…)”.

Para recibir a la visita real, el Ayuntamiento tuvo que realizar obras en la casa consistorial, así como en la decoración de la misma. Gastos que no pudo soportar, por lo que solicitó ayuda económica. Igualmente, los gastos por la visita regia redundaron en el aumento del consumo de electricidad del alumbrado público, y en la construcción de un embarcadero provisional en la playa, utilizado por los buques de la Marina de Guerra que acudieron a Villajoyosa, con motivo de la visita real (23): “(…) La Presidencia hizo presente que con motivo de la visita de S.M. el Rey á esta población había sido de imprescindible necesidad verificar obras en la Casa Consistorial que tanto en ello como en la decoración del mismo edificio han producido gastos que son insuficientes para cubrirlos los recursos consignados en el presupuesto ordinario del corriente ejercicio (…)”. “(…) El Ayuntamiento resultando que efectivamente con motivo de la Regia visita han ocurrido gastos de que no podría prescindirse y que son de abono con cargo a los artículos 4º y 5º del capítulo 1º del presupuesto municipal cuya consignación son insuficientes para cubrirlos resultando que efectivamente hallándose de llevarse a efecto la formación del Registro fiscal de fincas urbanas no es bastante para sufragar los gastos que ocasiona la cantidad consignada en el mismo presupuesto resultando que habiéndose aumentado las horas de alumbrado público proporcionalmente han aumentado los gastos por lo que no es suficiente la consignación actual del presupuesto (…)”. “(…) Así mismo acordóse satisfacer al mismo Manuel Cortés Marced y con cargo al propio capítulo once la cantidad de doscientas veinte y cinco pesetas por la construcción de un desembarcadero provisionalmente emplazado en la playa en el día de la llegada a la Ciudad de S.M. el Rey con el objeto de desembarcar las tripulaciones de los buques de guerra llegados para tributar honores a nuestro augusto monarca (…)”.

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La Corporación encargó también la realización de una placa conmemorativa que fue ubicada en el salón de sesiones plenarias, y que permaneció en el mismo lugar hasta la llegada de la Segunda República, la cual por petición del concejal Tomás Llorca fue suprimida (24): “(…) En este estado y en primer lugar la Presidencia en buenas y sentidas palabras hizo presente a la Corporación tenía el alto honor de ser portador del encargo que le había hecho S.M. el Rey, al honrarnos con su visita el día trece de los corrientes de que manifestase al pueblo de Villajoyosa y en su representación al Ayuntamiento su satisfacción por las demostraciones de adhesión a su Real persona que se la habían tributado. El Ayuntamiento interesado acordó por unanimidad conste en acta que en representación de este vecindario agradece a S.M. el Rey la distinción dispensada a esta Villa dignándose visitarla, como también que para perpetuar la memoria grata de tan extraordinario y solemne acto se coloquen en sitio preferente del Salón de Sesiones, un mármol y en él grabado lo que sigue: S.M. el Rey Dn. Alfonso XIII visitó estas Casas Consistoriales el día 13 de febrero de 1911 con motivo de la inauguración del ferrocarril de Villajoyosa a Denia, acompañado del presidente del Consejo de Ministros D. José Canalejas, siendo Alcalde D. Jaime Linares Xerri (…)”.

Igualmente, el Ayuntamiento Mandó construir y colocar dos placas de mármol con las inscripciones “Calle de Canalejas” y “Calle de Alfonso XIII”, que fueron encargadas a Vicente Ribes Alhambra, y cuyo precio ascendió a 36 pesetas cada una de ellas. Vicente Ribes también fue el autor de la placa que se colocó en el salón de plenos y cuyo precio fue de 90 pesetas (25): “(…) Acordóse por unanimidad se abone a Vicente Ribes Alhambra de esta vecindad con cargo al capítulo 11 del presupuesto municipal la cantidad de treinta y seis pesetas por el importe de dos lápidas mármol con la inscripción “Calle de Canalejas” colocada en la que hoy lleva este nombre.

También se acordó pagarse con cargo al mismo capítulo 11 al referido Vicente Ribes Alhambra treinta y seis pesetas valor de dos piedra mármol con la inscripción “Calle de Alfonso XIII” que se colocaron en que hoy así se denomina.

Luego acordóse satisfacer al repetido Vicente Ribes Alhambra noventa pesetas con cargo al propio capítulo 11 que ha importado la lápida de mármol colocado en el Salón de sesiones del Ayuntamiento conmemorando la visita hecha por S.M. el Rey a esta Ciudad en el día 13 de Febrero último y colocación de ella (…)”.

La población de Villajoyosa acentuó la limpieza de sus calles, especialmente las dos que destacaron especialmente por recaer en ellas el cambio de denominación. El trabajo de limpieza y decoración de las mismas le fue encargado a Miguel Llinares Urrios, y su gasto ascendió a 104´65 pesetas (26): “(…) Igualmente se acordó el pago con cargo al 16

capítulo 11 del mismo presupuesto municipal a Miguel Llinares Urrios de esta vecindad de ciento cuatro pesetas sesenta y cinco céntimos por los gastos ocurridos en la limpieza adorno y decoración del trayecto recorrido por S.M. el Rey en su visita hecha a esta Ciudad en el mes de Febrero último (…)”.

La calle Cervantes fue decorada con un arco triunfal, cuyos materiales costaron 325 pesetas, y que fue realizado por Manuel Cortés Marced; trabajo que fue apoyado por Vicente Sellés Barber, que aportó una corona de zinc, y cuyo gasto ascendió a 96 pesetas (27): “(…)Se acordó abonar a Manuel Cortes Marced de esta vecindad con cargo al capítulo 11 del presupuesto municipal la cantidad de trescientas veinte y cinco pesetas por la construcción y materiales empleados en el arco levantado por el Ayuntamiento en la calle Cervantes para los festejos celebrados con motivo de la visita de S.M. el Rey en trece de Febrero último(…)”. “(…) También se acordó abonarse a Vicente Sellés Barber de esta vecindad la cantidad de noventa y seis pesetas por el importe de una corona de zinc y otros efectos para adorno y decoración del arco que por cuenta del Ayuntamiento se levantó en la calle de Cervantes con ocasión de la Regia visita, con cargo al capítulo 11 del presupuesto municipal (…)”.

Existe una fotografía recogida en una publicación monográfica sobre Villajoyosa, en la que aparece el arco triunfal mencionado, y donde se puede leer en su dintel “Villajoyosa agradecida a S.M. El Rey” (28).

Entre los gastos ocasionados por la visita regia también se encuentra el pago de 50 pesetas al cabo de la guardia municipal Antonio Server Buforn, por los servicios extraordinarios prestados; y de 48 pesetas a Juan Francisco Nogueroles, por la manutención del servicio de seguridad, que acompañó al rey y a los principales políticos del gobierno español (29): “(…) A propuesta de la presidencia se acordó gratificar al cabo de la guardia municipal Antonio Server Buforn con la cantidad de cincuenta pesetas que deberán abonársele con cargo al capítulo 11 del presupuesto municipal, por los servicios extraordinarios prestados en el día y anteriores a la venida de S.M. el Rey a esta población (…)”. “(…) Se acordó también abonar a Juan Francisco Eogueroles con cargo al mismo capítulo 11 del presupuesto la cantidad de cuarenta y ocho pesetas por la manutención los 1º individuos del Cuerpo de Seguridad destacados accidentalmente en esta población con motivo de la visita de S.M. el Rey (…)”.

El rey Alfonso XIII, tuvo el honor de conocer la nueva denominación de la calle que llevaba su nombre, que fue precisamente la calle del “Mar”, o “Costera de la Mar”, como se conoce en la actualidad. En primer lugar, el Ayuntamiento aprobó por aclamación otorgar el nombre del monarca a la calle, inauguración que tuvo lugar el día 16 de febrero, y acordó por medio 17

de telegrama, ponerlo en conocimiento de la Mayordomía Mayor de Palacio, y del Gobierno Civil de la provincia de Alicante (30): “(…) La Presidencia propuso y por aclamación fue aprobado que como demostración de agradecimiento a S.M. el Rey Don Alfonso XIII al dignarse visitar esta población en el día trece del corriente mes, al mismo tiempo que como símbolo de adhesión de su augusta persona llevase en adelante el nombre de Alfonso XIII la calle que viene distinguiéndose con el de “Mar” y que este acuerdo se ponga telegráficamente en conocimiento de la Mayordomía Mayor de Palacio para que se digne transmitirlo a S.M. el Rey é igualmente se comunique al señor Gobernador Civil de la provincia (…)”.

La respuesta de la Mayordomía Mayor de Palacio, en nombre del monarca, fue muy positiva al tener conocimiento del deseo del Ayuntamiento de Villajoyosa de la nueva denominación de la calle, y así se lo hizo saber (31): “(…) También fue dada la lectura á un telegrama de la Mayordomía Mayor de Palacio á la Alcaldía en que S.M. el Rey manifiesta su agradecimiento a los sentimientos expresados por el Ayuntamiento al darle cuenta de haber dado su augusto nombre a la calle, conocida con el del “Mar”. El Ayuntamiento acordó su visita queda gratamente enterado (…)”.

1.4.La adhesión del gobierno vilero hacia la figura de Alfonso XIII. Tan grande fue la satisfacción del rey Alfonso XIII por el recibimiento tributado en Villajoyosa, que dos meses después de la visita real, otorgó a la población de Villajoyosa el grado de “Ciudad”. Y para ello, envió un comunicado en fecha de 6 de abril de 1911 (32): “(…) En este estado se dio cuenta de una comunicación dirigida a esta Alcaldía que literalmente dice: = S.M. el Rey (q.D.g.) se ha dignado expedir por este Ministerio el Real decreto siguiente: “Queriendo dar una prueba de mi real aprecio a la villa de Villajoyosa provincia de Alicante por el aumento de su población desarrollo de su agricultura industria y comercio y su constante adhesión a la Monarquía Constitucional Vengo en concederle título de Ciudad. Dado en Palacio a seis de Abril de mil novecientos once. = Alfonso = El Ministro de la Gobernación Trinitario Ruiz Valerino = De Orden de S.M. lo comunica a V.S. para su conocimiento y satisfacción y el de la Corporación que preside Dios Guarde a V.S. muchos años. Madrid siete de Abril de 1911. = Trinitario Ruiz Valerino = Sr. Alcalde Consitucional de Villajoyosa.

También se dio cuenta de un oficio del Señor Gobernador Civil de la provincia del once del corriente mes transcribiendo el antes citado real decreto. La Presidencia manifestó que para satisfacción y conocimiento del vecindario había ordenado la publicación de edicto en la forma 18

acostumbrada y el Ayuntamiento acordó por unanimidad conste en acta el aprecio y satisfacción con que el pueblo de Villajoyosa ve la distinción dispensada por S.M. el Rey (…)”.

A partir de entonces, las muestras de cariño del Ayuntamiento y ciudad de Villajoyosa hacia la figura del rey y de la Casa Real siempre fueron patentes. En primer lugar, en septiembre de 1912, por medio de un telegrama de pésame por el fallecimiento de la infanta doña María Teresa de Borbón, hermana del rey Alfonso XIII. Comunicación que fue agradecido por la Casa Real (33): “(…) En este estado y habiendo llegado en este acto a noticia de la Corporación el inesperado fallecimiento de S.A. la Serenísima señora Infanta doña María Teresa de Borbón acordó la Corporación se dirige expresivo telegrama a la Mayordomía Mayor de Palacio para que se manifieste a S.M. el Rey y demás familia Real, el sentimiento de que se halla poseída la Corporación municipal por tan triste suceso (…)”. “(…) Dióse cuenta de un telegrama del Excelentísimo Sr. Jefe superior de S.M. dirigido al señor Alcalde por el que se comunica que S.S.M.M. agradecen vivamente el sentido pésame de este Ayuntamiento por el fallecimiento de la Serenísima Señora Infanta doña María Teresa de Borbón y el Ayuntamiento acordó quedar satisfactoriamente enterado (…)”.

En segundo lugar, poniendo en conocimiento de la Mayordomía Mayor de Palacio, en noviembre de 1912, la unánime protesta del Ayuntamiento de Villajoyosa, por el asesinato del presidente del Consejo de Ministros, José de Canalejas, y su adhesión a la figura del rey Alfonso XIII (34): “(…) En las Casas Consistoriales de Villajoyosa a trece de Eoviembre de mil novecientos doce Bajo la Presidencia del señor Teniente Primero de Alcalde don Eadal Pérez Lloret encargado accidentalmente, siendo las diez y seis horas y previa convocatoria con carácter urgente y expresión de los asuntos que han de tratarse, se reunieron los señores que se expresan al margen y forman mayoría absoluta y el señor Presidente abrió la sesión.

En este estado la Presidencia ordenó se diera lectura al telegrama recibido del señor Gobernador Civil de la provincia, lo que fue hecho por mí el Secretario y textualmente dice: El Excelentísimo Señor Ministro de la Gobernación en telegrama de hoy me comunica lo siguiente. Al dirigirse a pie a este Ministerio el Excelentísimo Señor Presidente del Consejo para celebrar el que estaba convocado para las once y media de la mañana, un desconocido en la Puerta del Sol le ha disparado dos tiros por la espalda que le produjeron la muerte instantáneamente el agresor en el acto. Tan tristísimo suceso ha producido enorme impresión. S.M. el Rey se trasladó apenas tuvo conocimiento de ello a este Ministerio, visitando el cadáver y celebrando consejo enseguida bajo su Presidencia en el que se acordó que 19

el Gobierno continúe en su puesto bajo la Presidencia interina del Señor Ministro de Estado y que S.M. celebre esta tarde las consultas acostumbradas. El orden público es completo. Sírvase participar con urgencia a Alcaldes de pueblos inmediatos que se comunican con esa estación telegráfica.

Terminada la lectura la propia Presidencia visiblemente emocionada manifestó que inmediatamente después de haber recibido el previsto telegrama del horrible asesinato cometido en la persona del Excelentísimo Sr. Presidente del Consejo de Ministros Don José Canalejas Méndez gloria nacional á cuyos excepcionales dotes de gobernante y preclaro talento se deben multitud de reformas beneficiosas al pueblo Español que tenía en él cifradas todas sus esperanzas en pro de su regeneración, como al mismo tiempo concurrir la excepcional circunstancia de tener una señalada predilección por esta provincia, cuyos afectos se han dejado sentir en esta población, había creído como uno de sus incansables deberes convocar al Ayuntamiento a sesión extraordinaria con urgencia para darle cuenta de la gran desgracia nacional y que la Corporación acuerda lo que proceda.

Perdida la palabra por el concejal don Jaime Soler Urrios con breves frases dijo que en los momentos actuales de dolor por pérdida tan irreparable en representación de la minoría Conservadora del Ayuntamiento hacía constar que este se asociaba con toda el alma al inmenso dolor que siente España entera por la pérdida del Eminente hombre que ocupaba tan elevado puesto en la Eación y mostrando la conformidad de la minoría que representaba para todo aquello que se creyesen del caso acordar para honrar la memoria del insigne estadista don José Canalejas.

El Concejal don Miguel Guardiola Martí representando a la mayoría Liberal democrática hizo patente que ésta protestaba con todas sus fuerzas del mismo atentado que ha robado la vida al Hombre ilustre jefe queridísimo decidido protector cuya muerte lleva España entera y pide al Ayuntamiento acuerde se celebre solemne funeral por el alma del Eminente hombre cuya muerte todos sentimos.

El Ayuntamiento seguidamente por aclamación acordó conste en acta la más firme protesta por el criminal atentado de que ha sido víctima el que fue Presidente del Consejo de Ministros don José Canalejas, adherirse al duelo nacional por tan sensible pérdida y la celebración de solemnes funerales para cuya autorización se autorice a la Presidencia invitándose aquel acto a las Autoridades de todas las órdenes de esta localidad y demás personas que estime procedente el señor Presidente.

Acordóse también se expida un telegrama a la Mayordomía Mayor de Palacio para que esta eleve a los pies del Trono la unánime protesta por el vil asesinato cometido y reiterar una vez más y mismo como ahora 20

su más respetuosa adhesión al Trono, y otros a los Excelentísimos Sres.

Presidente interino del Consejo Ministro de la Gobernación, Gobernador Civil de la provincia y señora viuda de Canalejas con igual protesta y sentido pésame.

El Señor Presidente dio final al acto agradeciendo los sentimientos manifestados y el entusiasmo con que la Corporación Municipal ha tomado los acuerdos encaminados a honrar distinguir y perpetuar la memoria del Ilustre finado (…)”.

Y en tercer lugar, en 1916, sumándose a la petición del otorgamiento de la Gran Cruz de Beneficencia para el rey Alfonso XIII, -que el Ayuntamiento aprobó por aclamación- y que se le hizo entrega en la Cortes el día del cumpleaños del monarca (35): “(…) Se dio lectura a una moción de la Presidencia que dice así: “Al Ayuntamiento: Cumplimos hoy con un deber que alcanza a nuestra condición de españoles y de mandatarios del pueblo. Y le cumplimos con satisfacción muy grande, intensa, henchidos de orgullo nobilísimo. – Euestro Soberano, S.M. el Rey don Alfonso XIII (q.D.g.) se halla, en los momentos actuales, dando al mundo entero un hermosísimo ejemplo de bondad, una esplendente manifestación de caridad cristiana, redimiendo de la muerte y del cautiverio á un sinnúmero de seres, sin distinción de clases y de nacionalidades, que la guerra más grande de las conocidas pone en trance de exterminio, e inqueriendo, con solicitud constante, por la suerte de los combatientes de quienes sus familiares ansían, con vehemencia, conocer la situación y aún la epitencia ignorada. = Y los beneficiados dirigen al buen hechor los fervores de almas agradecidas, que van a poner aureola de excelsitud a la augusta persona de nuestro Rey, y la prensa universal entona un himno de admiración; y el primero de los españoles, nuestro Rey, prueba que la hidalguía española fue siempre positivo.- En presencia de tanta grandeza, viendo que nuestro Soberano pone su acendrado entusiasmo en la práctica de tanto bien, y así dignifica la nación, todos los españoles unidos en un sentimiento de filial cariño, debemos tributarle homenaje, que lleve al corazón del Rey el premio merecido, que para el Rey ha de ser de gran consuelo ver unido a su pueblo acudiendo a las gradas de Solio regio en manifestación de cordial afecto para poner al trono el más firme sustentando que el trono puede tener, cual es la acción del pueblo soberano.- Así dice y sí quiere el pueblo. Es misión de sus representantes recoger ese sentir, que sintiendo así, revela lo que el pueblo es: digno de su admirado Monarca. – Demos, pues, forma a esta idea popular proponiendo al Ayuntamiento que acuerda: 1º Elevan a las gradas del Trono la férvida admiración y satisfacción interna que el pueblo español todo siente por S.M. el Rey don Alfonso XIII (q.D.g.) en razón de la gran obra de redención que el Soberano realiza al gestionar, felizmente, la libertad de tantos seres condenados a cautiverio y muerte por tribunales 21

militares en las naciones beligerantes. 2º. Impetrar del Gobierno de S.M. por demanda unánime del pueblo español la concesión a S.M. el Rey de la Gran Cruz de Beneficencia. 3º. Que los Alcaldes de Capitales de provincia reuniendo los acuerdos de la respectiva, acudan a las Cortes en el día del cumpleaños de S.M. el Rey y, colectivamente, representando a los Municipios de la Monarquía, pongan en manos de S.M. el Rey la expresión que integra el cuerpo de la moción motivo de estos acuerdos. 4º. Que a la vez, pongan en manos del Excelentísimo señor Presidente del Consejo de Ministros, la demanda del pueblo español todo, para conceder a S.M. la Gran Cruz de Beneficencia. Casa Consistorial de Villajoyosa a 20 de Abril de 1916. = El Alcalde Presidente = Felipe Llinares. El Ayuntamiento por aclamación acordó aprobar la anterior moción (…)”.

En 1917, el concejal Ricardo Urrios Pérez, propuso a la corporación municipal, que fuese realizado un retrato al óleo del rey Alfonso XIII. Retrato que le fue encargado al pintor vilero José Marced Furió, y que fue colocado en el salón de sesiones plenarias (36): “(…) Por el tema Don Ricardo Urrios Pérez se propuso y acordó por unanimidad el Ayuntamiento se colocase en el salón de sesiones del Ayuntamiento, un retrato al óleo de S.M. el rey don Alfonso XIII en sustitución del actual y se encargue de llevar a efecto dicha obra al artista de esta población don José Marced Furió, autorizando al señor Alcalde para abonar un importe con cargo al capítulo 11 del presupuesto municipal (…)”.

Y en 1925, por mediación de una comunicación del Gobernador Civil de la provincia, fue organizada una comisión formada por el Alcalde Ignacio Vaello Zaragoza, y los concejales Francisco Urrios Lloret, Cristóbal Galiana Zaragoza y Francisco Esquerdo Esquerdo, para participar en una fiesta de homenaje en Madrid, tributada al rey Alfonso XIII, el día de su onomástica (37): “(…) En este estado por el señor Alcalde se expuso: Que el señor delegado Gubernativo de este partido había tenido la atención de invitar a esta Corporación municipal para asociarse al grandísimo homenaje que España entera ha de tributar a sus Augustos Soberanos en el día de la fiesta onomástica de Su Majestad El rey don Alfonso XIII lo que tenía el honor de poner en conocimiento de la Corporación por si aceptaban tal invitación, y en caso afirmativo, como esperaba, procedía se nombrase una Comisión del seno del Ayuntamiento para que, con la debida anticipación se trasladaría a Madrid con el objeto de adherirse al homenaje de que se trata. El Ayuntamiento sin discusión y por aclamación acordó adherirse a dicho homenaje, y para que represente a esta población en el mencionado acto designa a los señores Alcalde Presidente y Concejales Don Ignacio Vaello Zaragoza, Don Francisco Urrios Lloret, Don Cristóbal Galiana Zaragoza y Don Francisco Esquerdo Esquerdo abonándose los gastos que se originen en este viaje con cargo al capítulo correspondiente de este presupuesto municipal (…)”.

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Capítulo II 2. Las obras del ferrocarril.

Villajoyosa fue cambiando de aspecto a medida que comenzaron las obras del ferrocarril, cuyo complejo ferroviario constaba de 400 m2, tal y como recogió José Quereda Sala, en su obra (38): “(…) A fines del primer cuarto de nuestro siglo, la construcción del ferrocarril va a originar fuertes incentivos para la atracción demográfica. El desarrollo urbano desbordó la carretera y con un trazado sensiblemente ortogonal se extendió a lo largo de la misma, principalmente en su lado norte debido a que el lado sur ofrece dificultades topográficas importantes. La localización de la estación del ferrocarril contribuye a la creación de un sector urbano en la margen derecha del riu de La Vila (…)”.

El despegue económico de Villajoyosa y de las poblaciones de La Marina tuvo lugar a partir de 1914, momento en que fue finalizado el primer tramo de la vía férrea que unía Alicante con Altea (39): “(…) Pero durante los primeros años del siglo, todavía había muchas comarcas alicantinas que se comunicaban mejor con otras capitales que con Alicante. La situación mejoró a partir de 1914, al asegurase la relación de la capital con las comarcas de La Marina mediante la creación de un ferrocarril de vía estrecha, cuyo primer tramo, Alicante - Altea, se puso en funcionamiento en ese año y el segundo, Alicante – Denia, en 1915: esta línea tuvo al principio un gran éxito económico pero decayó a partir de 1925, convirtiéndose además la empresa concesionaria en accionista de la empresa de transportes por carretera “La Unión de Benisa” (…)”.

En 1915, fue inaugurado el segundo tramo de la línea de vía estrecha que unía Alicante con Denia (40): “(…) y ya en este siglo, en 1915, se inauguró la de Vía estrecha Alicante-Denia (…). El ferrocarril de vía estrecha, conocido como el de La Marina o “trenet, ha sido un medio de transporte muy popular entre los alicantinos hasta la extensión del automóvil. Pero además estuvo muy presente en el paisaje urbano porque su tendido penetraba hasta prácticamente la Plaza del Mar. En el Paseo de Gomiz, frente a la playa del Postiguet, había un apeadero de esta línea y, para salvar la barrera del tendido ferroviario, el ingeniero Lafarga proyectó y construyó una pasarela metálica de celosía que fue durante muchos años un hito en este paisaje (…)”.

2.1. El cambio de la fisonomía urbanística de Villajoyosa.

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Los trabajos de la línea férrea comenzaron por la tasación y adquisición de los terrenos donde iba a ser construida la estación del ferrocarril. Para ello, los terrenos fueron peritados por ambas partes: Ayuntamiento y empresa concesionaria, para a continuación designar una comisión encargada del tema, encabezada por el Alcalde y los concejales Jaime Soler Urrios y Miguel Guardiola Martí.

Los terrenos donde iba a ser construida la estación, pertenecían al Ayuntamiento de Villajoyosa y se hallaban sin cultivar (41): “(…) La presidencia manifestó que para las obras de emplazamiento de la estación y sus dependencias para el ferrocarril de esta Ciudad a la de Denia se estaban ocupando terrenos en su mayoría incultos pertenecientes a este Ayuntamiento con la condición con carácter provisional de que haya de abonarse el valor de ellos a justa tasación de perito por ambas partes y para que se entienda con la Sociedad Constructora en todo cuanto se relacione con este asunto, proponía a la Corporación designara una comisión del uno de ellas y el Ayuntamiento de conformidad con la Presidencia designó para ella al señor Alcalde Presidente con los señores Don Jaime Soler Urrios y Don Miguel Guardiola Martí (…)”.

En primer lugar, y antes de que la empresa concesionaria se hiciera cargo del desmonte del terreno, el Ayuntamiento se comprometió a exhumar los restos cadavéricos existentes, procedentes del primitivo cementerio ubicado junto a la ermita de la Virgen de la Salud, cuyo muro perimetral lindaba junto a los terrenos donde iba a ser construida la estación del ferrocarril.

El siguiente paso fue el desmonte del terreno, y el aprovechamiento de la tierra y piedra fruto de dicha gestión para las obras. Igualmente la empresa concesionaria se ocuparía igualmente del desmonte de los terrenos adyacentes, -que seguirían perteneciendo al Ayuntamiento-, para en ellos proceder a los ensanches de la estación (42): “(…) La misma Comisión, hizo presente la Presidencia que había tratado con la empresa constructora de las obras que llevan a efecto en el emplazamiento de la Estación y sus dependencias del ferrocarril ya estado de Villajoyosa a Denia y a instancias de dicha Empresa se le concediese a esta Empresa aprovechar la tierra y piedra que resulte del desmonte que haga continuando el que se lleva a efecto en los terrenos de propiedad del Ayuntamiento que ha de ocupar los ensanches de la Estación comprendidos en el plano dejando los terrenos desmontados y que seguirán perteneciendo al Ayuntamiento, parte al mismo nivel de la estación y el resto más altos comprometiéndose dicha Empresa también a que una vez lleve a efecto el Ayuntamiento la exhumación de los restos humanos que puedan quedar en las zanjas del cementerio antiguo existente adosado a los terrenos de que se trata llevará a efecto por su cuenta la repetida Empresa el derribo de las paredes que la circundan y extracción 24

de los escombros que resulten nivelando al que se le indique el piso de este cementerio, lo que la Presidencia considera una notable mejora que embellecerá el punto en cuestión. El Ayuntamiento enterado, acordó aprobar en principio las diligencias practicadas por la Comisión y para que se pueda juzgar y proceder a su aprobación definitiva se lleve a efecto la formación de un plano o croquis detallado del proyecto de obras tratado por la Comisión del Ayuntamiento con la empresa referida (…)”.

El 22 de agosto de 1911 el Ayuntamiento hizo saber a la empresa concesionaria que el precio de los terrenos donde iba a ser construida la estación ascendía a 370 pesetas, de modo que la empresa concesionaria pudiera hacer efectivo el ingreso en el Ayuntamiento (43): “(…) La Presidencia manifestó que los terrenos de la pertenencia de este Municipio comprados en el emplazamiento de la estación y sus dependencias para el ferrocarril en construcción de esta Ciudad a la Ciudad de Denia, han sido apreciados por los peritos representados de este Ayuntamiento y la Sociedad Concesionaria del referido ferrocarril en la cantidad de trescientas setenta pesetas, la cual ha llegado el caso de verificarse el pago, por lo que y a este fin propone al Ayuntamiento, de conformidad con lo propuesto por la Presidencia acordó autorizarla para que perciba del representante de la Sociedad Concesionaria antes citada ó de quien corresponda la referida cantidad de trescientas setenta pesetas precio de los terrenos ocupados en las obras referidas anteriormente y a su debido tiempo se dé ingreso de ella en arcas municipales (…)”.

El 15 de octubre de 1911 fue designada una nueva comisión cuyo cometido consistió en las obras de la construcción de la estación, formando parte de la misma además del Alcalde, que la presidió, y los concejales Felipe Llinares Nogueroles, Juan Francisco Mª Esquerdo Esquerdo (44): “(…) Se designó una Comisión compuesta de los Concejales don Felipe Llinares Eogueroles y don Juan Francisco Mª Esquerdo Esquerdo presidida por el señor Alcalde para que gestione con la Sociedad Concesionaria de los ferrocarriles Villajoyosa Denia y Alicante Villajoyosa en construcción y contratista de las obras de la estación de dichos ferrocarriles en esta Ciudad en cuanto afecte y corresponda a este Ayuntamiento con motivo de las obras que se practican y del resultado de sus gestiones (…)”.

En agosto de 1914, la empresa concesionaria se puso en contacto con el Ayuntamiento de Villajoyosa para solicitar la explanación del terreno adyacente a la estación, por ello se pidió la utilización de tierras procedentes del monte “Calvario”, comprometiéndose con el Ayuntamiento al abono de las mismas. Pero además, la empresa instaló en el lugar el depósito de agua para las máquinas del ferrocarril, hecho que no fue del agrado de la corporación y que desató incertidumbre legal (45): “(…) Por la presidencia se presentó a la consideración de los Señores Concejales la 25

moción siguiente: A raíz e empezar los trabajos de construcción del Ferrocarril estratégico de Villajoyosa a Denia y en el punto donde se ha emplazado la Estación de dicho Ferro-carril acudió a este Ayuntamiento el representante de dicha empresa que para poder realizar la explanación del terreno les era absolutamente necesario utilizar tierras del monte titulado Calvario, en donde está situado el vía-crucis por lo que indemnizaron la cantidad correspondiente a la cubicación de la tierra extraída respetando en todo momento como de propiedad del municipio el suelo que quedase.

Como a pesar del tiempo transcurrido la empresa además de no deslindar el terreno propiedad de este Ayuntamiento ha construido la empresa el depósito de agua para alimentación de las máquinas en la faja del terreno propiedad de este municipio propago al Ayuntamiento tome acuerdo en defensa de los intereses de los intereses que se nos hallan encomendados.

El Ayuntamiento acordó después de detenida discusión que no podían por ningún concepto quedar desamparados los intereses del Municipio facultando a la alcaldía para que realizase las gestiones oficiosas necesarias cerca de la Empresa Constructora para que quedase a salvo los mencionados intereses y de no poderlo conseguir diese cuenta al Ayuntamiento para que acuerde si es conveniente acudir a los tribunales (…)”.

Con la construcción de la estación y conjunto ferroviario, los terrenos aledaños fueron poblándose. De hecho, el 3 de abril de 1917, el vecino de Villajoyosa Miguel Cano Sanz solicitó autorización para la construcción de un edificio de 280 m2, formado por una sola planta (46): “(…) Seguidamente se dio cuenta de una instancia presentada por D. Miguel Cano Sanz mayor de edad, de esta vecindad suplica de que se le conceda autorización para construir un edificio de una superficie de doscientos ochenta metros cuadrados en el terreno de una propiedad que existe entre los muelles de la estación del ferrocarril y camino de los mismos y el Ayuntamiento por unanimidad acordó conceder la autorización que se solicita (…)”.

Otro ejemplo similar fue el acaecido el 27 de agosto de 1918, en que Vicente Santacreu Pérez solicitó permiso para cambiar el sistema de cierre de las puertas de entrada a una vivienda de su propiedad, situada en esta zona. Paralelamente, la corporación, además de conceder la solicitud, acordó la reparación del camino que comunicaba la calle Cervantes con la estación del ferrocarril (47): “(…) Fue dada lectura a una instancia de Vicente Santacreu Pérez de esta vecindad en súplica al Ayuntamiento del permiso necesario para cambiar el sistema de cierre de las puertas de entrada de una casa de su propiedad situada en la calle de Cervantes número diecinueve y el Ayuntamiento acordó conceder el permiso 26

solicitado con la condición de que las puertas que se coloquen enrasen en la paret.

A propuesta de la Presidencia y en vista de la necesidad absoluta de proceder a ello se acordó llevar a efecto el arreglo y reparación del camino que partiendo de la calle de Cervantes conduce a la estación del ferrocarril (…)”.

2.2.

La estación: un edificio ecléctico con espíritu decimonónico.

Los autores de la monografía titulada “El ferrocarril en Alicante”, califican el estilo arquitectónico utilizado para el edificio de la estación del ferrocarril de Villajoyosa, así como estaciones del resto de la línea, de ecléctico (48): “(…) El edificio de la Compañía de Ferrocarriles Estratégicos y Secundarios de Alicante, concluido en 1914, también podríamos clasificarlo de estilo ecléctico, pese a datar de una fecha tan tardía, si bien los criterios de economía sencillez fueron predominantes en su génesis; recordamos que se trataba de un ferrocarril económico.

Los proyectos de las estaciones de las líneas Alicante – Villajoyosa y Villajoyosa – Denia, fueron encomendados a la empresa francesa Societé des Travaux Publics, la cual marcó de forma muy clara el estilo de los edificios de las estaciones intermedias. Presentan éstos un enorme parecido con los de algunos ferrocarriles secundarios franceses (…)”.

La realidad es que la estación del ferrocarril de Villajoyosa pertenece a un tipo de arquitectura industrial, de estilo ecléctico, construida en el siglo XX, que siguió los cánones del espíritu arquitectónico decimonónico, utilizado para la construcción de las estaciones de la línea M.Z.A., (Madrid-Zaragoza-Alicante), inaugurada en el año 1858, por la reina Isabel II. Fueron empleadas en su construcción diferentes Artes Industriales (49): “(…) Se caracterizan por ser su finalidad la de dotar de aspecto y contenido artísticos a los enseres, vestidos, viviendas y utensilios, de manera que a su fabricación industrial o artesanal se una la intención decorativa o artística. Así pues, para que un trabajo pueda ser clasificado dentro de las Artes Industriales requerirá haber sido concebido simultáneamente según la finalidad práctica y según su aspecto formal Por lo tanto, no podrá hablarse de Artes Industriales en los casos en que un objeto haya sido diseñado primero según el uso que debe dársele y haya sido decorado con posterioridad, y por otra mano que no la creó. Por otro lado, el objeto aún siendo artístico, debe cumplir perfectamente su finalidad práctica originaria, sin que su diseño artístico o su decoración lo impidan en manera alguna (…)”.

El conjunto arquitectónico de la estación del ferrocarril de Villajoyosa tiene la misma disposición que cualquier estación de vía ancha 27

de la M.Z.A. En primer lugar, se encuentra el edificio principal de la estación, compuesto de dos alturas o pisos, y de tres cuerpos o “(…) parte de un edificio separada del superior por una cornisa o imposta (…)” (50).

La cubrición del pabellón principal presenta una cubierta a dos aguas en cartabón (51), forrado en su interior con armadura de madera revestida de teja plana, -característica de las construcciones del siglo XX-. Las paredes del edificio, se encuentran construidas con piedra de sillería (52) y dispuestas en hiladas (53), presentando vanos escarzanos muy rebajados, en el piso superior e inferior, que ejercían las funciones de ventanas y puertas.

Las ventanas estaban cubiertas por cuarterones vidriados que permitían la iluminación del edificio (54), y las puertas decoradas con cuarterones macizos, siguiendo idéntica decoración. Los ángulos de todo el edificio presentan una decoración de sillares dispuestos geométricamente. Y sobre toda la parte inferior de las paredes del edificio, discurre un zócalo decorativo. Los extremos laterales por ambos lados del edificio de la estación, presentan cada uno de ellos, en su parte superior, un óculo cuya función residía en la ventilación del mismo. Usualmente en la planta baja de la estación, se hallaban las dependencias destinadas a expendeduría de billetes, y despacho del jefe de la estación; mientras que el piso superior quedaba destinado para vivienda del mismo.

Las fuentes archivísticas citan que la estación se preparó con un dosel (55) adosado a la fachada principal de la estación que mira a la vía, para evitar que los pasajeros se mojaran con la lluvia, y quedasen resguardados por las inclemencias del tiempo.

Junto al pabellón principal se construyó un pequeño habitáculo, siguiendo las mismas directrices arquitectónicas, denominado lampistería, cuya función radicaba en el almacenamiento de lámparas de aceite o de carburo, que fueron utilizadas durante el siglo XIX y XX para la señalización de los ferrocarriles, y que cayó en desuso una vez instalado el cableado eléctrico. Su decoración arquitectónica es similar: tejadillo a dos aguas, en cartabón, cubierta exteriormente de teja plana; muros enfoscados y enlucidos, ventanas y puertas adinteladas y con decoración de cuarterones macizos. Exteriormente presentas pilastras decorativas en los muros más estrechos, para soportar la carga del tejado.

Frente al pabellón principal, se localizaba el almacén de carga y descarga y que albergaba todo tipo de productos que debían ser trasladados en el ferrocarril. Se caracterizaba por presentar mayores dimensiones que el pabellón principal. Estaba cubierto un tejado a dos aguas, forrado externamente por teja plana, e interiormente por una armadura de parhilera (56) y no tenía un cerramiento perimetral de paredes o vanos de obra, dejando un gran espacio diáfano. El muro perimetral del almacén de carga y fue construido con posterioridad. Junto al almacén de carga y descarga se hallaba desde el momento de la construcción de la estación un grúa de 28

hierro fundido que servía para las funciones propias del muelle de carga y descarga; grúa, que en la actualidad todavía se conserva como en su origen.

En el mismo lado de la vía donde se hallaba el muelle de carga y descarga, pero un poco más apartado, se encontraba una zona de vía muerta con un foso, cuya función era el arreglo de la maquinaria ferroviaria. Y junto a ella, unas cocheras para los ferrocarriles, que aún existen en la actualidad, pero reconstruidas.

2.3.

La llegada del tren: 28 de octubre de 1914.

Por fin, la llegada del ferrocarril a Villajoyosa se hizo realidad el día 28 de octubre de 1914. La salida se produjo a las diez y media de la mañana desde la estación de Alicante, inaugurándose el primer tramo del ferrocarril secundario que se había construido hasta Altea (57): “(…) El 28 de octubre de 1914, el obispo bendijo la estación de Alicante y partió el tren engalanado, a las diez y media de la mañana. Iba compuesto de seis coches de segunda y primera clase y el “break” de comunicación (…)”.

El Ayuntamiento de la ciudad de Villajoyosa, por su parte había organizado un acto festivo para ese día, invitando a los vecinos a que adornaran los balcones de las viviendas y los iluminaran con nocturnidad.

Igualmente convocó a las dos bandas de música representativas de la ciudad para que alegraran con sus sones musicales las calles y barriadas de Villajoyosa, desde primeras horas de la mañana del 28 de octubre de 1914; y acudiendo todos los ciudadanos a la estación para esperar la llegada del ferrocarril.

El Ayuntamiento había previsto igualmente el engalanamiento del camino de acceso a la estación y del conjunto arquitectónico ferroviario mediante la colocación de banderas nacionales (58): “(…) Por el Sr. Presidente se manifiesta ser de dominio público la inauguración en el día de mañana del Ferrocarril secundario Alicante a Villajoyosa y la noción del estratégico Villajoyosa-Altea, el cual hará su salida de la capital a las diez treinta de la mañana. A la vista de acontecimiento tan importante que viene a coronar las esperanzas tantas veces anheladas por esta Ciudad, el vecindario ebrio de gozo espera que el Ayuntamiento, su genuino representante refleje por actos ostensibles la alegría de que se halla poseído.

La corporación no solamente por responder al llamamiento del vecindario si que también por estar todos poseídos del mismo entusiasmo acuerdan por aclamación: Invitar al pueblo a que en el día de mañana engalanen los balcones y los iluminen durante la noche; que las dos bandas musicales recorran las calles de la población y barriadas de la huerta en las primeras horas de la mañana, acudiendo después a la hora de llegada del tren a la estación a amenizar el solemne momento de la 29

entrada del convoy; debiéndose hacer los preparativos necesarios al objeto de que estén engalanados con banderas de los colores nacionales el camino que da acceso a la mencionada estación y el recinto donde está emplazada. Y que los gastos que ocasionen dichos festejos sean satisfechos con cargo al capítulo 9º, artículo 3º del presupuesto (…)”.

2.4.

Problemas entre Ayuntamiento y empresa concesionaria del ferrocarril.

Desde que tuvo comienzo la construcción de la vía férrea que atravesaba el término de Villajoyosa, comenzaron los problemas entre el Ayuntamiento de la ciudad y la empresa concesionaria. En 1911, el Ayuntamiento requirió el pago de 630 pesetas que le adeudaba la empresa concesionaria, en concepto del importe de la tierra extraída de los terrenos lindantes con la estación, que pertenecían al Ayuntamiento (59): “(…) La Presidencia dio cuenta de que las peticiones practicadas por la Comisión designada por el Ayuntamiento para gestionar muy la Sociedad concesionaria del ferrocarril estratégico de Villajoyosa Denia y la contratista de los trabajos verificados en la Estación de esta Ciudad, resulta que a este Ayuntamiento se le adeudan por el importe de tierra extraída de propiedad del Ayuntamiento lindante por los ocupados por la referida Estación la cantidad de seiscientas treinta pesetas, sin perjuicio de más detenidos medición y tasación. El Ayuntamiento enterado acordó en principio las gestiones practicadas por la referida Comisión salvo lo que considere procedente acordar, después de examinados más detenidamente el asunto (…)”.

El Ayuntamiento de Villajoyosa había designado una comisión de policía urbana y rural, que se ocupaba de inspeccionar el término municipal, para que la construcción de la vía férrea no crease problemas en las infraestructuras y terrenos propiedad de los ciudadanos, y del mismo Ayuntamiento (60): “(…) Se acordó seguidamente que la Comisión de policía urbana y rural del Ayuntamiento gire una visita de inspección por el trayecto comprendido desde el linde del término municipal a la parte este del mismo donde se han verificado obras por la vía férrea de esta Ciudad a la de Denia en construcción y donde hayan de hacerse, con el objeto de que se dejen en buenas condiciones para el tránsito público los caminos rurales y vecinales que intercepta dicha vía a cuyo fin se avisten y dejen convenida la forma con que se ha de llevar a efecto con la Compañía constructora o Empresa que lleva a efecto las referidas obras y del resultado de su cometido informe al Ayuntamiento (…)”.

El trabajo de la comisión de policía urbana y rural fue arduo, dado que el informe emitido por la misma en 1913, estuvo plagado de incidencias (61): “(…) Dada lectura al informe emitido por la Comisión de 30

policía urbana y rural del Ayuntamiento sobre la inspección de la vía en construcción del ferrocarril de Villajoyosa a Denia en este término municipal al objeto de que se respeten los caminos vecinales y particulares y acueductos para el riego, que á la letra es como sigue: Informe = La Comisión de policía urbana y rural del Ayuntamiento con objeto de llevar a efecto su cometido se ha construido en el límite de este término municipal y punto donde se ha verificado obras de construcción para la vía férrea de esta ciudad a la de Denia recorriendo dicha línea hasta el punto donde ésta cruza el camino vecinal que conduce al puente viejo del Río Torres y de la inspección verificada ha de informar. = 1º = Que el camino cruzado por dicha vía en el lugar llamado Balsa Seca para que quede en buenas condiciones y sea cómodo el transporte por él deba rebajarse la parte de arriba un metro con una longitud de tres desde dicha vía. = 2º = El camino de entrada a la hoya llamada de Calzas debe quedar unido por la parte Eorte de la vía en construcción hasta el que sube desde la casa de don Jaime Linares Xerri dando entrada a las tierras de éste y a las de don Cayetano Aragonés Aragonés y otros.= 3º = En el cruce de los cuatro caminos y punto donde está la casita de don Miguel y don Jaime Llorca Lloret a partir de la finca de estos señores y en una longitud de unos cuarenta metros formando terraplén de la parte Sur de la vía debe al llegar a ésta tener una elevación de un metro sobre ella que con los cuatro que tiene iguales en altura á la parte Eorte de la misma trinchera y así dispuesto formarse un puente para atravesarla haciendo luego la partición de los cuatro caminos. = 4º = Debe rebajarse en una longitud de ocho metros á la parte Sur de la casita de don Eadal Pérez Lloret en la partida del Almiserá un metro cincuenta centímetros y a la parte Eorte dos metros de longitud de doce metros. = 5º = Resultando que en el punto que cruza la vía el camino del Serrano, por falta de altura no puede haber puente, podría utilizarse el actual camino tomando terreno de los herederos de don Jaime Llinares Lloret, don Bartolomé Pérez Lloret y de Juan Mayor Pérez. = 6º = En el punto denominado Serrano y tierras de Miguel Llorca Llorca debe hacerse una acequia de obras de fábrica de catorce metros de longitud y á la subida al bancal llamado de Llaurador rebajar la entrada a la vía un metro dando cinco de ancho. = 7º = resultando que el terraplén que cruza el camino que conduce al puente viejo del Río Torres tiene tres metros de altura puede pasar el camino por debajo del puente, y en esa forma no sufre perjuicio las entradas a las barriadas del Serrano y Alto del Pastor ni salidas hacia el Río Torres. = En cuyos términos informan los que suscriben lo que a su juicio debe llevarse á efecto en la parte que llevan inspeccionadas creyendo que con ello se evitan perjuicios a los vecinos y resulta más conveniente a los intereses de la Compañía constructora del ferrocarril de Villajoyosa a Denia. = Villajoyosa a 28 de Enero 1913 = Felipe Llinares = José sala = Francisco Aragonés. El 31

Ayuntamiento después de la oportuna discusión acordó por unanimidad de conformidad a dicho dictamen y a los efectos procedentes se comunique este acuerdo al representante de la Sociedad Constructora de las obras de la referida vía férrea (…)”.

El informe de la comisión de policía urbana y rural fue remitido a al Ayuntamiento para dar parte a la corporación, y que la empresa constructora subsanara las peticiones requeridas por el Ayuntamiento. Pero, ante la nula respuesta de dicha empresa que ya tenía conocimiento de la obstrucción de los caminos que había interceptado, el Ayuntamiento acordó por unanimidad enviar una comunicación, para que la empresa dejase expedita y en buenas condiciones para el tránsito público, los caminos tanto vecinales como rurales interceptados por las obras del ferrocarril (62): “(…) Por el concejal don Felipe Llinares Eogueroles Presidente de la Comisión de policía urbana y rural de este Ayuntamiento se manifestó; que en virtud á que por la Compañía Constructora del ferrocarril estratégico de Villajoyosa a Denia, llevando a efecto estas obras había obstruido con ellas los caminos vecinales y rurales, de este término municipal, comprendidos en la línea de dichas obras. Por acuerdo del Ayuntamiento, se llevó a efecto por la Comisión de policía urbana y rural del Ayuntamiento que el que dice preside una inspección en comprobación de este extremo y al efecto informó y propuso, aquellas obras que conceptuaba permisos y más en armonía con los intereses de la Sociedad constructora, cuyo informe, aprobado por el Ayuntamiento, fue comunicado a la referida Compañía la cual hasta el día de hoy nada ha hecho que responda á cuanto se le tenía manifestado. La conducta seguida por la Sociedad de que se trata, lastima en gran manera los intereses de los vecinos y propietarios de terrenos que necesitan transitar por los caminos de que se trata y cuya conservación y arreglo son de la competencia del Ayuntamiento y debe esta Corporación adoptar un acuerdo en el sentido de que sean respetadas y se defiendan los derechos e intereses del Ayuntamiento y sus administrados.

El Ayuntamiento, en su vista y resultando que la Compañía constructoras de las obras del ferrocarril estratégico de Villajoyosa a Denia ha llevado a efecto con motivo de estas la ocupación de parte de dichos caminos, y obstruido el tránsito por ellos sin haberlo puesto en conocimiento previamente del Ayuntamiento, resultando que esta Corporación municipal a fuerza de no haberla noticiado esta Sociedad la obstrucción ni ocupación que trataba de llevar a cabo, deseosa de conciliar sus intereses con los de la Compañía le indicó a ésta por conducto de la Alcaldía y en atenta comunicación dirigida al representante de dichas obras la forma y manera en que podía llevarse a cabo las obras necesarias para que quedase expedito el tránsito por dichas vías comunales y á cubierto los derechos correspondientes a este Ayuntamiento.

32

Resultando que a pesar de ello la repetida (resultando) digo compañía, nada ha dicho en el sentido de cumplir lo que se le interesaba; el Ayuntamiento acordó por unanimidad se haga saber, que a la mayor brevedad se dejen expeditos y en buenas condiciones para el tránsito público los caminos tanto vecinales como rurales interceptados por las obras del ferrocarril de Villajoyosa a Denia verificándose por la Sociedad constructora las obras necesarias previa presentación en esta Alcaldía del plano de los que ha de verificarse para llevar a efecto lo acordado por el Ayuntamiento y que en adelante se abstenga la citada Compañía de ocupar sin obstruir nuevamente otros caminos sin que en legal forma lo ponga en conocimiento del Ayuntamiento y que de no obrar en esta forma se proceda a lo que hay a lugar, por la Alcaldía Presidencia (…)”.

La respuesta de la empresa constructora no se demoró y pocos días después, el representante de la empresa acudió al Ayuntamiento de Villajoyosa para proporcionar el plano, tantas veces solicitado por la corporación, del trazado de la vía férrea (63): “(…) Dióse cuenta de haberse presentado por el representante de la Compañía Constructora del ferrocarril estratégico de Villajoyosa a Denia un plano que fija la forma en que se propone construir las obras encaminadas a dejar en las mejores condiciones posibles el tránsito del camino vecinal que partiendo de la carretera de Sella a Alicante conduce a las partidas de Torres y Almiserans en este término municipal y el Ayuntamiento en su vista acordó pase a examen de la Comisión de policía urbana y rural del Ayuntamiento (…)”.

El Ayuntamiento quedó satisfecho con el plano presentado por la empresa, y así lo hizo constar (64): “(…) Dióse cuenta del informe de la Comisión de policía urbana y rural del Ayuntamiento referente al camino de la partida Almiserá de este término municipal del que resulta que habiendo hecho un detenido estudio del plano y detalle que para su construcción presentó esta Alcaldía el jefe de la primera sección de la Compañía Constructora del ferrocarril estratégico de Villajoyosa a Denia nada tienen que oponer al mismo por considerar cumplidos y satisfechos las condiciones que fueron fijadas por el Ayuntamiento en lo referente a este asunto por lo que opina debe el Ayuntamiento aceptar la construcción del camino de que se trata en la forma en que detalla el referido plano. Y el Ayuntamiento por unanimidad acordó su conformidad al dictamen de la Comisión sin perjuicio de dar reclamaciones que interpongan por sus derechos los vecinos e interesados en el referido camino (…)”.

El trabajo exhaustivo que había llevado a cabo la comisión de policía urbana y rural comenzaba a resultar satisfactorio para la ciudad, consiguiendo sus reivindicaciones, de la empresa constructora (65): “(…)

Luego dióse cuenta de un escrito presentado y suscripto por don Juan Laeroix Ingeniero Jefe de la 1ª sección del ferrocarril estratégico en 33

construcción de Villajoyosa a Denia, de nacionalidad francesa con residencia accidental en Benidorm, exponiendo el Ayuntamiento que habiendo sido prolongado de Este a Oeste el terraplén del camino del ferrocarril aludido, en el punto que atraviesa el camino del Almiserá junto a la casa de don Cayetano Aragonés actualmente solo tiene dicho camino en el indicado punto una curva del cuatro por ciento, por esta razón que reconstruyendo el camino que desde la carretera de Sella a Alicante enlaza con el del Almiserá junto a la mencionada casa, quedan restablecidos los dos caminos existentes antes de ser atravesados por el ferrocarril y por lo tanto subsistentes las anteriores servidumbres de paso, interesando también consignar que cualquier otro camino que se proyectara en el indicado sitio tendrá mayor cuenta que los mencionados y no llevaría mejor el fin a que están destinados y solicite del Ayuntamiento preste su conformidad a la reconstrucción del camino aludido de la manera indicada. El Ayuntamiento enterado y conceptuando que en la forma expuesta por el solicitante don Juan Laeroix pueda debidamente y en la mejor manera restablecidos los dos caminos de que se trata que atraviesa el ferrocarril en construcción acordó prestar su conformidad a la reconstrucción del camino antes citado, sin perjuicio de los derechos y reclamaciones que en defensa de ellos puedan alegarse por cualquier vecino (…)”.

Conforme se fue acercando la fecha de la inauguración de la estación del ferrocarril, el Ayuntamiento requirió a la empresa constructora la mejora de ciertas infraestructuras en la zona del complejo arquitectónico ferroviario de Villajoyosa (66): “(…) Por el Señor Alcalde Presidente se expuso que del encargo que se le confirmó en la sesión de diez y ocho del próximo pasado mes previas las gestiones hechas cerca de la Empresa Ferroviaria, tenía que manifestar a la corporación que el Ingeniero Jefe de las obras del Ferro-carril “Villajoyosa a Denia” tenía un deslinde del terreno que fuera de la propiedad del Ayuntamiento y una vez deslindado este punto entraría a tratar los derechos que corresponde tener la corporación municipal.

La corporación acordó en vista de tal manifestación visitar a la citada empresa como ya se hizo diferentes veces, deslinde en faja de terreno de la propiedad del Ayuntamiento e indemnice a este municipio los perjuicios causados en la nueva ocupación del terreno (…)”.

(67): “(…) En este estado la Presidencia hizo presente que había tenido ocasión de girar una visita a las obras hechas para el ferrocarril de esta ciudad a Denia y Alicante y notado el emplazamiento de la estación e inmediaciones algunas deficiencias que afectan muy directamente a las reglas de policía urbana y rural y seguridad de las personas y comodidad del vecindario encomendadas a los Ayuntamientos por las disposiciones de la Ley municipal, por lo que se creía en el deber de presentar a la 34

Aprobación del Ayuntamiento la moción que leída por mi el Secretario abrazaba los siguientes extremos: 1º = Se debía solicitar del Señor Ingeniero Director del ferrocarril en construcción de Alicante – Villajoyosa – Denia, la colocación de una marquesina en el cuerpo central de la estación de esta ciudad que responde a que puedan defenderse del sol y de la lluvia los pasajeros á la salida de las salas de espera para tomar el tren. = 2º = La colocación de una verja en el muro que circunda el patio de la estación, para evita que los carruajes al entrar en él puedan despeñarse por el indicado punto. = 3º = regularizar en un solo plano con un talud uniforme el desmonte practicado por la referida compañía en el cerro del cementerio. = 4º = Que el espacio comprendido entre el camino de acceso a la estación y el terraplén de salida de los muelles de mercancías, se rellenen en un plano horizontal ó en los inclinados, que corrijan la [ilegible] que ahora resulta. = 5º = Que se moviese el camino de subida a la estación y se regularicen al mismo tiempo sus curvas construyendo además un muro de defensa con las banquetas necesarias, para que el tránsito de carruajes, pueda protegerlo del terraplén.

El Ayuntamiento aprobó por unanimidad y tal como se presentó la moción de la Alcaldía Presidencia y que está en ejecución de este acuerdo lo comuniquen al Señor Ingeniero Director de ferrocarril en construcción de Alicante – Villajoyosa – Denia (…)”.

(68): “(…) Que por la presidencia se manifestó que a pesar de las varias veces que en nombre de la corporación, ya oficialmente o bien oficiosamente ha venido la empresa ferroviaria de Alicante a Villajoyosa y Villajoyosa a Denia para procurase que quedasen en igual estado que las encontró las servidumbres de paso y caminos vecinales que la línea atraviesa y deslindase la faja de terreno de la propiedad de este municipio en el punto donde se halla emplazada la estación ha obtenido buenas promesas pero nada real y efectivo, agravándose por dicha empresa el olvido injustificado de los derechos del vecindario colocando dos postes de madera en la vía pública y paso nivel de la calle de Limones, estrechando más dicha vía de comunicación ya de suyo estrecha y paso obligados para los carruajes que a los pueblos de Orcheta y Sella tienen que encaminarse utilizando la carretera que con dichos pueblos comunica.

Por otra parte, el camino vecinal que comunica con la importante y extensa partida dels Plans, cuando esperábamos que una vez terminado el asiento de la vía se procuraría a arreglarlo de manera que no peligrara el paso de peatones y caballerías se aumentan las dificultades tendiendo con postes que lo elevan quince centímetros sobre el suelo el hilo de tracción del disco de señales, demostrando en su conducta el más completo atropello a los derechos del vecindario.

35

Además la cañería de las fuentes públicas que se dejó al descubierto al hacer las trincheras para el paso de la vía en la partida Cuarteta en igual estado continúa.

Por todo ello deben tomarse las medidas que la defensa del vecindario reclama.

El Ayuntamiento no solamente hace suya y la aprueba en todas sus partes la propuesta de la presidencia, si que también acuerda dadas las continuas quejas del vecindario que se eleven dichos acuerdos en reclamación del cumplimiento de las Leyes á los Sres. Gobernador Civil de la Provincia y en su caso al Rvmo. Señor Ministro de Fomento con las siguientes adiciones.

1ª. Que se deje expedito el camino vecinal que por el cauce del río conducen a las partidas de Arquet, Cortes y Fuente de Urrios.

2ª. Que se ponga en comunicación y condiciones de seguridad en el punto donde ha sido cortado el camino carretero titulado “Camino viejo” que unía esta población con la capital en la partida Caleta.

3ª. Que se ponga en estado de anchura y afirmando como estaban antes de la construcción de la vía los pasos de los caminos vecinales y acequias conductoras de aguas.

4ª. Que hallándose continuamente circulando los trenes de balastro y material no se han colocado las cadenas o guarda-barreras en la casi totalidad de los paso niveles y tomando las medidas de seguridad necesarias en evitación de posibles desgracias.

También hizo presente la presidencia, que con motivo de haberse aumentado por la Diputación provincial el contingente correspondiente a esta Ciudad en cantidad mayor al del último año al verificar el reparto que por contingente que corresponde a los pueblos de esta provincia en el presente año después de aprobado el presupuesto municipal vigente y elevado á la aprobación de la superioridad, está, al presentar su aprobación a dicho presupuesto erario del capítulo nueve artículo único la cantidad de seiscientas sesenta y nueve pesetas con noventa y cinco céntimos que las aplicó al artículo y capítulo donde se consigna el ingreso que por contingente provincial corresponde a este ciudad (…)”.

El Ayuntamiento consiguió la resolución de las incidencias requeridas por el mismo de la empresa constructora en 1914, y ya no se produjeron más problemas con la línea ferroviaria hasta 1918, en que de nuevo se puso en contacto con la misma para que procediese al arreglo del camino que conducía de la calle Cervantes a la estación, que según un acuerdo entre ambas partes, su arreglo debía correr por cuenta de la empresa constructora (69): “(…) Por el señor Presidente se manifestó que requiriendo el arreglo del camino que desde la calle de Cervantes va a la estación del Ferrocarril, por ser varias las quejas presentadas había convenido con la compañía de dicho Ferrocarril el que corriese por cuenta 36

de ello el referido arreglo cediéndole para el afirmado del citado camino la piedra necesaria para llevar a efecto dicha reparación. Lo que fue acordado por unanimidad por el Ayuntamiento (…)”.

2.5.

República y Guerra Civil: historias humanas ligadas a la vía férrea.

La estación del ferrocarril de Villajoyosa fue testigo de múltiples historias ligadas a la Segunda República y Guerra Civil, historias humanas de los ciudadanos de Villajoyosa llenas de alegría y de sufrimiento, que testimonió Jaume Soler Soriano en su obra (70): [Año 1931]. “(…) En la Vila, el 14 de abril fuimos normalmente a las clases de la mañana y de la tarde; a la salida de la vespertina veníamos los amigos por la calle Colón cuando a la altura de la botiga dels Centelles, encontramos a un grupo de personas que venían corriendo y gritando ¡ Visca la República!

Comentaban que del trenet procedente de Denia, bajaron unos vecinos diciendo que en aquella ciudad, al igual que en Valencia, habían proclamado la República (…)”.

Durante el primer año de la entrada en vigor de la Segunda República, el Ayuntamiento solicitó a la empresa concesionaria del ferrocarril, la colocación de una pasarela en el puente de la vía férrea (71): “(…) A propuesta del Concejal Señor Marced se acuerda rogar a la Compañía del Ferrocarril la colocación de una pasarela en el puente con objeto de evitar los frecuentes accidentes que ocurran (…)”.

Unos años más tarde, durante el “bienio negro” republicano, la situación política se fue acrecentando con multitud de incidentes, hecho que concentró la vigilancia de los Carabineros en varios puntos de la ciudad, entre ellos la estación del ferrocarril (72): “(…) Octubre de 1934 (…) En La Vila, en previsión de incidentes, fueron concentrados los Carabineros en el hostal de las Columnas y la fonda Moderna, prestando servicios de custodia en bancos, estación de ferrocarril, central telefónica, telégrafos y los puentes de la carretera y del ferrocarril (…)”.

La Guerra Civil, que se desarrolló desde 1936 a 1939, causó el sufrimiento de las familias vileras, que a pesar de todo debían buscar el sustento en sus quehaceres cotidianos, como fue el caso de Pedro Nogueroles Soriano, quién tenía un autobús de pequeño tamaño con el que prestaba un servicio de transporte desde la estación del ferrocarril (73): “(…) Pedro Eogueroles Soriano. Pere el del Barco (…) Su espíritu inquieto le llevó a enseñarse a conducir automóviles, comprarse un coche y ponerlo de servicio público, fue el primer taxi que hubo en La Vila.

Posteriormente lo cambió por otro al que carrozó como un pequeño autobús, con el que hacía el servicio de la estación del ferrocarril (…)”.

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La estación del ferrocarril fue el punto de destino de unas religiosas de clausura, que procedentes de Alicante, buscaron cobijo en casa de un familiar que vivía en Villajoyosa (74): “(…) Manuel Sellés Orts La Farina (…) Manuel, en aquellos momentos iniciales, hizo muchos favores a personas de derechas, facilitándoles salvoconductos o cobijo. Pepa Pérez Sellés, de Alicante, pariente de Manuel y mío, relata un dramático hecho que le ocurrió en los primeros días de la guerra. Ella albergó en su casa monjas de clausura de un convento del que su tía era la superiora. Se querían venir a La Vila y se fueron a la estación de la Marina para coger el trenet y refugiarse en casa de su tío Jaime. En la estación, unos chicos de su barrio, las reconocieron intentando detenerlas, afortunadamente, la tía reconoció a su pariente Manuel que en aquel momento entraba en el vagón, lo llamó y Manuel garantizó a las autoridades de la estación, que aquellas mujeres eran inocentes. Eo obstante, telefonearon a La Vila, comunicando la llegada en el tren de un grupo de fascistas, los milicianos que acudieron para detener a elementos tan peligrosos, se encontraron con aquellas mujeres ya mayores y que apenas podían andar, a las que acompañaba Manuel, las dejaron pasar sin molestarlas (…)”.

La ermita de la Virgen de la Salud, ubicada junto a la estación del ferrocarril, fue habilitada como cárcel durante el periodo bélico, y en ella fueron encarcelados un grupo de hombres, que en la penumbra esperaban la hora de su fusilamiento, mientras escuchaban el chirrido de los raíles de la vía férrea (75): “(…) Había pasado el septiembre negro y una nueva oleada de sectarismo llegó hasta el Consejo Municipal que ordenó la detención de 32 fascistas vileros a los que encerraron en la Ermita de la Virgen de la Salud que habilitaron como cárcel del pueblo. (…) Mientras duró el encierro, a los detenidos había que llevarles la comida, cosa que los familiares hacían por la noche, para llegar hasta la puerta tenían que pasar entre los milicianos que vigilaban.

El aspecto del interior era deprimente: a la tenue luz de las velas estaban tirados sobre las colchonetas, y muy asustados porque esperaban de un momento a otro que los sacaran para fusilarlos. Les entregaban la comida, recogían los platos y cacharros sucios que tenían y, susurrando, se les comunicaba las noticias que conocían, llevándoles un poco de esperanza (…)”.

La estación del ferrocarril fue un punto estratégico escogido para su destrucción por la aviación enemiga (76): “(…) Durante el verano de 1938 se intensificaron los bombardeos aéreos (…). Otro objetivo para la aviación era el puente del ferrocarril; en un bombardeo nocturno una bomba cayó muy cerca, pero no lo alcanzó (…)”.

Por ello, ante los ataques aéreos, el Ayuntamiento autorizó a la compañía concesionaria del ferrocarril para que construyese un refugio antiaéreo en las inmediaciones de la estación del ferrocarril (77): “(…) Se 38

autoriza a Ferrocarriles E.S.A. para que construya un refugio en terrenos del Municipio, partida Calvario, próxima a la Estación (…)”.

La actividad comercial continuó durante la conflagración bélica, y el ferrocarril fue uno de los pocos medios de transporte que seguía en activo (78): “(…) En abril de 1938, movilizaron a la quinta del 41, los nacidos en el año 1920. Era, la mía, la que popularmente llamaban “la quinta del biberón”.

Después de la movilización, todos los días teníamos que presentarnos en la caja de reclutas de Alacant. Eos desplazábamos en el trenet de la mañana, regresando por la tarde (…)”. “(…) El trenet y los camiones eran los medios de locomoción más usados. La Ribera valenciana era la comarca a la que preferentemente se dirigían para hacer sus intercambios: iban en el trenes hasta Denia y de allí a Sueca, en busca de arroz, patatas y boniatos (…)”. “(…) Los suministradores, eran, la tía Rolla, Antonio El Sevillano y Faustino Martín un manchego bajito y simpático que, se inició en la actividad comercial haciendo rifas en el trenet durante el trayecto Alicante – La Vila Joiosa (…)”.

Una vez finalizada la guerra, el ferrocarril continuó con su rutina (79): “(…) Don Pedro Ruíz Galiana (…) Se cuenta que en la posguerra, fue a cazar a la Venta Lanuza acompañando a don Gaspar Mayor y otros amigos, eran tiempos de escasez y se fueron en el trenet, bajaron en el apeadero de la Venta y tuvieron que cargar con la comida, los pájaros y otros bultos que llevaban, don Pedro iba el último de la fila y sin ninguna carga al verlo, don Gaspar le dijo: “- Pedro, sort que eres d´Esquerra, si fores fascista, t´haurien de dur els c…, en una carretilla (…)”.

Durante la posguerra, y más concretamente en abril de 1948, el Ayuntamiento previendo una posible infección en la ciudad ante la llegada del calor, se puso en contacto con la empresa concesionaria del ferrocarril para solicitarle la limpieza de unos sifones ubicados en la vía férrea (80): “(…) Se resolvió que por la Alcaldía se requiere de oficio a la empresa del Ferrocarril Estratégico Secundario de Alicante para que en el más breve plazo proceda a la limpieza de los sifones de la vía férrea situados en las inmediaciones de esta población para evitar se conviertan en focos de infección durante el verano próximo (…)”.

2.6.

La decrepitud del ferrocarril.

Parece ser que en el año 1966 hubo expectativas de suprimir la línea férrea, información que llegó a oídos del Ayuntamiento, y que tras discutirlo en sesión plenaria celebrada el 8 de julio, llegó al acuerdo siguiente (81): “(…) La Presidencia informa de las gestiones que según sus 39

noticias están realizándose para levantar y suprimir el ferrocarril de referencia y su servicio.

Procede que esta Corporación se pronuncie a este efecto respecto de las ventajas e inconvenientes que producirá a los intereses públicos de Villajoyosa y que por ello expone su conformidad o disconformidad.

La Corporación por unanimidad acuerda lo siguiente: 1º- El servicio de transporte, especialmente de personal, que por este medir mitiga la población de Villajoyosa es de gran importancia e interés y descongestionar los restantes servicios de este carácter que con los medios actuales se hacen insuficientes. 2º. Eo obstante el trazado del ferrocarril de que se trata, su trayectoria y emplazamiento, el gran número de pasos a nivel sin guarda, los numerosos cruces de calles, caminos y sendas, y la travesía que desarticula el núcleo urbano producen desde otro punto de vista efectos perjudiciales para el desarrollo de las actividades de esta ciudad, por lo que la supresión se estima altamente beneficiosa. 3º. Pero, teniendo en cuenta, la exposición de las dos consideraciones anteriores se estima que procede sustituir el servicio actual del ferrocarril, por otro servicio de mejores acondicionamientos que con mayores garantías para sus beneficiarios supone a la vez los inconvenientes actuales, y por ello esta Corporación entiende, que únicamente procede suprimir el ferrocarril cuando se hayan adoptado las provisiones de implantación de otro servicio por carretera que mejorar las condiciones del transporte actual (…)”.

La realidad ha sido totalmente diferente a lo planteado en 1966, ya que nunca fue suprimida la línea, y gracias a dicha ratificación, en la actualidad sigue ofreciendo servicios, -muy superiores a los de aquel entonces-, a todos los usuarios de la provincia de Alicante.

3. Apéndice gráfico.

Las fotografías que contiene la presenta monografía se centran en los diferentes edificios existentes en el conjunto arquitectónico ferroviario de la estación de Villajoyosa.

- Portada: Arco triunfal ubicado en la calle Cervantes, que fue construido para la visita del rey Alfonso XIII el 13 de febrero de 1911.

- Página 2: Detalle de la antigua maquinaria existente en el foso de la vía muerta de la estación.

- Página 4: Aspecto actual que presenta el almacén de carga y descarga, situado frente al edificio principal de la estación del ferrocarril.

- Página 6: Detalle de una de las ventanas del piso inferior de la estación del ferrocarril, donde se puede apreciar el arco escarzado muy rebajado que enmarca la parte superior de la 40

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ventana; la obra de sillería en hilada de la pares, y el zócalo que circunda todo el perímetro del edificio.

Página 8: Detalle de la antigua maquinaria existente en el foso de la vía muerta de la estación.

Página 10: El almacén de carga y descarga presenta cubierta en cartabón, revestido de teja plana en su exterior, y armadura de parhilera en su interior.

Capítulo I. Óculos situados en los extremos de ambos lados del edificio principal de la estación. Su función residía en la ventilación del edificio.

Capítulo II. Ermita de la Virgen de la Salud, ubicada junto a la estación del ferrocarril. Junto a ella se hallaba situado el primitivo cementerio, cuya parte del terreno fue utilizado para el desmonte de la estación. La ermita fue utilizada como cárcel durante la guerra civil, y los presos que en ella se hallaban esperaban la consecución de la pena de muerte, mientras escuchaban chirriar las ruedas de los ferrocarriles.

Capítulo III. Detalle de una de las estancias del pabellón principal de la estación del ferrocarril de Villajoyosa, donde se puede apreciar que ha perdido parte del revestimiento de teja que cubría el tejado.

Foto 1 izquierda: Estancias de la estación del ferrocarril orientadas hacia el Oeste, en la que se puede observar la decoración ecléctica, de arquitectónico espíritu decimonónico utilizado en la misma.

Foto 2 derecha: La fachada principal del edificio de la estación que está orientada a la vía, fue diseñada sin un dosel, pero el Ayuntamiento, unos meses antes de su inauguración, solicitó a la empresa constructora la colocación de un dosel, para que los vecinos se pudieran guarecer frente a las inclemencias meteorológicas.

Foto 3 izquierda: Detalle de una de las ventanas del piso superior, en la que se pueden apreciar sus originarios cuarterones vidriados, así como la obra de sillería en hilada de la fachada.

Foto 4 izquierda: El cerramiento perimetral del almacén de carga y descarga fue posterior a su construcción original.

Foto 5 izquierda: Grúa de hierro fundido originaria desde la construcción del conjunto arquitectónico ferroviario.

Foto 6 derecha: Detalle de la parte superior de la grúa, construida en hierro fundido, situada junto al almacén de carga y descarga.

Foto 7 izquierda: Detalle de la vía muerta, y uno de los vagones que se encuentran en la estación del ferrocarril de Villajoyosa.

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Foto 8 derecha: Detalle de parte de la cubierta de parhilera que cubre el almacén de carga y descarga.

Foto 9 izquierda: Foso de reparación de la maquinaria ferroviaria existente en la estación del ferrocarril de Villajoyosa.

Foto 10 derecha: Habitáculo ubicado frente al muelle de carga y descarga, que fue concebido originariamente como lampisteria o almacén de lámparas –de gas y carburo-, utilizadas para la señalización de los ferrocarriles antes de la instalación del cableado eléctrico.

Foto 11 izquierda: El edificio destinado a lampistería presenta pilastras en sus dos caras más estrechas y elevadas cuya función era la sujeción de la cubierta.

Foto 12 derecha: Cara lateral oriental de la estación del ferrocarril.

Foto 13 izquierda: Detalle del muelle de carga y descarga con la grúa primigenia de hierro fundido, al fondo.

Foto 14 derecha: Originariamente, el suelo del muelle de carga y descarga limitaba con los raíles de la vía férrea, ya que no existía andén.

Foto 15 izquierda: Parte trasera del almacén de carga y descarga.

Foto 16 derecha superior e inferior: Conjunto arquitectónico ferroviario de Villajoyosa, de estilo ecléctico, inaugurada el 28 de octubre de 1914.

Foto 17 derecha superior: Imagen del conjunto arquitectónico ferroviario de Villajoyosa visto desde el foso de reparación de maquinaria.

Foto 17 derecha inferior: Detalle del foso de reparaciones ubicado bajo el desmonte de la Ermita de La salud.

Foto 18 derecha superior: Cocheras para los ferrocarriles.

Foto 18 derecha inferior: Detalle del tejado a dos aguas y en cartabón perteneciente al almacén de carga y descarga, de la estación del ferrocarril de Villajoyosa.

Foto 19 izquierda superior e inferior: Detalle del interior de la cubierta construida en parhilera, perteneciente al almacén de carga y descarga, de la estación del ferrocarril de Villajoyosa.

Contraportada: Fotografía realizada el día de la inauguración de la estación, que tuvo lugar el 28 de octubre de 1914. El ferrocarril partió de Alicante a las diez y media de la mañana, y el Ayuntamiento había invitado a los vecinos para que acudiesen a esperarlo a la estación, que previamente se había engalanado, tanto el camino de acceso a la misma, como el edificio principal con banderas españolas. Igualmente, el Ayuntamiento encargó a las dos bandas de música de la ciudad de Villajoyosa, que 42

amenizaran con su música, desde primeras horas de la mañana, las calles y barrios de La Vila; así como había ordenado el engalanamiento de los balcones de las viviendas y su iluminación nocturna.

Citas bibliográficas (1). FERRER MARSAL, Juan. “Las Marinas de Alicante. Ensenadas, castillos y puentes”. Valencia. Consellería de Obras Públicas, Urbanismo y Comunicaciones. Generalitat Valenciana. 1998. Página 386.

(2). SOLER SORIANO, Jaume. “Des del Cantó d´El Mercantil”. I. Villajoyosa. Edita Jaume Soler Soriano. 1995. Página 12.

(3). COVES NAVARRO, José Vicente; y GÓMEZ MARTÍNEZ, José Antonio. “El ferrocarril en Alicante”. Alicante. Ayuntamiento de AlicanteCAM. 1990. Página 82.

(4). Archivo Municipal de Villajoyosa (AMV). Libros de actas de las sesiones plenarias del Ayuntamiento de Villajoyosa. AMV. Acta 24 marzo 1908. Folio 20 anverso.

(5). AMV. Acta 5 mayo 1908. Folio 27 reverso.

(6). AMV. Acta 6 diciembre 1908. Folio 67 anverso.

(7). AMV. Acta 10 diciembre 1908. Folio 68 anverso.

(8). AMV. Acta 22 diciembre 1908. Folio 70 reverso y 71 anverso.

(9). AMV. Acta 29 diciembre 1908. Folio 72 anverso.

(10). AMV. Acta 5 enero 1909. Folio 76 anverso y reverso.

(11). AMV. Acta 9 enero 1909. Folio 77 reverso y 78 anverso.

(12). AMV. Acta 16 marzo 1909. Folio 88 anverso y reverso.

(13). AMV. Acta 1 marzo 1910. Folio 65 anverso.

(14). AMV. Acta 27 marzo 1910. Folio 67 anverso.

(15). AMV. Acta 19 junio 1910. Folio 80 reverso y 81 anverso.

(16). AMV. Acta 2 octubre 1910. Folio 100 anverso.

(17). AMV. Acta 6 diciembre 1910. Folio 9 reverso.

(18). AMV. Acta 6 diciembre 1910. Folio 12 reverso y 13 anverso.

(19). AMV. Acta 1 enero 1911. Folio 19 anverso y reverso.

(20). AMV. Acta 5 febrero 1911. Folio 26 anverso, reverso y 27 anverso.

(21). AMV. Acta 5 febrero 1911. Folio 27 reverso.

(22). AMV. Acta 19 febrero 1911. Folio 28 anverso y reverso. AMV. Acta 4 abril 1911. Folio 44 reverso y 45 anverso.

(23). AMV. Acta 4 abril 1911. Folio 43 anverso. AMV. Acta 4 abril 1911.

Folio 44 anverso. AMV. Acta 4 abril 1911. Folio 45 reverso.

(24). AMV. Acta 19 febrero 1911. Folio 29 anverso. AMV. Acta 25 abril 1931. Folio 4 reverso. “(…) A propuesta del Concejal D. Tomás Llorca se 43

acuerda quitar del salón de sesiones la placa conmemorativa de la visita a esta Ciudad del rey D. Alfonso XIII (…)”.

(25). AMV. Acta 23 mayo 1911. Folio 54 anverso.

(26). AMV. Acta 9 mayo 1911. Folio 53 anverso.

(27). AMV. Acta 4 abril 1911. Folio 45 reverso. AMV. Acta 30 mayo 1911. Folio 57 anverso.

(28). SOLER SORIANO, Jaume. “Des del Cantó d´El Mercantil”. I. Villajoyosa. Edita Jaume Soler Soriano. 1995. Página 115. Texto pie de foto. “Arco triunfal realizado por los gremios debido a la visita de Alfonso XIII en 1913”.

(29). AMV. Acta 28 febrero 1911. Folio 29 reverso. AMV. Acta 7 marzo 1911. Folio 34 anverso.

(30). AMV. Acta 28 febrero 1911. Folio 31 anverso.

(31). AMV. Acta 7 marzo 1911. Folio 33 reverso.

(32). AMV. Acta 16 abril 1911. Folio 46 reverso y 47 anverso.

DICCIONARIO HISTÓRICO DE LA COMUNIDAD VALENCIANA. Tomo II. Alicante. Diario Información. 1992. Página 788.

(33). AMV. Acta 24 septiembre 1912. Folio 29 reverso y 30 anverso.

AMV. Acta 8 octubre 1912. Folio 30 reverso.

(34). AMV. Acta sesión extraordinaria 13 noviembre 1912. Folio 35 reverso, 36 anverso y reverso y 37 anverso.

(35). AMV. Acta 25 abril 1916. Folio 34 reverso y 35 anverso.

(36). AMV. Acta 17 junio 1917. Folio 22 anverso.

(37). AMV. Acta 15 enero 1925. Folio 23 reverso y 24 anverso.

(38). QUEREDA SALA, José J. “Comarca de La Marina. Alicante.

Estudio de geografía regional”. Alicante. Diputación Provincial. 1978.

Página 380.

(39). MORENO SÁEZ, Francisco. “La ciudad en el primer tercio del siglo XX”. Historia de Alicante. Tomo II. Quinto Centenario Ciudad de Alicante (1490-1990). Alicante. Diario Información. 1990. Página 605.

(40). NAVARRO VERA, José Ramón. “Ferrocarriles y tranvías”.

Memoria Gráfica. Alicante y comarca. Un siglo en imágenes. Alicante.

Diario Información. 1998. Página 209.

(41). AMV. Acta 16 abril 1911. Folio 46 reverso y 47 anverso.

(42). AMV. Acta 30 abril 1911. Folio 51 anverso.

(43). AMV. Acta 22 agosto 1911. Folio 67 anverso.

(44). AMV. Acta 15 octubre 1911. Folio 75 anverso.

(45). AMV. Acta 18 agosto 1914. Folio 7 reverso y 8 anverso.

(46). AMV. Acta 3 abril 1917. Folio 2 reverso y 3 anverso.

(47). AMV. Acta 27 agosto 1918. Folio 18 anverso.

(48). COVES NAVARRO, José Vicente; y GÓMEZ MARTÍNEZ, José Antonio. “El ferrocarril en Alicante”. Alicante. Ayuntamiento de AlicanteCAM. 1990. Página 91.

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(49). FATÁS, Guillermo; y BORRÁS, Gonzalo M. “Diccionario de términos de Arte y elementos de Arqueología y Eumismática”. Zaragoza.

Guara Editorial. 1980. Página 122.

(50). Ibidem. Página 66.

(51). Ibidem. Página 50. “(…) Cartabón: Ángulo formado por las vertientes de la armadura de un tejado a dos aguas (…)”.

(52). Ibidem. Página 194. “(…) Sillería: Obra hecha con sillares bien trabajados y de juntas finas (…)”.

(53). Ibidem. Página 115. “(…) Hilada: Serie horizontal de ladrillos o piedras en un muro o bóveda (…)”.

(54). Ibidem. Página 66. “(…) Cuarterón: Cada uno de los elementos encajados por los montantes de una puerta, ventana, etc. (…)”.

(55). Ibidem. Página 77. “(…) Dosel: Cubierta ornamental de un asiento, imagen, estatua, etcétera con la que se realza su dignidad. Suele ser, sobre todo en el gótico, a modo de templete abovedado y recargado. Usualmente va fijo por uno de los lados a la pared o estructura que lo sustenta. Si va sobre columnas es más propio llamarlo baldaquino o templete, reservándose entonces la denominación de dosel para la parte superior de éstos (…)”.

(56). Ibidem. Página 25. “(…) Armadura: Especialmente referida a la armadura de madera, que es el sistema utilizado para la cubrición de un edificio, y que puede adoptar fundamentalmente las siguientes variantes: de parhilera o mojinetes: aquella armadura a dos aguas, de perfil triangular, que está formada por una serie de parejas de vigas, llamadas pares o alfardas, dispuestas oblicuamente. Las cabezas de los pares apoyan en una viga superior, horizontal y longitudinal, llamada hilera, que forma el vértice de la cubierta, necesariamente a dos aguas. A los paños inclinados de la armadura, soportados por los pares, se les denomina faldones, tabicas o estribado. En la parte inferior los pares apoyan sobre los estribos, o maderos dispuestos horizontalmente encima del muro. Para contrarrestar el excesivo empuje hacia los lados, se colocan a menudo unas vigas transversales, generalmente más espaciadas que los pares, y con frecuencia pareadas, que van de estribo a estribo formando la base de un triángulo, y que se denominan tirantes. Debajo de los tirantes, y para reforzar la armadura, pueden ir unos apeos, denominados canes o asnados.

(57). RAMOS, Vicente. “Datos sobre el ferrocarril Alicante-Altea”.

Villajoyosa. Revista de la Asociación de Santa Marta. 1971.

(58). AMV. Acta 27 octubre 1914. Folio 25 reverso y 26 anverso.

(59). AMV. Acta 7 noviembre 1911. Folio 77 reverso y 78 anverso.

(60). AMV. Acta 21 septiembre 1912. Folio 53 reverso.

(61). AMV. Acta 4 febrero 1913. Folio 55 reverso, 56 anverso y reverso.

(62). AMV. Acta 11 marzo 1913. Folio 61 reverso, 62 anverso y reverso.

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(63). AMV. Acta 25 marzo 1913. Folio 65 reverso.

(64). AMV. Acta 22 abril 1913. Folio 67 anverso.

(65). AMV. Acta 8 julio 1913. Folio 82 anverso y reverso.

(66). AMV. Acta 8 septiembre 1914. Folio 11 anverso.

(67). AMV. 16 septiembre 1913. Folio 90 anverso y reverso.

(68). AMV. Acta 4 octubre 1914. Folio 17 anverso y reverso. 18 anverso y reverso.

(69). AMV. Acta 22 enero 1918. Folio 82 anverso.

(70). SOLER SORIANO, Jaume. “Des del Cantó d´El Mercantil”. I. Villajoyosa. Edita Jaume Soler Soriano. 1995. Página 186.

(71). AMV. Acta 4 enero 1932. Folio 52 reverso y 53 anverso.

(72). SOLER SORIANO, Jaume. “Des del cantó d´El Mercantil” II. La Vila Joiosa. Edita Jaume Soler Soriano. 2001. Página 32.

(73). Ibidem. Página 76 y 77.

(74). Ibidem. Página 79.

(75). Ibidem. Página 105.

(76). Ibidem. Página 110.

(77). AMV. Acta 10 octubre 1938. Folio 26 anverso.

(78). SOLER SORIANO, Jaume. “Des del cantó d´El Mercantil” II. La Vila Joiosa. Edita Jaume Soler Soriano. 2001. Página 112, 1135 y 220.

(79). Ibidem. Página 82.

(80). AMV. Acta 9 abril 1948. Folio 14 anverso.

(81). AMV. Acta 8 julio 1966. Folio 183 reverso.

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