Ruta 1_Del Manzanares a la Nave Boetticher

VILLAVERDE

PAISAJES INDUSTRIALES RUTA 1 Del Manzanares a la Nave Boetticher

VILLAVERDE Y EL RÍO MANZANARES Este recorrido comienza en el río de la misma forma que lo hizo la historia del distrito de Villaverde.

Villaverde se explica desde el agua. Han sido los arroyos que lo surcan los responsables de modelar el territorio. Un territorio de fértiles terrazas provocadas por el tiempo y el constante paso del río Manzanares.

No es casual que enterrados en sus márgenes se escondan multitud de secretos de los habitantes y modos de vivir como:

mamuts prehistóricos (hoy en el Museo de Ciencias Naturales), pobladores del paleolítico y neolítico, cuyas historias nos llegan en forma de yacimientos y herramientas y utensilios que hoy se pueden visitar en el Museo Arqueológico, Villas Romanas reubicadas en el Museo de San Isidro y sustituidos en la actualidad por aparcamientos y parques.

Las tierras fértiles y su posición geográfica que posibilitaba atravesar el río (Vado de Santiago el Verde, denominado así por la ermita habida de mismo nombre) al tiempo de mantener una posición defensiva hizo que tanto musulmanes como cristianos optaran por asentar un pequeño núcleo poblacional que en 1085 fue donado a la Orden de Santiago. No se conocen las razones, se cree que, por las crecidas del río y excesiva humedad, el núcleo se trasladó a lo que hoy sería el casco histórico de Villaverde Alto, entre los arroyos de Butarque y el Malvecino.

Fotografía excavacion de la Villa Romana en 1928 por Pérez de Barradas. Imagen de la Biblioteca Digital de Memoria de Madrid

Cabeza del dios Silvano Villa romana de Villaverde Bajo Museo de San Isidro o de los Origenes de Madrid. Rafael Gomez - https:// micamara.es

Mosaico de la Villa de Villaverde Museo de San Isidro. Imagen de la Biblioteca Digital de Memoria de Madrid

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LA VILLA ROMANA DE VILLAVERDE La Villa Romana de Villaverde se encontraba en una pequeña llanura para la explotación agrícola y dentro de una de las terrazas formadas por la acción erosiva del río Manzanares, donde hoy se localizarían el aparcamiento que da acceso al Parque Línea del Manzanares, próximo a la M40.

El hallazgo de esta Villa Romana se realizó en 1927, junto al puente de la vía férrea, al encontrarse cerámica romana, así como la aparición de objetos de bronce, monedas, mosaicos o los muros de la villa entre otras cosas. Las excavaciones desvelaron la planta de dos Villas Romanas. En la villa inferior, la más antigua, se hallaron los molinos de piedra dando a conocer así las tradiciones indígenas que se asentaron en su momento, sin embargo, otros objetos como fue la cabeza de Silvano o la jarra de bronce, revelaron la enorme romanización que se dio en el lugar.

La villa superior, por el contrario, constaba de una galería hacia el río y espacios dedicados a actividades agrícolas, los habitantes poseían mayores lujos, aquí se hallaron la colimba (bóveda de granito), un acueducto de cuatro arcos, un horno de cal o monedas y cucharas de bronce, entre otras cosas.

Todas estas piezas se trasladaron al Museo de San Isidro, donde se pueden visitar.

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EL REAL CANAL DEL MANZANARES Hubo una vez que Madrid aspiró a ser puerto de mar. El Real Canal del Manzanares fue una obra que tuvo como objetivo hacer navegable el río Manzanares. Un intento de mejorar el transporte de mercancías y semejarse a otras grandes capitales europeas.

Fue una infraestructura que alcanzó 20 km de extensión y tenía 14m de ancho, con 10 esclusas, una cabecera, un embarcadero en Madrid, y casas de personal y de mantenimiento, aprovechando la fuerza hidráulica para molinos. Su uso principalmente se dedicó al transporte de materiales de construcción.

La obra fue compleja en su desarrollo y mantenimiento. Por un lado, el escaso caudal del río Manzanares y una topografía que presenta escaso desnivel complejiza el desarrollo del proyecto y supuso sobre excavar el río y se desarrolla un sistema de esclusas. Por otro lado, el costoso mantenimiento del canal, que se colmataba frecuentemente por los sedimentos y provocaba estancamiento de agua y acumulación de vertidos que lo convertía en foco de enfermedades.

La llegada del Ferrocarril sustituyó a este primitivo y utópico medio de transporte que nunca llegó a ser funcional.

El Real Canal del Manzanares se cegó en su mayor parte, pero aún en Villaverde se puede reconocer el trazado que tenía y queda como testigos de esta obra la casa del esclusero y vestigios de la cuarta esclusa.

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LOS PILARES DEL FERROCARRIL En 1851, se inaugura la segunda línea férrea de la España peninsular y la primera de la región de Madrid, esta línea unía Atocha a Aranjuez, pasando por Getafe, Pinto, Valdemoro, Ciempozuelos y Seseña. Su construcción dejó obsoletos el Real Canal del Manzanares más lento e ineficiente.

En su recorrido entre estos dos puntos una de las dificultades que hallaron fue salvar el río Manzanares. La forma más sencilla de hacerlo, se estimó fue por el antiguo Vado de Santiago el Verde.

Esta decisión fue clave en el futuro del antiguo pueblo de Villaverde. La llegada del ferrocarril supuso una auténtica revolución industrial y el inicio del crecimiento del entonces pueblo de Villaverde. La llegada de talleres e industrias vino acompañada de llegada de trabajadores que se asentaron en colonias residenciales vinculadas a estas grandes empresas, lo que ha configurado el actual paisaje urbano, pero también la fragmentación interna del distrito.

Este trazo aún sigue vigente uniendo mediante la C3 Atocha con Aranjuez. Y quedando en el recuerdo y en dos recorridos en trenes históricos esos primeros trayectos del que fue llamado Tren de la Fresa. Sobre la infraestructura, aún quedan vestigios cómo las columnas de ese puente de más de 150 años que cambió la historia de este territorio o el estrecho túnel que servía como alcantarilla para llevar las aguas del manantial de La Capona, en las proximidades de la estación de Villaverde Bajo.

Villaverde Industrial. Historia de la industria en el distrito de Villaverde. María Jesús Adán Poza. 2007. Imagen del Archivo de la Villa.

Actualmente Novosur

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Plano Parcelario de Madrid 1940-1960 sobre ortofoto PNOA Máxima actualidad.

TALLERES VERS SA La empresa VERS se fundó en 1923 en Madrid y su labor era la reparación de material ferroviario. El 4 de abril de 1941 D. Francisco Valiente Oroquieta solicitó a la alcaldía de Villaverde la ubicación de uno de sus talleres. El complejo industrial incluía un edificio de almacenaje y oficinas, la casa del guarda en la entrada de la vía apartadero para el servicio de los talleres. Un taller de pintura, un taller de montaje y un taller de levante. Se trató de una moderna fábrica especializada en las construcciones metálicas: puentes de ferrocarril y carretera, carros transbordadores, puentesgrúa, maquinaria de elevaciones, grandes trabajos de calderería, maquinaria para azucareras e industrias químicas.

Con el acuerdo alcanzado con la empresa italiana Forni Electrici A Tagliaferri comienza la fabricación de hornos, primero de inducción para el fundido de metales y aleaciones ligeras, y posteriormente para el fundido del acero que le llegaban de las siderúrgicas próximas.

La factoría de VERS fue muy prolífera y mantuvo una actividad muy diversificada de construcción y reparación de materiales. Para llevar a cabo estas actividades la Sociedad contaba con una oficina técnica donde se elaboraban los planos y especificidades técnicas.

La Sociedad Anónima de Vers era propietaria del barrio de Oroquieta (en el actual barrio de Rosales), construido antes de la Guerra Civil y que tras la Guerra Civil adquirió y reconstruyo para poner a disposición de los trabajadores mediante alquiler.

A mediados de los 70 la empresa cerrará y permanecerás así hasta su compra por la compañía Atiensa (Euskalduna).

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Imágenes del documento elaborado por Jesús María Billa Auzmendi. Breve historia de Euskalduna. Villaverde Bajo. Septiembre 2021.

COMPAÑÍA EUSKALDUNA La compañía Euskalduna se funda en 1900 en Bilbao. Su actividad se centraba en la reparación y reconstrucción de buques, y más tarde, deciden diversificar su producción hacia la fabricación de automóviles, maquinaría, construcciones metálicas y material ferroviario.

Esta nueva línea de producción lleva a abrir nuevas sedes de la compañía, siendo Villaverde Bajo una de ellas. Estos talleres se especializarán en la construcción y reparación de material ferroviario y más tarde a otras actividades como: Vagones de tren, metro, mobiliario, piezas de hormigón, mantenimiento de los AVE...

En la década de los 60 la compañía construyó 210 viviendas para sus empleados, dando lugar a la colonia Euskalduna, en el barrio de Los Ángeles.

En la segunda mitad del siglo XX Euskalduna se fusiona con otras dos compañías: Sociedad Española de Construcción Naval S.A y Astillero de Cádiz S.A. pasando a ser denominada el 1 de diciembre de 1969 Astilleros Españoles S.A. Y cuatro años después en asociación se funda Atiensa (Aplicaciones Técnicas Industriales), con esta operación la Compañía de Astilleros ponía a disposición de la nueva compañía los talleres de Villaverde Bajo y al equipo humano.

A principios de los 80, Astilleros-Euskalduna entra en un proceso de cierre. En ese momento el INI (Instituto Nacional de Industria) adquiere el control de Atiensa y de los talleres. En los 90 la empresa pasa a manos de Alsthom, y seguirá su actividad, hasta la venta de los terrenos a finales de los años 90, principios del 2000.

Imagen de Johannes J. Smit Locomotor 340 027-2 en el Taller Transfesa de Villaverde Bajo

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Extracción del Elefante. Museo de San Isidro. Lo origénes de Madrid

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EL MAMUT DE TRANSFESA TRANSFESA es el acrónimo de transportes Ferroviarios Especiales, S.A. Se trataba de una fábrica ubicada en 1943 próxima a la estación de tren de Villaverde Bajo. Su objetivo era la explotación de material ferroviario para el transporte nacional e internacional. Si por algo llegó a ser famosa fue gracias a su sistema de vías intercambiables, claves para el comercio internacional.

La importancia y relevancia de TRANSFESA hizo necesario abrir sedes en diferentes ciudades, y ampliar las existentes.

Así, en 1958, en ese proceso de ampliación de la fábrica ubicada en Villaverde es cuando se realizó el hallazgo de en perfecto estado de conservación y completo de un elefante antiguo (Elephas antiquus).

Además de herramientas líticas que aseguraban la presencia humana en esta escena, y restos de otros animales extintos, como grandes ciervos y caballos. Actualmente el Mamut se encuentra exhibido en el Museo Nacional de Ciencias Naturales.

Por otro lado, con el declive industrial, Transfesa vendería los terrenos al ayuntamiento de Madrid en 1996 para la construcción de viviendas, salvando así su deuda.

Archivo fotográfico de la delegación de propaganda de Madrid.

Ministerio de Cultura y Deporte Atienza Pérez, Julián (1909-1939)

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ESTACIÓN DE VILLAVERDE BAJO El origen de la estación de Villaverde Bajo se remonta a 1872. Su origen se encuentra vinculado al trayecto Madrid y Malpartida, que se iniciaría en la estación futura estación de Principio Pío. Sin embargo, la construcción de esta estación era un proceso complejo. En previsión de las posibles demoras se planteó un trazado provisional, utilizando la Línea de Madrid-Alicante hasta la altura del cruce del río, punto en donde se desviaría hasta la estación de Leganés. Ubicándose en este nuevo empalme la estación de Villaverde Bajo y los talleres del ferrocarril a Malpartida.

La estación fue un apartadero hasta 1931 cuando fue habilitado como estación para todo servicio. Sin embargo, esta estación sería derruida como consecuencia de la Guerra Civil Española.

El nombre de la estación como Villaverde Bajo no lo tendrá hasta 1906. A petición vecinal se había construido en 1902 un apeadero próximo al pueblo de Villaverde, con el nombre Villaverde Directo. Esto generó confusión de manera que se renombraron al apeadero como Villaverde Alto y al Apartadero como Villaverde Bajo Actualmente la estación sigue siendo punto de circulación tanto de pasajero como de mercancías. Esta dualidad que tiene efecto en la línea hacia Aranjuez trae como consecuencia demoras más altas en los tiempos de espera entre trenes que circulan por esa misma vía.

Cronistas de Villaverde.

Cortesía de Juanjo urbanity.es Talleres Material Fijo y Copa de Villaverde. Cronistas Villaverde

CONSTRUCCIÓN DE: Félix Aguilar (ing.) y Francisco Barón Blanco (ing.): 1924 (P) 1924-1925 (O) Reconstrucción: Nicolás Suárez y Alvizu (ing.) y Juan Campos Estrems (ing.): 1939-1940 (P) 1940-1941 (O).

Diversas reformas: S.d.c.: 1970-1980 (s.i.)

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PABELLONES FERROVIARIOS Frente a los andenes de un antiguo muelle de carga, actualmente en desuso, se alzan los únicos restos conservados de lo que fue la segunda estación de Villaverde Bajo, erigida entre 1924 y 1931. Se trata de tres pabellones de viviendas para empleados, proyectados por los ingenieros de la compañía MZA como parte de un extenso complejo ferroviario integrado por distintas construcciones, hoy perdidas (almacenes, talleres y escuelas, entre otras). Aunque cada pabellón presenta un tamaño y algunos detalles de acabado diferentes, todos responden a las mismas características básicas. Los tres tienen una sencilla planta rectangular -sólo el primero, el de mayor tamaño, distingue los cuerpos laterales creando una distribución en H dilatada-, con dos o tres alturas más un ático rematado de forma escalonada; asimismo, resuelven sus fachadas mediante soluciones extraídas, de modo un tanto tardío, de la arquitectura tradicional madrileña: zócalos graníticos y combinación de paramentos revocados con muros de ladrillo visto, acompañados por verdugadas, impostas, esquinas y recercados del mismo material, junto con algunos rasgos decorativos neomudéjares. Pese a las intervenciones sufridas tras la Guerra Civil, y en épocas más recientes -los edificios mantienen en esencia su aspecto original.

Gracias a ello, y a su antigüedad, adquieren un gran valor testimonial para la zona, donde poseen, por su ubicación en un estrecho paraje arbolado -ahora constreñido entre las vías del tren y las calles del barrio-, un carácter paisajístico, casi pintoresco, que rememora su origen rural.

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LA COPA DE VILLAVERDE Se trata de un original depósito de agua. Es el elemento más emblemático y el único que sigue en pie del Taller Central de Reparaciones de la Compañía MZA, ahora de RENFE. La copa de Villaverde se encuentra en la calle Eduardo Maristany (zona de Butarque, Villaverde Bajo) desde 1924.

Se trata de una construcción- levantada por la Compañía de los ferrocarriles de Madrid a Zaragoza y Alicante- realizada de hormigón armado, que adopta la función de depósito de agua (subterráneo), su localización durante décadas determinaba el lugar donde se hallaba el taller de Renfe. El depósito abastecía tanto a las viviendas como a los talleres; comprende un diámetro exterior de 10 metros e interior de 2,50 metros así como una profundidad de 3 metros, y su altura es de 18 metros. En su interior se hallan tuberías de alimentación, descarga y aliviadero.

Los pabellones ferroviarios y la Copa de Villaverde. Cuadernillo 5. 2012.

Cronistas de Villaverde

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Más información Longitud 3100m Año construcción 2002-2004 Ingeniero Carlos Díaz Sevilla Coste 108 millones de euros

GRAN VÍA DE VILLAVERDE A mediados de los años 80, en el marco general de la reconversión industrial, los distritos de Villaverde y Usera sufrieron uno de los mayores procesos de desindustrialización de toda España. Por lo que, se dio la necesidad de llevar a cabo un Plan de Desarrollo Socio-Urbanístico, Social e Integral, con el objetivo principal de producir la mejora de la calidad de vida de los habitantes de estos distritos. Dentro de las inversiones en infraestructuras, hay que señalar dos grandes elementos vertebradores: la Avenida de Córdoba y la Gran Vía Verde de Villaverde. La Gran Vía Verde de Villaverde, es una operación transversal este-oeste que busca cerrar la herida producida por las vías del ferrocarril a su paso por el área, eliminando barreras y creando nuevos elementos de conexión.

El tramo inaugurado consta de 3.100 metros y se distribuye en tres zonas diferentes: La primera es una rotonda de 80 metros de diámetro conectada mediante escaleras con el tramo peatonal inferior; El segundo tramo va desde esta rotonda hasta la plaza Paraninfo, y en sus 46 metros de ancho se encuentran un paseo peatonal cuya intención original es que hubiera alameda, quioscos, un carril bici y espacio para aparcar en línea en ambos sentidos. Por último, en la confluencia con la avenida Real de Pinto se encuentra la plaza del Paraninfo, inspirada en la Piazza Navona de Roma. Está rodeada por un anillo viario de forma ovalada y un carril bici.

Este proyecto surge gracias a la acción vecinal mediante el movimiento de la dignidad del sur y el Plan 18.000.

Arriba. Talleres antes de la demolición. Foto Marco. Facebook Cronistas de Villaverde

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Abajo. Talleres en el proceso de demolición. Foto de Jorge París. http://caminandopormadrid.blogspot.com/2013/11/los-talleres-de-tafesa-en-villaverde.html

LA HUELLA DE TAFESA Desde 2013 se trata de un descampado. Sin embargo, esta parcela se encuentra estrechamente vinculada al ferrocarril. Su historia empieza en 1872 cuando por Real Orden se concede su construcción a la Compañía de Ferrocarriles del Tajo. Su ubicación respondía a la bifurcación entre las líneas Madrid-Alicante y la que se estaba construyendo de Madrid-Malpartida de manera que permitiese la entrada de los materiales necesarios para la construcción de esta línea.

Aunque estos talleres habían sufrido varias remodelaciones y cambios, la demolición supuso la pérdida de varias naves construidas en 1924, realizadas en ladrillo y con influencias del neomudéjar que conservaban su antiguo aspecto.

Ha sido un lugar conocido por diferentes nombres, tanto como grandes empresas han gestionado estos terrenos (Compañía Auxiliar de Transporte -CAT-, Transfesa, Tafesa).

En sus naves se han construido y reparado material ferroviario, ha sido apartadero de mercancías, lugar de ensayo de tecnología pionera (enclavamiento hidrodinámico de Bianche-Servetta -sistema utilizaba la fuerza del agua para mover las agujas del tren y las señales y que estuvo en funcionamiento hasta 1998-. Y en los últimos años lugar de resguardo de los restos de los coches estallados en el atentado del 11 M en Santa Eugenia.

Foto en Facebook de Cronistas de Villaverde

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LA CHIMENEA DE LA NORA Una de las actividades más antiguas en Villaverde es la producción de tejas y ladrillos, favorecida por la presencia de afloramientos de arcillas.

“La arcilla que emplean los escultores de Madrid para moldear, y que es de color verde de bronce, viene del inmediato pueblo de Villaverde” 1864 Casiano de Prado.

Con la industrialización y el crecimiento de la ciudad, comenzó la proliferación de canteras, y los hornos de tejas se convirtieron en industrias ladrilleras, destacando: Marí Paz. Nueva Cerámica de Villaverde (fábrica de Barreiros) y La Norah (barrio de San Cristóbal).

De ellas sólo queda la Chimenea de La Nora, también conocida como “La Piqueta”. Es del año 1907, ladrillo rojo y forma circular. Durante la Guerra Civil la chimenea fue destruida para, posteriormente, se reconstruida por las vecinas y vecinos del barrio en la posguerra.

A principios de la década de 1950 la fábrica cerró, quedando como único testigo de la memoria industrial la chimenea y que es, desde hace años, hogar de cigüeñas.

Ayuntamiento de Madrid

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NAVE BOETTICHER Y NAVARRO El edificio de la Nave Boetticher (construida en los años 40) en el distrito Villaverde formó parte de las instalaciones de la industria del siglo XX, una antigua fábrica de ascensores Boetticher. Su ubicación se realizó ante la necesidad de contar con espacios amplios y las buenas conexiones ferroviarias.

En sus inicios, la actividad productiva consistía en la instalación de calefacciones, ascensores y maquinaria de elevación. Más adelante se especializaría en todo tipo de construcciones hidráulicas, tales como compuertas y cierres para tuberías, aliviaderos de canales, de presas y saltos de agua, etc.

Durante mucho tiempo se ha considerado al autor de la nave principal al ingeniero Eduardo Torroja, junto al arquitecto Ricardo Gómez Abad. De hecho, era conocida como Nave Torroja o la catedral, por la singular bóveda de hormigón. El edifico. Originalmente constaba de tres naves, una gran nave central apoyada en dos laterales de menor altura.

En 1992 la empresa quebró. En 2003 la antigua fábrica y los terrenos a su alrededor pasaron a pertenecer al Ayuntamiento mediante un convenio urbanístico. En 2006 el Ayuntamiento convocó un concurso de ideas. En 2009 se inició y no se terminó hasta 2011. Finalmente, en marzo de 2015 fue inaugurada.

Actualmente se ha rebautizado como La Nave Madrid y es un equipamiento público en el que se dan actividades dirigidas a la innovación, la formación y empleabilidad. En su interior se conserva un horno de fundición y una grúa reconvertida en mirador.

REFERENCIAS Archivo fotográfico de la delegación de propaganda de Madrid. Ministerio de Cultura y Deporte Biblioteca Digital de Memoria de Madrid Breve historia de Euskalduna. Villaverde Bajo. Jesús María Billa Auzmendi. Septiembre 2021.

Caminando por Madrid: http://caminandopormadrid.blogspot.com/2013/11/ los-talleres-de-tafEsa-en-villaverde.html Cronistas de Villaverde. Cuaderno 3. Las villas romanas de Villaverde: Una aproximación a Su historia. 2011 Cronistas de Villaverde. Cuaderno 5. Los pabellones ferroviarios y la Copa de Villaverde. 2012.

Cronistas de Villaverde. Cuaderno 7. Cuando los elefantes poblaron Villaverde.

2013.

Documentación del Patrimonio Industrial de la Ciudad de Madrid en el S. XX. Tomo segundo. Inventario y Atlas de Arquitectura y patrimonio industrial. Laura García Rodríguez. 07/05/18 Filmoteca RTVE Industria y Residencia en Villaverde. Génesis de un paisaje en la periferia de Madrid.

María Isabel del Río Lafuente. 1984 Los enlaces ferroviarios de Villaverde y la estación de Madrid-Delicias. Cesar García Mohedas. Asvafer 53. 2000.

Los ferrocarriles en torno a las cuencas bajas de Manzanares y Jarama. Grupo Investigación Parque Lineal del Manzanares (GIPL) Museo de San Isidro. Guía de los Orígenes de Madrid.

Villaverde. Miguel Ángel García Castrillo y José María Sánchez Molledo. 2017.

Villaverde Industrial. Historia de la industria en el distrito de Villaverde. María Jesús Adán Poza. 2007.