
2 minute read
LA CLIMATIZACIÓN ES IMPRESCINDIBLE PARA TENER UNA MÍNIMA CALIDAD DE VIDA, PERO
ESTA REPRESENTA, APROXIMADAMENTE, ENTRE UN 60 Y UN 70% DEL CONSUMO ENERGÉTICO EN EL EDIFICIO PROMEDIO DEL SECTOR TERCIARIO
Por último, la ventilación natural puede tener, además, inconvenientes cuando las temperaturas exteriores son extremas o cuando la calidad del aire exterior no es correcta. En las grandes ciudades, a menudo hay contaminación por materia particulada, ozono u óxidos de nitrógeno, y tampoco es desdeñable el impacto del ruido exterior. Lo ideal será disponer de ventanas con señalización, basada en sensores que nos alerten de la idoneidad o no de permitir la ventilación natural en un momento determinado.
• Sistemas de filtración y purificación de aire avanzados de baja pérdida de carga: la filtración tradicionalmente ha sido una tecnología poco valorada en los sistemas de climatización (se empleaban filtros de muy baja calidad clase G4).
Las nuevas exigencias del RITE han puesto de manifiesto la importancia de disponer de una buena filtración; actualmente, la mayoría de los edificios dispone de buenos filtros de clases F7 a F9, pero obviamente a mayor eficacia del filtro mayor pérdida de carga y, por tanto, mayor consumo energético. Los fabricantes de filtros están desarrollando medios filtrantes cada vez más eficientes gracias a la disminución del tamaño de las fibras y al aumento de la carga electrostática. Por otra parte, hay también disponibles algunas tecnologías como la polarización activa, que permiten mantener la carga electrostática del filtro durante toda su vida útil, alcanzando eficiencias muy elevadas con pérdidas de carga controladas.
• Otra posible tecnología es el aprovechamiento del calor latente de vaporización del agua: enfriamiento evaporativo. La instalación de sistemas de superficie húmeda que permiten enfriar unos grados el aire a costa de la evaporación de una parte del agua circulante a través de unos paneles, normalmente de materiales porosos. A pesar de que estos elementos no suelen provocar pulverización, esta tecnología exige mucho control higiénico para evitar problemas del tipo Legionella o presencia de endotoxinas en el aire impulsado.
• Recuperación de calor: otra tecnología también muy habitual pero que aporta ahorros significativos es la recuperación de calor, mediante ruedas entálpicas o equipos de flujos cruzados. Permite aportar el aire neutro térmicamente con un coste energético muy limitado. También es una tecnología que permite, simultáneamente, el ahorro energético y el confort por incremento de ventilación.
• Otro aspecto muy importante no relacionado con los sistemas de climatización pero que de manera indirecta aporta calidad de aire interior y ahorro energético en la fase de diseño, construcción y en reformas o remodelaciones es el empleo de materiales de baja emisión. Los recubrimientos de paramentos y suelos puede ser generadores de VOCs y de formaldehído; actualmente muchos materiales ya disponen de etiquetas informativas basadas en ensayos de laboratorio, indicando el nivel de emisión de este tipo de contaminantes.
El uso de materiales de baja emisión permitirá disminuir el caudal de ventilación, obteniendo resultados de calidad de aire equivalentes. De hecho, las nuevas normativas de cálculo de ventilación ya empiezan a considerar el tipo de edificio, de baja o alta emisión de contaminantes.
• Por último, las actividades que se lleven a cabo dentro de los edificios también tendrán un impacto significativo: operaciones de limpieza y mantenimiento, uso de cosméticos, actividades contaminantes (cocina, uso de chimeneas, etc.)... Todo este tipo de actividades también serán generadores de contaminación; el uso de materiales de baja emisión permitirá minimizar la necesidad de ventilación, con el consiguiente ahorro sin comprometer las CAI.
Zehnder es #TecnologíaParaLaSalud