Revista_Ecos_7

Page 8

DE TINTA EN TINTA

ECOS

Leila Guerriero: Ficcionar la realidad María José Delgadillo

P

8

areciera ser que en la escritura existe un límite claro entre la realidad y la ficción que, según nuestras concepciones de lo que hace que cada uno de estos términos –realidad y ficción- funcione; no debe cruzarse. Hay, sin embargo, autores que utilizan las herramientas pensadas para y por la ficción para, desde la trinchera de los procesos literarios que ayudan a plantear una historia, contar lo que es realidad. Cruzando estos límites y antes de saber que Borges había escrito un poema cuyo título es el nombre de ese pueblo, yo ya sabía que había, en Argentina, un lugar llamado Junín. Y si lo sabía es porque en ese pueblo de nombre musical es dónde en Foto: Revista Dossier 1967 nació una de esas escritoras que traspasa las reglas y cánones invisibles de esta frontera que divide cómo debe contarse la realidad y cómo la ficción.Una mujer que responde a Leila Guerriero. Leila no quería ser periodista. Dejó Junín para ir a la universidad y estudiar una Licenciatura en Turismo. Bastará asomarse a una librería y buscar en las estanterías de ese género ahora tan en boga llamado “no-ficción” para darnos cuenta de que, de licenciada en turismo, Guerriero tiene sólo el diploma. Después de publicar Los suicidas del fin del mundo (Tusquets) en el año 2006, ganar el premio de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano en 2010 y reeditar Frutos extraños (Alfaguara) en el 2012,

Guerriero nos regala un nuevo trabajo, utilizando el periodismo narrativo como móvil y pretexto para poner sobre la mesa perfiles construyendo una antología personal de referencias para la autora, en Plano Americano publicado este año. En Plano Americano, es posible encontrar tanto a la fotógrafa Sara Facio, responsable de la imagen mítica de Cortázar con su cigarrillo en la boca, como Roberto Arlt, quizá el autor más infravalorado de su generación; a la poeta uruguaya Idea Vilariño cubierta de interrogantes y a Fogwill, la máquina incansable de la literatura argentina. Ellos suman a los veintiún perfiles que nos dibujan la historia de cada uno de estos, podríamos llamarlos, personajes. Pero lo interesante durante las páginas del libro no es sólo la elección de personajes para construir sus realidades, sino los artificios de los que se vale Guerriero para lograr esta construcción. Si bien las historias son la materia prima de cualquier periodista, la particularidad del lenguaje de Leila es que siempre habrá en ella una finura casi demasiado exquisita, casi demasiado snob para ser considerada y limitada en los marcos del periodismo. Lo ha declarado ella misma, se vale de todas las referencias literarias, fílmicas y visuales de su vida. Se vale de cualquier experiencia artística y sensorial para alimentar a esas narrativas del yo que construyen


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.