La oferta internacional es, por una parte la promesa o declaración de voluntad realizada unilateralmente por el oferente, que se obliga a cumplir una determinada prestación o negocio frente a la otra parte; y por la otra, el primer contacto comercial entre el exportador y sus potenciales clientes. Por ello, debe elaborarse con rigor, adaptándose a las prácticas comerciales de cada mercado exterior. Esta guía le ayudará a hacerlo.