El juego ayuda al niño(a) a solucionar problemas, refinar conceptos y adquirir nuevo vocabulario. La dirección pedagógica del juego debe incluir la planificación, ejecución, control y evaluación. Cuando se habla de planificar el juego se está refiriendo a la necesidad de que la educadora partiendo del diagnóstico del grupo y del nivel que han alcanzado los niños, se prevé el procedimiento que se debe de utilizar, los medios y las acciones a realizar. Es por esto que en esta antología están propuestos una serie de juegos, se clasifico en dos tipos: Juegos pasivos y juegos activos. Los juegos pasivos son aquellos que en el que la persona no participa activamente, es decir, se utiliza menor energía al jugarlos, lo pueden realizar solos o con muchas personas. Los juegos activos son aquellas actividades que realiza el individuo a través del ejercicio físico, las cuales generan desgaste de energía. los niños y niñas dedican mayor o menor tiempo a los diferentes tipos de juegos activos, dependiendo del tiempo que disponen y el placer que produce (juegos libres y espontáneos, de dramatización, constructivos, musicales.) Dichas actividades fortalecen el desarrollo físico, así como el entendimiento de normas y reglas y la capacidad para tomar decisiones en beneficio del grupo de juego.