< Johan Arciniegas Gil / Jaiver Blandón / José Díaz Riaño > < Carlos Saiz Nava / Laura Sánchez Giraldo >
Introducción El salto desde el espacio académico universitario hacia el ámbito laboral es, tal vez, uno de los episodios más problemáticos que cualquier estudiante de antropología de la Universidad Nacional de Colombia puede afrontar. El escaso conocimiento que la opinión pública tiene de la labor del antropólogo dificulta los esfuerzos de cualquier profesional de la disciplina para lograr su vinculación laboral. Los fines misionales, la visión, y el perfil profesional que, desde la Universidad Nacional y el departamento de Antropología, se proyectan, juegan un importantísimo papel en el proceso de vinculación laboral, pues la correspondencia o discordancia entre ellos y lo que el país demanda de la disciplina, condicionan las oportunidades a las que se accederán y los rumbos que emprenderán sus egresados. La afirmación “lo que exige el país” resulta también problemática, pues esta comprende una multiplicidad de actores sociales con los cuales, dicho sea de paso, se ha vinculado históricamente la antropología como disciplina. Comunidades étnicas, comunidades locales, movimientos sociales, grupos económicos y empresariales, entidades del estado, entre otros son algunos de los actores que ofrecen empleo a los antropólogos y antropólogas. En ocasiones, los respectivos intereses pueden entrar en contradicción, demandando responsabilidades disímiles a los profesionales afiliados a este campo del conocimiento. En ese sentido, consideramos necesario establecer una diferenciación entre las demandas de un mercado laboral
estructurado en torno a la oferta mayoritaria de –como se verá posteriormente– ciertos sectores sociales y económicos, y las demandas, en general, de los grupos sociales del país, incluyendo a los que ofrecen pocas o ninguna oportunidad laboral remunerada para los antropólogos. La respuesta de los egresados y egresadas a dichas exigencias contradictorias entre sí implica un reto multidimensional a nivel de preparación, capacidades, idoneidad y principios éticos; así como deseos y necesidades personales –tanto profesionales como económicas–, y el compromiso de sus posturas políticas e ideológicas. Una vez hagamos la distinción entre la naturaleza de las demandas de lo que denominamos país, por un lado, y mercado laboral, por el otro, se comprenderán mejor los grandes dilemas y dificultades a los que se exponen los profesionales en antropología formados en la Universidad Nacional de Colombia. Metodología Para la construcción del diagnóstico respecto al perfil del egresado y el panorama laboral, realizamos, en primera instancia, una consulta de fuentes sobre los distintos perfiles profesionales propuestos, tanto por el departamento de antropología de la Universidad Nacional, como por los de otras universidades del país. Igualmente, llevamos a cabo una breve revisión bibliográfica de los antecedentes históricos del departamento y realizamos algunas entrevistas tanto a egresados como a profesores –algunos ostentando ambas posiciones–. Esto, con el fin de rastrear las percepciones que sobre el 11