2019 TERCERA EDICIÓN PARA LA FIESTA DE SAN JUAN BOSCO
DIÁLOGO Entre Sacerdotes y Seminaristas de la Fundación Padre Jaime
en esta edición * Sacerdotes jóvenes presentan su mirada sobre el sacerdocio. * Seminaristas hablan de su motivación para ser sacerdotes salesianos. * Un sacerdote salesiano nos habla de la enseñanza de los Apóstoles.
2019 TERCERA EDICIÓN PARA LA FIESTA DE SAN JUAN BOSCO
la vida del sacerdote joven
P. Fabián Lozada V. sdb Ecuador Para mí ser sacerdote es algo especial: el sentirse que uno es instrumento del amor de Dios a la humanidad. Me invita siempre a no «desafinar» mi vida para llegar siempre con la melodía del mensaje de amor de nuestro Creador a todos los hombres, saber que uno puede llegar a los demás con armonía, con compases de alegría y de esperanza y por sobre todo con la sinfonía del Evangelio de Cristo que es música para todo el mundo.
P. Ramiro Morales H. sdb Colombia
Desde mi experiencia ser presbítero es reconocerme infinitamente amado por Dios. Se que soy pecador como cualquier cristiano pero... experimentar que Dios me emplea como instrumento para pastorear a mis hermanos, que Dios usa mis manos para hacerse sacramento eucarístico, que Dios hace de mi vida una luz que conduce a Cristo me permite saber que ser santo es posible, que el sueño de Don Bosco de que todos somos llamados por Dios a ser santos es algo que acontece en la vida ordinaria de cada cristiano y definitivamente ser santo como presbítero no es otra cosa que corresponder al amor de Dios, amar a Dios como Él me ama.
DESDE DON BOSCO A CRISTO Édgar Enrique Velásquez C. sdb Colombia Fue en el año 2006 cuando cruzamos las primeras palabras con el P. Jaime Rodríguez sdb que tal vez, veía cómo un joven de 13 años ya era sacristán en la Parroquia de Agua de Dios. Recuerdo de manera especial la devoción, pulcritud, delicadeza en el trato, gusto por la liturgia, la elocuencia de sus palabras en la homilía, sus gestos simples pero significativos, el aprecio y gratitud que la gente le expresaba luego de cada celebración. Luego de haber leído el libro “La razón de su vida” puedo constatar una vez más, cuán valioso fue el P. Jaime no sólo para la Congregación sino para la Iglesia y el mundo; cuántos sacrificios, trabajos, penas, enfermedades, alegrías y amistades acompañaron su existencia en este mundo. El testimonio de su vida me alienta a dar lo mejor de mí como salesiano de Don Bosco, a tener metas altas, a no ser conformista, a luchar por la realización, en el tiempo, del Reino de Dios, a fortalecer el don de la amistad. Doy gracias por el don del P. Jaime que aunque invisible físicamente, se mantiene eterno en sus escritos.
Diácono Trieu-Vong TranHong sdb Vietnam
Leí el libro “P. Jaime Rodríguez F. sdb la razón de su vida”. Me llama la atención su fe. Tenía una fe sin reservas en la vida comunitaria, como lugar donde se realiza el hecho salesiano y se materializa el proyecto educativo de Don Bosco, siendo el espacio para la santidad de unos y otros. El P. Jaime fue un constructor de comunidad, como el pastor de los pueblos. Así se expresaba el amor de Jesucristo a sus ovejas. Por tanto, es importante que un sacerdote salesiano sea un pastor para los jóvenes pobres y abandonados.
LA ESENCIA DEL SACERDOCIO P. Alcides Pinto da Silva sdb Brasil Es un vaso frágil que lleva un gran tesoro. “... llevamos este tesoro en recipientes de barro para que todos reconozcan que este poder extraordinario es de Dios y no de nosotros." ”(2 Cor 4,7). Es alguien tomado del medio del pueblo para el bien del pueblo en su relación con Dios. Lo que Hebr 5,1 dice sobre el Sumo Sacerdote vale para nosotros los sacerdotes: "Es tomado de entre los hombres y puesto en favor de los hombres en lo que se refiere a Dios para ofrecer dones y sacrificios por los pecados." Este es el aspecto cultual (del A.T.). Él es un pastor, el ejemplo del buen pastor, que es Cristo: "Sean pastores del rebaño de Dios confiado a ustedes; cuiden de él, no por coacción, sino con corazón generoso; no por torpe ganancia, sino libremente. No como dominadores de aquellos quienes les han sido confiados a ustedes, sino al contrario sean modelos para el rebaño." (1 Pe 5,1-3). Él cuida especialmente de los pobres, de los enfermos, de los que sufren. Él es un padre, como dice Pablo: "soy yo el que los ha engendrado en Cristo Jesús, mediante la predicación del Evangelio." (1 Cor 4,15), es decir , aquellos que él evangeliza, bautiza... También Pedro llamaba a Marcos “mi hijo” por haberlo bautizado (1 Pe 5,13), lo que hizo también Pablo. (Fm 10). En resumen, bastará con mirar a Don Bosco o al Padre Jaime Rodríguez F., sdb quienes vivieron ejemplarmente las enseñanzas de los Apóstoles.