Revista Educar en Familia N° 2 2018 by Fundación ICEF El salvador

Índice

Revista trimestral | Mayo 2018 | www.icefsal.org.sv

17 años de publicación Junta Directiva ICEF Joaquín Gutiérrez Edna de Gutiérrez Jaime Funes Margarita de Funes Guillermo Barrientos Melanie de Barrientos Benjamín Lemus Michelle Grassl Francisco Álvarez Carmen María de Álvarez

Editorial

Panorama familiar El desafío de ser padres

Matrimonio al día ¿Qué aprenden los hijos del matrimonio de sus padres?

Educar en valores Tratar con cariño y respeto a los mayores

El arte de educar Mamá, me tengo que ir

En Familia Diferencias entre mamá y papá

Economía familiar Cómo celebrar grandes fiestas en familia y con bajo presupuesto

Directora Ejecutiva Valeria Garzona de Portillo

Empleados de calidad Vivo la comprensión cuando...

Consejo editor Margarita de Jiménez Valeria Garzona de Portillo José Manuel Cabrera Escobar

Situaciones Familiares 5 hechos que delatan que eres madre de 3 o más hijos

Fundación Instituto de Colaboración y Educación Familiar Pasaje 8, 152, Col. San Benito, San Salvador. PBX: 2525-4600 info@icefsal.org.sv

Diseño y diagramación José Manuel Cabrera Escobar Fotografia de Portada Jairo Henriquez Photography Fotografía en Portada Familia Morales Montoya Locación de Portada Pimi La Mascota

Equilibrio Familia-Trabajo Consejos para que la familia funcione cuando papá y mamá trabajan fuera de casa

Decoración La habitación más cálida de la casa: ¡la de mamá y papá!

Al día Padre no es cualquiera

Psicología familiar ¿Quieres hijos con autoestima? ¡Sé un padre con autoestima!

Gotitas de educación ¿Y si no nos quejáramos tanto?

Educando adolescentes Despertar aficiones en los adolescentes

Consejos médicos La importancia de los exámenes médicos preventivos

Cocina familiar Arroz a la griega y Chuletas a la manzana

Editorial El amor de mamá y papá son necesarios para un desarrollo equilibrado y es la forma tan diferente de expresar ese amor lo que logra esa armonía. La dulzura, ternura y cariño que comunica una madre, en contraposición a la forma más simple, directa y parca del padre no implica que uno quiera más que el otro, simplemente se expresan de forma diferente: la madre mirando el entorno en relación con el hijo, el padre mirando a su hijo en relación con el entorno. También la forma de educar siempre será diferente: papá impulsa al riesgo, mamá a la seguridad; papá a la competencia, mamá a la

Mamá y papá: amor sin reservas ni medidas justicia; papá a la rudeza, mamá a la ternura… Basta observar en un parque quien es el que anima a sus hijos a que se columpien más fuerte o suban más alto, a que pedaleen su bicicleta más rápido, o avienten la pelota con más de fuerza. Y quién es la que grita: ¡No te subas tan alto, no vayas tan rápido, no le des tan fuerte! Las figuras paterna y materna son básicas en el desarrollo de los niños. Las aportaciones y diferencias son muchas, pero lo importante es ser conscientes de que el desarrollo integral de nuestros hijos, depende de asegurarles un acceso continuo a las maneras

diferentes y complementarias de cómo educamos los hombres y las mujeres. La función de la madre es darle seguridad; la del padre, enseñarle y guiarlo en la solución de los problemas que le plantea la vida. Si papá o mamá no están disponibles, se recomienda buscar esa figura en alguien cercano -hermano(a), tío(a), abuelo(a)-, para favorecer la identidad del menor, que a fin de cuentas es quien tiene el derecho a gozar de una educación equilibrada.

Consejo Editor

Panorama familiar ¿Qué significa ser buenos padres en el tercer milenio? La calidad del tiempo con los hijos es el punto fundamental. Es también urgente una mayor participación del padre; éste ha dejado de ser el proveedor único del hogar y con muchísima frecuencia la mamá colabora hasta con el 50%, lo que conlleva una menor disponibilidad de tiempo con los hijos. Esto demanda una mayor presencia del padre en los quehaceres del hogar y el cuidado de los hijos. La figura de identificación masculina es indispensable para el sano desarrollo de los hijos, tanto de los niños como de las niñas... Para ellos, el papá es aquella figura en la que se están mirando como en un espejo para ver qué significa ser hombre, esposo, qué significa la virilidad. Para ellas, son importantes las interacciones de papá y mamá, así como vivir lo que es relacionarse como mujercitas con un hombre. La fortaleza de la figura masculina es básica para ese sentimiento de estabilidad de los hijos.

El desafío de ser Padres de su mamá? ¿Cuál ha sido el momento más feliz de su vida? ¿Cuál ha sido la experiencia, quizás, más dolorosa o difícil que le ha tocado vivir? Si tenemos las respuestas para estas cosas, sabemos qué tan cerca hemos estado de ellos y de alguna manera, qué tan buenos padres hemos sido hasta el momento. ¿Cuál es la cualidad más importante para ser un buen padre? No hay duda de que para ser buenos padres se necesitan muchísimas cualidades: paciencia, ecuanimidad, comprensión, disciplina, flexibilidad, tolerancia y otras tantas. Pero sin duda alguna, la más importante para formar hijos dotados de todas las virtudes y capacidades que les permitan llegar a ser unos buenos seres humanos, es ser padres valientes. Es decir, tener la fortaleza necesaria para hacer lo que más les conviene a los hijos por

¿Cómo podemos saber qué tan buenos padres estamos siendo? Puede uno empezar por hacerse peguntas como: ¿Sabemos nosotros cuál es el mejor amigo de nuestro hijo? ¿Cuál es su personaje favorito? ¿Qué es lo que más le gusta de él mismo? ¿Qué es lo que más le gusta 5

duro que pueda parecernos. Por ejemplo, se necesita mucho valor para no darles nada más de lo que estrictamente se merecen, así nos rueguen y nos enloquezcan. Para no permitirle que vaya a ese paseo, a esa fiesta o a esa discoteca donde no habrá supervisión suficiente para ellos. Lo que más necesitan los hijos no son padres complacientes que estemos dedicados a darles gusto en todo, sino padres valientes capaces de cuestionarnos, de tener la fortaleza para comprometernos tan seria y profundamente en la formación de nuestros hijos, que haremos todo lo que es preciso para formarlos como personas correctas, por difícil o doloroso que pueda resultarnos. ----Entrevista a Ángela Marulanda, autora, educadora familiar y coach en temas relacionados con el fortalecimiento de las relaciones familiares y la formación de los hijos. Puede leer la entrevista completa en www.lafamilia.info

Matrimonio al día

¿Qué aprenden los hijos del

matrimonio de sus padres?

¿Sabías que tus hijos aprenden algo de tu matrimonio todos los días? ¿Sabías que muchas veces esto sucede sin darnos cuenta? Como matrimonio tenemos una gran responsabilidad, no solo para vivirlo bien por justicia al cónyuge, sino también porque el ejemplo arrastra y queremos dejar una huella trascendental en nuestros hijos. Te invito a que te cuestiones si tus hijos tienen el mejor modelo de matrimonio en el tuyo. Iremos explorando como esto afecta directamente en su bienestar. Identifiquemos qué es lo que aprenden de nosotros, muchas veces sin darnos cuenta Lo primero que nuestros hijos

piden –sin saberlo o hacerlo directamente– es estabilidad y seguridad. El matrimonio no es solo vivir bajo el mismo techo, implica aún más. Algunas cosas en las que podemos reflexionar para este tema son: cómo es la convivencia familiar, cómo vivimos el respeto, cómo nos corregimos, cómo nos tratamos el uno al otro, cómo nos pedimos las cosas, cómo vivimos el espíritu de servicio, qué detalles de cariño tenemos, etc. Recuerda que los padres son los referentes más importantes e influyentes para sus hijos y la sociedad. Se ha comprobado que muchas debilidades personales que se manifiestan en la etapa adulta,

tienen origen en la niñez. Los hijos todo lo ven y sienten, aunque no te des cuenta. Todo esto no es para que nos pongamos presión para ser perfectos. No hay matrimonios perfectos. Podemos perfeccionarnos en el arte de tener una relación más estable y unida entre los esposos para que los hijos crezcan en un hogar donde sientan seguridad y protección. Como explica la Dra. Judith P. Siegel, autora del libro Lo que los niños aprenden del matrimonio de sus padres: “la relación de los padres es para los hijos el modelo de todas sus relaciones de intimidad. Los hijos reciben seguridad cuando ven a

sus padres y madres respetarse o, por el contrario, se llenen de miedo y desconfianza ante el amor cuando conviven con padres que no logran amarse y respetarse”. La experiencia vivida en casa puede servir como modelo de inspiración para el propio matrimonio. Cuando en el hogar hay ejemplo de amor entre los esposos, con todo y los conflictos propios de cualquier pareja, pero que logran negociar sus diferencias en un ámbito de respeto, es muy probable que los hijos quieran seguir ese mismo modelo y, por lo general, no se muestren temerosos frente al compromiso ni a las responsabilidades de conformar una familia. Cuando se ha vivido lo contrario, es frecuente encontrar que algu-

nas de las personas que sienten algún rechazo frente a la unión matrimonial, se debe a que su pasado estuvo envuelto en un ambiente donde los padres sostenían una relación con más tintes de hostilidad que de amor, en donde se agredían, se trataban displicentemente entre sí o, lo que es peor, sobrellevaban una vida de maltrato físico y/o psicológico. Los hijos imitan a sus padres y “toman prestada” una manera de hablar, un gesto, una forma de caminar… Pero a diferencia de un juego de roles, estos comportamientos no son imitaciones temporales, sino que se convierten en características o atributos que el niño toma como parte de sí mismo. Por lo tanto, si los hijos observan malas palabras, gritos o

discordia entre sus padres, ¿qué imitarán después? De cara al futuro Si al leer estas letras has pensado que tienes mucho por mejorar, ¡Felicidades! Todos podemos mejorar. Lo que hacemos y dejamos de hacer impacta de una manera u otra en nuestros hijos, y ellos a su vez, impactan su entorno. ¡Hoy es un buen día para recomenzar! ___________ Christianne de Steiner. Máster en Matrimonio y familia.

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Educar en valores

Tratar con cariño y respeto a los mayores

En el amplio campo de la educación, cada vez se hace más necesario crear una cultura de la familia y un nuevo humanismo capaz de promover los valores de la persona. Uno de estos valores básicos es el respeto al otro y más si cabe, el respeto a nuestros mayores. El respeto Es la esencia de las relaciones humanas, de la vida en comunidad, del trabajo en equipo, de la vida conyugal, de cualquier relación interpersonal; es garantía absoluta de transparencia. El respeto crea un ambiente de cordialidad y seguridad; permite la aceptación de las limitaciones ajenas y el reconocimiento de las virtudes de los demás. Evita las ofensas y las ironías; no deja que la violencia se convierta en el medio para imponer criterios. El respeto conoce la autonomía de cada ser humano y acepta el derecho a ser diferente. Tratar con cariño a los mayores Hay que inculcar a nuestros hijos, desde pequeños, un gran cariño y respeto por las personas mayores, sean sus abuelos, vecinos, conocido o desconocidos que se encuentran en la calle. La pérdida de los valores tradicionales hace que cada vez más las personas mayores sean marginadas, e incluso ig-

noradas, dando a entender su aparente inutilidad para una sociedad movida solamente por las prisas, el estrés y los valores materiales. Pero una persona mayor puede aportar experiencia, formación y cultura a los más pequeños. El cariño y el respeto suele tener un efecto “boomerang”: si no lo damos y enseñamos, es difícil que lo obtengamos en el futuro.

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• Ideas para educar en el respeto a los abuelos • Los niños tienen que hablar siempre con respeto a todas las personas mayores, sean o no conocidos. • Deben evitar poner malas caras o hacer gestos des8

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pectivos cuando los mayores les dicen algo, les cuente una historia, les digan algún halago, etc. Corregirles con firmeza cuando hagan críticas despectivas a sus espaldas. Enseñarles a que den siempre las “gracias” y, a la hora de pedir, recordarles también que utilicen siempre “por favor”. Esforzarse por ser comprensivos. Hay que enseñarles a que admitan con buena cara las pequeñas manías que puedan tener sus abuelos u otras personas mayores. Aprender a escuchar a los mayores. Da lo mismo que

la historia la haya contado anteriormente. La felicidad que para ellos supone tener un público atento merece la pena. • Estar muy pendientes de cuando necesitan ayuda: leer una letra demasiado pequeña para ellos, recogerles algo que se les ha caído al suelo, traerles un vaso de agua, etc. • No permitir que les ignoren, por ejemplo, cuando vienen a casa, y los niños se ponen a ver la televisión, jugar con los videojuegos o simplemente desaparecen. • Es bueno que una vez a la semana los niños llamen a los abuelos no sólo para contarles sus cosas, sino para interesarse por las de ellos, escuchando con paciencia y mostrando interés. Consejos para tratar a las personas mayores con respeto • Si estamos esperando en un paso peatonal para cruzar y tenemos a una persona mayor junto a nosotros podemos preguntarle si quiere que le ayudemos a cruzar la calle. Estas pequeñas manifestaciones de cariño son las que más adelante “copiarán” nuestros hijos, aunque no estemos viéndoles. • Cuando vayamos en el transporte público, aunque estén muy cansados o cargados con las mochilas del colegio, debemos enseñar a los niños que siempre deben ceder el sitio a las personas mayores, insistiendo con cariño y buena cara. • Al entrar en un supermercado, en cualquier edificio, etc., deben sujetar la puerta para facilitarles el paso. Además de una manifestación de respeto hacia ellos, es un modo de favorecer la convivencia entre quienes nos rodean. --www.hacerfamilia.com

Hay que inculcar a nuestros hijos, desde pequeños, un gran cariño y respeto por las personas mayores, sean sus abuelos, vecinos, conocido o desconocidos que se encuentran en la calle. 9

El arte de educar No importa lo que haga, no importa donde esté, tú siempre serás la base de todo. Pero necesito crecer, mamá, es hora de que me vaya. Tal vez tardes en entender, tal vez llores incontables noches al ver el nido vacío, tal vez me llames con esa voz embargada, dolida, de quien guarda un mundo de nostalgia en un nudo en la garganta, pero mamá, me tengo que ir. Tengo que aprender a separar la ropa por colores a la hora de lavar, tengo que descubrir que si no lavo los platos se quedarán en el fregadero hasta el día siguiente, que el olor de la bañera limpia es bueno, principalmente cuando yo la limpié.

Mamá, me tengo que ir... Tengo que aprender a cocinar más allá de los macarrones con salchicha, cuento con que internet me ayudará con eso. Tengo que aprender que mi sueldo necesita durarme 30 días y que bailar y tomar cerveza no son las necesidades más básicas. Tengo que sentirme solo, tengo que decirle a los demás “mi mamá siempre dice que…” y sentir orgullo de los innumerables consejos que me has dado en la vida y no siempre valoré mucho. Tengo que identificar las malas amistades, algo que hacías antes tú por mí, tengo que ser fuerte y aguantarme ese insulto que mi jefe se merecía, pero

me enseñaste que un profesional serio no se descontrola tan fácilmente. Tengo que crear mis propios rituales de sábado por la tarde, que antes eran hacer pasteles y bailar locamente en la cocina contigo. Tengo que quitarme el pijama los domingos, hacer la comida, hacer la cena y no simplemente leer un libro mientras espero que tú lo hagas todo por mí. Tengo que ver esa película increíble sin compañía y no tener a nadie con quién llorar tímidamente conmigo, tengo que sentir la falta del abrazo que era la fortaleza que necesitaba en un mal día, y la sinceridad que me enseñaba a ser un ser humano mejor todos los días.

Pero no pienses que es fácil para mí, me va a doler todos los días de mi vida no regresar a casa y ver tu sonrisa tranquila, poder contarte cada detalle del día y no sentir una mínima señal de aburrimiento en tu rostro. Voy a sentir añoranza incluso cuando tenga dos hijos, incluso cuando tenga ochenta años, incluso si escribiera el mejor libro de la historia. Necesito irme, mamá, pero te llevo siempre conmigo. _____ Este artículo de Samanta Selzler, publicado originalmente en la revista Obvious, ha sido traducido y adaptado del portugués para los lectores de Aleteia en español.

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Economía familiar

Las fiestas de familia como cumpleaños, Día de la Madre, Día del Padre, etc. son oportunidades para festejar y fomentar la convivencia familiar. Cada celebración, por pequeña que sea, conlleva un gasto que, si no se planifica correctamente, puede afectar las finanzas del hogar, sobre todo si decidimos salir a comer fuera de casa. Lo cierto es que hay muchas formas alternativas de hacerlo de manera poco costosa o incluso gratuita, donde toda la familia pueda disfrutar.

Cómo celebrar grandes fiestas en familia y con bajo presupuesto Celebraciones de bajo costo Consentir al festejado es la clave y esto no implica grandes gastos si se observan algunas reglas sencillas: • Niño o adulto, todos tenemos preferencias, por lo

Comprar un regalo debería exigir una planificación cuidadosa si no queremos afectar nuestro bolsillo. Dejarlo para última hora implicará probablemente comprar por impulso y a alto costo.

que pensar ¿qué le gusta? unido a ¿qué necesita? es primordial. Si es hogareño se le puede mimar desde el desayuno hasta la cena preparándole sus platos y postres favoritos, poniéndole su música favorita, etc. Esta es la opción más económica realmente ya que, aunque su plato preferido sea caro, siempre saldrá más barato prepararlo en casa. • Si le gusta salir conviene fijar de antemano un límite de gasto y en base al número de asistentes, cotizar lugares que se ajusten a lo presupuestado. • Un paseo a sitios que le agraden al festejado es una buena opción de celebración: un parque preferido si es un niño, donde se pueda compartir en familia su postre favorito; un paseo especial interesante, si es un adulto que le encante hacer turismo o visitar museos, por ejemplo. E incluso, parte del regalo puede ser una entrada al cine, a un concierto, etc. ¿Cuánto gastar en el regalo? Comprar un regalo debería exigir una planificación cuidadosa si no queremos afectar nuestro bolsillo. Dejarlo para última hora implicará probablemente comprar por impulso y a alto costo.

En una familia suelen haber celebraciones frecuentes y no sólo los del núcleo familiar, como abuelos, tíos, primos, etc. Si bien algunas no conllevan gastos de festejo si, seguramente, implicarán compra de regalo. Si esto sucede con frecuencia en nuestra familia, conviene entonces fijar, en nuestro presupuesto general, una cantidad destinada a regalos, poniendo un límite de acuerdo a nuestras posibilidades. El mejor regalo es el que toma en cuenta los gustos y las necesidades del festejado. Toda elección contraria a esta regla probablemente terminará situando nuestro obsequio –y nuestro dinero- en la esquina de una gaveta. Recordemos que lo más importante de todo es la demostración de cariño, no cuánto costó. Un regalo significativo es la combinación perfecta de costo razonable y creatividad, así es que un regalo y una celebración no tiene por qué afectar nuestras finanzas. Regalos para padres, ideas para los hijos Si el festejado es el padre o madre de familia valdría la pena acompañar el regalo con una artesanía infantil o una tarjeta con frases cariñosas. Eso duplica el valor de cualquier obsequio… Y si las frases cariñosas van acompañadas de “vales” canjeables por tareas del hogar, seguro que el regalo será

éxito total. Esto funciona especialmente cuando los hijos son grandes, pero aún no trabajan. Regalarle a papá un vale para lavarle el carro o a mamá uno para lavarle los platos durante 15

algunos días, no implica costo y sí mucho cariño. ___ Margarita de Jiménez. Asesora familiar.

Empleados de calidad

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Situaciones familiares

5 hechos que delatan que eres madre de 3 hijos o más

“Nada será igual” te dicen cuando eres primeriza, y tienen razón. Y si decides tener una familia numerosa, ni un día es igual al anterior. Cada hijo trae novedades a nuestra vida personal y familiar. Y aunque todo cambia, hay ciertos hechos que dejan en evidencia tu condición de madre de muchos hijos, acá les comparto algunos: 1. El “orden” es ahora relativo. Aunque es importante enseñar a nuestros hijos el orden y a trabajar en equipo para lograrlo, es inevitable el caos de vez en cuando y tu nivel de tolerancia hacia ese punto específico llega a variar con los años y los hijos. Si antes te estresaban los juguetes revueltos, llega un momento en que te basta que no salgan de cierto perímetro (cuarto de juegos, por ejemplo), o al menos llegar a casa y no tropezar con uno inmediatamente. 2. Entre tu ropa de diario no puedes evitar tener o usar alguna prenda de maternidad. Seamos honestas, nuestro cuerpo es de lo que más cambia con cada hijo y, aunque busquemos estar en forma y volver a usar esos jeans que nos gustaban tanto, estará siempre ese pantalón cómodo o esa blusa fresca a la mano.

3. La frase “si no puedes vencerlos, úneteles” tiene cada día más sentido. Y es que llega un momento del día, justo antes de la rutina de la pijama, en que los niños tienen ese último chispazo de energía, que regularmente es muy intenso. Y mientras más niños, más descontrol hay; peor cuando el juego favorito es el de luchas (que es mi caso). Entre patadas y saltos mortales apenas puedo separar a dos, mientras el otro se escabulle entre las almohadas… Llega un punto en que es más fácil acelerar el proceso siendo parte de las luchas, en lugar de seguir buscando la cordura. 4. Un hijo = tres maletas para 18

salir; 3 o más = una mochila pequeña que el hijo mayor carga en su espalda. Esto es un hecho que parece ilógico, pero es que con cada hijo nos hacemos más prácticas y relajadas al salir de casa; y también ocurrentes para solventar cualquier eventualidad que la bolsa de uno y dos nos resolviera al principio. 5. Si al llamar a alguno de tus hijos para regañarlo… recitas todos los otros nombres, antes de llegar al correcto, no te preocupes que sólo el tono de la voz hará que el niño indicado sepa que él es el buscado ---Beatriz Cordero de Echeverría, mamá bloguera con estudios en Educación familiar.

Equilibrio familia-trabajo

Consejos para que la familia funcione cuando papá y mamá trabajan

fuera de casa

Cuando los dos padres trabajan, encontrar tiempo y ganas para dedicar a los hijos en casa después de una jornada laboral agotadora, no es fácil. La educación de los hijos requiere de mucha energía y los padres pueden llegar a sentir que no llegan a todo. Esta situación, puede llegar a ser muy estresante para los padres y tener un impacto negativo en los niños. Los pequeños necesitan estar con sus padres, comunicarse con ellos y sentirse queridos y éstos cada vez trabajan más horas y llegan a casas cansados. ¿Cómo poder entonces conciliar estas dos situaciones? 1. Estar presente. La mejor manera de construir una vida familiar armoniosa es estar presente cuando estás en casa.

Deja la s preocupaciones del día en la puerta y entra en casa con la intención de centrarte en los niños. Cenar juntos todos los días y establecer una rutina para dormir a los niños, puede ayudar a reforzar lo mucho que les amas y les cuidas. 2. Haz del tiempo en familia una prioridad. Crea reglas para evitar traer trabajo a casa. Si debes trabajar en casa, hazlo después de que los niños se hayan ido a la cama. Programa una noche en familia, una vez a la semana, para hacer actividades juntos. Intenta compensar de manera positiva los sentimientos negativos que pueden experimentar los niños mientras estás fuera en el trabajo. 3. Crea tiempo de calidad. Cuando los niños son pequeños, las horas entre la vuelta a casa y su momento de dormir, juegan un papel importante. Aprovecha al máximo el tiempo que tienes con los niños, apaga la 20 20

tecnología y haz que se sientan como si fueran tu única prioridad después del trabajo. Los niños no entienden la diferencia entre la calidad y la cantidad de tiempo cuando son pequeños, así que es importante hacer todo el tiempo que pasan juntos tiempo de calidad. Crea una atmósfera de amor y explica el papel de cada uno en la familia: “para mamá y papá, uno de esos papeles es ganar un sustento para la familia”, etc. 4. Ayuda e interésate por sus deberes escolares. Cuando los niños son pequeños, todavía no existe riesgo si no cuentan con la supervisión de un adulto después de la escuela. En cambio, a medida que van creciendo, los niños con dos padres que trabajan, pueden sufrir cuando llegue el momento si no tienen la ayuda que necesitan para hacer sus deberes o dirigirles en el estudio. Cuando ambos padres trabajan, conviene poner en marcha un plan para ayudar a los hijos en sus deberes con un profesor particular o un familiar. 5. Oportunidades y beneficios. El aumento de los ingresos generados por los dos padres que trabajan puede crear oportunidades adicionales para los niños, que de otro modo no sería posible. Viajar en familia, recibir clases de arte o música, o incluso asistir a escuelas privadas puede ser un beneficio para los niños que tienen a ambos padres trabajando. Los niños con padres trabajadores también están expuestos a otros entornos sociales que pueden despertar el desarrollo emocional y social. Además, aprenden a una edad temprana que otros adultos pueden cuidar de ellos y satisfacer sus necesidades. ___ www.lafamilia.info

Cenar juntos todos los días y establecer una rutina para dormir a los niños puede ayudar a reforzar lo mucho que les amas y les cuidas. 21

Decoración

Aquí el dicho “cada familia es un mundo” cae como anillo al dedo. El dormitorio de mamá y papá, suele ser centro de reunión de los hijos, ¡es tan rico estar allí! Por ello debe ser funcional y acogedor. En cuanto a la decoración se refiere, lo primero de nos tenemos que plantear es que sea un lugar de descanso, un espacio de paz y armonía. La elaboración de un esquema de orden y funcionabilidad donde todos se sientan bienvenidos es de suma importancia. ¿Cómo ordenar nuestros espacios en el dormitorio principal? Lo primero es definir la funcionabilidad del cuarto de acuerdo a las necesidades de la familia, aquí el dicho “cada familia es un mundo” cae como anillo al dedo. En lo posible es necesario no tener nada de trabajo en un dormitorio, pero cada día los espacios se han vuelto más reducidos y la multi función de los espacios es una realidad. Si hay necesidad de un lugar de estudio o trabajo, es imperante tener una mesa del tamaño que

La habitación más cálida de la casa: ¡la de mamá y papá! facilite el flujo de la habitación y adecuarnos a la disponibilidad del espacio. No hay excusa que valga, el desafío es lograr que la habitación sirva para descanso y estudio/trabajo, el aprovechamiento del espacio dependerá de nuestra capacidad de orden. ¿Y cómo logramos ese orden? Elaborando un plan de acción que determine las limitantes del espacio y una solución a nuestras necesidades. Una vez establecido este plan, la ejecución del mismo se logrará con un protocolo de mantenimiento que va a seguir las siguientes premisas. 1. Identifique las necesidades a cubrir: descanso, ver TV, estudio, trabajo, guardar ropa, etc. 2. Designe un lugar a los muebles con que cuenta e identifique su función y cómo le resuelve sus necesidades. Partamos de la premisa que todo tiene que tener un lugar asignado. 3. Procure que todo regrese a su lugar. Por ejemplo, una vez asignado el lugar del control de la TV este debe regresarse al sitio establecido una vez ya no esté en uso la TV. 4. No compre nada que no necesite, evite la acumulación. A veces lograr esta tarea se vuelve cuesta arriba pues el 22 22

consumismo nos ha llevado a comprar tantas cosas innecesarias que nos llevan a la acumulación y desorden. 5. Utilice al máximo lo que ya tiene. Decoración He aquí algunas recomendaciones básicas para la decoración de la habitación de los papis, que tiene que ser un remanso donde todos se sientan bienvenidos. • Si hay TV céntrela con la cama o la silla que se utilice para ver TV. • Procure colocar mesas de noche con lamparas que tengan luz que inviten a la lectura y al relajamiento. • Un ventilador siempre refresca los dormitorios y hace los ambientes más agradables. • Las cortinas deben ser de acuerdo al gusto de las personas que lo habitan, la luz que da a la habitación y la tolerancia a la luz de sus ocupantes cuando descansan. De preferencia me gustan los rollitos de black out pues dan privacidad y oscuridad, pero las de tela también son muy lindas y accesibles, todo dependerá de su presupuesto y necesidades. Trate de encontrar un balance entre presupuesto y necesidad. Con relación al color siempre me

inclino por colores claros, pues siempre tienden a darnos serenidad para un lugar de descanso como lo es un dormitorio. • Deshágase de lo innecesario y lo que ya no ocupa. • En nuestro medio se recomienda utilizar ropa de cama ligera y de fácil lavado, colores neutros y unisex son los mas indicados para un cuarto de papá y mamá. La gama de azules, grises, beige son una buena opción. En lo personal evito usar los estampados.

Sé que el papel aguanta todo y que dirán es fácil decirlo, pero lograrlo es súper difícil. Siga las instrucciones que le doy, son concretas y fáciles de implementar, una vez logrados estos pasos, notarán como todo fluye y la habitación se vuelve más ligera y funcional. Como en todo, nuestra entrega a lograr un remanso consistirá en nuestro espíritu de servicio y una determinación a la limpieza y el orden. _______ Una colaboración de Sara de Sol. Decoradora de interiores.

Manteniendo arreglada la habitación • Cambie sábanas por lo menos una vez por semana • Arregle la cama al levantarse • Asigne un día especifico a la semana para guardar la ropa limpia. • Trate de guardar en el acto, o lo más pronto posible, la ropa que se probó y no le gustó. Evite dejarla sobre sillas, mesas o la cama, si no tiene tiempo en ese momento, hágalo lo más pronto posible. • Guarde los zapatos en la zapatera. • Coloque la ropa sucia en su lugar y establezca un horario de lavado y cúmplalo. • Respete e identifique las necesidades de la persona con quien comparte la habitación, y búsquele solución a sus necesidades de acuerdo con el espacio. 23 23

Al día “Madre no hay sino una… Padre es cualquiera”. Más de una vez hemos oído este tipo de comentarios, pero es la hora de acabar con esta falsa idea: ¡el papel del padre es irreemplazable! Se celebra el Día del Padre durante este mes, queremos resaltar la importancia de la figura paterna en la vida de los hijos

Padre no es cualquiera porque papá es papá y mamá es mamá, un hijo necesita tanto del uno como del otro; estas son sólo cuatro razones que así lo aseguran: 1. El papá es el modelo masculino. Tanto del hijo como de la hija. El experto en educación y asesoría familiar, Álvaro Sierra, lo explica así: “Papá aporta en casa una

visión masculina de la persona, de la familia y de la sociedad. (…) Una mujer es más mujer cuando ha visto a su papá en casa y un hombre tiene más claro lo que es ser hombre cuando ha crecido junto a su padre. La condición masculina es clave en lo psíquico de los hijos”.

Asimismo, la Dra. Meg Meeker, autora del libro “Padres fuertes, hijas felices”, asegura que los padres tienen un poder tremendo sobre las hijas: “El padre, de hecho, es el primer amor de su hija. Es el hombre más importante de su vida. Sus interacciones con ella la preparan para relacionarse con todos los demás hombres. Es una carga pesada, pero una verdad maravillosa. Si ella aprende a querer al padre y puede confiar en él, le será mucho más fácil confiar en su esposo”. Y en el caso del hijo, el papá no se queda atrás. María Calvo Charro, profesora y escritora de “Padres destronados” resalta que el niño necesita un modelo de masculinidad adecuada: “Se ha demostrado que cuando éste falta, los niños tienden curiosamente a radicalizar los estereotipos machistas, a tener una masculinidad exagerada. No saben comportarse como chicos y entonces, para reafirmarse, tienden a actitudes muy machistas, exacerbadas, radicalizadas”. 2. El padre equilibra la educación de la madre. María Calvo explica que el papá es el que equilibra el amor maternal: “Un padre es necesario porque todas las virtudes de una madre en la educación del hijo pueden convertirse en un defecto si no hay un padre que las equilibre. Ella posee una tendencia natural a darlo todo por el hijo, que 24 24

es una especie de apéndice suyo, y en ese amor desmesurado que le profesa tiende a evitarle el esfuerzo, el sacrificio, el sufrimiento”. 3. El papá es el sustento de la autoridad en el hogar. “El papá no es el único que ejerce la autoridad, pero protege la autoridad de la madre” señala el Dr. Sierra y añade: “Papá es la persona que estructura los tiempos familiares; pone el ritmo de la vida familiar y da las pautas de maduración de los hijos. Papá tiene la capacidad de hacer sentir a un hijo mayor y responsable, como por ejemplo cuando dice `te dejo encargado de esto...´.

Quiere decir esto que la actuación del padre en la vida familiar, es esencial y determina en gran medida, muchos aspectos de la vida de los hijos. Por lo tanto, la paternidad no compite con la maternidad, sino que la complementa”. 4. El papá le muestra el mundo real al hijo. La Dra. Calvo manifiesta que el padre tiene un papel fundamental en mostrarle el mundo al hijo: “El papá le muestra al hijo el mundo de lo público, de lo profesional, el del sufrimiento, la exigencia y la fortaleza. El amor de madre suele ser más físico, más proteccionista, más sustitutivo: si el hijo no sabe o 25

tarda en amarrarse los zapatos, la madre lo hace. La actitud del padre es la contraria: le anima a hacerlo él solo, lo cual le genera una mayor autonomía y una personalidad más fuerte”. Por estas y muchas razones más, el padre no puede ser reemplazado ni siquiera por la madre, tanto así que por más grande y generoso que pueda ser el amor materno, nunca logrará llenar el vacío que deja el padre cuando se ausenta. ¡Feliz día a todos los papás, tienen una labor retadora, hermosa y única! ______________ www.lafamilia.info

Psicología familiar

¿Quieres hijos con autoestima? ¡Sé un padre con autoestima!

La autoestima es la valoración positiva o negativa que una persona hace de sí misma en función de los pensamientos, sentimientos y experiencias que esa persona vive. Padres y madres sabemos que la autoestima de nuestros hijos influye mucho en su comportamiento, pero muchas veces no sabemos qué hacer ni qué decir para lograr que su autoestima sea positiva. Achacamos a la baja autoestima las dificultades que puedan presentar nuestros hijos y puede que sea cierto, pero también es cierto que en la infancia y adolescencia es fácil tener problemas con la autoestima. Nuestros hijos están en “construcción” y eso significa que necesitan vivir, necesitan tener experiencias para ir forjando su personalidad y también su autoestima y, de nuevo, aquí los padres tenemos un papel importantísimo que desarrollar: somos proveedores de autoestima. Te ofrecemos diferentes opciones para esos eventos especiales: Cumpleaños, Bodas, Bautizos, Primera Comunion, Reuniones, Coffee Breaks, Conferencias, y otras ones celebraciones

Algunos d de nuestros Productos: Pasteles Pastel de Sorbete Pies Tortas de frutas Cardenales Cupcakes Chessecake Tartaletas Alfajores Macaroons 4 Leches

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¿Quieres hijos con autoestima positiva? Lo que tú trasmites a tus hijos, con tus palabras, con tus actitudes, con tu comportamiento, con tus expectativas, con tus gestos va a ser fundamental en la formación de su autoestima. Esta tarea de ayudar a nuestros hijos a configurar su autoestima requiere de paciencia y de mucha constancia, pues esta tarea de construirse como persona requiere su tiempo.

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¿Cómo ayudar a los hijos para que sean capaces de ir mejorando su autoestima? 1. Tus hijos necesitan sentir que son aceptados incondicionalmente. Trasmitirles a nues-

tros hijos que los queremos, que los aceptamos como son es la base. Aceptar a alguien incondicionalmente no significa que les dejemos hacer lo que quieran hacer, es más, porque los aceptamos tal y como son es por lo que les ponemos normas y límites. No los queremos porque aprueban, recojan, obedezcan, los queremos porque son nuestros hijos y cuando reprueban, no recogen o desobedecen simplemente aplicamos consecuencias. 2. Nuestros hijos necesitan que valoremos objetivamente aquello que hacen. Esto quiere decir que cuando educamos hijos no podemos dejar que las normas y límites que les proponemos sean más o menos flexibles en función de que nosotros estemos más contentos, enfadados, cansados, etc. Romper un vaso de vidrio en un ataque de rabia requiere una respuesta más seria que la de romper, sin querer, un valioso jarrón. Eso es valorar objetivamente. 3. Necesitan autonomía. Ser capaces progresivamente de ir tomando las riendas de su vida, para tener autonomía hay que dar responsabilidades a nuestros hijos. Desde pequeños tienen que tener responsabilidades y posibilidades de tomar decisiones acordes a su edad. Los educamos para que vuelen. 4. Necesitan tener experiencias de éxito. Todos los niños tiene que tener experiencias de éxito (una experiencia de éxito es aquella en la que nuestro hijo o hija hace algo que sabe hacer y las debemos de resaltar, para que cuando digan eso de “yo no sé hacer eso” les diga-

mos, mira hijo, tú sabes hacer tal cosa y si sabes hacer eso puedes intentar hacer esto otro), pero ojo, tus hijos no son perfectos, así que también deben de tener experiencias de fracaso, esto los hará más realistas y entenderán cómo se siente uno cuando las cosas no te salen como esperabas. 5. Necesitan confianza, sentirse mal en la infancia o en la adolescencia es algo normal, al igual que equivocarse y cometer errores. Los niños y adolescentes llevan mal eso de equivocarse, para eso estamos los padres para corregir los errores y mientras corregimos les hacemos ver que confiamos en ellos. Errar, corregir y confiar. Por último, lo que necesitan es que su padre y su madre actúen como padres con autoestima po-

sitiva, padres que confían en su competencia como educadores, padres sin prisas, padres sistemáticos, padres que guían, padres orgullosos de sus hijos, padres que confían en sus hijos. _____ blogs.hoy.es/escuela-de-padres

Lo que tú trasmites a tus hijos con tus palabras y con tus actitudes va a ser fundamental en la formación de su autoestima.

Gotitas de educación

¿Y si no nos quejáramos tanto?

¿Para qué sirve quejarse? La verdad es que nos quejamos demasiado y conste que esto no es una queja. Gastamos demasiada energía en lamentos, reproches y protestas porque nos parece que de esa forma quedamos justificados. Pero el derecho a la pataleta sirve, como mucho, para desahogarnos, aunque no consigue otra cosa que gastar energía en algo totalmente inútil. La queja, esa que articulamos de manera automática porque hace calor o hace frío, porque brilla el sol o llueve, porque tenemos que ir o venir, porque el sistema va lento o se nos ha acabado la batería del celular, porque es lunes, etc., etc., esa queja, que se nos ha pegado como una muletilla, tiene todos los ingredientes para ponernos de mal humor, para agriar nuestro carácter y para hacernos, en fin, desdichados. ¿Que pasaría si no nos quejáramos tanto? Probablemente no nos reconoceríamos a nosotros mismos.

¿Y qué más? Eso quiso saber, Leah Shapiro (del grupo americano de rock alternativo Black Rebel Motorcycle Club, BRMC), quien junto a mil personas más se comprometieron a estar un mes entero sin quejarse. El proyecto de control de quejas (Complaint Restraint Project) dio resultado: las personas que lograron desterrar las quejas echaron fuera de su mente los pensamientos negativos, con lo que, afirman, fueron más felices.

Estar un mes sin quejarse, no es nada fácil, porque sin darnos cuenta hemos hecho de la queja un hábito fuertemente arraigado que nos aporta algunos beneficios, como mantenernos en guardia ante las amenazas, pero que también nos puede pasar cuenta con un excesivo estrés. El quejarse tiene un efecto semejante al de un cigarrillo para el fumador: parece que le tranquiliza porque parte de un

estado de estrés generado por el mismo hecho de fumar o de quejarse.

mos unos quejicas o no. Si lo somos, no nos extrañe que nuestros hijos se quejen. 3. Huir de los quejicas. La queja es un tóxico. Evitemos a las personas que están todo el día quejándose, de lo contrario acabaremos siendo, como mínimo, quejicas pasivos. 4. Traduzcamos las quejas en soluciones. Si hace frío, abriguémonos más. Enseñemos a usar las quejas efectivas, es decir, que cada queja vaya acompañada de una solución. 5. Usemos el “pero” positivo. Si no podemos evitar quejarnos, si se nos escapa una queja, añadamos enseguida un “pero” que neutralice lo

¿Eres consciente de tus propias quejas? Probemos, no un mes, sino un solo día sin quejarnos y nos daremos cuenta, en primer lugar, de lo difícil que es, y después de los beneficios que comporta. Quizá lo primero que notemos sea que no hay conversación que no se sostenga a base de quejas y más quejas, casi todas totalmente inocuas y estructurales, pero que contaminan el ambiente y que nos hacen ser quejicas pasivos, como somos fumadores pasivos si compartimos habitación con quien fuma. Consejos para quejarse menos Los creadores del proyecto de control de quejas propusieron algunas acciones para poder estar un mes sin quejarse, recomendaciones que podríamos poner en práctica: 1. Definir queja. No es una observación sobre la realidad (“hace frío”, “llueve”), sino un comentario que nos hace sentirnos superados por esa realidad que no podemos cambiar (“odio el frío/la lluvia, no se puede salir de casa”). Es bueno que enseñemos a nuestros hijos a hacer esta diferencia. 2. Hacer un listado de las cosas de las que nos quejamos y la frecuencia con que lo hacemos. Así seremos conscientes de si so29

negativo. “Odio las espinacas, pero tienen mucho hierro”. 6. Cambiemos el “tengo que” por el “voy a”. En vez de “tengo que sacar la basura”, “voy a sacar la basura”; en vez de “tengo que hacer los deberes”, “voy a hacer los deberes”. De ese modo, eliminamos una obligación y la transformamos en disposición para la acción. Leah Shapiro consiguió estar un mes sin quejarse. Según confiesa, valió la pena: aumentó su productividad y fue más feliz. ¿Seríamos capaces de estar un mes sin quejarnos? ____ www.solohijos.com

Educando adolescentes Una de las características más significativas en la adolescencia es el desbordamiento de la afectividad que lleva a constantes cambios de humor, falta de motivación, etc. Es fundamental, a esta edad, la existencia de un horario y unas aficiones para “templar” ese desbordamiento de lo afectivo. Efectivamente un horario estable y unas aficiones que llenen el tiempo libre (y nuestros hijos tienen mucho), ayudan a superar con éxito la etapa de la adolescencia y además crean hábitos que ayudarán en la ma-

Despertar aficiones en los adolescentes duración personal y a disfrutar de la vida. Pasar el tiempo, empezar algo y no acabarlo, pasarse el día tumbado, etc. genera una tendencia a la desmotivación y al abandono personal. Por el contrario, la exigencia cariñosa de los padres, la existencia de un horario, el fomento de aficiones, etc… ayuda a nuestros hijos a estar “tensos” y a “vivir” la vida y no simplemente “pasarla”, a estar motivados. ¿Qué aficiones fomentar? Qué duda cabe que cada uno

tiene sus intereses y gustos, pero difícilmente podremos despertar aficiones si nosotros, los padres, no las tenemos y nos limitamos a “pasar” el tiempo. Posible aficiones e intereses a fomentar: • Lectura. La lectura forma o deforma, no existe una literatura neutra. Es necesario seleccionar lo que se lee (y no solo para nuestros hijos sino también nosotros). En estas edades es muy interesante que lean biografías de personas que han hecho algo por la humanidad, aventuras, etc.

• Deportes. El deporte, además de ayudar a mantener en forma el cuerpo es una válvula de escape para las presiones internas y una escuela de convivencia. Además, tiene la ventaja de que se puede practicar en familia (tenis, baloncesto, etc.) • Solidaridad y ayuda en casa. Las aficiones no deben ser consideradas únicamente como algo para divertirse y pasarlo bien. Las aficiones forjan el carácter y en este sentido las actividades de ayuda hacen que los “problemas” de la persona se pongan en su sitio ante las necesidades de los demás. Ayudar a otros “descomplica” la cabeza y, teniendo en cuenta que la mayoría de los problemas están en la imaginación y que el aburrimiento los aumenta, la ayuda a los demás a quién primero beneficia es a quien lo hace. • Amor a la naturaleza. Las salidas al campo o a la montaña son una escuela de virtudes. Allí se aprende a pasar frío, calor, cansancio, sed, etc. y

se puede aprender a “perder el tiempo” observando la naturaleza. Observar la naturaleza acerca a Dios de la misma manera que ayudar al que lo necesita. El tiempo libre y las aficiones ayudan al hombre a acercarse a Dios. • Juegos de mesa, familiares o en solitario. Monopolio, Trivial, Notenojes, cartas y muchos más juegos pueden llenar una tarde en familia. Además de pasar un rato muy agradable se puede observar a los hijos y ayudarles a saber perder y a tener paciencia. • Cine y televisión selectivos. Ni el cine ni la televisión son neutros. Las imágenes y frases cortas dichas por personajes admirados marcan la conducta de las personas. A veces no somos conscientes del daño que una imagen, una actitud o un comentario pueden hacer en una mente en proceso de maduración. Las clasificaciones de las películas y programas que ofrecen los periódicos no son en absoluto fiables, hay que 31

acudir a fuentes honestas. Es estupendo ver películas con ellos, de esa manera surgen temas de conversación y podemos ayudarles a formar criterio y a ser críticos. • Visitas culturales, museos, pueblos, etc. No tiremos la toalla. A estas edades es posible realizar salidas con los hijos. Hay que dejarles participar en la elección del lugar, el viaje, la comida, invitar a algunos amigos, etc. • Idiomas. El estudio de idiomas también puede ser una buena manera de aprovechar el tiempo libre. Bien en academias o por medios audiovisuales en casa, por cierto, también los padres podríamos aprovechar para hacerlo con ellos. Recuerda: Cuanto más hacen, llegan a más. Cuanto menos, menos fuerza de voluntad, más pereza, menos orden, más pérdida de tiempo. _____ www.anibalcuevas.com

Consejos médicos

La importancia de los exámenes médicos preventivos

Día a día vamos siendo más conscientes de la importancia que tiene la prevención en los motivos de salud ya que, en muchas ocasiones, si se padece alguna patología o enfermedad, es más fácil extinguirla o curarla en sus fases iniciales; es por esto, que es tan importante diagnosticarla en sus comienzos a traves chequeos médicos. Es importante realizarse exámenes médicos si tenemos antecedentes familiares de enfermedades crónicas o cualquier tipo de enfermedad hereditaria genética, además si sufrimos algún tipo de factor de riesgo laboral como pueden ser los trabajos con productos tóxicos. ¿Cuándo me lo debo realizar? Es importante que si estás interesado en realizarte un chequeo médico consúltalo primero con tu médico de familia, para que te asesore sobre cuál es el que mejor se adapte a ti. La edad influye, por ejemplo, una persona de 20 años no necesitará las mismas pruebas que una persona de 50. De la misma forma, una persona que trabaje en una

oficina no tendrá las mismas necesidades físicas que una persona que esté expuesta a una gran carga de trabajo físico. Un chequeo médico general, recomendable a partir de los 30 años, incluye análisis sanguíneos y de orina, para controlar el buen funcionamiento del organismo. Los análisis sanguíneos controlarán los niveles de colesterol y, en el caso de que sea positivo, se

deberá llevar una dieta sana y equilibrada, para bajar los valores del mismo. La frecuencia aconsejable del chequeo médico debe ser anual o bianual, de esta forma podremos saber cómo nos encontramos de salud. En mujeres • Chequeo ginecológico: Consiste en la revisión de mamas, útero y ovarios una

vez al año, salvo criterio médico contrario. • Mamografía, el método más eficaz para la detección de cáncer de mama, se hace anualmente después de los 40 años. En hombres y mujeres Después de los 30 años • Chequeos clínicos. Consulta con control de peso y presión arterial y algunos estudios mínimos como análisis de sangre, radiografía de tórax y electrocardiograma. • Análisis de sangre. Permite detectar anemia, alteraciones de los lípidos (colesterol y triglicéridos), alteraciones de la glucemia (azúcar en sangre), etc. • Electrocardiograma (ECG). Se emplea para medir cualquier daño del corazón, qué tan rápido está palpitando y si lo está haciendo normalmente. Después de los 50 años • Prueba de densidad ósea. En las mujeres después de la menopausia es importante su detección precoz, ya que es una enfermedad tratable, evitando así el riesgo de fractura. • Es fundamental realizar algún estudio preventivo de cáncer de colon. • En el hombre es muy importante la consulta urológica si hubiera antecedentes de cáncer de próstata en la familia. • Después de los 65 años es importante descartar, mediante una ecografía, la presencia o no de aneurismas de la aorta abdominal. • Consultas oftalmológicas: Además de la evaluación de la agudeza visual, es útil para la medición de la presión ocular en el diagnóstico precoz del

glaucoma (presión ocular aumentada dentro del ojo), esto se hace imprescindible cuando hay antecedentes familiares de glaucoma. Esta simple conducta preventiva puede evitar la pérdida de visión.

• Exámenes de la piel, para la detección temprana del cáncer de piel, también son importantes.

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Dr. Oscar Pérez Quintanilla Cirujano Plástico

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Cocina familiar

Arroz a la griega (PORCIONES: 10)

Ingredientes: 1 Lb. de arroz 1/3 taza de aceite 1 cebolla cortada en cuadritos 1 ajo grande picado 1 taza de chile verde cortado en cuadritos 1 taza de tomate pelado sin semilla cortado en cuadritos 1 taza de lechuga cortada ½ lb. de chorizo cortado en cubos 1 taza de pasas ½ taza de maní 1 lata de arvejas 4 tazas de caldo de pollo Sal y pimienta al gusto. Preparación: 1. Sofreír en el aceite cebolla, ajo, chiles, chorizos, tomates, pasas, maní y arvejas, durante tres minutos. Luego agregar el arroz y seguir sofriendo durante otros tres minutos. 2. Incorporar el caldo y esperar que hierba, aproximadamente dos minutos. Agregar la sal y bajar el fuego al nivel más bajo. Taparlo por 25 minutos aproximadamente.

Chuletas a la manzana PORCIONES: 10

Ingredientes: 10 chuletas de cerdo ahumado 1 cucharada de sal 1/8 tz de caldo de pollo 1/8 tz de salsa de soya 1/8 tz de vinagre Ingredientes para la salsa: 1 cda de maicena 1 ½ cda de jengibre picado 3 tzs de jugo de manzana 3 manzanas rojas partidas en dados grandes 1½ oz de mantequilla. Preparación: 1. Sellar las chuletas, en sartén, por ambos lados. Salpimentar y agregar el caldo de pollo, salsa de soya y el vinagre. 2. Poner a hornear por veinte minutos a 350° bien tapado. 3. Servir con la salsa.

Recetas cortesía de Montemira. Bachillerato en Hotelería. Teléfonos: 2252-5438 y 2252-5447