Fullbasket Magazine 10 by Fullbasket

fullbasketmagazine #10

Julio 2017

XABIER AÑUA

MITO DEL SASKIBALOI

selección femenina darío brizuela diego ocampo eva areste

CAMPEONES

ACB Photo

HEGEMONÍA EUROPEA

Foto: FEB

s u m a r i o

director Miguel Lois @MiguelLois redacción Iván García @Ivan_Hoops Ignacio Ojeda @Ojeda_SB Daniel Rocamora @DanielRocamora_ Jacobo León @jalekal Iván Libreros @IvanLibreros95 Víctor Plaza @VPlaza_D Iván Beas @ivanbeas4 arte y maquetación Cristina Martín @crisolacaracola diseño Miguel Lois @MiguelLois Cristina Martín @crisolacaracola

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MOMENTO junio

xavier añua mito del saskibaloi

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por miguel lois Charlamos con Xabier Añua, una de las figuras más importantes en la historia del baloncesto español. Pionero en los banquillos, ha tenido un gran impacto en la historia del Baskonia y el FC Barcelona.

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USA Today Sports

© FULLBASKET., Barcelona 2017. Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser distribuida, reproducida ni publicada - ni en todo ni en parte - por cualquier forma o medio sin autorización previa por parte de FULLBASKETMAGAZINE. FULLBASKETMAGAZINE es propiedad de FULLBASKET y no se hace responsable de las opiniones expresadas por sus autores, así como del contenido de las publicaciones. Fotografía portada y página 7: Miguel Lois Últimos datos incluídos: 30/06/2017

#10 - julio 2017

EDITORIAL por MIGUEL LOIS

Director de FULLBASKETMAGAZINE

de la abdicación del rey a la entrada en el olimpo de la #selfem Cuesta elaborar un editorial que siempre intenta denunciar -en el buen sentido de la palabra- algún aspecto de nuestro baloncesto -aunque también nos gusta elogiar, faltaría más- y encima en una revista que pretende ser atemporal. Pero este mes de julio quería dedicarle unas líneas a LeBron James, evidentemente, al que la derrota le ha apartado de los focos como si de nada hubiera servido una temporada excepcional-otra más- y unos Playoffs en los que ha confirmado que su hueco entre los grandes de la historia ya no es una idea descabellada. De hecho, una opinión extendida en las redes, y que compartía en prácticamente su totalidad, era que si LeBron ganaba a estos Warriors, podríamos haber hablado muy seriamente de si está a la altura de Michael Jordan. Habría sido su cuarto anillo y habría vencido a un equipo legendario y que ha sido capaz de elevar el juego ofensivo a unos límites insospechados desde los Lakers del showtime. “Habría”, ese uso del condicional que de tan poco sirve en el mundo del deporte. Pero no pudo. Los Warriors ganaron 4-1 y demostraron estar un peldaño por encima de los de Ohio. Podemos afirmar que Curry, Green y Thompson tuvieron que añadir a Durant para hacer abdicar al Rey, y estaríamos en lo cierto. Sin KD, estas Finales quizás habrían tenido otro desenlace. Pero volvemos a las hipótesis que de nada sirven. En cualquier caso, LeBron perdió unas Finales -ya van cinco- con la cabeza alta y su mensaje fue claro ya en los vestuarios del Oracle Arena: “Volveremos”. No tengo la menor duda de ello.

torial a la selección española femenina de baloncesto. Difícilmente volveremos a ver un grupo tan excepcional dentro y fuera de la pista. Vestidas de calle son humildes, cercanas y trabajadoras como las que más. En el parqué han alcanzado una superioridad inédita. Francia y Bélgica fueron vapuleadas de principio a fin por un equipo casi sin fisuras, que eleva el sentido del colectivo a un grado casi inexplorado. Sin egos, todo es más fácil. A partir del talento duele menos subir la empinada cuesta hacia el éxito. Pero la gran clave de este grupo está en la defensa. Se anuló a dos selecciones que estaban firmando un campeonato excepcional, dejándolas en cifras de equipo “pequeño”. Esa ‘facilidad’ que transmitió España para ganar el Eurobasket no volveremos a verlo en mucho tiempo. Porque el deporte suele convivir con el sufrimiento y la agonía, sentimientos que no hemos encontrado en Praga este mes de junio -desde fuera, claro está-.

Sólo el tiempo pondrá realmente en valor lo que está consiguiendo este grupo. Ocho medallas en los últimos nueve campeonatos europeos, cinco años consecutivos subiendo al podio -pleno desde la llegada de Lucas Mondelo- y la sensación de que este grupo tiene aún cuerda para 4-5 años más (con el relevo generacional, en teoría, bastante asegurado). Mención aparte merece Laia Palau para cerrar este primer texto que introduce nuestra décima revista. Inteligencia, compromiso, profesionalidad. La capitana sigue siendo una jugadora especial y diferente. Contagia a sus compañeras con su actitud, entiende el juego como pocas y sigue viviendo el baloncesto con la misma pasión del primer día. Ojalá todavía le Pero permítanme que dedique la otra mitad del edi- falte un baile en casa.

#10 - julio 2017

UN LUSTRO DE MEDALLAS PARA EL BALONCESTO FEMENINO ESPAÑOL

lucas mondelo, “el genio que todo lo gana” Polonia. 26 de junio de 2011. Con Amaya Valdemoro de baja por una sobrecarga, Marta Xargay lesionada por un golpe en la nariz y con Sancho Lyttle renqueante de una pierna, España cayó 71-75 ante Croacia y dijo adiós a sus opciones de estar en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Era un varapalo tremendo. Las españolas llegaban pletóricas tras lograr un bronce en el Mundial de 2010. El equipo era prácticamente inmejorable en todas las posiciones. Pero no fue el día. Ni Torrens, que promedió 16 puntos en aquel campeonato, fue capaz de salvar a España de la quema. Se quedó en un 0 de 11 en tiros de campo. Posiblemente el peor partido de su carrera. Las chicas entrenadas por José Ignacio Hernández sólo pudieron ganar a Letonia en la segunda fase, perdiendo ante Francia y Croacia. El resultado: perderse los primeros Juegos desde Sydney 2000. Era un paso atrás en la más que notable trayectoria de la selección femenina en la primera década de siglo (se habían conseguido cinco medallas seguidas en Europeos). Utilizar tópicos para definir aquello sería delicado. “Sirvió para alzar el vuelo”, “nos hizo tocar de pies en el suelo”… Todo eso puede tener un punto de verdad, pero no deja de ser hipotético. Lo único cierto es que desde entonces España no se ha bajado del cajón del podio en ninguno de los campeonatos que ha disputado. Y eso tiene un mérito tremebundo. “Ahí la cagamos, está claro, es un poco la mancha de este grupo. No jugar los JJOO, con la generación que teníamos, fue un palo, es evidente, pero nos hizo más fuertes”, confesaba Laia Palau repasando la trayectoria de la selección femenina. Aquel campeonato dolió, más que por romper la racha de medallas seguidas en Europeos, por no disfrutar de unos Juegos. Tocaba cambiar de ciclo y la Federación, con Sáez a la cabeza, decidió escoger a Lucas Mondelo para enderezar un rumbo que había chocado con un iceberg tras una travesía de notable alto. Texto de Miguel Lois (@MiguelLois) Fotos de FEB

#10 - julio 2017

lento a la vez y que muestre una superioridad tan aplastante ante sus rivales. Tampoco uno que muestre tal relación de amistad dentro y fuera de la pista. El deporte concebido, en su máxima expresión, a un bien colectivo. Esa es la gran realidad de la selección. Sin egos. Sin celos. Con un compromiso admirable –muchas jugadoras se infiltraron para jugar la fase final del Europeo de Praga-. Con una humildad digna.

ahí, en la cima del baloncesto mundial. Que sólo las americanas podían derrotarnos. Tantos años de trabajo desde la base, picando piedra, para saborear una medalla que se le podría atribuir a todas esas entrenadoras que se desviven por enseñar baloncesto, a todas esas niñas que sueñan con ser profesionales. A un deporte maltratado públicamente aunque después los de traje quieran sumarse al carro apareciendo en la fotografía.

Por ello supo todavía mejor –si cabe- esa medalla olímpica en Río. Porque significaba mandar un mensaje al mundo, desde el mismo Cristo redentor, que tras varios años deambulando sin rumbo y cayendo con estrépito ante francesas o balcánicas, estábamos

Y es que el baloncesto femenino en España tiene un peso más que notable en relación a las licencias deportivas. Un 20% de las licencias deportivas femeninas en nuestro país son de baloncesto. Delimitándolo al baloncesto en sí, casi un 40% de las licencias son fe-

e trataba de una apuesta casi segura. Mondelo llegaba tras ganarlo todo con el Perfumerías Avenida y con un bagaje de éxitos en categorías inferiores: plata en el Mundial sub-19 y otra plata en el Europeo sub-20 de 2010; y un oro en el Europeo sub-20 de 2011.

meninas (más de 140.000) por un 60% de masculinas. Tan habitual en el gen de la sociedad española –crecernos cuando llegan los éxitos- aparece ahora el “debate” de si España puede ganar a Estados Unidos en 2018 en el Mundial que jugaremos en casa. “Uf, ahora mismo se me antoja casi imposible. Ya no sólo por el talento que ellas tienen, también por su físico y su manera de jugar. Están a otro nivel”, explica Alba Torrens, la mejor jugadora de la selección y para muchos la más talentosa que hemos tenido nunca.

El primer reto era clasificarse para el Eurobasket de 2013. España lo logró y la historia ya casi la conocen de memoria. Cinco años, cinco medallas: oro en ese Europeo, plata en el Mundial 2014, bronce en el Europeo 2015, plata en Río 2016 y un título apabullante en el Eurobasket del 2017. Es decir, sólo Estados Unidos y Francia (en 2015) han podido batir a esta selección en el lustro que lleva Lucas Mondelo en el banquillo –con César Rupérez, Víctor Lapeña e Isa Sánchez, tan imprescindibles como él-. 83 victorias en 94 partidos. ¿Asusta, verdad?

Pero, ¿por qué pensar en eso ahora? Disfrutemos de un grupo irrepetible que juega para disfrutar y disfruta jugando. Decía Platón que el tiempo es una imagen móvil de la eternidad. En el caso de España, así es. Y la estamos viviendo en primera persona. *Nota: que nadie se sienta ofendido por intentar centrar más el éxito colectivo en un individuo. No es, ni por asomo, nuestra intención. Es más, dejamos caer que en un futuro trabajaremos por realizar un exhaustivo reportaje sobre esta selección…

Nunca antes ha existido un equipo con tanto ta-

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SAN EMETERIO el Robin Hood del baloncesto espanol

Cuenta la leyenda que el héroe de la Inglaterra medieval era un varón con un corazón fantástico, que vivía fuera de la ley y que con su habilidad para disparar flechas intentaba defender a los más pobres de la fuerza pública del sheriff de Nottingham. Efectivamente, estamos hablando de Robin Hood. La historia explica que robaba a los que se hacían ricos de forma ilegítima para poder ayudar a los pobres y las víctimas de saqueos injustos. En el baloncesto español, y sin llevar ninguna de estas comparaciones a la realidad del siglo XXI –aunque se podría hacer en algunos casos-, podemos tener a nuestro particular Robin Hood. No ha robado a nadie, pero sí podríamos extrapolar el mito a “distribuir la riqueza entre los pobres”. Porque Fernando San Emeterio es el único jugador, junto a Walter Herrmann y Jesús Lázaro, que ha ganado la Liga ACB con dos equipos distintos que no son ni Barça ni Madrid. El alero español lo ha logrado con Baskonia y Valencia, mientras que el argentino lo hizo con Baskonia y Unicaja y Lázaro lo consiguió con el TDK Manresa y Unicaja. Texto de Miguel Lois (@MiguelLois) Fotos de Isaac Ferrera y ACB Photos

Oro Eurobasket 2011 Plata JJOO Londres 2012 Bronce Eurobasket 2013 Oro Eurobasket 2015 FIBA Eurocup 2007 - Akasvayu Girona Supercopa de España 2008 - Baskonia Copa del Rey 2009 - Baskonia Liga ACB 2010 - Baskonia Liga ACB 2017 - Valencia Basket

n dato sorprendente que el propio ‘San Eme’ quiso valor en su justa medida tras alzar el título en La Fonteta: “Tengo dos Ligas y las dos por ser, digamos sorpresivas, valen como diez”. Tan simple como profundo. Tan directo como realista. Ganar dos ligas con dos equipos distintos que no sean los ‘clásicos’ es algo meritorio. Deben unirse muchos factores para poder entrar en ese selecto grupo.

jugador elogiado por todos y colocado de ejemplo por su tenacidad, actitud y voluntariedad en querer superarse temporada tras temporada. Porque a San Emeterio nadie le ha regalado nada nunca.

Con apenas 14 años fue voluntario en la Copa del Rey, la que se jugó en Valladolid y ganó el Pamesa Valencia al Joventut de Badalona. San Emeterio no desaprovechó la oportunidad de ver a sus ídolos de cerca. Curiosamente fue la primera Copa de Y San Emeterio lo ha logrado con la misma hu- Juan Carlos Navarro con el Barça. Quién le iba a mildad de aquel chaval nacido en Santander pero decir a aquel muchacho imberbe que terminarían criado en Valladolid que llegó a jugar a fútbol en siendo compañeros en la selección y rivales en la las categorías inferiores del club pucelano. No pista. obstante, su amor por el deporte de la canasta empezó con apenas 2-3 años, cuando sus padres En la temporada 2001-2002, con apenas 17 años, le regalaron una primera canastita. Fue en el Pi- debutaría en la ACB de la mano del Fórum Filatélisuerga donde encontraría la libertad para divertirse. co de Valladolid. Fue ante el Cajasol y con Gustavo Y en el Maristas Valladolid se empezó a labrar el Aranzana en el banquillo vallisoletano. Estaría allí cinco temporadas, en “casa”. Cuando ese jugador que no era ni explosivo, ni gran tirador, ni tenía un físico excepcional parecía condenado –en el buen sentido de la palabra- a permanecer en Valladolid durante más años, el Akasvayu Girona decidió ficharlo para su ambicioso proyecto. Y mal no le fue, siendo artífice de la FIBA Eurocup que ganaron los gerundenses en 2007. Promedió casi 13 puntos y 4 rebotes en esa competición. Pero lo mejor estaba por llegar. Baskonia no dudó en pescarle de Girona –cuando el proyecto murió por problemas económicos- y en 2010, en una acción que nunca se olvidará en el Buesa Arena, San Emeterio le dio la liga al conjunto vitoriano. Perdía

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Baskonia 76-78 contra el Barça a falta de 7,5 segundos para el final del encuentro. Basile falló un tiro libre, ‘San Eme’ cogió el rebote, cruzó toda la pista y tras mofarse del italiano con un crossover le sacó un 2+1 a Morris que a la postre se convertiría en la última acción de la liga 2009-2010. Los de Querejeta levantarían el título y dejarían a los de Xavi Pascual sin el ansiado triplete. Allí cambió su estatus definitivamente. Porque eso le permitió ir con la selección española durante cinco años consecutivos, ganando dos oros (Eurobasket 2011 y 2015), la plata de Londres 2012 y el bronce en el Europeo de 2013. No fue a los Juegos de Río, pero tal es su impacto en el vestuario, que Llull sacó su camiseta durante la ceremonia de entrega de medallas. Un gesto que ejemplifica a la perfección la importancia del cántabro en nuestro baloncesto. Y hace dos temporadas, tras siete años en Vitoria, se marchó a Valencia como un alero contrastado. Un nuevo reto para un jugador al que ya no se le ponen ‘peros’ en su juego. Al contrario, se le considera uno de los famosos cupos más interesantes de la ACB. Se lo ha ganado a pulso. El título de Valencia tiene mucho de su estilo. El de pelear, el de no dar nada por perdido. Combatir ante los “ricos” para que puedan festejar los “pobres”. El Robin Hood del baloncesto español… esperemos que no se quite demasiado pronto la capucha de superhéroe.

#10 - JUlIO 2017

DAME UN BALÓN

Las risas de los entrenadores allí presentes eran evidentes. No disimulaban. Acababan de presenciar un hecho inaudito hasta entonces. Era el Draft Combine de 2007, una noche antes del gran evento. En las pertinentes pruebas físicas, un chaval de 2,30 de envergadura fue incapaz de levantar 84 kilogramos de peso en press de banca. En las pruebas de salto vertical y en los tests de velocidad, el larguirucho joven tampoco destacó. Y en agilidad quedó último de entre todos los pretendientes. Tenía cuerpo de atleta, pero las pruebas fueron un desastre. Avergonzado, solo pensaba: ‘Joder, dame un balón. Dame un balón’. Afortunadamente para él, allí se opositaba a estrella del baloncesto. Seattle primero, transformación en Oklahoma después y triunfo absoluto en San Francisco. Diez años después de aquel deplorable combine, Kevin Durant brilla como el mejor jugador del planeta. Texto de Víctor Plaza (@VPlaza_D) Fotos de Noah Graham, Getty Images, NBA y Nike

bundan las historias sobre los duros pasados de los jugadores NBA, pero el de Kevin Durant es especialmente trágico. Como si de la mejor película dramática se tratara. Esa que empieza mal, se torna a oscura y acaba con un final soñado. Esa cuyo protagonista, un niño medio huérfano, apenas tiene amigos, sufre en el colegio y se refugia en su mayor pasión. Durant siempre tuvo el ‘dame un balón’ como leitmotiv de su vida. Desde niño, Kevin tuvo que hacer frente a una vida sin padre. Éste, Wayne Pratt, sumido en problemas callejeros, le abandonó con apenas un año de edad. Regresó a los 13 años, para volver a dejarle. Así, su madre Wanda tuvo que trabajar horas extra-muchas de ellas por la noche-como repartidora de correros para alimentar a Kevin y a sus tres hermanos (Brianna, Anthony y Rayvonne). Durante casi un año, todos dormían en una casa sin muebles ni calefacción, abrazados por el frío y con carencias alimenticias importantes.

TALENTO PREMATURO Sin tiempo para sus hijos, la abuela de Kevin, Bárba- “Big Chuky” encontró solura, adquirió un papel fundamental. Fue ella la que ciones a las burlas que sufría Kevin en el colegio por sus animó a su nieto a jugar al baloncesto. centímetros de más. Cariño y La abuela le inscribió en el Amateur Athletic Union, confianza en sí mismo. Tamuna organización de promoción deportiva. Allí Kevin bién su abuela le remarcaba lo encontró a la que sería la figura más importante de especial que era: “Tu altura es su infancia: su primer entrenador, Charles Craig. “Big una bendición. Solo tienes que Chuky”, como era más conocido, no le puso límites, le esperar”. Aguardó, pero muy guió en base a su talento. Le quiso como a un hijo. Le poco tiempo. Kevin ya despunllevaba al cine, a ver partidos, le daba dinero cuando taba en el equipo de su colegio, lo necesita, le cuidaba. El padre que nunca tuvo había los Prince George Jaguars de llegado por casualidad a los ocho años de edad. Maryland. En su primera temporada, con 11 años, promedió 18 puntos por encuentro. Por supuesto, ganó dos campeonatos con su colegio.

“un día entré al gimnasio, corrí de un lado a otro de la cancha y me enamoré del juego. ahí empezó todo.” -kevin durant

LA TRAGEDIA, DE NUEVO A pesar de todo, ese año 2005 fue el más trágico en la vida de Kevin Durant. A meses de ser universitario, Kevin volvió a ser huérfano, esta vez de su mentor. ‘Big Chuky’, en su afán educador, intentó mediar en una pelea callejera entre varios jóvenes a la salida del J’s Sports Café, y su desenlace no pudo ser más injusto. Craig recibió cuatro disparos: tres en la cabeza y uno en el corazón.

Meses después, el gran momento: el Draft de 2007. Las expectativas eran altísimas, y solo Greg Oden le podía hacer sombra.

El hijo de Wanda, sobrado de talento y altura, siempre había sufrido una delgadez extrema. Su preparador físico de confianza y actual entrenador en verano, Alan Stein, consiguió que Durant aumentará su peso en 20 kilos en apenas tres años. “Le propuse un plan y Kevin lloró su pérdida y decidió honrar su memoria un día de gimnasio conmigo. Le dije que si le gustaba para siempre llevando el dorsal ‘35’-la edad de ‘Big que siguiera y si no, que se fuera sin ningún problema. Chuky’-allá donde jugara. Como en Texas en su úni- Cuando terminó, me confesó que no le había gustado, co año universitario, en el que cada encuentro era un pero que seguiría conmigo porque era consciente de espectáculo. Durant arrasó con 26 puntos por par- que le hacía falta crecer físicamente”. tido, acompañados de 11 rebotes. Fue nombrado “Jugador del Año” en la División I y recibió dos presti- A pesar de los esfuerzos, quedará para la historia su giosos trofeos universitarios: Oscar Robertson Trophy Combine previo al Draft. Por sus malas notas físicas y, y Adolph F. Rupp Trophy. Durant ya entraba en la his- en consecuencia, por la inutilidad del mismo. Durant, toria del baloncesto americano: era el primer “fresh- diez años después, lo deja claro: “Trabaja en tu juego man” (jugador universitario de 1º año) en lograr am- y te verán en entrenamientos individuales. Te han estado viendo durante todo el año, así que tu cuerpo al bos títulos. completo trabajando es más importante que ir allí un Además, Kevin, a sus 17 años, fue invitado a entrenar par de días. No hay que asistir si tienes la presencia en con el primer equipo de la selección estadounidense. el top 10 asegurada”

En aquella época, Kevin conoció a su gran amigo Michael Beasley, con quien compartía su situación de medio orfandad. Ambos solían dormir, desayunar, ir el colegio y jugar al baloncesto juntos. “Otro hermano más”, en palabras de Kevin. Durant daría el estirón definitivo en la Oak Hill Academy, superando los 30 puntos en muchos partidos y siendo también vencedor en 2005. A Kevin se le consideraba ya como uno de los chavales con más futuro en el baloncesto americano. Fichó rápidamente en la Montrose Christian School, su último instituto antes de la Universidad. Kevin estaba listo para ingresar en la NCAA, donde todas las universidades se lo rifaban. Hacía mucho que no había un talento precoz igual. Tanto que el Washington Post le reconoció como baloncestista masculino del año.

#10 - julio 2017

The real MVP

SEATTLE SUPERSONICS SELECTED... Él y todos los expertos coincidían que Durant alcanzaría un pick alto. Su estilo de juego, su corpulencia, su versatilidad, su envergadura, su facilidad ofensiva…construían un jugador con un perfil único, exquisito para las demandas de los ojeadores. Antes de su elección, la web especializada NBADraft restaba importancia a los pobres registros físicos de Durant: “Afortunadamente para Durant, el baloncesto se juega en la cancha, no en el gimnasio. Su actuación no debería afectar a su estatus en el draft como segunda elección”.

Bingo. Kevin Durant alcanzó su sueño de jugar en la NBA al ser elegido en segunda posición por los Seattle Supersonics. Greg Oden, como todas las apuestas vaticinaban, se marchó a Portland como número uno de aquel Draft donde también estaban Mike Conley, Al Horford, Noah, Splitter e incluso Rudy y Marc Gasol. Con respecto a Oden, los Blazers debieron autoflagelarse. Mientras el de la universidad de Ohio era cortado meses después por sus innumerables lesiones, Kevin Durant, aquel chico que protagonizó el peor Combine que se recuerda, fue nombrado Rookie del año. 18 puntos en su debut, una canasta ganadora partidos después, y un primer año inmejorable promediando 20 puntos y 4 rebotes por encuentro. Si Seattle se trasladaba a Oklahoma, Durant mutaba a una versión aún más destructiva a cada temporada que pasaba. Subía sus medias cinco puntos cada campaña, hasta alcanzar los 30 en su tercera temporada. La estrella era real: máximo anotador de la competición, primera aparición en el All Star…y MVP en el Mundial de Turquía con USA ese verano. Con 22 añitos. Los números individuales brillaban, pero el sueño del anillo con los Thunder se desinflaba. Los de Oklahoma habían conseguido ser un equipo importante en el Salvaje Oeste, pero no fueron capaces de conseguir el anillo. A pesar del recordado roster con Westbrook, Harden, Durant e Ibaka. A todos ellos les superó LeBron James con los Heat en las finales de 2012. Fue la vuelta a la Tierra para Durant. Los Thunder pecaron de inexperiencia. No volvieron a tener opción de llegar a unas Finales. Como premio de ‘consolación’, el Oro Olímpico en Londres frente a España. Desde el 2012, Oklahoma no levantó cabeza. Se marchó Harden y los resultados deportivos empezaron a resentirse. Aunque Durant, a contracorriente, realizó su mejor temporada y se convirtió en MVP de la Temporada Regular con 32 puntos por partido. Para el recuerdo el discurso que el hijo Kevin dedicó a la madre Wanda: “Tú nos hiciste creer. Nos mantuviste lejos de la calle. Nos vestiste y pusiste comida en la mesa. Te aseguraste de que comiéramos y tú te fuiste a acostar con hambre. Te sacrificaste por nosotros. Tú me hiciste Jugador Más Valioso, pero tú eres la real MVP”.

#10 - julio 2017

VENI, VIDI, VICI Para el grupo fue un espejismo. La relación Westbrook-Durant se enfriaba con el paso de las temporadas. El final, ya lo saben: Russell renovó mientras Durant no siguió en los Thunder y apostó a caballo ganador. Se unió al mejor equipo del momento, y uno de los mejores de la historia. Iba a compartir vestuario con la última estrella de la NBA, Stephen Curry. Él solo no había podido destronar a un LeBron imperial y emocional durante la remontada de los Cavs en las Finales.

a los críticos con unas Finales extraordinarias-MVP incluido-en las que más que nunca disfrutó e hizo disfrutar con su leitmotiv. No le dieron ni uno, ni dos, ni tres balones. Todos los que quiso para convertirse, con total merecimiento, en el mejor jugador del mundo.

“Kevin Durant tiene una historia única y estoy muy feliz por él. Ya tenía una excelente carrera, pero la ha situado ahora en el siguiente nivel. Hasta que no ganas un campeonato, hasta que eso no ocurre, siempre hay algo ahí. Estoy muy contento de que Kevin haya Si Warriors quería asegurarse el Anillo debía contar atravesado ese punto y vendrán más momentos como con Durant. Si Kevin quería cumplir su sueño y hacer este para él”. Palabra de Steve Kerr. justicia con su esfuerzo y su superación, tenía que ingresar en San Francisco. La ecuación, aunque lógica, Kevin Durant ya está en la historia de la NBA, pero fue histórica y despertó polémicas. “Muchos gallos puede marcar una época de la que ‘Big Chuky’ estaría en el mismo corral, demasiadas individualidades, muy orgulloso. Como lo está Wanda, a la que Kevin una estrella que desestabiliza a un roster campeón. gritó tras el último partido: “¡Lo hicimos! Te lo dije Qué cobarde escogiendo la opción fácil, abandona a cuando tenía ocho años”. Y como aquel entonces, Westbrook y a sus Thunder, solo mira por si mismo, madre e hijo se abrazaron durante un minuto. Pero esta vez no era de frío, si no de satisfacción por el solo le importa el Anillo…” sueño cumplido. Pero como en aquel Combine de 2007, Durant acalló

#10 - julio 2017

#9 --junio #10 julio 2017 2017

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DARÍO BRIZUELA,

La historia de un colegial que recibió amenazas de muerte

ENTREVISTA No ha sido un año fácil para Darío Brizuela, después de una fantástica temporada y una renovación por tres temporadas en el club en el que él quiere estar, en un verano en el que esperó a Movistar Estudiantes y a que se resolviera su futuro como club, todo hacía presagiar que sería una gran temporada, pero nada más lejos de la realidad. Yo también pensaba como tú, ese chico flipado del norte, con esos andares chulescos, que se piensa que se va a comer el mundo. Pero es que la vida le ha hecho así, dándole ostias de todos los colores, una detrás de otra, nunca le ha dejado tranquilo. Poniéndole a prueba, “la vida es una hija de puta”, comenta, y no le faltan motivos para pensarlo. Texto de Ignacio Ojeda (@Ojeda_SB) Fotos de ACB Photo, Movistar Estudiantes, Alto Aragón y AS

#9 - junio 2017

ENTREVISTA Edgar Vicedo, amigo de Darío desde hace muchos años le describe como: “un tío muy familiar. Muy casero, y entre eso, el Foster y la Play, creo que el tío es feliz. Es una persona muy humilde, muy tímida, por eso es tan casero. En la pista puede parecer muy descarado, muy eléctrico,.. Pero fuera es mucho más tranquilo, más personas normal. Llevamos 6 años casados casi, y lo que nos queda. Creo que esto ya es para siempre, y así se lo digo. La suerte también es que hemos jugado todos los años juntos. Esto va para largo”. Uno de los mejores de su generación, llegó al Ramiro en medio de una gran expectación, en el que recuerda como el peor año de su vida. Un chico que fuera de la cancha se transforma. Tranquilo, honesto y educado, sobre todo educado. De trato fácil y cercano, de esos que no abundan por los vestuarios ACB, debe ser porque es joven y no se le ha subido a la cabeza. Pero tiene los pies en el suelo. Estudiante de psicología, más por necesidad que por vocación, le gusta hablar claro, sin tapujos, que se lo digan a su entrenador, al que le ha dicho que quiere jugar con él a toda costa. Un tipo que sueña con ser olímpico y que tiene un mensaje de sus padres grabado entre ceja y ceja: “ser jugador de baloncesto está muy bien, pero es más importante ser feliz”. Con ustedes, Darío Brizuela. Deseando volver a casa me imagino…

cantera de la Real Sociedad, otros en equipos más bajos, pero casi todos mis amigos tienen buen nivel, y yo Ya terminamos. La temporada al final se hace larga, estaba ahí al mismo nivel que ellos. entrenamos mañana y tarde, y es bastante exigente, sobre todo con este calor. Pero con ganas de seguir ¿De qué jugabas? trabajando, de estar en casa y a por el año que viene, De delantero o de extremo. Siempre la velocidad. que este no ha sido nada fácil. Tampoco tenía mucho regate, pero me tiraba el balón en largo, a correr, y al final llegaba. Pero me decanté ¿Cómo fueron tus inicios? por el baloncesto, es de familia, me parecía más inteTodo empieza en la genética. Mi madre fue jugadora resante, más complicado. Y hasta hoy. de primera división, debutó con 16 años, luego tuvo una lesión y tuvo que dejarlo, pero tampoco estaba ¿Cómo fueron los primeros años? dedicada 100% a ello. Mi padre fue entrenador de chicas y ahí se conoció con mi madre. Mi tío Txus fue Siempre he jugado en el EASO. Desde pequeño jugué jugador ACB con Baskonia… todo estaba encaminado con los de un año más que yo y lo recuerdo como algo a que jugara al baloncesto, o que al menos fuera el complicado. No solo porque eran un año más maprimer deporte que recibiera. Y así fue, cuando nací yores, es que además soy de noviembre. Y muchos me ya había una canasta en mi casa, y desde los dos o sacaban año y medio o dos años. Mis padres siempre tres años ya empiezo a jugar con mi padre y con mi me decían: “ya verás cuando llegues a su nivel físico qué fácil se te va a dar”. Y esos años de minibasket o hermano, me encantaba. Todo el mundo jugaba al fútbol, pero yo quería ba- infantil fueron complicados, pero los disfruté. loncesto. Sí que es verdad que tuve una época en la Jugué con Julen Olaizola, que acabó en la cantera del que me tuve que decidir, porque llegué a la selección Madrid y en ACB. Jugué con Mikel Motos… todo esto de Euskadi de minibasket y, sin dudarlo, me decanté hasta infantil. Después me tuve que operar de la ropor el baloncesto. Pero el fútbol se me daba bien eh, dilla por un problema genético, y de que además forzaba mucho. Siempre he sido un cabeza loca. Me oquién sabe si me hubiese dedicado… peraron en el paso de infantil a cadete de primer año ¡A ti te quisieron fichar para jugar al fútbol! y dejé de estar con los de un año más, y ahí empezó mi ambición por querer ser alguien. Sí, había equipos a los que ibas, pasabas unas pruebas y tal… y a mí me decían que fuera a los equipos Me comentaste que tienes alguna anécdota que donde estaban mis amigos. Unos han acabado en la tienes ganas de contar...

#10 - julio 2017

Va en la línea de lo que te comentaba. Me opero en cadete de primer año, me bajan con los de mi edad, y para mí eso era como un paso atrás. No lo digo porque los de mi edad fueran peores. Pero como siempre había estado con los de un año más, el hecho de estar con los de mi edad me lo tomé como que no contaban más conmigo y fue la primera vez que me ponían un reto por delante. Ahí tuve la suerte de tener el mejor entrenador que he tenido en mi vida, que fue el que más me ha exigido y me ha retado mentalmente. En verano suelo quedar con él para hacer cosas y me dijo: “tienes que demostrarles que se han equivocado contigo”. Y ahí empezó mi hambre y la competitividad, que evolucionó en que me convertí en un chulo y en capullo, y esa es la impresión que tiene la gente sobre mí en la pista. Todo el mundo me lo dice: “cuando juegas pareces un chulo, un flipao”. Y eso viene de ahí, estaba tan dolido con esa situación que me puse en modo competitivo, iba a todos los partidos a tope. Y como pasó esto y todo el mundo me veía así, pues cuando íbamos a los pueblos a jugar, como Azpeitia, Zarautz, Tolosa,… la gente me empezaba a conocer y tenían esa imagen de mi, eso me hizo vivir experiencias muy malas, hasta el punto de insultos, amenazas de muerte,... ¿Amenazas de muerte con 15 años? O incluso menos. Y esto es algo que nunca he contado y que quería contar. No por mí, yo ya lo he superado, mi familia me ayudó a estar por encima de ello, pero para que no vuelva a ocurrir. #10 - julio 2017

XABI ZUBIMENDI

Entrenador de Darío en cadete Un día, para clasificarnos para la Fase Final de Euskadi, estábamos preparando todas las variantes que nos podía hacer el equipo rival, todas las defensas que nos fueran a hacer o lo que fuera. Y cuando el entrenamiento se estaba acabando, se me acercó y me dijo que me veía nervioso. Le dije que es que el partido era importante, y súper confiado me dijo: “tú estate tranquilo que estoy yo”. Fuimos para allá, era un equipo que nos tenía muchas ganas, éramos el equipo a batir y el campo estaba tan lleno que no cabía nadie más, literal. Le prepararon una a Darío desde el segundo uno, cada vez que tocaba el balón, diciéndole de todo, una presión mental brutal. De hecho el árbitro, al descanso, nos reunió a los dos entrenadores y nos dijo que si eso seguía así paraba el partido. Un ambiente súper hostil; le hicieron todas las defensas posibles y acabó el partido, ganamos, y Darío metió 30 o 35 puntos. A la salida, los más gamberros le esperaron, y subió él solo las escaleras, sin ningún tipo de miedo, sabiendo que no le iba a pasar nada.

ENTREVISTA ¿Has llegado a tener miedo? Un par de veces sí que pasé miedo. Vas a un pabellón, de un pueblo, y lo normal es que vayan los padres y poco más. Pero cuando jugábamos nosotros,… a mi me llegó una vez un evento de Tuenti que decía algo como “este fin de semana juega el EASO de Darío en Tolosa, vamos todos a insultarle”. Y ese partido fue el peor y uno de los mejores momentos de mi vida. Me hicieron una caja y uno durante todo el partido y creo que metí unos cuarenta y tantos puntos. Pero fue lo peor porque estuvieron todo el partido amenazándome, insultando a mi familia,… cada vez que tiraba un tiro libre los 100 chavales me llamaban “hijo de puta”, constantemente, todo el partido. Y cuando quedaban unos 30 segundos, ganábamos fácil, yo estaba en el centro del campo hablando con mi entrenador, y me tiraron una botella de cocacola de plástico. Y claro, con 14 años, me tomé el partido como un reto, me gustaba la sensación, pero cuando vi que me tiraban la botella… me entró miedo. Pensé que si esos chavales estaban ahí tirándome botellas, con los cascos de la moto haciendo ruido con la barandilla,… en cualquier momento se lía. Al final del partido nos esperaron fuera y tuvimos que salir por la puerta de atrás con la policía.

estuvo. Y desde ahí todo fue a mejor. Porque antes cuando alguien me insultaba yo le retaba, le miraba o le mandaba callar, porque pensaba que era un juego, hasta ese día que me di cuenta de que iba en serio la cosa. Hace poco hablaba con mis padres de esto, y me contaron que tras ese partido la Federación de Gipuzkoa llamó al EASO para hablar con mis padres, y ver si queríamos poner una denuncia. Mis padres no lo hicieron, solo querían que no volviese a pasar, pensaron que yo lo llevé bien y ya está. Solo se preocupaban por mi educación, no por la de nadie más. Y esto son cosas que me han pasado y no quiero que le pase a nadie más. Porque yo tengo la suerte de tener los padres que tengo y lo llevé bien, y sobre todo de tener el entrenador que tenía, que cuando me iba un poco me tiraba de la correa y puede pasar que si se repite acabe realmente mal. ¿Nunca te llamó el Barça o el Madrid?

Hasta cadete no. Fue en cadete de segundo año en el Campeonato de España de Selecciones, que fui con la de Euskadi y, bueno, yo ya sabía que no iba a haber nadie que se interesase por un jugador del País Vasco, esto es así, el único escaparate que tenía era el Campeonato de España. Fui con la idea de destacar y me salió bien, y ahí fue cuando por primera vez un ¿Tus padres te acompañaban a estos partidos? club ACB contactó conmigo, y fue el Estudiantes. Sí, y me decían que tenía una actitud muy mala en En infantil yo estuve en el Campus del Estudiantes con estos casos, pero ese día fue en el que más tranquilo mi hermano, en Granada. El entrenador de mi herma-

no en aquel Campus trabajaba en el club y contactó con mi hermano para hablar con mis padres sobre mí. Y fue el primer equipo que se interesó de verdad. Después un montón de agentes quisieron trabajar conmigo, pero durante ese año yo no quise, porque no tenía claro ni si quería salir de casa. Empecé a escuchar lo típico de “este equipo está interesado…”. Fui al Campeonato de España de Clubes, con el EASO, me salió bastante bien, y ahí fue cuando todos los equipos fueron a hablar con el agente con el que estuve un tiempo y con mi tío Txus. ¿Quique Villalobos?

QUIQUE VILLALOBOS Agente de Darío

Es cierto, Darío nunca me ha llamado para quejarse de nada, ni de que juega poco ni de nada. Cosa que algún otro jugador ha podido hacer. No, Darío no se ha quejado de que haya podido jugar poco, o tal. Creo que él entiende que ha sido un año duro para él. Lógicamente le habría gustado jugar más, pero ha asumido que lo que tenía que hacer era trabajar más duro para ganarse los minutos. Y si no han llegado, no han llegado, pero lo ha intentado. Para el año que viene parte de cero e intentará hacerse el hueco que no consiguió el año pasado.

Cuando me separé de mi agente lo comenté en el vestuario y me recomendaron a Quique Villalobos. Es un tío atento, pero a mí lo que más me gusta de él, y fue la razón por la que me fui con él, es que es sincero. No te vende nada, no te va a decir: “oh, ¡qué bueno eres! Te mereces tal”. Y eso es lo que quiero. Esas personas que te venden la moto… fuera de mi vida. Quiero gente exigente y realista, y sé que con Quique claro, estaría al nivel de estos, y no fue así realmente. si hago algo mal me lo va a decir. Decidí quedarme un año más en el EASO, siendo juvenil de primer año y jugando con los de un año ¿Y qué te dice? más. Con Mikel Motos, que era el objetivo que quería perseguir. Estuve todo el año ahí y al siguiente opté Que el año ha sido jodido pero que entrene en verano por dar el paso e irme. y a tope el año que viene. Y es que es así, no hay una Tuve opciones, pero como Estudiantes siempre se fórmula secreta y no quiero escapar de esto. había interesado mucho, decidí venirme. Yo lo que Estuve hablando con Salva y le dije que quiero con quería era un sitio donde quisieran trabajar conmijugar con él. Es orgullo personal. Se lo dije tal cual: “al go, no estar en junior y ser campeones de España. final de mi carrera, si no juego contigo y me voy este Yo quería un objetivo más a largo plazo. A mis padres verano, estaría jodido”. Eso es lo que quiero, jugar también les convenció que pudiera venirme al Ramiro con él y luego seguir con otros retos. a estudiar. ¿Y qué te dijo Salva? Que no se lo esperaba para nada, pero que le gustaba.

¿Cómo es llegar a Madrid, solo, para un chico de San Sebastián?

El primer año fue una mierda. Me cuesta mucho salir ¿Qué pasó después de aquel Campeonato de Es- de casa y ajustarme a entornos diferentes. Y cuando paña? empecé a encontrarme cómodo, estaba jugando en el EBA y en el junior, llega noviembre y me rompo Terminó mi año cadete y los equipos se interesaron el pie. Una lesión que iba a ser de dos o tres meses. por mí. Consideraba que era muy joven para salir de Me la tomé con calma, aproveché para ponerme más casa, me pilló todo de sopetón y no estaba listo. Tuve fuerte, iba bien en los estudios y demás. la suerte de ir con la selección y darme cuenta de que Pasan los dos meses y la fractura sigue abierta. Pasa no estaba listo de verdad, porque jugué muy poco. otro mes y todo sigue igual. Llegó un punto en el que Coincidí con Edgar, Willy, Paulí, Alberto Díaz,… además la fractura seguía abierta, pero estaba tan mal, con de Sebas Sáiz, Josep Pérez,.. Todos jugadores muy unas ganas tan grandes de jugar, que estaba hundibuenos, y no jugué nada. Jugué los asequibles, pero a do, y tomé la decisión con el fisio de empezar a jugar medida que avanzaba el campeonato no jugué nada. con el pie abierto. Iba a aguantar el dolor, volver a Y para mí eso fue como una cura de humildad. Fui jugar y si me rompía, pues se operaba. Porque dijeron pensando que me querían todos los equipos y que que era una fractura por estrés y que cerraría sola.

#10 - JUliO 2017

#10 - JUlIO 2017

ENTREVISTA Entonces pensamos: “voy a jugar todo lo que pueda, siedad enorme, hice un Campeonato de España aún peor. Pasé de promediar 20 puntos en junior de prime romperé y operamos.” mer año a 5 en junior de segundo año en el mismo Campeonato de España… Se acabó la temporada, ter¿Y ahí qué piensas?, ¿ojalá me rompa? miné los exámenes y pensé que todo empezaba de Yo solo quería jugar al baloncesto. Jugué, y fue un nuevo otra vez. desastre, iba cojo. Duele que te cagas. Tienes que Y bueno, empecé a entrenar en postemporada, todo cambiar el apoyo del pie para que no te duela tanto y iba muy bien, y otra vez, me volví a romper el pie, el al final eso se pasa a la rodilla, a la espalda,… ¡estaba mismo pie, con la misma fractura. La verdad es que hecho un Cristo! Pero estaba contento porque estaba no estaba cerrada del todo, pero yo me encontraba muy bien y me rompí a dos semanas de la preselecjugando. Fui a la preselección de la selección española para el ción para el Europeo. torneo de Manheim. Entrené bien y pensaba que realmente podría ir, pero el entrenador me dijo que no, Tú te has llevado ostias por un tubo. que tenía que recuperarme de la lesión y llegar bien al Europeo. Me jodió un montón, pero yo a Orenga le Sí, sí. Me lesioné, me operé, y estuve todo el verano tenía mucho respeto, y me tomé sus palabras en serio en Donosti sin salir prácticamente de casa, con el pie para recuperarme y estar en verano como una moto. escayolado hasta la rodilla y dando vueltas de cinco Sigo jugando, entrenando, hizo un Campeonato de minutos con las muletas Madrid bastante malo, porque estaba con una an¿De qué año estamos hablando? Hablamos del 2011/12, que fue el primer año que estuve aquí, con 17 años. Llegué a senior jugando con el EBA con una limpieza de cabeza bastante buena. Había sufrido tanto de ansiedad… Mis padres, que son el pilar básico de mi vida, me ayudaron mucho. Me hicieron ver que esto es solo baloncesto, que estaba muy bien que mi ilusión fuera jugar en ACB, pero que más importante es ser feliz, y yo no había sido feliz en todo el año. Durante todo el verano me replanteé mi vida, cómo quería ser y cómo quería vivir. Llegué al primer año en el EBA recuperándome del pie, con mucha más calma, mucha más calma. Y tuve un muy buen año, ascendimos a LEB Plata, fui al mundial U19 con la selección, lo hice bien y el siguiente año estuve intercalando EBA con ACB, y debuté con Txus Vidorreta contra el Real Madrid. ¿Tú pensabas que ese día debutabas? No. Para nada. Había estado un partido antes, en casa contra Murcia, un partido igualado que al final resolvimos bien y a falta de 2 o 3 minutos ganábamos de 15. Y yo que estaba con Fran y con Edgar en el banquillo y me decían que iba a salir, y yo estaba acojonado, porque les decía que no, pero en el fondo sí que pensaba que iba a jugar. Y al final nada. ¿Te desilusionó? Qué va, para mí estar ahí, en el banquillo estaba bien.

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Y yo lo que quería era ser jugador ACB, no salir un minuto, que todo el mundo te aplauda y para casa. No me mola eso. Entonces al siguiente partido, contra el Madrid, en casa. Y yo estaba en el banquillo, pensando en que, si no había salido contra Murcia, no iba a jugar ese partido ni de coña. Y estaba relajado, viendo el partido en primera fila como un espectador más y en el segundo cuarto, quedando dos minutos, con el partido igualado, el Madrid, me acuerdo, en zona 2-3, y yo aprendiendo cómo atacar una zona, pero totalmente relajado. Y se gira Txus Vidorreta y me señala, yo miré para atrás, pensando que señalaba al fisio, y dice: “no, no, Brizuela, sal”. Creo que salí por Kyle Kuric. Salí cagado completamente. Pero bueno, las jugadas me las sabía, y eso me dio confianza. Granger marcó una jugada, me llega el balón y voy a penetrar. Se me cierra, y Llull, sabiendo que era un pipiolo, fintó la ayuda, sabiendo que la iba a pasar, y se metió en línea de pase. Entonces yo había pensado: “buah, penetro. Buah, está solo, se la paso”. Y me la quitó. Y yo pensaba que era el Chacho, entonces salí corriendo detrás de él, pensé en medirle los pasos y después acelerar e intentar ponerle un tapón. Y se pone a correr y veo el 23 en la camiseta,… esprinté, le cacé, hice una falta de cojones y tiros libres.

para mí fue la ostia. Y la cosa fue que según termina el último partido, el entrenador en rueda de prensa dice algo así como que ninguno de sus jugadores iba a jugar en ACB. Ese mismo fin de semana, Jorge Sanz estaba jugando en San Sebatián con Fuenlabrada, y yo en la grada viéndolo, super contento. Volví a Madrid a entrenar con el primer equipo, para ayudar, y ese fin de semana jugué contra Baskonia y Edgar también. Entonces fue una satisfacción tremenda. Me acuerdo que además saliste prácticamente a hombros. Sí, y la verdad es que en esos tres partidos que jugué me sentí muy cómodo, no me sentía jugador ACB, pero sí que pensé que con trabajo podría estar allí. ¿Cómo de importante ha sido Ocampo para ti?

¿Te dijo algo? Pues no me acuerdo, pero algo me dijo. Y ese es el primer recuerdo que tengo. Después Txus pidió tiempo muerto y me dijo que si no tenía huevos para jugar que me sentara, y pensé: “voy a intentar estar bien”: Estuve un minuto más, no hice nada, pero me sentí más cómodo. El año siguiente jugaste más en ACB. Estuve en el EBA y ACB entrenando, jugué algún partido en ACB, pero poca cosa, 5 minutos, en alguno un poco más, pero nada serio. Subía cuando había alguna lesión. Luego te fuiste a Huesca en LEB Oro, pero recuerdo un partido, una vez terminada la temporada allí, contra el Baskonia, que levantaste al público de su asiento. Estuvo guay, sobre todo porque venía de LEB Oro, de haber acabado la temporada mal, aunque individualmente había ido bien. Yo salí contento porque fui el que más puntos por minuto metió en LEB Oro ese año, #10 - JUlIO 2017

ENTREVISTA Muy importante. Él me dio la posibilidad de competir. Esos tres partidos de los que hablábamos para mí fue un punto de inflexión, ahí vi que trabajando podía aportar a un equipo ACB. Ese verano entrené a saco y me planté en pretemporada, con la suerte de tener un entrenador que partía de cero con todos. Además Diego me apretaba mucho, muy del estilo al entrenador que tuve en cadete, me retaba, me exigía más que al resto, pero era justo conmigo. Me salieron bien las cosas y funcioné.

QUIQUE VILLALOBOS Agente de Darío

Darío es un tío que no pone excusas. Si no juega no le echa la culpa a cosas absurdas, él asume que tiene parte de culpa o que tiene que hacerlo mejor y buscará hacerlo mejor. Ha tenido una buena relación con Salva y lo que quiere es intentar convencerle, con sus entrenamientos diarios y su producción diaria y a ver si se hace un hueco.

Aquel MVP en Tenerife... Eso son partidos que te salen una vez en la vida. Sí, pero te salió, y ya la gente sabía de lo que eres capaz de hacer. Yo ya sabía, por lo hecho en pretemporada, con partidos de 18 puntos, de 16 puntos… yo sabía que si tenía un buen día era capaz de meter 10 o 15 puntos metiendo un par de triples. Pero es que ese día metí 6 de 6. Me salía todo, pero no consciente de lo que estaba haciendo, simplemente jugaba, con confianza y tenía el foco en la canasta. Cuando acabó me dijeron que había hecho un partidazo, miré las estadísticas, cosa que nunca hago, y las dejé. Me quedé con el partido, con que habíamos ganado y con que fui importante al final. A mí me flipa jugar los finales de partido. Luego cogimos el avión y al llegar a Madrid me dijeron que había sido el MVP, “el primer jugador vasco MVP”, y ahí ya me di cuenta un poco de lo que había hecho. Tú huyes de ser protagonista fuera de la cancha. No me gusta. Y recuerdo que al salir del vestuario en Tenerife me vino Diego y me dijo que se me iba a empezar a acercar mucha gente, que estuviera calmado y centrado en mis cosas. Cuando salí del pabellón se me acercó mucha gente y lo que hice fue huir, llamé a mis padres, como siempre después de los partidos. No habían visto el partido, pero lo habían seguido por twitter y la verdad es que solo quería hablar con ellos para relajarme. No me mola eso de ir de “puto amo” fuera de la pista. Pero dentro, si me das el balón, bien. Hablando del año pasado. Vienes de una gran temporada, renuevas por 3 años, llega Maldonado, que se supone que apuesta por la cantera, pero traen dos bases, Jaime tiene que irse al escolta, y con Edwin en el equipo… quedan muy pocos minutos.

Una putada. Una putada, pero también es cierto que durante tu vida, ya juegues al baloncesto, seas periodista, estés en la universidad o lo que sea, vas a tener un montón de dificultades. La vida es una hija de puta, así de claro. Y es una dificultad que tuve, la afronté y vine a entrenar todos los días como un animal, porque es lo único que podía hacer. Lo que no iba a hacer era ir a donde mi agente y llorar. No iba a ir a Salva y llorar. No soy así. Yo lo que quería era ganarme los minutos ahí. Si el entrenador consideraba que no me los ganaba y que otros estaban por encima de mí, es totalmente respetable. Y es lo que hice. Y a final de temporada tuve el reconocimiento de mis compañeros, que para mi significó mucho. Jugué el último partido, no sé si 20 minutos, y muchos compañeros vinieron a decirme que merecía haber jugado, pero sobre todo estaban orgullosos de que, a pesar de no haber jugado durante el año, había ido cada entrenamiento a muerte, el que más duro. Yo estaba muy jodido, pero mucho. Para mí el día de partido y el día de después, el lunes, son los peores días, era horrible, porque en el partido me comía las tripas, yo animaba a mis compañeros, pero quería jugar, y después el lunes, con la resaca de estar de mala ostia todo el domingo y no dormir, venía a entrenar de muy mala ostia, de muy mala ostia. Y mi padre me decía: “sé que estás enfadado, pero entrena y estate serio”. Yo venía el lunes, hiciéramos lo que hiciéramos, serio y a entrenar. Y de martes a sábado estaba feliz, #10 - JUliO 2017

sas me las guardaba, pero sí que le dije que no ha sido fácil para mí, que ha sido duro, pero que no me voy a rendir, que no voy a huir, y el año que viene quiero seguir con él y quiero seguir en Estudiantes. Me encanta este club y me voy a dejar los huevos para jugar aquí. ¿Y si se da otro año igual? Pues entonces sí que habría que replantarse las cosas, pero no quiero que sea así. En verano pienso romperme el culo para que en porque entrenaba y competía con mis compañeros, agosto no sea así. pero el domingo y el lunes, era horrible. Y esto lo sabe Salva. Se lo dije cuando hablé con él. Le Tenemos Darío para rato en Estudiantes. dije que para mí esos dos días era lo peor que había. Pero bueno, entrené a gusto y a final de temporada Sí, lo más probable es que sí. Además estoy a gusto tuve el reconocimiento de os compañeros a los que aquí. Veo muy complicado irme a un sitio en el que más respetaba: Savané, Cook y Edwin. Los tres me di- vaya a estar mejor que aquí. Si hubiera hecho una jeron lo mismo, que estaban muy orgullosos de cómo temporada como la de Edwin Jackson tendría más fáhabía afrontado el último partido habiendo jugado cil ir a un sitio en el que fuera a estar mejor, pero no es muy poco, pero sobre todo de cómo había entrena- el caso. Creo que he promediado 1.5 puntos. do durante todo el año. Y para mí eso fue un reconocimiento, que no es suficiente, pero al menos sé que ¿Qué piensas cuando lo ves? hay gente que se ha dado cuenta del trabajo que he hecho. Nunca lo veo. Lo vi una vez con mi novia, que es la persona con la que más me abro. Y un día entré a Entonces, ¿tú coges a Salva y le dices que tienes que mirar el porcentaje de 3. Y es lamentable. Creo que el día que lo miré tenía un 17%, cuando entrenando hablar con él? meto entre el 80 y el 90%. Un dolor de estómago que Bueno, estábamos aquí en postemporada y le vi, le flipas. Con todo lo que había trabajado en verano… pregunté que cuando se iba, por simple curiosidad, ¡cómo influye la cabeza! y me dijo que si quería que quedásemos para charlar antes de que se fuera. Y estuvimos hora y media Una temporada para aprender. hablando, de mi hablamos 15 minutos y le dije lo que He aprendido mucho, tanto a nivel baloncesto como te he dicho. Creo que era momento de ser sincero con él. Durante de mí. Cómo convivo yo con el equipo y cómo convivo la temporada no le iba a decir nada porque es su tra- yo solo. Porque antes llegaba a casa y estaba mi herbajo y no quiero influir en él y en mi equipo. Si aporto mano, y tienes esa estrategia de irte al cine, a cenar, poco y es lo que considera el entrenador, lo que no jugar a la play en casa, pero ahora he estado solo y quiero es aportar negativamente. Entonces esas co- tenía que afrontar esa mala ostia y esa tristeza, solo. #10 - JUlIO 2017

ENTREVISTA

He mejorado en eso, y he dedicado esas ganas de trabajar y conseguir resultados en los estudios, y muy bien. Estudio psicología, tengo exámenes ahora, pero todo lo que he hecho anteriormente me ha ido muy bien. Con todo lo que has pasado, que vayas a ser psicólogo... ¡Manda narices! ¿Verdad? Además este año pensé en trabajar con un psicólogo, que es por quien estudio psicología. Conocí a una persona en Huesca, que es quién me motivó a hacer psicología. Y quise hablar con él en estos momentos malos, pero decidí superarlo yo solo y así aprender de cara a un futuro ser psicólogo.

QUIQUE VILLALOBOS Agente de Darío

Creo que tiene la mentalidad adecuada. Tú tienes dos opciones: rendirte; o luchar por hacerte un hueco. Él tiene esa mentalidad, la mentalidad de hacerse un hueco en Estudiantes. Él firmó tres años porque quiere estar en Estudiantes, no tendría lógica que a la primera se raje y se pire. Tiene que luchar por encontrar su sitio y eso es lo que está dispuesto a hacer.

#10 - JUliO 2017

Y el año que viene la Champions.

de 3x3 con la selección española.

Pues suena bien, ¿no? Está muy bien. Vamos a jugar un partido más a la semana, para los jugadores, jugar un partido a la semana,… se hace muy larga. Sobre todo si juegas el domingo. Ahora tendremos un partido a mitad de semana y vamos a viajar. Vale que sea la peor de las tres competiciones, pero hay buenos equipos y es un escaparate más.

Imagínate ser olímpico.

Y para terminar, las ventanas FIBA, ¿una oportunidad para jugar con la selección?

Pues parece una chorrada, pero cuando el otro día salió la noticia, lo leía, pero vino mi madre, y me dijo: “¿Pero tú no te das cuenta de que jugaste un 3x3 con la selección española? Imagínate que vas, es en tres años, igual te quieren llevar”. Y le dije que a mí, con tal de ser olímpico, como si juego al curling. Pues hasta aquí Darío. El año que viene, el Edwin Jackson de turno tendrá que ser suplente tuyo,

Después del año que he hecho… Pero bueno, un objetivo más. Y un reto que me parece más interesante es Esperemos. Y si no, aunque sea suplente, espero juel 3x3 de Tokio. Yo jugué un Campeonato del Mundo gar, tener minutos y competir. Eso es trabajo mío. #10 - JUlIO 2017

DIEGO OCAMPO ENTREVISTA

Intento devolverle al baloncesto aquello que me ha dado Dicen que la valía de una persona se demuestra con hechos, que las palabras se las lleva el viento. En un mundo cargado de imágenes para la galería -el llamado “postureo”-, lo genuino escasea. Por eso la originalidad y la honradez son valores cada vez más difíciles de encontrar. Y en un mundo profesional, donde los intereses propios prevalecen sobre el colectivo, es de agradecer encontrar protagonistas naturales, sin una fachada. Es verano en Badalona, la temporada regular ha terminado y la mayoría de jugadores están de vacaciones, disfrutando de la familia y amigos. Pero es en este periodo, sin la presión del exigente calendario, donde algunos profesionales se ponen el mono de trabajo para mejorar aquellas facetas de su juego que no dominan. Uno de ellos es Alberto Abalde, que prepara su nueva aventura profesional -estará en Valencia-. A su lado, corrigiéndole y animándole sin cesar, Diego Ocampo. No importa que el próximo curso no le vaya a entrenar. Entiende que en su sueldo está incluido ayudar a los jugadores que así se lo pidan. De hecho, como él mismo confiesa, no es “nada extraordinario, forma parte de mi trabajo”. Y no le falta razón, pero su implicación en el club verdinegro ha sorprendido a aficionados, directivos, jugadores e incluso entrenadores de formación. “Está pendiente de todo y cuando los horarios se lo permiten viene a echarnos una mano. Los chavales, evidentemente, le ven como un referente y se toman muy en serio sus órdenes”, comenta a FullBasket Magazine un técnico de la cantera del Joventut. Texto de Miguel Lois (@MiguelLois) Fotos de Cristina Martín

ENTREVISTA

Ocampo

es sinónimo de compromiso, de honestidad, de pasión por el baloncesto. Y de naturalidad. Charlar con él es hacerlo con una persona reflexiva y que siente devoción por aquello que hace. Su proximidad, una bendición para el entrevistador. Sus conocimientos, un privilegio. En las entrañas del Olímpic de Badalona intentamos desgranar su historia. ¿Antes de entrenador fue Diego Ocampo jugador de baloncesto? Sí, yo jugué desde infantiles. Primero estuve en mi colegio y luego en los Salesianos, que hasta hace unos años era la cantera del Ourense Baloncesto. Jugué en las categorías inferiores del club y bueno, me crié un poco viendo la época de Chandler Thompson y Andre Turner, jugadores inolvidables. ¿Recibió alguna influencia para jugar a baloncesto? Fue casualidad, porque yo hacía taekwondo y estudiaba solfeo, hacía piano, luego iba a la piscina… Como un niño normal, vaya. Sí es verdad que el primer año infantil empezamos a jugar más en serio, y así progresivamente. Cuando pasé a los Salesianos fui dejando otras cosas por el baloncesto, pero no por ninguna influencia, sencillamente me gustaba más. ¿Cómo nace esa voluntad de querer ser entrenador? En mi último año junior, el entrenador que tuve me dio varios libros con ejercicios y me incitó a que ayudara a los compañeros. Ahí descubrí mi vena de coach, creo. Me fui a estudiar INEF a La Coruña y aunque seguía jugando como sénior ya no me sentía cómodo porque no entrenaba cada día con mis compañeros y sólo jugaba los viernes. Entonces empecé a entrenar en el ABO de forma altruista, donde estuve tres años. Gracias a eso comencé mi carrera. De ahí pasé al Club Ourense Baloncesto de nuevo, llevando al cadete, y pasé al Colegio

Carmelitas como profesor de psicomotricidad, que me aportaba más. Cuando Ourense bajó de ACB a LEB se empezó a crear una estructura de cantera potente y me llamaron para que fuera preparador físico y ayudante en el equipo de EBA. Pero entonces, durante la pretemporada, Salva Maldonado me llamó un día y me dijo que pasaba al primer equipo como delegado y ayudante, así que tuve que combinar ambas faenas. Tenía 25 años y fue un año apasionante. Llegabas a las ocho de la mañana y te ibas a las diez de la noche pero era una adrenalina total. Quizás fue el inicio de una etapa profesional, pero en ningún momento pensaba en dedicarme plenamente a ello, simplemente lo vivía con naturalidad. ¿En qué momento se da cuenta que ser entrenador pasa de ser un hobbie a un oficio puro y duro? Creo que nunca realmente. Para mí, estar todo el día pensando en baloncesto y entrenar, ganándome la vida, es un privilegio. Yo tengo una gran admiración por los entrenadores de formación que tienen un trabajo aparte y luego dedican un tiempo a los chavales. Cuando me echaron de Estudiantes estuve entrenando a un colegio en Dos Hermanas. Y tan contento que estaba. Este deporte es pura pasión. Intento devolverle al baloncesto aquello que me ha dado, los conocimientos, los valores, la ilusión… Yo soy feliz entrenando al primer equipo del Joventut, pero también me encantaba trabajar en el Dos Hermanas. Está claro que la exigencia profesional no es la misma, pero se trata de un trabajo vocacional. ¿Es vocacional? Con el tiempo sí, evidentemente. Siempre tienes el objetivo de mejorar aquello que tienes para poder alcanzar los objetivos. En el caso del ámbito profesional el primer reto es ganar cada domingo, eso es así. Luego tienes que intentar combinar eso con una mejora de los jugadores, trabajar con los jóvenes…

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ENTREVISTA Es todo un cóctel que debe madurarse. Hablemos de la etapa de Tarragona. Su primera como entrenador principal. Eso es. Empecé como ayudante de Salva Maldonado otra vez y él, tras los problemas económicos del club, decidió no seguir. Fue entonces cuando les recomendó que yo me quedara como primero, algo que se lo agradeceré toda la vida. Hicimos una campaña buenísima jugando los playoffs de ascenso. Ha sido ayudante de Pedro Martínez, de Joan Plaza, de Aíto… ¿pero es Salva el más importante? Creo que los cuatro son básicos en mi carrera, me han permitido aprender muchas cosas y me han apoyado. Coincidí con cada uno en momentos distintos de mi vida. Salva me dio la opción de empezar en el baloncesto profesional; con Pedro tuve la oportunidad de jugar la ACB y competiciones europeas; con Joan he vivido etapas maravillosas y creo que con Aíto fue muy importante estar seis temporadas allí en Sevilla. El ambiente que se respiraba era perfecto para desarrollar nuestra idea. Todos han sido determinantes. Lo que sí es cierto es que Salva fue el primero. ¿Qué hubiera pasado si no me hubiese llamado y dado la oportunidad? Nunca se sabrá. ¿Con qué se queda de cada uno? Si tuviera que responder al revés, diría que todos tienen en común una confianza extrema en su método. Luego será mejor o peor, pero llevan su idea hasta el final, adaptándose evidentemente al lugar donde están. Además, afirmaría que todos han pasado por equipos de un nivel más bajo, por decirlo de alguna manera, y han sabido sacar el máximo provecho de los recursos que disponían. Si tuviera que decir algo de cada uno… De Salva diría el equilibrio; de Pedro la perseverancia; de Joan la ambición y las ganas de crecer y mejorar y de Aíto el saber convencer a los que tiene alrededor.

el equilibrio de Salva Maldonado; la perseverancia de Pedro Martínez; la ambición de Joan Plaza; el saber convencer de Aíto ¿Quién era su referencia? Como jugador me crié viendo el Mundial ‘84 y claro, cuando luego trabajas con Villacampa, ahora Juanan (Morales), conoces a Margall… pues casi no te lo crees. Tiene un punto de friki, pero es así. No sé si tenía una referencia como entrenador, creo que Aíto, evidentemente, es un maestro. Se han hecho virales sus intervenciones en entrenamientos con equipos de la cantera. ¿Es más importante que nunca el trabajo de la formación? Lo hago desde la naturalidad, la verdad. No lo hago siempre, sólo cuando el horario me lo permite y fuera de la temporada, evidentemente, porque mi objetivo aquí es otro. Lo hago porque me gusta. Creo que formar a los jugadores es fundamental. Si no trabajas para mejorar eres peor, porque los rivales siguen mejorando. Creo que la educación es infinita, hasta que mueras puedes aprender si realmente quieres. ¿Hacen daño los vídeos que llegan día tras día de la NBA? Depende. Si estudias un poco a Curry hay cosas increíbles. El problema es que tenemos que adaptarnos a las nuevas necesidades. Antes tenías que quedarte hasta las doce de la noche del viernes para ver “Cerca de las estrellas” con Ramón Trecet y Esteban Gómez. Tenías que aprender a esperar hasta el viernes. Ahora no, no tenemos paciencia y podemos ver vídeos en cualquier momento. Yo puedo enviar un vídeo de Curry al grupo de whatsapp del equipo y en un minuto ya lo han visto. Creo que estamos aprendiendo a saber cómo hay que manejar las redes sociales. Pero a lo mejor a unas chicas de Salamanca

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les puedes pasar vídeos de Sílvia Domínguez porque tiene una técnica individual increíble.

porque casi todos los jugadores tiraban más o menos de triple, de ahí a que se generasen muchos espacios en la zona.

A lo mejor una jugada se hace viral porque ha habido un mate. Pero ese mate viene precedido de un pase. Los entrenadores tenemos la labor de potenciar eso y hacer hincapié en otros aspectos más allá de los highlights, pero creo que la NBA no es del todo mala, simplemente hay que saber ayudar a los jugadores eligiendo aquello que les puede ser de utilidad.

¿Se tiene que ampliar la pista, entonces?

Desde que empezó a entrenar… ¿cómo cree que ha cambiado el baloncesto?

Lo más importante es conocer bien a los jugadores. Cada persona aprende de una forma diferente en función de sus experiencias pasadas, del lugar donde se ha criado… Creo que es fundamental tener una buena comunicación, pero a su vez que el jugador ponga de su parte y se deje enseñar. En baloncesto es aún más difícil porque conviven diferentes nacionalidades, es decir, hábitos distintos. Y hay que entender que los jugadores también son personas; se debe tener empatía. Y finalmente, lógicamente, hay que ser ejemplar con los valores que transmites. No puedes ordenar algo si eres incapaz de cumplirlo. Creo que los jugadores realmente buenos no son egoístas y saben que en un deporte como este tener un buen equipo es fundamental. Como dice Popovich, “si tengo a un jugador egoísta tengo que echarlo”.

Hay algo que evidentemente ha cambiado. Hemos pasado de 22 triples tirados por partido a una media de 26. La diferencia ahora está en el número de canastas de tres. El tema es ver cómo llegan esos triples. ¿Tirando solo? De acuerdo, ¿cómo conseguimos que un jugador tire sin oposición? El campo cada vez se ha quedado más pequeño y equipos como por ejemplo el Fenerbahce cambian constantemente de ajustes en defensa y llegan a todos lados. La única manera de romper defensas así es que todos los jugadores lancen de tres. Siempre habrá especialistas, pero creo que los jugadores del futuro deberán hacer muchas cosas bien. Si tiro bien pero no sé penetrar, los defensas nos puntearán; si no sé tirar pero penetro bien, la defensa se cerrará y será imposible entrar. Por eso encontramos pívots que salen al triple como Dubljevic y luego Sato va a jugar al poste. O Baskonia ha sido un equipo que ha jugado muy abierto

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Yo creo que sí, ahora los jugadores son más físicos y llegan de punta a punta con mucha facilidad. Lo importante es que trabajemos todos juntos en la misma línea para que el baloncesto mejore. ¿Cómo se gestiona un ego en un vestuario?

Podríamos decir que hay tres tipos de entrenadores: los seleccionadores, que dirigen una vez al año; los entrenadores de competiciones europeas, que apenas pueden pre-

ENTREVISTA

quiere de un proceso. En cualquier ámbito de la vida. Cuando no llegan los resultados te ponen en duda, es lógico, pero con naturalidad tienes que trabajar en equipo. ¿Cómo es Diego Ocampo fuera de las pistas? Como en el entrenamiento. Una persona normal, que intenta mejorar, que acepta sus errores. Ahora mismo aprendiendo a ser padre, adaptándome a mi nueva vida aquí. Soy como cualquier persona, cuando entro a una panadería digo “hola” [risas]. ¿Qué hace para desconectar del baloncesto? Me gusta estar con mis niños pequeños. Eso es un torrente de emociones y de movimientos. He descubierto una cosa muy buena que me obliga a desconectar del baloncesto. Me gusta salir a correr, ir al cine… Creo que es una debilidad que tengo, me cuesta desconectar. Pero con mis hijos lo tengo fácil. parar partidos y los que, como es su caso, sólo dirigen un partido a la semana. ¿Cómo se gestiona eso, cuesta mantener la motivación de un jugador? Tienes que adaptarte, eso está claro. Cada caso tiene ventajas e inconvenientes. ¿No se puede entrenar suficiente si juegas en Europa? Seguramente. Pero los jugadores quieren jugar y los aficionados quieren ver partidos. Pagar un abono a día de hoy para ver sólo 16 partidos es difícil. Tenemos que trabajar entre todos. Yo entiendo que la FIBA, la Euroliga y la ACB luchen por lo suyo, es lógico, pero creo que en definitiva nos retroalimentamos entre todos. En nuestro caso es una tarea difícil porque tenemos que convencer a los jugadores de que el trabajo que realizamos es para el próximo domingo, pero a su vez es a medio-largo plazo. Lo que está claro es que con la competición mejoras. Sin embargo, la prevención de las lesiones o el trabajo de la técnica individual no puede realizarse durante la temporada si la carga de partidos es excesiva. Todo tiene

su qué y hay que intentar adaptarte a ello. Una pregunta de las que no gusta a los entrenadores… Pero, ¿qué jugador le ha sorprendido más de los que ha dirigido? [Risas] Yo siempre digo que he tenido suerte de los entrenadores de los que he aprendido, pero no puedo quejarme ni mucho menos de los jugadores que he tenido. Tengo recuerdos de los jugadores y jugadoras que entrené cuando era joven, aprendí mucho de ellos. Su ilusión por venir a entrenar era tremenda. Y también me acuerdo de todos los jugadores que habré echado a perder. Recuerdo a un jugador que siempre lo ponía de alero y después de siete meses se me acercó y me dijo que él quería jugar dentro y pelearse con los altos aunque no era excesivamente fuerte. Ahí me di cuenta que también hay que saber entender a los jugadores. Hablando en términos de profesionales… Por su inteligencia y su talento Kristaps Porzingis y Marc Gasol; Satoransky y Sastre por trabajo y constancia. Si hablamos de la Penya pondría el ejemplo de Albert Sàbat, que ha estado muchos años en

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LEB y ahora se ha asentado en la ACB a base de mucha actitud y nunca dejar de luchar. ¿En el baloncesto actual cuesta mucho combinar la formación con los objetivos resultadistas? Tienes que ganar formando. Combinar el corto plazo –ganar- con el medio/largo plazo –sacar jugadores- es difícil. Ahora todo es inmediato y lo único que cuenta es el presente. Cuando no ganas te meten palos y si en dos semanas ganas te elogian. Esto ahora funciona así, queremos la exigencia absoluta del momento, no ponemos casi nada en contexto. El mejor ejemplo es el suyo este curso en la Penya. Un mal inicio… pero le otorgaron confianza. Claro, me dejaron trabajar en un ambiente de máxima confianza y eso se percibe. Lo importante es que nunca dejes de creer en el modelo que tienes en la cabeza. Pero claro, tienes que saber inculcarlo a los jugadores, y eso re-

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¿Tiene alguna superstición? Qué va [risas]. Incluso cuando a veces la cabeza intenta hacerme creer que puede existir alguna hago un razonamiento lógico y digo “que no Diego, que no hay existe ninguna relación”. Siendo gallego… ¿Playa o montaña? Me gusta más la playa y el agua fría, me encanta el Atlántico. Tengo un rincón donde siempre veraneo con mis padres: Baiona. ¿Qué sueños tiene Diego Ocampo y dónde se ve en un futuro? Me veo aquí, la verdad. Creo que los entrenadores deben tener proyectos a largo plazo en su carrera, y en eso estoy yo aquí. Pero sinceramente pienso mucho en el día a día. Trabajando bien en el presente te garantizas un nuevo futuro. Mi único sueño es seguir mejorando. Yo creo que los trenes pasan varias veces en la vida, no hay que castigarse tanto. Hay que disfrutar de la vida.

Aprendiendo de Xabier Añua, una vida dedicada al baloncesto

entrevista Dicen que el periodista tiene la función de explicar a la gente qué ocurre. En el caso de las historias, dar voz a los protagonistas, jamás formar parte del relato. Y eso es innegociable, pero a veces cuesta no describir, cuanto menos, las sensaciones vividas por el autor cuando tiene la posibilidad de charlar con una persona con amplia experiencia y enorme sabiduría. Con un mito, sin más. Me van a permitir la licencia de contextualizar la cita con Xabier Añua (29/V/1935, Vitoria), una de las figuras más importantes de la historia de nuestro baloncesto. En pleno Paseo de Gracia de Barcelona, nos reunimos por primera vez. Servidor, amante de conocer el pasado de nuestro deporte, intenta manejar los nervios previos a una entrevista periodística. Bajo un sol infernal y un torrente constante de turistas, lo primero que me sorprende de Xabier es su complicidad y cercanía. Con una sonrisa perenne en su rostro no duda en espetarme de entrada: “Si no me hubiera metido en las redes sociales y en los foros yo no sería conocido, como muchos de mis otros compañeros de la época. Y quizás tú y yo no estaríamos ahora aquí”. Por suerte, estuvimos. Y en una comida que se alargó casi hasta las tres horas en el bar “Txapela” –no podía ser otra ubicación, claramente- pude conocer en profundidad a Xabier Añua, una persona honesta, campechano y de gran corazón. Amante de los jóvenes, consumidor de baloncesto y un fiel aficionado a la bicicleta. “Salgo cada mañana con un grupo de amigos por Vitoria y hacemos unos 20km. Hay que mantenerse en forma. Voy lento, pero me encanta”, asegura. Texto de Miguel Lois (@MiguelLois) Fotos de Miguel Lois y baskonistas.com

A sus 82 años

tiene muchísimo interés por la tecnología y sigue de cerca la información baloncestística. Amigo de sus amigos, en el apartado sentimental es muy claro: “Tener una buena compañera de viaje es fundamental en la vida. Poder compartir vivencias, desahogarte, reír, llorar… esas cosas no se pagan con dinero”, explica. Fan de los libros, su otra pasión más allá del baloncesto es el jazz. Y es que su hermano, Iñaki, es el creador y director del Festival de Jazz de Vitoria. “Prácticamente todos los estilos musicales me encantan, pero el jazz es único y especial”, confiesa. Baloncesto, jazz y abogacía, su profesión cuando decidió poner el punto y final a su etapa en los banquillos. “He llevado muchísimos casos a lo largo de mi carrera. Siempre me había gustado mucho el oficio y no dudé en tener mi propio despacho”, recuerda. Un pozo de sabiduría cargado de anécdotas y memorias que, seguro, no estarán incluidas todas en la entrevista. Quién sabe si tocará emplazarse para otra ocasión. Hasta entonces, que el baloncesto siga cuidando de sus mitos –bravo a la Asociación Española de Entrenadores de Baloncesto (AEEB) por entregarle la medalla de oro en el mes de febrero de 2017-. Sin ellos, nada de lo actual tendría sentido.

entrevista Empecemos en los orígenes… tiremos la vista En los años 60 ya entrenaba, sí. Poco a poco fuiatrás. ¿Cuándo empieza la relación de Xabier mos entrenándonos ante equipos de Madrid y Cataluña, que venían a jugar contra nosotros. Añua con el baloncesto? Pero ellos sabían mucho más. Yo empecé con 15 años a jugar al baloncesto, porque antes jugaba a fútbol, y muy bien eh [ri- Los éxitos no tardaron en llegar. Primero con sas]. Me quería fichar el Alavés y mi madre dijo el Phillips y después con la Sociedad Deportiva que no, que tenía que estudiar. Estaba perdido Kas. porque se me daba realmente bien. Así que tenía que buscar algún deporte que mi madre no co- Conseguimos recursos económicos y fichamos nociera para que me dejase jugar. Y escogí el a dos estadounidenses de calidad, Bob Williams baloncesto, un deporte que desconocía total- y John Mathis. Eran tiempos increíbles. Yo me mente. Comencé en el Corazonistas, en mi co- traje a jugadores de Madrid como Pepe Laso. legio. Con un balón de cuero intentábamos ano- Subimos a Primera División y en nuestro pritar en una cesta que pusieron en la pared del mer año fuimos subcampeones de Copa. Luyk recreo. ¡El balón apenas cabía en el aro de lo nos endosó 40 puntos en la final. Fue algo inpequeño que era! Nosotros no teníamos ni idea, creíble. Llegamos a jugar la Recopa contra el AEK ni botar, ni pasar… Así que hicimos un aprende Atenas en el Estadio Olímpico ante 40.000 dizaje constante día a día. Recuerdo que vino personas. Nos metieron una buena tunda [risas]. un entrenador estadounidense a enseñarnos a jugar. Primero simplemente a pasar el balón. En Era un alumno aplicado. aquella época se hacía todo con las dos manos, Hice un curso en Cataluña de entrenadores ya puedes imaginarte la estética. donde coincidí con Eduardo Portela. Y fui el número dos de un montón de personas. No reY en apenas cinco años deja de jugar. cuerdo quién fue el primero.

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Tras varios años aquí tenía claro que debía ferencia para usted. dar un salto profesional. Cuénteme su Para mí John Wooden fue uno de los inetapa en Estados Unidos, un pionero. ventores del baloncesto. Allí lo consideran Oh, aquella época fue maravillosa. Me pre- un Dios. Y no me extraña. Era un estudioso senté en un entrenamiento de los Knicks absoluto del juego. Controlaba absolutapara preguntar si podía quedarme a pre- mente todo y corregía cualquier aspecto senciar alguno y aprender sistemas. El en- a los jugadores. No se le escapaba nada. Y trenador me dijo: “¿Usted qué quiere, ver aquí en España hizo varios clínics con enlos entrenamientos?” Le dije que sí, claro. trenadores jóvenes. Recuerdo que Moncho Me dio un montón de libros y me citó para Monsalve hacía de traductor, y el cabrito se el día siguiente a las nueve de la mañana. inventaba la mitad de las cosas [risas]. Era Yo tendría poco más de 30 años y hablaba pura sabiduría. buen inglés. Imagínate. Me pusieron en Me presenté en un entrenamiento de una habitación de hotel cerca del Madison los Knicks para preguntar si podía Square Garden al lado de Dick Barnett, un quedarme a presenciar alguno y base zurdo que era un fenómeno. Y claro, aprender sistemas ahí las noches eran muy largas y con muchas chicas visitando su habitación [risas]. Es curioso que muchos deportistas en EsLa verdad es que me facilitaron mucha in- tados Unidos afirmen que “debemos coformación interesante que pude aplicar piar del baloncesto europeo”… cuando en España. Pude coincidir con Ed Jucker, casi todos los entrenadores europeos uno de los entrenadores de Oscar Robert- aprendieron de ellos. son, para mí uno de los mejores jugadores de la historia. Yo un día le pregunté: “¿Por Sí, desde luego, han cambiado un poco las qué me enseñáis tantas cosas?” Y me tornas. Pero es que ellos allí tienen muy respondió con una frase muy buena: interiorizado el aspecto académico en la “Porque si un día me enfrento a ti sé que Universidad. Y tampoco son tontos y saben valorar lo que se hace fuera de allí. tendré que mejorar para superarte”. Allí aprendí también todo sobre las defensas a toda pista. Cuando volví a España, como los jugadores técnicamente eran torpes, utilizábamos defensas mixtas y rombo y robábamos un montón de pelotas. Ahora eso ya es imposible, está todo muy estudiado. ¿Le costaba mucho a los jugadores aprender en aquella época?

Usted fue a impartir clases a Sudamérica. Así es, fui a Venezuela, Colombia y Chile. En el caso de Chile estuve muy cómodo, y casi me quedo toda la temporada. Casualmente, al año siguiente de mi estancia allí hubo el golpe de estado. Muchos de los entrenadores con los que coincidí desaparecieron y nunca más supe de ellos. Realmente fue duro. Era el verano del año 68.

Al año siguiente de mi estancia allí Yo diría que no, aunque tampoco lo podría comparar con la actualidad. Los jugadores [Chile] hubo el golpe de estado. Muchos se tomaban el aprendizaje como un reto. Y de los entrenadores con los que el entrenador tenía el deber de explicar y coincidí desaparecieron y nunca más ser muy persistente. Eso no significa severo supe de ellos. o rígido, pero sí muy constante para conseSiempre dice que usted es conocido graguir resultados. cias a las redes sociales. Tengo entendido que Wooden es una re#10 - julio 2017

ENTREVISTA

La gente me conoce porque yo me he metido en las redes sociales. Eso es así, sin más. Todo el mundo pensaba hace nada que el baloncesto comenzó con la ACB en España, y eso no es así. En los años 50 ya se jugaba a baloncesto en Cataluña. Si yo no me doy a conocer hubiera sido imposible tener tanto reconocimiento. Compañeros de mi época buenísimos, tanto jugadores como entrenadores, son anónimos ahora. Yo he podido conocer a muchísima gente gracias a las redes sociales, y eso es fantástico. Y creo que, como soy viejito, se me ha cogido cariño [risas].

Todo el mundo pensaba hace nada que el baloncesto comenzó con la ACB en España, y eso no es así. En los años 50 ya se jugaba a baloncesto en Cataluña. El baloncesto de formación ha tenido que cambiar mucho desde que usted comenzó su etapa en los banquillos. Desde luego. Ahora hay una tendencia muy clara que consiste en ganar a cualquier precio si es necesario. Y olvidamos que en edades primerizas lo más importante es divertirse. Con mi nieto hay veces que le pregunto por el partido y me responde que ha ganado pero que se ha aburrido. Los entrenadores tienen que entender que son profesores. Pueden influir mucho en la educación de los más pequeños. Y el baloncesto permite enseñar unos valores que el profesor de matemáticas, por ejemplo, no puede. Tenemos una labor social mayor de lo que nos imaginamos. No pensemos tanto en si un jugador acaba saliendo o no, siempre habrá talento, pero primero formémoslos. Creo que necesitamos que los chavales salgan a la calle a jugar a baloncesto. No me gusta que estén encerrados en casa jugando a las videoconsolas.

Ahora hay una tendencia muy clara que consiste en ganar a cualquier precio si es necesario. Y olvidamos que en edades primerizas lo más importante es diveritrse.

Pero cada vez hay más problemas económicos… Sí, pero porque a veces los clubes van a pedir dinero al organismo incorrecto. Pongo el ejemplo de Vitoria, mi ciudad. Si Araski va a la consejería de deportes a pedir dinero le dirán que no porque delante tiene el Alavés o el Baskonia, que generan más retorno. ¿Y por qué no intentamos ir a la consejería social de cada ciudad? El baloncesto realiza una imprescindible labor social, intentemos obtener ayudas en ese ámbito, posiblemente tengamos más opciones. ¿Nunca ha llevado a niños? La verdad es que nunca me he visto capacitado para ello. Quizás me arrepiento un poco de ello, pero la verdad es que en aquella época sólo me veía llevando a jugadores de élite. No tenía la paciencia suficiente ni la capacidad para enseñar gráficamente mis conocimientos. Aíto y usted tienen una relación muy estrecha desde hace varios años. Yo lo conozco desde el año 1969. Él ha tenido una carrera increíble. Su etapa en el Barça fue la mejor, una maravilla, pero él ha hecho algo que muchos entrenadores no han sido capaces de hacer. Se fue a Sevilla a un equipo que estaba muy abajo y construyó un proyecto que llegó al límite de sus posibilidades. Eso sólo puede conseguirlo él. Luego se marchó a Gran Canaria y puso al club al nivel de los grandes de nuestra liga, aunque lógicamente también con unas limitaciones. De los grandes entrenadores, ninguno ha cogido a un equipo tan bajo, en el buen sentido de la palabra. Siempre que nos vemos hablamos de otras cosas que no son baloncesto. Evidentemente algo tocamos, pero nos juntamos como amigos. Fue usted quien lo trajo al FC Barcelona. Así es. Mi historia con el Barça tiene su gra#10 - julio 2017

cia. Tras un campeonato con España, al bajar del avión en Madrid me esperaba el señor de la directiva azulgrana y me dijo que quería que llevase al Barça. Me ofreció al equipo junior campeón estatal y la posibilidad de fichar a dos americanos y dos jugadores que yo eligiera. La verdad es que me gustaron, tenían muy buena pinta. Estaban los padres de Grimau y Sada entre otros. Traje a Aíto porque le había conocido en la selección y me parecía ya un jugador fantástico, muy listo tácticamente y ya un líder a nivel de gestión. Junto a él llegó el difunto Shegun Azpiazu, un pívot dominante y larguísimo. ¿Aíto ya era el más listo, entonces? Sí, era algo increíble. Como jugador era tosco, pero dirigía de forma excepcional. Teníamos una compenetración total. Yo le miraba desde el banquillo y ya me entendía con una sola mirada. Además compartimos piso durante muchos años y forjamos una gran amistad.

Porque estaba loco. Luego fichó por el Estudiantes y se puso a estudiar medicina. Tardó 20 años en acabar la carrera. Hace poco murió.

Aíto era un jugador tosco, pero dirigía de forma excepcional. Teníamos una compenetración total. Ustedes inauguraron el Palau Blaugrana. Así es, fue en 1971 y contra el Real Madrid. Les ganamos y salí del Palau a hombros. Aún podían conmigo porque no estaba tan gordo [risas]. Desde el primer año llenábamos el pabellón.

En 1971 estrenamos el Palau Blaugrana contra el Real Madrid. Les ganamos y salí a hombros. Aún podían conmigo porque no estaba tan gordo.

Y ahora se marcha a Alemania. Sí, y ya puedo asegurar que no es por dinero. A él le gustan los proyectos bien organizados, que haya una estructura de club seria… y encima allí hay una afición tremenda por el baloncesto. En su etapa del Barça chocó bastante con Albie Grant. Oh, qué tío. Era un jugador fantástico con un talento descomunal. Recuerdo un partido en Galicia, quedaban muy pocos segundos y lanzaba dos tiros libres. Íbamos empate –en aquella época terminaban los partidos en empate- y el muy sinvergüenza no lanzó los tiros libres. Se puso a bailar y a hacer malabarismos con el balón, y claro, el árbitro pitó el final del partido. Lo dejamos allí y ya no volvió a jugar nunca más con nosotros. ¿Por qué no quiso tirar?

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¿Por qué dejó de entrenar?

mi vida bien de salud y disfrutando de mis amigos, con los que puedo charlar y comBueno, es complicado. Cuando sales del partir recuerdos. Y con mi mujer, Maite, a Barça, ¿qué te queda? Pasé por el Águilas la que conocí cuando estaba en Barcelona de Bilbao, pero descendimos. Luego estuve porque era la intérprete de los jugadores. dos años en Francia, en Antibes, con mi Sin ella mi vida no hubiera tenido sentido. mujer, pero ya no sentía la misma pasión por entrenar. En 1976 decidí dejarlo y dediTuve la fortuna de ir a Estados Unidos carme a la abogacía, mi otro oficio. y ser uno de los entrenadores pioneAunque aún tuvo un último baile con su querido Baskonia.

¿Añora el baloncesto antiguo?

muchísima calidad. Luego hay otras que no tanto, pero puedes filtrar a tu gusto. Creo No, ni mucho menos. Hombre, guardas que se tiene que animar a los medios digibuenos recuerdos, está claro. Pero ahora el tales a seguir trabajando… y a las empresas baloncesto es mucho mejor, más deporti- para que apuesten. Lo digital no es el futuvo… Si miras un partido de Euroliga es in- ro, es el presente. creíble la calidad que tienen ahora los jugadores, cómo se pegan, físicamente son El baloncesto le ha dado muchos amigos. unas motos. No tengo ninguna duda que es lo mejor que he conseguido gracias al baloncesto. Creo que se tiene que animar a los Me reúno mucho con Pepe Laso y Vicente medios digitales a seguir trabajando... Ramos y recordamos campeonatos de los y a las empresas para que apuesten. años 60 con la selección española. Es muy Lo digital no es el futuro, bonito realmente. He sido y soy muy feliz es el presente. en este sentido. Le estoy muy agradecido a Cómo ha cambiado el baloncesto, su re- este deporte. percusión al menos, gracias a los medios ¿Cómo era en aquella época combinar la digitales… vida de entrenador con la familiar? Yo soy muy mayor, pero tengo una teoría. Creo que los medios de papel tienen menos Pues imagino que como ahora. Cuando difusión que los digitales. La gente los lee volvíamos a casa la primera pregunta que de pasada. Creo que los digitales, al ser me hacían era si habíamos ganado, pero lo más especializados, reciben unos lectores importante venía justo después, que tocaba mucho más específicos e interesados en estar con los chavales. Daba igual si habías el tema concreto. Yo leo cosas a veces de ganado o perdido.

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ros en nuestro país, pero hubo muchos igual de buenos que yo.

Hombre, es un recuerdo imborrable. Me convencieron para volver a los banquillos y estuve una temporada en el equipo, por aquel entonces llamado “Caja de Álava”. Y ganamos la Copa de Asociación contra el CAI Zaragoza. Se jugó en Villanueva de la Serena y hay una fotografía muy buena de dos jugadores americanos con un niño pequeño levantando una copa… Y hace unos años descubrimos que era José Manuel Calderón de pequeño. Él mismo lo confesó, que el de la foto era él. Fue muy divertido, la verdad. Los reconocimientos tienen que darse en vida. Esa Medalla de oro de la AEEB tuvo que ser especial… Lloré como un crío. Para mí fue muy especial poder recibirla rodeado de amigos. Pero considero que si la he recibido es porque me he metido en las redes sociales. Es cierto que tuve la fortuna de ir a Estados Unidos y ser uno de los entrenadores pioneros en nuestro país, pero hubo muchos igual de buenos que yo. Si no me llego a dar a conocer a través de Twitter no estaría aquí. Pero es algo que no olvidaré jamás y estoy muy agradecido a todos los que han tomado esta decisión de darme este premio. Una última… ¿le ha quedado algún sueño por cumplir? Me siento un privilegiado, siempre he hecho aquello que me gustaba y como yo quería. No pretendía ganar mil títulos y demás. Sobre todo quería llegar al final de #10 - julio 2017

Con la grabadora apagada hablamos de los refugiados, de la política y de la vida en general. Opiniones compartidas y una conclusión devastadora: el ser humano es despreciable y nosotros somos unos privilegiados. Nos despedimos Xabier y un servidor con un sentido abrazo. Con la inequívoca sensación de haber asistido a una de las mejores clases de historia de mi vida. Ojalá no sea la última.

diana taurasi, lágrimas de mármol El baloncesto femenino arrastraba una corriente social totalmente injusta, una que denostaba la labor de todas aquellas jugadoras que se partían la cara en el parqué. Definían al juego femenino de precario, aburrido e incluso carente de emoción. Con todo ese peso en las espaldas de una organización en pañales, una guerrera nacida en las trincheras del deporte, una diosa sin altar ni fieles, salió de las catacumbas del baloncesto universitario para elevar a categoría de arte el juego de los juegos. Esa es Diana Taurasi, la niña de los sueños de papel. Texto de Iván Libreros (@IvanLibreros95) Fotos de NBAE, GETTY Images, AP y Diana Taurasi

Diana Lurena Taurasi nació el 11 de junio de 1982 en Chino, una ciudad del Condado de San Bernardino, ubicada en el estado de California. Fue la segunda y última hija del matrimonio entre Lily y Mario, que ya habían concebido tiempo atrás a Jessika, hermana mayor de Diana. Taurasi se crió desde muy pequeña en un hogar multicultural, sencillo y educado. Hablaba castellano, pues su madre Lily era argentina, e italiano gracias a su padre, nacido en Taurasi, un municipio de la provincia de Avellino. La historia de este matrimonio tiene su intríngulis. Mario, siendo muy joven, emigró a Argentina desde Italia, donde conoció a Lily, antes de poner rumbo a los Estados Unidos, emplazamiento donde desarrollaron su vida familiar. Desde bien pequeñas, las dos hermanas recibieron unos valores muy concretos: ser felices, ser leales y, si podía ser, llegar puntual a la hora de cenar. No resultó fácil hacer ver a Diana que su condición física, una que a menudo convertía su estatura en la más alta de su clase, no era ningún trauma. Todo lo contrario, podría usar esa ventaja biológica más adelante, cuando quisiera practicar algún deporte. Sus imponentes capacidades atléticas no le habían llegado por pura casuística, su padre había sido portero de fútbol profesional. Embaucada, como tantos niños y niñas antes, quiso seguir los pasos de Earvin Johnson. No sólo captó la esencia del verso libre de Magic, esa sinfonía solitaria que acaba llevando a toda la orquesta a la sublimación, sino que además le añadió una ética de trabajo espartana. Sin ser una gran anotadora, en sus inicios dominaba el juego gracias a su capacidad de defender a todo tipo de jugadoras y a un exquisito manejo de balón. Hasta llegar a sexto grado, Diana sólo había tenido contacto con el baloncesto en las canchas callejeras de su barrio, donde se pasaba las horas puliendo sus defectos tácticos y técnicos. Sin embargo, un día llamó la atención de Lou Zylstra, técnico de la Amateur Athletic Union (AAU), y le pidió que entrenase con ellos, quedando muy impresionados. Cuando dio el salto a la educación secundaria, de la mano del Instituto Don Antonio Lugo, situado en su Chino natal, su potencial se vio multiplicado. Su última temporada, la sénior, fue un escándalo. Promedió 28.8 puntos, 12,9 rebotes y 4,2 asistencias y ayudó a su instituto, normalmente sin opciones de ganar nada, a luchar por el título estatal en el año 2000. Tras aquel año, Diana recibió varios honores, entre ellos, ser la mejor jugadora del estado y la quinta máxima

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Diana y Sue Bird. En la 2001/2002, las Huskies ganaron el título sin perder un solo encuentro en todo el año, 39-0 de récord, marca que comparten con el equipo de Tennessee en 1988, incluyendo una trabajada victoria en la final ante Oklahoma (80-72). Taurasi se fue hasta los 14.6 puntos de promedio aquel año. El draft de 2002 mandó a Sue Bird a Seattle, donde todavía hoy sigue agrandando su leyenda. Con todo el peso del equipo en los hombros de Diana, Uconn no defraudó. Rodeada de grandes nombres como Jessica Moore, Mafia Conlon, Ashley Battle, Ann Strother, Barbara Turner o Nicole Wolff, las Huskies enfilaron su segundo campeonato seguido. Diana siguió su brillante campaña, ganando por primera vez el Naismith Player Of The Year, convirtiéndose en la primera Huskie en alcanzar 2.000 puntos, 600 rebotes y 600 asistencias.

anotadora histórica del mismo al terminar su etapa en Don Antonio (2.156 puntos). A pesar de perder su imbatibilidad ante Villanova tras 70 encuentros seguidos saldados con victoria, Uconn Todo lo anterior había estado genial, había enseña- salió campeona de la Final Four de Atlanta tras derrodo al mundo que su talento llegaría hasta donde ella tar con mucho sufrimiento a Texas en semifinales (71quisiese, pero quedaba lo más importante, acertar en 69) y a Tennesseee en la gran final (73-68), firmando la elección de la Universidad. Muchos programas uni- un récord de 36-1 nada desdeñable versitarios trataron de fichar a Diana. Por cercanía, en y sumando su segundo Naismith casa esperaban que eligiera UCLA, legendaria escuela Player of the Year. de baloncesto con un prestigio imposible de cuantificar. Pero entonces, el italiano Gino Auriemma, en- Ya en su último año en la Unitrenador de la Universidad de Connecticut, puso en versidad, Uconn se hacía con marcha su plan para hacerse con el joven talento cali- el título por tercer año conforniano. El primero que cayó en sus redes fue su ‘ve- secutivo derrotando, de cino’ Mario, engatusado con todo tipo de palabrería e nuevo, a Tennessee en incluso alguna botella de vino tuvo la culpa de que, la la final por 70-61. No visita de los Taurasi a Connecticut, Diana se decidiera se podía dejar mejor finalmente por los Huskies. legado que Diana en ConnectiPrimera temporada universitaria y el bueno de Aucut, riemma no sabe cómo lidiar y aprovechar el talento de Diana. Tras un tiempo tratando de mejorar todos los aspectos de su juego a la vez, deciden en común centrar toda la atención en el juego defensivo de Taurasi. La fórmula funciona, pues Diana empieza a ser una defensora de gran nivel, y por la inercia de hacer bien las cosas, el aspecto ofensivo de la joven también comienza a despuntar. La temporada 2000/2001 acaba con Uconn cayendo 90-75 ante Notre Dame en las semifinales de la Final Four, con Diana firmando 361 puntos en 33 partidos (10.9 de promedio). Con el grupo preparado para subir un peldaño más en la escalera del éxito, vinieron tres títulos universitarios consecutivos, el primero de ellos comandados por #10 - julio 2017

a Taurasi, aquel MVP de las finales iría a parar a las

con la cabeza bien alta y las vitrinas llenas. Era lógico a Taurasi, aquel MVP de las finales iría a parar a las dibujar una trayectoria monstruosa en la WNBA para manos de Cappie Pondexter. el mejor proyecto de jugadora jamás visto en Estados Unidos. Dos años, después, en 2009, Phoenix volvía a las finales tras una temporada previa donde se fracasó al Phoenix tendría la primera elección de aquel draft no acceder ni siquiera a playoffs. Esta vez Taurasi no y Diana sería la elegida para revertir la historia de falló ante Indiana (3-2) y se llevó el segundo anillo de una franquicia perdedora. De nuevo, más peso sobre su carrera y el primer MVP de las finales. Hasta tres unos hombros curtidos de tanto aguantar sueños y temporadas más estuvo a las puertas de una nueva esperanzas. Las ganancias de las Mercury subieron un final, pero Seattle y Minnesota en dos ocasiones, se 90% y las visitas de la web un 200%. Algo grande esta- lo impidieron. Al final, la perseverancia tuvo su reba a punto de suceder en Phoenix. Antes de arrancar compensa, y en 2014 ante las Chicago Sky, una de las su etapa como profesional, Diana viajó con el equipo tres mejores jugadoras de todos los tiempos volvía a olímpico, donde ganó el oro en Atenas, hito que ha coronar el Olimpo. Anillo y MVP. repetido hasta cuatro veces, sumando el último entorchado en los Juegos de Río de Janeiro. 19 de junio de 2017. En el Staples se enfrentaban Sparks y Mercury, en un partido más que se tiñó de Diana tuvo un gran impacto en la WNBA. En su pri- historia. Con el marcador muy favorable para las lomer partido, una derrota por 72-66 ante Sacramento, cales, Diana recibe el balón a siete metros del aro. anotó 22 puntos, repartió tres asistencias, capturó Tras pedir un bloqueo en la cabecera y aprovechar tres rebotes y puso tres tapones. En una clara fase de la ventaja generada, avanza hacia canasta para dejar ascenso, Penny Taylor y Taurasi dejaron a Phoneix en contra el metacrilato una bandeja histórica. La leuna marca de 17-17, mostrando que pronto llegarían yenda acababa de renacer. a la cima. Lógicamente, fue nombrada Rookie del Año y fue incluida en el primer quinteto de la WNBA. Taurasi se acababa de convertir en la máxima anotadora de todos los tiempos en la WNBA. Había suSu segundo año fue igual de impresionante. Diana se perado los 7488 puntos de Tina Thompson, eso sí, convirtió en la quinta jugadora en la historia de las con un centenar de partidos menos que la angelina, Mercury en superar los 1.000 puntos de carrera y ju- lo que encumbraba el récord mucho más. gar el All-Star Game. Anotó al menos 20 puntos en 21 ocasiones aquella temporada. Pese a todo, Phoenix Tres anillos, tres títulos universitarios, dos mundiaacabó peor que el curso anterior, 16-18, siendo los les, cuatro oros olímpicos y seis euroligas para una partidos como visitante su talón de Aquiles. La tem- jugadora que cambió el baloncesto. Sin pretenderporada siguiente tampoco alcanzarían los playoffs, lo, se convirtió en el fuego del conocimiento, ese que pero la llegada de Paul Westhead a la franquicia abrió hizo salir al deporte femenino de la caverna donde las puertas a la esperanza. injustamente había vivo durante tantos años. Una superdotada de técnica, garra y capacidad de sacrificio En 2007, el equipo ganó el anillo de campeón, de- que aceptó abanderar la mejor generación de jugadorrotando a las Detroit Shock de Laimbeer por 3-2. ras jamás conocida. Diana Lurena Taurasi, la gloria Aquella temporada regular acabaron con un bagaje vestida de corto. de 23-11. Pese a que la gloria había llegado gracias

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LA ESENCIA DE LA

BESTIA La verdadera esencia de la bestia se nutre y crece exponencialmente a medida que malvive por verosimilitudes del destino. Sus entrañas sufren de una constante purificación contraída por la libertad y sensatez que otorga el vivir perdiendo todos y cada uno de tus valores. Excepto los que importan. Estos suelen disiparse y menospreciarse con el oro de por medio, con la infame tentación del legado y con el olvido como infernal habitaje. Humanos somos, y humanos moriremos. Rompe toda jerarquía posible, ensombrece su destino y ellos se matarán entre sí. Somos tan buenos como se nos permite ser. He ahí la valía de nuestro Russell Westbrook. Precisamente en estos días donde se incita al balbuceo estadístico y predomina, en efecto, la recompensa obtenida debido a su sobresaliente esfuerzo individual, cabe hacer un paréntesis para soñar con sus influencias y lo heredado de todas estas. Russell Westbrook, una temporada de ensueño y cientos de madrugadas sin dormir. Amenizadas por su rugir, entrañables por su sentimiento y mágicas por su pureza. Sentir que, en cada movimiento, nos regala un trocito de sí mismo es algo que resulta impagable. La vida se compone de momentos, al fin y al cabo. He ahí lo inconmensurable en su constante regalo. Acudamos a sus raíces. Al origen del todo. Texto de Daniel Rocamora (@DanielRocamora_) Fotos de DMA United y GETTY Images

u templo le arrebató sus creencias. Su religión acabó con sus esperanzas y truncó sus sueños. Aquella cancha de baloncesto en Lawndale terminó con la vida de su amigo, o más bien hermano, Khelcey Barrs. El adiós de su incansable, del hombre de las mil y una caras, de una de las mayores promesas del baloncesto colegial. Como un juguete roto, su corazón sonrió hasta su definitivo adiós. ‘Le vi en el suelo y todos intentamos ver qué pasaba. Empezó a convulsionar y no pudimos hacer nada por él.’ En efecto, y con cierta ironía, la vida y su azar determinado aleccionan a sus elegidos. Se cortó la respiración para, una vez confirmada la tragedia tras su traslado al hospital, desvanecerse por completo. El día que la bestia tome conciencia de sí misma y derroque el feroz muro de la indiferencia, el hombre temblará. Su única opción será la huida. El sálvese quién pueda. En 2004, apareció ella: la esencia. Apareció el predador insaciable que conocemos por Russell Westbrook. El que no cesa en sus embestidas. El caníbal envuelto en cierto romanticismo teñido de espíritu competitivo. Apareció la ética, la fe y desapareció la misericordia. La bestia tomó conciencia de sí misma. Por Barrs, por el baloncesto y por la vida. Tan ella. Tan vil frente a sus indefensos jugadores. Esté donde esté, velará por Russell.

lares. Al ritmo del frenesí impuesto por el rock and didos sobre una cancha. Actuar por instinto cual preroll estalla nuestro Russell Westbrook. Y con él, sus dador y alentar un ‘te quiero’ con este nuestro insignificante tesoro no debería estar pagado. Oklahoma City Thunder. Hay algo que alberga su mirada. No pierde ese brillo que le caracteriza. Ni esa fuerza. Derrocha instinto, hambre. Las tardes de verano condenan la melancolía. Es más, la afianzan. Ese chico, joven e inexperto, sigue recordándome a ti. El heredero del que heredó toda una generación. Y seguirá heredando. La columna vertebral que sostiene nuestras más románticas vivezas e inquietudes. Su instinto y esencia animal almacenada en pequeños frascos (propensos al derrame) que le caracterizan siguen sabiéndome a ti, Kobe. Y me colma. Me colma de gracia vivir con tu constante. La mentalidad Mamba no podía morir. Jamás así. Su legado será eterno. Y jamás en vano, pues este simboliza el más puro de los trances suce-

Morir con el fusil enfundado, sin dejar nada en la recámara, otorgando a tu anatomía el valor que merece. Retar a la física, llevando lo humano a su punto álgido. Procesar el devenir del juego en cuestión de milésimas. Iniciar el fin. Finalizar el comienzo. Cargar con toda una franquicia, ciudad y allegados. Validar el sueño. Creer en el amor a primera vista. Desprestigiar la huida como sintonía triunfadora. El MVP como mínimo reconocimiento.

Encerrado en su propio universo se trata de radicalizar su inexplicable conducta a un extremo determinado, olvidando así la valía que alberga su esencia. La verdadera esencia de la bestia. La que no atiende a lo tangible y sufre de una metamorfosis continua. La que se forjó en vida y muerte. La que atiende a ángel y demonio en su totalidad. La heredada de un enfermizo competidor. La que terminará por destruirle. Un MVP como pretexto. La esencia de Russell Westbrook como orgullo. Con sus luces y sombras, pero con la valía de ser lo que, desde un comienzo, estuvo destinado a ser. Porque su silencio le delata. Él es más de actos, no de palabras. Su instinto es su ley innata.

Su juego refleja una majestuosa combinación de energía, explosividad y fuerza cuyo único ánimo es desbaratar sistemas defensivos focalizados en su persona. El penetrar como religión. Siempre envuelto en situaciones propias de un suicida. El mid-range como seña y reflejo. El triple como explosión de su ‘yo’, ese que aparece por su propio peso y radicaliza contextos. La visión patente en cada movimiento. El bote, salvaje. La gestualización encierra en sí misma a un niño. Fiero, soñador, con medios más que suficientes como para promediar un triple-doble y retrasar toda reconstrucción tras la ida de sus dos más férreos pi-

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ENTREVISTA

“Me gustaría estar en ACB y ser internacional”

ENTREVISTA A EVA ARESTE El empeño y la constancia han sido las claves del éxito para que Eva Areste (Barcelona, 01/II/1989) se haya consolidado como una de las mayores árbitros de la geografía española. Actualmente dirige partidos de Liga LEB y colabora con la FIBA y con la FCBQ, pero su camino como colegiada aún promete mucho. Tomó la decisión años atrás de dejar de jugar a nivel semiprofesional para dedicarse exclusivamente al mundo del arbitraje... por suerte. Texto de Iván García (@Ivan_Hoops) Fotos de encancha.com y Samuel Melián

FBM. ¿Cómo fueron tus inicios en el mundo del arbitraje? ¿Con qué edad empezaste y por qué?

EA. Hace 3 años FIBA sacó una nueva figura: una persona que hace estadísticas a los árbitros durante el partido. Tal y como acaba el partido tienes el resultaEA. Empecé con 18 años. Jugaba en el júnior del do de todas las jugadas: tanto las que están mal arbiFC Barcelona, y por aquel entonces todas mis com- tradas hasta cuestiones de mecánica. Hay un scouting pañeras quisieron ser entrenadoras. Yo también lo de absolutamente todo, el trabajo por detrás que no probé. Me dieron un equipo mini en la Salle Bonano- se ve. Esa ha sido mi función. va, y duré un mes. No me gustó nada. Los niños no son mi pasión [risas]. Nadie me hacía caso y no sabía FBM. ¿Has llegado a tener problemas en algún motransmitir lo que quería. Entonces conocí a Arnau Pa- mento de tu trayectoria por el hecho de ser mujer? drós, que es árbitro. Nos intentó motivar y me acabé apuntando al curso de árbitros del Comité Catalán. EA. Es una pregunta bastante abierta. Cuando emMe gustó, pero pensé que duraría menos. Durante pecé era más complicado ser mujer. Los entrenadores los 3 primeros años compaginé el jugar y el arbitrar; son peores contigo, y en las categorías inferiores los en ese momento estaba en Copa Cataluña y tenía una padres son muy difíciles, y las madres peor todavía. oferta de Liga Femenina 2. Pero con 21 años tuve que No dejan de entender que estamos en formación decidir entre seguir jugando o arbitrar. Decidí arbitrar. contínua. Alguna situación tuve de más joven, pero Fui subiendo rápido hasta llegar a EBA, y en ese mo- lo que no te mata te hace más fuerte. Incluso hubo mento me di cuenta de que la forma de trabajar de alguna en la que estuve a punto de dejarlo. Ahora, la FEB es totalmente distinta a la de la FCBQ. Durante cuando subí a la LEB, se me protegía un poco en el ese verano tuve un coach que me ayudó mucho. Eso sentido que me ponían con compañeros veteranos me hizo dar un cambio y ahora estoy en la LEB. y experimentados. Saben que eres nueva y te miran con lupa. Pero una vez te ganas el respeto es mejor o FBM. ¿Fue muy difícil la decisión de dejar de jugar igual que el de un hombre. para dedicarte exclusivamente al arbitraje?

una vez te ganas el respeto, es mejor o igual que el de un hombre

EA. Me lo tuve que meditar. Además del baloncesto tenía más hándicaps: yo aposté por la carrera. Estudié ingeniería naval. Mi madre, que es muy racional, me dijo que era muy complicado de vivir jugando al ba- FBM. ¿Crees que el machismo en el baloncesto ha loncesto profesional femenino. avanzado a mejor? FBM. ¿En qué momento te das cuenta que puedes llegar muy alto dedicándote a esto?

EA. Yo creo que sí. Una mujer, si no se lo merece, no subirá. Lo importante es acertar igual que un hombre y tener las mismas capacidades técnicas. A mí no se EA. No te das cuenta. Siempre lo digo: hay que entre- me ha regalado nada. nar y luchar para ser el mejor, pero en el baloncesto se llega si quieren que estés. Hay gente en Primera Cata- FBM. ¿Cómo trabajas mentalmente en momentos lana y en Copa Cataluña que tienen la misma capaci- difíciles de partidos? dad para estar en la LEB que yo. Me da la sensación que es más fácil si tienes un serie de requisitos que EA. Es complicado. Hay momentos en los que cuesestén buscando en aquel momento. ta mantener la calma. Hay entrenadores que juegan mucho con la psicología y que saben muy bIen por FBM. ¿Te dedicas a algo más ahora mismo? dónde pueden hacer daño. Hay que saber que ellos forman parte del juego igual que los jugadores y qué EA. Yo trabajo de ingeniera, y tengo la suerte de que podemos permitirles o no. Hay que ser lo suficientemi jefe me permite viajar los viernes para pitar LEB mente listo para poder gestionar ese tipo de conducpor España. Me sabría muy mal, porque mi trabajo tas. Cualquier árbitro que se precie debe tener esa es mi trabajo. Y mis vacaciones son para estar con la capacidad, la de ser un buen comercial. FIBA [risas]. FBM. ¿Cuáles son tus objetivos en el mundo del arFBM: Cuéntame un poco cómo ha sido tu experien- bitraje? ¿Te quedan sueños por cumplir? cia en el Eurobasket Femenino de Praga.

#10 - JUlIO 2017

#10 - julio 2017

ENTREVISTA EA. Me quedan muchos sueños por cumplir. Me gustaría asentarme en la LEB a corto plazo e ir de principal. Cuando se precie me gustaría ser internacional, y también estar en la Liga Endesa. Almenos allí no tendría que pedir los viernes para arbitrar [risas]. FBM. ¿El momento más feliz hasta ahora?

considero que sí está bastante respetado. Me he encontrado en fines de semana y tener que relatar a algún padre. Ellos no son conscientes del daño que pueden llegar a crear. FBM. Honestamente, ¿crees que el nivel del arbitraje catalán es el mejor de España?

EA. No fue el ascenso a la LEB. Uno fue la final del Campeonato de España mini: nunca había pitado en un pabellón con tanta gente, con la televisión, con la prensa... te sientes importante. Otro momento muy feliz es cuando fui a Eslovenia a un campus de potencial de árbitros para FIBA. Fue una experiencia inolvidable.

EA. Creo que cada comunidades. catalán c o n

FBM. ¿Algún/a referente?

EA. Una vez yendo a un en tejanos... salvó la vida y me prestó unos.

EA. Mi referente será siempre Luigi Lamonica. Me encanta. Para mí es Dios. Controla los partidos de una manera increíble pese a tener cagadas. Está muy respetado. A nivel de acierto hay mejores, pero hay que saber venderse y él lo hace muy bien.

mi referente será siempre Luigi Lamonica [...] Controla los partidos de una manera increíble

F B M . tus años

vez hay menos diferencias entre Es difícil decir que el arbitraje es el mejor, pero se trabaja constancia para conseguirlo.

¿Alguna anécdota divertida en de dedicación? me dejé los pantalones en casa partido en Badalona. Iba a pitar Llamé un compañero que me

FBM. ¿Cuál es tu ciudad/pabellón favorito en España?

EA. Tengo el corazón FBM. Cuéntame cómo es posible la compaginación dividido: me quedo con familiar y social con el mundo del arbitraje de alto Granada y Oviedo. En nivel. Granada porque el pabellón es espectacular, EA. No sé si decirte que tengo suerte o no, pero ahora la afición maravillosa y mismo no tengo pareja. Pero no es nada fácil com- son muy buena gente. paginar arbitraje profesional y una familia. Hay árbi- El delegado de campo tros internacionales que se pasan 45 días en verano es un sol. Y el Pumarín es fuera de casa. En mi caso trabajo de lunes a jueves y pequeño pero muy acome paso el fin de semana pitando. gedor. La gente es muy educada y el presidente FBM. No obstante, eso te ha tenido que aportar encantador. mucho a nivel personal. FBM. ¿Dónde veremos EA. Por supuesto. Te das cuenta de muchas cosas, a Eva Areste de aquí 10 que tenía en mi mente y que han variado. años? FBM. ¿Crees que se hace lo posible para ir en la buena dirección en relación al respeto que se tiene por la figura del árbitro? ¿Qué podemos hacer para seguir removiendo conciencias?

EA. No lo sé. Me gustaría estar en ACB y ser internacional. Voy a trabajar para ello. Hay factores, no EA. Tenemos la suerte de que el baloncesto no es e- obstante, que no dequiparable al fútbol en ese sentido. A niveles altos penden sólo de mí.

#9 - junio 2017

DINO MENEGHIN Un ogro viene a verme

na unión completamente inexistente hasta la irrupción de Dino en la legendaria Varese de la década de los 70. Tan solo la altura de sus dos ascendientes masculinos más próximos -190 centímetros de su padre que quedan difuminados por los 206 que alcanzó su bisabuelo- puede ser considerada una herencia generacional real aprovechada en el mundo de la canasta. Tal era el nivel de desconocimiento en el seno familiar, que su madre le preguntó a un bisoño Dino “¿qué es eso del baloncesto?” cuando regresó a casa tras su primer entrenamiento con el Varese, ciudad en la que recaló con apenas ocho años por motivos laborales de su padre. Así, el pequeño Dino completó un meteórico ascenso por las categorías inferiores del club italiano hasta que Vittorio Tracuzzi sorprendía a todos haciéndolo debutar en primera división con apenas 16 años de edad. Previamente, había sido Nico Messina el encargado de ‘rescatarlo’ de las garras de la natación y el atletismo, disciplinas en las que su profesor de educación física se empeñó en introducirlo obviando su destacada altura.

rese, sería elegido una ronda antes por la propia franquicia de Georgia. Sin embargo, nunca recibiría la llamada del General Manager de los Hawks –Dino se enteraría de su selección en el Draft por los periódicos- y enterró la posibilidad de una NBA que, por aquel entonces, era “otro mundo”, inaccesible para el jugador europeo. Un callejón sin salida que llevó a Meneghin a continuar en el Viejo Continente y cruzar una puerta que lo convertiría en uno de los mejores jugadores de Europa de todos los tiempos. La final ganada de 1970 dio paso a una década gloriosa en la que el Ignis Varese de Ossola, Zanatta, Raga, Rusconi, Meneghin y compañía alcanzó la gran final de la Copa Europa en todas y cada una de sus ediciones. Un total de cinco campeonatos en diez finales, con duelos legendarios ante el Real Madrid de Corbalán, Brabender y Lluyk y el CSKA de Gomelsky. El dominio continental también tenía su equivalente en la Lega A, competición que conquistó en seis ocasiones a lo largo de la década, amén de tres copas de Italia de manera casi consecutiva.

Pese a estar catalogado como un diamante en bruto y una de las mayores promesas del continente, lo que no esperaba el técnico era el gran impacto que tendría aquel imberbe chaval en el baloncesto europeo, en el que el Varese comenzaba a despuntar con dos títulos de liga y una Recopa de Europa, en una antesala del insultante dominio que implantarían en la siguiente década.

18 de enero de 1950. El frío invierno azota con fuerza al pequeño pueblo de Alano di Piave, situado en un valle en los aledaños de las Dolomitas. Mientras los acerca de 3.000 habitantes del recóndito lugar luchan contra la resaca propia de las fiestas mayores –celebradas en torno a mediados de mes- y las bajas temperaturas, una humilde familia celebraba con júbilo y regocijo el nacimiento de un nuevo miembro. Lo que nadie sabía –y ni siquiera, remotamente, imaginaban- es que aquella diminuta criatura se encargaría de poner aquella pequeña localidad de la provincia de Belluno en el mapa y de conectar, de manera inquebrantable y para siempre, el apellido ‘Meneghin’ con el mundo del baloncesto. Texto de Jacobo León (@jalekal) Fotos de Antonello Nusca y Lega

#10 - julio 2017

Después de varios años de adaptación en los que fue ganando peso en la plantilla de forma paulatina, los años 70 dieron comienzo con Dino Meneghin completamente asentado en el quinteto inicial con apenas 20 años de edad y un triplete histórico adornado con la primera Copa de Europa. Un pívot muy físico, duro y belicoso, pero con un talento tan desorbitado que fue capaz de romper una barrera infranqueable hasta entonces: el de la NBA. Aunque nunca llegó a jugar en la mejor liga de baloncesto del mundo, Meneghin se convirtió en el segundo jugador procedente de una liga europea cuyo nombre aparecía en una ceremonia del Draft (1970) después de ser escogido en la undécima ronda por Atlanta Hawks. Curiosamente, Manuel Raga, jugador mexicano y compañero de Menghin en el Va#10 - julio 2017

Pero como todo en esta vida, aquel glorioso matrimonio entre Varese y Meneghin llegó a su fin en 1980, cuando el astro italiano se mudó a la capital transalpina para fichar por el Olimpia Milano, después de tres finales consecutivas de Copa de Europa perdidas ante Maccabi, Real Madrid y K.K.Bosna, respectivamente.

Italia, una Copa Korac y, principalmente, dos Copas de Europa de forma consecutiva (1987 y 1988) ante idéntico rival, el Maccabi, para terminar de poner el broche de oro a un palmarés de ensueño. De hecho, los siete entorchados europeos de Dino suponen el tope histórico para un jugador, como lo son los doce títulos de Bill Russell con los Celtics. Tan solo Zeljko Obradovic, recientemente El Varese se despedía de su hegemonía campeón con el Fenerbahçe en la Final europea, mientras que Dino aterrizaba Four de Estambul, posee más títulos en Milán en uno de los mejores momen- que el italiano. tos de su carrera tras ser elegir Mejor Jugador Europeo del Año y liderar a la El campeonato liguero de 1989 supuso selección de Italia a una histórica meda- el último título de Meneghin, aunque no lla de plata en los Juegos Olímpicos sería hasta 1994, con 44 años y después de Moscú, en una final en la que serían de haber compartido cancha con su derrotados por la potente Yugoslavia de propio hijo, Andrea, cuando el astro colCosic, Slavnic, Dalipagic, Delibasic y Ki- gó sus botas tras más de 1.000 partidos kanovic, un combinado que acabaría la a sus espaldas entre clubes y selección y competición con un inmaculado 8-0 en más de 30 títulos en su haber. su haber. Dino Meneghin. Una leyenda irrepetible. En la capital italiana, Meneghin prolon- Magia, calidad, fortaleza, ímpetu y espírigaría su le-yenda y su consecución ma- tu ganador. Querido por sus compañeros siva de títulos y galardones. Junto a Mike de equipo y temido por sus rivales. Un juD’Antoni, actual entrenador de Houston gador que elevó el baloncesto europeo Rockets, ‘el ogro’ conquistaría cinco títu- a un nivel superior. los ligueros más, amén de dos copas de

#10 - julio 2017

LA IRRUPCIÓN DE CANADÁ COMO POTENCIA DE BALONCESTO

s más que evidente que el mapa baloncestístico de la NBA ya incluye a Toronto entre sus ciudades punteras (dos años seguidos entrando en PlayOffs y en 2016 se celebró el All-Star Weekend). Sin embargo, hay otra parte menos conocida pero que va al alza: los jóvenes. Mejor formados, más dotados físicamente, con una capacidad técnica superior… y con la NCAA en el horizonte. Ya son observados con más detenimiento por los ojeadores. Para comenzar hablando del país como baloncesto hay que hablar primero de su creación. James Naismith, icono creador del baloncesto, era canadiense. ¿Curioso, verdad? Sorprende que Canadá no haya sido un punto importante del baloncesto mundial… hasta ahora. Pese a que los canadienses siempre se han considerado más de hockey, los Toronto Raptors han hecho muchísimo porque el país aparezca en el mapa baloncestístico.

pre ha querido mantener una seña de identidad propia. Una vez logrado, necesitaban conseguir un salto y ser una franquicia de renombre en la NBA, que se hablara de ella. Y en el 2000, un tal Vince Carter, consiguió hacer visible a la ciudad gracias a sus mates. Sin embargo, los canadienses ya tenían un representante en esa época: el gran Steve Nash ya repartía espectáculo allá donde iba, sobre todo en sus temporadas en Phoenix Suns. Ha sido uno de los exponentes máximos de su país, con dos MVP de temporada regular y maravillas en la pista. Sólo él destacaba, con Bill Wennington y Jamaal Magloire apareciendo sin pena ni gloria.

Pero eso ya es cosa del pasado: ahora Canadá está de moda en el baloncesto. En la temporada 2015-2016 jugaron 12 jugadores canadienses en la NBA, empatando con el récord histórico. Cabe destacar que sólo 26 jugadores canadienses habían jugado en la NBA desde que se creó Los Raptors llegaron a la NBA en 1995 con Leo la Asociación, en 1946. ¿Y por qué Canadá está Rautins, el primer canadiense en entrar en pri- de moda? Todo comenzó en el Draft. mera ronda del Draft en 1983. Canadá pasó de tener un pequeño hueco a ir consolidándose en En 2013, el proyecto fallido llamado Anthony la élite. También se encontraba la expansión de Bennet se convirtió en el primer Nº1 del Draft otro equipo, los Vancouver Grizzlies, que luego, canadiense en la historia de la NBA. Al año como ya sabéis, se trasladaron a Memphis. siguiente, otro canadiense fue el primero de su generación: Andrew Wiggins, que sí ha podido Toronto se ha imaginado a sí mismo como una adaptarse a la mejor liga del mundo y es un reciudad metropolitana como cualquiera de las ferente en los jóvenes Wolves. En ese Draft del ciudades americanas importantes, pero siem- 2014 empezó la explosión de talentos canadien-

No hay aspecto en la vida que sea fruto de la casualidad. Los milagros pueden existir, sí, pero detrás siempre hay una causa. Canadá ha entrado en el selecto club de países que mima el baloncesto y obtiene un retorno de ese trabajo. En un país donde reina el hockey sobre hielo por encima de otros deportes, el baloncesto se ha ido haciendo un pequeño hueco con el paso de los años. Tienen una liga poco conocida, pero los Raptors han elevado el interés por el deporte de Naismith allí. Texto de Iván Beas (@ivanbeas4) Fotos de AP, NBA y Toronto Star

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ses: Kelly Olynyk, Nik Stauskas, Tyler Ennis y Dwight Powell se han hecho un hueco en la mejor liga del mundo con mucho trabajo. No hay que olvidarse de la fuerza interior de los Cleveland Cavaliers: Tristan Thompson. También es canadiense y seleccionado en el 2011, ha conseguido un hueco muy grande en una liga donde parece rehuir de los pívots. Y por no hablar de otro canadiense con un rol más secundario: Corey Joseph. Con los jóvenes, hay que destacar al base de Denver, Jamal Murray, sorprendiendo a muchos, y al gigantón, Thon Maker, número 10 del Draft pasado que ha cuajado una buena temporada de rookie con Milwaukee Bucks.

Mucho canadiense encontramos por allí… y el que está por venir: Lindell Wigginton de Iowa State, Shai Alexander de la potente Kentucky, Dillon Brooks de Oregon y otro jugador de garantías como Justin Jackson de Maryland son algunos de los destacados. Pero Canadá no comenzó a respirar baloncesto hasta hace bien poco. Los últimos datos del 2014 aseguran que 354.000 personas (datos de SRG Consultants) de la franja de edad entre los 3 años y los 17 juegan baloncesto. El baloncesto se sitúa en

la sexta posición por detrás de deportes como el hockey o la natación. Más datos: La audiencia de los partidos de la NBA en Canadá se ha duplicado en promedio desde 2012-13, y junto al impacto en redes sociales, el baloncesto en Canadá es cada vez mayor. Ha aumentado un 54% el impacto del deporte de la pelota, según The Canadian Press. Las audiencias medias han rondado los 217.000 espectadores esta temporada. Sin embargo, los partidos de los Raptors

Viendo esto, en la NBA parece que los canadienses se han hecho un hueco. No obstante, Europa también tiene algún que otro jugador que ha destacado. Si nos vamos a Grecia, nos encontramos a Khem Birch, recién salido de la Universidad y que ha dado mucha guerra en el Olympiacos.

Toronto ha conseguido ser ciudad de baloncesto gracias a su trabajo y sus resultados deportivos. Y se ha revalorizado: según la revista Forbes, la única franquicia de la NBA en Canadá ha cuadruplicado su valor en más de 14 años, pasando de 217 millones de dólares en 2003 a 980 millones de dólares en 2016. La tendencia ascendente presentó un notable salto de 400 millones entre 2014 y 2015, impulsado por la temporada de los Raptors 2013-14 y la venta de entradas, que, por primera vez, permitió vender todos los abonos de temporada. Ellos son el norte del gran continente, y como su vecino del sur, respiran más baloncesto que nunca.

Y cuando hemos hablado de Universidad, no hay que olvidarse de la NCAA.

todavía siguen muy por detrás de otros deportes. Durante sus temporadas regulares, la NFL y la NHL todavía consiguen entre 2 y 10 veces más espectadores que los Raptors y la NBA.

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CADA MARTES DE 19.00h A 20.30h EN EL 100.5 DE LA FM