Libro historia de Flavio Alfaro

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ÍNDICE Tema

Pág.

Presentación

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Geografía de Flavio Alfaro

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La Prehistoria

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La conquista española

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La independencia

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La república

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La revolución liberal

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El cantón Chone

39

El sitio Pescadillo

44

La parroquia Flavio Alfaro

47

Se crea el cantón

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Ley de creación del cantón Flavio Alfaro

59

Primera administración municipal

61

Segunda administración municipal

64

Tercera administración municipal

66

Cuarta administración municipal

69

Quinta administración municipal

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Educación

83

Instituciones cantonales

88

El Hospital Básico SAN ANDRÉS

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Historia religiosa

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Testimonios

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Hitos de la historia Himno del Cantón

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ASÍ SE ESCRIBE LA HISTORIA Secuencia gráfica

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Presentación El proceso de desarrollo de los pueblos está marcado por la actitud y la actividad de cada uno de los miembros y sus instituciones porque se cubren etapas que demandan la participación de quienes luego, serán beneficiarios de obras y servicios correspondientes a ellas; las diferentes etapas son acumulativas y el resultado es el nivel de desarrollo que se mide en la satisfacción de las necesidades individuales y colectivas; disponibilidad de servicios básicos, fuentes de empleo suficientes, posibilidades de educación, posibilidades de recuperación de la salud, posibilidades de recreación y protección social a los más vulnerables, son parámetros que identifican el nivel de desarrollo.

Es común que no sea un proceso continuo y regular; se producen paralizaciones, y así ha ocurrido aquí. En Flavio Alfaro se ha avanzado aceleradamente, pero sólo hace cinco años, pues para 2005 aún había lodo en las calles, la gente hablaba a gritos, deambulaban los animales por ellas, no había agua corriente, los campos estaban aislados por falta de caminos. En estos cinco años, además de cambiarle la imagen a Flavio Alfaro mediante la pavimentación de sus calles, han llegado los teléfonos digitales, se han construido más de 200 kilómetros de carreteras rurales, más de 500 kilómetros de líneas de subtransmisión eléctrica cubren el 90 % del área rural del cantón, se ha instalado el Internet, se han instalado cinco universi-

dades, algunos colegios y numerosas escuelas rurales. Sobre todo, se ha elevado la autoestima del habitante del cantón que hasta hace cinco años parecía abandonado por los poderes públicos.

El motor de este cambio ha sido un joven profesional de origen campesino; que se enorgullece de que en su infancia recorrió los campos a pie, trabajando; que logró estudiar con las mismas dificultades que todos sus contemporáneos, y terminó su formación en Cuba merced a una beca, donde se graduó de ingeniero agrónomo. Es el Alcalde actual, Ing. Jaminton Intriago Alcívar, quien dice: <Nosotros no merecíamos vivir así>; pero no se quedó en la expresión, sino que entró en la lucha para lograr el cambio.

Ese proceso de cambio se refleja en este estudio, pero buscando las raíces más profundas que contribuyan a fortalecer la elevada autoestima de un pueblo que nunca fue sojuzgado por ningún otro y que siempre fue libre, trabajador y progresista.

Al intentar averiguar la historia de Flavio Alfaro, nos encontramos con varios y valiosos trabajos de la autoría de diferentes personas e instituciones, los mismos que nos propusimos consolidar y complementar con información procedente de todas las fuentes que encontramos; además, hemos buscado testimonios de las personas que participaron en los hechos históricos o sus familiares cercanos, cuando los primeros ya no están entre nosotros.

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La historia no identifica a ninguna agrupación aborigen asentada en esta zona; más aún, cuando llegan los primeros trabajadores caucheros, entran a una selva cerrada y muy rica en frutos vegetales y caza. Pero el territorio está aquí; siempre lo estuvo: entonces, la prehistoria y los comienzos de la historia los estudiamos dentro del contexto de su época: América, el Reino de Quito, La Real Audiencia, la Gran Colombia, el Ecuador, Manabí, cantón Chone, hasta llegar al recinto Pescadillo que da origen a la parroquia, primero y luego, cantón Flavio Alfaro. Dentro de la prehistoria tenemos que referirnos a las culturas precerámicas que avanzaron en un proceso civilizador hasta domesticar plantas y pasar de la vida nómada a la vida sedentaria. Valdivia, Machalilla, Chorrera, dejaron vestigios en nuestro territorio. Y también Bahía, Manteña y Jama – Coaque. Estamos seguros de que nuevas investigaciones del Instituto de Patrimonio Cultural, encontrarán verdaderas sorpresas en el territorio de nuestro cantón.

Durante la etapa de conquista española, no hay registros de acciones en Flavio Alfaro, pero su territorio es parte de lo que sería la “Villa de Chone” donde se detuvo el capitán Luis de Moscoso, subalterno de don Pedro de Alvarado, para recoger alimentos e información, y que sería fundada formalmente años después. Moscoso fue dejado por Alvarado en Tosagua, con 30 españoles, a cargo de ese lugar. Pedro de Alvarado, es el primer español que pasó por Flavio en su viaje hacia Quito donde buscaba acreditar a su favor la conquista de estos territorios para

beneficiarse con el saqueo y la depredación.

Las dificultades de transporte retrasaron la colonización de Flavio Alfaro, hasta finales del siglo XIX, cuando se registra la primera denuncia de tierras que da origen a una propiedad de la que se desprenderán posteriormente las fincas y solares de los colonos.

Chone, durante la guerra de la independencia, se adhiere a la declaración de Guayaquil de 1820 y desconoce al gobierno de la Real Audiencia de Quito, mediante el Acta de Independencia que reproducimos. Contribuye también con jóvenes guerreros para integrar el ejército libertador.

Con seguridad, entre ellos había alguien ascendiente de habitantes de Flavio Alfaro.

Chone, que incluía a Flavio Alfaro, se distingue nítidamente en la lucha por la segunda independencia, pues allí se realiza la proclama alfarista que comenzó la lucha para deponer al gobierno de Luis Cordero, culpable de la venta de la bandera, y de esta tierra proceden parte de las montoneras que identificaron la lucha incansable del General Eloy Alfaro.

Es cierto que Montecristi fue la cuna del Viejo Luchador, pero Chone fue la cuna de sus ideales libertarios.

Casi al mismo tiempo comienza en esta zona un intenso flujo de trabajadores de otros lugares, en busca del caucho, la palma real y la tagua, productos de gran demanda

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en Europa. Varias empresas se habían instalado en Bahía de Caráquez para comprar los productos y exportarlos al viejo continente que estaba más accesible que otras ciudades del Ecuador. Para Europa, sólo había que tomar uno de los buques que llegaban semanalmente a Bahía; para las ciudades del Ecuador: dos días caminando sobre el lodo, para llegar a Chone; por lancha o autoferro a Bahía, en autoferro a Portoviejo o Manta, o en buque a Guayaquil.

Y junto con el comercio que se desarrolla aceleradamente, surgen también las actividades políticas; los habitantes del sitio Pescadillo son votos para las elecciones; los dirigentes se fijan en las cifras y se acercan a la población.

Así se avanza hasta convertirse en parroquia y décadas después, en cantón, sin cambios radicales, pues entonces, aún se vive a oscuras, sin agua corriente en las casas, la educación era muy difícil y costosa y la vialidad era un problema grave.

Es que el anhelado cambio no podía llegar por manos ajenas. Tenía que ser el pueblo mismo quien lo protagonizara y así fue; cuando se elevó su autoestima a través de obras y acciones municipales clave, priorizadas inteligente y técnicamente por su Alcalde Jaminton Intriago, toda la población se sintonizó en el objetivo: no se arroja basura a las calles, se barren soportales y aceras, se cuida la iluminación, no se la destruye; mejora la presentación de los comercios; se acabaron los gritos soeces y se ganó en

respeto y confianza.

Ahora, es una ciudad atractiva y dinámica; muestra desde la epidermis la fuerza de la población unida con el poder de la tierra. Para el futuro se espera cambios mayores pues se montará el equipo para una moderna explotación de piedra y producción de todos los áridos para la construcción, así como una planta asfáltica. Eso abarata los costos de construcción de las carreteras, una vez que se descartó el negociado que había con el transporte de materiales desde enormes distancias.

A continuación seguiremos paso a paso a quienes vivían o deben haber vivido en el territorio que ahora corresponde al orgulloso cantón Flavio Alfaro.

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FLAVIO ALFARO Con más de 130.000 hectáreas, es uno de los cantones más extensos de Manabí; su territorio es quebrado por numerosas estribaciones montañosas que dificultan la construcción de vías de transporte, problema que se ha constituido en una razón para el atraso en el pasado.

un acelerado ritmo de desarrollo.

Está ubicado en el noreste de la provincia, a 0 grados, 24 minutos, 20 segundos de latitud sur, y 79 grados, 54 minutos, 20 segundos de longitud oeste.

Su suelo montañoso, se sitúa entre los 350 y 500 metros de altura sobre el nivel del mar.

La cadena montañosa que se encuentra en su territorio, es parte de la cordillera de San Pablo de Balzar y en ella destacan segmentos identificados como La Crespa, La Paulina, Palanca, La Chontilla, Las Cumbres.

El cantón limita al norte, sur y oeste con el cantón Chone y al este con El Carmen.

En él viven más de 50.000 personas -cifra que se precisará y oficializará con el censo de noviembre del presente añode los cuales más de 7.000 residen en la cabecera cantonal. Fue territorio del cantón Chone, como sitio Pescadillo y después como parroquia rural Flavio Alfaro, en Manabí, hasta 1988 cuando el Congreso Nacional, expidió la Ley de creación del cantón que ahora, 22 años después, está demostrando su empuje y fortaleza que se traducen en

De sus ríos, los que tienen un caudal permanente son: Rancho Quemado y Pescadillo; este último atraviesa la cabecera cantonal y es tributario del Río de Oro que desemboca en el Daule. Otros ríos importantes son: La Morena, Bijagual, Novillo, Vaca de Monte, Tripa de Pollo, Tigre, Piojo, Trinidad, Mata de Plátano y Pata.

La abundancia de ríos, hace indispensable la construcción de puentes para las carreteras rurales, lo que obliga a mayores inversiones para la construcción de las mismas.

El clima es tropical húmedo, con lluvias intensas durante el invierno y garúas durante el verano, con temperatu-

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ras promedio entre 22 y 26 grados centígrados La deforestación y los problemas ambientales del planeta han provocado una transformación en el clima, rompiendo los patrones históricos en el régimen de las lluvias, que se vuelven imprevisibles en su época, intensidad y frecuencia.

Las condiciones geográficas del territorio del cantón, son ideales para el desarrollo forestal. La explotación de este recurso, el turismo y la minería, constituyen fundamentos para el desarrollo cantonal, junto con la agricultura y la ganadería. La superficie del cantón cuenta con una amplia extensión de bosque natural que, si bien ha sido víctima de la deforestación para la creación de pastizales, aún hay un gran capital para la industria forestal que, con conciencia de renovación, encontrará el punto de equilibrio para no destruir el recurso natural del que depende para su desarrollo.

Hay interés en las empresas madereras para trabajar en la industria pero comprometidas con el medio ambiente para mantener un ritmo de explotación sostenible y técnico, que impida la deforestación. Actualmente cientos de familias viven de la operación de aprovechamiento de árboles. La Alcaldía está consciente de su responsabilidad frente al cuidado del medio ambiente y regulará la explotación forestal, así como liderará la realización de varios proyectos de reforestación con la participación del Consejo Provincial.

El clima y el terreno son óptimos para sembrar pimienta, abacá y nony; ahora se está probando con el cedro cubano, que es una especie muy requerida a nivel mundial.

Flavio Alfaro tiene variedad de especies autóctonas como el Laurel, Guayacán, Guachapelí, Balsa o Boya, más una infinidad de flores silvestres y plantas medicinales como ruda, llantén, hierba de espanto, yerba Luisa, la challa y la zorrilla utilizada para reducir el colesterol, entre otras.

En el mundo avanza el interés por el cultivo de plantas medicinales y hay paquetes agronómicos que las asocian a otros cultivos y a los árboles de los proyectos de forestación. La biodiversidad en el cantón, es otro soporte para el desarrollo del turismo comunitario, Por sus condiciones, la zona podría ser declarada como área de captura de anhídrido carbónico, para negociar los beneficios que se otorgan en aplicación del Protocolo de Kioto.

PRODUCCIÓN El cantón tiene una gran producción de cítricos, particularmente naranja y mandarina; a pesar de que se vende para los mercados de Quito y Guayaquil, además de las ciudades manabitas, gran parte de la fruta se pierde y, en ocasiones, los precios son tan bajos que son insuficientes para cubrir el costo de recolección de las frutas.

Por eso se trabaja ya en la formación de una empresa

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para la producción de jaleas, jugos y frutas deshidratadas para el mercado nacional y para exportación.

ducción, en algunos casos, tecnificada.

Los ganaderos y los grandes agricultores, han enviado a sus hijos a formarse en las universidades del país y aún del extranjero, para tecnificar la producción; ellos serán los encargados de aprovechar las bondades del suelo para obtener los mayores frutos y avanzar en el proceso de desarrollo econó9mico y social.

Las perspectivas para el futuro son mejores, porque las experiencias de tecnificación demuestran que la incorporación de la tecnología ayuda a incrementar la productividad de los campos y genera puestos de trabajo.

La agricultura es fecunda; hay una gran producción de cacao, maíz, yuca, maní, plátano que no se ha desarrollado lo suficiente porque recién se han construido las carreteras estables que permiten la circulación de automotores todo el año. Eso, seguramente, multiplicará la producción de ciclo corto de las fincas y además de satisfacer al mercado local, se podrá servir a los mercados de las mayores ciudades del país.

Pero la mayor producción se encuentra en la ganadería.

Varios miles de hectáreas están dedicadas a pastos y, la existencia de haciendas de gran extensión, permite el desarrollo de hatos numerosos que mantienen una alta pro-

Si bien las grandes empresas ya compran a los ganaderos la leche que producen, se piensa ya en la conformación de empresas que monten plantas para pasteurizar la leche y para producir derivados como yogures, quesos, mantequillas y los diversos grados de saponización de la leche, para diferentes usos.

Con la explotación natural de los bosques, el turismo, la tecnificación de la producción agropecuaria y la industrialización de sus productos, Flavio Alfaro asegura puestos de trabajo rentables para su población joven que no necesitará extrañarse de su tierra para conseguir sus objetivos; arraigar a los campesinos en el campo y a la juventud de la ciudad, en su cantón es lo que justifica las grandes inversiones en la vialidad cantonal.

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POBLACIÓN Alrededor de cincuenta mil habitantes viven en el cantón, de los cuales, menos del 20 % reside en la cabecera cantonal; las obras municipales cumplidas en la zona rural, tienen como objetivo retener a la población, reduciendo la migración campo-ciudad. Se cuenta con establecimientos educacionales primarios en toda su extensa geografía; el Municipio ha prestado una ayuda de gran significación para el equipamiento de las escuelas, e inclusive para la dotación de maestros cuando la Ley lo permitía; ahora, todas las comunidades rurales cuentan con una escuela en tanto que en la cabecera cantonal hay varias escuelas completas tanto privadas como públicas, varios colegios y cinco universidades desarrollan sus actividades. En este cantón y por gestión del actual Alcalde, se establecerá una Escuela del Milenio que se encuentra en consstrucción, lo que mejorará el uso de la tecnología tanto para la enseñanza como para todas las actividades.

El progreso alcanzado ahora, permite una intensa actividad social al interior de la población. Ya las damas no tienen que salir a las fiestas “con los zapatos en la mano”, porque ha desaparecido el lodo y, como decía uno de nuestros contertulios, hasta los desfiles son hermosos en las calles de Flavio Alfaro. Igualmente la modernización de la ciudad ha servido para crecer y facilitar la asistencia a las fiestas religiosas y para generalizar la espiritualidad de la población.

La salud de la población se encuentra atendida por el Hospital Básico San Andrés, que apenas tiene dos años de funcionamiento; su existencia ha eliminado las crisis que creaban las enfermedades repentinas en que los pobladores transportaban en hamaca sus pacientes hasta Chone, o viajaban a pie para comprar medicinas. Ahora, dos ambulancias transportan a los pacientes hasta el hospital y se cubren las emergencias con la vocación del personal médico.

26 canales de Internet serán montados en este mismo año, dentro del convenio de la Corporación de Telecomunicaciones con la Municipalidad, para popularizar el uso de la red universal, lo que modernizará la educación y facilitará la investigación para quienes gustan de encontrar por si mismos el conocimiento.

La Iglesia Católica tiene en el sacerdote Pablo O’Connors un gran trabajador por la fe, un evangelizador incansable que contribuye también al progreso de la zona.

Desde luego, en razón de la libertad religiosa, está abierta la posibilidad de desarrollo de otras organizaciones religiosas en el cantón.

EL TURISMO El turismo es la industria que ha permitido el desarrollo de varias naciones que lo han tomado como lo que es: una excelente fuente de empleo, un gran productor de di-

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visas, una actividad económica que no produce contaminación y que se desarrolla a sí misma en base a la satisfacción de los consumidores de sus productos.

España tiene importantes logros en este aspecto y, en nuestro continente, la República Dominicana y Colombia que acentúan sus esfuerzos por captar a los visitantes extranjeros y consiguen un importante crecimiento de las visitas.

en las actividades productivas como el ordeño, la inspección de potreros, recorridos por áreas cultivadas, paseos ecológicos, deportes extremos, etc. Por la variedad de sus ecosistemas.

Una parada obligada es el balneario de agua dulce “La Morena”, ubicado en el sitio del mismo nombre vía al cantón El Carmen.

En el sitio Quiñónez son famosas las cabañas “El Abuelo”, lugar donde es tradicional celebrar las fiestas de carnaval, gracias a que por allí pasa el río Quiñónez que baja desde “La Morena”, ubicada en vía El Carmen – Chone (20 minutos en vehículo desde Flavio Alfaro) y está a pocos metros de la carretera principal.

Un encanto para quien gusta de la meditación y la tranquilidad es visitar “La Cascada de Pacho” ubicada a 1 hora 30 minutos (en vehículo) de la cabecera cantonal vía al sitio Río de Oro

Flavio Alfaro tiene condiciones para desarrollar el turismo con facilidad; sobre todo el turismo comunitario que no requiere grandes inversiones privadas. Puede ofrecer residencia en fincas agrícolas o ganaderas, con participación

Antes de subir al sitio “La Crespa” nos encontramos con el sitio Quiñónez punto de partida para ir a la cascada “La Lagartija” a 3 minutos en carro desde la carretera principal. También se puede visitar en el mismo sector las comunidades “La Avispa”, “Pata” y muchos lugares más llenos de naturaleza bañados por el rio Quiñónez. La Avispa es un rico asentamiento aborigen, con elocuentes muestras del avance de nuestros antepasados.

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También es posible desarrollar el turismo de estudio y observación, pues se han localizado varios sitios con una gran riqueza arqueológica; el Instituto de Patrimonio Cultural tiene en su programa el estudio de algunos de estos sitios en los que se han encontrado piezas de cerámica muy adelantadas. Un atractivo turístico adicional es la biodiversidad que en Flavio es rica y se encuentra muy cerca de quien nos visita.

dad como las tradiciones orales, la forma de vestir de sus habitantes, la comida típica, el transporte en equinos y todos los elementos de la vida cotidiana del flavioalfarense, factores que constituyen una agradable experiencia para quienes deciden visitar esta tierra, no son suficientes para inducir al turismo como industria, menos aún cuando hay sitios de verdadero atractivo.

Ahora, cuando la carretera principal se encuentra en perfecto estado y se han construido varias carreteras rurales asfaltadas, la inversión privada acelerará el aprovechamiento del turismo en beneficio del progreso de la población.

El Cristo del Mayal: la anécdota Una interesante anécdota es lo que pasó en el sitio El Mayal que se encuentra enclavado en la montaña norte de Flavio Alfaro.

Flavio Alfaro está consciente que no ha explotado el turismo. No podía hacerlo cuando las vías de acceso a la cabecera cantonal estaban en condiciones de verdadera ruina y no existían los caminos rurales que conducen a los sitios en donde se encuentran los atractivos físicos del cantón. Si bien, el solo hecho de llegar a la cabecera cantonal permite encontrarse con segmentos de autentici-

Al lugar fue de paseo José Zambrano, un escultor de La Estancilla, quien al explorar el lugar se encontró con una roca arcillosa de la que descendía agua. El hombre esculpió un Cristo sobre aquella roca, provocando que el agua que se desprendía de aquella roca coincidiera con los pies de la escultura.

El dueño del lugar, que conocía de la escultura, ordenó a sus trabajadores que llegaran al sitio y realizaran una tarea específica, pero se encontraron con el Cristo, que lo

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llamaron el “Milagroso Cristo del Mayal”.

Se corrió la voz de que en El Mayal había aparecido un Cristo, del que salía agua milagrosa. Llegó gente de todas partes, en enormes cantidades en búsqueda de milagros, algunos arribaron a sanarse de sus enfermedades, pero luego se descubrió el origen del Cristo, y poco a poco se fue perdiendo el interés de visitar aquel lugar.

Por eso, la promoción turística se basa en valores reales, aunque utiliza también valores intangibles, pero con muestras reales de interés, como son los sitios arqueológicos y las muestras de las culturas aborígenes.

Al remover las tierras, se puede encontrar restos arqueológicos; de hecho se han encontrado ya, pero como no existía conciencia ni conocimiento de la importancia del patrimonio nacional, únicamente primaba un criterio fundacionalista y expansivo, con miras a obtener poder y dinero, en la actualidad, se desconoce el paradero de estas piezas. Lo poco que se conserva, nos hace determinar que en estas tierras estuvieron asentadas sucesivamente las culturas Valdivia, Guangala, Jama – Coaque y Bahía.

Dejando entrever que por falta de un estudio profundo no se han podido determinar o identificar que otras culturas estuvieron en la zona.

De origen aborigen, se puede encontrar objetos de cerámica, conchas, huesos, objetos de piedra, madera, textiles. De la época colonial hay pinturas, objetos de or-

febrería, cerámicas, mapas. De la época republicana hay monedas, documentos, libros, billetes, sellos, estampillas, mapas.

Todo ello constituye el material que deberá ser organizado para darlo a conocer y despertar el interés por visitar Flavio Alfaro.

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PREHISTÓRIA Para ubicar la ocupación del territorio de nuestro cantón por sus primeros habitantes, tenemos que recopilar el estudio de las culturas agroalfareras que se desarrollaron en la Costa ecuatoriana, pues el cantón no fue extraño a sus movimientos migratorios y proveyó de caza y frutos a las expediciones aborígenes cuando se desplazaban ya en condición de recolectores, o como protagonistas del trueque comercial que se intensifica en la cultura Chorrera. Los vestigios localizados en diversos lugares como las cuevas de La Avispa, demuestran al menos que pasaron por aquí y podría demostrarse que formaron pueblos.

La época aborigen es la primera etapa de la historia del Ecuador que inició desde el momento en que aparecieron los primeros habitantes en su territorio, aproximadamente entre los años 15000 y 12000 A.C., y se prolongó hasta la llegada de los europeos, a partir de 1534. Los estudiosos han dividido esta larga etapa en varios periodos: Paleoindio o Precerámico (o edad de los recolectores), Formativo, Desarrollo Regional, Integración o Período Incaico.

CULTURAS ASENTADAS EN LA REGIÓN COSTA El hombre, dentro del proceso de desarrollo de la civilización, cambió su forma de vida del nomadismo y se hizo

sedentario; con ello incorporó a sus costumbres, ciertas actividades que hacían que su existencia sea más compleja. Se convirtieron en culturas con identidad propia reflejada en los restos cerámicos encontrados y en los vestigios de su agricultura.

Este es el período Formativo de la prehistoria, ya que se hace referencia al hecho de que eran pueblos y culturas en formación. Las culturas de esta etapa contaban con ciertos elementos formadores de la civilización, como son: agricultura, habitación, cerámica, tejidos, familia, cultos y ritos religiosos.

En este tiempo, los habitantes de nuestra tierra acumulan experiencias que se convierten en conocimientos que conforman un bagaje que se transmite de generación en generación, como la identificación de los cultivos y su tecnología, los tipos y usos de la madera, las características de la arcilla y sus usos, etc.

Dentro de la agricultura se estableció el cultivo de alimentos propios de la zona. La alfarería adquirió mayor delicadeza, se descubrió otros pigmentos naturales, en la pesca se utilizaban redes más finas y anzuelos de concha, los ritos religiosos fueron adquiriendo mayor complejidad. En este período aparecen en la región Costa varias culturas, considerándose las más importantes: Valdivia, Machalilla y Chorrera.

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CULTURA VALDIVIA El trabajo persistente de los arqueólogos permitió la identificación de los restos encontrados cerca del sitio Valdivia, en la provincia del Guayas, (Ahora Santa Elena) como una cultura cerámica, la más antigua del continente. Parece haberse extendido por las costas de Guayas y Manabí y por cuencas de los ríos de Guayas, Los Ríos y Manabí, y la isla Puná. Emilio Estrada emprendió un estudio sistemático de la cultura que se evidenciaba por tantos hallazgos. No llegó a nuestra tierra, pero aquí se han encontrado piezas de cerámica iguales a las que han sido identificadas como de la cultura Valdivia.

Se ha demostrado que la cultura Valdivia llegó a esas formas avanzadas de cerámica, por evolución propia, desde una primera cerámica un tanto tosca hasta los vasos y cántaros que se conocen como de Inciso Línea Fina, por el tipo de decoración. Desde los comienzos, los hombres de Valdivia trabajan su cerámica en dos formas básicas: jarras y cuencos. Y muy pronto se comienza a embellecer cada uno de estos artefactos de un modo especial.

En este empeño por embellecerlos se sigue un proceso de especialización de más de mil años. Se crea una forma especial de pintura, cuyo resultado es un hermoso color rojo-sangre, brillante, que hasta hoy se mantiene intacto en la cerámica encontrada. Sobre esa pintura se hacían, cada vez con mayor belleza, dibujos geométricos o figuras muy estilizadas -rostros, por ejemplo- con una variedad de técnicas de decoración.

Entre 1800 y 1700 a. C. aparece en Valdivia una cerámica de especial refinamiento: decoración geométrica - triángulos, rectángulos, hexágonos, semicírculos-, textura de finas rayas y pintura después de cocida la pieza en el horno. Pintura a tres colores: ocre, blanco y rojo indio. Tal riqueza nueva de formas y colores procede, según Collier y Lathrap, del Amazonas.

Esta asimilación de formas decorativas extrañas nos prueba que en Valdivia, no sólo se creaban formas artísticas, sino que también se acogían las más bellas que llegaban de fuera. Prueba además que durante este período, se re-

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alizaban exploraciones en todas direcciones y que se llegó a establecer una relación comercial con pueblos de otras regiones distantes, circunstancia que debe haber comenzado por la exploración de territorios vecinos como el de nuestro cantón, más aún si se considera la riqueza que en flora y fauna le es propia.

Otro aspecto de especial importancia en el arte de Valdivia son las figurillas. Porque -al decir de Lathrap-”la tradición de las figurillas... representa la primera aparición conocida de esta forma de expresión artística en el Nuevo mundo” (“El Ecuador antiguo”, 39). De las costas ecuatorianas salió esta tradición hacia América Central, según el arqueólogo.

UBICACIÓN EN EL TIEMPO No hay acuerdo entre los investigadores en cuanto a los tiempos en que se desarrolla esta cultura en nuestro país; la antigüedad de los vestigios abarca tanto tiempo que permite las variaciones en la apreciación de unos y otros autores; sin embargo, la mayoría de las fechas para Valdivia Temprano en la costa están de 3.500 a.C. El final de Valdivia se dio alrededor de 1.800 a.C. Entonces se puede concluir que la cultura Valdivia tuvo aparentemente una duración de unos dos milenios.

Algunos aspectos de la Cultura Valdivia han sido aclarados durante estos años de investigación y otros quedan muy

inciertos, lo cual es muy importante pues el avance de la civilización es acumulativo y, aquello que se logra en un período, se perfecciona en el siguiente, sin considerar el nombre del protagonista.

No obstante la existencia segura de la agricultura durante este período, aún no existen pruebas definitivas sobre la magnitud y la intensidad de esta agricultura temprana. No hay duda de que los valdivianos siguieron las tradiciones arcaicas de la caza, la pesca y la recolección de moluscos.

Las plantas cultivadas por los valdivianos incluyen el maíz, una especie de habilla, el algodón, y la achira. Se ha sugerido también, el cultivo de la coca, el mate y la yuca. No existen evidencias para este período temprano de la presencia de animales domesticados como el cuy y camélidos.

El perro, animal domesticado durante el Pleistoceno, sí está presente en más de un sitio valdiviano.

La dieta valdiviana consistió de grandes cantidades de pescado, especialmente bagre. Un estudio detallado de los restos de fauna muestra una dieta bastante variada con venado, zaino, aves, reptiles y otros mamíferos además de varias especies de peces. Los moluscos también figuran en la dieta, especialmente la concha prieta procedente de los manglares.

Real Alto, es el sitio en que se han localizado restos de Valdivia, pero con una organización urbana muy interesante; es descrito como un sitio de tierra adentro, está

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actualmente a menos de 3 Km. del mar y hay evidencias de que estuvo aún más cerca.

Estudios realizados sobre las especies de pescados y los artefactos sugieren que para pescar se utilizaba sobre todo el anzuelo de concha más que redes u otros métodos. No es seguro pero es más lógico pensar que los valdivianos que vivían tierra adentro hacían trueque para el pescado y la concha con moradores de las playas, a cambio de productos agrícolas y caza.

La vivienda valdiviana es conocida principalmente por el sitio de Real Alto. A principios de la cultura Valdivia I) las chozas tuvieron un plano elíptico con dimensiones de aproximadamente 3 x 4 metros. En la vivienda más tardía Valdivia III VII las chozas conservaron la forma elíptica poro fueron más grandes, con dimensiones de unos 8 x 12 metros. Estas chozas más grandes tuvieron paredes de postes gruesos colocados verticalmente en trincheras de plano elíptico. Se supone por los huecos encontrados que postes mayores, dentro de cada choza, sirvieron para sostener el techo, que probablemente fue de hojas de palma.

También existen indicios de bahareque sobre las paredes.

El bahareque es un recubrimiento de lodo mezclado con paja, sobre caña picada que conforma la pared, en una especie de enlucido que impide el paso del viento. También hubo un fogón en el piso de la choza y hasta indicios de pantallas o muros internos para subdividirla.

La forma de la aldea es conocida principalmente en Real Alto, donde se formó una aldea grande con las chozas elípticas en hileras rectas. En la parte central del sitio, se estableció el recinto ceremonial, con dos pequeños montículos y sus estructuras especiales separadas por una plaza pequeña. Las estimaciones señalan que Real Alto tuvo una población de unos 1.500 habitantes, pero no hay una certeza plena de esas estimaciones.

CULTURA MACHALILLA Su datación corresponde a un período comprendido entre 1800 a. C. y 1500 a. C. Geográficamente ocupó territorios de la actual provincia de Manabí y el norte de la provincia del Guayas, con importantes contactos en la región Interandina como en la provincia del Pichincha. Víctor Emilio Estrada la descubrió en 1958 y la interpretó como una prolongación de la Valdivia, intermedia con Chorrera, sin embargo, se la prefiere considerar como una cultura con

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su propio desarrollo autónomo dentro del período Formativo Medio. En Machalilla se tuvo un modo similar de vida al de los valdivianos, constituyendo en consecuencia una sociedad agrícola que además vivió de los recursos marineros.

Por evidencias presentes en dos esqueletos que fueron encontrados en 1962 por los arqueólogos norteamericanos Megger y Evans, se han podido conocer las prácticas de la deformación del cráneo en un sentido fronto-vérticooccipital. Esto también se lo comprueba en el numeroso material cerámico cuyas figuras antropomorfas muestran esta deformación. Se cree que esta deformación obedecía a un intento mágico de captar cualidades sobre humanas.

CULTURA CHORRERA Su datación aproximada es de 1500 a.

C. a 500 a. C. y ocupó las p ro v i n c i a s del Guayas, Los Ríos, Manabí y Esmeraldas, y logró además, una gran expansión cultural prácticamente en

todo el territorio ecuatoriano, por lo que se la considera un pilar fundamental en la creación de nuestro sentido de nacionalidad. Por su riquísima expresión artística representada especialmente en su cerámica, se puede afirmar que Chorrera llega a constituir lo más sobresaliente de la estética y el arte en el periodo Formativo. Su núcleo original geográfico se ubica en la actual provincia de Los Ríos, en el sitio La Chorrera, en la ribera oriental del río Babahoyo, lugar en el que, en el año 1954, los arqueólogos Estrada, Evans y Meggers, con la valiosa información proporcionada por Francisco Huerta Rendón, realizaron los primeros estudios sistemáticos y en sus informes dieron a conocer la gran importancia arqueológica del descubrimiento.

Sorprende la riquísima representación en recipientes cerámicos de las formas diversas de su entorno natural como frutos, animales, aves, que actualmente constituyen un verdadero catálogo visual de la riqueza ecológica de ese antiquísimo paisaje. La vida cotidiana de los chorreranos también ha sido retratada en la cerámica: sacerdotes, músicos, remeros, danzantes, acróbatas, han sido capturados y casi “fotografiados” en la ductilidad de la arcilla.

PERÍODO DE INTEGRACIÓN El siguiente período de nuestra historia es llamado de integración, porque las parcialidades aborígenes se unen, se integran por diferentes procedimientos y casi siempre

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por razones de defensa frente a la agresión de elementos foráneos.

Durante este período se produce la llegada de los Caras, cuyo cacique se denominaba Shyri y, posteriormente, la invasión de los Incas del Perú que concluye el período aborigen de la prehistoria y comienza la época de la conquista española y la Colonia. Ni los Caras ni los Incas pretendieron conquistar a las parcialidades de la Costa. Los primeros, en poco tiempo avanzaron hacia la Sierra seguramente en busca de tierras más semejantes a las de su origen. Los Incas prefirieron el callejón Interandino para crear su Tahuantinsuyo.

En la parte final del período formativo, se pobló la zona que correspondería a nuestro cantón, en tanto que al final del período de integración, ya residían en la zona tribus organizadas y grandes ayllus que aplican su sistema de organización social en el que la autoridad corresponde al Curaca y cuenta con un órgano de consejería que son los ancianos de la tribu o el ayllu.

Los grupos humanos que integraron este período ya no se limitaron a adaptarse al medio ambiente que los rodeaba, sino que se aprovecharon de él para mejorar sus condiciones de vida. En la sierra se concentraron las culturas: Cosangua-Píllaro, Capulí, Piartal-Tuza; en la región oriental está Fase Yasuní; mientras en la costa se levantan las culturas Milagro, Manteña y Huancavilca.

Los manteños constituyen la última cultura precolombina en la región litoral del Ecuador, y fueron quienes, desde sus poblados, contemplaron las naves españolas por primera vez surcando las aguas ecuatoriales del Mar del Sur. De acuerdo a la evidencia arqueológica y las crónicas de los españoles, se extendía desde la actual Bahía de Caraquez en la provincia de Manabí, pasando por el Cerro de Hojas y extendiéndose hasta el sur de la provincia.

Los mantas desarrollaron delicadas técnicas para el trabajo en oro y plata, y dedicaron gran parte de sus actividades a los aspectos religiosos. Unos de sus artefactos más conocidos son sus sillas o tronos, que se encontraban en el Cerro de Hojas de Manabí, los cuales tenían fines religiosos y políticos. Acostumbraban a hacer sacrificios humanos, y adoraban a la serpiente, el jaguar o puma, y a la diosa Umiña, representada por una gran esmeralda.

El centro de esta cultura, la actual Manta, se llama así en honor a esta cultura.

La cronología determinada para la cultura manteña se extiende desde el año 600 de nuestra era hasta 1534, año en que Francisco Pacheco fundó la villa de Puerto Viejo.

Si los manteños no avanzaron hacia el norte, es de suponer que descendientes de la cultura Jama-Coaque se desarrollaron a un nivel parecido y formaron pueblos que ocuparon territorios del norte de Manabí, entre los que se encuentra nuestro cantón. Pero falta investigación para determinar esos hechos de la prehistoria aún desconoci-

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dos.

Los Incas, poderosa civilización peruana de origen aymará, conquistó las tierras de la serranía de nuestro país, pero no se interesó por los pueblos de la Costa; era comprensible, pues ellos sabían de la importancia del conocimiento del medio y de las facilidades de transporte que, en la Costa, eran ausentes, por lo que ellos estaban en desventaja.

PERÍODO DE DESARROLLO REGIONAL O AGROMINERO El período de Desarrollo Regional determinó por primera vez las diferencias regionales o territoriales en la organización política y social de los pueblos que la conformaron. Entre los principales pueblos de este período estuvieron las culturas: Jambelí, Guangala, Bahía, Tejar-Daule, La Tolita, Jama Coaque en la costa ecuatoriana, mientras en la serranía aparecían Cerro Narrío y Alausí; así también en la selva amazónica ecuatoriana se organizaron Los Tayos.

La Chimba es el sitio cerámico más temprano de los Andes septentrionales, al norte de Quito, y es representativa del Período Formativo en su última etapa. Sus habitantes establecieron contacto con varios pueblos de la costa y de la sierra, manteniendo íntima cercanía con la cultura Cotocollao, localizada en la meseta de Quito.

La Cultura Bahía ocupó los territorios que se extienden

desde las estribaciones de la cordillera de los Andes hasta el Océano Pacífico; y desde Bahía de Caráquez, hasta el sur de Manabí.

La Cultura Jama-Coaque habitó las zonas comprendidas entre cabo de San Francisco, en Esmeraldas; hasta Bahía de Caráquez, en Manabí, en una zona de colinas boscosas y extensas playas que facilitaron a sus inmigrantes la recolección de recursos tanto de la selva como del mar. Esta cultura debe tener en el territorio del cantón Flavio Alfaro sus asentamientos que no han sido aún investigados, aunque hay indicios de varios sitios en los que hay una gran riqueza de vestigios de los pobladores aborígenes.

Las Cuevas de La Avispa es uno de esos sitios, tan rico en expresiones artísticas milenarias que, además de cuencos, vasijas y figurillas de cerámica, tiene las paredes enriquecidas con gráficas que no han sido aún interpretadas.

LA CONQUISTA INCA Los Incas constituyen una nación aborigen; responden a una organización social con autoridades que tienen en el Inca no sólo un rey, sino su Dios. Cuando el Inca empezó a avanzar sobre los Cañaris, fue difícil para ejércitos incaicos, pues estos los rechazaron luchando con bravura, obligándolos a replegarse hacia tierras de lo que hoy es Saraguro, donde debieron esperar la llegada de refuerzos para poder iniciar la campaña. Esta vez considerando la inmensa superioridad de incas, los Cañaris prefirieron

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pactar y someterse a las condiciones impuestas por estos. Después de esto Túpac Yupanqui fundó la ciudad de Tomebamba, actual ciudad de Cuenca, es en esta ciudad donde nacería Atahualpa, uno de sus dos sucesores, con Huáscar de El Cuzco.

España. Dichas narraciones se referían a las riquezas obtenidas durante el periodo de la conquista emprendida por Francisco Pizarro en el año de 1524, a las tierras del llamado Reino Birú, y exageraban el rendimiento de la depredación que realizaron los españoles.

El Inca, habitante de la sierra peruana, no mostró interés por los pueblos de la Costa ecuatoriana; adicionalmente, se sabía en desventaja, porque los pueblos costeños dominaban la navegación y conocían perfectamente el ambiente. Por eso, no hubo conquista inca en la Costa y Flavio Alfaro, el territorio de lo que es hoy el cantón, no fue conquistado nunca, pues los españoles tampoco lo hicieron

La expedición de Alvarado, que llegó a Bahía de Caráquez, logró fundar Charapotó como villa española y continuó su recorrido, llegando a los alrededores de Paján donde permaneció largo tiempo en descanso; después visitó Jipijapa que ya era un asentamiento español, pero sin fundación oficial.

La conquista española

El conquistador español de origen extremeño Don Pedro de Alvarado y Contreras, siendo Gobernador en la Capitanía General de Guatemala que en aquel entonces comprendía toda Centroamérica, nombrado por el Emperador Carlos V en mérito de sus campañas militares, inició una campaña de recorridos por los actuales territorios del Ecuador en 1534, con el ánimo de acreditarse territorios conquistados y obtener riquezas por la vía del saqueo; para entonces ya había recibido las noticias sobre la riqueza abundante en oro de los Incas, que se mencionaba en leyendas, hazañas y mitos del Reino de Quito, comentados principalmente por los marinos españoles que iban a su regreso desde el Perú a Nueva

Las fuerzas de Don Pedro de Alvarado subieron hasta la ahora zona norte de Manabí por lo que es ahora el Cantón Tosagua donde vivía la Tribu “Tosahua”; dejó residiendo allí a uno de sus lugartenientes, Luis de Moscoso junto a 30

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españoles y varios indígenas de ascendencia centroamericana, y con el resto siguió más al norte, a las montañas de la campiña donde se encontraban asentadas las Tribus Chonanas, sin detenerse en los caseríos nómadas en la zona, posiblemente entre los meses de Marzo y Abril del año 1534.

Con seguridad, Alvarado pasó por lo que sería el recinto Pescadillo y así, es el primer conquistador español en poner sus plantas en nuestro suelo.

Al recorrer la zona septentrional de Manabí, Alvarado y su expedición se perdieron en la selva pantanosa, calurosa y húmeda chonana, de la que hasta ese tiempo no se tenía un registro oficial conocido; organizaron a los grupos de exploradores para realizar una expedición más profunda por dichos lugares que todavía no tenían rastros de haber sido explorados por los peninsulares; posiblemente la ruta que trazó para llegar al sitio de encuentro de los diferentes grupos de exploración, terminaba en un sitio cercano al actual Flavio Alfaro.

Mientras eso ocurría con Alvarado, el Capitán Luis de Moscoso salió de Tosagua y se dirigió un poco hacia el noroeste, descubriendo allí a la “Tribu Chonana” que para aquel entonces era una organización independiente y autónoma, cuyos dominios y asientos se extendían desde la desembocadura del actual río Chone hasta los sitios “El Maicito” y “El Mayal” en los actuales Cantones de Flavio Alfaro y El Carmen.

Moscoso se estableció en Chonana para recoger víveres que estaban haciendo falta en la expedición y tomó prisioneros a unos indios para sacarles información sobre el camino que debían seguir para arribar a Quito. Si los expedicionarios hubiesen tenido objetivos de conquista y menos ansiedad por las riquezas, Alvarado fuera uno de los más célebres conquistadores de América que hubiera fundado Chone, pero su impaciencia por llegar a Quito como primordial objetivo y el ansia de conseguir beneficios materiales u oro para los intereses suyos y del Rey de España, lo agobiaron en el largo plazo de su diligencia, arrebatándoles de tal manera a los habitantes de la actual Chone el deseo simbólico de elevación a jurisdicción de nuevo territorio en el Ecuador actual, incluso un año antes de que por órdenes de Don Diego de Almagro, Francisco Pacheco fundase la Villa Nueva de San Gregorio de Puerto Viexo.

Por consiguiente Alvarado siguió su viaje por la zona Norte de Manabí; atravesó los actuales territorios del Cantón El Carmen y cruzó la cordillera, llegando a la pequeña población serrana de Nono (Provincia de Pichincha) a pocos kilómetros de Quito. Como Alvarado anduvo perdido en las provincias del litoral durante los meses de Febrero, Marzo y Abril, sufrió las molestias de las lluvias de invierno, cuando en la costa los llanos y todo el suelo en general se convierten en anegadizos y pantanos intransitables junto al irresistible calor ardiente de esa estación; y saliendo a la planicie interandina, en Agosto, pasó la cor-

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dillera precisamente en la época de los mayores vientos y de las más fuertes nevadas.

Alvarado fue el primer español en recorrer junto a una expedición las selvas del norte de la provincia de Manabí, para llegar hasta Quito; es decir, es el primer <blanco> que pisa territorio de nuestro cantón; además indirectamente su ambición y curiosidad lo llevó a descubrir y trazar los primeros caminos en la ruta Chone-Quito, que “Los Raidistas” (choneros) señalarían en forma definitiva, mediante una aventura que demostró la factibilidad de la construcción de la vía que ahora sirve excelentemente a todos los viajeros..

donde ahora se halla Flavio Alfaro que, sin embargo, debido a sus características de montaña selvática y dificultades de movilización, servía como una especie de coto de caza para los españoles importantes que pretendían demostrar su valor desafiando a las fuerzas naturales en esta área.

PERÍODO COLONIAL En el período colonial se establecieron en la Costa ecuatoriana, áreas de explotación agropecuaria así como zonas fabriles y mineras; una gran parte del territorio permaneció al margen de la dominación de los españoles, pues su atención se centró en las ciudades de Quito, Guayaquil y Cuenca principalmente, porque se constituyeron en centros político-administrativos y residencia de los principales que eran al mismo tiempo, los decisorios en la explotación del trabajo de los naturales de la tierra.

Chone, sin duda, fue un asentamiento de españoles, como ciudad sin mayores pretensiones; pero no todo su extenso territorio fue colonizado. Entre las tierras que no cayeron en poder de los españoles, se encuentra la zona

Este importante cantón se mantiene durante toda la Colonia como área de reserva, pues los peninsulares sólo estaban interesados en la riqueza fácil, la depredación de piezas de oro y no en las actividades productivas de la agricultura o la explotación de madera o palma, porque demandan mucho trabajo y ellos no conocían de esas artes. En realidad, las dificultades de movilización por estas tierras y las historias de miedo que contaron quienes acompañaron a Pedro de Alvarado, detenían el interés por recorrer y aprovechar las tierras de lo que sería el sitio

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Pescadillo de Chone.

Hay que señalar que el territorio de lo que ahora es el Ecuador, se constituyó en la Real Audiencia de Quito, dependiente del Virreinato del Perú, excepto un corto período en que perteneció al Virreinato de Santa Fe de Bogotá.

Sus principales ciudades fueron Quito (residencia del gobierno), Guayaquil y Cuenca.

Los tres siglos de coloniaje español en el Ecuador, significaron la aplicación de la ambición desmedida de los peninsulares que llegaron a este continente; y es de entender, porque necesitaban ser verdaderos aventureros para emprender la terrible aventura del viaje desde la vieja Europa al Nuevo Continente que, si bien había avanzado en el proceso de civilización autóctona, carecía de las menores comodidades y estaba hecho para las condiciones en que vivían los naturales de estas tierras. De cualquier manera, quienes vinieron de España no eran empresarios, industriales o agricultores; se trataba de soldados o de aventureros armados a los que atraía solamente la riqueza en oro y piedras preciosas de estas tierras americanas.

Muchos años después, incluso en el Ecuador independiente, se establecería el nuevo coloniaje que genera la dependencia económica, cuando agentes de las empresas transnacionales de las diferentes industrias, se establecieron en los puertos ecuatorianos, entre ellos, en Bahía de Caráquez, para comprar a bajísimos precios productos primarios como el caucho, la tagua, la balsa, la palma, y

después, el cacao, el banano, la higuerilla, con fines de exportación, llevándose la riqueza ecuatoriana a cambio de casi nada.

Una anécdota explica el procedimiento de los explotadores: <Un agricultor tenía su casa en una amplia explanada en la que había respetado las palmas de tagua; todos los años caían las mocochas de los árboles y las pepas de tagua se regaban en el patio y causaban molestias a la familia; el agricultor hizo saber su decisión de pagar a quien le limpie el patio de la tagua, producto cuyas aplicaciones desconocía. Una mañana llega un individuo con un camión y le ofrece limpiarle el patio de las taguas, sin cobrarle nada; es que necesita las pepas de tagua para lastre de una embarcación, explica. El agricultor acepta encantado y a partir de entonces, el extranjero se lleva gratis la tagua que no es lastre, sino materia prima de exportación. Cuando se enteró el agricultor, renegoció la entrega de la tagua, pero a precios de ruina que, de todas maneras, en sus cuentas eran ganancia neta…> Con similares procedimientos se ha iniciado la explotación de nuestros productos primarios.

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La Independencia.

El sistema colonial impuesto por el rey de España y los excesos de las autoridades encargadas de aplicar las disposiciones del rey, originaron tensiones que se tradujeron en disturbios contra los impuestos, o contra ciertos obstáculos comerciales (alcabalas: 1592-93; estancos: 1765).

El permanente abuso de autoridad de los españoles, el trato discriminatorio a los “criollos” (americanos, hijos de españoles) y la situación de la corona española que fuera derrotada por Napoleón Bonaparte, exacerbó la inconformidad de los criollos en Quito, que en 1809 encontraron una forma de presentar su rebeldía, como servicio a los reyes de España.

A comienzos del siglo XIX las insurrecciones acogieron las prédicas de Eugenio Espejo de la década anterior. Los primeros movimientos empezaron en 1809 con la rebelión de los criollos contra el gobierno español de naturaleza napoleónica. Los sublevados formaron una Junta de Gobierno provisional el 10 de agosto de 1809 en Quito, pero los participantes fueron vencidos por tropas enviadas desde el Virreinato del Perú y el Virreinato de Nueva Granada.

En esa fecha los sublevados disfrazaron los objetivos independentistas, bajo una declarada intención de cambiar las autoridades “afrancesadas” en Quito, manteniendo

fidelidad al cautivo rey Fernando VII. Como indica el acta que dice: el presidente de esta Junta “Prestará juramento solemne de obediencia y fidelidad al Rey... Sostendrá la pureza de la religión, los derechos del Rey, y los de la patria y hará guerra mortal a todos sus enemigos, principalmente franceses”. Estas acciones se conocen como el Primer Grito de Independencia Hispanoamericana.

Muchos de los comprometidos perecieron durante la matanza del 2 de agosto de 1810. Una segunda Junta duró algo más, pero sucesivos fracasos militares la desintegraron en 1812.

La rebelión que comenzó en Quito, fermentó en la Costa y los movimientos independentistas iniciaron el 9 de octubre de 1820 cuando criollos e individuos de la guarnición de Guayaquil dirigidos por José Joaquín de Olmedo se rebelaron y expulsaron a las autoridades fieles al rey, creando una nueva nación llamada Provincia Libre de Guayaquil.

La junta revolucionaria que se formó, en seguida pidió ayuda a Simón Bolívar, quien envió a Antonio José de Sucre y algunos centenares de soldados; la campaña sobre la Sierra avanzó trabajosamente hasta que Sucre se impuso en la batalla de Pichincha, librada sobre las estribaciones de este volcán, hacia la parte occidental de Quito, el 24 de mayo de 1822, fecha que es reconocida por los ecuatorianos como la de su independencia de España.

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Poco después la antigua Audiencia se unió a la Gran Colombia, dirigida por Bolívar; al cabo de un tiempo también se unió Guayaquil, pero cuando fracasó el vasto proyecto del Libertador un grupo de notables reunido en Quito decidió organizar el nuevo país como Estado independiente (13 de mayo de 1830) y entregó el poder al general venezolano Juan José Flores.

Es comprensible que los historiadores que han recopilado las narraciones de la historia de nuestro país, no mencionen a Flavio Alfaro durante el período de las guerras de la independencia, porque estas tierras se mantenían en reserva y no comienzan a poblarse en forma definitiva hasta 1888 cuando se produce la primera denuncia de la propiedad de las tierras que, hasta entonces, no tenían dueño y eran espesos bosques en los que abundaban la caza y el caucho, la tagua y la palma real, productos que libremente eran recogidos por los habitantes eventuales de la zona, los que vendían en Chone esos productos.

La vocación libertaria de los manabitas se ha expresado siempre y ha destacado en Flavio Alfaro, donde lo admirable de este pueblo es que se mantiene unido en el propósito de obtener las mejores condiciones de vida para todos y de alcanzar el desarrollo pleno en base a la riqueza de sus recursos naturales y la dedicación y creatividad de su gente.

Acta de Independencia de Guayaquil

En la ciudad de Santiago de Guayaquil, a nueve días del mes de octubre de mil ochocientos veinte años, y primero de su Independencia, reunidos los señores que lo han compuesto, a saber: los señores Alcaldes, don Manuel José de Herrera y don Gabriel García Gómez, y señores Regidores Dr. José Joaquín Olmedo, don Pedro Santander, don José Antonio Espantoso, Dr. D. José María Maldonado, Dr. D. Bernabé Cornejo, don Jerónimo Zerda, don Ramón Menéndez, don Manuel Ignacio Aguirre, don Juan José Casilari y Dr. D. Francisco Marcos, con el señor Procurador General, don José María Villamil; por ante mí el presente Secretario, dijeron: Que habiéndose declarado la Independencia, por el voto general del pueblo, al que estaban unidas todas las tropas acuarteladas; y, debiendo

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tomar en consecuencia, todas las medidas que conciernen al orden político, en circunstancias que este necesita de los auxilios de los principales vecinos, debía primeramente recibirse el juramento al señor Jefe Político, señor doctor don José Joaquín Olmedo, por voluntad del pueblo y de las tropas; y, en efecto, hallándose presente dicho señor en este Excelentísimo Cabildo, prestó el juramento de ser independiente y fiel a su patria, defenderla, coadyuvar con todo aquello que concierna a su prosperidad y ejercer bien y legalmente el empleo de Jefe Político, que se le ha encargado.

En seguida, el referido señor Jefe Político, posesionado del empleo, recibió el juramento a todos los individuos de este Cuerpo, quienes juraron ser independientes, fieles a la Patria, y defenderla con todas las fuerzas que están a sus alcances; cuyo juramento lo presenció el señor Jefe Militar, don Gregorio Escobedo.

ACTA DE LA INDEPENDENCIA DE QUITO (1809) El 10 de Agosto de 1809 se considera como el de inicio de la independencia de lo que hoy es Ecuador. En Quito, cuando los criollos se rebelaron contra el presidente Ruiz de Castilla, declararon insubsistente el gobierno de la Audiencia, y crearon una Junta de Gobierno. Los diputados barriales que participaron en los sucesos del 10 de Agosto de 1809, suscribieron un acta en la que confirmaban la rebelión y organizaban de manera diferente la administración. En este documento se insinúa también una invitación a otras ciudades para aliarse voluntariamente con el fin de conformar un Gobierno Supremo Interino que represente a Fernando VII, hasta que recupere su libertad.

Con lo que y no habiéndose tratado otra cosa, firmaron esta acta los señores, por ante mi el presente Secretario.

José Joaquín de Olmedo, Manuel José de Herrera, Gabriel García Gómez, José Antonio Espantoso, Pedro Santander, José M. Maldonado, Bernabé Cornejo y Avilés, José Ramón Menéndez, Jerónimo Zerda, Manuel Ignacio de Aguirre, Francisco de Marcos, José Villamil, Juan José Casilari, José Ramón de Arrieta, Secretario.

Nos, los infrascritos diputados del pueblo, atendidas las presentes críticas circunstancias de la nación, declaramos solemnemente haber cesado en sus funciones los magistrados actuales de esta capital y sus provincias; en su

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virtud, los del barrio del centro o Catedral, elegimos y nombramos por representantes de él a los Marqueses de Selva Alegre y Solanda, y lo firmamos. Manuel de Angulo, Antonio Pineda, Manuel Cevallos, Joaquín de la Barrera, Vicente Paredes, Juan Ante y Valencia.

Los del barrio de San Sebastián elegimos y nombramos por representante de él a don Manuel Zambrano, y lo firmamos, Nicolás Vélez, Francisco Romero, Juan Pino, Lorenzo Romero, Manuel Romero, Miguel Donoso.

Los del barrio de San Roque elegimos y nombramos por representante de él al Marqués de Villa Orellana, y lo firmamos. José Rivadeneira, Ramón Puente, Antonio Bustamante, José Alvarez, Diego Mideros.

Los del barrio de San Blas elegimos y nombramos por representante de él a don Manuel de Larrea y lo firmamos.

Juan Coello, Gregorio Flor de la Bastida, José Ponce, Mariano Villalobos, José Bosmediano, Juan Unigarro y Bonilla.

Los del barrio de Santa Bárbara elegimos y nombramos representante de él al Marqués de Miraflores y lo firmamos. Ramón Maldonado, Luis Vargas, Cristóbal Garcés, Toribio Ortega, Tadeo Antonio Arellano, Antonio de Sierra.

Los del barrio de San Marcos elegimos y nombramos por represente de él a don Manuel Matheu y lo firmamos. Francisco Javier Ascázubi, José Padilla, Nicolás Vélez, Nicolás Jiménez, Francisco Villalobos, Juan Barreto.

Declaramos que los antedichos individuos unidos con los representantes de los Cabildos de las provincias sujetas actualmente a esta gobernación y las que se unan voluntariamente a ella en lo sucesivo, como son Guayaquil, Popayán, Pasto, Barbacoas y Panamá que ahora dependen de los Virreinatos de Lima y Santa Fe, las cuales se procurará atraer, compondrán una Junta Suprema que gobernará interinamente a nombre y como representante de nuestro legítimo soberano, el señor don Fernando Séptimo, y mientras su Majestad recupere la Península o viniere a imperar en América, elegimos y nombramos por Ministros o Secretarios de Estado a don Juan de Dios Morales, don Manuel Quiroga y don Juan de Larrea, al primero para el despacho de los Negocios extranjeros y de la Guerra, el segundo para el de Gracia y Justicia y el tercero para el de Hacienda; los cuales como tales serán individuos natos de la Junta Suprema. Esta tendrá un Secretario Particular con voto y nombramos de tal a don Vicente Alvarez.

Elegimos y nombramos por Presidente de ella al Marqués de Selva Alegre. La Junta como representante del Monaca tendrá el tratamiento de Majestad; su Presidente el de Alteza Serenísima; y sus Vocales el de Excelencia, menos el Secretario Particular a quien se le dará el de Señoría.

El Presidente tendrá por ahora y mientras se organizan las rentas del estado seis mil pesos de sueldo anual, dos mil cada vocal y mil el Secretario Particular. Prestará juramento solemne de obediencia y fidelidad al Rey en la

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Catedral inmediatamente y lo hará prestar a todos los cuerpos constituidos así eclesiásticos como seculares. Sostendrá la pureza de la religión, los derechos del Rey, y los de la patria y hará guerra mortal a todos sus enemigos, principalmente franceses, valiéndose de cuantos medios y arbitrios honestos le sugiriesen el valor y la prudencia para lograr el triunfo. Al efecto y siendo absolutamente necesario una fuerza militar competente para mantener el Reino en respeto, se levantará prontamente una falange compuesta de tres batallones de infantería sobre el pie de ordenanza y montada la primera compañía de granaderos; quedando por consiguiente reformadas las dos de infantería y el piquete de dragones actuales. El jefe de la falange será Coronel y nombramos tal a Don Juan Salinas, a quien la Junta hará reconocer inmediatamente. Nombramos de Auditor General de Guerra, con honores de Teniente Coronel, tratamiento de Señoría y mil quinientos pesos de sueldo a don Juan Pablo Arenas y la Junta le hará reconocer. El Coronel hará las propuestas de los oficiales, los nombrará la Junta, expedirá sus patentes y las dará gratis el Secretario de la Guerra. Para que la falange sirva gustosa y no le falte lo necesario, se aumentará la tercera parte sobre el sueldo actual desde soldado arriba. Para la más pronta y recta administración de justicia, creamos un Senado de ella compuesto de dos Salas Civil y Criminal con tratamiento de Alteza. Tendrá a su cabeza un Gobernador con dos mil pesos de sueldo y tratamiento de Usía Ilustrísima. La sala de lo Criminal un Regente subordinado al Gobernador, con dos mil pesos de

sueldo y tratamiento de Señoría; los demás Ministros con el mismo tratamiento y mil quinientos pesos de sueldo; agregándose un Protector General de Indios con honores y sueldo de Senador. El Alguacil Mayor con tratamiento y sus antiguos emolumentos. Elegimos y nombramos tales en la forma siguiente: Sala de lo Civil, Gobernador don José Javier Ascázubi, Decano, don Pedro Jacinto Escobar, don José Salvador, don Ignacio Tenorio, don Bernardo de León, Fiscal, don Mariano Merizalde. Sala de lo Criminal, Regente don Felipe Fuertes Amar, Decano, don Luis Quijano, Senadores, don José del Corral, don Víctor de San Miguel, don Salvador Murgueitio, Fiscal, don Francisco Xavier de Salazar. Protector General, don Tomás Arechaga, Alguacil Mayor, don Antonio Solano de la Sala. Si alguno de los sujetos nombrados por esta soberana diputación renunciare el encargo sin justa y legítima causa, la Junta le admitirá la renuncia, si lo tuviere por conveniente, pero se le advertirá antes que será reputado como tal mal patriota y vasallo y excluido para siempre de todo empleo público. El que disputare la legitimidad de la Junta Suprema constituida por esta acta tendrá toda libertad bajo la salvaguardia de las leyes de presentar por escrito sus fundamentos y una vez que se declaren fútiles, ratificada que sea la autoridad que le es conferida, se le intimará a prestar obediencia, lo que no haciendo se le tendrá y tratará como reo de estado.

Dado y firmado en el Palacio Real de Quito, a diez de Agosto de mil ochocientos nueve, Manuel de Angulo, Antonio

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Pineda, Manuel Cevallos, Joaquín de la Barrera, Vicente Paredes, Juan Ante y Valencia, Nicolás Vélez, Francisco Romero, Juan Pino, Lorenzo Romero, Manuel Romero, Miguel Donoso, José Rivadeneira, Ramón Puente, Antonio Bustamante, José Alvarez, Juan Coello, Gregorio Flor de la Bastida, José Ponce, Mariano Villalobos, Diego Mideros, Vicente Melo, José Ponce, José Bosmediano, Juan Unigarro y Bonilla, Ramón Maldonado, Luis Vargas, Cristóbal Garcés, Toribio Ortega, Tadeo Antonio Arellano, Antonio de Sierra, Francisco Javier de Ascázubi, José Padilla, Nicolás Jiménez, Francisco Villalobos, Juan Barreto.

Acta de Proclamación de la Independencia de de Chone, En el pueblo de San Cayetano de Chone, a los veinticuatro días de Diciembre de mil ochocientos veinte años, fueron convocados todos los ciudadanos libres de este vecindario, en esta casa de cabildo y con asistencia del elector ciudadano José Bernardo Plaza, procedieron los señores padres de familia y dieron sus votos y sacaron de Alcalde al ciudadano Juan Bautista Zambrano y del mismo modo eligieron de Procurador Síndico al ciudadano Pedro de la Chica y de Regidor al ciudadano Manuel José Quintero para el Gobierno Patriótico de este Cantón tuvieron a bien, dichos señores electos nombrar de Secretario al ciudadano José Morales, a quien el elector le tomó juramento haciendo lo mismo con el Alcalde Procurador y Regidor, quienes ofrecieron ser fieles a la Patria, y para

que este Ayuntamiento sea reconocido por tal en la Junta Electoral, mándese copia de esta Acta a los señores Intendentes y Vocales de la Junta de Gobierno de Santiago de Guayaquil con oficio.

Así lo dijeron y firmaron conmigo dicho Secretario y Elector por lo que certifico: José Bernardo Plaza. Juan Bautista Zambrano.

Pedro de la Chica. Manuel José Quintero.

Manuel José Morales Secretario. Es fiel copia del Acta original que corre en el Archivo de mi cargo a la que me refiero.

En San Cayetano de Chone, Diciembre 28 de 1820.

Ante mí; Manuel José Morales.

Secretario.

Esta acta fue enviada inmediatamente a Guayaquil para conocimiento de las autoridades de la nueva república; al recibirla, fue interpretada como una declaración de independencia y de apoyo irrestricto a la posición de los patriotas guayaquileños que buscaban la independencia

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de España que sería consolidada por las armas de la Gran Colombia.

A pesar del escaso peso político-social del cabildo de Chone, su actitud patriótica significó un espaldarazo para los patriotas que lo recibieron como tal; en adelante, Chone estuvo en el inventario de los libertadores, sobre todo como fuente generosa de vituallas y hombres para la lucha por la independencia

La República Inicialmente, lo que fue la Real Audiencia de Quito integra la Gran Colombia, como Distrito del Sur; pero ya desde el comienzo en la Gran Colombia, que podría haber sido una nación fuerte en el conjunto americano, surgieron las ambiciones que combatieron al Libertador Bolívar, cuya decepción era evidente. Muchos de sus conmilitones veían los territorios independientes como áreas en las que podían enriquecerse y ejercer un poder ilimitado; así se fue gestando una verdadera insurrección que lastimó el espíritu limpio y patriótico del libertador que, enfermo, triste y abandonado, llegó a la muerte.

Sucre, brazo derecho del Libertador, había anunciado que fijaría su residencia en nuestro país, pero murió asesinado en las montañas de Berruecos en Colombia, precisamente cuando viajaba a la ciudad de Quito. El cruel asesinato del heroico Mariscal, desencadenó el afán separatista y el

Distrito del Sur se convirtió en la República del Ecuador.

La Asamblea Constituyente reunida en Riobamba, entre agosto y septiembre de 1830, expidió la Primera Constitución del Ecuador, que estableció la forma de Estado unitaria, la forma de Gobierno democrático y la separación de poderes (legislativo, ejecutivo y judicial), así como las decisiones por mayoría, el voto de igual valor y la concesión de la nacionalidad a quienes hubieren formado parte de los ejércitos emancipadores.

A Flores se le confirmó como presidente constitucional, pero su errada política económica, los privilegios que otorgó a los militares (muchos de ellos nacidos fuera del Ecuador) y la virtual supresión de las libertades públicas le enajenaron simpatías, organizándose la oposición alrededor de la sociedad El Quiteño Libre, la cual publicó un periódico famoso en su época.

Dispersado el grupo, surgió como rival peligroso Vicente Rocafuerte, hasta el momento en que pactó con Flores y le sustituyó en el mando. Rocafuerte impulsó el desarrollo cultural y de la educación. Le reemplazó el propio Flores (1839-43), quien trató de seguir en la presidencia, pero en 1845 tuvo que aceptar el destierro a consecuencia de la Revolución Marcista, que estalló en Guayaquil.

Desde ese año hasta 1860 la figura más importante fue la del general José María Urbina, quien libertó a los esclavos

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negros, pero permitió que el ejército acumulara privilegios excesivos. La crisis de 1858-60 acabó con su influjo; debió refugiarse en el Perú, dejando paso a Gabriel García Moreno.

Este mandatario trató de organizar el país sobre bases católicas; desatando una dura represión en contra de sus adversarios; ejecutó al mismo tiempo básicas obras viales y de educación y mejoró la hacienda pública. Fue un tirano implacable que no vacilaba en mandar a asesinar a sus adversarios políticos. Durante su mandato el Ecuador vivió una época negra y muy triste, en la cual no existieron las libertades individuales. Los derechos humanos fueron pisoteados impunemente por García Moreno y la oposición sufrió una durísima persecución. Es obvio pensar que en estas circunstancias le sobraban los enemigos.

Cuando se disponía a iniciar un tercer período presidencial fue asesinado a la entrada del Palacio de Gobierno, en 1875, por un antiguo soldado llamado Faustino Rayo, cuya esposa habría sido seducida por García Moreno.

Le sucedió Antonio Borrero, y a éste el general Ignacio de Veintimilla, quien se distinguió por su autoritarismo personalista, siendo desalojado del poder gracias a la campaña de la Restauración, que unió a conservadores, liberales y progresistas. Fueron estos últimos quienes se hicieron en definitiva con el mando.

Los primeros años de la república demuestran la falta de preparación democrática de los líderes y del pueblo

mismo; cualquiera que sea la tendencia política del gobierno, se sirve a camarillas que con muy poca corrección se aprovechan de la situación y se enriquecen. Muchas de las más grandes fortunas del país tuvieron como base recursos que pertenecían al pueblo..

La revolución liberal Durante las presidencias de Caamaño, Flores Jijón y Cordero se adelantaron las obras viales, progresó la cultura y se corrigieron algunos defectos hacendarios. Sin embargo, el «progresismo» no gozó jamás de un caudaloso respaldo popular, y el escándalo llamado «la venta de la bandera» bastó para derribarlo.

La Venta de la Bandera El oscuro negociado se produce cuando Chile vende un navío de guerra al Japón, que estaba en guerra, en la que Chile se había declarado neutral, lo que le prohibía proporcionar armas a los contendientes. El Ecuador no había declarado su neutralidad y por lo tanto sí podía negociar; entonces, se ofrecieron para simular la compra ecuatoriana y la reventa al Japón. Así, el navío chileno viajó al Japón, enarbolando la bandera del Ecuador. A cambio, Chile ofrecía ayuda en caso de guerra.

Se pretendía que el negociado se hiciera en secreto, sin

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que lo conociera el pueblo del Ecuador, ni el chileno, ni nadie. A espaldas de todo el mundo, vino la propuesta de la Casa Flint y Co., de Nueva York, de la que eran socios los señores Stagg, Caamaño, y numerosos altos funcionarios del país. En realidad eran los gobernantes del Ecuador, LA ARGOLLA, como se decía. En verdad, el trust imperialista de los Estados Unidos, la Casa Morgan era la que enviaba su propuesta a través de la Casa Flint & Co. el Cable decía así: “New York, Octubre 16 de 1894 Gobernador.- Guayaquil.

“Flint propone en nombre del Gobierno de Chile que, el “Gobierno del Ecuador tome bajo su nacionalidad el Buque de “Guerra Esmeralda, para conducirlo directamente a Honolulu “donde la nacionalidad se cambiará de acuerdo con las “instrucciones que se darán por el Gobierno del Ecuador. En “consideración, al actual servicio, Chile ofrece al Ecuador “completo apoyo moral y materiales de guerra en caso necesario.

de Eloy Alfaro, formidable caudillo nativo de Montecristi en Manabí, quien gastó su fortuna y mantuvo en peligro su vida para luchar contra el abuso de los conservadores, interesados en la explotación al pueblo y en servir a los intereses de los ricos. Con este caudillo, que encabezaba fundamentalmente a sectores campesinos de la costa, se procuró establecer el laicismo, se reguló la relación del Estado con las poderosas órdenes religiosas, se dio un gran impulso a la educación y la vialidad.

Alfaro terminó la construcción del ferrocarril GuayaquilQuito, que en su tiempo fue una obra de dimensiones faraónicas para el país. Lamentablemente Alfaro también tendió a la anulación de las libertades políticas y se enfrentó con una tendencia disidente dentro de su propio partido, dirigida por su general Leonidas Plaza y constituida por la alta burguesía guayaquileña.

Nuevo gobierno.

El enfrentamiento acabó con la trágica muerte de Alfaro, que con sus más cercanos colaboradores, fueron víctimas de la práctica salvaje de una política de sangre y destrucción, comandada por el Partido Conservador e inclusive por jerarcas de la Iglesia Católica que, desde los púlpitos incitaron a la masa ignorante a levantarse contra el poder constituido y arrastrar a los Alfaro. Y acabó con una etapa de acusado liberalismo económico (1912-25), que permitió a los bancos adquirir el dominio casi completo del país.

Le sustituyó en el gobierno el liberalismo, bajo la dirección

El descontento popular ante la inflación facilitó el golpe

“Consulte inmediatamente al Gobierno de Quito para enviar “instrucciones al Cónsul del Ecuador en Valparaíso. Conteste “inmediatamente.”Cónsul”.

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de Estado de los militares jóvenes (julio de 1925), que se proponían acometer reformas sustanciales, ejecutadas luego parcialmente durante la presidencia de Isidro Ayora (1926-31), al reordenar la economía, establecer el Banco Central como el único autorizado para emitir moneda y crear un nuevo sistema de presupuesto y de aduanas.

La república avanzaba de tumbo en tumbo, porque los caudillos, una vez establecidos en el poder, perdían la capacidad para escuchar y pretendían imponer como única su razón, lo que despertaba el descontento de los más.

Las Montoneras, Alfaro y la Revolución Las montoneras fueron probablemente el más importante fenómeno de movilización social del siglo XIX republica-

no. Surgidas en el agro costeño a partir de 1825, tuvieron desde su inicio un carácter reivindicativo y de resistencia popular frente a las violencias cometidas por hacendados o autoridades del nuevo poder republicano.

Su base social estaba en el campesinado montubio, que incluía a peones de las haciendas, pequeños propietarios y trabajadores sueltos, como los “desmonteros” y “sembradores”, que hacían desmontes o formaban nuevas plantaciones para venderlos a las haciendas próximas.

A partir de la época garciana, el surgimiento de las montoneras adquirió una connotación plenamente política, de carácter liberal militante, bajo la conducción de los mismos hacendados o “caciques” locales, que se lanzaban a la lucha a la cabeza de sus peones y casi siempre con el rango de “coronel”, otorgado por la proclama de sus propios hombres. Toda la tropa montonera o al menos gran parte de ella andaba a caballo.

Estas particulares circunstancias daban a las montoneras una notable influencia y capacidad de acción en su área y les garantizaban fácil avituallamiento, gran movilidad, operativa y rápida desmovilización. Por otra parte, todo ello dificultaba su localización y represión por parte de las tropas gubernamentales, normalmente de origen serrano, que luchaban en un medio extraño y contaban con poco respaldo social en la región litoral.

Explotando a fondo esas ventajas, un joven revoluciona-

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rio manabita, llamado Eloy Alfaro, se convirtió desde la época garciana en un afamado insurgente liberal. Hijo de una familia de pequeños comerciantes, su voluntad, inteligencia y capacidad de mando le granjearon progresivamente el liderazgo del liberalismo, primero en su provincia y luego en toda la costa ecuatoriana. llegando así a Guayaquil. Para mediados de 1882 se hallaba ya en capacidad de lanzar desde Esmeraldas una primera campaña militar contra la dictadura de Veintimilla, que lamentablemente fracasó.

Dionisio Andrade: rasgos de un montonero alfarista Dionisio Andrade Giler fue un militar protagonista de la revolución alfarista. Ilustre ciudadano, que vivió en Chone, Manabí, pero que se desconoce su origen. Según algunos autores, se cree que nació en Portugal aunque este dato aún no ha sido confirmado. Se le reconoce por haber participado en la revolución liberal con las montoneras montubias. Don J. Dionisio Andrade ostentó el rango de Teniente Coronel del ejército irregular de Eloy Alfaro, y se lo recuerda en su montura de caballo blanco. Se desconoce el significado de la “J” en su nombre, aunque podría ser José. Tuvo dos hermanos Aníbal E. Andrade y Marco Antonio Andrade; quienes también combatieron en el ejército de Alfaro. Su mayor proeza fue participar como líder montonero en la Batalla de Los Amarillos del 1º de mayo

de 1895, y luego la Proclama Liberal de Chone que se realizó un 5 de mayo de 1895, donde se declara a Eloy Alfaro como vencedor y gobernante de los territorios de Manabí y Esmeraldas. El sitio Los Amarillos hoy pertenece a Tosagua. Hay que recordar que en la época de 1895 Chone era un poblado lejano, casi impenetrable con una vegetación exuberante y un calor infernal. Los mosquitos se reproducían casi a la vista de la personas, por eso el obispo de Portoviejo Pedro Schumacher había recomendado al gobierno conservador de Luis Cordero que confine en este sector de Manabí a todos los que tenían ideas liberales, pues en Chone el que no muere queda loco aseguraba Las juntas revolucionarias estuvieron en Portoviejo que lideró el Crnel. Zenón Sabando; la de Chone comandada por el Crnel. Mauro Ramos Iduarte, además de J. Dionisio Andrade, Ramón Verduga Cornejo y Lizardo Solórzano, la de Bahía de Caráquez dirigida por el Crnel. Ciro Dueñas y la de Rocafuerte que comandaba Agustín María Solórzano.

Entre los montoneros destacados oriundos de Chone, que participaron en la Batalla de los Amarillos y el desconocimiento de Luis Cordero como Presidente figuran: J. Dionisio Andrade, Venicio Mejía, José María Andrade, Aníbal Andrade (hermano de Dionisio), Enrique Balda, Leonidas Santistevan, Abel Cuadros, Ramón Verduga y Manuel María Barberán. Entre los foráneos estaban los hermanos italianos Juan y Plutarco Coppiano Bonino, el mejicano

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Mauro Ramos Iduarte, Felicísimo López, Félix Guamán, el periodista colombiano Antonio de Janón, Aníbal San Andrés y el cuencano José Mora López.

En las “montoneras” crecieron con Eloy Alfaro, Manuel Serrano y Wenceslao Ugarte en El Oro; Plutarco Bowen en Los Ríos; Mauro Ramos Iduarte, J. Dionisio Andrade, los hermanos Zenón y Daniel Sabando en Manabí; Carlos Concha en Esmeraldas; Pedro J. Montero, Enrique Valdez Concha y Juan Manuel Triviño en Guayas. En 1907 el Teniente Coronel Dionisio Andrade fue nombrado Jefe del Regimiento de Caballería de la Policía Rural de Manabí.

La Revolución liberal ocurrió entre un período comprendido entre 1864 y 1912, calculamos que J. Dionisio Andrade fue contemporáneo de Alfaro, por lo que pudo haber nacido entre 1840 y 1850 y fallecido entre 1910 y 1920, a los 60 u 80 años de edad. Se conoce que murió asesinado.

Los Personajes de la revolución liberal En el bloque histórico de la revolución liberal figuraron varios grupos políticos, cada uno con destacados personajes: Los Caciques Costeños. Estuvo integrado por un grupo de propietarios y líderes sociales montubios, que aportaron recursos y organizaron a los peones de la región para la lucha. Ellos fueron: Manuel Antonio Franco, Pedro J. Montero, Juan Manuel Triviño y León Valles Francisco (Guayas), Manuel Serrano y Wenceslao Ugarte (El Oro), Carlos Concha Torres (Esmeraldas), Zenón Sabando, Dionisio Andrade y José María García (Manabí), Plutarco Bowen y Emiliano Figueroa (Los Ríos). Igual cosa podemos decir de ciertos caudillos liberales serranos, que con su acción fortalecieron la lucha alfarista: Francisco Hipólito Moncayo (Imbabura), Nicanor y Rafael Arellano (Carchi), Ulpiano Páez (Bolívar) y Julio Román (Chimborazo), entre otros.

Los Revolucionarios Emigrados. Estuvo integrado por revolucionarios profesionales, que habían conspirado o luchado en otros países de América Latina: Eloy Alfaro, Medardo Alfaro, Leonidas Plaza Gutiérrez, Flavio Alfaro y Plutarco Bowen.

La Burguesía Liberal. Originaria de Guayaquil, estaba integrada por tres fracciones de clase con distinta función socio económica: el grupo de grandes propietarios lati-

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fundistas denominado “El Gran Cacao”, encabezado por las familias Aspiazu, Seminario, Morla, Durán Ballén y Rosales; el grupo comercial presidido por los Avilés, Robles, Carbo, García y Estrada, y el grupo bancario, encabezado por las familias Arosemena, Roca, Urbina Jado, Baquerizo Moreno y Game. Desde luego, muchas de éstas y otras grandes familias porteñas (Marcos, Noboa, Icaza, Santisteban, Huerta y Robles) tenían intereses en dos o más sectores económicos, por lo que resulta difícil clasificarlas en uno u otro.

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EL CANTÓN CHONE La era republicana encuentra a Manabí convertida en provincia por decreto de provincialización expedido por el Congreso Grancolombiano de Bogotá presidido por Francisco de Paula Santander , confirmado el decreto por el libertador Simón Bolívar, y mantiene ese estatus, con la división en cantones que existió en la Gran Colombia.

Mucho después, Chone es elevado a la condición de cantón el 24 de julio de 1895 y en su territorio se incluye lo que actualmente es Flavio Alfaro.

Esta zona no estaba poblada; es un área montañosa a donde llegaban los trabajadores para explotar el caucho, la palma real y la tagua, abundantes en sus montañas, y alimenta con esos productos a las empresas exportadoras que se encontraban en Bahía de Caráquez, ciudad de una muy activa relación comercial con Europa; Chone se mantenía unida con Bahía por el transporte fluvial. Los terrenos de esta zona no tenían dueño reconocido y se ejercía una suerte de derecho común a penetrar en sus selváticos terrenos para recoger los generosos frutos de la naturaleza.

Para entonces, el río Chone se mantenía con un caudal abundante, lo que permitía que aún en el verano, las lanchas llegaran a la ciudad y se pudiera realizar el transporte de pasajeros y carga por la vía fluvial.

El gobierno liberal, en conocimiento de la falta de vías de transporte en Manabí, realiza la construcción de la vía férrea que unía a la capital provincial con Chone, Santa Ana, Bahía y Manta, lo que si bien alivió las necesidades de la cabecera cantonal, no tuvo incidencia en la vida de la zona norte.

En Chone conocían de la zona del sitio Pescadillo, pues de la misma recibían en abundancia los productos de la recolección ya mencionados, pero no se había logrado aún perfeccionar la organización para buscar soluciones a los problemas de todo el territorio. Las preocupaciones se centraban en la cabecera cantonal cuyo atraso era evidente. Sin embargo, utlizando pico y lampa y múltiples contratos cumplidos a lo largo de los años, se construye el terraplén que facilitaba el transporte en acémilas de la carga y que luego se convertiría en la carretera de verano que utilizaban los vehículos de carga que servían al sitio.

Mediado el siglo XX, el gobierno nacional contrata la construcción de la carretera Chone - El Carmen, como resultado de la presión ejercida por los habitantes de la zona que sabían la necesidad de una vía carrozable permanente a la cabecera cantonal. Para entonces ya se habían unificado posiciones políticas y los cálculos electorales determinaban las decisiones.

En la primera mitad del siglo veinte, toda la provincia acusa un atraso acumulado; no hay agua potable, el suministro eléctrico es muy limitado, las telecomunicaciones no

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se han generalizado; se usa aún el telégrafo y muy pocas empresas comienzan a usar el télex para sus comunicaciones interurbanas. Aún no aparece la televisión y, para la comunicación social, prima la radiodifusión, la que era utilizada también para transmitir mensajes personales importantes. Esa situación se acentúa en Chone y toda la zona norte, porque debido a una mayor presencia de lluvias, las carreteras de verano se abren más avanzado el año que en otros sectores secos; el aislamiento es mayor y los meses de actividad plena son menos, pues el servicio ferroviario ha desapareció hace mucho tiempo, y el servicio fluvial se dificulta por el azolvamiento del cauce del río Chone.

vencieron las dificultades de un lugar inhóspito; por eso se organizaron, según don Ángel Alcívar, ciudadano de más de ochenta años que se mantiene activo en el comercio al por menor; él dice que invitó, entre otros, a Antonio Cedeño Barberán, Luis Moreira, Tobías Rivadeneira, Lupercio Bravo, Tarquino Valenzuela, Antonio Farías, Miguel Ángel Zambrano, Zambrano, Miguel Zambrano Anchundia, Pepe Paz, Antonio Muñoz, Miguel Ángel López, Agustín Alcívar,, para analizar la posibilidad de convertir al recinto en parroquia; se discutió y se resolvió dirigir la petición al Concejo Municipal, lo que fue acogido con aprobación y se comenzó a trabajar en la redacción de la Ordenanza de parroquialización.

El nombre llegó por el afán de rendir homenaje al Viejo Luchador y ante el hecho de que ya se había creado una parroquia Eloy Alfaro, se tomó Flavio, en el convencimiento de que se trataba de un hermano del General; es en realidad su sobrino, pero muy cercano, pues luchó y murió a su lado en la hoguera bárbara.

La creación de la parroquia, el 23 de septiembre de 1940, encuentra al sitio Pescadillo como un pequeño caserío donde destacan las casas de cuatro comerciantes: Luis Moreira, Lupercio Bravo, Tobías Rivadeneira y Antonio Cedeño, quienes compraban los productos y los trasladaban a Bahía para su exportación.

Los pobladores del sitio Pescadillo son luchadores que

Dicen algunos testimonios que para entonces Flavio Alfaro no completaba dos centenas de habitantes. A partir de

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ahí, los grandes propietarios lotizaron terrenos y comenzaron a vender con facilidades a quienes querían asentarse en el pueblo y se fue ampliando la zona poblada con tiendas y otros negocios que dinamizaban la vida local.

Pero el avance es lento. El punto de atracción hasta mediado el siglo, es la recolección de caucho, palma y tagua.

Después será el cacao que se planta en las fincas prácticamente vírgenes y que por ello tiene una alta calidad y se vuelve de gran demanda para la exportación.

AISLAMIENTO La historia destaca que durante la República, y hasta la participación del General Eloy Alfaro, como ocurría durante la Colonia, Manabí tenía una muy discreta participación en el contexto nacional. Los hechos marcaban solamente la participación de Quito, Guayaquil y Cuenca. Inclusive durante la independencia, los pueblos manabitas se adhieren al movimiento de Guayaquil Independiente mediante declaraciones, pero no hay una acción identificadora del deseo de independencia de estos pueblos. Es que el aislamiento marca el destino de las colectividades; en Manabí era muy difícil el transporte hacia el interior de la provincia y mucho más hacia el exterior.

Es de suponer que los gobiernos republicanos que comienzan en 1830, se ocuparon primero en organizar los sistemas de recaudación de impuestos y, como obra pública, la unión entre Quito, Cuenca y Guayaquil, porque las

tres ciudades contenían las fuerzas políticas que decidían la suerte del gobierno. Una de las particularidades que se mantuvo durante todo el siglo XX fue la bipolaridad de los esfuerzos del desarrollo, pues inclusive Cuenca y toda la zona austral acusan similar abandono del gobierno.

Los gobiernos no habían puesto sus ojos en Manabí, porque la extensión de su territorio y sus características, demandaban enormes esfuerzos para la construcción de vías de transporte, recursos que no existían en el gobierno central; así, las dificultades de movilización constituían el principal obstáculo para que los pueblos manabitas participaran más activamente en la vida nacional. Además, ese aislamiento desarrolló una suerte de autosuficiencia que fortaleció el individualismo aplicado a las actividades productivas. Así en Manabí no se desarrolla el mercado de capitales y muy avanzado el siglo XX se abren las primeras oficinas financieras y compañías de capital; los negocios que aparecen son negocios familiares que por falta de cultura organizacional, en la mayor parte de los casos, desaparecen a poco del fallecimiento del fundador o fundadora, pues sus herederos no logran organizar la empresa para una administración sana y confiable con la acción de profesionales formados para el efecto. Las grandes empresas son foráneas, nacidas en Quito o Guayaquil, y aún transnacionales, circunstancia que continúa ahora.

La capital provincial es dotada de alcantarillado, agua potable y pavimentación, pasado el año 1960, después de

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que una fuerte protesta popular indujera al gobierno a crear el Centro de Rehabilitación de Manabí, institución que también construyó las instalaciones para la dotación de agua entubada a Flavio Alfaro.

marítimo que, sin las obras portuarias aún, recibía los buques en mar abierto y la carga se trasbordaba a barcazas que llegaban hasta la orilla, donde habían frágiles muelles flotantes para llegar a tierra.

Para tener una idea, ya hemos dicho que más fácil era viajar de Bahía de Caráquez y por lo tanto de Manabí, a Europa que a una ciudad del interior de nuestro país. Los viajes a Manabí se hacían en barco, desde Guayaquil a Manta y Bahía de Caráquez; de esta ciudad, por vía fluvial, el río Chone, hasta la ciudad de ese nombre.

Todas las ciudades de la provincia, hasta mediado el siglo XX, estaban servidas por carreteras de verano únicamente, pues en la temporada lluviosa eran verdaderos fangales. La primera carretera estable que se construye es la “Quevedo - Manta”, inaugurada por el Presidente Velasco Ibarra, en 1954, con miras a la explotación bananera; su trazado excluye a las poblaciones del norte, que tendrían que sufrir más de diez años aún, hasta contar con una vía carrozable para todo el año.

Manta, Montecristi, Portoviejo, Santa Ana, Bahía y Chone se encontraban comunicadas mediante una vía férrea que era el principal medio de transporte que servía al puerto

Otra razón del atraso en que se mantuvo a Manabí, parece ser el temor por el desarrollo del puerto de Manta.

Es conocido que Guayaquil, puerto fluvial de difícil acceso para grandes buques, recibe más del 80 % de la carga de todo el país, en tanto que Manta, puerto marítimo, abierto y de fácil acceso, mueve menos del 10 % de esa carga. La falta de desarrollo de Manta se debe a que las carreteras en mal estado, encarecen el transporte terrestre complementario de la carga extranjera que llega al puerto, con destino a ciudades del interior del país. Mantener ese estado de la vialidad manabita, asegura la carga nacional para el puerto de Guayaquil.

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El sitio Pescadillo El sitio Pescadillo comienza a figurar legalmente en la vida del cantón Chone, a fines del siglo XIX y comienzos del XX, cuando en 1888, se realiza la primera denuncia de tierras por parte de don José Eliseo Saldarreaga Castro, nativo de Charapotó, quien tomó posesión de las tierras, desde el

Estero El Diablo (Hoy San Pablo), hasta la margen derecha del Estero Rancho Quemado.

Después de un tiempo, esas tierras son vendidas al señor Miguel Agustín Zambrano Meza, en 16 sucres, pagados en 36 jornales. Este dato es útil, porque se puede comparar el valor de los jornales y de la tierra.

Don Miguel Agustín Zambrano Meza es el primer propietario de una gran extensión de tierras en el sitio Pescadil-

lo; se dedica al comercio y mantiene una relación muy estrecha con dirigentes políticos de Chone, especialmente con don Salustio Giler, quien lideraba un movimiento llamado <Renovación> que después, daría origen al Frente Democrático, fuerza política de gran poder en Manabí.

Como uno de los primeros pobladores del sitio Pescadillo y fuerte comerciante de la zona, don Agustín Zambrano tiene influencia en la comunidad y, por lo tanto, atrae a los políticos de Chone que aspiran a los votos de los residentes en este sector.

Pero desde antes de esos hechos, el sitio era visitado por trabajadores que buscaban explotar los árboles de caucho que abundaban en la selva del sector, rica también en palma real y tagua. Las manchas de caña guadúa darían ocasión para explotarlas y proveer de ese material a los constructores de casas de todo el cantón, ante la dificultad para transportar hierro y cemento para las casas de hormigón.

En todos los pueblos manabitas se fortaleció la influencia de los comerciantes sobre los electores, porque la relación comercial que se establece al venderles sus productos y comprar provisiones, solicitar préstamos emergentes, etc. deriva en una situación de autoridad a la que se consulta decisiones como la asignación de la votación.

Hay que considerar que para entonces, los electores rurales generalmente tenían poco conocimiento, carecían de formación política y no estaban organizados.

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Un segundo gran propietario de tierras en el sitio Pescadillo es don Antonio Alcívar Zambrano, quien en 1890, toma posesión de las tierras que quedan de la margen izquierda del Estero Rancho Quemado, aguas abajo, por el río Pescadillo. Así se constituyen en dos propietarios de las tierras de Pescadillo, don Agustín y don Antonio; el primero propuso a don Antonio Alcívar, que done a favor de la colectividad, los terrenos necesarios para el señalamiento de la plaza central, las calles de alrededor y los solares para que quienes vengan a residir en Pescadillo, construyan sus casas. No hay un registro de fechas de estas acciones, pero los hechos posteriores permiten ubicarlas a comienzos del siglo XX. La donación fue hecha, porque interesaba que el pueblo crezca para que más caucheros vengan y aumenten las ventas.

Hay que anotar que en esos tiempos, la ocupación principal de los habitantes de Pescadillo era la recolección de caucho, tagua y palma real, productos que se vendían en Chone para que sean enviados por vía fluvial a Bahía de Caráquez. Entonces, había especial interés en que se establezcan comercios en Pescadillo, para que compren los productos y lleguen directamente a los exportadores.

Como siempre ha ocurrido en todo el mundo, el interés económico y particularmente comercial, motivó la movilización de la población, que se estableció en los lugares donde encontraba trabajo rentable y condiciones mínimas para atender las necesidades de su familia.

Resuelta la donación de los terrenos, los mismos donantes realizan la gestión ante el Capitán Ing. José Guerrero para que realice la agrimensura de la plaza central; Guerrero, con un Ing. Simon, realizaban el estudio preliminar para la extensión del ferrocarril desde Chone, hasta Santo Domingo de los Colorados.

Cuatro años después de la agrimensura (medición y señalamiento de dimensiones de la plaza y las calles) del caserío Pescadillo, acción que se realiza y es el primer esfuerzo de planificación y el comienzo de la vida oficial del sitio Pescadillo, el 23 de diciembre de 1923, el señor Alcívar vende al señor Agustín Zambrano Meza, sus derechos y los de su hermano, sobre los terrenos del sitio Pescadillo; la escritura la elaboró el Escribano señor Sergio Dávila y fue inscrita el 31 de octubre de 1935. Debe haber alguna confusión en las fechas de la venta, pues no se explica que se haya demorado doce años para la inscripción de la escritura de compra – venta. La fecha de registro es la que ha sido utilizada para la venta posterior de terrenos que han realizado los herederos de don Agustín Zambrano.

Hay que anotar que a partir de la disponibilidad de terrenos alrededor de la plaza central, algunos trabajadores, muy pocos, comienzan a construir casitas de caña en esos solares y se va dando forma al sitio cuyo ritmo de crecimiento es lento y difícil, por las dificultades de transporte que se mantienen y el escaso mercado que existía para los

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productos de la agricultura, la que se practicaba a nivel de subsistencia.

Las casas –precisamente por las dificultades para el transporte de materiales como el hierro y el cemento- se construyen con madera y caña guadúa. Las mejores tienen techo de cinc, en tanto que la mayor parte utilizan las hojas de palma de cade para cubrir sus techos.

Hay un registro de las primeras personas que construyeron casas en el recinto Pescadillo, merced a las facilidades creadas por el señor Alcívar: Pedro Elías Zambrano Bravo, Sergio Zambrano Moreira, Miguel Agustín Zambrano Meza, Luis Amando Intriago Rodríguez, Pedro Carlos López, Modesto Valenzuela, Joaquín Belisario Loor, Miguel Ángel Zambrano Zambrano, Florencio Mesías, Antonio Farías, quien residía en la casa que fue de don Antonio Alcívar Alcívar.

Ese es realmente el origen del sitio Pescadillo; 1935; antes, era un lugar de paso para los caucheros que eran muy apreciados por la empresa exportadora de ese producto, la misma que unos años después, les montaría un excelente dispensario médico específicamente para ellos en Pescadillo.

Este lugar era parte de la espesa selva en donde abundaban los árboles de caucho, la palma real y la palma de tagua. Entonces, las personas que necesitaban trabajar, desde diferentes lugares de Manabí y aún de fuera de la

provincia, llegaban a estas tierras y recorrían esa selva, hacían tajos en los árboles de caucho, recogían palma real y tagua y, terminado el día, recogían las láminas de látex y volvían al sitio donde les dieron posada; terminada la semana tenían que viajar a Chone para vender sus productos, cuando aún no se habían instalado los comerciantes en Pescadillo. De ahí el interés porque se desarrolle el pueblo, pues se aspiraba a captar los productos en los establecimientos locales de comercio.

El interés comercial fortalece el crecimiento del pueblo. Naturalmente, con posterioridad se establecen los comercios para la compra de productos y son los comerciantes quienes acopian los productos comprados y periódicamente envían arrias numerosas (conjunto de acémilas) cargadas para entregar los productos en Bahía de Caráquez; se hacía un trasbordo del lomo de los animales a las lanchas, en Chone.

POR QUÉ EL CAUCHO En las primeras décadas del siglo XX, comienza a desarrollarse la industria automotriz y se impone el uso de neumáticos, los que son fabricados con caucho natural; esta fue una de las razones para el aumento de la demanda del caucho. Pero, cuando se declara la guerra mundial, la demanda es mayor por la fabricación de los elementos para la guerra también con caucho, con tagua y con balsa, productos originarios de nuestras tierras; la palma

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real se usaba para la producción de aceites finos para las máquinas voladoras que comenzaban a surcar los cielos del viejo continente.

Así, fue el interés por la balsa, el caucho, la tagua y la palma real, productos muy demandados por Europa a causa de la Guerra Mundial y que abundaban en la selva, el que reunió a las personas que vinieron al sitio Pescadillo. Posteriormente se ha desarrollado la agricultura y la ganadería, en tanto que el comercio y los servicios atienden las necesidades de la población residente. No ha avanzado el desarrollo industrial y los productos se venden aún de manera primaria, sin elaboración alguna, aunque existen ya claras intenciones de fomentar a través de ventajas tributarias, el agregado de valor para los productos, mediante la manufactura.

El procedimiento jurídico comenzaba en el Municipio que aprobaba la Ordenanza de creación de la parroquia; se requería un informe del Consejo Provincial, pero en el momento, los Consejos Provinciales estaban suprimidos; por ello se pidió informe al Gobernador y a la Asamblea Legislativa.

LA PARROQUIA Un comité integrado por los señores Antonio Cedeño Barberán, Luis Moreira, Tobías Rivadeneira, Lupercio Bravo, Tarquino Valenzuela, Antonio Farías, Miguel Ángel Zambrano, Zambrano, Miguel Zambrano Anchundia, Pepe Paz, Antonio Muñoz, Miguel Ángel López, Agustín Alcívar, Amando Intriago, fue organizado para que lleve a cabo las tareas necesarias para que el recinto Pescadillo pase a ser la parroquia del cantón Chone, como paso previo para la creación del cantón.

Era Presidente del Concejo Municipal don Juan Coppiano Moreira y en el cantón había un sentimiento revalorizador hacia Flavio Alfaro, pues todos estaban conscientes de que se estaba aprobando la creación de la parroquia más grande del cantón y con un futuro extraordinario, por la riqueza de su suelo.

Además varios residentes en el sitio habían desarrollado excelentes relaciones con los dirigentes políticos de

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Chone y contaban con su ayuda para sus proyectos. La esposa del Presidente del Concejo, doña Guillermina Zambrano, era descendiente de gente de Zapallo y Pescadillo.

Esos contactos eliminaron toda posibilidad de resistencia a la creación de la parroquia. Todos estaban de acuerdo porque de esa manera se fortalecía el cantón con una parroquia poblada por personas bien relacionadas con la cabecera cantonal y que contribuirían a su desarrollo y progreso. Además, la población había crecido y era muy importante para las elecciones, lo que fue considerado para preparar la simpatía de los flavioalfarenses por las tesis de los dirigentes choneros.

En 1940, el 23 de septiembre, se promulga la Ordenanza aprobada por el Concejo Municipal de Chone, que creó la parroquia Flavio Alfaro en el lugar donde se encontraba el recinto Pescadillo, Ordenanza que fue aprobada por el Presidente de la República luego del informe presentado por la Asamblea Legislativa y otro del Gobernador, que era el proceso considerado en la Ley para la creación de parroquias. La aprobación presidencial asegura los fondos para el pago a las autoridades parroquiales.

El Decreto presidencial, dice “El Presidente Constitucional de la República vista la solicitud del Ilustre Consejo Cantonal de Chone, de que apruebe la Ordenanza dictada el 23 de diciembre de 1939, por la que se eleva a categoría de parroquia rural el recinto “Pescadillo” con el nombre de Flavio Alfaro, toma en consideración que la Asamblea

Nacional, en sesión del 16 de noviembre de 1938 aprobó el informe emitido por la Comisión de Legislación y Justicia, relativo a manifestar, suprimido al Consejo Provincial que dictamina sobre la conveniencia de creación de parroquias y cambios de nombres, se desprende que ya no es necesario éste requisito. Y considerando que es favorable el informe del señor Gobernador de la Provincia de Manabí emitido en nota Nº 41 de febrero de 1940 y que en el vigente presupuesto de estado se ha consultado, partida para atender el pago de sueldos de autoridades de parroquias de nueva creación, acordando aprobar la expresada Ordenanza de conformidad con el articulo Nº 17 en su numeral Nº 28 de la Ley de División Territorial. El mismo que regirá en el Palacio Nacional de Quito, al 23 de septiembre de 1940, por el Presidente Constitucional de la República, el Ministro de Gobierno y municipalidades, el Subsecretario de Gobierno Sr. Julio Moreno, publicado en el registro oficial Nº 25 del 30 de septiembre de 1940.”

Con la elevación a parroquia se impulsa el progreso en el pequeño recinto, pues se construyen en la zona central del pueblo, las instalaciones para la distribución de la energía eléctrica, se construye, aunque lentamente, la carretera de Chone y mejoran las facilidades para llevar a cabo trámites oficiales.

El trabajo continúa; la producción cada vez fluye en mayor volumen, y llegará el momento en que no será suficiente el ser parroquia, y se optará por la cantonización; desde

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luego, las obras consumieron años y, por ejemplo la carretera de Chone llegó luego de dos décadas de vida parroquial y, si bien la energía eléctrica racionada se logró con los electrogeneradores de Chone, pronto los daños fueron tan frecuentes y tan difíciles de reparar, que la parroquia se quedó nuevamente a obscuras y solamente los comerciantes que habían adquirido sus propios equipos, tenían luz eléctrica. Los demás, lo mismo que en la zona rural, utilizaban los mecheros de kérex o del caucho para alumbrarse en las noches.

El crecimiento del pueblo se da también porque los propietarios de grandes extensiones de terreno, proceden a lotizarlos para venderlos con facilidades de pago; así, muchas personas que no tenían grandes recursos, acceden a la propiedad y pueden construir primero viviendas humildes que luego van mejorando al ritmo del progreso de sus propietarios.

Una de las personas que en los últimos años ha contribuido al crecimiento de la cabecera cantonal es la señora Yolanda Alvarado de vda. de García, pues ella es propietaria de grandes extensiones de terreno y precisamente ha lotizado desde hace algunos años, con la debida planificación para la creación de ciudadelas, como una última que lleva el nombre de su esposo “Walt García”, donde se venden solares a plazos muy cómodos.

Ella nos cuenta que cuando comenzó a lotizar, el metro cuadrado se vendía a 1.50 sucres; ahora, el precio ha

subido a 15 dólares el metro cuadrado, en un lapso de 25 años. Esta misma propietaria, comprendiendo la importancia de la educación superior, donó a favor de la Universidad Técnica de Manabí, una hectárea de terreno urbano.

La UTM. Es una de las cinco universidades que desarrolla sus actividades en Flavio Alfaro, mediante paralelos que forman profesionales para el desarrollo del cantón. Se ha mantenido un proceso de planificación y de coordinación entre las instituciones del cantón para la selección de las carreras que se imparten en los paralelos que funcionan en el cantón.

Sin embargo de los afanes de progreso, la imagen de la parroquia no cambia la del sitio Pescadillo: una plaza central con casas –la mayor parte chalets de caña- a su alrededor, calles que son polvorientos caminos de herradura en verano, y lodazales en invierno. Animales domésticos deambulando por las calles y caballistas en sus corceles cabalgando por la ciudad..

La vida es igualmente difícil, sin agua corriente, sin energía eléctrica y sin posibilidades de educación al margen del nivel primario. Los pobladores que pueden hacerlo, educan a sus hijos en Chone o en otras ciudades, lo que contribuye a la emigración del cantón; por otro lado, los habitantes del sector rural viven condiciones más difíciles aún, pues tienen que transportarse en acémilas, por caminos de lodo casi todo el año, no hay facilidades para sacar la producción que pierde valor por esas dificultades.

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Los testimonios recibidos de las personas de mayor edad que vivieron la época de la parroquia, señalan muy pocos cambios en las facilidades para vivir en el sitio Pescadillo; seguían imperando el lodo y el polvo; se mantenían las dificultades para conseguir agua para consumo y la energía eléctrica, cuando llegó, fue muy selectiva con los consumidores; no había recursos técnicos para atender la salud y la enfermedad, cualquiera con cierta gravedad, suponía casi siempre la muerte.

PLANIFICACIÓN En muchas ocasiones sorprende a quienes observan la cabecera cantonal que se muestra ordenada en sus calles, las mismas que son amplias y responden a un trazado técnico, Lo que no es común en las poblaciones manabitas, las cuales casi siempre tienen calles zigzagueantes, curvas, estrechas y que en su crecimiento espontaneo, siguen más bien la ruta que marca el interés de los propietarios de terrenos urbanos. Son ciudades de crecimiento anárquico y espontáneo.

En Flavio se realizó una acción técnica: el Ing. Egberto Alarcón, del Departamento Técnico del Consejo Provincial, recibió la disposición del Prefecto de entonces, Enrique Delgado Coppiano, de realizar el estudio para el desarrollo de la población; realizadas las mediciones y el levantamiento topográfico, se elaboró un sencillo plan regulador aplicado al crecimiento de la población, cuyos

planos de lo que serían las calles en el futuro, dejó para que sean aplicados con disciplina por la Junta Parroquial, que tuvo un excelente desempeño en este aspecto.

Delgado Coppiano fue Prefecto Provincial de 1960 a 1967 y, durante esos siete años trabajó en conseguir mejoras para las jurisdicciones del norte, no solamente porque se trata de un chonero residente de siempre en esa ciudad, sino porque en el pasado no habían recibido ninguna atención de los organismos provinciales.

Con el mismo criterio actuaron algunos diputados de la época, a los que la Ley les permitía manejar asignaciones para su provincia de la partida “Obras de Interés Provincial” del Presupuesto del Estado. Varios políticos de Chone accedieron a la diputación y por ese medio consiguieron inversiones del Estado en obras para los cantones manabitas que no accedían por otras vías al financiamiento de las obras que les son indispensables.

En esa época, los diputados contaban con altos niveles de influencia en el Gobierno y conseguían decisiones importantes de los diferentes ministros. Una de las ocupaciones importantes de los legisladores era precisamente la gestión por las obras provinciales.

EL AGUA La parroquia Flavio Alfaro, por ejemplo, carecía de suministro de agua por tubería; conseguir el líquido elemento

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era muy sufrido para sus habitantes, porque tenían que subirla desde los ríos para almacenarla en tanques, o construir cisternas para almacenar el agua de las lluvias. No se debe olvidar la situación de la carretera que no permitía el uso de carros tanque.

La primera obra de trascendencia que se hace en la flamante parroquia, es la instalación del agua entubada, una necesidad sentida por toda la población. Lamentablemente no pudo ser potabilizada porque no hubo el financiamiento necesario; la zona servida estaba muy limitada, sin posibilidades de ampliación por el dimensionamiento de las tuberías.

Entre los mayores sufrimientos que narran las damas de la época, se cuenta la provisión de agua; todos los días tenían que bajar al río más cercano a su vivienda, portando canutos de caña guadúa, debidamente adecuados, para llenarlos de agua y transportarla hasta los reservorios en sus casas. No se debe olvidar que no era común el contar con baldes plásticos, pues no se había generalizado su uso. Igualmente sufrido era el lavado de la ropa, pues las damas de las casa tenían que bajar al río con sus atados de ropa para lavarla en la corriente y transcurridas las horas regresar con la ropa seca al sol.

En Portoviejo, la capital de la provincia, y como resultado de una sonada protesta que se convirtió en un paro de actividades de varios días, se había creado el Centro de Rehabilitación de Manabí, institución uno de cuyos obje-

tivos era la dotación de agua potable y para riego en toda la provincia. De hecho, el primer sistema de agua potable se construye en la capital de la provincia y comienza a funcionar mediada la década de los 60.

Nuevamente se reúnen los residentes en Flavio y esta vez resuelven dirigirse al Centro de Rehabilitación de Manabí.

Van a Portoviejo y expresan a las autoridades del CRM sus aspiraciones, mostrando con dramatismo lo que es la vida sin contar con agua corriente. Los peticionarios fueron bien recibidos y su solicitud atendida con diligencia, por manera que el 13 de diciembre de 1979, se crea la Junta Cantonal del Agua, bajo la presidencia de don Ángel Alcívar.

La Junta era la encargada de administrar el servicio de suministro de agua a los abonados, que pagaban una cantidad para cubrir los costos de la captación y bombeo.

El sistema era de dimensiones menores a las necesarias, pero sobre todo evidenció la necesidad y permitió además, la construcción de los sistemas de alcantarillado sanitario y pluvial de la cabecera cantonal.

Los sufrimientos por la falta de agua no se terminaron con la construcción del sistema de agua entubada; lamentablemente, no llegaba sino a las casas de la zona central y tampoco tenía volumen y fuerza como para aceptar ampliaciones posteriores. Pasarían muchos años sin que la mayor parte de los habitantes de Flavio Alfaro cuente en sus casas con el agua corriente necesaria, porque las in-

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stalaciones fueron calculadas para una población menor de la que alcanzó el crecimiento de la urbe que fue explosivo y que debió ser previsto oportunamente.

La actual administración municipal ya mejoró el sistema de agua que recibe la población, con una nueva captación y la dotación de bombas que se han visto afectadas por la insuficiencia del suministro eléctrico. También se ha trabajado en el montaje de un nuevo transformador para la subestación eléctrica, con lo que se espera que el nuevo sistema de agua mejore en la calidad del servicio que se completará con la construcción del sistema de potabilización que entregará agua sin ninguna contaminación para consumo de los habitantes.

LA LUZ Poco tiempo después de la parroquialización, el Concejo Municipal nombró al señor Trinidad Antonio Cedeño Arteaga, Jefe de la planta eléctrica de Flavio Alfaro, según nos informa su viuda Sra. Esperanza García Egüez de Cedeño. Lo envió junto con las máquinas, las que fueron armadas y ensambladas por el propio señor Cedeño, un competente mecánico electricista. Mientras tanto, se construían las líneas de distribución, se hacían las instalaciones a los domicilios y se instalaban las lámparas para el alumbrado público del área central, solamente.

La planta comenzó a funcionar en 1942, pero el servicio

solamente se mantenía de seis de la tarde a diez de la noche, salvo los días de fiesta en que se prolongaba hasta la media noche. Llegaba apenas a las casas que se encontraban en el centro del pueblo, pues la capacidad de la planta era reducida, aún para una pequeña población como era entonces la parroquia Flavio Alfaro. La asignación fue una acción política del Concejo de Chone, en un afán por asegurarse la simpatía de los habitantes de la parroquia.

Era frecuente la interrupción del servicio, cuenta la señora, y el mecánico tenía que mantenerse cerca de la planta para realizar las reparaciones rápidas, igual si era un daño en los equipos o en las líneas, pues no había más personal para atender los daños que se producían en las instalaciones.

Era la época en que cada ciudad o pueblo tenía su propia planta de generación eléctrica; casi siempre movidas con diesel, y las Municipalidades tenían un muy importante rubro de sus gastos en la operación y mantenimiento de los equipos. Los mismos, no eran muy confiables y sufrían constantes interrupciones, además de que el voltaje que entregaban estaba sometido a la carga que, en las horas de mayor consumo era tan bajo que constituía un peligro para los equipos domésticos y las máquinas que se conectaban a la red. Así ocurría con Chone y Flavio Alfaro.

El Municipio operaba sus instalaciones, mediante el señor Cedeño Arteaga, su empleado. Pero esos equipos dura-

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ron en operación poco tiempo y nunca sirvieron sino a la parte central de la parroquia.

Después fueron retirados de la parroquia y devueltos a Chone. La población se alumbraba como en el pasado, con mecheros, candiles, lámparas, etc. lo que motivó a algunos comerciantes a comprar sus propios equipos de generación y eran los que podían disfrutar de luz eléctrica.

La iluminación en los hogares se realizaba con mecheros que consumían kérex, un producto similar al kerosene; ese combustible se colocaba en un recipiente y se ponía una mecha que absorbía el líquido y prendía una llama que se mantenía mientras hubiera combustible en el recipiente. Otros mecheros se alimentaban de caucho para la combustión y se utilizaban en áreas muy ventiladas porque producían mucho humo.

Muchos años habrían de pasar hasta que se construyeran las líneas de transmisión y subtransmisión que han permitido que la provincia consuma la energía que se genera en Manta o en otros sectores del país. Una acción decisiva para el logro de las instalaciones eléctricas, tuvieron los entonces diputados general René Vargas Pazos Dr. Ítalo Colamarco y Enrique Delgado Coppiano, quienes consiguieron del presupuesto del Estado asignaciones por 312,8 millones de sucres, de los cuales se destinaron 17 millones a Flavio.

El proceso de la electrificación de Manabí lo inicia el Insti-

tuto Nacional de Electrificación, que organiza la Empresa distribuidora de la energía llamada Empresa Eléctrica de Manabí, EMELMANABI, en Manta; dicha empresa tenía como socios al INECEL, a todos los municipios y al Consejo Provincial, para unir esfuerzos en la necesidad de financiar las instalaciones necesarias. Y comienza el enorme trabajo de construir las redes de transmisión y subtransmisión, es decir líneas para energía a 69.000 y a 13.500 voltios que permiten ubicar un transformador pequeño para obtener energía doméstica o industrial. Esto permitió que la energía llegara a los hogares campesinos.

Entre Manta y Portoviejo se construyeron dos líneas de transmisión a 69 mil voltios; la primera permitía a la capital provincial utilizar la energía que se generaba en Manta. La segunda sirvió para que Manta reciba energía suficiente, cuando Manabí se incorporó al Sistema Nacional Interconectado.

En Manta se puso en marcha la central Miraflores que llegó a tener una potencia de 64 megavatios y, cuando no fueron suficientes, se puso a funcionar los buques – planta y, cuando finalmente les llegó la obsolescencia, el INECEL, había construido ya la línea de transmisión Quevedo – Portoviejo, por la que llegaba y llega la energía eléctrica que necesita Manabí, desde las diferentes generadoras, a través del Sistema Nacional Interconectado.

Además de la generación, fue clave para mejorar la situación del suministro eléctrico a toda la provincia, la con-

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strucción de las redes de transmisión y subtransmisión desde Manta hacia toda la provincia, junto con subestaciones de transformación que integran un sistema de distribución eléctrica, el más extenso del país y que permite que no solamente las ciudades, sino también las áreas rurales y pequeñas comunidades, cuenten con la energía eléctrica que sin duda mejora la vida de la gente.

Manabí cuenta con un sistema extenso de distribución eléctrica, cuya operación es complicada y costosa por la gran cantidad de trabajadores que demanda para mantener habilitadas las líneas de transmisión y subtransmisión que llegan a todas partes.

Hay que señalar que las Municipalidades han tenido una acción altamente positiva en el suministro eléctrico, pues han invertido en la construcción de líneas de subtransmisión sobre todo en el área rural y sistemas de iluminación pública, lo que ha permitido que las comunidades rurales mejoren su nivel de vida y se facilite el trabajo con el uso de máquinas que ayudan en el cumplimiento de las tareas más pesadas.

Precisamente la administración municipal del Ing. Jaminton Intriago Alcívar ha construido 500 kilómetros de líneas de subtransmisión que sirven al 90 % de las comunidades rurales del cantón. Igualmente ha intervenido para que la Corporación Eléctrica monte en Sesme, un nuevo transformador con mayor capacidad para mejorar la calidad de la energía que se recibe en Flavio; está programada tam-

bién la construcción de la línea de transmisión a 69 mil voltios para aumentar la potencia eléctrica que entregue a toda la zona norte.

LA CARRETERA Hasta esa época, los pueblos manabitas se comunicaban por carreteras llamadas “de verano”, porque se trataba sólo de terraplenes que funcionaban en la época seca, pero que con las lluvias eran destruidas; al comienzo del verano, la carretera era abierta por los mismos transportistas, que manejaban unos grandes camiones con una carrocería para pasajeros y un cajón para colocar la carga; estos carros #mixtos# trabajaban en toda la costa del país..

Tres de esos camiones servían el transporte de Flavio Alfaro hacia Chone y viceversa; ellos llevaban en su primer viaje piedra y madera para realizar reparaciones precarias en la vía y poder circular. Después, el Concejo Municipal o el Consorcio de Municipalidades Manabitas, enviaba tractores para reconstruir el terraplén que con las lluvias del invierno, nuevamente quedaría destruido.

Aún con esa carretera, el viaje era muy pesado; la señora Yolanda Alvarado nos cuenta que su primera visita a Flavio Alfaro significó un viaje de casi un día completo en el camión que tenía que rodar muy despacio porque había demasiados huecos en la vía.

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LOS RAIDISTAS

INCA y Granda Centeno.

Pero en la década de los 50, el Concejo de Chone comienza a construir la carretera a Flavio Alfaro, con una capa de lastre para darle permanencia. Simultáneamente solicita al Ministerio de Obras Públicas la construcción de la carretera Chone-El Carmen, pero algún funcionario respondió que esa vía es imposible de construir, respuesta que enardeció a los choneros y levantó el entusiasmo de cinco valientes jóvenes aventureros que se propusieron demostrar que es perfectamente posible viajar de Chone a Quito por El Carmen, haciendo el viaje en carro, a pesar de que no existía carretera.

La vía se construyó entre 1960 y 1965, año en el que entró en servicio, pero siempre se mantuvo en malas condiciones, hasta que el gobierno del Presidente Rafael Correa ha contratado su construcción con hormigón armado, estructura que permitirá una mayor durabilidad, como para garantizar la fácil movilización entre Manabí y la Sierra.

A esos cinco jóvenes se les denomina “Los Raidistas” y tienen un grato recuerdo en el corazón de sus paisanos. Ellos son: Carlos Alberto Aray, Juan de Dios Zambrano, Plutarco Moreira, Emilio Hidalgo y Artemio Aray; compraron un carrito en cinco mil sucres y lo prepararon para la travesía llena de dificultades; inclusive, se cuenta que hubo un tramo en el que era imposible pasar en el carro¸ pues lo desarmaron parcialmente y lo transportaron en una balsa hasta el sitio en que podían retomar el transporte terrestre.

Así llegaron a Quito en lo que fue un sonado acontecimiento que sensibilizó al Presidente Velasco Ibarra, quien ordenó que de inmediato se contrate la construcción de la carretera, lo que se cumplió con las empresas Guarderas,

Es necesario registrar el período de gobierno de 2009 a 2013 como el más efectivo en cuanto a vialidad de Manabí, pues se completarán las principales carreteras de la provincia, en condiciones de diseño costosas pero que aseguran una larga vida y seguridad para el transporte de pasajeros y carga entre las ciudades de la provincia y hacia las poblaciones vecinas.

Igualmente en Flavio el período ha sido muy importante, porque se ha eliminado el lodo de las calles en las que se han construido calzadas de hormigón; 200 Km. De carreteras rurales permanentes, empedradas y asfaltadas han sido construidas y el 90% de la zona rural del cantón cuenta con electricidad, merced a 500 Km. De líneas construidos.

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SE CREA EL CANTÓN Corría el año 1987 y el país hace ocho años había regresado al régimen de derecho, después de la larga dictadura militar. La norma constitucional permitía entonces, que los legisladores tomaran la iniciativa para la creación de cantones en la república. La Ley, para este objetivo, constituye una reforma expresa o tácita a la Ley de División Territorial.

La nueva Constitución deja a iniciativa exclusiva del Ejecutivo la reforma a la Ley de División Territorial para la creación de nuevas jurisdicciones.

Los habitantes de Flavio Alfaro, se habían cansado de ser parroquia, pues eran muchas las necesidades de la comunidad y pocas las oportunidades de solución como parte de otro cantón.

Pensaban que con rentas propias, en condición de nuevo cantón, podrían acometer las soluciones en las condiciones que ellos consideraban mejores, lo que se ha hecho efectgivo 20 años después.

Esos sentimientos se concretaron en la organización de

un comité Procantonización que comenzó a trabajar con entusiasmo.

En 1966 había retornado a Flavio Alfaro, John Cuadros Pazmiño, estudiante de la Universidad Católica de Quito, nativo de Flavio Alfaro, quien ya había desarrollado pensamientos y realizado contactos para la cantonización de Flavio Alfaro. Como es natural, era el más entusiasta al interior del Comité Procantonización, y fue designado su Presidente por sus compañeros.

Cuadros era parte de la Izquierda Democrática, partido que tenía una importante cuota legislativa y había ganado la Prefectura de Manabí, en la persona del Ing. Ríchard Guillem.

En la legislatura de entonces, tres choneros de diferentes tiendas políticas, eran diputados y trabajaban en sus programas destinados a beneficiar a su provincia. Ellos eran Enrique Delgado Coppiano, General René Vargas Pazos y Dr. Ítalo Colamarco.

En ese tiempo, el pleno del Congreso Nacional funcionaba solamente dos meses y el resto del año cumplía sus funciones el Plenario de las Comisiones Legislativas Permanentes, integrado por los diputados miembros de las Comisiones que eran cinco y tenían siete miembros cada una. Delgado Coppiano presidía la Comisión de lo Presupuestario, de la que eran miembros también Vargas y Colamarco. Por esa razón, es al Plenario de las Comisiones

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Legislativas Permanentes al que corresponde tratar sobre la creación del cantón.

El despacho del Diputado Enrique Delgado Coppiano, elaboró el proyecto de ley y el diputado lo presentó, en tanto que Cuadros y los demás miembros del Comité, cabildeaban para conseguir los votos suficientes; uno de los más entusiastas era el Dr. Carlos Romo Dávila, pariente político de Cuadros, quien concurría casi diariamente al Congreso para continuar tratando el tema con los diputados.

Se logró esos votos y se aprobó la Ley en dos discusiones, conforme la norma constitucional; estaba lista para la sanción del Presidente de la República, que era el Ing. León Febres Cordero, del partido Socialcristiano. El Presidente, objetó totalmente el proyecto y con ello impedía que se presentara un nuevo proyecto sobre el tema, hasta después de un año.

Era el tercer año del período de Febres Cordero; no había mucha esperanza de que cambiara de opinión en relación con la creación del cantón; sin embargo, tres diputados manabitas que eran miembros de la Comisión de Presupuesto del Congreso que presidía el diputado Delgado Coppiano; a través del trabajo presupuestario lograron una excelente relación con el Ministro de Finanzas, Ec. Cordovez.

Ellos se pusieron de acuerdo y presentaron el nuevo

proyecto que fue aprobado nuevamente y, gracias a la gestión del Ec. Cordovez, se logró el Ejecútese y se promulgó la Ley que reproducimos en texto aparte, tomado del Registro Oficial.

Los tres diputados manabitas referidos eran todos de Chone: Delgado Coppiano, General René Vargas Pazos y Dr. Ítalo Colamarco. Los tres también se unificaron para conseguir asignaciones del presupuesto que financiaron numerosas obras en diferentes lugares de la provincia; particularmente a Flavio le asignaron 17 millones de sucres, sobre un total de 312 millones para todo Manabí.

Ley No. 89 CONGRESO NACIONAL EL PLENARIO DE LAS COMISIONES LEGISLATIVAS Considerando: Que la parroquia Flavio Alfaro de la jurisdicción del cantón Chone, provincia de Manabí, ha alcanzado un desarrollo acelerado en todos sus aspectos, especialmente en lo que respecta a lo agrícola, poblacional, comercial y urbanístico, lo que lo ha convertido en un polo de desarrollo dentro de Manabí; y, Que luego de realizado el estudio de investigación de la realidad humana, geográfica, económica y política de la

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parroquia Flavio Alfaro, se ha llegado a la conclusión de que es conveniente elevarlo a la categoría de Cantón.

En ejercicio de sus facultades constitucionales expide la siguiente

LEY DE CREACIÓN DEL CANTÓN FLAVIO ALFARO. Art. 1. Créase en cantón Flavio Alfaro en la provincia de Manabí, cuya cabecera cantonal será la ciudad de Flavio Alfaro.

Art. 2.- La jurisdicción político-administrativa del cantón Flavio Alfaro comprenderá el territorio que actualmente ocupa la parroquia del mismo nombre.

Art. 3.- Los límites del cantón Flavio Alfaro serán los siguientes: AL NORTE: Desde la desembocadura del Estero Guineo en el río Mongoya, el río Mongoya aguas abajo, hasta su confluencia con el río Quinindé.

AL ESTE: De esta confluencia, el río Quinindé aguas arriba, hasta su confluencia con el río Piojo, aguas arriba, hasta la desembocadura del Estero Águila, aguas arriba, hasta sus orígenes; de estos orígenes, la línea imaginaria al sur hasta alcanzar las nacientes del Estero Teodomiro; de

estas nacientes, el Estero Teodomiro, aguas abajo hasta su afluencia en el río Morena; de esta afluencia, el río La Morena aguas abajo, hasta la confluencia con el río de Oro; de esta confluencia, el río de Oro, aguas abajo, hasta la desembocadura del Estero El Pato.

AL SUR: De la desembocadura del Estero El Pato, en el río de Oro, el río de Oro aguas abajo, hasta la afluencia del Estero El Orito; de esta afluencia, el Estero El Orito, aguas arriba, hasta sus nacientes; de esas nacientes, la línea imaginaria hasta el extremo orográfico oriental por el divisor de las Montañas de Plata al oeste, hasta alcanzar el extremo occidental orográfico y su extensión a las nacientes del Estero Las Flores; de estas nacientes, la línea imaginaria al norte, hasta alcanzar la desembocadura del Estero Matías en el río Pacho; de esta desembocadura, el Río Pacho, aguas arriba hasta la afluencia del Estero Leones; de esta afluencia, el Estero Leones, aguas arriba, hasta sus nacientes en el extremo orográfico oriental de la cordillera de Pacho; de este extremo orográfico, el divisor de la Cordillera de Pacho al oeste, hasta la unión orográfica con la cordillera de Turriaga; de esta unión orográfica.

El divisor de la cordillera Turriaga al norte y su extensión desde el extremo norte orográfico de esta cordillera a las nacientes del río Turriaga al oeste; de estas nacientes, el río Turriaga, aguas abajo, hasta su confluencia con el río Limón, formadores del río Yescas; de esta confluencia, el río Yescas, aguas abajo, hasta la desembocadura del Es-

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tero Chajual Pilu.

DISPOSICIONES TRANSITORIAS

AL OESTE: De la desembocadura del Estero Chajual Pilu en el río Yescas, el río Yescas, aguas abajo, hasta la desembocadura del río Zapallo; de esta desembocadura, el río Zapallo aguas arriba, hasta sus orígenes en el extremo orográfico sur de la Cordillera El Mirador; de este extremo orográfico sur, el divisor de la Cordillera El Mirador, hacia el norte, hasta alcanzar la Loma Trinidad; de la cumbre de esta Loma, el divisor de las montañas de Góngora al noroeste hasta alcanzar la unión orográfica con el extremo oriental de la Cordillera de Canales; del extremo oriental orográfico de la Cordillera de Canales, la línea imaginaria al noroeste hasta alcanzar la confluencia de los esteros Canales y Aguas Muertas, formadores de la Quebrada Novillo; de esta confluencia, la quebrada Novillo, aguas abajo, hasta la desembocadura del Estero Cuerno de Venado; de esta desembocadura, el estero Cuerno de Venado, aguas arriba, hasta sus orígenes; de los orígenes del Estero Cuerno de Venado, la línea imaginaria al noroeste hasta alcanzar las nacientes del Estero Guineo; de estas nacientes, el estero guineo aguas abajo, hasta su afluencia en el río Mongoya.

PRIMERA: La administración del nuevo cantón Flavio Alfaro en la provincia de Manabí, seguirá a cargo del Municipio de Chone, hasta cuando se elijan las dignidades del Municipio de Flavio Alfaro.

Art. 4.- El nuevo cantón percibirá las asignaciones de Retención Automática e Inversiones, que le corresponden del Fondo Nacional de Participaciones, creado específicamente para el objeto.

SEGUNDA: El Tribunal Supremo Electoral, de acuerdo con la Ley, convocará a elecciones para Presidente del Concejo y Concejales del Municipio de Flavio Alfaro.

ARTÍCULO FINAL: Esta Ley entrará en vigencia a partir de su publicación en el Registro Oficial.

Dada en Quito, en la sala de sesiones del Plenario de las Comisiones Legislativas, a los veintitrés días del mes de marzo de mil novecientos ochenta y ocho. f) Jorge Zavala Baquerizo, Presidente del Congreso Nacional.

Dr. Carlos Jaramillo Díaz, Secretario General.

Palacio Nacional en Quito, a veinte de abril de mil novecientos ochenta y ocho.

Ejecútese.

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f) León Febres Cordero Ribadeneyra, Presidente Constitucional de la República.

Es fiel copia.- Lo certifico: 21 de abril de 1988. f) Lcdo. Patricio Quevedo Terán, Secretario General de la Administración.

LA PRIMERA ADMINISTRACIÓN MUNICIPAL Presidente municipal: John Cuadros Pazmiño

• SR. ISMAL BOLIVAR MENDOZA MONTES • SR. JHONNY ALEXIS CUADROS CASTRO Cuadros fue electo Presidente del Concejo. Su administración comienza en realidad, en 1989, cuando era Presidente de la República el Dr. Rodrigo Borja Cevallos, compañero de aulas en Quito, del presidente del concejo y dirigente máximo del partido izquierda democrática.

En sesión extraordinaria, de fecha 12 de diciembre de 1988 se eligió al Presidente Ocasional del Concejo Sr. Pedro Jacinto Cedeño Mejía y al Tesorero Municipal Sr. Luis Eberto López Zambrano.

asumió la Presidencia del Concejo de el 11 de diciembre de 1988

En sesión ordinaria de fecha 19 de diciembre de 1988 se integraron las comisiones de mesa, las mismas que quedaron conformadas de la siguiente manera:

LA CORPORACION MUNICIPALPAL ESTUVO CONFORMADA POR LOS SEÑORES CONCEJALES

COMISIÓN DE MESA.

• DR. LUIS ENRIQUE CEDEÑO RODRIGUEZ • SR. CARLOS EFREN LOOR DELGADO • SR. PEDRO JACINTO CEDEÑO MEJIA

SR JULIO CESAR CUADROS PAZMIÑO. SR. CARLOS EFREN LOOR DELGADO. DR. LUIS ENRIQUE CEDEÑO RODRIGUEZ.

• SR. JUAN RAMON ZAMBRANO LOOR • SR. WILMER PRIMITIVO ZAMBRANO LOOR

COMISIÓN DE FINANZAS.

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JUAN RAMÓN ZAMBRANO LOOR.

COMISIÓN DE EDUCACIÓN Y DEPORTE

WILMER PRIMITIVO ZAMBRANO MENDOZA.

SR. CARLOS EFREN LOOR DELGADO.

DR. LUIS ENRIQUE CEDEÑO RODRIGUEZ.

SR. JHONY ALEXIS CUADROS CASTRO.

COMISIÓN DE OBRAS PÚBLICAS

DR. LUIS ENRIQUE CEDEÑO RODRIGUEZ

SR. PEDRO JACINTO CEDEÑO MEJIA.

COMISIÓN PARQUE Y CEMENTERIO

SR. WILMER PRIMITIVO ZAMBRANO MENDOZA.

SR. CARLOS EFREN LOOR DELGADO.

DR. LUIS ENRIQUE CEDEÑO RODRIGUEZ.

SR. JHONY ALEXIS CUADROS CASTRO

COMISIÓN DE ELECTRIFICACIÓN.

SR. JUAN RAMÓN ZAMBRANO LOOR.

SR.WILMER PRIMITIVO ZAMBRANO MENDOZA.

En esa época, la norma legal otorgaba el derecho a contar con Alcalde, solamente a los cantones cuya cabecera cantonal era la capital de la provincia y a los que contaran con 50.000 habitantes; en los demás cantones, de entre los concejales se elegía al Presidente del Concejo, cuyo alterno se principalizaba.

SR. PEDRO JACINTO CEDEÑO MEJIA. SR. JUAN RAMÓN ZAMBRANO LOOR. COMISIÓN DE HIGIENE Y SALUBRIDAD. DR. LUIS ENRIQUE CEDEÑO RODRIGUEZ SR. CARLOS EFREN LOOR DELGADO SR. JUAN RAMÓN ZAMBRANO LOOR.

Cuadros se había comprometido consigo mismo a llevar adelante una administración que demostrara la diferencia en servicio a la colectividad; su obsesión era la educación y a ello dedicó importantes esfuerzos.

Tenía la ventaja de que el Gobierno Nacional pertenecía a su partido político, además de que el Presidente Borja era su amigo personal. Por otro lado, los diputados recibían

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todos los años un derecho a invertir en obras para su provincia, con recursos de la que se denominaba “Partida de Obras de Interés Provincial”, del Presupuesto del Estado.

Esos factores ayudaron mucho a cumplir pronto dos objetivos de Cuadros y del pueblo de Flavio: la construcción de las instalaciones del sistema de alcantarillado sanitario y el alcantarillado pluvial, obras que se convirtieron en emblemáticas y que mejoraron notablemente las condiciones sanitarias de la nueva cabecera cantonal y que aún se encuentran en servicio, con las ampliaciones y mejoras que se han realizado en posteriores administraciones.

Además de esas importantes obras de la primera administración municipal, se consiguió la reapertura de 50 escuelas rurales que habían sido cerradas por falta de profesores; para eso, Cuadros consiguió 68 partidas presupuestarias y más de 40 bonificaciones para alfabetizadores. Alrededor de doscientos profesores fueron designados para las escuelas rurales que abrieron sus puertas y comenzaron a servir a la población.

bres Cordero, construyó algunas aulas para escuelas rurales, el empedrado de las carreteras Marcos-El Golpe y Las Cumbres-La Morena; adoquinó varias calles de la ciudad, comenzó la construcción del mercado y construyó varias canchas de uso múltiple en la zona rural; con la ayuda del Consejo Provincial, equipó las oficinas municipales y dejó en las arcas municipales, 30 millones de sucres para la nueva administración.

Logró la ayuda de los diputados manabitas, particularmente los de la ID. Como una anécdota de esta administración, nos cuenta la señora Mariana de Jesús Loor, quien fuera Secretaria Particular del Presidente del Concejo, que en el equipamiento que entregó el Consejo Provincial no habían computadores y toda la correspondencia y más documentos de la Institución, se procesaban en máquinas de escribir, en tanto que los archivos eran físicos, es decir carpetas ordenadas que contenían los documentos debidamente clasificados. Para el manejo de documentos, el Presidente Cuadros era muy exigente, nos informa.

Fue adquirida la casa municipal que hasta ahora presta servicios y se compró la primera volqueta para mejorar los caminos rurales.

Ella, prácticamente ejerció plenamente la Secretaría del Concejo, a pesar de que quien estaba nombrada era la Sra. Nelly Cantos. <Es que yo he sido la Secretaria particular de toda la vida de don John Cuadros> explica.

Con un presupuesto de 50 millones de sucres (equivalente a unos 80 mil dólares) en promedio anual para los tres años, logró comenzar la construcción del edificio municipal en los terrenos de la casa comunal construida por Fe-

Otra de las funcionarias que trabajó en esa primera administración, es la señora Leonor Vera Zambrano, quien comenzó con la administración, en 1989, en el área financiera.

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Nos cuenta que con el presupuesto de 32.5 millones de sucres tenía que alcanzar para todo. El gasto corriente era menos del 25%, dice, pues los empleados y trabajadores que no eran más de veinte.

En lo personal, tuvo que crear la contabilidad municipal, cuando los conocimientos de la contabilidad gubernamental no eran generalizados. Para hacerlo, buscó la asesoría de un viejo funcionario de Contraloría, el Economista Jorge Chávez, quien hizo su aporte valioso para entrenar a todo el personal que manejaba las operaciones contables. Los gastos de la asesoría los cubrí personalmente de mis propios recursos dice.

La señora Vera Zambrano continuó como Directora Financiera con el segundo Alcalde, don Augusto Cedeño, con una acción más intensa, pues utilizó su experiencia y las relaciones obtenidas, para gestionar ayuda para la administración municipal. Con el tercer Alcalde, don Augusto Cedeño Paladines, fue Asesora de Administración y Finanzas. Cuando terminó el período, comenzó a trabajar con la Empresa Odebretch, como parte del equipo contable a nivel internacional.

1992 -1996 SEGUNDA ADMINISTRACION PRESIDENTE SR. JOSE VICENTE CEDEÑO MOREIRA ASUMIO LA PRESIDENCIA DEL CONCEJO DE EL 10 DE AGOSTO DE 1992.

LA CORPORACION MUNICIPALPAL ESTUVO CONFORMADA POR LOS SEÑORES CONCEJALES: • SR. ENRIQUE GARCÍA ZAMBRANO • SR. RAMÓN ABDON BARREIRO ALCÍVAR • SR. CARLOS ALCÍVAR DELGADO • SR. MANUEL NERYS ALCIVAR ZAMBRANO • DR. LUIS ENRIQUE CEDEÑO RODRIGUEZ • PROF. GONZAGA OREJUELA MESÍAS • FREDDY RENELFO ALCIVAR VERA. En sesión inaugural del Concejo Municipal, de fecha 10 de agosto de 1992, se eligió al Vice-presidente del concejo Sr. Ramón Abdón Barreiro Alcívar y al Presidente Ocasional Sr. Carlos Alcívar Delgado.

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En esta misma sesión se eligió la Comisión de Mesa de la siguiente manera: COMISIÓN DE MESA. SR. JOSÉ VICENTE CEDEÑO MOREIRA. SR. RAMÓN ABDÓN BARREIRO ALCÍVAR SR. MANUEL NERYS ALCíVAR ZAMBRANO. En sesión extraordinaria de fecha 11 de agosto de 1992 se integraron las comisiones que quedaron conformadas de la siguiente manera: COMISIÓN DE FINANZAS. SR. CARLOS ALBERTO ALCÍVAR DELGADO SR. CARLOS ENRIQUE GARCÍA ZAMBRANO SR. MANUEL NERYS ALCIVAR ZAMBRANO COMISIÓN DE OBRAS PÚBLICAS SR. MANUEL NERYS ALCIVAR ZAMBRANO SR. CARLOS ENRIQUE GARCÍA ZAMBRANO SR. RAMÓN ABDON BARREIRO ALCÍVAR

COMISIÓN DE ELECTRIFICACIÓN. SR. MANUEL NERYS ALCIVAR ZAMBRANO SR. LUIS ENRIQUE CEDEÑO RODRIGUEZ SR. FREDDY RENELFO ALCIVAR VERA. COMISIÓN DE HIGIENE Y SALUBRIDAD. SR. CARLOS ALBERTO ALCIVAR DELGADO SR. FREDDY RENELFO ALCIVAR VERA. PROF. JEAN GONZAGA OREJUELA MESÍAS COMISIÓN DE EDUCACIÓN Y DEPORTE PROF. JEAN GONZAGA OREJUELA MESÍAS SR. RAMÓN ABDON BARREIRO ALCÍVAR SR. MANUEL NERYS ALCIVAR ZAMBRANO COMISIÓN PARQUE Y CEMENTERIO SR. FREDDY RENELFO ALCIVAR VERA. SR. MANUEL NERYS ALCIVAR ZAMBRANO PROF. JEAN GONZAGA OREJUELA MESÍAS

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OBRAS IMPORTANTES:

•

Continuación de las obras de alcantarillado pluvial y sanitario y de electrificación rural y urbana

• SR. WALTER AMABLE GÓMEZ PAZMIÑO

Construcción de canchas de uso múltiple en algunas comunidades campesinas.

SR. JOSE HORACIO BUENAVENTURA VERA

• SR. MARCOS ANTONIO MUÑOZ BRAVO • SR. CARLOS EUGENIO ZAMBRANO HIDALGO • SR. JUAN RAMÓN ZAMBRANO LOOR.

1996 – 2000 TERCERA ADMINISTRACION EL PRIMER ALCALDE DE LA ILUSTRE MUNICIPALIDAD DE FLAVIO ALFARO FUE: • SR. SILFRIDO AUGUSTO CEDEÑO PALADINES ASUMIO LA PRESIDENCIA DEL CONCEJO DE EL 10 DE AGOSTO DE 1996.

LA CORPORACION MUNICIPALPAL ESTUVO CONFORMADA POR LOS SEÑORES CONCEJALES: • SR. EDISON REMBERTO ALCIVAR CEDEÑO • SR. RAMÓN ABDÓN BARREIRO ALCÍVAR

En sesión inaugural del Concejo Municipal, de fecha 10 de agosto de 1996, se eligió al Vice-presidente del Concejo Sr. José Horacio Buenaventura Vera.

En sesión ordinaria, de 13 de agosto de 1996, se integraron las comisiones que quedaron conformadas de la siguiente manera: COMISIÓN DE MESA. PRIMER VOCAL: SR. AUGUSTO CEDEÑO PALADINES SEGUNDO VOCAL: SR. JOSE HORACIO BUENAVENTURA VERA TERCER VOCAL: SR. EGDO. REMBERTO ALCIVAR CEDEÑO COMISIÓN DE FINANZAS.

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SR. WALTER AMABLE GÓMEZ PAZMIÑO

SR. RAMÓN ABDON BARREIRO ALCIVAR

SR. EGDO EDISON REMBERTO ALCIVAR CEDEÑO

SR. JOSE HORACIO BUENAVENTURA VERA

SR. CARLOS EUGENIO ZAMBRANO HIDALGO.

SR. EGDO EDISON REMBERTO ALCIVAR CEDEÑO

COMISIÓN DE OBRAS PÚBLICAS.

COMISIÓN PARQUE Y CEMENTERIO

SR. DR. MARCOS ANTONIO MUÑOZ BRAVO

SR. CARLOS EFREN LOOR DELGADO.

SR. WALTER AMABLE GÓMEZ PAZMIÑO

SR. JHONY ALEXIS CUADROS CASTRO

SR. RAMÓN ABDON BARREIRO ALCIVAR.

SR. JUAN RAMÓN ZAMBRANO LOOR.

COMISIÓN DE ELECTRIFICACIÓN.

Habiendo triunfado en las elecciones, se posesionó como Concejal Principal y, reunido el Concejo, lo elige su Presidente, función en la que permaneció un mes, pues la Ley determinó que todos los cantones del país tengan un Alcalde y esa función correspondía al Presidente del Concejo.

SR. JUAN RAMÓN ZAMBRANO LOOR SR. MARCOS ANTONIO MUÑOZ BRAVO SR. RAMÓN ABDON BARREIRO ALCIVAR COMISIÓN DE HIGIENE Y SALUBRIDAD. SR. CARLOS EUGENIO ZAMBRANO HIDALGO SR. JUAN RAMÓN ZAMBRANO LOOR SR. JOSE HORACIO BUENAVENTURA VERA COMISIÓN DE EDUCACIÓN Y DEPORTE

Su principal preocupación en la dirección de la Municipalidad, fue intentar dotar a Flavio de agua potable suficiente y a ello dedicó su esfuerzo. Tenía una buena relación con el Presidente de la República que era Fabián Alarcón y pudo conseguir el aval del gobierno para un crédito internacional, en una época difícil para la economía nacional, pues el petróleo –principal fuente de financiamiento del Estado- había llegado a los siete dólares el barril.

Viajó a los Estados Unidos y utilizó sus contactos para en-

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trar en negociaciones con el Mellon Banck, que aprobó un crédito por 5.5 millones de dólares para financiar el sistema de agua potable, en base del proyecto técnico que llevó consigo. Pero, entre las condiciones del crédito estaba la participación del Concejo que, como contraparte, debía aportar 750 mil dólares.

Como el Concejo no tenía esa disponibilidad de capital, recurrió al gobierno que si bien aceptó otorgarle el aval, le negó el aporte para la contraparte, lo que imposibilitó que se concretara el financiamiento. En los cuatro años de mi administración recibí menos de 500 mil dólares, dice don Augusto; de dónde iba a conseguir los 750.000 para la contraparte. Así se perdió el crédito por el que tuvimos que pagar comisión de compromiso que Contraloría pretendió glosarnos, pero comprobamos que el trámite había sido realizado de acuerdo con la Ley y que ese pago era también totalmente legal.

Lo cierto es que se perdió la oportunidad de construir el sistema de agua potable para Flavio Alfaro, en esa oportunidad.

Nuestros esfuerzos se dirigieron entonces a la electrificación. Con los escasos recursos económicos con que contábamos, logramos construir algunas líneas de conducción hacia las comunidades rurales; previamente habíamos conseguido la construcción de la subestación de transformación que hacía posible la distribución de la energía que venía de Manta, dice. Sin duda, lo mismo que

ahora, la aspiración de los campesinos es contar con energía eléctrica para mejorar sus condiciones de vida y de trabajo.

Por lo demás, la vida en el cantón continuaba con la sencillez de siempre; se veía que se producía un crecimiento considerable de todas las actividades y también de las necesidades de la población; muy pocos tramos de calles habían sido adoquinados, por lo que en la estación lluviosa se sufría mucho por el lodo y por el polvo en la temporada seca.

Habríamos querido superar esos inconvenientes, pero no había recursos económicos; ni siquiera el gobierno nacional estaba en condiciones de ayudarnos por las dificultades que mencioné, dice; es que no había llegado aún la Ley del 15% que financia las arcas municipales con recursos del presupuesto general del Estado.

En definitiva es casi un período perdido por falta de alternativas financieras; el nuevo cantón sigue en condiciones de ínfimo desarrollo en tanto que la inconformidad crece y se traducirá en las elecciones en que se sigue probando otros líderes que no encuentran el camino hacia el desarrollo del cantón.

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2000 – 2004 CUARTA ADMINISTRACION SEGUNDO ALCALDE SR. PEDRO JACINTO CEDEÑO MEJIA ASUMIO LA PRESIDENCIA DEL CONCEJO EL 10 DE AGOSTO DEL 2000.

LA CORPORACION MUNICIPALPAL ESTUVO CONFORMADA POR LOS SEÑORES CONCEJALES: • DR. MARCOS MUÑOZ BRAVO • SR. JUAN ZAMBRANO LOOR • SR. ALFONSO RODRIGUEZ PAZMIÑO • SR. LIZARDO LOOR MOREIRA • ING. JAMINTON INTRIAGO ALCIVAR • SR. PABLO DAVID CEDEÑO MACIAS • SR. JOSE ABRAHAN REZABALA En sesión inaugural del concejo, de fecha 10 de agosto del 2000, se eligió al Vice-presidente Sr. Pablo David Cedeño Macías.

En sesión ordinaria de 15 de agosto del 2000, se inte-

graron las comisiones que quedaron conformadas de la siguiente manera: COMISIÓN DE PLANEAMIENTO URBANISMO Y OBRAS PÚBLICAS SR. JUAN ZAMBRANO LOOR. SR. ALFONSO RODRIGUEZ PAZMIÑO SR. JOSE ABRAHAN REZABALA COMISIÓN DE SERVICIOS PÚBLICOS; COMPRENDE: ABASTECIMIENTO DE AGUA, ALCANTARILLADO, ENERGIA ELECTRICA, ALUMBRADO Y ASEO PÚBLICO, BOMBEROS, MATADEROS, PLAZAS DE MERCADO, CEMENTERIOS Y OTROS QUE PUEDAN CALIFICARSE COMO TALES: SR. LIZARDO LOOR MOREIRA SR. JUAN ZAMBRANO LOOR ING. JAMINTON INTRIAGO ALCIVAR COMISIÓN DE SERVICIOS FINANCIEROS. SR. PABLO DAVID CEDEÑO MACIAS ING. JAMINTON INTRIAGO ALCIVAR DR. MARCOS MUÑOZ BRAVO

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COMISIÓN DE SERVICIOS SOCIALES. DR. MARCOS MUÑOZ BRAVO ING. JAMINTON INTRIAGO ALCIVAR SR. LIZARDO LOOR MOREIRA

 CONTRUCCIÓN DEL ALCANTARILLADO PLUVIAL EN VARIAS CALLES DE LA CIUDAD  CONTRUCCIÓN DE RED ELECTRICA EN VARIAS COMUNIDADES Y CAPILLAS

SR. JUAN ZAMBRANO LOOR

Su administración estuvo viciada de problemas administrativos en los que intervino la Contraloría, en aplicación de la Ley; las condiciones de atraso ya explicadas antes, se mantienen y el cantón no se enrumba aún por el sendero del progreso que se esperaba cuando se tramitó la cantonización.

SR. ALFONSO RODRIGUEZ PAZMIÑO

2004 – 2009

COMISIÓN DE SERVICIOS ECONOMICOS. SR. JOSE ABRAHAN REZABALA

QUINTA ADMINISTRACION COMISIÓN DE LÍMITES. SR. JOSE ABRAHAN REZABALA SR. ALFONSO RODRIGUEZ PAZMIÑO ING. JAMINTON INTRIAGO ALCIVAR

OBRAS IMPORTANTES:  CONTRUCCIÓN DE CANCHAS DEPORTIVAS EN LAS DIFERENTES COMUNIDADES

EL TERCER ALCALDE ING. JAMINTON ENRIQUE INTRIAGO ALCIVAR ASUMIO LA PRESIDENCIA DEL CONCEJO EL 5 DE ENERO DEL 2005.

LA CORPORACION MUNICIPALPAL ESTUVO CONFORMADA POR LOS SEÑORES CONCEJALES: • LIC. LANDY ELFRODITA ZAMBRANO ZAMBRANO • SR. PABLO DAVID CEDEÑO MACIAS

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• SR. MANUEL ANTONIO CEDEÑO MACIAS

DR. ROMULO MONTALVO PULECIO

• SR. VICENTE ANTONIO CEDEÑO ZAMBRANO

SR. PABLO DAVID CEDEÑO MACIAS

• SR. SEGUNDO RAFAEL VERA ARTEAGA

COMISIÓN DE SERVICIOS PÚBLICOS

• DR. ROMULO DIOGENES MONTALVO PULECIO

SRTA. ALEXANDRA CEDEÑO MOREIRA

• SRTA. ALEXANDRA DOLORES CEDEÑO MOREIRA

SR. VICENTE CEDEÑO ZAMBRANO

En sesión inaugural del Concejo, de fecha 5 de enero de 2005, se eligió al Vice-presidente del Concejo Lcdo.

Landy Elfrodita Zambrano Zambrano.

SR. MANUEL CEDEÑO MACIAS

En sesión ordinaria de 15 de enero de 2005, se integraron las comisiones que quedaron conformadas de la siguiente manera:

COMISIÓN DE SERVICIOS FINANCIEROS.

COMISIÓN DE MESA EXCUSAS Y CALIFICACIÓN

DR. ROMULO MONTALVO PULECIO

ING. JAMINTON INTRIAGO ALCIVAR (ALCALDE).

ING. SEGUNDO VERA ARTEAGA

LIC. LANDY ZAMBRANO ZAMBRANO.

COMISIÓN DE SERVICIOS SOCIALES.

SR. PABLO DAVID CEDEÑO MACIAS.

DR. ROMULO MONTALVO PULECIO

COMISIÓN DE PLANEAMIENTO URBANISMO Y OBRAS PÚBLICAS

LIC. LANDY ZAMBRANO ZAMBRANO

ING. SEGUNDO VERA ARTEAGA

LIC. LANDY ZAMBRANO ZAMBRANO

COMISIÓN DE SERVICIOS ECONOMICOS. SR. MANUEL CEDEÑO MACIAS

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SRTA. ALEXANDRA CEDEÑO MOREIRA SR. PABLO DAVID CEDEÑO MACIAS COMISIÓN DE LÍMITES. SRTA. ALEXANDRA CEDEÑO MOREIRA DR. ROMULO MONTALVO PULECIO LIC. LANDY ZAMBRANO ZAMBRANO

tos políticos, varios líderes de diferente condición y sin embargo no se daban los resultados buscados; el intento se dio con un joven profesional que no tenía un extenso historial de participación política, pero había demostrado su preocupación por La situación.

Habían pasado cuatro administraciones municipales (16 años) unas con mayor actividad y otras, con menos acción, pero la situación en el año 2004 no era muy diferente a la que imperaba en los años del recinto Pescadillo.

Había unas cuantas calles adoquinadas, pero la mayor parte de las vías urbanas eran lodazales en invierno.

COMISIÓN DE PROTECCIÓN DEL MEDIO AMBIENTE. SR. PABLO DAVID CEDEÑO MACIAS SRTA. ALEXANDRA CEDEÑO MOREIRA SR. MANUEL CEDEÑO MACIAS COMISIÓN DE TURISMO. DR. ROMULO MONTALVO PULECIO LIC. LANDY ZAMBRANO ZAMBRANO ING. SEGUNDO VERA ARTEAGA Esta administración es resultado de la inconformidad de La población; había probado varios partidos y movimien-

Aquí se cumplía la narración de una de las damas cuyo testimonio solicitamos que nos contaba que para ir a una

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fiesta, se arreglaban muy bien, se vestían con elegancia, pero tenían que salir con botas altas de caucho y al llegar al lugar, lavarse los pies y calzar los zapatos que llevaron en las manos.

no eran merecedores de los cambios indispensables para conseguir una vida mejor.

Los animales deambulaban libres por las calles y los malos olores molestaban a todos. Pero como que el residente se había acostumbrado y no le importaba vivir entre la basura y las heces de los animales. La gente hablaba a gritos y no era raro escuchar el vocabulario soez expresado en voz muy alta. Hubo que poner mano dura para corregir, según nos cuenta el Alcalde de este quinto período municipal, Ing. Jaminton Intriago Alcívar, quien fue también electo por sus pares Presidente de la seccional de Manabí de la Asociación de Municipalidades Manabitas, circunstancia que le dio las mejores relaciones con otras administraciones municipales, con su componente técnico y con el gobierno nacional.

Si bien algunas comunidades habían accedido a la red de distribución eléctrica y tenían luz, la mayor parte del cantón continuaba a obscuras. Parecía que el Municipio no podía alcanzar las soluciones que demandaban los pobladores con toda justicia; mucho tiempo había pasado y muy poca atención había recibido Flavio Alfaro de los poderes públicos, lo que acumulaba las necesidades en todos los aspectos, pero sobre todo en uno: se había reducido la autoestima de los habitantes del cantón; parecía que no se consideraban capaces de mejorar y que

Había una desconexión entre la población y los dirigentes políticos que llegaban al Concejo Municipal, tanto, que cuando el concejal Jaminton Intriago propuso algunas ideas para mejorar la situación de los habitantes del cantón, no le hicieron caso. Con ello se afirmó su propósito de luchar por llegar a la Alcaldía para hacer realidad sus planes de beneficio para la población.

Jaminton Intriago Alcívar es el actual Alcalde de Flavio Alfaro; su primer período comenzó en 2004 y mereció ser

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reelecto; mientras la primera vez obtuvo un triunfo apretado, en la reelección la victoria fue generosa y la diferencia enorme.

No nos merecíamos esa vida… Faltaba todo; hasta el parque… Caminaba por él y salían volando decenas de murciélagos…

Buscamos la diferencia con otros dirigentes. Se trata de un joven profesional nacido en Flavio Alfaro, procedente de una familia que vivió en el campo y trabajó en las tareas rurales. De niño de los 11 a los 17 años, debió caminar por las rutas de lodo y espinas, y subir agua desde el río, recorrer largos tramos para comprar una medicina, caminar largo para llegar a la escuela y al colegio. Sufrió lo que es común a los campesinos y por ello, según dice, su objetivo es cambiar la vida de la gente, mejorarla.

Logra la colaboración de buenos profesionales y durante el primer año realizan estudios y elaboran proyectos de toda índole, pues todo faltaba. Hicimos 500 proyectos, dice y me ocupé de establecer las prioridades. Debían estar bien elaborados, porque donde los presentábamos los aprobaban… Inclusive la desatención de años anteriores, el olvido de nuestro cantón, servía de argumento en busca de las inversiones necesarias.

Su formación profesional la realiza en Cuba y se gradúa como Ingeniero Agrónomo. Regresa al país y comienza a trabajar en su cantón con una compañía extranjera que explota la madera; también tenía que recorrer los caminos para llegar al bosque; nada había cambiado; seguía el lodo y la falta de caminos carrozables permanentes.

Entonces, se comprometió consigo mismo a buscar la manera de lograr el cambio en el cantón, para convertirlo en un hábitat amable, agradable, cómodo y pleno de satisfacciones para la gente.

Otra diferencia se muestra cuando inicia el desempeño de la Alcaldía. Comenzamos a ordenar la casa, dice, pues nos encontramos con el edificio destruido; lo remodelamos.

Nos invadían la basura, los malos olores, los lodazales…

Aplicamos una encuesta en la zona rural: Qué prefieren,

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las vías o la energía eléctrica. La mayor parte de la gente quería la energía eléctrica. Y es de comprender, pues ayuda a la tecnificación; se puede picar pasto con facilidad, refrigerar la leche y los quesos, operar otras máquinas…

de los noticieros para la gente del campo, fue un factor para elevar su autoestima, una prueba de que el aislamiento había terminado. Para todas las soluciones, sólo sería cuestión de tiempo.

El Municipio respondió y en la primera administración instalamos 500 kilómetros de líneas de subtransmisión, por manera que el 90 % del cantón se encuentra electrificado.

Ahora, la Corporación Nacional de Electricidad y el Ministerio del ramo, nos han instalado en Sesme, un nuevo transformador de 5 KVA para mejorar el servicio y el CNEL construirá una línea de transmisión a 69 kilovoltios, entre Sesme y Flavio Alfaro, con ese mismo objetivo. Para entonces, ya tendremos nuestra propia subestación. La actual la compartimos con Chone.

El plan municipal era más ambicioso. No solamente escuelas y colegios a los que se apoyó generosamente también en la zona urbana. Gestionamos universidades y cinco de ellas crearon paralelos que funcionan aquí, con éxito.

Con luz y energía, se evidenciaba el cambio en el campo; con la luz eléctrica, la gente retomaba la confianza en el futuro y en las instituciones; se facilitaba la comunicación social y la gente del campo se incorporaba a la vida del cantón; comenzaron reuniones con las comunidades para escuchar sus planteamientos. Educación y carreteras era el clamor común. Dedicamos abundantes recursos a construir escuelas rurales y gestionamos las construcciones por otros organismos del Estado. Golpeamos todas las puertas y obtuvimos una buena atención. Ya nuestro cantón sonaba en el país; de ser un pueblo desconocido, éramos un cantón respetable.

Sin duda que la facilidad de comunicación social, el mirar

Es que el objetivo es recuperar la autoestima y para ello ayuda mucho la educación superior. Antes, había que tener dinero para estudiar en la universidad, pues suponía ir a vivir parte del tiempo en otra ciudad, molestar a parien-

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tes, además de cubrir los costos de la educación superior; ahora, todos pueden estudiar y desde luego que lo hacen y sienten el cambio en el comportamiento de la gente; Los campesinos siempre encontrarán con mayor facilidad una residencia en Flavio Alfaro que en otra ciudad; la influencia de la educación superior, es evidente pues antes, los padres educaron a los hijos que, ya en la Universidad, ayudan a cambiar determinadas conductas y conceptos de los adultos.

y creatividad, construimos más de 200 kilómetros de vías rurales, unas empedradas y otras asfaltadas. Con materiales de las minas que hay en el propio cantón, bajamos el costo y aumentamos la extensión de caminos a construir, en beneficio de la gente que ya se convenció de que se podía mejorar, de que el cambio es posible.

La vialidad acerca el campo a la ciudad, aumenta la plusvalía de las tierras y genera raíces para los habitantes.

Ahora pueden venir a la ciudad todo el año, sin las pesadas botas porque vienen en vehículos. Ya no se ven caballos en la cabecera cantonal, sino en las fiestas y como elemento folklórico, en tanto que en las fincas son un recurso de trabajo. La gente ya no tiene que emigrar de su cantón, porque en su propia tierra tiene trabajo, educación y salud.

Las acciones emprendidas han contribuido a sostener a los campesinos en su ambiente, donde han mejorado las condiciones de vida.

Para construir carreteras lastradas, antes, se compraba el material en Santo Domingo o en Picoazá de Portoviejo.

El transporte se llevaba la mayor parte del dinero, por la distancia, pues los volqueteros cobran a tanto el metro cúbico por kilómetro. Buscamos una solución y la encontramos en nuestros ríos que tienen abundancia de piedra y en todas las montañas nuestras hay cascajo y piedra.

Con esos recursos naturales, un poco de trabajo honrado

Así como construimos las vías rurales, construimos las calles de la ciudad con hormigón. Es que para conseguir el objetivo que es elevar la autoestima de la población, tenía que ser evidente que no se trataba de una obrita, sino que pensábamos en grande, porque el Flavioalfarense merece el mejor trato. Si nos habían abandonado mucho tiempo, podíamos recuperarnos y lo logramos. Así se elevó la autoestima y, hacia afuera ya suena el cantón y hay gente que quiere venir para invertir aquí en las ac-

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tividades productivas sobre la base de la riqueza natural.

Y cómo no vamos todos a sentirnos orgullosos de ser flavioalfarenses, si nuestras calles están en mejores condiciones, de lejos, que las de otros cantones más antiguos y supuestamente más ricos.

Otra de las prioridades fue la salud que en la realidad, estaba abandonada. Diariamente se veía pasar a los enfermos, transportados en hamacas hacia centros de salud en Chone, sufriendo todas las dificultades por falta de carretera permanente; el transporte en carro también era una molestia por la distancia y el costo. No hay que olvidar que en la mayor parte de las enfermedades, es de enorme importancia el tiempo en que se presta la atención profesional para combatir el mal. Seguramente, en muchos casos los pacientes murieron por falta de atención a tiempo.

En esas circunstancias, se produjo el brote del cólera, una enfermedad mortal que mató a mucha gente en varias zonas de Manabí. Ahí surgió la iniciativa del sacerdote O’Connors para la organización del Comité Cantonal de Salud que propuso la construcción del Hospital.

Nosotros, dice el Alcalde, le prestamos todo el apoyo con máquinas para trabajar en el terreno y con la gestión para conseguir las asignaciones presupuestarias que ayudaron a financiar la construcción y, en esto tenemos que mencionar a la Dra. Carolina Chang, Ministra de Salud, con quien pude hablar en Ibarra durante un evento al que asistimos, y se comprometió a entregarnos el personal y el equipamiento completo para el hospital, lo cumplió a

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tiempo y desde hace dos años sirve muy bien a nuestro cantón.

y está en nuestros planes que cada ciudadela cuente con una cancha, por lo menos, para la práctica deportiva.

En el campo social hemos trabajado intensamente en coordinación con el INNFA para beneficiar a niños, jóvenes y adultos con discapacidad, para atender su salud y, para estos últimos, la creación de puestos de trabajo.

En los planes inmediatos de la Municipalidad se encuentra la ejecución de varios proyectos de infraestructura escolar y que todas las escuelas cuenten con equipos de alta tecnología para computación.

Logramos los equipos e instalaciones para el uso de la telefonía digital y la ampliación de la capacidad de servicio; se incrementarán 24 canales para Internet en la cabecera cantonal y es posible que la zona rural sea servida por la CNTEL con ese proyecto.

El Gobierno creará y está construyendo en Flavio una escuela del milenio, también con aporte municipal; la Municipalidad igualmente dotará a Flavio de su escuela y su colegio municipales. Pretendemos atender en educación a no menos de 1.600 niños campesinos.

Un campo que mereció especial atención es la creación de infraestructura deportiva, porque nuestra juventud practicaba sus deportes sobre la tierra; entonces, se construyeron más de cincuenta canchas de uso múltiple en el campo y en la ciudad; se hizo realidad el estadio Ecológico

Con ayuda del Fondo de Solidaridad, vamos a ampliar las redes de agua potable para que toda la ciudad reciba el servicio, desde una planta de potabilización que entregará el agua apta para consumo humano, lo que será un enorme paso en el mejoramiento de las condiciones de salud de nuestra gente. Las ampliaciones harán que el agua llegue a todos los domicilios de la cabecera cantonal, porque no se justifica ningún discrimen. Ya hemos mejorado con la puesta en operación de una nueva captación y el cambio de tubería para aumentar su capacidad portante. Pero lo que viene es un cambio cuantitativo y cualitativo. Habrá más agua para todos y de óptima calidad.

Se terminará el paso lateral que es una inversión del gobierno de 30 millones de dólares, de gran beneficio para la seguridad de nuestra gente, pues las pesadas volquetas

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ya no circularán por el acceso a Flavio.

Vamos a completar el hormigonado de las calles en la ciudad; construiremos los terraplenes para los puentes en la zona rural, donde mediante convenios con Tony El Suizo y Walter Yánez, se construirán los puentes; estamos en conversaciones para la conformación de una empresa que se dedique a la producción de jugos de frutas y frutas deshidratadas para consumo nacional y para exportación, debido a la existencia de suficiente materia prima.

Contamos con la ayuda del Consejo Provincial para el desarrollo del programa vial y vamos a desarrollar un proyecto de cantera para la producción de materiales para la construcción de carreteras, lo que bajará el costo y permitirá ampliar la cobertura con ese beneficio. Las instalaciones municipales que se financiarán con ayuda del Banco del Estado, incluirán maquinaria, equipos para la colocación de asfalto en las vías. Su producción podrá suministrar materiales a otras instituciones para bajar los costos en toda la zona norte de nuestra provincia.

Nuestra programación, termina el Alcalde Jaminton Intriago Alcívar, se sintetiza en “Pensar en grande”, concebir soluciones integrales para servir a nuestro pueblo.

Vamos a poner bonita a la ciudad con un plan de regeneración que incluya parques y avenidas iluminados. Tenemos que completar la electrificación para que el 100% de la zona rural cuente con ese importante servicio.

Se crearán tres Fiscalías para que funcionen en Flavio Alfaro, lo que también aumenta los puestos de empleo.

Vamos a suscribir un convenio con el gobierno del Japón para la provisión de maquinaria pesada para la construcción vial y para las canteras, y el Municipio de Miami nos ha ofrecido carros recolectores de basura de dos años de uso para donarlos a Flavio. Esto último, aún tenemos que consultarlo con el concejo; lo estamos analizando.

Hemos trabajado con intensidad e incansablemente, sin embargo aún quedan cosas por hacer y vamos a continuar avanzando en su ejecución. Como lo hicimos al principio, tocaremos todas las puertas que sea necesario para lograr financiamiento y ayuda para completar la transformación de Flavio Alfaro en un cantón altamente productivo, donde sea posible el trabajo en seguridad y con resultados positivos para el trabajador; donde se pueda completar la educación de todos los niños, inclusive de los niños campesinos; donde las madres cuenten con recursos suficientes de salud y los jóvenes, recursos para el deporte y la diversión sana.

Es cierto, como coinciden las personas cuyos testimonios incluimos, hemos propiciado un cambio radical en la ciudad y en el campo del cantón, pero aún falta para completar nuestras propias expectativas, termina el Alcalde.

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2009 – 2013 La Municipalidad continúa bajo la dirección del Ing. Jaminton Intriago Alcívar.

UNA FAMILIA FECUNDA

Bienvenida, Isabel, Ramona, Mercedes y Luis Crisanto Intriago Moreira.

Cuando enviudó adquirió un segundo compromiso en el que procreó cuatro hijos: Amanda, Ramona, Marina y Pablo Intriago.

Después se casó en segundas nupcias con la Sra. María del Carmen Peñarrieta Palacio, llamada cariñosamente Chanita, con quien procreó nueve hijos: Luis Enrique (Padre del actual Alcalde de Flavio), José Artimidoro, Napoleón Severo, Luis Octavio, Luis Segundo, Camilo Antonio, Roque Bienvenido, Rita del Carmen y Rosa del Carmen Intriago Peñarrieta; también tuvieron una hija de corazón, Brígida García, y hay dos hijas del señor Amando Intriago: una en Convento, que se llama Amanda Intriago de Giler y otra, en Junín llamada Ramona Intriago de Guerrero.

Potencial para el desarrollo.

Una característica notable de las familias manabitas antiguas, ha sido su fecundidad; son familias con muchos hijos que dan lugar al crecimiento geométrico de la población. Como un ejemplo, el señor Luis Amando Intriago Rodríguez vino al recinto Pescadillo, desde Río Chico de Portoviejo y se instaló en Rancho Quemado. Se casó con la señora Esther Moreira, con quien tuvo cinco hijos:

Del análisis de los diferentes testimonios, sobre todo de quienes se encuentran relacionados con la producción, se concluye que las proyecciones de desarrollo del cantón Flavio Alfaro son extraordinariamente optimistas, pues cuenta con una gran extensión de terrenos aptos para la agricultura y la silvicultura, además de que las montañas que se encuentran en su territorio deben contener mine-

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rales que serán descubiertos en el futuro para dar origen a una poderosa industria minera.

para asegurar el desarrollo del cantón y el financiamiento de otras actividades productivas. La extensión asegura las reservas para las ampliaciones del futuro.

El turismo es una actividad productiva que se desarrollará aceleradamente debido principalmente a la excelente carretera que une a este cantón con el resto del país. Los atractivos turísticos que van desde terrenos agrestes para el turismo de aventura, hasta los paisajes plácidos que invitan al descanso, debidamente difundidos permitirán la inversión en el turismo, no solamente de capitales propios, sino de todos los lugares del mundo.

La agricultura y la silvicultura, como en el comienzo de la población de estos territorios, proveerán los productos que garantizarán el crecimiento económico.

Tal vez podría convertirse en un obstáculo la existencia de propiedades con extensiones desmedidas que reducirían la participación de más personas en las labores productivas.

En cambio, el avance de la tecnificación tanto en la agricultura como en la silvicultura y la ganadería, aseguran el crecimiento de los resultados y las fuentes de recursos

La principal ventaja de Flavio Alfaro en la proyección de su desarrollo, se encuentra en la juventud del cantón en todos sus aspectos; la tardía colonización del sector y, por lo tanto, de las explotaciones agroganaderas, dejan grandes extensiones prácticamente vírgenes a la producción que, con incorporación de la tecnología en las explotaciones, consiguen altos índices de productividad y generan ventajas competitivas para la colocación de los productos.

Igualmente, no hay rubros agotados; en todos los campos hay espacio para el desarrollo de los negocios y, contando con una población joven, debidamente capacitada, buenas carreteras, facilidades formativas, vialidad en la zona rural y urbana, telecomunicaciones que incluyen el Internet y reservas de capital procedentes de los negocios actuales, se completan los factores que al combinarse dan como resultado la aceleración del proceso de desarrollo

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económico, en donde la labor municipal es fundamental para evitar la concentración y poner un poco de justicia al distribuir el bienestar entre todos los habitantes.

Y, finalmente, la autoestima recuperada, el orgullo y el reconocimiento de las raíces autóctonas de la población, desatan el poder de todos para llevar adelante aquello que es objetivo común; al hacerlo, se acercan los resultados y todo el conjunto de la sociedad crece y accede a niveles de vida mejores, en forma acumulativa, que es el objetivo final del desarrollo.

Hasta ahora han producido resultados la acción privada en el campo de la producción y desde hace cinco años, la labor municipal. Todavía no hay una integración en la planificación pública y la privada; todavía se impone la decisión personal en el campo privado. Y se debe considerar que son varias las instituciones que tienen participación en el campo de la producción y de la inversión, por lo que es necesario conseguir esa coordinación. La Cámara de Comercio, la Asociación de Ganaderos, los diferentes gremios artesanales y profesionales, bajo el liderazgo de la Municipalidad, deben implementar el plan de desarrollo quinquenal que, aprovechando las potencialidades productivas del cantón, optimice su valor agregado con procesos de manufactura y conquiste mercados en el Ecuador y en el extranjero.

La producción de oleaginosas, maderas, palma real, tagua, yuca y otras de ciclo corto, se unen al cacao, maíz, maní

que constituyen materia prima para subproductos de consumo de la población y que son dominio de nuestras amas de casa, y en conjunto tienen poder para generar la base de un desarrollo industrial significativo.

Con él, el desarrollo turístico y el minero marcan el futuro de Flavio Alfaro con suficientes puestos de trabajo para toda su juventud adecuadamente preparada y apta para llevar adelante las exigentes actividades de esas industrias.

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EDUCACIÓN

otro profesor particular también ciudadano Colombiano de apellidos Lemus Pombo.

Primeras Escuelas y Profesores.- En comunidades rurales, como eran las poblaciones manabitas, hemos dicho, se desarrolló la autosuficiencia, es decir, la predisposición de cada una de acceder a soluciones implementadas por ella misma. La educación fue uno de los aspectos que las comunidades resolvieron por su cuenta, y aún lo hacen en algunos sectores, donde el gobierno no ha creado escuelas: se contratan profesores que pagan los padres de familia y se crean escuelas que posteriormente son asumidas por el Ministerio de Educación.

La Educación Fiscal.- La Escuela Fiscal Mixta “Pescadillo” a partir de 1929 comenzó a funcionar con la dirección de la profesora Ofelia María Zambrano, posesionada en abril de 1929.

Los primeros pobladores de Flavio, cuando aún esta comunidad era un “sitio” siempre tuvieron la preocupación de que sus hijos recibieran enseñanza y decidieron traer maestros a sus casas los cuales eran pagados por los padres.

El primer profesor particular que tuvo el recinto fue el señor Carlos Arango de nacionalidad colombiana, el mismo que fue contratado por el señor Miguel Agustín Zambrano para que impartiera educación a sus hijos para lo que cedió el local ubicado en los bajos de su casa.

El segundo profesor fue el señor Ramón Gualberto Moreira, que trabajó en la casa del señor Modesto Valenzuela ubicada en el centro de la población; esto fue en los años 1923 – 1924; en los años 1927 – 1929 tenemos

Desde 1930 hasta el año 1940 en que fue elevado a parroquia el sitio “Pescadillo”, en dicha escuela prestaron sus servicios seis diferentes profesores fiscales y municipales, Sra. Luz María Zambrano, Sra. Digna Verduga Díaz, Srta.

Carmen Rodríguez García, Srta. Zoila María Zambrano, Srta. Luzmila Isabel Castillo, y el Sr. Erasmo Vera.

En 1942 ésta escuela recibe como profesora a la abnegada maestra, señora Emma Moreira de Mata; dicha maestra trabaja con cuatro grados y con más de 120 alumnos.

De 1944 hasta 1954 la educación quedó suspendida por falta de cuerpo docente. De 1955 hasta el año 1962 se trabajó regularmente con uno o dos profesores acompañados de la directora Sra. Emma de Mata; en éste último año, se consigue la primera promoción del nivel primario, un total de 13 alumnos entre varones y mujeres, ya que la escuela había sido organizada como completa, y los profesores que laboraron en ese entonces fueron: la Srta.

Josefa Pazmiño Vera quien laboró con tercero y cuarto, la Sra. Emma Moreira de Mata con primero y segundo y el Sr. Cornelio Vinueza Loor con quinto y sexto grados re-

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spectivamente.

En el año de 1968 la señora Emma Moreira de Mata acogiéndose a la jubilación se retira de sus funciones.

Al hablar del local donde funcionaba la escuela diremos que en el año de 1944 se llevó a cabo la donación del terreno destinado a la construcción de un edificio escolar, gentilmente donado por la señora María de Zambrano, donación firmada ante el Notario Público Sr. Ramón Raimundo Aveiga y aceptada la escritura por el Jefe Político del cantón Chone, don José Álvarez Calderón. Seguidamente la comunidad de Flavio Alfaro se hace presente ante el Consejo de Chone pidiendo dinero y zinc para el local de la escuela a construirse; se considera la solicitud y se conceden cuatro mil sucres.

La escuela Fiscal de niñas “Flavio Alfaro # 52”, que es nombre que por Resolución Ministerial lleva, bajo la dirección de la prestigiosa educadora Sra. Judith Cuadros Pazmiño, ayudada por el comité de padres de familia y demás profesores, construyeron el cerramiento de la escuela. c) Escuela Fiscal de Varones “Pablo Zamora Salgado”.- En el año de 1960 hay necesidad de formar la segunda escuela, para varones, por ser la primera de niñas; se reunió en la parroquia un comité de padres de familia con la idea de que se construya éste nuevo local, siendo presidente de éste comité el Dr. Jesús Londoño, el mismo que viajo a Quito y da informes al Ministro de educación Dr. Gonzalo Abad Grijalva, natural de Chone, de que se posee un terreno para la construcción de una escuela. El Ministro, quien aceptó la petición, llega a la parroquia, siendo recibido por el comité de padres de familia.

Ofrece donar dinero suficiente para construir el edificio, insinuando que debería ser un local más céntrico pues el terreno del primer donante estaba muy retirado. Los esposos Sr. Ramón Rumaldo Zambrano y la Sra. Lelia Moreira de Zambrano son los nuevos donantes del terreno con condiciones más apropiadas; posteriormente fueron entrevistados por el señor director provincial de educación, teniente retirado Don Jorge Olmedo Vaca, el mismo que acepta el terreno y agradece a los esposos donantes.

El 22 de octubre de 1963 ante el Notario Público primero Sr. Trajano Viteri, los esposos Sr. Rumaldo Zambrano y se-

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ñora, suscriben la escritura de donación, y en agosto de 1964 se da inicio a la construcción del edificio escolar, que en diciembre del mismo año estuvo terminado y entró en funcionamiento en agosto de 1965.

El primer año la escuela funcionó con el siguiente personal: Director Sr. Orestedes Andrade, profesores, Sra. Carmen de Gómez, Sr. Guido Kufó, Srta. Carmen Salazar.

Escuela Particular Mixta “12 de Octubre”.- Este centro educativo fue creado en 1969 bajo la dirección del Profesor Cornelio Vinueza Loor; dicha escuela empezó a funcionar en la antigua vivienda del señor Julio Cuadros con el siguiente personal: Director Sr. Cornelio Vinueza, Profesores, Sra. Margarita de Castro, Srta. Janeth Muñoz, y el señor Simón Gorozabel.

Centro de Alfabetización para adultos “23 de Septiembre”.- Creado en el año de 1974, centro de alfabetización que consiste en un servicio a la comunidad; funciona en la escuela de varones, con los profesores Sr. Rodrigo Céspedes, Sr. Abercio Zambrano y la Sra. Margarita Castro de Cuadros. En ese primer año terminaron 32 personas la primaria.

El siguiente año, no hubo forma de que continuaran. En 1976 volvió a funcionar y esto fue en la escuela particular mixta “Eugenio Espejo”, bajo la dirección del señor Abercio Zambrano, en éste tercer año terminaron 13 alumnos entre varones y mujeres; en 1977 a cargo del señor an-

tes mencionado se matricularon 38 alumnos terminando solo 12 de ellos.

De 1978 a 1981 fue suspendido el centro de alfabetización; sólo funcionó la escuela particular.

Escuela Fiscal Mixta “Carlos Romo Dávila”.- La creación de ésta escuela llegó a conquistar una regular cifra de alumnos, gracias al espíritu de colaboración, al deseo de superación y al progreso tanto en lo cultural como en los demás aspectos, su impulsador el señor Jesús Londoño, el mismo que también contribuyó a la formación de la escuela fiscal de varones. Es así como en 1974 siendo Supervisor de Área el señor Chávez consigue la creación de la escuela en la ciudadela “Maranatha”, comenzando a funcionar con la profesora Srta. Bienvenida Muñoz, quien trabajó únicamente con primer grado. De 1975 a 1976, aumenta hasta tercer grado; el siguiente año aumentó una profesora, laborando hasta cuarto grado.

En 1981 ha aumentado la cantidad de alumnos, así como también profesores con la formación completa (en grados) de la escuela; y sigue siendo directora del plantel la maestra iniciadora de este centro educativo que laboró en diferentes locales y que ahora posee su local propio en la misma ciudadela. g) Escuela Particular Mixta “Eugenio Espejo”.- Esta escuela funcionó en 1976, siendo su fundador el Sr. Abercio Zambrano, quien ha querido hacer de ella una institución

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que siempre esté en tónica con las últimas disposiciones pedagógicas para servir a la comunidad.

En su primer año de labor contó con una matrícula de 130 alumnos, obteniendo 9 alumnos certificación primaria; al siguiente año sobrepasaron a los 250 alumnos. Sin embargo, en la actualidad ya no existe éste plantel educativo que fue tan prestigioso en sus tiempos.

Escuela Particular Mixta “María Teresa Loor de García”.Creada en el año1977, siendo su directora fundadora la señora Margarita Castro de Cuadros, hasta la presente fecha. El personal con que laboró el primer año la escuela en mención fue: Directora Sra. Margarita Castro de Cuadros; profesores, Sr. Wil Londoño, Sra. Betsy Cuadros de Moreira, Sra. Deisy Moreira de Zambrano. El número de alumnos matriculados ese año fue de 120 alumnos.

Actualmente ésta escuela sigue en funcionamiento y ha elevado su número de estudiantes; con ella funciona paralelamente, un centro artesanal de belleza.

Colegio Particular Mixto “Agustín Zambrano”.- En 1966 hubo una persona que se interesó porque la juventud de Flavio Alfaro tuviera un avance cultural mayor, a esa superación a que todo ciudadano tiene derecho; dicho señor llamado don John Cuadros Pazmiño convoca una reunión con los principales habitantes de la parroquia a los cuales les hace ver la necesidad y sus deseos de formar un colegio; moción que fue acogida unánimemente.

Posteriormente el Sr. John Cuadros gestionó ante el gobierno de la Junta Militar; presentó la solicitud ante el señor Ministro de Educación Sr. Fabián Jaramillo Dávila y también el señor Director Nacional de Educación Sr. Carlos Romo, quien se interesa por éste pedido que es de gran importancia.

Y es así como el 27 de junio de 1966 llega el ansiado permiso de funcionamiento del colegio y como no se tenía local para iniciar sus labores, el Sr. Oréstedes Andrade Director de la escuela de varones sugiere que se labore en éste local, después de terminadas las labores de la escuela. El nombre a ponerle al colegio, se acordó entre sus pobladores que sería “Agustín Zambrano” en honor al primer poblador de la parroquia.

Se da inicio a las labores por el mes de agosto con el siguiente personal docente: Rector: Sr. John Cuadros Pazmiño, Secretaria: Srta. Judith Cuadros Pazmiño, Inspector: Sr. Benito Rivadeneira, Profesores: Sr. Cornelio Vinueza, Sr. César Gómez, Sr. Guido Kufó, Sr. Patricio Mena, Sr. Saúl Flores y la Srta. Janeth Muñoz.

Hubo 31 alumnos matriculados, de los cuales asistieron 27 y terminaron solo 17. En 1967 se inician las clases con primero y segundo y en 1968 se completan los tres cursos del ciclo básico.

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Actualmente funciona en su propio local que fue construido por el Consejo Provincial de Manabí, en los terrenos adquiridos de los herederos Muñoz Zambrano; cabe indicar que el Colegio “Agustín Zambrano” fue considerado el primero y más importante Centro Educativo de la parroquia; es también el primer centro de educación media que se aprueba en una parroquia rural.

varias instituciones, unas que son de carácter clasista y otras de servicio público.

Colegio Nacional “Roberto Díaz Rodríguez”.- Creado mediante gestiones realizadas por padres de familia que año tras año han insistido sobre la fiscalización del colegio “Agustín Zambrano”, pero el gobierno encontró más conveniente crear éste nuevo colegio; fundado en mayo de 1978 como colegio nacional mixto de la parroquia de Flavio Alfaro, y el 4 de enero de 1979 por Resolución Ministerial y a petición de la Dirección Provincial de Educación de Manabí, se crea la unidad educativa que ha llenado un vacío en las necesidades educativas de Flavio.

expendedores de carne al por mayor y menor 1977

De carácter clasista tenemos: Institución

Fundación

Asociación de Comerciantes ganado y

Asociación de pequeños Comerciantes del Mercado

1978

Asociación de Carpinteros.

1978

Asociación de Albañiles

1979

Cooperativa de transporte “Rutas Manabitas” 1979

En los actuales momentos funciona en su propio terreno, que fue donado por el señor Emilio Muñoz y la señora Margarita de García con una hectárea aproximadamente y que está un poco alejado del centro del cantón; contando con todos los años básicos y con su nuevo nombre de Colegio Nacional Técnico Agropecuario “Flavio Alfaro”.

De carácter Social y Servicio Público:

ISTITUCIONES

“Pablo Zamora Salgado”

1965

Desde que Flavio Alfaro fue elevado a cantón han nacido

Colegio Particular Mixto “Agustín Zambrano”

1966

Escuela Fiscal de niñas “Flavio Alfaro Nº 52”

1929

Escuela fiscal de varones

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Escuela fiscal Mixta “Carlos Romo Dávila”

1974

Escuela Particular Mixta “María Teresa Loor de García”

1977

Colegio Nacional Técnico Agropecuario “Flavio Alfaro”

1978

De Gobierno: Tenencia Política

1940

Comisaría Municipal

1963

Centro de Salud “Flavio Alfaro”

1969

Destacamento de Policía

1972

De carácter Religioso: La Iglesia Católica “San Agustín”

1924

La Iglesia Evangélica “Cristo Rey”

1957

LA CÁMARA DE COMERCIO El 9 de septiembre de 1995 se estableció la Cámara de Comercio del cantón, que llegó a tener más de 60 socios activos.

Para organizar esa institución, don Ángel Alcívar invitó a reunirse en su casa a los comerciantes de Flavio y llegaron los señores, Dr. Luis Alcívar, Vicente Cedeño, José Figueroa, Amando Intriago, John Cuadros Pazmiño, Efrén Loor y otros, y conformaron la directiva, habiendo sido electo Presidente el invitante, quien permaneció cinco años en esa función.

Para la instalación de la Cámara, estuvo presente el Ab. Freddy Giler Arteaga, de Portoviejo, quien entonces era el Presidente de la Federación de Cámaras de Comercio de Manabí.

Con gestiones ante el Alcalde de entonces, consiguieron la donación de un solar para la construcción del edificio de la cámara, en el que inmediatamente comenzó la construcción que se interrumpió, pero quedaron las bases y la armadura de las columnas, que nadie ha continuado pese al tiempo transcurrido.

El siguiente Presidente de la Cámara fue John Cuadros Romo y posteriormente se eligió por unanimidad al señor José Figueroa, quien permanece en el cargo, pero en todo este tiempo, nunca ha convocado a una sesión, asamblea

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o reunión de Directorio, lo que hace aparecer como que la Cámara no existe.

EL REGISTRO DE LA PROPIEDAD El Abogado Bayron Orejuela Giler, es un joven profesional nativo de Flavio Alfaro; es bisnieto de uno de los fundadores del sitio Pescadillo y, desde 1989 se encuentra al frente del Registro de la Propiedad del Cantón.

Esta Institución es de extraordinaria importancia para la vida de la comunidad, pues mantiene los registros de los predios urbanos y rurales del cantón, con el detalle de los incidentes que ocurren con la propiedad de los mismos; constan los datos del propietario y las transacciones que se realizan con esa propiedad, cuyas dimensiones y características constan registradas en los libros, informa el Registrador.

Con esos resguardos, el Registro de la Propiedad puede extender certificados en relación con los predios y con las personas; en el primer caso, sobre hipotecas, prohibiciones y más cargas que pueden existir sobre las propiedades, y en el segundo, sobre las propiedades que en el cantón tiene registradas una persona.

En Flavio Alfaro aún el Registro de la Propiedad se mantiene en libros físicamente; en otros cantones tales registros ya son informáticos, digitalizados, lo que hace mucho más fácil su administración y su manejo.

El anuncio de que el Registro de la Propiedad pasará a ser un servicio municipal, dejando de ser privado como se ha mantenido por muchos años, ha detenido las inversiones para la modernización del servicio, nos informa el Registrador.

En Flavio Alfaro hay entre mil y mil doscientos predios urbanos y unos dos mil predios rurales registrados; hay muchas propiedades que no se encuentran registradas y muchas no tienen siquiera una escritura y se avanza muy lentamente en la legalización de la posesión de conformidad con la Ley. Esta situación ha permitido que proliferen las invasiones de tierras promovidas por traficantes conocidos.

En el Registro trabajan el Registrador y dos ayudantes; el movimiento es de unos dos registros de escrituras diarios, y unos ocho certificados.

Como nunca se hizo el traspaso del Registro de la Propiedad de Chone, muchas propiedades se encuentran registradas en ese cantón y sus certificados tienen que solicitarlos en esa oficina.

Esa anomalía, precisa el Registrador, es peligrosa, pues ya se han dado casos de personas que mantienen un doble registro, uno en Chone y otro en Flavio, para duplicar la venta de una propiedad, cometiendo así una estafa.

El Registrador de la Propiedad es optimista en torno al

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futuro de Flavio Alfaro. Se muestra impresionado por los cambios que se han operado en los últimos cinco años.

Hemos pasado del lodo al hormigón en las calles y la zona rural está siendo servida con carreteras, electrificación y escuelas; y todo gracias a la acción de la Municipalidad que ha enfocado toda su capacidad de servicio, a mejorar la vida de la gente.

LA NOTARIA Con 59 años de edad , formado Profesional en la Universidad Laica de Portoviejo, el Abogado Euro Perfecto Alvarado Valenzuela, tiene a su cargo la Notaría de Flavio Alfaro, desde el 23 de noviembre de 1989, cuando se creó el servicio, por lo que es el primer notario y el único que se ha mantenido desde entonces.

No es una oficina que registre un gran movimiento. Se elaboran unas dos escrituras al día, unos dos reconocimientos, unas 200 declaraciones juramentadas al año, de tres a cuatro autenticaciones y se extiende una copia certificada cada día. También se hacen contratos de propiedad horizontal, pero a un ritmo de uno al año.

Todavía quedan personas que realizan sus trámites notariales en Chone, dice, por lo que no hay una gran demanda de servicios; sin embargo, añade, estamos preparados para hacer frente a las circunstancias, como cuando se suscriben contratos grandes, que hemos ofertado mejores

condiciones, pese a lo cual los contratistas han preferido elaborar las escrituras en Quito o en Santo Domingo.

El Abogado Alvarado se siente satisfecho del progreso que alcanza Flavio Alfaro y considera que se han dado las condiciones para acentuar el ritmo de desarrollo para el futuro. Con una zona rural tan rica en producción, lo que hace falta es carreteras estables para movilizar las cosechas y surgirán las actividades de valor agregado, la industria y el turismo que completarán el desarrollo económico del cantón, según su criterio.

LIGA DEPORTIVA CANTONAL Desde el 14 de noviembre de 1988, funciona en Flavio Alfaro la Liga Deportiva Cantonal, que está presidida en los períodos 2003 – 2005 y 2008 – 2012, por el señor Marcos Cuaboy Delgado, dirigente del club Nacional de Ciriaco, en el que se practica futbol, volley y atletismo.

El Vicepresidente es el señor Agustín Zambrano, del Club Nacional, y las vocalías están desempeñadas por Jorge Andrade del Club Las Cañas, Víctor Ponce del Club Independiente de Góngora y José Ostaiza del Club 7 de Septiembre. El Tesorero es el Dr. Freddy Farfán, Secretario es don Ángel Bravo, y Síndico, el Ab. Byron Orejuela.

La Institución recibe una asignación de dos mil dólares mensuales que se utilizan para el sostenimiento del per-

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sonal, mantenimiento de la infraestructura y adquisición de materiales deportivos. Es insuficiente, por lo que es muy valiosa la ayuda que nos da la Municipalidad, dice el dirigente.

Funcionan las siguientes escuelas deportivas: Escuela de Básket y Fútbol, con 30 alumnos para el primer deporte y 180 para el segundo. Escuela de Atletismo , Escuela de Tae Kuon Do con 40 alumnos y Escuela de Ciclismo. La escuela de futbol se encuentra dirigida por tres entrenadores, que son los señores Darío Vera, Larry Grijalva y Pedro Ordóñez.

Futbol.

Hay una importante infraestructura que tiene que ser mantenida para evitar su destrucción y que permite el desarrollo de los diferentes deportes: El estadio que se construyó en el año 2003, por gestión realizada por el diputado Clemente Vásquez. Se llama Estadio Ecológico Flavio Alfaro, construido en el terreno que fue comprado por la municipalidad, en la administración del señor Pedro Cedeño Mejía; sus instalaciones son muy visitadas por los deportistas, pues hay 30 clubes afiliados y la práctica del futbol se encuentra generalizada. Precisamente por esa int3ensidad en su utilización, requiere mantenimiento más fr3ecuente, lo que eleva los costos operativos de la Institución.

Hay dos canchas de uso múltiple y el edificio de oficinas, las mismas que se encuentran totalmente equipadas.

Queda por hacer el Coliseo del cantón, para el que se ha elaborado el proyecto que incluye en esa edificación instalaciones de residencia para los deportistas visitantes en los torneos que se realicen en la ciudad.

La Liga participa en una maratón anual, en los juegos <Confraternidad> de la Federación Deportiva de Manabí, En el Campeonato <Copa El Diario> y en el Campeonato Infanto Juvenil organizado por la Asociación Proincial de

EL HOSPITAL El hospital de Flavio Alfaro se llama Hospital Básico <San Andrés> y se encuentra dirigido por el Dr. Rómulo Montalvo. La primera impresión al visitarlo es de absoluto aseo,

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orden y buena organización. La impresión en el pueblo, según las consultas realizadas es que se trata de un servicio de enorme valor que recibe la población para recuperar su salud. La Municipalidad que comprende esta condición, está presta a complementar la ayuda para su mejor funcionamiento.

Cuenta con 82 personas en su rol de personal, de los cuales son los siguientes profesionales: 1 Ginecólogo.

1 Pediatra.

1 Internista 1 Cirujano 1 Anestesista 1 Emergenciólogo 2 de Consulta General 3 Residentes 3 Médicos Rurales

La designación de <básico> responde a la existencia de las cuatro especialidades básicas para una casa de salud: Ginecoobstetricia, Cirugía, Medicina Interna y Pediatría.

Pertenece al Ministerio de Salud Pública y su capacidad es para 39 camas y registra un promedio del 55 % de ocupación diaria.

En consulta externa realiza entre 350 y 400 atenciones diarias y se ejecutan entre cuatro y cinco cirugías por día.

6 Internos Rotativos (estudiantes de las Universidades) 1 Epidemiólogo 1 Laboratorista 2 Tecnólogos 1 Lcdo en Rayos X 2 Odontólogos.

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Además hay 13 Enfemeras profesionales.

porque los médicos ya cubrieron sus 8 horas diarias.

4 Auxiliares de Enfermería y

Además, es necesario que se apruebe el presupuesto anual, pues ahora solamente se funciona con asignaciones que el Hospital tiene que distribuir y las mismas son insuficientes.

6 auxiliares de servicios.

De acuerdo con el estudio de las necesidades, el Hospital debería contar con 106 recursos humanos, es decir que faltan 20.

Tiene dos años en funcionamiento, pues abrió sus puertas el 1 de julio de 2008. Se encuentra bien equipado; inclusive cuenta con una planta productora de oxígeno y las instalaciones para dotar de este servicio a todas las salas y tiene posibilidades para llenar los tanques de otras unidades de salud. Aún no entra en funcionamiento, porque falta un control automático y que los técnicos pongan a funcionar el equipo.

La presencia del cirujano Roddy Loor, ha permitido realizar cirugías complicadas que antes obligaban a los pacientes a viajar a otros hospitales del país, como operaciones de tiroides. Las únicas operaciones que no se realizan, dice su Director, son las de corazón y las de cerebro.

Señala que las necesidades para un perfecto funcionamiento, es el personal, pues no se cuenta con médicos para la atención nocturna, lo que impide que quienes tienen una emergencia que requiere un especialista en horas de la noche, deban esperar o buscar otro hospital,

Resumen del proyecto “Centro Hospital del Cantón Flavio Alfaro, Manabí” Un aporte del Padre Pablo O’Connors Nota del Editor: Los datos del cantón corresponden a la época del informe, anterior al año 2004, en que se inician los cambios impulsados desde la Alcaldía.

Ubicación del Cantón Flavio Alfaro El Cantón Flavio Alfaro es un cantón en el norte de la Provincia de Manabí, Ecuador, medio grado bajo la línea equinoccial. Es un sector de terreno muy accidentado que cubre un área de 500 millas cuadradas (1300 km. cuadrados) y que tiene muy poca infraestructura. El

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cantón goza de solo cincuenta (50) kilómetros de carretera asfaltada, treinta de ellos de hormigón y menos de 50 km lastradas. Todas las demás carreteras veraneras son de polvo: se abren con tractores al inicio del verano (Junio) y regresan al estado de lodo profundo al iniciar las lluvias del invierno (Diciembre). Hay que tomar muy en cuenta este factor si queremos entender por qué se necesita tener un hospital en el Cantón – es sobre todo para la gente campesina.

La población Hay al menos 50.000 habitantes, la mayor parte de ellos (más de 70%) que viven en el campo y que no tienen transporte durante la temporada de lluvias, desde Diciembre hasta Junio. Durante todo este tiempo tienen que viajar a pie o en lomo de mula. Se pierden las primeras cosechas de frutas porque no pueden sacarlas al mercado. Los enfermos que están demasiado graves para ir a caballo tienen que ser sacados en hamaca o litera por horas sin fin. Ya que a veces tienen que viajar hasta veinte kilómetros para llegar a la carretera estable; quiere decir que los portadores llevan la hamaca por hasta seis horas caminando en tierra lodosa e incómoda. Si hubiera que escoger un símbolo para representar la necesidad de un hospital, sería un cuadro de portadores cubiertos con lodo y una hamaca con un paciente en sus hombros.

El Comité de Salud Durante la epidemia del cólera de los años ochenta un grupo de médicos y de otras personas interesadas formaron un comité para enfrentar la situación. Más tarde, cuando había pasado el tiempo del cólera, algunos se retiraron del grupo.

Bajo la tutela de la Presidenta del Comité, la Dra. Fanny Vivas Vivas, se ganó la Vida Jurídica para el Comité y una de las metas principales del Comité ha sido la construcción del Hospital de Flavio Alfaro. Nadie puede quitar de la Doctora Vivas el título de “gestora” del proyecto. Tanto insistió con el Ministerio de Salud que el personal del Ministerio se escondía al verla llegar.

La necesidad de tener un hospital La necesidad se cristaliza en el sufrimiento que la gente tiene que aguantar durante las temporadas de enfermedad, especialmente en tiempos de invierno. El terreno es tan accidentado que los portadores de hamacas no pueden viajar a más de tres kilómetros la hora, por eso tienen viajes de cinco, seis o aun siete horas para sacar

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a los enfermos a la carretera estable. Y al llegar a la estable tienen que esperar una camioneta o un bus que los lleve al hospital en el Cantón Chone a 50 kilómetros de distancia. La demora puede ser fatal para gente mordida por culebras, en momento de parto difícil o con ataques cardiacos y derrames.

amigos o parientes que les darían posada en algún rincón de su casa. La Iglesia San Agustín ha construido una “Casa Campesina” de doce camas con el propósito de atender a los familiares de enfermos.

Otra consideración es cultural. Es costumbre que unos miembros de la familia acompañen a los enfermos durante su estadía en el hospital. Cuando nuestra gente va a un pueblo que está lejos de sus propios familiares, encuentran difícil pagar la posada. En Flavio mismo tendrían

En una Asamblea de la gente de Flavio para averiguar cuál era la primera necesidad sentida, la mayoría escogió el Hospital. Otros propusieron el tema del agua potable, pero se consideró que este sería de ventaja solo para los moradores de la cabecera: el hospital serviría para todo

Los moradores optaron por el Hospital

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el cantón, especialmente para las madres que van a dar a luz. A veces sus hijos no reciben ningún chequeo al nacer y ciertas deformidades pasan desapercibidas por años.

La actuación del Comité de Salud para el proyecto del hospital El Comité de Salud se acercó a la Autoridad Nacional de Salud en Quito en 1999 para que aceptara el proyecto de un Hospital en Flavio Alfaro. La aceptación costó mucho trabajo porque las finanzas del Ministerio de Salud son precarias. No obstante, por la insistencia del Comité, el Ministerio de Salud aceptó el proyecto con la condición de que el Pueblo de Flavio Alfaro construyera el hospital.

El Ministerio de Salud se comprometió a poner personal adecuado y darle funcionamiento.

El desafío

Este es, pues, el desafío que el pueblo de Flavio Alfaro aceptó. En breve, tuvimos que comprar un solar cerca de la ciudad que sería conveniente para la gente enferma. Tuvimos que nivelar una loma alta y poner un muro de contención. Nos ha dado la ventaja de que la construcción está a seis metros por encima de la ciudad en un lugar fresco con una brisa linda. No tiene peligro de inundaciones ni tiene que sufrir los estragos de los Fenómenos del Niño. No ha de necesitar de aire condicionado extensivo. El ambiente tranquilo y la vista desde el hospital ayudará a los pacientes para su recuperación: es una ubicación que tiene muchas ventajas.

El financiamiento del Proyecto El Comité financió la compra del solar por medio de las actividades comunes de rifas, bailes, donaciones y bingos.

Ayuda desde el exterior Ya que el Párroco es un Agustino irlandés, su Orden pudo acercarse al Gobierno de la República de Irlanda a pedir una donación para empezar el proyecto. La agencia del Gobierno, Ireland Aid, donó unos $66.570.00 y así se lanzó la construcción. Durante los últimos años otros grupos nos han ayudado. Ciertas parroquias católicas en Irlanda, España e Inglaterra permitieron pedir fondos por medio de su Iglesia. Una parroquia de Agustinos en

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Buena Park, California, ha ayudado con donaciones que llegan a $38.000.00. El Prior General de los Agustinos en Roma dio $5.000.00. Una compañía que fabrica equipamiento quirúrgico, KeyMed de Southend on Sea, Inglaterra, también hizo donaciones que llegan a $30.000.00.

Una escuela primaria en Coulsdon, Surrey, Inglaterra recogió unos $2.000.00 . Exalumnos del párroco han donado hasta $82.000.00 y un grupo misionero, The Little Way Association, donó 25.000.00 libras esterlinas ($35.000.00). La Unión de Crédito y Ahorro, New Ross, Irlanda ha donado más de $4.000.00. Otros amigos hicieron donaciones más pequeñas. Un ex policía inglés de ochenta años caminó 12 kilómetros en su maratón para conseguir fondos para el hospital. En total algo como $450.000 ha llegado desde el extranjero.

Camas eléctricas Un hermano del Párroco visitó a varios hospitales en Irlanda recogiendo equipamiento.

La parte más valiosa ha sido las camas, veinte de las cuales son eléctricas. Envió varias termo cunas, ochenta sillas de ruedas (que se repartieron entre los discapacitados de Flavio y Chone), desfibriladoras, muletas y caminadoras.

Autogestión de la comunidad de Flavio Aparte de las actividades ya nombradas para la compra del terreno, la gente de Flavio Alfaro colabora con tres

campañas planificadas.

• Se organizó que cada familia dé Un Dólar al Mes; aunque el éxito varió de mes en mes, llegó algunas veces a $1.000.00. Durante el invierno cuando había más pobreza los ingresos bajaron. La campaña del Dólar al Mes reunió más de $22.000.00.

• La segunda campaña, llevada adelante por el Presidente del Comité, el Dr. Milton Zambrano Barreiro, era la donación de piezas de ganado de parte de los ganaderos del cantón. Algo como sesenta cabezas de ganado fueron donadas, engordados y vendidas.

• Una campaña del Saco de Cemento.

• Personas particulares donaron ripio, arena y piedra bola. La familia del Presidente, Dr. Milton Zambrano, donó toda la caña y una gran parte del encofrado.

Una ayuda muy importante ha sido la de Obras Públicas de Santo Domingo, donde el Ing. Julio Abad nos ayudó por dos años con la traída de arena y piedra. El Ingeniero ha actuado con la autorización del Ministro de Obras Públicas, conseguida por la Srta. Lucy Intriago, posteriormente Diputada Alterna para Manabí. Ha sido de gran importancia porque todo el material pétreo tiene que ve-

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nir de lejos a Flavio.

La Compañía F.V. de Quito nos regaló todas las instalaciones higiénicas: solo tuvimos que comprar los sifones automáticos.

También el Consejo Provincial de Manabí puso el alumbrado exterior y la Compañía Tropimadera, cuyo gerente en ese tiempo es ahora Alcalde de Flavio, el Ing. Jaminton Intriago, nos ayudó con un tractor para nivelar el terreno.

Y finalmente el Municipio del Cantón Flavio Alfaro puso su granito con un tractor prestado por el Concejo Provincial.

Era interesante ver los tractores con su propaganda “Pedro Toro para Alcalde”, “Jaminton para Alcalde” reducir la loma a un terraplén capaz de recibir el hospital planificado.

ba en las ventanas de las puertas, la cerámica de alta calidad y su combinación artística son la obra del Ing. Vera y varios miembros del comité. Supimos que la belleza del edificio sería una propaganda fuerte frente al Ministerio cuando llegara el tiempo para pedir el equipamiento y funcionamiento de la Unidad Operativa.

La planificación del Hospital La planificación no estaba sin problemas. El Ing. Ramón Vera Z., de Chone, el Director Técnico del proyecto, hizo un plan y se comenzó la construcción del primer pabellón.

Fue rechazado por el Ministerio y la Arquitecta Betzabé Rodriguez de Chone, bajo la dirección del Arquitecto Guerra y el Ing. Quinapallo, del Ministerio, hizo el plan del Hospital que fue aceptado. La Arquitecta Rodriguez murió en 2007 sin ver la inauguración de su obra.

Cabe decir que los detalles del adorno del Hospital, como el ladrillo visto, la teja, la combinación de aluminio y cao-

Ayuda del Ministerio durante el Gobierno del Crnl. Lucio Gutiérrez El Ministerio de Salud Pública firmó un convenio con el Comité de Salud de Flavio Alfaro representado por el Dr. Milton Zambrano B. que prometió $240.000.00 para financiar la terminación del Hospital. Demoró en hacerse realidad pero finalmente llegó y el Comité con mucho cuidado alcanzó no solo terminar lo planificado sino también

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empezar un segundo pabellón para acomodar varios servicios no contemplados en los planos de la Arquitecta Rodriguez, como son odontología, pediatría, farmacia, etc.

El Adviento de la Revolución Ciudadana Nuestras esperanzas de que el hospital San Andrés funcionara desminuían cada día, a pesar de que varios Diputados se habían presentado como salvadores que empujarían el proyecto. Con la llegada del nuevo gobierno del Presidente Correa, la Ministra de Salud, Dra. Caroline Chang, recibió en comisión al Alcalde de Flavio Alfaro, el Ing. Jaminton Intriago, el Presidente del Comité de Salud, el Ing. Ronald Cedeño y el Párroco de Flavio Alfaro, el P. Paul O’Connor. Durante la conversación la Ministra llamó a la Directora Provincial de Salud, la Dra. Iris Mendoza por teléfono. Parece que el dialogo con la Directora selló el destino del Hospital. La Dra. Chang concedió que el Hospital funcionara como hospital de 20 camas; nos prometió $120.000.00 para la terminación del segundo pabellón y nos aseguró que el hospital funcionaría lo más antes posible.

Hoy, el 15 de Enero, la Ministra misma, acompañada por la Directora Provincial, la Dra Iris Mendoza y el Dr. Navia, entregó formalmente una consigna de equipamiento para el hospital que, según el Dr. Navia, nos hará la envidia de Manabí.

Igualmente, la Dra. Chang aseguró que se asignarán los

recursos humanos necesarios para el funcionamiento de la unidad de salud.

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LA HISTORIA RELIGIOSA

Los Agustinos Irlandeses en Chone, Ecuador 1977-1992 P. Paul G. O’Connor, OSA Cuando el Capítulo Provincial Irlandés aceptó la invitación de la Provincia ecuatoriana de tomar la misión de Chone en 1977, el P. Declan Deasy ya había estado trabajando allí por dos años.

De los cuatro asignados a ese lugar, sólo tres llegaron, ya que el P. Declan Gough no podía convencer a su doctor de que lo deje abordar un nuevo campo misionero. Declan Deasy regresó al Ecuador y los Padres Tom Tuomey y Paul O’Connor lo siguieron en el otoño de 1977.

No es de sorprender que todas menos una de las ciudades importantes del Ecuador estén situadas en lo alto de los Andes y que éstas se hayan convertido en el foco de desarrollo secular y religioso a través de los siglos. Desde Ibarra en el Norte hasta Cuenca en el Sur, catedrales firmemente construidas han resistido terremotos o han sido reconstruidas después de los mismos. De estas ciudades han salido la mayoría de vocaciones sacerdotales y religiosas. Las zonas bajas de la costa al Oeste y la selva amazónica al Este todavía son, hasta cierto punto, territorios de misión.

El Provincial ecuatoriano, P. Aurelio Zárate, su secretario, P. Guillermo Castro, Tom Tuomey y yo viajamos a Chone unos días antes de Navidad, un viaje de casi trescientos kilómetros que lo llevan a uno de las temperadas altitudes de Quito al calor tropical de Chone, a menos de cinco metros sobre el nivel del mar.

Quince años después, Chone está bastante cambiado y es difícil recordar lo que era en 1977 cuando, conforme se acercaba la Navidad, comenzamos a instalarnos en nuestros nuevos dominios. Claro está que no había un metro cuadrado de asfalto en la ciudad; nadie podría olvidar eso ya que las lluvias de invierno convertían las calles en verdaderos atolladeros y los hermanos estaban equipados con botas de jebe para ir al correo, al hospital u otra labor pastoral.

Era una ciudad que, aún entonces, estaba cambiando rápidamente. Las casas de caña que a menudo tenían vestigios de belleza en sus puertas y ventanas de madera con intrincados trabajos, estaban siendo derrumbadas para construir casas de varios pisos. Era un tiempo de relativa prosperidad; había un buen precio por el cacao y el café; la industria del ganado vacuno estaba floreciendo. El país estaba a punto de retornar a un gobierno democrático y ya había gozado algunos años de prosperidad por el petróleo.

Es prácticamente imposible imaginarse lo que debe haber sido Chone cuando, el 17 de octubre de 1937, los agusti-

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nos ecuatorianos, P. José Tejada y Cirilo Pozo, se hicieron cargo de la inmensa parroquia. No había una carretera a Quito, ni había caminos permanentes aún dentro de la misma misión. El viaje de Flavio Alfaro a Chone, que hoy en día toma cuarenticinco minutos por carro era en ese entonces un viaje de dos días a caballo. Los dos sacerdotes llegaron por barco desde el gran puerto marítimo de Guayaquil a Bahía de Caráquez, una ciudad distante cincuenta kilómetros de la boca del río Chone.

Tampoco estaba muy clara la situación político religiosa.

Los agustinos habían sido invitados a Chone por el Vicario General de Portoviejo, Mons. Félix Heredia, jesuita, ya que el Obispo que había sido nombrado en 1908 no fue reconocido por el Gobierno Liberal y no se le permitía ingresar a la diócesis. Se tuvo que esperar la firma del Modus Vivendi entre la Iglesia y el Estado en 1937 para que Portoviejo tenga su cuarto Obispo, Mons. Nicanor Gavilanes, quien tomó posesión de la diócesis en junio de 1938. El 2 de febrero de 1947, Mons. Gavilanes entregó “definitivamente pleno iure et in perpetuum” las 1500 millas cuadradas de impenetrable terreno montañoso a los agustinos. Estos tenían que, por lo menos, proveer tres sacerdotes para atender el área, de la cuál algunas partes ni siquiera tenían dueños formales y podían ser compradas del gobierno a precios nominales. Enormes reclamos se hicieron en esos años por familias de empresarios y ninguna clase de reforma agraria ha sido capaz de cambiar estas desproporcionadas tenencias.

Durante los últimos días de 1977, cuando la Provincia Agustina del Ecuador, mediante un acuerdo informal, entregó la administración de la misión a la Provincia Irlandesa, el entonces Obispo de Portoviejo, Mons. Luis Carvajal, parecía feliz de endosar los nuevos comienzos, con la esperanza que más sacerdotes llegasen más tarde, aunque el grupo inicial con las justas llenaba los requisitos del acuerdo de 1947. Parte de nuestro acuerdo informal era que el territorio revertiría a la Provincia ecuatoriana si los irlandeses decidían retirarse de ella.

Chone está situada a la mitad de la planicie costera, a unos cincuenta kilómetros del mar, que es colindante con la Diócesis de Portoviejo. La Diócesis tiene una extensión aproximada de 20,000 kilómetros cuadrados y una población aproximada de 1’400,000 que son atendidos por unos noventa sacerdotes y probablemente más de doscientas religiosas. El área Chone/Flavio cubre unos 3,500 km2; tiene una población de 240,000 personas que son atendidas por seis sacerdotes y ocho religiosas misioneras a tiempo completo. Diez religiosas más trabajan en apostolado escolar, hospitalario y social. La gente con la que trabajamos no son indios indígenas sino mestizos gente de sangres mezcladas colonos y agricultores asentados que no tienen las tradiciones de la comunidad ni recuerdos ancestrales que se encuentran en las alturas de los Andes.

Es una de las regiones más fértiles de Manabí, con sem-

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bríos de cacao, café, maíz, arroz y plátanos; recientemente se están sembrando frutos cítricos para el mercado interno.

No debe sorprender que Chone sea una ciudad mercado con largas “pistas”, áreas abiertas encementadas donde se secan y mejoran los granos antes de ser exportados desde Guayaquil, el puerto más grande de Ecuador. No hay un refinamiento de los productos; no hay fábricas que puedan dar empleo a la gente joven sólo una interminable compra y venta de todo tipo, desde vendedores de golosinas y cigarrillos en cada esquina, hasta niños que venden gaseosas y moldes de carne hechos en casa, desde campesinos con tres gallinas para vender a comerciantes que se sientan junto a su balanza para recibir cacao, café, maíz y arroz por libras, quintales o camionadas.

Es difícil obtener estadísticas precisas sobre la distribución

de la riqueza de la tierra; los Padres Vascos en el siguiente condado al nuestro sostienen que en su misión ocho por ciento de la población es dueña del ochenta por ciento de la tierra; en Chone la proporción no es tan drástica. En Flavio Alfaro 3,100 familias tienen granjas de más de cien hectáreas y un diez por ciento de ellos tienen entre 500 y 1,200 hectáreas que prácticamente no dejan mucho que compartir entre el resto de los cuarenta mil parroquianos.

Esto puede deberse a la naturaleza aislada de vivir en el campo o porque la Iglesia ha tenido más de un siglo de espiritualidad individualista, pero una vida sacramental de aspecto fundamentalmente comunitario que tiene poco significado para nuestra gente. Tradicionalmente el bautismo y confirmación se busca a cualquier precio, más en el sentido de pago completo de membrecía que en sentido de compromiso con la comunidad. Esto no es para negar que haya un deseo de comunidad; todo lo contrario. Por toda nuestra misión hay pequeñas aldeas en crecimiento que se autodenominan “comunas” y escogen nombres muy comunitarios, tales como “La Alianza”, “La Unión” sin embargo bajo este crecimiento uno siempre encuentra a alguien con el deseo de ser un “cacique”, un hombre poderoso de quien dependen todas las decisiones y a quien los demás dan preferencia. El ser Presidente de la Iglesia o aún catequista son vistos como parte del orden de mando. El resultado, por supuesto, es una no participación y desunión.

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Es la esperanza de la Nueva Imagen de la Parroquia (NIP) que pequeñas comunidades dinámicas con verdadero compromiso cristiano crezcan y eventualmente reemplacen esta imitación de búsqueda de poder.

Portoviejo había sido hecho Diócesis por el Papa Pío IX en 1870, pero el primer Obispo nunca vivió allí y renunció en 1881. El segundo obispo, Peter Schumacher, un hombre vigoroso quien no sufrió ninguna oposición a esta forma de llevar la iglesia local, es sobre quien recayó el establecer la Diócesis de Portoviejo y Esmeraldas. Él consiguió traer 60 sacerdotes a Manabí y un número de hermanas de Europa, entre las que estaba la religiosa que más tarde fundaría la Congregación de Hermanas Franciscanas que ahora trabajan con nosotros en Chone habiendo regresado exactamente cien años después de la primera venida de su fundadora. Mons. Schumacher fue nombrado Obispo en 1885. Diez años más tarde empezó la lucha civil entre los Conservadores y Liberales. Aunque los Obispos de la Sierra eran más circunspectos, Monseñor Schumacher era más vehemente y abiertamente en oposición a los Liberales; tanto así que a las fuerzas de los Conservadores, hasta hoy día se les llama “el Ejército del Obispo”.

A principios de este siglo (XX) el nuevo estado ecuatoriano se declaró un estado laico: su declarada separación de Iglesia Estado era un poco más que una abierta persecución de la Iglesia. Ignoraba el Concordato con Roma e invocaba una antigua ley del Patronato Español para pod-

er tener una voz determinante en el nombramiento de los Obispos; así el nuevo obispo de Portoviejo, Juan María Riera, nombrado en 1908, nunca fue reconocido por el gobierno y no se le permitió tomar residencia en Manabí.

Comunidades religiosas fueron expulsadas y no podían ingresar al país religiosos extranjeros; los colegios religiosos fueron sujetos al Estado y la enseñanza de religión en los colegios fiscales fue totalmente prohibida.

Manabí tuvo que esperar hasta 1937 y la firma del Modus Vivendi entre la Iglesia y el Estado para el nombramiento de su cuarto Obispo, Mons. Carlos Nicanor Gavilanes, quien tomó posesión de la Diócesis el 5 de junio de 1938 y sirvió hasta 1965.

No hay forma de saber cuántas de las actuales actitudes hacia la Iglesia en Manabí nacen de aquellos años de guerra, pero probablemente aún hay rasgos de aquella antipatía en la actitud de los hombres de no asistir a la iglesia y la ambivalencia sobre el matrimonio religioso.

La prohibición de la enseñanza de religión en los colegios estatales continúa sin cuestionarse como una marca de libertad.

Con la adrenalina del fervor (o fiebre) misionero fluyendo libremente y conscientes de su herencia, el grupo irlandés se hizo cargo de la administración del Cantón Chone el 28 de diciembre de 1977. Hasta esa fecha, había sido dirigido por el P. Declan Deasy y un P. Oswaldo Albán quien tenía una residencia hecha de caña en Flavio Alfaro. El hermano

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Miguel se quedaría con nosotros durante nuestro período inicial, pero el P. Ibáñez, quien se había convertido en una leyenda en Chone y cuya partida no hubiera sido bien vista por la población, salió durante la tranquilidad de una siesta sin crear el menor barullo de protesta. Él había pasado doce años en Chone y su ruda amabilidad le había ganado amigos en los lugares más remotos de la misión. Eran su gente amada y no importaba a qué hora viniesen por un bautismo, él los atendía con agua que era ligeramente verde y no un completo símbolo de purificación. Si cuatro familias diferentes querían misas para sus difuntos en la mañana, él decía las cuatro misas. Todas las tardes a las dos y treinta, cuando todos estábamos que colapsábamos en los 90 grados de calor, se le podía ver moviéndose por el corredor en camino a hacer el programa de radio, una bolsa de lona sobre su hombro y su maltratado sombrero de paja para protegerlo del caliente sol. Su viejo jeep Willis, “El Rey de la Montaña”, que era parte de su imagen, lo prefería al nuevo Nissan Patrol que había chocado levemente contra una vaca obstinada.

Poco tiempo antes de nuestra llegada, él había terminado la edificación de la nueva iglesia de Chone, más con un espíritu de gran entusiasmo que con alguna concesión a las reformas del Vaticano II, y aún así, su regalo al salir de Chone, un enorme y complicado reloj que funcionaba con un motor y que tenía péndulos y pesas de emergencia, no había sido instalado. Nunca funcionó correctamente; las lluvias mojaron el motor, y el pueblo, cada vez que querían mostrar su no aceptación de los gringos, se que-

jaban que no éramos capaces ni siquiera de mantener un reloj funcionando.

Viendo retrospectivamente el primer año de la misión, fue todo relativamente horrible. No teníamos una idea de a dónde íbamos. Profesores de una vida curricular planificada, no estábamos preparados para trabajo pastoral con adultos. Si había planificación, era sobre algunas cosas que Declan Deasy había decidido que debían cambiar; después de todo, él ya tenía dos años de vivir en el Ecuador.

Así es que los cambios vinieron; fueron repentinos, confrontacionales y obtuvieron su objetivo. Posiblemente no hemos examinado la nueva medicina con suficiente cuidado, ya que los efectos colaterales fueron un poco desagradables.

No habría más una sucesión de misas cada mañana en la iglesia de Chone, sino más bien una misa concelebrada cada noche. Los bautismos tendrían una hora fija los sábados por la tarde y serían precedidos por una charla explicativa. Charlas prematrimoniales se tendrían cada mes.

Ningún cambio en este molde sería aceptado porque si no sería como una rajadura en un dique holandés.

La gente vociferaba por el desagrado de estos cambios y nos dejamos llevar a un estado de presión mental que era neurótico.

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Mientras tanto, la gente del pueblo no estaba inactiva; un emprendedor caballero recogía firmas para que nos retirásemos. Las Hermanas Marianitas, quienes no podían comprometerse con nosotros, nos defendían con fidelidad ciega. Alguien fue a ver al Obispo con el triste cuento de la inmerecida suerte de que Chone esté en las manos de estos recién llegados. Y finalmente la noticia llegó al Cardenal en Quito, Mons. Pablo Muñoz. Luego tuvimos un Padre General, P. T. V. Tack, muy molesto quien trataba de saber lo que estábamos haciendo para molestar tanto a la gente de la misión. Es probablemente una muestra de nuestra audacia la que nos llevó a preparar una apología para el Primado. El Cardenal no podía haber sido más amable y gentil: él contó como su gente había amenazado con quemar la iglesia cuando elevó la edad de confirmación a los 10 años. En algún lugar del archivo de Chone hay una carta de alivio del Padre General preguntando cómo habíamos logrado cambiar el punto de vista del Cardenal quien lo había llamado para expresar su aprobación por nuestra labor.

Declan Deasy estaba ansioso de que se diera atención a las partes más remotas y abandonadas. Pronto supimos de Convento, El Mate, Barraganete y San Pedro Latacoso.

Y Declan quiso que conociéramos esos lugares. Siendo ya un endurecido misionero de cuatro meses, armado con net para zancudos, botas de jebe y una sombrilla para protegerme del sol durante la larga travesía en canoa, me dirigí a Barraganete, la primera aldea en un viaje de diez

días río arriba en el Daule. Durante esos pocos días pude conocer una nueva cara del carácter ecuatoriano, la suave generosidad de la gente sencilla del río. También aprendí el pasatiempo nacional de esperar: esperar por omnibuses, canoas, congregaciones.

Más tarde ese año, cuando el barro se había secado, Tom Tuoney se convirtió en el santo patrono de Convento, una pujante aldea y parroquia a unos setenta kilómetros de Chone. La casa de Tom, de apenas dos cuartos, que estaba detrás de la iglesia en Convento, se convertiría después en una lección del arte de vivir con sencillez.

En Flavio también habían habido problemas. Declan estaba decidido que el tiempo de servicio del sacristán terminaría al entregar la parroquia; el sacristán se opuso pensando en su futuro y puso otro candado en la puerta de la iglesia. Esto duró hasta marzo de 1978 cuando se comenzó con los servicios de fin de semana. Se eligió un comité de la iglesia para construir la casa del párroco y terminar de construir la iglesia. Por un pequeño margen, la gente eligió como presidente un granjero pelirrojo de nombre José Ricarte Cedeño. El Espíritu Santo debió de haber estado muy presente en ese día pues Don Ricarte asumió la construcción de la casa y la iglesia como su vocación de por vida. Murió antes de ver terminada la fachada de la iglesia, pero su nombre merece aparecer en cualquier nota en la historia de Flavio. El 5 de julio de 1979 el sacerdote tomó residencia permanente. Habíamos empezado

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a descentralizar.

El P. Chris Fitzgerald llegó en noviembre de 1979, la primera importación de experiencia y creatividad de la misión en Nigeria. Su llegada coincidió para darnos cuenta que el trabajo en Chone nos estaba llevando a la catequesis y que la formación de catequistas debía ser un objetivo primordial. Ya no estábamos perdidos, por lo menos ya sabíamos a dónde queríamos llegar. Ahora sólo nos faltaba descubrir cómo llegar.

Habíamos llegado a Sudamérica en tiempos emocionantes: nueve años antes, los Obispos del CELAM (La Conferencia de Obispos de Latinoamérica) habían fijado sus colores en el mástil en Medellín y ahora, mientras tratábamos de establecernos, se estaban llevando a cabo las preparaciones en la diócesis para las reuniones de Puebla que tendría como resultado el análisis de “Evangelización en el Presente y Futuro de Latinoamérica”. Aparecieron como objetivos y medios de Evangelización la Comunidad, participación de todos en la Evangelización y las Comunidades de Base.

Un año después de Puebla, en 1980, nuestro obispo, Mons. Luis Alfredo Carbajal, escogió a Chone como centro de la reunión mensual del clero, religiosas y agentes de pastoral del norte de la diócesis. En ellas, la nueva opción pastoral del Ecuador sería aclarada y puesta en efectividad a nivel local. La diócesis tiene cuatro zonas y estas reuniones nos dieron la primera oportunidad de reunirnos

con el clero de nuestra sección, de escucharlos, analizar la realidad y buscar una salida.

Dos Hermanas Marianitas ecuatorianas estaban trabajando a tiempo completo con nosotros; habían construido una casa en Convento. En Barraganete se había construido una estructura simple de caña para aliviar el trabajo de aquellos que visitaban la misión del río las dos hermanas, Olga y Ana Isabel, pasaron un tiempo allí en soledad fructífera.

En marzo de 1980, una voluntaria irlandesa, Brigid Lyons, vino a ayudarnos. Enseñó catecismo y ayudó a formar catequistas; trabajó con grupos de mujeres y, en general, actuaba de moderadora entre los pequeños grupos de laicos que comenzaban a apoyar nuestros esfuerzos pastorales.

Declan Deasy había dado el empuje inicial para organizar la preparación catequética. Le tocó a Chris Fitzgerald mantener el programa en movimiento.

Ocasionalmente, cuando íbamos a visitar las aldeas del río Daule, nos alojábamos con sacerdotes irlandeses de la Sociedad de Saint James en El Empalme. Allí descubrimos un sistema de catequesis al que ellos habían convertido en Catequesis Familiar, un enfoque que parecía atacar nuestros problemas desde sus raíces. Se originó en Chile.

La adopción de este sistema todavía estaba lejana de

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nosotros cuando a fines de 1980, los padres Ted McCarthy y David Crean vinieron a engrosar nuestras filas.

La Catequesis de la Familia está diseñada para ayudar a los padres a profundizar su propio compromiso de fe y su entendimiento al mismo tiempo que ellos preparan a sus hijos para la Penitencia y Eucaristía.

Durante el año de las inundaciones, cuando las lluvias comenzaron en setiembre de 1982 y no pararon hasta agosto de 1983, un sueño de Declan Deasy se había hecho realidad. Las Hermanas de la Presentación irlandesas habían aceptado la invitación de trabajar en Chone. Las hermanas Colette, Mary, Martina y Josephine sobrevivieron lo mejor que pudieron en un ala de una clínica local, en una casa que había sido construida en Santa Rita para las Misioneras Marianitas y finalmente en Flavio. Su llegada tuvo importancia para el desarrollo de la Catequesis Familiar porque ellas se hicieron cargo de la misma. La responsabilidad de preparar a las personas para animar y guiar este sistema recayó mayormente sobre ellas y ellas cargaron con la responsabilidad de introducirlo a los principales centros de la población.

Su objetivo es que los niños absorban su fe cristiana en la atmósfera del hogar y de sus padres, quienes están, a la vez, profundizando su propio compromiso a través de reuniones de oración, reflexión bíblica y estudio semanales.

Estas reuniones, guiadas preferentemente por una pareja de padres, les da a las personas una oportunidad de

hablar juntos sobre una serie de temas de fe, de abrirse camino por la Biblia y de deshacerse de ideas infantiles sobre religión y de la timidez de rezar juntos. Los padres, a su vez, ayudan a sus hijos a absorber una versión simplificada tal como se presenta en el libro del alumno. Una vez por semana los niños se reúnen bajo la guía de un animador cuya función no es directamente catequética sino de celebrar el don, los bienes de Dios que se ven en el tema y de reforzar las enseñanzas que han recibido en casa.

Los años entre 1980 y 1985 fueron años de crecimiento y expansión a todo nivel. Ted McCarthy y David Crean, que llegaron a fines de 1980, fueron seguidos rápidamente del P. Vincent Kelly en 1981 y de los Padres James Ryan, Paul Flynn y John Grace en 1982. Dave Crane comenzó un convento para las Religiosas Marianitas que estaban a tiempo completo en la misión y fue inaugurado en Abril de 1982.

Un joven laico, Pat Ryan, vino a acompañarnos en 1981, y a principios de 1982, una enfermera voluntaria, Vera Lynch, con la nutricionista Susan Nagle, respondiendo a una invitación de Chris Fitzgerald, Superior de la Misión, vinieron en una visita de dos años esperando establecer un servicio de salud y de educación para la salud. Luego, a fines de 1983, tres enfermeras más, todas obstetrices, llegaron para continuar el trabajo de la misión. Fueron Liza O’Connor, Margaret Clark y Ann Millar. Finalmente, a fines de 1985, los padres Chris Traynor, Kevin McManus y Ned McGrath dejaron Irlanda para venir a Ecuador.

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Con la llegada de tantos sacerdotes, cada parroquia podía tener su propio cura párroco; el crecimiento en número de las religiosas que trabajaban a tiempo completo en la pastoral de la misión garantizaba que las pequeñas aldeas recibieran atención catequética.

Se han construido casas, iglesias o ambas cosas en Pavón, Santa Rita, Convento, San Antonio, Eloy Alfaro, Chibunga y Boyacá. En Puerto Arturo, la parte más pobre de los suburbios de Chone, se ha construido un centro comunitario; en Flavio se ha construido un Centro Catequético pero todavía no está siendo usado totalmente.

La casa que originalmente se construyó para las Religiosas Marianitas en Santa Rita es ocupada ahora por las Religiosas Franciscanas que llegaron a nosotros en 1988, cien años después que su madre fundadora llegó para trabajar con Monseñor Schumacher.

cada uno de nosotros parecía haber enfocado diferentes partes. Necesitábamos una estructura organizada para coordinar esfuerzos y talento dispares hacia un Equipo Pastoral una unión difícil.

Un plan cohesivo que uniría nuestros varios esfuerzos, nos había evadido por años. Quizá no habíamos estado muy conscientes, en ese entonces, de la importancia del seminario introductorio sobre el programa Mundo Mejor de la Nueva Imagen de la Parroquia, o NIP como comúnmente se le llama en esta era de iniciales, que Chris Fitzgerald había pedido a los agustinos de Chulucanas. En enero de 1988 los padres Aquilino y Guillermo vinieron a iniciarnos.

Las comunidades de las aldeas a lo largo de la misión respondieron a esta nueva atención construyendo sus capillas.

Nos forzaron a considerar nuestra realidad y a clarificar nuestro concepto de la parroquia ideal. Y para ponernos en movimiento, nos hicieron ver lo que sucedería si continuábamos con nuestra pastoral de ese entonces.

Una vez que nos tenían encaminados, comenzaron a ofrecernos criterios y planes de reconstrucción que eran tan profundamente cristianos que nos causaron nuevas rutas espirituales.

El énfasis en nuestro objetivo había comenzado a cambiar, probablemente debido a la insistencia de los sudamericanos de tener pequeñas comunidades. La comunidad como la fuente, estructura y resultado final de la catequesis y Evangelización, se nos estaba imponiendo y necesitábamos trabajar en equipo. Podíamos ver vagamente lo que nuestro objetivo debía ser, pero la visión era parcial y

Todo cristiano está llamado a tomar parte en la misión de Cristo, santificar su propia vida y de abrir el camino para que otros puedan hacer lo mismo, pero siempre en comunidad. El trabajo de equipo de la parroquia, por lo tanto, es simplemente abrir para TODOS la posibilidad de responder libremente a este llamado y de animar a todo bautizado a la participación... a tiempo o destiempo. Sólo

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hay que insistir en invitar a todos.

Esto incluye el instalar “Telecomunicación” con cables humanos; zonificar la parroquia, establecer equipos de coordinación en cada zona con una red de mensajeros quienes tendrían contacto constante y amigable con diez familias. Una vez que esta red esté instalada, hay esperanza de tener verdadera comunicación, tan esencial para la participación. El equipo coordinador central de la parroquia se convierte en un grupo animador. Anima a la gente a expresar lo que para ellos sería la parroquia ideal; anima a dar una sincera y real descripción de la realidad presente “fallas y todo”; anima al análisis de esta realidad con vista a identificar los problemas fundamentales que se encuentran dispersos como obstáculos entre lo real e ideal. Una vez que la parroquia cree tener una idea clara de su problema número uno, luego por común acuerdo, todas las actividades en la parroquia se dirigen a superar este problema fundamental.

El pobre cura párroco se cae del pedestal desde donde, “ad modum recipientis” él mismo identificaba los problemas fundamentales. Ahora tiene que escuchar a la gente, identificar los problemas y quizá darse cuenta que él mismo sea una parte integral de los mismos. Deberá comenzar desde los pobres y ver la realidad desde el nivel básico, pero una opción preferencial por los pobres no es una opción exclusiva por los pobres. Tampoco el cura párroco puede llegar a barrer con todo el pasado: ese pasado

es el fruto de la buena voluntad de las generaciones anteriores y no puede ser eliminado como algo que pasó de moda. Muy a menudo, las costumbres del pasado tienen, muchas veces escondidos, el corazón y la envoltura de la identidad espiritual de la comunidad; el proceso natural de crecimiento asimilará los valores y desechará sus elementos inútiles.

Hasta aquí, sólo estamos raspando la superficie de este nuevo camino; tenemos problemas para mantener funcionando la coordinación zonal y la red de mensajeros muchas veces pueden cruzar sus líneas. Sin embargo, se ha desarrollado un sentido de participación y el anonimato de la gran parroquia está cediendo a la identidad de las comunidades zonales.

Afortunadamente para nosotros, este tipo de planificación pastoral ha sido adoptado recientemente por la diócesis; no tendremos estructuras discordantes; el respaldo del grupo animador diocesano y las ayudas que dan a las Asambleas Cristianas, etc., renovarán nuestro inflamante fervor.

Se ha convertido en tarea de Kevin McManus, como Superior, coordinar los esfuerzos del grupo, y el darse cuenta de cuán pocos somos es como un apoyo para cada decisión. Que haya 4,500 niños bautizados cada año es un indicador del tremendo número de católicos que hay en la misión. Cada parroquia tiene sus anexos, con fiestas y celebraciones propias que son un constante llamado. Tres

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parroquias, en la actualidad, no tienen sacerdote y Ted McCarthy trata de darles alguna atención a pesar de las grandes exigencias de su propia área.

El programa radial diario es muy importante, pero somos principiantes.

Nuestro número se ha visto reducido desde los días de 1985, y el 1 de diciembre de 1991, Ned McGrath murió de un ataque cardíaco. Ned era un reto para todos y tenía su propia forma de pensar sobre su preocupación por los pobres. Aunque había sufrido por años de problemas del corazón, trabajaba sin descanso todo el día y parte de la noche.

Ese día comenzamos a sentir algo del consuelo escondido detrás del respeto por los muertos de los ecuatorianos.

Todos ayudaron. Las religiosas se encargaron de todo en la casa y el templo. El Obispo y sacerdotes, que estaban presentes para la reunión zonal, se quedaron y nos acompañaron para el funeral. Dos de ellos fueron a la nueva iglesia de Ned en Boyacá a avisarle a la gente y a tener una misa de difuntos con ellos. Varias personas del pueblo ofrecieron una tumba porque no teníamos una.

Los jóvenes y los viejos llenaron la iglesia para el funeral.

Era compartido ya que otro funeral había sido programado para la misma hora. Todo el día la gente había estado viniendo a mostrar sus condolencias, y al llevar los dos ataúdes, tan contrastante con la simplicidad del de Ned,

por la calle principal al cementerio de Chone, el P. Luis Tomás de Quito dirigía el rezo del Rosario.

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TESTIMONIOS Considerando que muchos de los protagonistas de la historia republicana de Flavio Alfaro, ya rindieron tributo a la muerte, la investigación ha buscado testimonios de familiares cercanos, a quienes agradecemos el tiempo que nos dedicaron.

Se trata de personas que han acumulado recuerdos de su propia acción, y que en algunos casos los recibieron de sus familiares más cercanos y los complementaron con su propia experiencia.

Del conjunto de testimonios podemos ya derivar conclusiones que describen muy bien a la población en las diferentes épocas, marcando el ritmo de desarrollo que con variaciones, se mantiene como siempre ocurre con las colectividades humanas.

El área en donde se encuentra nuestro cantón, se describe como una zona agreste del cantón la Chone, con accesos muy difíciles hasta la cuarta década del siglo XX; los 56 kilómetros de distancia a Chone, necesitaban todo un día en la estación seca para ser cubiertos en acémilas, único medio de transporte posible entonces; durante la estación lluviosa, eran necesarios dos días y mucho más sufrimiento. Mediado el siglo, se abre una carretera de verano que permitía el sufrido avance de los camiones

mixtos que igual transportaban pasajeros que carga.

Por el año 1935 avanzó la carretera hasta La Morenita, un sitio cercano a lo que hoy es Flavio Alfaro. Y, al llamar carretera, tenemos que añadir de verano , porque sólo era circulable en la estación seca, y todos los años demandaba un proceso de reconstrucción que no siempre se realizaba a tiempo. La construcción de ese terraplén se hizo a pico y lampa, nos informan los más viejos, testigos y protagonistas, algunos, de esos trabajos.

Cuando avanza la vía como hemos descrito, se despierta en los habitantes de Chone el anhelo acentuado de contar con la carretera hasta Santo Domingo, por lo menos. Las peticiones en ese sentido no encontraban eco en el Ministerio de Obras Públicas, algunos de cuyos funcionarios habían respondido que era imposible construir esa carretera por lo agreste del terreno, los numerosos cursos de agua y las dificultades constructivas, así como la distancia hacia las fuentes de materiales inertes.

Cinco choneros que son recordados como los raidistas , se propusieron demostrarles a los burócratas del Ministerio que la obra era posible, que la ruta Chone - Quito era transitable, pues había sido la ruta natural desde antes de la época colonial.

Para lograr su objetivo, compraron un carro, al que adecuaron y equiparon con lo necesario para un largo viaje.

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Emprendieron la marcha en medio de la algarabía de la población que compartía sus anhelos. Los cinco raidistas son: Carlos Alberto Aray Juan de Dios Zambrano (Poeta y comunicador) Plutarco Moreira (Chofer y mecánico) Emilio Hidalgo (Violinista) Artemio Aray (Médico) La travesía fue planificada en detalle; se combinó el transporte por tierra y el fluvial para un tramo en que era imposible utilizar el carro, que fue desarmado parcialmente para embarcarlo en una balsa y llegar hasta el sitio en que tenían que continuar, lo volvieron a armar. Mantener en operación ese vehículo fue una verdadera proeza particularmente de Plutarco Moreira, en su condición de mecánico.

Vencidas todas las dificultades la valiente misión llegó a Quito y fue recibida con muestras de alegría por los manabitas residentes en Quito y habitantes de la ciudad; las autoridades se convencieron de que la construcción de la carretera era necesaria y posible, como habían demostrado los raidistas.

Ese fue el comienzo de la ejecución de esa obra que ha significado un impulso al progreso no solamente de Flavio Alfaro, sino de toda la provincia.

Hasta entonces, el sitio Pescadillo se había transformado en parroquia; sus habitantes continuaban unidos férreamente y tenían sus objetivos claros. Un pueblo que inicialmente fue un sitio para el descanso de los caucheros; que vivió mucho tiempo de la recolección de tagua y palma real, se transformaba en agrícola y ganadero, con cultivos de cacao, café y explotación de maderas de sus ricos bosques.

El acceso al agua entubada y al alcantarillado, la llegada de la energía eléctrica, la fundación y desarrollo de centros educativos, la construcción de carreteras rurales, la pavimentación de las calles de la ciudad, la dinamización de proyectos para el desarrollo del cantón, marcan los hitos que impresionan a quienes nos hicieron conocer sus testimonios, todos los cuales coinciden en señalar el período del cambio que comienza en el año 2004, es cuando el cantón ha avanzado con más celeridad y con una adecuada priorización de las obras municipales.

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SR. ENRIQUE DELGADO COPPIANO Don Enrique Delgado Coppiano es un conocido político manabita que fue Prefecto Provincial de 1960 a 1967 y Diputado Nacional, de 1984 a 1988. Me dicen que fui Prefecto nombrado por la dictadura, dice, y no es verdad; a mí me eligió el pueblo manabita y, cuando se instaura la dictadura, simplemente creyeron conveniente prolongar la vigencia de mi período administrativo.

esposa doña Guillermina Zambrano, tienen sus orígenes en Zapallo y Flavio Alfaro, como don Julio Cuadros Zambrano, padre de John Cuadros, y don Adolfo Mata, que iniciaron negocios en Flavio; don Adolfo Mata es tío de mi esposa, informa don Enrique Delgado.

Estas personas fueron muy fecundas y tuvieron muchos hijos; los señores Cuadros y Mata, los enviaron a estudiar a Quito y Guayaquil, por lo que la juventud de entonces, tenía una formación diferente y otras aspiraciones.

En Chone se formó un grupo político denominado RENOVACIÓN que durante muchos años fue liderado por el señor Salustio Giler Álava, y yo era su Secretario.

Don Salustio con frecuencia se reunía con dos comerciantes de Flavio Alfaro, los señores Romualdo y Agustín Zambrano, quienes junto con otras personas de esa población se sumaron al grupo Renovación y nadie nos ganaba una elección; este grupo fue tan influyente, que inclusive los cinco raidistas pertenecían a él.

Flavio Alfaro era la parroquia más extensa del cantón Chone, pero las rencillas internas impedían que avance al ritmo que todos hubiéramos querido, afirma. La parroquialización se produce cuando es Presidente del Concejo de Chone don Juan Coppiano Moreira, mi abuelo que con su

Estos antecedentes sirven para entender como había relaciones afectivas, amistosas y políticas entre la gente de Chone y Flavio Alfaro, lo que justificó las acciones que se desarrollaron después.

Cuando fui Prefecto, por ejemplo, tomamos acciones para que Flavio creciera ordenadamente y por intermedio del

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Ing. Egberto Alarcón, del Departamento Técnico, se realizó un estudio que dejó las bases para la regulación de las construcciones, el ancho de las calles, etc. La Junta Parroquial aplicó con energía esas normas. La planificación de la parroquia estimuló a la población para mejorar sus viviendas y realizar nuevas construcciones, además de que se mantuvo el orden que se había establecido.

Así estaban las cosas cuando fui electo Diputado Nacional, es decir, por cuatro años (Los provinciales tenían un período de dos años). Era el gobierno de Febres Cordero y, si bien nuestro partido, la Izquierda Democrática captó las dignidades del Congreso, el Ejecutivo era duro y no dejaba espacios para la acción.

En esas condiciones, Enrique Delgado presentó el proyecto de ley de creación del cantón Flavio Alfaro que se tramitó totalmente y fue aprobado por el Congreso; pasó al Ejecutivo para la sanción constitucional, y el Presidente Febres Cordero lo objetó totalmente (vetó). Con ello, hasta después de un año no se podía presentar un nuevo proyecto.

El siguiente año, Enrique Delgado es designado Presidente de la Comisión de lo Tributario, Fiscal y Presupuestario del Congreso, de la que eran miembros también el general René Vargas Pazos y el Dr. Ítalo Colamarco, los tres manabitas y de Chone.

Por aquella época, había en el presupuesto del Estado la partida Obras de Interés Provincial , de la que se hacían asignaciones para obras que sugerían los diputados de la respectiva provincia. Había una historia de incumplimiento de parte del Ministerio de Finanzas, porque cuando las instituciones de la provincia concurrían a reclamar la asignación, le decían que tal partida no existía en el presupuesto.

Dice Enrique que cuando asumió la Presidencia de la Comisión que tenía que aprobar el presupuesto del Estado, en una de las reuniones con el Ministro de Finanzas, Ec. Cordovez, ofreció toda su colaboración dentro de la ley, siempre que se respeten las asignaciones y que las mismas sean transparentes, es decir que se publiquen en detalle dentro del presupuesto.

Aceptado por el Ministro, se aplicó y cumplió, con lo que en adelante los diputados pudieron hacer efectivas las obras que planificaban en su provincia.

Los tres miembros manabitas de la Comisión de Presupuesto, comenzaron a trabajar en conjunto y lograron importantes asignaciones para toda la provincia y también presentaron el nuevo proyecto de creación del cantón Flavio Alfaro, pues había transcurrido el año necesario para tratarlo nuevamente. Dicho proyecto fue aprobado, gracias al trabajo de los diputados proponentes y del Dr. Carlos Romo Dávila, suegro de John Cuadros Pazmiño que

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era Presidente del Comité Procantonización.

Lcdo. Pedro Vega Pinoargote

El ejecutivo ya no objetó la ley, pues el Ministro de Finanzas se había comprometido a conseguir la anuencia de Febres Cordero y con ello el nuevo cantón se hizo.

Nació muy bien apadrinado. Recibió generosas asignaciones para el financiamiento de obras y se realizó la construcción de algunas carreteras y de numerosas escuelas, especialmente en la zona rural.

De esta manera queda explicado el proceso de cantonización por uno de sus protagonistas principales.

INSTITUCIONES FINANCIERAS Para hacer conocer la historia de las Instituciones Financieras de Flavio Alfaro, hicimos contacto con el Lcdo. Pedro Vera Pinoargote, Gerente de la Agencia de la Cooperativa <Chone Ltda.> que fue la primera institución de fuera del cantón que se instaló en la ciudad; ya antes se había organizado la Cooperativa <Flavio Alfaro> que se ha visto disminuida considerablemente al momento.

Después de la Cooperativa Chone, se instaló en Flavio el Banco del Pihincha y finalmente el Banco Nacional de Fomento. Son las cuatro instituciones financieras que atien-

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den las necesidades de financiamiento de la población del cantón.

La Cooperativa Chone Limitada nació en Chone el 18 de abril de 1964, tres días después de la Cooperativa 15 de Abril de Portoviejo, que es la primera en la provincia.

Abrió sus puertas la Agencia en Flavio, el 11 de febrero de 2001 y ahora cuenta con 3.650 socios mayores y 650 socios menores.

Mueve unos 15.000 dólares diarios y, si bien los socios no gustan de los depósitos a plazo fijo, el ahorro no es volátil y se mantiene en las cuentas por tiempos interesantes.

Sus activos suman tres millones de dólares, en tanto que el pasivo es de 2.6 millones. El capital social es de 135.000 dólares.

Como anécdota nos cuenta el Gerente que el día de la apertura, se solicitó el primer crédito por 8.000 dólares, y sólo se habían hecho depósitos por 80 dólares; entonces, tuvo que recurrir a su matriz y recibir un crédito que fue pagado con los propios recursos de la agencia, en quince días.

Trabajan 8 personas, tienen todo su capital colocado y un índice de morosidad del 4.2%. El 85% de la cartera constituyen créditos de producción.

El éxito logrado, atribuye el Gerente a que se han dedicado particularmente al microcrédito y han atendido la demanda de la zona rural que visita personalmente con periodicidad. <Es que yo vengo del campo, dice. Esa es mi gente y a ellos hemos dedicado los mejores esfuerzos> Considera que lo mejor del sistema cooperativista es el proceso de capacitación, no solamente a los funcionarios de las cooperativas, sino a los socios; claro que se ha reducido ahora ese proceso, porque la Ley no nos permite mantener presupuestos de educación y el Comité de Educación dentro de la estructura de la Cooperativa; pero ya vamos a recuperar ese recurso y volveremos a trabajar con empeño en la capacitación de los socios. Más aún, añade, tenemos vigente un convenio con Suiz-contact y vamos a exigir que se cumpla para atender esta necesidad.

El funcionario tiene una profunda formación cooperativista y está convencido de las bondades del sistema que irá en crecimiento porque el financiamiento se une con la capacidad productiva de nuestra gente, con resultados realmente halagadores.

En cuanto a su visión de futuro para el cantón, es de acentuado optimismo, por la gran productividad y la dedicación de la gente. <Yo quisiera que cuando me retire, el 80% de nuestros campesinos sean socios de la cooperativa, para acceder en la práctica a los primeros lugares

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del ranking nacional, porque se habrá desarrollado la conciencia social que mueve los cambios necesarios en la estructura del país.

Y ya libre de responsabilidades oficiales, quiero irme al campo y vivir con las comunidades organizadas para continuar realizando el trabajo transparente que acostumbro.

Finalmente dice que nunca deja de atender a los clientes de la cooperativa, mantiene las puertas abiertas y permanece desde su despacho, atento a lo que ocurre en toda la oficina y a cómo son tratados sus clientes.

DON ÁNGEL GREGORIO ALCÍVAR M. Nació en 1927 y, al momento de la investigación, ha cumplido 83 años de edad. Mantiene una total lucidez y su memoria funciona excelentemente bien; su testimonio es rico en información general sobre la vida de toda la población.

En cuanto al progreso del cantón, menciona que el período del Ing. Jaminton Intriago ha sido el más fecundo en obras importantes tanto en la ciudad como en el campo.

Llegó a esta localidad, en 1940, antes de la creación de la parroquia Flavio Alfaro por la Municipalidad de Chone.

Era el sitio Pescadillo, y corría el mes de junio, inicios del verano, pero el acceso era muy difícil, sin una carretera y sufriendo las consecuencias de las lluvias recientes.

Había unas 15 casas y estaba definida la calle Manabí, a la orilla del río Ciriaco, dice. No llegaban a 100 habitan-

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tes cuyos jefes de familia se dedicaban a la recolección de tres productos que eran silvestres y se encontraban en la selva que comprendía la mayor parte del territorio cercano. Eran el caucho, la tagua y la palma real.

Cuatro personas las más destacadas de la población- se dedicaban al comercio; ellos eran los señores Luis Moreira, Lupercio Bravo, Tobías Rivadeneira y Antonio Cedeño.

Los comerciantes compraban los productos citados durante todo el año y lo almacenaban hasta que pasaran las lluvias y fuera posible enviar las arrias de acémilas cargadas con ellos, hasta Chone, en donde embarcaban la carga en una lancha para su traslado a Bahía de Caráquez, donde se encontraban los exportadores para Europa, pues esa ciudad recibía buques que realizaban ese transporte.

Era la época en que con mayor facilidad se viajaba desde Bahía de Caráquez a cualquiera de las ciudades europeas, que a la capital del país, por el problema de las vías de comunicación y transporte.

El negocio del caucho era el que despertaba mayor interés; los trabajadores entraban a la montaña y hacían cortes en la corteza de los árboles, por los que fluía el látex que se solidificaba en contacto con el aire, aunque mantenía su poder de adherencia. Transcurrido un tiempo, se recogía las láminas de látex que se envolvían para formar una especie de marquetas que se entregaban al peso en

los comercios.

Este producto tenía mucha demanda en Europa, derivada de la gran guerra inicialmente y del desarrollo de la industria automotriz, posteriormente; aún no se había desarrollado el plástico derivado del petróleo- por lo que el uso del caucho era mucho más generalizado que ahora.

Los exportadores recibían buenos precios que permitieron el desarrollo de grandes fortunas en Bahía de Caráquez, donde algunas familias derrochaban lujo de nivel europeo; los comerciantes locales recibían mucho menos y, desde luego, pagaban menos a los recolectores del caucho, sin embargo de lo cual ellos financiaban su vida con su trabajo.

Igual proceso se cumplía para la palma real y la tagua, productos que demandaba Europa para industrializarlos, con los conocidos procesos de explotación de los países del norte a los productores, a los que interesaba mantener en condición de productores de materias primas para que sus mismos productos retornen elaborados y con precios multiplicados.

El comercio del caucho debe haber sido tan bueno, dice don Ángel Alcívar, que la compañía exportadora instaló en el sitio Pescadillo y luego en la parroquia Flavio Alfaro, un dispensario médico exclusivo para los caucheros, en el que recibían excelente atención, y que se mantuvo en

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tanto permaneció la explotación del caucho que, al bajar la demanda con la finalización de la guerra, dejó de ser rentable y desapareció por consunción.

El auge del caucho significó unos diez años de soporte para la economía rural de la costa y de la amazonía del Ecuador y de otros países de América. Significó también la depredación de la cuenca amazónica que ha continuado con la explotación de la madera, especialmente en el área que corresponde al Brasil.

Pero mientras recolectaban los productos silvestres, los habitantes de Pescadillo comenzaban a cultivar la tierra; ellos habían llegado procedentes de Chone, Canuto, Tosagua y otras zonas manabitas, y sabían cultivar la tierra; los expulsó de sus orígenes, la sequía que desde entonces ya causaba estragos en la economía de la región.

Y aparecían las primeras fincas que se enriquecían con los cultivos de yuca, maíz, plátano, cacao y café. Las frutas tropicales también se plantaban y, en poco tiempo las tierras de esta zona entregaron una rica producción que excedía las necesidades del consumo y que se vendía en Chone, durante los meses del verano, cuando ya llegaban los primeros camiones que hacían el servicio de transporte de pasajeros y carga, con grandes dificultades.

Al término del negocio del caucho, recuerda don Ángel Alcívar, se produjo una gran depresión económica. Prác-

ticamente desapareció la moneda y se utilizaba el trueque para conseguir los productos que se requerían para la vida. Particularmente el trueque fue muy útil en el trabajo agrícola, porque los agricultores prestaban su contingente para las labores de un vecino y luego recibían el pago del trabajo de ese vecino en su propiedad y en sus cultivos.

LA LUCHA DEL ESTANCO Uno de los cultivos que se desarrollaba por la aptitud de la tierra, es el de la caña de azúcar; y en consecuencia, para utilizar la caña, se montaron trapiches en los que se molía y obtenía su jugo con el que se fabricaban panelas y, en algunos casos, aguardiente, en pequeños alambiques domésticos.

Era la época en que los productores de aguardiente estaban obligados a vender toda su producción al Estado que tenía la Dirección Nacional de Estancos, dependencia del Ministerio de Economía, que mantenía el monopolio del alcohol y de la sal.

Resultaba imposible controlar la producción de aguardiente en la zona rural, sin carreteras y a lomo de caballo; los comerciantes, compraban en los trapiches el aguardiente y lo transportaban a lomo de acémilas en zurrones a los pueblos, por caminos escondidos en una aventura que se repetía con gran sufrimiento. En los pueblos se vendía, también a escondidas el aguardiente para consu-

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mo de los bebedores.

con menos dificultad.

Pero, no faltaban ocasiones en que los guardas de estanco, que eran los empleados del gobierno encargados del control de ese comercio, una especie de policía armada, encontraran a alguien en posesión de aguardiente de contrabando (pues no había sido comprado en los almacenes del Estanco); intentaban capturarlo para meterlo en prisión, pero en muchas ocasiones los contrabandistas se defendieron a bala para no perder su libertad.

La información del señor Alcívar nos dice que en 1935, la carretera de verano avanzó hasta el sitio La Morenita, cercano al actual Flavio. Fue construida a pico y lampa, nos dice, porque entonces no habían llegado los tractores; el efecto de ese trabajo fue despertar un enorme interés en Chone, por contar con la carretera hasta Quito, que funcionarios del gobierno habían calificado de imposible de construir por las características del terreno muy quebrado y pantanoso.

LA CARRETERA Ya habíamos establecido con el señor Ángel Alcívar que la movilización era el mayor problema del sitio Pescadillo y de la parroquia Flavio Alfaro. En invierno se necesitaban dos días para llegar a Chone, y uno en verano.

Cuando llegaron los primeros camiones para reemplazar a las acémilas en el transporte de carga y pasajeros, al término del período lluvioso eran los transportadores quienes abrían las carreteras para reiniciar su negocio paralizado durante el período de lluvias.

Iniciaban su viaje llevando piedra y maderos para salvar los pasos pantanosos y los puertos en los ríos, con puentes provisionales o con pasos por el agua, ayudados por la piedra. Así se realizaban los sufridos viajes, hasta que los soles del verano secaban esos caminos y se podía circular

LOS RAIDISTAS Esa respuesta al pedido de Chone despertó el espíritu aventurero de un grupo de jóvenes de Chone, los cuales se propusieron hacer el viaje en carro, aunque no estuviera construida la carretera.

Ellos eran:

Carlos Alberto Aray Juan de Dios Zambrano Plutarco Moreira que era el chofer y mecánico de la expedición

Emilio Hidalgo, y

Antonio Aray, el médico.

Compraron un carro en cinco mil sucres y después de una larga preparación iniciaron la aventura que se desarrolló con mil peripecias; inclusive, ante la imposibilidad de continuar en el carro, lo desarmaron parcialmente y se

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embarcaron en una balsa para avanzar hasta el sitio en que podían continuar en el vehículo que nuevamente fue puesto a punto.

Con gran decisión, los raidistas llegaron a la capital del país y fueron recibidos por sus comprovincianos residentes en esa ciudad, con gran alegría y despliegue de fiesta; llegaron al hotel Savoy y a poco se unió gente que fuera transportada por 17 carros del Consejo Provincial de Manabí, cuyas autoridades insistirían en la necesidad de la obra, Se abrieron las puertas del gobierno que tomó la decisión de construir la vía.

Tres empresas iniciaron inmediatamente la construcción: INCA, Guarderas y Granda Centeno; esta última, era propiedad de don Antonio Granda Centeno, nativo de Calceta y que había crecido notablemente como constructor de carreteras.

Con la carretera que avanzó hasta su culminación, Flavio Alfaro comenzó a demostrar la pujanza de su producción agropecuaria; los agricultores que habían adquirido sus terrenos, acentuaron la explotación de sus fincas y se amplió el movimiento económico. Aparecieron más negocios y fue creciendo la población que, sin embargo, no lograba satisfacer las necesidades más sentidas de la creciente población, pues el cantón Chone no lograba dedicar las inversiones necesarias para asegurar servicios básicos en la población que de recinto Pescadillo de Chone, había

pasado a depender de la parroquia Ricaurte y en 1940 había sido convertido en parroquia del cantón Chone.

EL NUEVO CANTÓN Nos cansamos de ser parroquia dice el señor Alcívar, y comenzó la lucha para convertirnos en cantón y lograr la independencia que haga posible lo que la población anhelaba.

En ese momento aparece don John Cuadros Pazmiño, hombre que había incursionado en la política cantonal y que había sido electo concejal del cantón Chone y posteriormente Vicepresidente del Concejo. Hizo contacto con otros políticos, inclusive de la relación de la familia de su esposa que es quiteña.

Y se planteó en el Congreso Nacional, el proyecto de Ley de creación del cantón Flavio Alfaro, en 1986. El diputado chonense, don Enrique Delgado Coppiano ayudó en la legislatura al trámite del proyecto que fue aprobado conforme a la Ley, pero el Presidente León Febres Cordero lo objetó totalmente Después de un año se volvió a tratar el tema que, con los votos suficientes aprobó la creación del cantón el 23 de marzo de 1988, publicándose en el Registro Oficial No.925 de 29 de abril de 1988, con lo que comenzó la vida cantonal.

El señor John Cuadros, había estudiado en Quito, en la

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Universidad Católica, y regresó a su tierra para fundar un colegio particular que hasta ahora es una destacada institución educativa en pleno funcionamiento. Para las elecciones municipales, participó como candidato en una de las listas y triunfó, para acceder a la primera Presidencia del Concejo Municipal de Flavio Alfaro, y poner las bases para el desarrollo del cantón, con el alcantarillado sanitario y pluvial.

Sr. AUGUSTO CEDEÑO Llegó en 1961, cuando en la parroquia Flavio Alfaro había 123 casas de las cuales unas cinco tenían cubierta de cinc.

Estaban delineadas las calles Agustín Zambrano, Amazonas, Rafael Alcívar y Manabí, solamente.

Dedicó especial preocupación a la educación y creó las condiciones para el posterior desarrollo de las actividades municipales que alcanzan pleno desarrollo en el tiempo actual, cuando el cantón ha cumplido 22 años de vida.

El señor Alcívar no quiere terminar su testimonio sin asegurar que el futuro del cantón se muestra prometedor por la calidad de sus gentes y la fertilidad de su suelo, además de la dirección que toma la Municipalidad, bajo la conducción de un joven de gran visión de futuro como Jaminton Intriago.

Era un pueblo pequeño y sus habitantes se dedicaban a sus actividades productivas lo que configuraba una vida bastante monótona; para romper esa monotonía, algunos hombres se reunían para, sentados en los soportales, jugar naipes y mantener largas conversaciones salpicadas de chistes y de bromas sanas.

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Don Augusto Cedeño llegó a Flavio Alfaro como jefe de la brigada de la Campaña de Erradicación de la Malaria y, en cumplimiento de sus obligaciones, debió recorrer todo el cantón, incluyendo su zona rural. Las dificultades por la falta de carreteras no eran obstáculo para que los trabajadores de la campaña lleguen a todas las comunidades con su mensaje de salud, dice Cedeño.

La campaña de erradicación de la malaria, era uno de los proyectos del Programa Integral de Salud de Manabí, PISMA, que fue creado en razón de que la Organización Panamericana de la Salud determinó que en Manabí imperaban pésimas condiciones de salud. Se trataba de un programa piloto que contaba con apoyo de la organización internacional y que en diez años tenía que mostrar los cambios en los indicadores de salud de la provincia.

Uno de esos indicadores era la prevalencia de la malaria que, con el rociado de insecticida buscaba eliminar los vectores y romper la cadena de contagio, reduciendo así la incidencia de la enfermedad.

Se formaron brigadas que eran ubicadas en diferentes lugares de la provincia para realizar su trabajo; cada trabajador, equipado con una bomba que la llevaba sobre sus espaldas, procedía al rociado tanto al exterior de la vivienda como al interior; se aprovechaba la fumigación para hablar con las amas de casa para darles algunas normas destinadas a evitar la picadura de los mosquitos, como el

uso del mosquitero.

Aún en esa época, se requerían dos días para llegar a Chone en el invierno, por lo que las comunidades como Flavio Alfaro, debían ser autosuficientes, para que sus moradores encuentren lo que requerían para la vida en la propia parroquia. Si esa era la realidad de la cabecera parroquial, ya se puede imaginar cuál lo sería para los sitios de los alrededores. Desde siempre, uno de los mayores problemas de lo que hoy es el cantón Flavio Alfaro, ha sido la vialidad.

El señor Cedeño recuerda que en Flavio se comercializaba ganado, cacao, tagua y palma real; el ganado era negociado en sitios especiales donde se mantenían encerrados y los productos eran adquiridos en las tiendas que tenían una mayor demanda los fines de semana. Los compradores acopiaban los productos y lo enviaban a Chone para la venta final.

El haber trabajado en la lucha contra la malaria fue muy importante en la vida de Augusto Cedeño, pues se hizo conocer por las familias campesinas y, transcurridos unos años, obtendría los votos suficientes en el sufragio, para llegar a la Presidencia del Concejo Municipal y ser después, el primer Alcalde del cantón Flavio Alfaro.

Habiendo triunfado en las elecciones, se posesionó como Concejal Principal y, reunido el Concejo, lo elige su Pre-

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sidente, función en la que permaneció un mes, pues la Ley determinó que todos los cantones del país tengan un Alcalde y esa función correspondía al Presidente del Concejo.

mos que pagar comisión de compromiso que Contraloría pretendió glosarnos, pero comprobamos que el trámite había sido realizado de acuerdo con la Ley y que ese pago era también totalmente legal.

Su principal preocupación en la dirección de la Municipalidad, fue intentar dotar a Flavio de agua potable suficiente y a ello dedicó su esfuerzo. Tenía una buena relación con el Presidente de la República que era Fabián Alarcón y pudo conseguir el aval del gobierno para un crédito internacional, en una época difícil para la economía nacional, pues el petróleo principal fuente de financiamiento del Estado- había llegado a los siete dólares el barril.

Lo cierto es que se perdió la oportunidad de construir el sistema de agua potable para Flavio Alfaro, en esa oportunidad.

Viajó a los Estados Unidos y utilizó sus contactos para entrar en negociaciones con el Mellon Banck, que aprobó un crédito por 5.5 millones de dólares para financiar el sistema de agua potable, en base del proyecto técnico que llevó consigo. Pero, entre las condiciones del crédito estaba la participación del Concejo que, como contraparte, debía aportar 750 mil dólares.

Como el Concejo no tenía esa disponibilidad de capital, recurrió al gobierno que, si bien aceptó otorgarle el aval, le negó el aporte para la contraparte, lo que imposibilitó que se concretara el financiamiento. En los cuatro años de mi administración recibí menos de 500 mil dólares, dice don Augusto; de dónde iba a conseguir los 750.000 para la contraparte. Así se perdió el crédito por el que tuvi-

Nuestros esfuerzos se dirigieron entonces a la electrificación. Con los escasos recursos económicos con que contábamos, logramos construir algunas líneas de conducción hacia las comunidades rurales; previamente habíamos conseguido la construcción de la subestación de transformación que hacía posible la distribución de la energía que venía de Manta.

Por lo demás, la vida en el cantón continuaba con la sencillez de siempre; se veía que se producía un crecimiento considerable de todas las actividades y también de las necesidades de la población; las calles de la ciudad aún no habían recibido la cobertura de hormigón que tienen ahora; algunos tramos eran adoquinados, muy pocos, por lo que en la estación lluviosa se sufría mucho por el lodo y por el polvo en la temporada seca.

Habríamos querido superar esos inconvenientes, pero no había recursos económicos; ni siquiera el gobierno nacional estaba en condiciones de ayudarnos por las dificulta-

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des que mencioné, dice; es que no había llegado aún la Ley del 15% que financia las arcas municipales con recursos del presupuesto general del Estado.

Mirando al futuro, don Augusto Cedeño confía en que éste siempre será mejor, porque se nota el avance del cantón; ahora hay mejores caminos y, según ha informado el Alcalde, se trabajará intensamente en su reconstrucción, pues se pondrá en funcionamiento una mina de materiales inertes, con equipo moderno para producir el material para las carreteras; también se planifica una planta asfáltica, que permitirá que los caminos rurales sean asfaltados y con ello la movilización de la población y los productos, será mucho más fácil, puntualiza.

Pero, la seguridad en un mejor futuro se cifra en la calidad de la población, que es trabajadora y dedicada plenamente a ello; un poco de impulso por parte del gobierno a través del crédito, permitirá incrementar la producción agropecuaria que inclusive podría dar paso a la industrialización, creando puestos de trabajo para la gente joven.

Adicionalmente, no podemos olvidar que los jóvenes son mucho mejor preparados; gran parte de ellos llegan a la universidad y egresan con profesiones que les permiten ser generadores de nuevas empresas e intervenir en negocios que significan un aporte para la economía del cantón.

Sin duda, termina Cedeño, el futuro de Flavio se mira con optimismo porque las condiciones están dadas para que se asegure el progreso sostenido en el tiempo.

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SRA. RITA MARÍA ZAMBRANO V. Don Miguel Agustín Zambrano Meza es uno de los primeros habitantes de lo que sería el recinto Pescadillo en el cantón Chone. Se cuenta que al terminar el siglo XIX arribó por estas tierras don José Eliseo Saldarriaga Castro, hombre decidido, natural de Charapotó. Llegó, se detuvo en una elevación del terreno y levantó su brazo para decir: Estas tierras son mías, desde la quebrada El Diablo, hasta la quebrada Rancho Quemado.

del siglo XX, las tierras son vendidas a don Agustín Zambrano, natural de Canuto, quien había llegado a Pescadillo, huyendo de las consecuencias de un lío de faldas. La venta se concretó en dieciséis sucres, que pagó con 36 jornales, es decir, con ese número de días de trabajo.

Don Agustín también se dedicó a la explotación del caucho, la tagua y la palma real, desde antes de ser propietario de las tierras. Hombre trabajador vio su futuro en esta zona y formó su hogar al contraer matrimonio con la señora María Anchundia Cornejo, con quien tuvo un hijo, de nombre Ramón Zambrano Anchundia, quien heredó la propiedad de su padre.

Actualmente vive en Flavio Alfaro la señora Rita María Zambrano Valenzuela, nacida en Flavio Alfaro, quien es nieta de don Agustín Zambrano, hija de Ramón Zambrano Anchundia y, por lo tanto, pertenece a las familias más antiguas de la población.

Ese tipo de posesión era posible antes de la colonización de las tierras de la república; luego de esa posesión de hecho, se realizaba un trámite para legalizarla ante las autoridades. Se entiende que la posesión de Saldarriaga fue reconocida por las autoridades, porque ya en los albores

Sus recuerdos la ubican en 1945, cuando la población sólo se distinguía por el espacio que ahora es un parque y que entonces era un terreno con algunos árboles y jardines cultivados por las damas de la población; a su alrededor se ubicaban las casas de la casi totalidad del pueblo.

Desde luego, las calles no habían recibido ningún tratamiento y se convertían en lodazales en la estación lluviosa. Pero, recuerda doña Rita María, los fines de semana

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llegaba bastante gente al pueblo, desde las fincas de los alrededores; venían cargados de productos: el infaltable caucho, la tagua y la palma real; ya comenzaban a salir productos de la agricultura de ciclo corto que enriquecían los suministros para la gente del pueblo.

Era pintoresco ver en el pueblo una gran cantidad de caballos atados a las talanqueras y otros, montados por personas que llegaban del campo. En invierno las acémilas mostraban el lodo en su piel, lo que era prueba de los sufrimientos que se pasaba al trasladarse de un lugar a otro.

En el pueblo no había otras distracciones que una que otra reunión familiar en alguna de las casas; las mujeres que pasábamos todos los días ocupadas en los quehaceres de la casa, a veces íbamos de visita; los hombres, algunas noches se reunían a jugar naipes y conversar los temas que les inquietaban.

Tampoco se podía pensar en buscar esas distracciones en Chone, pues se necesitaba dos días para llegar a esa ciudad; los viajes quedaban relegados a los asuntos muy importantes e inevitables.

Doña Rita María considera que su abuelo, don Agustín, fue el verdadero fundador de Flavio Alfaro, pues con el señor Rafael Antonio Alcívar, eran dueños de los terrenos donde se asienta el pueblo; ellos donaron las tierras no solamente para el parque y las calles, sino para que las

personas que llegaban a trabajar al pueblo, construyeran sus casas.

Después de haber vivido las dificultades de todo orden que significaba la carencia de todo servicio, para doña Rita, Flavio Alfaro ha dado un salto en el proceso de progreso que le corresponde en la historia; y el futuro, dice, depende del esfuerzo que la población, sobre todo la gente joven haga para alcanzar su propia realización y mejorar sus condiciones de servicio a la colectividad.

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SRA. GUADALUPE ROMO PROAÑO

ron a Flavio Alfaro, entonces parroquia del cantón Chone.

Es nacida en Quito, donde realizó sus estudios de nivel medio en el Colegio Pichincha. Por las relaciones de su familia con la política, conoció a John Cuadros Pazmiño, manabita que estudiaba en la Universidad Católica, pero que en forma permanente tenía en su mente las aspiraciones de su tierra.

Su primera acción fue la creación del Colegio Particular Agustín Zambrano, que se constituyó en el primer colegio que se creaba en una parroquia rural.

Los contactos de John Cuadros con sus coterráneos y el análisis de los problemas que no habían sido superados, cimentaba más la idea de que se necesitaba que la parroquia fuera elevada a la condición de cantón, para contar con la Municipalidad y con rentas propias que puedan ser aplicadas a la solución de los principales problemas de la comunidad.

Es necesario señalar que para esa época, la parroquia aún no contaba con un sistema de suministro de agua y tampoco había el alcantarillado sanitario; las calles eran de tierra y durante el invierno se convertían en lodazales; si ese era el estado de la cabecera parroquial, los campos se encontraban aún más abandonados; no había caminos carrozables y, cuando llegaban los intentos del Concejo de Chone para abrir las carreteras veraneras, ya se había consumido la mayor parte del verano.

Tenía quince años cuando contrajo matrimonio con Cuadros, hombre visionario que tenía claras ideas sobre cómo fundamentar el desarrollo de los pueblos. En 1966 llega-

Tantas eran las necesidades que el pueblo se aglutinó alrededor de la idea de buscar la cantonización. Se constituyó un Comité pro cantonización, que eligió como su Presidente a John Cuadros Pazmiño.

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Gobernaba el partido socialcristiano, con León Febres Cordero en la Presidencia de la República; de la ID. era Prefecto Provincial el Ing. Richard Guillem y el señor Enrique Delgado Coppiano se encontraba en el desempeño de una de las diputaciones de Manabí, en el Congreso Nacional.

En ese panorama se elaboró en el despacho de Enrique Delgado, el proyecto de ley para la creación del cantón Flavio Alfaro; fue presentado por el diputado chonense de la bancada de la Izquierda Democrática, que tenía la mayoría en el Congreso.

El trámite de una ley en el Congreso nunca fue fácil; tenía que ser analizado por una de las Comisiones, que solicitó el informe de ley al Consejo Provincial, momento en que fue muy útil la presencia del Ing. Guillem; con su informe se elaboró el de la comisión; se llevó a cabo el primer debate, que aprobó el proyecto; volvió a la Comisión para el segundo análisis con las observaciones de los congresistas, y se dio origen al informe para segundo debate, en el que también se logró la aprobación. Con ello, el proyecto ya estaba listo para ser enviado a la Presidencia de la República para su sanción.

Hasta antes de la vigencia de la actual Constitución, los proyectos de cantonización podían ser presentados por los legisladores; ahora es un derecho privativo del Presidente de la República, y las condicionantes son más exi-

gentes, como el volumen de población que debe ser de 50.000 habitantes.

Cuando el proyecto fue aprobado en el Congreso, corría el año 1987 y gobernaba el país el Ing. León Febres Cordero, con el Partido Social Cristiano. Recibió el proyecto del Congreso y lo objetó totalmente, lo que impedía que en un año se volviera a presentar un proyecto con la misma finalidad.

Para la época, funcionaba el Pleno de las Comisiones Legislativas Permanentes, que estaba integrado por los 35 diputados que eran miembros de las cinco comisiones del Congreso; este organismo tenía las mismas atribuciones del Congreso Nacional y, por lo tanto, conoció la objeción del Presidente a la Ley de creación del cantón Flavio Alfaro.

Cuadros y los dirigentes que portaban el sentimiento de los habitantes de Flavio, trabajaron activamente en ese organismo para, transcurrido un año de la objeción presidencial, presentar un nuevo proyecto con el mismo fin. La presentación la hizo el diputado Delgado Coppiano, quien presidía la poderosa Comisión de lo Presupuestario, de la que eran miembros también, otros dos diputados choneros: René Vargas e Ítalo Colamarco. Previamente, Delgado y sus colegas de la comisión habían cabildeado con el Ministro de Finanzas para evitar una nueva objeción presidencial. Se aprobó nuevamente el proyecto y esta vez,

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recibió la sanción del Presidente Febres Cordero.

tagio de enfermedades graves.

La Ley dispone que se realicen elecciones en el nuevo cantón; así ocurre y participa como candidato en la lista de la ID, don John Cuadros Pazmiño que triunfa ampliamente y es electo junto a cuatro de sus conmilitones. Así, llegó a la Presidencia del primer Concejo Municipal de Flavio Alfaro, y fueron concejales entonces:

El Presidente del Concejo consiguió 68 partidas presupuestarias de profesores primarios, que se utilizaron en la reapertura de cincuenta escuelas que habían sido cerradas por diferentes razones. El Municipio apoyó a las escuelas con la reparación de sus locales, la dotación de pupitres y material didáctico y con algunos profesores contratados por la Municipalidad.

Sr. Bolívar Mendoza, de la DP. John Cuadros Pazmiño, Efrén Loor, Pedro Cedeño, Wilmer Zambrano, Enrique Cedeño y Juan Zambrano, de la ID. Las principales preocupaciónes de la administración municipal fueron la salud y la educación. Afortunadamente, la mayoría de la Izquierda democrática, contaba con la simpatía del nuevo gobierno de igual orientación política.

También es la época en que los diputados recibían recursos económicos de la denominada PARTIDA DE OBRAS DE INTERÉS PROVINCIAL, lo que les permitía decidir sobre el financiamiento de obras públicas que consideraban importantes para su provincia.

Con esos dos apoyos fue posible la construcción de un sistema de alcantarillado sanitario y pluvial que fue un importante avance en la salud preventiva de Flavio Alfaro, pues ya hubo una forma de evacuación de las excretas que muchas veces son fuente de contaminación y de con-

Se logró adquirir la casa municipal que se mantiene hasta ahora como sede de la Municipalidad, se compró la primera volqueta para los diferentes trabajos y se consiguieron 40 bonificaciones para otros tantos alfabetizadores que fueron distribuidos especialmente en los sectores campesinos.

Mi gente primero era una frase constante de John Cuadros cuando fue Presidente del Concejo, dando a entender su permanente preocupación por la situación del pueblo.

En coordinación con su esposa, John Cuadros puso en acción las Redes Comunitarias que cuidaban de la salud y la nutrición de los niños de 0 a 5 años, con ayuda del Instituto Nacional del Niño y la Familia.

Las experiencias que recuerda esta quiteña esposa de un político manabita, le traen emociones, porque en cada ac-

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ción de su marido ve reflejada su formación dedicada al servicio de la colectividad. Yo trataba de ayudar en todo lo que podía y, en casa, procuraba que la tranquilidad ayudara a recuperar energías y creara la serenidad necesaria para las grandes decisiones, dice.

SEÑOR JAN GONZAGA OREJUELA M. Se trata de un profesor con 52 años de residencia en Flavio Alfaro, quien reconoce que la vida antaño era muy difícil en este lugar, por las enfermedades y las dificultades de transporte. Sin carreteras y sin establecimientos para atender la salud quebrantada, dice, una enfermedad era casi la antesala de la muerte. Los pacientes eran transportados en hamacas en busca de una medicina que los salve.

Y hay que recordar que no teníamos agua potable ni alcantarillado, por lo que las condiciones de salud eran de lo más precarias, dice.

A mí me tocó sufrir las dificultades de la movilización,

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desde muy joven, pues fui a estudiar en Chone, en el Eugenio Espejo, donde nos formábamos maestros, con conocimientos en todas las áreas, para posteriormente en las comunidades rurales servir de consejero y maestro no solamente en los temas del programa, sino además en salud, agricultura, cocina y hasta en el arreglo personal.

Para llegar a Chone se utilizaban dos días de viaje; por eso, los pocos estudiantes de por acá, nos quedábamos en Chone varios meses y hasta todo el año escolar. Yo me gradué, pero no me fue posible ingresar al Magisterio, a pesar de que los graduados en el Eugenio Espejo tenían gran aceptación por la calidad de la enseñanza; yo encontré una propuesta de la compañía William Brothers que transportaba la tubería para el oleoducto transecuatoriano, para trabajar en el oriente, y la acepté.

Después, fui a trabajar a Olmedo, cuando casi que no había carretera y la situación de la salubridad y las demás actividades era como copiada de Flavio. Trabajé también en San Ramón de 10 de Agosto y cuatro años después, llegó gente de Flavio que me invitó a regresar.

Desde mi regreso me uní a las personas que reclamaban la cantonización de Flavio y lo conseguimos gracias a la ayuda de mucha gente y liderados por John Cuadros Pazmiño.

La elevación a cantón significó un enorme estímulo para

el progreso de la ciudad; se multiplicaron los negocios, vino más gente, mejoraron las casas y se dinamizó la economía con un activo comercio de toda clase de productos.

El futuro lo veo con mucho optimismo. La agricultura y la ganadería se pueden desarrollar sin limitaciones en nuestro cantón; la tierra es fértil y se encuentra en manos de los productores; si ellos consiguen ayuda financiera y técnica del gobierno, seguramente se va a multiplicar la producción y se generará más trabajo que pondrá a circular más dinero en el comercio.

Necesitamos el apoyo del gobierno y de la acción de la Municipalidad que trabaja con buen rumbo; sus proyectos y las realizaciones demuestran que saben lo que hay que hacer; el campo necesita carreteras estables, la ciudad necesita agua potable y puestos de trabajo; por ahí van las realizaciones de la Municipalidad y con ello es seguro el adelanto de nuestro progreso.

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SRA. ESPERANZA GARCÍA EGÜEZ Tiene 74 años de edad y es viuda del señor Trinidad Antonio Cedeño Arteaga, técnico electromecánico, el primero que llegó a Flavio Alfaro.

De ocho años de edad llegó ella a Flavio, es decir hace 66 años, en 1944, poco después de que se había creado la parroquia Flavio Alfaro, por acción del Concejo Municipal de Chone. Ella llegó con sus familiares, los que instalaron su hogar e iniciaron una vida de trabajo en lo que ocupaba a la mayor parte de la población, es decir, en la recolección del caucho, la tagua y la palma real que crecían de manera silvestre en las montañas.

A los 16 años se casó con Trinidad Antonio Cedeño que vino de Chone, como Jefe de la Planta eléctrica que se montó en este lugar. Junto a la planta eléctrica se realizó la construcción de las líneas de distribución, para que la población pudiera contar con la indispensable energía eléctrica.

Cedeño fue el encargado de armar el equipo de generación que vino de Chone, hasta ponerlo en funcionamiento, lo que fue un acontecimiento en la población que padeció por décadas de la obscuridad.

Era una planta eléctrica pequeña que funcionaba a base de diesel y, como la operación resultaba costosa, se res-

tringía el funcionamiento solamente a cuatro horas diarias, de 6 de la tarde a 10 de la noche y, en los días de fiesta, se extendía hasta la media noche.

De todas maneras, era una formidable ayuda, porque ya las familias podían instalar iluminación de sus casas y algunos elementos que mejoraban la vida, como los radios y los tocadiscos, dice.

Antes, imperaba el kerosene, que es un combustible derivado del petróleo, menos volátil que la gasolina. Con él se alimentaban las lámparas de mecha y las petromax que tenían una luz más limpia. Inclusive salieron al mercado las neveras que funcionaban con una mechita de kerosene, pero tenían muy poca salida.

Otra limitación era que las instalaciones solamente atendían la zona central de la población que era aún pequeña; no se hicieron ampliaciones, porque antes de hacerlas ya la planta había dejado de funcionar.

Mientras tanto, el gobierno por intermedio del INECEL, comenzaba a construir centrales termoeléctricas grandes y líneas de transmisión. Se construyó la línea de Manta a Portoviejo y a Chone, que se alimentaban con la energía que producía la planta Miraflores, donde habían unos enormes generadores que se movían con búnker y otras plantas a diesel. Llegó a producir 64 megavatios de energía, pero no era suficiente para atender las necesidades

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de la provincia.

Entonces se montaron los buques-planta que eran unos barcos acoderados en el muelle que contaban con equipos de generación que aprovechaban el agua del mar para producir electricidad. Con ese apoyo, llegó la energía a Flavio Alfaro, ya sin restricciones y de manera continua.

Don Antonio Cedeño quedó en Flavio, aunque la planta eléctrica volvió a Chone; él se dedicaba a visitar las parroquias y a reportar el estado de las instalaciones, además de liderar el sistema de atención de reclamos y reparaciones en la ciudad.

Trabajó hasta la jubilación en la década de los 90 y falleció el 11 de enero del 2000.

Su vida fue siempre sacrificada porque tenía que movilizarse obligatoriamente por su trabajo, y debía utilizar esas carreteras llenas de lodo; a toda hora estaba disponible para las reparaciones eléctricas y para la reparación de los motores de la ciudad.

A más de su trabajo en el campo eléctrico, fue por muchos años jefe del Cuerpo de Bomberos que es una institución que exige mayor sacrificio aún, pues hay que llegar donde quiera que se presenta un incendio para combatirlo.

Fue un gran alivio la construcción de la carretera dice

doña Esperanza; el Dr. Velasco Ibarra fue su artífice y por eso el pueblo le guardó gratitud siempre.

Ahora, Flavio está progresando a ojos vistas; hay bonitas ciudadelas, sus calles pavimentadas con hormigón, su multicolor parque, mejores edificios, la educación ofrece varias alternativas y, si comparamos con el nivel de desarrollo de otros cantones, Flavio está mejor en menos tiempo. Y el cambio se produce hace cinco años apenas, desde que es Alcalde el Ing. Jaminton Intriago.

El futuro, con el trabajo de todos, seguramente será mejor y nos entregará mejores resultados en todas las actividades, termina.

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ESPOSOS CUADROS CASTRO Don Jorge Isaac Cuadros Loor, de 83 años de edad y la señora Edis Margarita Castro Zambrano de Cuadros, forman un matrimonio que se ha mantenido unido por décadas y que han sido protagonistas de la historia de Flavio Alfaro, desde 1948 cuando llegaron a la parroquia.

La pareja tuvo nueve hijos; 5 varones y 4 mujeres. Ahora ya tienen bisnietos y con todos ellos, la familia más cercana supera las 100 personas.

Recuerdan también del pasado, los inviernos fuertes que dejaban las calles como lodazales y también la sequía que impedía el desarrollo de los cultivos para subsistencia. En uno y otro caso se sufría mucho, dice.

Recuerdan a los comerciantes de la época, Julio Cuadros, Adolfo Mata y Tobías Rivadeneira.

Don Jorge Isaac, era herrero de profesión y en Flavio puso su taller en el que fabricaba los estribos, herraduras y frenos para los caballos; forjaba piezas de diferente forma para el uso que se requería y se mantenía activo; sus hijos le ayudaban con el fuelle, mientras el maestro manejaba la fragua, el yunque y el martillo.

Ellos nos cuentan que entonces Flavio era un pequeño caserío en el que ya se encontraban establecidos algunos ciudadanos dedicados a diferentes actividades; ellos recuerdan a don Julio Cuadros, Adolfo Mata, Luis Moreira, Antonio Cedeño, Antonio Farías, Tarquino Valenzuela, Pedro Vega, Tobías Rivadeneira, Reinaldo Zambrano, Pastora Cuadros y Miguel Zambrano.

La profesión de herrero ya va en proceso de desaparecer; ya no se utiliza la acción de forjar; ahora, se compran los perfiles que vienen con su forma de fábrica y a base de suelda se realizan las combinaciones que sean necesarias.

En la parroquia, Jorge Isaac desempeñó la función de Teniente Político, en cinco ocasiones, cuando eran Presidente del Ecuador, el Dr. Velasco Ibarra y el Dr. Jamil Mahuad.

Doña Édis Margarita, en cambio, desempeñó la función

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de profesora, en la que continúa a pesar de su avanzada edad. En 1977 fundó la Escuela Particular Mixta Ab. María Teresa Loor de García y en 1987 fundó también el Centro de Formación Artesanal Flavio Alfaro que continúa en su labor de formar artesanas en las especialidades de belleza y corte y confección.

Hasta ahora han egresado 21 promociones en las dos especialidades con más de 400 profesionales que fácilmente encuentran colocación en el mercado del trabajo, porque están bien preparadas.

El primer Concejo Municipal, luego de la cantonización, emprendió en la dotación del alcantarillado, luego de que el CRM hiciera las instalaciones para el agua entubada, obras que son muy importantes. Ahora, como ha crecido la población, se debe realizar nuevos proyectos para que todos podamos contar con el agua y el alcantarillado, dicen. Creemos dice Jorge Isaac, que el futuro será mejor porque el Alcalde Intriago ha puesto ñeque en el desempeño del cargo y está transformando realmente nuestro cantón que tiene un gran potencial por la calidad de la tierra que permite el desarrollo de la agricultura y la ganadería. Es posible también que haya minas que cuando sean explotadas traerán riqueza al pueblo y la otra actividad que se desarrollará es el turismo, porque el cantón tiene atractivos que se darán a conocer y atraerán a la gente.

JESÚS EVERSIO ZAMBRANO Z. Tiene 62 años de edad y es nativo del sitio Perro Macho del cantón Chone. Llegó de cinco años de edad y se formó para servir en el Magisterio, como Profesor Particular, trabajo en el que aún continúa con el mismo entusiasmo del comienzo.

Este es un cantón muy extenso, dice; y con un terreno agreste, por lo que la vialidad es fundamental para el desarrollo; no se han desarrollado canteras en el área, lo que vuelve terriblemente costosa la operación de darles estabilidad a las carreteras de verano, pues el material tiene que ser transportado desde muy lejos.

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Tengo entendido que uno de los planes de la actual administración municipal, es abrir una cantera y dotarla del equipamiento para producir material pétreo para las carreteras; también planean complementarla con una planta asfáltica, porque el Alcalde quiere que los caminos rurales sean asfaltados.

En los últimos años se ha dado un considerable impulso a la construcción de carreteras, por lo que esos dos planes coordinan perfectamente con la política municipal, acorde con la condición de un cantón agrícola, con una importante producción principalmente de café y de cacao fino de aroma.

Hablando de la historia, en 1888 comienzan a llegar a la zona los caucheros, es decir los trabajadores que se dedicaban a la recolección del caucho silvestre, junto con la palma real y la tagua; hasta entonces, los terrenos no tenían dueño reconocido y los trabajadores entraban a la montaña y realizaban su tarea sin obstáculos.

Pero, para 1919 se produce ya la legalización de la propiedad de algunos terrenos que habían sido denunciados por los primeros habitantes permanentes.

Los recolectores de productos continuaban su tarea porque el mercado era interesante para los mismos; los comerciantes los compraban en Flavio y enviaban su carga a Bahía de Caráquez, con muchas dificultades, pues hasta

Chone debía viajar la carga a lomo de bestia y en Chone embarcar en una lancha que viajaba hasta Bahía, donde se ubicaban los exportadores. Uno de los comerciantes locales era don Antonio Cedeño, papá de Vicente Cedeño que fue Presidente del Concejo.

La decisión de elevar al sitio Pescadillo a la categoría de parroquia surgió porque comenzaban a presentarse problemas limítrofes para el cantón Chone y había que fijarlos en una Ordenanza; por el nombre se produjo una discusión, pero como era la época de la euforia alfarista debido a la proclama que se realizó en Chone, antes que en Guayaquil, se tomó el nombre de Flavio, en el entendido que era hermano del General Eloy y puesto que ya se había nominado a una parroquia con ese nombre.

Como dijimos arriba, la vialidad es fundamental para el desarrollo. Como no había carreteras estables, había que utilizar las vías veraneras; entonces, los dueños de los transportes, durante la estación lluviosa se mantenían paralizados; cuando dejaba de llover trataban de reiniciar lo más pronto su actividad, su negocio; no podían esperar a que la Municipalidad abriera las carreteras, porque esa operación a veces consumía la mayor parte del verano.

Por eso tan pronto dejaba de llover, cargaban piedra y madera en sus carros y se lanzaban a la aventura que obligaba a realizar reparaciones precarias en la vía, para poder pasar ya sea en lodazales o en los puertos de los ríos,

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donde no había puentes.

Tres eran los “mixtos” que realizaban el transporte entre Flavio y Chone; cuando ya hubo carretera estable, se multiplicaron.

En 1960, la empresa Granda Centeno comenzó a construir el terraplén de la carretera El Carmen - Flavio Alfaro y tres años después la compañía INCA construyó el tramo Flavio Alfaro La Crespa.

La construcción en La Crespa significó muchas dificultades, porque es una montaña de piedra que tenían que excavar con dinamita; el peligro para los trabajadores era notable y aún los maquinistas trabajaban con especiales precauciones.

Pero, a pesar del esfuerzo que hizo el gobierno de entonces, siempre la carretera estaba en mal estado; es que mientras se hacía mantenimiento en un tramo, los demás se deterioraban. Es el gobierno actual que parece que entregará a Manabí carreteras para que duren muchos años, pues están cubiertas con hormigón.

Con ese mismo material se han construido las calles de Flavio Alfaro, en esta administración municipal, dice don Avercio; y aquí vale contar una anécdota: primero, yo no voté por el Alcalde Jaminton Intriago; desde la primera administración, yo construí en este sitio casa, pero la calle

era un lodazal; entonces, pedí que por favor echaran un poco de piedra y lo hice a los sucesivos Presidentes del Cabildo. Todos me ofrecieron, pero ninguno cumplió. Ya casi sin esperanza le pedí al actual Alcalde y mire usted no fue una volquetada de piedra, sino la calzada de hormigón lo que conseguimos. Nos faltan solamente las aceras que ya llegarán, dice.

Haciendo un examen retrospectivo, hay que señalar que de 1970 a 1981, nadie ponía nada para mejorar la vida en la población. Los moradores, con plata propia pusimos piedra en los lodazales. Desde el 2005 se nota un fuerte impulso de progreso que se mantiene y estoy seguro de que el futuro significará el logro de las más caras aspiraciones de los habitantes de este pueblo que se perfila como uno de los cantones más progresistas de la provincia.

Lo que hay que esperar es que en las futuras elecciones no se produzcan errores que nos lleven a un retroceso, termina nuestro entrevistado.

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DON PEDRO CEDEÑO CONFORME Con 104 años a cuestas, encontramos a don Pedro Cedeño Conforme, en el sitio Xavier, distante unos 8 kilómetros de Flavio Alfaro; nacido en 1907, don Pedro camina erguido por el camino de tierra de su recinto, portando en sus manos el machete y el garabato, símbolo elocuente de los trabajadores agrícolas manabitas.

cisamente de la guerra, sus padres lo llevaron de un año a San Isidro, pero cuando Pedro tenía seis años de edad, su padre vino al sitio Xavier de Flavio Alfaro e instaló su casa. Nosotros vinimos a cauchar, dice; el verbo se explica como la recolección del caucho que sigue un procedimiento especial que nos describió don Pedro: Se localiza el árbol que sea maduro¸ se practican con el machete, cortes en la corteza para que se chorree un líquido que se hace sólido en contacto con el aire. A la tarde, se recoge el caucho que se ha chorreado, envolviendo las láminas en paquetes manejables.

Junto al caucho, dice don Pedro, se recogía también boya, palma real y tagua que también despertaban interés en los comerciantes.

A los dieciséis años, más o menos, ya me independicé para cauchar por mi cuenta. Para cauchar en esa época, había que ser fuerte, porque no había caminos; eran trochas de montaña y hasta para llegar al pueblo había que enterrarse en el lodo.

La conversación es fácil; siguiendo su costumbre, surge de su boca un Buenas tardes patrón que respondemos amablemente y aprovechamos para iniciar la charla, dirigida a destapar el baúl de sus recuerdos.

Nos dice que nació en el sitio Narciso de Chone, en plena guerra de Concha que venía de Esmeraldas. Huyendo pre-

Había sólo una casa grande de una persona que debe haber sido millonario, don Luis Moreira; después aparecieron la de Manuel Luchas y la de Jacinto Cedeño que se dedicaba a vender tierras.

Yo trabajé para algunos de ellos; ganaba real y medio por día de trabajo; después me subieron a dos reales; nece-

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sitaba trabajar dos días para comprar un queso que vendían en un plato grande, y que valía cuatro reales.

PADRE PABLO O’CONORS

Por un quintal de cacao, pagaban dieciséis sucres y por una saca de arroz, entre 5 y 10 sucres, según la época.

En Ciriaco, en toda la esquina, tenía su casa el señor Juan Intriago (aquí hay una confusión, pues por otros testimonios, sería don Luis Amando Intriago Rodríguez, tronco de la familia Intriago que aún ahora se desarrolla en Flavio.)

Se acuerda de esa casa, porque en esas épocas, se cayó una avioneta por los alrededores.

Ya se estaba construyendo la carretera a Chone, con un sistema de concesión; el Municipio de Chone entregaba a una persona una extensión de la vía y esa persona tenía que contratarla con los trabajadores los que no tenían relación de dependencia con el Concejo.

Después ya me instalé a trabajar en la agricultura, en la finca de mi papá, y ahí estoy hasta ahora; a pesar de mi edad, todavía me levanto de la cama a las cuatro de la mañana y a las cinco ya estoy rodeando la propiedad, para a las siete, después del café, comenzar a trabajar al machete. Venga para que vea lo bonita que está la finca, nos invita, y vamos a comprobar como a los 84 años, es capaz de mantener un cacaotal perfectamente limpio y podado.

Fue párroco de Flavio Alfaro y ahora es Vicario del Cantón; parte de una misión de sacerdotes agustinos procedentes de Irlanda, que tienen bajo su administración eclesiástica a la zona de Chone.

En un extenso trabajo de su puño y letra, el padre O Connors relata los padecimientos que sufrieron los religiosos y religiosas y las dificultades que debió vencer la Misión, hasta asentarse ya firmemente y cumplir a satisfacción su apostolado.

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En una conversación informal, pudimos despertar en el sacerdote los recuerdos que impresionaron su mente desde 1977, cuando llegaron a Chone para cumplir la difícil misión.

Comenzamos por pedir autorización para reproducir el documento a que nos referimos y el Padre nos narra la siguiente anécdota al respecto. Ese informe fue escrito inicialmente en Inglés y estaba dirigido a las autoridades de la Orden Agustina, pero alguien lo elevó al Internet.

Esa misma persona u otra, realizó una traducción al español de pésima calidad y la subió al Internet; era tan mala la traducción que desnaturalizaba al documento, dice el padre. Pero, también hicieron otra traducción correcta o más fiel al original, por lo que espero que la que usted encontró sea esta segunda Lo comprobamos mediante la lectura del documento y fue aprobado, por lo que lo incluimos en esta recopilación de la historia de Flavio.

Y continúa la historia. En 1977, estaba como párroco de Flavio Alfaro, el padre Albán, a quien le dieron prestada una casa de caña, en la que vivía. La casita se cayó y el Padre O Connors tenía que vivir en la sacristía; no había servicios higiénicos y los mosquitos hacían su agosto durante todo el tiempo.

La parroquia carecía de recursos económicos, lo que im-

pedía realizar obras urgentes como la casa parroquial y la propia Iglesia que se había comenzado a construir, pero muy mal.

Yo fui, dice O Connors, profesor de dibujo técnico; entonces, tenía en los ojos las distancias los ángulos; una buena porción de lo construido estaba torcida e intenté enderezarla; pésima decisión por falta de consejo de los albañiles, quienes debieron decir que mejor y más barato era derruir lo levantado y construir de nuevo; la equivocación nos costó algunos sacos de cemento y un enlucido de 15 centímetros de espesor, señala el sacerdote.

Yo sabía que en el criterio de la gente el que construye es buen cura , entonces, me dediqué a buscar quién podría ayudarnos; vinieron en nuestro auxilio las diócesis europeas, los amigos, los parientes, los ex alumnos, todo el que podía enviarnos unos miles de dólares, lo hizo; con ello construimos la casa parroquial, la iglesia, el centro de salud, todo lo que se ha podido hacer desde la Iglesia, con la ayuda del pueblo.

Como podrán leer en la historia de la Misión Irlandesa, la vida en ese entonces era muy difícil. No había energía eléctrica, ni agua entubada ni alcantarillado; las calles eran lodazales en invierno y polvaredas en verano. La poca gente del pueblo vivía también muchas penas porque la falta de carretera impedía el traslado fácil a chone; los enfermos padecían horrores o simplemente se mo-

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rían, porque la enfermedad no daba tiempo para llegar a buscar un médico.

En 1963 estuvo la carretera de verano entre Flavio y Chone; ya comenzaban a circular vehículos y se hacía más fácil la vida; pero, para la Misión, el trabajo en la zona rural tenía las mismas dificultades, porque no había carreteras.

Por las mismas fechas se pusieron en funcionamiento las instalaciones de distribución de la energía eléctrica generada por una pequeña planta eléctrica del concejo de Chone; no duró mucho su servicio; se dañó y hubo que esperar la llegada de la línea de transmisión que viene de Manta, para contar con la energía eléctrica, ahora si, las 24 horas del día, pero como ahora- con interrupciones de duración variada.

El Párroco irlandés, siempre fue un personaje importante en Flavio Alfaro; más que por su actuación en el campo religioso, por su preocupación por las necesidades de la población. La salud era una de sus angustias. El desfilar de los enfermos en hamaca, colgados de una caña al hombro de dos hombres, golpeaba su conciencia y, según nos informa, cuando se produjo la epidemia de cólera, comenzó realmente a trabajar para construir y hacer funcionar un centro de salud.

Primero, integró un Comité de Salud para que lleve la iniciativa y gestione ante las autoridades; Este comité, pudo

comprar el terreno en que se encuentra el hospital, en 30.000 sucres, pero había que estabilizarlo y ello significaba poner volquetadas y volquetadas de piedra que venía de Santo Domingo.

Aquí nos hizo un singular servicio la Lcda. Lucy Intriago que trabajaba en el Congreso y era Diputada Alterna, dice; consiguió que el Ministro de Obras Públicas decida entregarnos toda la piedra que necesitemos, desde sus canteras en Manabí o en Santo Domingo; el Director Provincial de Manabí, nos negó la ayuda, pero en Santo Domingo, el Ing. Luis Abad nos envió en sus volquetas la enorme cantidad de piedra que asegura el moderno edificio del hospital.

En la construcción, trabajaron 12 hombres solamente, bajo la dirección del párroco, que ya sabía de albañilería como si fuera su profesión. Esos hombres se dedicaron a lograr las metas que fijaba el padre y finalmente vieron funcionar el hospital que presta un singular servicio a la comunidad.

Mientras tanto, el proyecto que elaboramos en nuestro escritorio con los técnicos, fue presentado al Ministerio de Salud, que lo calificó como el mejor proyecto que había llegado a sus manos.

Pero, como la ayuda del gobierno se tramita tan lentamente, la aportación del Ministerio de Salud, que tuvimos

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que rescatar porque se pasó de un año a otro, nos sirvió para terminar la construcción.

Como se ve en la narración que hace el padre O Connors, la ayuda del extranjero es lo más significativo, no solamente para la construcción, sino para el equipamiento, y puso el ejemplo de varias camas motorizadas que fueron regaladas por los europeos. Más de medio millón de dólares fue aportado por los extranjeros y sirvieron para terminar el hospital, dice el padre.

El Comité de Salud se transformó en una veeduría, por iniciativa de sus miembros y cuya acción no se nota; hay un grupo de voluntarios que realiza un trabajo formidable, para conseguir recursos para financiar medicinas, operaciones, prótesis, etc. de los pacientes muy pobres; en ese grupo se encuentra O Connors que espera seguir contando con la ayuda de sus paisanos allente el océano.

UNA SANTA En el campo religioso, el párroco nos informa que una de las hermanas que sirvió en la Misión desde Chone, la Madre Bernarda, ha sido declarada Santa por la Santa Sede, pero se ha dado muy poca publicidad a este hecho.

Hay tres fiestas religiosas en el cantón: San Jacinto, que es el 16 de agosto; la Madre del Consuelo, Patrona de la Parroquia, que se celebra los días 13, 14 y 15 de noviembre

y, en septiembre, el Señor de la Buena Esperanza.

El padre Pablo O Connors, tiene 73 años de edad; lo encontramos en la parte de atrás de la iglesia, dirigiendo la construcción de un área techada para las reuniones de la catequesis; habla con propiedad con los albañiles y demuestra que sabe de qué se trata.

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SRA. ÁNGELA DE ALCÍVAR

don Ignacio Mesías Mendoza, don Aparicio Murillo.

Tiene 82 años de edad y está casada con don Wilfrido Alcívar Valdez; viven en Las Cumbres de Rancho Quemado.

La vida en esa época era sencilla; las amas de casa y en general las mujeres de la casa, atendían todas las necesidades de la familia; cocinaban, lavaban la ropa, mantenían la casa limpia y, cuando llegaba la noche, era la hora de preparar sal prieta, moler maní y hacer otras preparaciones para contar con ingredientes para las comidas de los días siguientes.

Sin agua en la casa, resultaba sufrido bajar al estero para subir agua en las marimbas, que eran unos canutos de caña guadúa perforados, que se colgaban en cada extremo de una vara y se la traía sobre los hombros. Para lavar la ropa, las señoras bajaban al estero con sus tinas llenas y regresaban a la tarde, con la ropa ya seca.

Nació en Río de Oro de Flavio Alfaro y se casó a los 22 años, habiendo tenido cinco hijos. Nos cuenta que una vecina del lugar, la señora Ignacia Mesías, tuvo ocho hijos, todos sordo-mudos pero nadie se preocupó por averiguar la razón. Esa madre, quien no fue a la escuela ni un solo día, les enseñó a leer y escribir a todos sus hijos.

La gente que venía al sitio Pescadillo, que es como se llamaba este lugar, eran caucheros, es decir, recolectores de caucho en la selva que comenzaba en las goteras del pueblo. Con ese fin, vinieron, por ejemplo, don Leonidas Loor,

Las noches se iluminaban con mecheros de kérex y, para ahorrar ese combustible, se hacían también mecheros de caucho que se colocaban en los extremos del cuarto y alumbraban bien el trabajo de las damas y damitas.

Los hombres se reunían en los salones o la casa de algún amigo, a charlar y jugar y, desde luego, a tomarse un aguardiente, porque en este lugar se cultivaba la caña de azúcar y se preparaba las panelas y el aguardiente, en alambiques caseros.

La falta de caminos era el mejor disuasivo para salir, pues

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cuando había que ir a la iglesia, por ejemplo, parecía que el fango se la tragaba a una; se hundía hasta el muslo, dice.

Tal vez por ello se estimulaba la creatividad y se adaptaban los objetos de la naturaleza, al servicio que se necesitaba; por ejemplo, con los mates se hacían filtros para café y las cañas servían para todo: desde acarrear agua, hasta como lámparas, cargadas con kérex y una mecha.

Y las fiestas eran interminables; se celebraba un santo o un cumpleaños y los visitantes se quedaban varios días bailando día y noche. Mientras hubiera comida y trago, la gente no se iba a sus casas.

La Semana Santa estaba llena de prohibiciones; había que ayunar que era desayunar muy poco y a las 11 de la mañana; no almorzar y hacer una comida fuerte al término de la tarde; Desde el miércoles no se podía bañar, porque quien lo hacía se convertía en pescado y, quienes se atrevían a hacer el amor en los días santos, se quedaban pegados. Pero tal vez ello evitaba los excesos y las parejas se casaban y los hijos eran obedientes, comenta nuestra entrevistada. Las jóvenes casaderas eran motivo de mucho cuidado para sus padres, pero se daban mañas para escaparse cuando tenían enamorado.

La confección de la ropa era otra tarea que correspondía a la madre de familia; en todas las casas había una máquina

de coser; las primeras eran máquinas de mano, que se movían con una manivela; luego vinieron las máquinas de pedal que eran mucho más cómodas, pues dejaban las dos manos libres.

La hospitalidad es una cualidad que no se ha perdido; pero, hace 40 años se exageraba, pues la gente llegaba, sea o no conocido, pedía posada y se quedaba hasta que solucionara el problema que lo trajo al pueblo.

Y el tema de las enfermedades era un real peligro. Doña Ángela recuerda que uno de sus hijos se enfermó grave y su esposo fue a Chone a pedir la medicina que no había en Flavio; caminó ida y vuelta en los lodazales, y llegó entrada la noche, pero salvó a su hijo. Él era muy activo, a su gestión se debe la construcción de la carretera La Morena – La Codicia, dice.

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SRA. YOLANDA ALVARADO DE GARCÍA Nació en 1935, en Ríochico de Portoviejo y vino a Flavio Alfaro hace 55 años, cuando sólo había cuatro casas de los señores Chafito Farías, Antonio Cedeño, Pedro Vega y Santiago Loor.

estudios. Cuando vine, pude hacerlo en carro, pero era tan mala la carretera que utilizamos todo el día para viajar de Chone a Flavio; el carro brincaba a cada rato por los baches de la vía.

Sin embargo, aquí conocí a Walton García y me enamoré de él, nos enamoramos, nos casamos y comenzamos una vida independiente. Con él pusimos también una tienda y trabajábamos los dos, sin ningún problema. Mi padre falleció en 1961 y me dejó su tienda, por lo que unificamos los dos negocios y continuamos trabajando juntos.

En 1972 fallece mi esposo y yo continué trabajando en la tienda por quince años más, hasta que la cerré.

Doña Yolanda cuenta que de su matrimonio tuvo cinco hijos: tres mujeres y dos hombres, uno de los cuales falleció. El otro, es quien administra su hacienda. Las hijas, una es profesora, otra, es empleada y la tercera vive en su hacienda propia.

Su padre era el señor Absalón Alvarado, que era empleado del Estanco de Alcoholes y atendía el almacén que esa institución tenía en este lugar.

Yo vine a visitar a mi papá, pero cuando llegué ya no trabajaba para el Estanco, sino que atendía una tienda que era su negocio particular. Yo le ayudaba en su trabajo, pero pensaba regresar a Riochico, donde continuaría mis

Es que la señora Yolanda es una gran propietaria de tierras, pues su padre le dejó unas 400 hectáreas que se unieron a otras tantas que había comprado; de ello, a sus hijos les entregó cien hectáreas a cada uno y se quedó con las 300 hectáreas restantes, en las que desarrolla su hacienda ganadera, con la ayuda de uno de sus hijos.

Recuerda que en su juventud, los alrededores del parque

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donde tiene su casa- se convertían en lodazales; teníamos que salir bien vestidas, pero con los zapatos en la mano, para no enlodarlos, dice. Como no había agua corriente, utilizábamos agua de pozo o se recogía agua de la lluvia en grandes cisternas que se administraban largo tiempo, porque se evitaba el desperdicio.

Ella llevó a cabo uno de los mayores planes de lotización de terrenos en la cabecera cantonal, para crear la Ciudadela Walt García, en honor a su esposo. Donó una hectárea de terreno para la Universidad Técnica de Manabí, que tiene un paralelo en funcionamiento en Flavio.

Cuando comenzó su lotización se vendía a un sucre cincuenta centavos el metro cuadrado; ahora, el precio es de 15 dólares.

Los recuerdos de doña Yolanda fluyen fácilmente cuando nos cuenta que las fiestas en Flavio eran muy concurridas antiguamente; la gente llegaba a caballo, hombres y mujeres, luciendo sus mejores galas que eran confeccionadas por costureras que tenían mucho trabajo, pero no tenían la competencia de la ropa confeccionada que se vende ahora. Con una sonrisa dice que cuando comenzaron a circular los carros, éstos se quedaban atrapados en los lodazales y había que ir a caballo para rescatar a los pasajeros.

Ella está segura de que el futuro de Flavio Alfaro debe ser

mirado con optimismo, porque la gente es trabajadora, y ahora la Municipalidad está bien dirigida por el Alcalde que tiene ideas de progreso; ella misma, a pesar de que no tendría necesidad de trabajar, se mantiene en la agricultura, la ganadería y los negocios, porque no se hallaría sin trabajar. Inclusive nos cuenta que ha recibido apoyo de la Corporación Financiera Nacional, que le otorgó un préstamo por 100 mil dólares para comprar ganado.

Nosotros producimos unos 700 litros diarios de leche, con unas 150 o 170 vacas lecheras, dice; toda esa leche está comprometida con las fábricas nacionales que la reciben en la hacienda, nos informa.

Así, en plenitud de sus facultades, la señora Yolanda Alvarado de García, una de las más ricas habitantes de Flavio Alfaro, continúa contribuyendo al progreso de su comunidad.

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SRA.LELIA MERCEDES MOREIRA Tiene 78 años de edad; estuvo casada con uno de los hijos de don Agustín Zambrano, llamado Romualdo Zambrano.

Sus recuerdos no son claros, pero confirman la información básica que hemos recibido. Don Agustín es el mayor propietario de tierras en el recinto Pescadillo y las lotizaciones sucesivas y la venta de terrenos, ha permitido que el pueblo se desarrolle y crezca.

Ella, no ha tenido un mayor protagonismo en el pueblo, pero su esposo, que heredó con sus once hermanos, las tierras de su padre y el establecimiento comercial, se dedicó a trabajar toda su vida y falleció cuando tenía 96 años.

Recuerda que vivían en el sitio Estero del Cuajo y que la madre de su esposo contrató a la señorita Lucila Castillo para que trabajara como maestra.

Después organizaron la finca La Toquilla donde vivieron algunos años, hasta venir definitivamente al pueblo, en cuyo centro tienen su casa.

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HITOS DE LA HISTORIA 1535 Pedro de Alvarado pasa por la zona del actual cantón, en viaje a Quito.

1835 Chone, que incluye el recinto Pescadillo, es elevado a la categoría de cantón.

1888 Primera denuncia de propiedad de las tierras en el recinto Pescadillo por el señor José Eliseo Saldarreaga Castro, natural de Charapotó.

1890

Participación en las Montoneras Alfaristas

1910

toma fuerza la explotación del caucho.

1919 Por gestión de Agustín Zambrano y Antonio Zambrano, el Ing. José Guerrero realiza la medición y el trazado de la plaza del pueblo y sus calles principales.

1940 Creación de la parroquia Flavio Alfaro 1950 Comienza la carretera Chone – Flavio 1942 Se instala la primera planta de energía eléctrica.

1960 Llega la carretera de verano a Flavio Alfaro.

1965 El gobierno contrata la carretera estable

1967 Se instala el primer teléfono 1968 Llega la energía eléctrica de Manta 1968 Se construye el sistema de agua entubada.

1988 Se crea el cantón Flavio Alfaro 1989 Se instala el primer Concejo Municipal; lo preside John Cuadros 1990 Comienza a funcionar el alcantarillado sanitario y pluvial 1992 Primeras calles adoquinadas.

1993 Segunda administración municipal. Se realizan algunas obras de electrificación rural.

2005 Se planifican las obras para el cambio hacia el progreso.

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Himno

Letra: Guillermo Ramón Zambrano Música: Jose Janes Cedeño

Flavio Alfaro, cantón que progresas al impulso tenaz de tus hombres, con la fuerza que afirma tu nombre que en la patria es presencia triunfal.

Eres tierra de gentes altivas, con la magia de diosa aborigen que al unirse a tu estirpe cristiana, se conjuga una raza ideal, con tus hombres valientes y activos, o en jardines con mil flores bellas que en la gracia de hermosas doncellas, te engalanan cantón sin igual.

Fuiste flama de impulsos bravíos que irrumpieron tus vírgenes selvas

para dar a sus hijos la esencia, de tu tierra un futuro formal, con el oro que emanan tus ríos y montañas de grandes bellezas, a la Patria le das tus riquezas con esfuerzo y entrega total.

El trabajo paterno nos hizo herederos del ínclito empeño, de sabernos por siempre tus dueños con el fiero valor liberal de esos héroes de nobles conquistas cuyo grito rebelde aún se escucha, cual baluarte de Alfaro y su lucha nos legaste su gloria inmortal.

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ASÍ SE ESCRIBE LA HISTORIA Se vuelve necesario ubicar el comienzo de la historia y, desde luego, el mismo varía en relación con el objetivo del análisis.

Si queremos iniciar la historia demográfica del cantón, nos ubicamos en el sitio Pescadillo y en la explotación del caucho por trabajadores no residentes.

Si pretendemos saber el origen de las telecomunicaciones en el cantón, ubicamos la instalación del primer sistema de telégrafo, y la comunicación social, apenas hace diez años, con la instalación de las radiodifusoras.

El propósito es analizar la solución de los principales problemas de la colectividad, deberemos ubicarnos en el año 2005, cuando accede a la Alcaldía del cantón el Ing. Jaminton Intriago Alcívar.

El siguiente es el testimonio gráfico de cómo lucían los sectores del cantón y cuánto se ha hecho para cimentar el progreso del cantón.

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Los caminos rurales, antes intransitables en invierno, se van convirtiendo en carreteras estables merced al trabajo de la Municipalidad.

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KilĂłmetros de instalaciones elĂŠctricas rurales y vĂ­as de uso permanente, son la respuesta del equipo municipal a la demanda de los campesinos que fue consultada al comienzo.

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Puentes met谩licos y de hormig贸n, salvan los abismos para unir a toda nuestra gente y crear posibilidades de progreso y de vida mejor.

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La intensa labor social del Municipio y del Patronato Municipal de Amparo Social, incluy贸 la entrega de lentes a quienes lo necesitan y correcciones quir煤rgicas en Cuba.

La calle que conduce al cementerio fue una de las primeras en ser reconstru铆da con calzada de hormig贸n, como ha ocurrido y sigue ocurriendo con las calles de toda la ciudad.

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La carretera al sitio Javier, recibi贸 tratamiento con lastre.

El ra

sitio una

El Mono carreera

tiene ahopermanente.

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VĂ­a de acceso al sitio El Golpe, es de trĂĄfico permanente.

Con lastre se dio permanencia a la carretera al sitio El Rosado.