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riéndose a él. La experiencia de algunos superocheros de Cuernavaca, Morelos, entre los que estaban Jesús Brito, Javier Pichardo y Adrián Carrasco Zanini constituye un buen ejemplo. En el caso de Brito y Carrasco, ambos provenían del ambiente estudiantil de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, y habían tenido un primer contacto con el súper 8. Brito había realizado un cortometraje documental sobre la vivienda en Cuernavaca. El estallido de una huelga en la empresa textil Rivetex, con sede en Cuernavaca, los motivó a filmarla al lado de Adrián Carrasco Zanini, quien era primo del realizador de Víctor Ibarra Cruz. A través de él establecieron contacto con la Cooperativa para terminar conformando la “Sección Cuernavaca”. Brito recuerda que la idea original de la película era ambiciosa. No solo trataría sobre la huelga de Rivetex, sino también sobre Rubén Jaramillo y otros temas afines a la izquierda morelense. Sin embargo, finalmente decidieron concentrarse únicamente en la huelga. Filmaron aproximadamente cuarenta rollos, que fueron financiados por boteo y mediante “liberación” de rollos.42 Con ellos comenzaron a documentar la huelga, pero desde adentro. Nos metíamos a las asambleas, pasábamos la noche ahí en las guardias con los trabajadores, en los festejos. Nosotros estábamos ya metidos en la huelga: conocíamos casi a los obreros por su nombre. […] Estábamos en contacto con los líderes, y nos decían: “vamos a tener una reunión con la empresa”. Entonces: “pues ¿podemos entrar?” Pues nos dejaban, y nos abrían las puertas para que entráramos; entonces podíamos estar en las reuniones con la patronal. Y había reuniones con el puro sindicato adentro de la fábrica, y nos abrían la puerta; y ellos nos anunciaban; o nosotros nos informábamos a través de ellos: “Va a haber marcha en tal parte”, y nos íbamos; o “ya se negoció con…” En donde no pudimos entrar fue a las negociaciones con la Secretaría del Trabajo. Entonces ahí sí no… eran a puerta cerrada. Pero casi hasta a eso.43
42 La “liberación de rollos” era una práctica común entre los superocheros, que muchas veces no podían pagar por la película virgen (por entonces el revelado estaba incluido en precio del rollo). Brito y Carrasco tenían una amiga con habilidad especial para conseguirlos. Entrevista con Jesús Brito por Álvaro Vázquez Mantecón, 24 de noviembre de 2005. 43 Ibid.
Nosotros sí existimos (1972) de Jesús Brito y Adrián Carrasco Zanini, Cooperativa de Cine Marginal Sección Cuernavaca. Secuencia de la asamblea sindical en el momento en que se anuncia el triunfo.