Raíces lejanas, destinos compartidos: La integración de haitianos en México

Page 1

Raíceslejanas, destinos compartidos:La integraciónde haitianosenMéxico

Fernando Arauz

Mauricio Luengas

La inseguridad y la violencia en Haití resulta el principal motivo por el cual millones de haitianos buscan salir de su país natal.

Según la plataforma de transparencia, a México, en tan sólo 5 años, han entrado 124,804 refugiados provenientes de Haití (hasta abril de 2024). Esto sin contar a aquellos acompañantes, pues sólo se registra una persona por familia.

Fotopor@aracelmar,víaXpara“ElsoldeMéxico”

“Traslashuellasdel

cambio:migracióny adaptaciónen tierraslejanas.”

La Ciudad de México ha sido uno de los tantos lugares donde la población haitiana migra, ya que creen que pueden sentirse “seguros” y encontrar una segunda oportunidad.

En Ciudad de México está el programa Casa de Refugiados, una organización que da acompañamiento a personas solicitantes y refugiadas en México.”

Al sur de la capital, a un costado del bosque de Tláhuac se encontraba un refugio. Ahora cientos de haitianos habitan en las banquetas con casas de campaña y en departamentos compartidos de la zona.

Celuz

Un joven de 22 años tomó la difícil decisión de dejar su hogar en Haití en busca de un futuro mejor para sus hermanas y su madre.

Hace apenas 5 meses llegó a México, obligado a salir de su hogar por la falta de seguridad y el aumento de violencia que domina en su país de origen.

Su viaje hacia México fue un trayecto lleno de desafíos. Aunque tuvo la suerte de no tener que caminar, enfrentó situaciones peligrosas al ser extorsionado por las autoridades mexicanas durante su trayecto.

Celuz, sufrió el robo de su identificación en la central de camiones de Tijuana, dejándolo en una situación muy difícil al no poder trabajar legalmente en México.

Él era pintor en Haití, pudo haberse convertido en un exitoso artista, pero la realidad en México es muy distinta. Aquí no ha tenido la oportunidad de ejercer su pasión. La adversidad lo ha llevado a luchar por sobrevivir en un entorno hostil, buscando cualquier trabajo para sobrevivir.

Ahora vive en una casa de campaña en una banqueta de Tláhuac esperando a que las cosas mejoren.

“Tiene6añosque noveoamimamá, aquíhayquien vendecomida haitiana,pero extrañoladeella”

Frans formó parte de las primeras olas migrantes que arribaron a Chile por el año 2017, un factor que ha sido determinante para el aprendizaje de su español, el cual habla bastante bien.

Salió en avión de Haití hacia Chile, luego llegó a Perú y posteriormente a Ecuador, Colombia, Panamá y finalmente logró llegar a México. Comenta sobre el peligro que hay en el trayecto de Tapachula a Ciudad de México y cómo la policía "saca mucha plata".

ikey, una mujer de 32 años, con pelo planchado, viajó por seis meses, saliendo de Santo Domingo, llegando a Nicaragua, y de ahí logró llegar a México.

La mayoría de este trayecto, lo recorrió a pie, también tomó camiones y logro conseguir un aventón en coche.

Ella nos cuenta, mientras hace un pedicure banquetero, que si pudiera se quedaría en México y traería a su familia, pero no tener papeles, dinero ni seguridad le impiden verlo como un futuro cercano.

“Algunosmexicanos sonbastanteracistas”

Ahora en las banquetas intenta hacer lo que mejor sabe, desde manicure y pedicure, hasta peinados de todo tipo; Esto lo hace para sobrevivir, pues ella comenta que “vive al día”.

M
M

Según Samantha Mino García, experta en migración y poseedora de un posgrado en Antropología Social, la comunidad haitiana enfrenta una gran vulnerabilidad.

Escapan de condiciones adversas que incluyen violencia, pobreza y falta de oportunidades. El viaje es extremadamente complicado, como lo corroboran las entrevistas; muchos atraviesan la selva del Caribe en condiciones precarias, pasando por Sudamérica hasta llegar a Centroamérica y México. Los riesgos y las afectaciones que enfrentan son numerosos, convirtiéndolos en una comunidad que necesita atención no solo para su salud física, sino también para su salud mental.

"Es crucial brindar atención, especialmente a los niños. Sabemos que son familias enteras las que migran desde Haití, intentando integrarse a la vida en México, lo que tiene diversas repercusiones debido al proceso migratorio".

Además, es importante destacar que muchos provienen de otros países latinoamericanos como Chile, donde algunos han sido víctimas de discriminación y xenofobia, enfrentando barreras en el acceso al empleo, la salud, la educación y la vivienda. Estos son aspectos que deben tenerse en cuenta para abordarlos una vez que llegan a territorio mexicano.

Frans, hoy con 31 años, tuvo que pasar por 6 países, caminar tramos extremadamente largos e incluso tuvo que dormir un día en la selva de Nicaragua. Una experiencia que él describe "como de una película", su mayor temor era encontrarse con algún animal salvaje, pero esto, afortunadamente, no sucedió.

Desde que Frans llegó a México, ha buscado trabajar para poder traer a su familia, pero sin papeles es ilegal trabajar en México, así que empezó a realizar trabajos de albañilería.

Algunos mexicanos lo buscaban por su fuerza física, pero ofrecían salarios como $150 pesos al día por una jornada de 8 horas de trabajo pesado.

“Paramíprimeronoestá eldinero,estáelrespeto”

Frans recuerda que en Haití estudió hotelería y turismo y trabajaba como recepcionista de un hotel, esto, antes de que las cosas se pusieran muy violentas.

Actualmente vive en un departamento compartido y vende jugo que él mismo prepara, así como maletas y artículos para el cabello en las banquetas de Tláhuac.

FotovíaX,@SIN24Horas

“Extraño completamente tododepuntaa cabeza,nada comotutierra, nadacomocasa”

Más adelante, sobre la misma avenida, se encuentra Shikansh, una mujer de 31 años con pelo trenzado y una sonrisa contagiosa.

Su experiencia en México, por lo que nos contó ha sido muy negativa, llegó sola y ha sido extorsionada varias veces, sobre todo en Tapachula.

Shikansh, ademas de sufrir racismo constante en las calles, también nos contó que la población se aprovecha de su condición de migrante, así que no le gustaría quedarse aquí.

En Haití tenía su propia estética, ahora Shikansh intenta seguir con su profesión, pero como la situación ha sido cada vez más adversa, a optado por también vender naranjas en la calle para “sacar un poco más”.

Ella extraña diariamente su país, a su familia, la comida y la cultura, pero no tiene otra opción más que buscar una nueva vida fuera de su Hogar.

Jacques

Tiene 30 años y es haitiano/mexicano, Vivió en Haití los primeros años de su vida, hasta que tuvo que ser evacuado después del terremoto el 12 de enero de 2010.

Tuvo que salir del país para venir a vivir con sus tías a la Ciudad de México.

Gracias a su madre, Jacques habla perfecto español, y gracias a su padre y a sus años viviendo en Haití, también domina a la perfección el francés y el creole, lengua que se habla en Haití.

Jacques nos contó que lo que más extraña de Haití es a la gente y su cultura, donde todos son muy físicos, muy alegres y en general son personas cálidas. Extraña la comida, a sus amigos de secundaria y en su momento a sus padres, que migraron a Estados Unidos para trabajar con más seguridad.

Él tuvo grandes privilegios por la educación que sus padres le inculcaron, estudió la universidad en Ciudad de México y ahora es abogado, habla 7 idiomas y tiene una relación estable desde hace un tiempo.

Jacques fue fundamental para el reporteo de este trabajo, pues además de concedernos la entrevista, fue quien tradujo todas las demás.

“Inclusivelapolicía, quienesestán obligadosagarantizarlaseguridad,

porquenohayejércitoallá,están rebasados,entoncesnohaynadade

“Sevendeesto,sevendemaletas,haydías quenosevendenunca,pero¿Cómosevaa vendersinotrabajo?”-Frans,31años

El idioma en este caso particular es una barrera gigantesca, pues en Haití se habla creole, una lengua nacida del francés y habada en pocos lugares del mundo.

Según la unidad de transparencia, los migrantes haitianos si reciben apoyo, pero dentro del último año, sólo 5 han recibido clases de español y ningún entrevistado ha recibido algún apoyo del gobierno o de las autoridades

Frans, de quien hablamos antes, dijo que no había recibido ningún tipo de apoyo, de hecho comentó que los policías en México le han pedido dinero una y otra vez.

Shikansh coincide, pues nos habló de sus mala experiencia en México, desde el racismo hasta como se aprovechan algunos de su situación, incluyendo a las autoridades.

A Celúz las autoridades migratorias lo golpearon, arrodillaron y despojaron de sus pertenencias, y rl robo de su identificación ha sido el principal impedimento para iniciar cualquier trámite en territorio mexicano.

FotovíaX,@SIN24Horas

Eespañol, y ejerciendo presión para que el gobierno, desde el ámbito federal, brinde facilidad para sacar papeles nuevos, garantizar su seguridad en el país e intervenir en el problema que ataca la isla de Haití para resolverlo desde la raíz.

Al ser México un país con una enorme cantidad de migrantes;

¿No deberíamos apoyar más a quienes quieren buscar nuevas oportunidades aquí, como a nosotros nos gustaría que nos apoyen en el norte?

En conclusión, la integración de los migrantes haitianos a México ha sido un fracaso, si es que alguna vez fue un objetivo para el gobierno.

Como dijo la Mtra. Samantha, “Que el Estado otorgue un documento que permita su legal y su regular estancia en territorio mexicano y que además les permita trabajar sería lo ideal. Pero lo cierto es que no todas las personas son reconocidas como personas refugiadas y en México las otras figuras para poder tener una estancia regular en el país, pues son prácticamente inaccesibles.”

Estas personas buscan sobrevivir en un país en el cual no comparten ni el lenguaje, ni costumbres ni tradiciones. Es una situación extrema donde no están recibiendo la atención que que necesitan.

Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.