Hay que tener en cuenta que en cualquier aplicación con los cristales, antes de usarlos, deben ser sometidos a una limpieza y programación adecuada. ¿Cómo limpiarlos? Lavarlos con agua corriente unos 3 minutos y luego los dejaremos secar al sol durante 2 horas para cargarlos de su energía. También los podemos limpiar con incienso, Reiki, meditación. ¿Cómo programarlos? Estando tranquilos, haremos una relajación profunda concentrándonos en el cristal. Lo tomamos en nuestras manos e imaginamos como unimos nuestra energía mental y espiritual con él, visualizando un rayo de luz que entra por nuestra coronilla y que va recorriendo todo nuestro cuerpo purificándolo, y uniendo al cristal con nosotros lo visualizaremos muy brillante, lleno de luz y energía purificadora. Después de esta práctica seremos una fuente de energía cristalina para nosotros y las personas que queramos ayudar. Aquí os daré algunos consejos de utilización según su color y propiedades: •Piedras y cristales naranjas y rojas: Son fortalecedoras, equilibran las emociones. •Piedras y cristales amarillos: favorecen la expresión, la autoestima, la energía física, el movimiento, la expansión… Se utilizan para el sistema digestivo y sistema nervioso. •Piedras y cristales verdes: aportan simpatía, armonía, fuerza y abre las emociones del corazón. •Piedras y cristales azules: nos
aportan tranquilidad, calma la irritabilidad, el nerviosismo, la cólera, el enfado y la ira. •Piedras y cristales violetas: estas piedras nos sirven para todo, transmutan la energía, limpian las energías negativas, renuevan, son protectoras y elevan la energía espiritual. •Piedras y cristales blancos: son análogos de la luna protegen, fertilizan y purifican. •Piedras y cristales negros: absorben, aportan autocontrol, ayudan en los procesos de sanación y curación, nos sirven también para los sentimientos de angustia, miedo e incertidumbre, nos protegen de los celos, envidias y proyecciones de energías negativas hacia nosotros. •Cristales transparentes: Son luz en su máxima expresión y ayudan a pensar objetivamente. •Piedras y Cristales marrones: nos sirven para arraigarnos a la tierra, equilibra lo espiritual y material, para proyecciones y metas. Si los sostenemos en las manos al meditar visualizaremos un proyecto que queramos realizar. •Piedras y cristales ahumados: estimula y purifica el 1er chacra, canaliza la luz blanca arraigándola al plano físico. Son muy útiles para personas agotadas, deprimidas y lunáticas. Incrementa nuestra capacidad de asimilación ayudándonos a desprendernos de lo que nos sobra. •Piedras y cristales multicolores: se utilizan para meditar y ejercicios de visualización. ¡Los cristales tienen un enorme poder puesto al servicio de todos! Espacio Humano 87