Se parte de un entorno que presenta varios problemas, como son la diferencia de cota, el escaso espacio entre edificios y la pendiente, las desconexion de las partes, la confusión formal que presentan los edificios debido a sus volúmenes añadidos, y el estado de abandono general del entorno. No obstante, la reurbanización del entorno del rio brinda nuevas oportunidades, como son una nueva conexion con el río, nuevas vistas hacia este o potenciar el caracter natural del lugar.
Forma parte del proyecto de rehabilitación decidir que elementos conservar y cuales eliminar, bien por su escaso valor arquitectónico, o su difícil adecuación a los nuevos usos dentro del proyecto a desarrollar. En el caso la cárcel, que posee una gran fuerza volumétrica debido a su estructura claustral, se decide conservar su forma pura, mientras que se decide eliminar el volumen de mujeres, por su posición que bloquea las vistas desde la cárcel, e invade el único espacio existente entre esta y la pendiente de la colina. También se elimina el volumen anexo en la Rua do progreso, aprovechando ese nuevo espacio para establecer una nueva entrada al hotel, que disponga de un mayor desahogo que la actual, que apenas cuenta con una estrecha acera. En el caso de la Casa de Baños, se eliminan todas las adiciones que no tienen que ver con la edificación de Vazquez Gulias.
Se derriba casi todo el muro perimetral, dejando alguna parte en pie como memoria del lugar, así como las garitas de vigilancia, que pasarán a formar parte del nuevo paisaje urbano. Se pretende conectar así la Rua Baixada do Outeiro,la que llega a la casa de baños, con la Rua Irmáns Vilar Ponte Rua, paralela a la Rua Progreso. Para no ocupar el espacio recién ganado al margen del río, se decide enterrar el programa del balneario en la colina, conectando la cárcel con la casa de baños, y consiguiendo así disminuir el impacto visual desde el río, además de ser favorable la inercia térmica de la tierra. Como idea inicial para este nuevo volumen, se cogen las trazas de la muralla derribada, y se buscan nuevas orientaciones y vistas por medio de la fragmentación y giros del volumen. La intención es ganar en superficie de fachada, a la vez que generar distintos patios, en donde se pueda graduar el grado de privacidad del balneario, aprovechando la vegetación que brinda el entorno.
Una vez clara la estrategia de actuación, se intenta integrar de la mejor manera posible el proyecto, en un ejercicio de búsqueda de la volumetría adecuada, como punto medio entre la descomposición e intenciones de orientación del proyecto, y la necesidad de orden que requiere un proyecto arquitectónico. Por otro lado, el restaurante se sitúa en la planta baja de la cárcel, cogiendo parte del espacio colindante a la muralla, y otro nuevo volumen destinado a comedor y eventos. La envergadura del nuevo programa, hace necesario un espacio para aparcamiento, que se dispone en el parque anterior a la cárcel, siguiendo el mismo lenguaje volumétrico del balneario, y que se plantea de forma diferente que un aparcamiento al uso, estando abierto al exterior, pudiendo dedicarse para otros usos y ampliando de esta manera el espacio cercano a la cara de baños. No obtante, seguirá teniendo carácter de parque en su parte superior dada su cubierta vegetal. El resultado del proyecto es un edificio de apariencia fragmentada, pero siendo un todo en el interior, que logra gracias a esto disminuir su presencia en el lugar, y cuya cubierta es un nuevo espacio público, que combina espacios ajardinados con pavimento y se abre al Barbaña, relacionando los usos de hotel, balneario y restaurante.
ESQUEMA ESTRUCTURAL
Hotel Balneario en Ourense pfc 2017 ETSAC Fabio Rey Ishihara
P.01