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un mundo en el que pagan por componer una canción mientras las novias de los compositores esperan que les expresen el sentimiento que se pierde entre chequeras, culpa también, de las necesidades y ambiciones en las que derivan los talentos.
el bello auditorio con el que contamos, nos sorprendimos al ver la imponencia del escenario y toda su gradería, repartida en tres pisos en donde aún el más lejano de los espectadores se encuentra a un máximo de 28 metros del escenario.
La propiedad intelectual, así se lea como cliché de Miss Galáctica, es lo más invaluable que puede crear el hombre. Tal vez es la única propiedad humana comparable con el Opus Dei –no la fanaticada- y el eslabón de la cadena evolutiva que se rompe y libera a la humanidad a la más infinita y pura búsqueda de la sabiduría y el conocimiento del Universo y como tal, es el tesoro que más se debe cuidar. Las legislaciones entonces deben encaminarse a acabar con estas tres cuestiones para tener realmente una sana explotación de talentos que acabe con las genialidades mal
Tras ubicarnos en una localidad privilegiada –todas lo son- nos
disponíamos entonces a ver una de las obras más reconocidas del arte flamenco: el espectáculo de María Pagés, “la bailaora de brazos infinitos” que junto a un equipo de 21 personas entre los que se encuentran ocho bailaores y seis músicos, rinden homenaje a su tierra natal Sevilla, España a través de un reconocido concepto estético del folclor y música nacioContinua pagina 10...
Cuando estés buscando tu futuro
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