NACIONALES_
IDEOLOGÍA. El historiador dice que Chávez interpreta correctamente el pensamiento y la obra bolivariana -¿Cuáles son los mitos históricos que hay que derrumbar urgentemente? -Los que denominamos nudos ideológicos de la historiografía venezolana. -¿Qué es eso? -Son omisiones e ideologizaciones de algunos temas de nuestra historia. Por ejemplo, la invisibilización de los pueblos indígenas, cuyo pasado de más de 15 mil años se reduce en los textos a no más de dos páginas y después desaparecen del relato histórico. -Alguien dirá que, puesto que no tuvieron escritura, como si la tuvo el pueblo judío o el chino, no dejaron testimonio de antigua data. -La historia no es solamente de los pueblos con escritura sino también de los pueblos ágrafos. -¿Y cómo encontrar sus voces remotas si no las dejaron plasmadas sobre ningún soporte físico? -Se puede escribir a partir de los métodos de la arqueología y también a través de la historia oral que ellos mismos conservan. Pero el problema principal es que nuestros pueblos indígenas no se quedaron en ese pasado remoto sino que participaron y siguen participando del proceso histórico venezolano desde 1498. Otras versiones -¿Qué otros nudos ideológicos hay que romper? -La naturalización que la historia ha hecho de la esclavitud y la sinonimia negro=esclavo. La cultura de los pueblos afrodescendientes se despacha en la historiografía tradicional o conservadora tratándolos únicamente como esclavizados. Hay historiadores como Marcial Ramos Guédez que trata a los cimarrones, los cumbes y a todo el movimiento de
rebelión. - El chavismo, en la ocasión del bicentenario, asimila conceptualmente la independencia con la revolución bolivariana. ¿Fue realmente la independencia una revolución tal como la entendemos hoy en día? -Indiscutiblemente, y no sólo lo entiende así el chavismo. La independencia fue una revolución política y ocasionó un trastorno en la estructura social. No es cualquier cosa romper con 300 años de dominación colonial. -José Martí dijo que el mejor modo de celebrar la independencia es completarla. ¿Está irrealizada todavía? -Es muy acertado lo que escribió Martí. La independencia es todavía un proceso abierto, inconcluso. En el caso venezolano debemos estar orgullosos porque estamos celebrando el bicentenario de la independencia en el contexto de la revolución bolivariana, que es el esfuerzo supremo del pueblo por alcanzar la soberanía plena. -Resulta curioso que los más célebres historiadores de derecha del país no hayan estado presentes en las celebraciones del bicentenario. ¿No fueron invitados? -Ciertamente, se han mantenido al margen de esta fiesta. Y no porque no hayan sido invitados a los fastos, porque al fin y al cabo tienen a Globovisión y a sus nichos en las instituciones y en la propia Academia Nacional de la Historia. No han participado porque deben encontrarle mucho parecido al proceso independentista con la revolución bolivariana. Hay una operación ideológica por parte de la historiografía tradicional para invisibilizar a la independencia misma.
GANANDO LAS MENTES El duelo a muerte entre las dos visiones de la historia venezolana-la conservadora y la revolucionaria- va más allá de las disputas públicas, trasladándose hasta el campo editorial. Pellicer niega rotundamente que los historiadores burgueses estén ganando la pelea, que publiquen más y con mayor calidad que los historiadores de izquierda. “Se publican ellos mismos y lo ven como un negocio. Nosotros editamos a jóvenes historiadores como Rocío Castellanos que abordó el tema de los pardos (descendientes de blancos y negros) en la independencia venezolana; el trabajo colectivo de 12 historiadores del libro “Memorias de la Insurgencia” que rescata la participación popular en los años iniciales de la lucha patriótica; a Manuel Almeida que hizo una historia de los barrios “A mi barrio le ronca el mambo”; al español Miquel Izard que escribió un libro icónico “El miedo a la revolución” sobre la resistencia del mantuanaje a la lucha popular”.
EL TIEMPO Domi ngo 23 de oc tubre de 2011
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