Opinión
EL MUNDO I Sábado 15/06/2013
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PALESTRA
Los mándalas de la sociedad HAY QUE DETENER a tiempo las pretensiones hegemónicas que se observan, no solo en Venezuela, que ya es una dictadura, sino en El Salvador y el resto del continente, y eso corresponde a cada ciudadano, su conciencia y voluntad.
H
rente y un líder que guíe a ay algo que me su pueblo hacia la felicidad está molestotal, mediante la prometando desde sa de la erradicación de las hace algún injusticias, entre ellas la tiempo, en pobreza causada por el cacuanto a la relación del hombre con la sociedad y las difeJuan José Monsant pitalismo, objetivo que soAristimuño lo se logra alcanzar a través rentes propuestas que han Exembajador de un Estado fuerte, censurgido para encontrar y ofrevenezolano tralizador de decisiones y cer, una explicación y una soen El Salvador ejecuciones. Benito Muslución al hecho socioeconósolini definió el fascismo mico del vivir y compartir en de la siguiente manera: “Todo dentro una comunidad organizada. Más allá de revelaciones religiosas, es- del estado, nada fuera de él”. pirituales o filosóficas se encuentra el Esta opción parte de que el órgano sohecho concreto del hombre, animal ra- cial, instituciones, cultura, economía, cional capaz de elegir, amar, odiar, cre- educación forman un todo, único e inar o destruir; darle trascendencia a la divisible, donde no cabe la disidencia, existencia o limitarse al nacer, crecer, el interés o la libertad individual; crean desarrollarse, procrear y morir, para lue- una nueva trascendencia religiosa, hay go transformarse en particular orgáni- un único Dios que es el Estado, a él obecas, según las leyes de Lavoisier; y así decemos y él cuida de nosotros. una y otra vez hasta, quizás, su disolu- Este concepto, llámese, fascismo, nazismo, integrismo o comunismo, en ción definitiva o el mándala infinito. Si nos guía la trascendencia estaremos cualesquiera de sus actuales manifesen presencia de valoraciones: el bien y taciones, asume que el hombre es inel mal, luz y tinieblas, vida y muerte, capaz de gobernarse a sí mismo, vivir bello y feo, amor y desamor, Eros y Tha- pacíficamente en comunidad, asumir nos. Si por el contrario, se asume la no la justicia, dar a cada uno lo suyo o altrascendencia, estaremos en presen- canzar su realización, por lo que nececia del Leviatán, la materia inerte, la di- sita una estructura superior, el Estado, solución entre el bien y el mal, el des- que lo organice, discipline, proteja y amor y el Thanos absoluto. Esto, por- guíe. Tal postulado es un sofisma, se que no hay valoración, sino necesidad sustenta en el uso de la fuerza bruta, el de convivencia sujeta a reglas para ga- poder de las armas, el órgano policial, rantizar la paz social. Ante esta reali- militar y judicial ejercido por quien o dad, surgen las diferentes explicacio- quienes administran el aparato estatal, nes sobre los fines y función de la so- los nuevos dioses que premian o casticiedad, el Estado, formas de gobierno gan. El triunfo de la barbarie sobre la ciy maneras de relacionarse con ellas; si vilización. el hombre se debe a la sociedad, la so- En la antípoda del totalitaciedad a él o el equilibrio entre estas rismo se encuentran el dos realidades, aceptando y respetán- hombre y su dignidad, en su natural condición de lidose cada una su ámbito de validez. La reflexión anterior nos conduce al he- bertad, capacicho concreto ante el cual nos encon- dad de razonar, tramos envueltos a nivel planetario, par- elegir el bien soticularmente en nuestra región sur, cen- bre el mal, la luz troamericana y el Caribe. Veamos, se sobre las tinieblas, parte de un gran debate, de una gran op- el Eros sobre el Thanos, de asumir con resción: democracia o dictadura. Dadas las actuales circunstancias pare- ponsabilidad su trascenciera que coyunturalmente, la balanza dencia. Todo lo vuelca hainclina al estatismo, a lo menos eso pa- cia sí, pero también hacia rece deducirse al observar los ejemplos el otro, la comunidad, la soy, por derivación, de Venezuela, Cuba, Ecuador, Argenti- ciedad na, Bolivia, Nicaragua y los proyectados hacia la forma de organizarse, de gobernarse. casos de El Salvador y Honduras. Parten esos gobiernos o los partidos po- Se asume que las formas, orlíticos dominantes del principio in- ganizaciones, sociedades, gocuestionable que solo el Estado garan- biernos son para el hombre, tiza la paz social, la justicia, la equidad están a su servicio, no lo cony la igualdad. Para lo cual solo se requiere trario que, a falta de trasla concordancia de un partido o movi- cendencia, crean e impomiento, una propuesta política cohe- nen ídolos sin alma: el Es-
tado que termina por esclavizar al sujeto que pretende liberar. La solidaridad, la justicia, la equidad, el orden no son privilegio ni monopolio de doctrinas o ideologías totalitarias. No es el militarismo, el comunismo, el estalinismo, el fascismo, el castrismo, el chavismo, el capitalismo o socialismo, en sus diferentes mezclas o expresiones los poseedores y administradores de la verdad y la justicia. El natural estado del hombre es su libertad, y no hay ni habrá muro de Berlín o mar Caribe que le impida saltar una alambrada electrificada o montarse en una precaria balsa para sortear profundidades, corrientes o deshidrataciones en su búsqueda, que a veces solo llega a conocer por referencia o instinto. Las pretensiones de dominio y control por medio de las arma no bastarán para que la lucha por la democracia alcance su fin. Es inevitable, es la historia indetenible de la humanidad que deja tras de sí los trastos de los Atila, Hitler, Mussolini, Castros, Millán Astray, Stalin, Mugabes, Bin Landen, Chávez, Kaddafis, Marulanda y cuanto desquiciado de la Farc, ETA, Hezbollá ande con su Kalashnikov a cuestas. Es cierto, la democracia, el respeto al orden legal, la separación de poderes, el uso de la influencia indebida, el reparto de las riquezas de la tierra y la igualdad de oportunidades, se ha encontrado en deuda en nuestro continente con su población. La mayor de las veces han cerrado todas las puertas a la participación e inclusión, obligando a la violencia para rescatar lo que es de todos de manos de unos pocos, pero la democracia en la única vía digna, eficaz y segura de alcanzar la justicia social, garantizar el carácter subsidiario del estado en la economía y en la vida diaria del ciudadano, preservando la libertad y respetando la pluralidad. Hay que detener a tiempo las pretensiones hegemónicas que se observan, no solo en Venezuela, que ya es una dictadura, sino en El Salvador y en el resto del continente, y eso corresponde a cada uno de los ciudadanos, su conciencia y voluntad.
CRÍTICA
El doble discurso del presidente
E
l Señor Presidente de la República se llenó muchas veces la boca diciendo que la tregua entre pandillas no era patrocinada o promovida por el gobierno, que era un acuerdo promovido por entidades como la iglesia católica. El 1 de junio, en el discurso de su cuarto aniversario al frente del gobierno, el presidente Funes presentó como logro de su equipo la disminución de los promedios de homicidios que a diario ocurren en el país. Todos sabemos que la tregua entre las pandillas ha tenido un efecto en las cifras de los crímenes cometidos y que la mayor parte de esa reducción se debe a ese pacto. Sea claro; si el gobierno no es parte de la tregua, no tiene por qué atribuirse logros que no le corresponden ni a usted ni a su equipo de gobierno que ve el tema de la seguridad y justicia. Pero si insiste en decir que las reducciones de homicidios son producto de su gestión, amárrese el pantalón y acepte con honestidad que fueron incapaces de resolver el problema y que la única salida que vieron fue dormir con el diablo, es decir, pactar con los pandilleros Otro aspecto que no deja de preocupar es el de los privilegios con que los criminales han contado en este proceso; han gozado de popularidad a través de los medios de comunicación y hasta se les coordinaron evenWilmer tos como el que sostuvieron con Hernández Colaborador funcionarios de alto perfil como el director de la Organización de Estados Americanos (OEA). Es sabido también que las medidas de control en los centros penitenciarios se dilataron durante la tregua, los muchachitos allí recluidos necesitan comprensión y hasta televisores plasmas les llevaron, me imagino que debieron contar con otras prerrogativas que hacen que la cárcel no sea un infierno sino un paraíso. Presidente Funes, el tiempo que a usted le queda en el gobierno es menos de un año; tiempo que no es suficiente para solventar los problemas que aquejan a la población, ni tampoco goza de buen margen como para cumplir promesas que por ahora no son más que eso. La ansiada fábrica de empleos fue más bien un pequeño taller que está al borde desaparecer por falta de interés de sus promotores; la inseguridad sigue siendo una de las mayores preocupaciones de la población y la inversión extranjera parece que no llegará a aliviar la situación económica de nuestro país, esto último producto de la inseguridad jurídica que inspira el partido FMLN ya que ellos son los nuevos ricos, a través de Alba, y cuyos intereses parecen tener tentáculos por muchas actividades económicas. Bueno sería que aprovechara estos meses que le quedan al frente del gobierno en procurar una mejoría verdadera para la población; no digo con esto que no se ha hecho nada, reconozco que sí hay mucha gente beneficiada con algunas obras ejecutadas por su gobierno; soy un usuario del bulevar Monseñor Romero y la autopista los Chorros y el cambio es muy evidente, pero los problemas que más preocupan a la población parece que no han sido atendidos de la mejor manera y éstos sólo se podrán afrontar y, si no resolver, sí mejorar, cuando haya voluntad y capacidad.