El Gráfico Especial Nro 209 - Independiente Campeón 2002

770017 291005 ISSN 0017- 291 X 9

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diego levy

DICIEMBRE DE 2002 - Nº 209

independiente campeon

$4,50

edicion especial

GABY MILITO, EL GRAN CAPITAN LOS HEROES EN LA INTIMIDAD LAS DIABLITAS, UNAS DIOSAS

LA FELICIDAD. Insúa, autor de un golazo, y Milito, el baluarte, en la ansiada celebración. Son campeones por primera vez. Fiesta interminable.

apertura 2002 todo el festejo de los diablos de avellaneda

PARAISO ROJO Con la goleada ante San Lorenzo, el equipo del Tolo se coronó tras 8 años de espera. Talento y eficacia, las claves del merecido título, el número 14 en torneos de la AFA.

DE REGALO, UN POSTER DE COLECCION

flash

“¡DALE CAMPEON...!

DALE CAMPEON...!”

La locura de la vuelta olímpica. Franco, Botero, Milito y Pusineri encabezan la columna a la que se está por sumar el Gomito Gómez. El equipo de Gallego cerró la campaña con una goleada en el Nuevo Gasómetro y desató un grito que tenía guardado desde hace ocho años. En el vestuario sobraron las dedicatorias: para Racing, para Boca y... ¡para Cococho! ¿Quién es Cococho? Un muchacho con supuestas dotes de talismán, que arrancó el torneo acompañando a los Rojos y se pasó a Boca un par de fechas antes del final. Y bué... foto diego levy

flash

EXCLUSIVO PARA PIELES ROJAS Avenida Mitre, Avellaneda. La sede de los nuevos campeones el domingo por la noche.

Muchos llegaban desde el Nuevo Gasómetro, otros, la mayoría, habían gritado pegaditos a los televisores o a las radios. El desahogo llegó con el golazo de Federico Insúa, la tranquilidad con el gol número 16 de Andrés Silvera en el Apertura, y el delirio con el broche de Lucas Pusineri. Como música de fondo, las cargadas a Racing, un clásico cada vez que el Rojo festeja. Y esta vez había un motivo especial para festejar. Una cuestión de foto: jorge dominelli

7/EG

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EL GOL DEL CAMPEONATO Minuto 42 del segundo tiempo. Boca juega mejor y gana 1-0. La diferencia de puntos se esfuma y hay aroma a desempate. Pero el Rojo no baja los brazos. Aun sin jugar en su nivel, va y va, pone todo, deja el alma. Y entonces Milito toma la lanza, descarga en el pibe Rivas y vuela el centro que Pusineri, anticipรกndose a Crosa, cabecea junto a un palo para que la amargura quede tallada en las caras de Abbondanzieri y todo Boca. Gol y resurreciรณn. Gol y desahogo. Gol y mรกs de medio campeonato asegurado. foto eduardo sarapura

7/EG

LA CONSAGRACION / EL TITULO NUMERO 14

YA ERA Nunca en su historia, Independiente había pasado tantos campeonatos sin dar la vuelta olímpica. Por eso este Apertura debía marcar el final de la racha. En el partido decisivo, el Rojo desempolvó el fútbol que expuso en buena parte del torneo y pisó a San Lorenzo para enterrar las dudas. Las virtudes del campeón.

por diego borinsky

10/EG

H HORA

VUELTA Y VUELTA. Rolfi Montenegro, Castagno Suárez, Insúa, Gaby Milito y el momento soñado.

LA CONSAGRACION / EL TITULO NUMERO 14

YA ERA HORA. Tres semanas son demasiada espera, aunque el festejo se venga demorando por casi una década. No es justo que el corazón deba ser sometido a semejante maltrato, que haya que escuchar y leer y mirar y sentir la presión que es amenaza de burla y casi chicana, de la contra, de la prensa, del público imparcial, de todos.

Tres semanas esperando un partido decisivo, el pianito chiquitito, el paso firme y final para coronar una merecida, y por momentos lujosa, campaña. Tres semanas penando por un triunfo, Banfield, Boca y San Lorenzo mediante, con el campeonato como premio final y el precipicio ahí, al costado, amenazante y por momentos patéticamente real.

Ya era hora.

Lo tenés clara vos, pibe, te la contó tu abuelo y también tu viejo; vos, que apenas podés sumar con los dedos de una mano las jornadas gloriosas que te tocó vivir, aquella con Huracán del 94, la Supercopa contra Boca, esa otra en el Maracaná y pará de contar.

Lo sabe usted, señor, que se empachó de pichón con los 70, las cuatro Libertadores al hilo y los otro cuatro títulos locales, que prolongó su gozo en los 80, aunque ya con la luz del Bocha apagándose de a poco, y que todavía no puede entender los mamarrachos de la era moderna.

La juna de sobra usted, abuelo, que hasta lo vio a Erico y también a Capote de la Mata y se deslumbró con aquel maravilloso equipo de Grillo que no fue campeón pero quedó en la historia, que vio nacer la gran familia roja en los 60, la mística copera y todo lo que vino después, y que siempre se sintió integrante vitalicio de la elite del fútbol argentino y también mundial.

Ya era hora.

No se aguantaba más semejante descalabro.

Nunca Independiente había pasado tanto tiempo sin salir campeón. Si bien los 11 años que pasaron entre los títulos obtenidos en 1948 y 1960 son

FECHA 19 / 1º de diciembre de 2002

SAN LORENZO 0 INDEPENDIENTE 3 SAN LORENZO: Saja; Esquivel, Gonzalo Rodríguez, Morel Rodríguez, Paredes; Chatruc, Michelini, Zurita; Romagnoli; Astudillo, Acosta. DT: Rubén Insua.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y Eluchans; Pusineri, Castagno Suárez y Guiñazú; D. Montenegro e Insúa; Silvera. DT: Américo Gallego.

GOLES: PT. 32’ Insúa. ST. 4’ Silvera, 10’ Pusineri.

CAMBIOS: ST. Herrón por Zurita (SL) y Luna por Chatruc (SL); 21’ Ríos por Montenegro (I); 30’ Christian Gómez por Insúa (I) y Medero por Paredes (SL).

CANCHA: San Lorenzo.

ARBITRO: Gabriel Brazenas.

más que los que 8 que pasaron desde el Clausura 94 hasta hoy, esos 11 años se correspondieron con 11 campeonatos (se disputaba uno por año), mientras que desde aquella vuelta olímpica del equipo de Miguel Brindisi del 94 se sucedieron 16 torneos hasta esta consagración. Jamás el club de mayor cosecha internacional en el mundo, tuvo que mendigar en su país durante 16 campeonatos para dar una vuelta olímpica que se postergó en una espiral de fracasos que parecía no tener fin. Y ni siquiera las campañas pegaban en el palo, como para mantener en el hincha cierta expectativa o ilusión hasta el final. No, nada que ver. De los últimos 10 torneos, el Rojo salió una sola vez segundo (Clausura 2000) y otra vez 5° (Clausura 99). Después, todo bien abajo: 7° en el Apertura 97, 9° en el Apertura 99, 10° en Clausura 98 y en el Apertura 2001, 14° en el Apertura 2000, 16° en el Apertura 1998, 17° en el Clausura 2001 y último (por primera vez en la historia) en el Clausura 2002.

Ya era hora.

Porque si duele no ser campeón y duele mucho mirarla bien de lejos, duele muchísimo más todavía que vengan a gozarte en la cara, que disfruten en tus narices. Porque encima de todo, en estos años de malaria intolerable, el Rojo fue el partenaire perfecto, el invitado de lujo que presenciaba la vuelta olímpica del campeón de turno. Eso es la humillación futbolera en su estado más puro. Repasemos. Con Vélez padeció dos veces: 0-3 en Avellaneda (Apertura 95) y 0-0 en Liniers (Clausura 96) y a meterse rápido en los vestuarios para que giren los otros. River le festejó otras dos, antes de empezar el partido, porque se había coronado en la jornada anterior, y lo hizo tanto en Avellaneda (Apertura 96) como en Núñez (Clausura 97). Y Boca le dio dos vueltas más en la cara: en la Bombonera (tras el 0-0 por el Apertura 98) y en Avellaneda (luego de caer 0-4 por el Clausura 99). ¡Qué feo es comer pan delante del pobre! (y ser siempre el pobre).

Ya era hora.

Porque encima de todo, Racing viene a salir campeón después de 35 años y entonces ya no queda ni eso, ni el primo disfrazado de punching ball que siempre estuvo para la cachetada y ahora no está. No se puede cargar a Boca, ni a River ni a San Lorenzo, porque a todos les va mejor.

Ya era hora.

Gabriel Milito lo sabe más que nadie, porque sufrió cada una de esas decepciones desde las entrañas del club. Por eso aquel salto hacia delante, con el puño perforando el aire caliente de Avellaneda tras el empate heroico ante Boca, los gestos desencajados queriendo decir “al fin, loco, al fin, la puta madre” aunque faltara el formalismo de una fecha más, es la imagen perfecta de cuánto se debía Independiente un agasajo como éste. De cuánto lo necesitaba para re-

cuperar un poquito la autoestima pisoteada en estos últimos años.

En la caravana del campeón celebra Milito, consolidado definitivamente como crack de galera y coraje, después de las dudas que siempre genera cualquier lesión grave. Se lo ve al Rolfi, que jugó cuando no podía, que arriesgó prestigio porque no podía faltar en las batallas finales. Se abraza con el Pocho Insúa, virgen absoluto en esto de campeonar, acostumbrado a atender en el otro mostrador (el de la lucha por zafar), emblema del que las pide todas en cualquier cancha y bajo cualquier circunstancia, pecho caliente en el tramo final del torneo para jugar, hacer jugar y meter goles decisivos. El Cuqui Silvera traga saliva y también revancha, se demostró a sí mismo y también a los demás que sabe de verdad. Pusineri regala alegría: está hecho para

LA “SANA” costumbre de Fede Domínguez: dar la vuelta olímpica en andas y con muletas. Ya le había pasado con Vélez... Franco le hace el aguante, Insúa y Castagno Suárez van por el abrazo.

ganar. El Tolo siempre supo muy bien por qué lo quería en el plantel, por qué insistió tanto con su contratación, aun con el campeonato empezado. Sólo el gol contra Boca le valen dos años de contrato, pero Pusi da mucho más que eso.

Se advierte en el pelotón a Castagno y a Leo Díaz, dos que parecen calcados: la misma edad, la misma cuna, el mismo recorrido en el fútbol

(Newell’s, Colón), la misma indiferencia que despertaron al llegar y el mismo perfil bajo para crecer durante el torneo hasta ser columnas del equipo. Anda por ahí Juanjo, el menor de la dinastía Serrizuela, que apareció para cerrar el círculo que había iniciado su hermano Tiburcio, campeón en el 94: parece que sin Serrizuelas el título no vale. Y Fede Domínguez con sus mule-

tas, demasiado joven para ser tan campeón, vital por sus goles y también por su aporte ofensivo, por el contagio de su mentalidad ganadora.

Y Hernán Franco, siempre serio, siempre cumplidor. Y el Tolo, pobre Tolo, centro de todas las miradas y todas las bromas, que si el bobo le aguantó hasta el minuto 87 del partido con Boca, es porque está hecho de buena madera. Si➤

OPINION Por Miguel Angel Brindisi (*)

(*) DT campeón del Clausura 94.

INSUA ABRE el camino. A los 32 minutos, clavó este golazo tras una lujosa asistencia de Silvera.

leo la valle

LO PRIMERO que quiero destacar es que este equipo de Independiente ha logrado el título respondiendo a la línea histórica del club. Es un gran campeón. Por la solidez de su propuesta colectiva y por la brillantez de sus individualidades.

Más allá de los innumerables méritos que acumularon los jugadores y el cuerpo técnico a lo largo de la campaña, me parece que lo fundamental para este logro fue que el Tolo Gallego encontró el equipo desde la primera fecha. Encontrar el equipo no es nada sencillo, diría que es algo mágico, uno de los grandes misterios del fútbol. A veces el entrenador lo encuentra rápido, como en este caso, y en otras oportunidades no aparece jamás. Por más cambios y variantes que uno prueba, no hay caso. No aparece.

A mí me costó encontrarlo. Aquel equipo campeón del Clausura 94 recién apareció en la fecha 14. Después se consolidó y tuvo su mejor momento en la Supercopa, que también tuvimos la fortuna de ganar.

Pero hasta la fecha 14 se nos hizo muy cuesta arriba.

Entre mi equipo y éste del Tolo Gallego encuentro una gran coincidencia: la actitud, el deseo de protagonismo permanente en cualquier estadio, el respeto por una línea futbolística. Y, en lo personal, me provoca una gran satisfacción ver al Rolfi Montenegro en el nivel que ha mostrado. Yo hice mucho para traerlo a Huracán, para que volviera al fútbol argentino, porque soy un convencido de que es un jugador distinto, uno de esos muchachos alrededor de quienes hay que construir un equipo. “El equipo tiene que ser Montenegro y diez más”, me acuerdo que les dije en su momento a los dirigentes de Huracán. Tengo por él un respeto y una admiración especial. Por eso me provocó una doble satisfacción esta merecida consagración de Independiente ●

EL CUQUI hizo el segundo (arriba) y se diplomó de goleador del torneo. Abajo, Pusineri completa la obra.

leo la valle

La principal virtud de Gallego fue encontrar rápidamente a los titulares, algo muy difícil de lograr.

alberto raggio

UN GRAN CAMPEON

EL TITULO NUMERO 14 / LA CONSAGRACION

➤no le reventó ahí, no le revienta más.

Ya era hora.

Porque no se podía cerrar la campaña con un partido como los últimos, maniatado por los nervios y sin fútbol. Era necesaria la reivindicación futbolera para callar a la contra, pero sobre todo para recuperar el orgullo y el estilo que distingue a este equipo. Y el Rojo clausuró su conquista con un 3-0 claro, contundente, adornado por sus mejores combinaciones dentro del campo, ante un rival durísimo que jugó a cara de perro, un detalle que oxigena la salud del fútbol argentino.

Pocas veces se recuerda una última fecha de torneo local, con un equipo con nada para perder, que saliera a jugar con semejante determinación.

Y eso valora aún más esta consagración.

Independiente campeón, grito postergado que trona en el Nuevo Gasómetro y retumba en Avellaneda. Las cosas están en su lugar. Era hora.

LAS RAZONES FUTBOLERAS El último tramo de la campaña del Rojo tuvo bastante poco de fútbol, eso fue admitido hasta por los mismos protagonistas y no resiste ninguna discusión. Podría sostenerse que en un equipo con pocos futbolistas acostumbrados a obtener

cosas importantes, el “miedo a ganar” pasó sus facturas. Y además el hecho de tener cada vez más cerca el objetivo, la ansiedad por liquidar todo de una vez, llevó al equipo a privilegiar el resultado por encima del medio para obtenerlo. Y claro que por otro lado actuaron los nervios.

Pero si una repasa la campaña en general hasta los partidos con Banfield y Boca, encontrará varios aspectos para elogiarle al campeón. Cuando jugó bien (y lo hizo con bastante frecuencia en las 12 primeras fechas), fue el que mejor lo hizo de los 20 equipos: no hubo uno solo de los participantes del Apertura que llenara los ojos con el tiqui-tiqui que impusieron los muchos jugadores de “buen pie” que tiene este equipo del Rojo.

Tampoco hubo uno que mostrara su voracidad ofensiva, pese a jugar con un solo punta-punta: tuvo cuatro volantes dotados preferentemente para crear y lastimar (Insúa, el Rolfi, Guiñazú y Ríos) y dos marcadores de punta que saben más ir que volver (Fede Domínguez y Serrizuela).

Apenas contó como válvula de contención y equilibrio a los dos centrales, más Castagno, más Pusineri por momentos.

Se puede decir del Rojo, también, que fue el más regular: nunca perdió puntos en dos partidos

consecutivos (hasta el 1-1 con Boca). Es decir que respondió a cada pequeño bajón de tensión sobreponiéndose enseguida. Tuvo reacción, del mismo modo, para absorber la primera caída en el torneo, que bien podría haber significado un desbarrancamiento prematuro: después del 1-2 con River ganó cinco partidos en forma consecutiva, no dándole chance a su perseguidor de soñar con la punta.

Fue un equipo muy equilibrado, situación que queda en evidencia al repasar la performance individual de cada jugador: salvo Silvera, no hubo ninguno que estuviera a tope durante todo el torneo. El Rolfi tuvo lapsos, Insúa la rompió en algunos partidos y especialmente en los tramos finales cuando nadie podía asomar la cabeza, Guiñazú y Franco fueron bastante parejos, pero en ningún momento se vistieron de grandes figuras, los marcadores de punta tuvieron algunos picos, lo mismo que el Toti Ríos y Pusineri.

Y Gabriel Milito, que fue creciendo hasta afirmarse como el bastión del aguante en la interminable recta final.

A la hora de pasar la película del campeón, uno encuentra muchos goles clave, de ésos que cambiaron la historia. El de Silvera en el debut con-➤

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LA CONSAGRACION / EL TITULO NUMERO 14 leo la valle

EL GOCE del Tiburoncito Serrizuela y la imagen divina que lo acompañó debajo de la camiseta. Increíble, pero real: un Diablo que cree en Dios.

➤tra Lanús, cuando faltaban apenas tres minutos para el final, y la impaciencia de la gente comenzaba a hacer estragos. Ese gol, anotado después de que Fede Domínguez errara un penal 10 minutos antes, sirvió para liberar las tensiones y quebrar los maleficios: el primer triunfo del Tolo después de 10 partidos en su nuevo equipo, el primer triunfo del Rojo después de 14 partidos (sí, Independiente no ganaba desde la 5ª. fecha del campeonato anterior), el aire necesario para pensar en cosas grandes y también para salir del tercer puesto (empezando de abajo) en la tabla del descenso.

Imposible dejar de destacar el gol de Silvera a Racing, justo sobre la finalización del primer tiempo, circunstancia importantísima de un partido de la que muchos equipos no se pueden levantar, para llevar el clásico a 2-1 con un hombre menos, unos instantes después del impacto sufrido por el empate académico. El gol del Pichi Franco a Vélez, cuando restaban cinco minutos de un partido durísimo, justo ante un verdugo implacable del Rojo en la era mo16/EG

derna, y cuando estaba acumulando el segundo empate consecutivo, tras el 1-1 contra Newell’s, que lo podía estancar en una meseta complicada. El gol de Pusineri contra Huracán, porque había que levantarse después de la primera derrota y callar las voces agoreras que decían que el equipo se iba a caer. El descuento de Pusineri ante Arsenal –otra vez Pusi, llamado a convertir goles trascendentes– cuando moría el primer tiempo y se complicaba el panorama, después de una habilitación bochinesca de Silvera. El gol contra Estudiantes, que lo metió Aquino en contra, pero que fue empujado por todos, cuando cualquier resbalón hubiera permitido la escalada de River a la punta. Y el de Pusi a Boca, el gol del campeonato, que sirvió para devolverle la vida al Pueblo Rojo, cuando ya estaba en el limbo del más allá, y de pronto supo qué quería decir Víctor Sueiro con aquello de regresar de la muerte. Hay vida después de la muerte.

Independiente campeón, grito que explota con la fuerza de las cosas que se persiguen con an-

sias durante mucho tiempo. La casa (la cancha) pintada desde aquel arranque de temporada ante Libertad de Paraguay (2-0) porque se intuía lo que iba a pasar; el espectáculo de fuegos y cohetería para armar una fiesta en cada jornada de fútbol; la presencia masiva que signó el paso del equipo durante todo el torneo. De entrada, pareció que la gente supo que ésta vez la cosa iba a ser distinta. Y actuó en consecuencia.

En el final, un pequeño reconocimiento para José Pekerman, ese silencioso orfebre que dejó su sello en este equipo: Domínguez, Serrizuela, Rolfi, Silvera, Insúa y Milito, especialmente.

Baja el telón del Apertura. Es el final. El final de una etapa que todo hincha de Independiente querrá enterrar para siempre, la más oscura de la historia. La juna usted, abuelo; la sabés vos, pibe, por eso vale el desahogo y también el pecho que vuelve a recobrar su posición natural.

Independiente campeón del fútbol argentino, el mejor de todos.

Ya era hora �

EL SIMBOLO / GABRIEL MILITO

En el fondo también sobró categoría

NADIE LO MERECIA COMO EL CAPITAN Está en el club hace nueve años y fue uno de los pocos que se salvó del incendio de las últimas campañas.

Estuvo lesionado y ausente por 14 meses y reapareció para aportar toda su sabiduría en este campeonato.

Soportó el secuestro de su padre con entereza y, al fin, puede gozar su primer título en el fútbol argentino. por diego borinsky

HUBIERA SIDO UNA INJUSTICIA, una trampa del destino. Que aceptara la propuesta del Olympique de Marsella, del Lens, del Bayer Leverkusen, del Zaragoza o alguna otra de España que andaba dando vueltas por ahí tentándolo con una pila de dólares y una vida perfecta. A Gabriel Alejandro Milito lo quisieron desde pichón los clubes europeos porque veían en él un proyecto de defensor firme e intuitivo, temperamental y corajudo, características que este último campeonato se encargó de comprobar.

Realmente hubiera sido una injusticia que se fuera de Independiente sin saborear al menos un título, este veterano de 22 años que está a punto de redondear su novena temporada en el club del que además es hincha.

Nadie como el Gaby Milito merecía esta vuelta olímpica. Porque viste la camiseta desde las inferiores. Porque vivió los peores años en la historia del club y en cinco años de Primera no conoció jamás el significado de la palabra campeón. Porque vio desfilar planteles completos que sólo iban en busca de un billete ocasional mientras él se mantenía firme en su puesto de combate. Porque estuvo 14 meses parado antes de poder trabajar a full en la pretemporada previa a este Apertura. Porque le tocó padecer la miserable novela del secuestro de su padre. Porque estuvo cerca de quedar libre por el desprolijo manejo dirigencial. Porque es el capitán y símbolo. Porque es el más querido por la gente.

Y además, sencillamente, porque la rompió. En un equipo de notable vocación ofensiva, con dos marcadores de punta que van más de lo que vuelven y apenas un volante y medio preparado para defender (Castagno y medio Pusineri), Milito mostró que le sobran chapa y condiciones para cumplir su tarea sin fisuras.

Es decir, definitivamente se consagró como “defensor de equipo grande”, siempre listo para cortar al descampado, donde no cierra cualquiera sino el que tiene verdadero talento. Y hasta tuvo tiempo para soltarse y convertir lo que hubiera sido un golazo, ante Estudiantes, tras una apilada memorable que concluyó en una atajada de Docabo.

18/EG

–Desde el comienzo la gente reventó las canchas. ¿Por qué creés que se dio ese fenómeno: por Racing que salió campeón, por el miedo a la promoción o porque la gente dijo “vamos a empujar desde afuera”?

–Primero y principal, creo que la gente de Independiente siempre se ilusiona a principios de campeonato, como pasa con los hinchas de todos los equipos grandes, y es bastante común que en las primeras fechas llene la cancha si el equipo va bien. Esta vez quizás fue diferente a años anteriores en el sentido de que se armó un equipo bárbaro. A fines del último campeonato, seguramente ningún hincha imaginaba que se iba a armar un equipo como el que se armó, porque Independiente no estaba bien en el aspecto económico.

Pero entre las ventas de Vuoso y Forlán se juntó un dinero importante y el club lo gastó en jugadores de un nivel impresionante. Y eso la gente lo vio de entrada, lo percibió apenas se empezó a armar el equipo. De la misma forma que la gente, nos ilusionamos los jugadores que ya estábamos en el club al ver los refuerzos que venían. Y a eso se le sumó la vuelta de Rolfi, al que le había ido muy bien en la etapa anterior en el club. Fue otro factor que ilusionó mucho a la gente.

–¿Y el tema del promedio? Quizás la gente pensó: “Estamos complicados, vamos a bancarlos de entrada”.

–No sé, un mes antes de empezar este campeonato quizás la gente pensaba un poco en eso, porque era una realidad. Pero tampoco llegó a tener miedo porque enseguida se fue armando un equipo fuerte que no estaba para pelear esos puestos de abajo. La gente se entusiasmó enseguida y, a medida que fuimos ganando, las expectativas crecieron y cada vez fueron mayores.

–¿Cómo se levantaron después de una derrota como la que les tocó frente a River? ¿Se les cayó la estantería como al hincha?

-No, ese día no se nos cayó la estantería ni a nosotros ni a los hinchas, ni a nadie. Por supuesto que nos dolió perder, y después del partido o en los días posteriores, uno está mal y sólo piensa en jugar el partido siguiente para revertir la situación. Pero se mantuvo la tranquilidad porque a pesar de haber perdido logramos seguir primeros con dos puntos de ventaja sobre River. Eso nos tranquilizó y nos dio la pauta de que veníamos haciendo un gran campeonato, porque si después de perder con River seguíamos con la punta en nuestro poder por lo hecho sólo en ocho fechas, bueno, teníamos que seguir así. En ese partido contra River podía pasar cualquier cosa, lamentablemente nos tocó perder, pero al menos perdimos con nuestro estilo, sin guardarnos nada.

–Gabriel, ¿qué recordás de los días que empezaste a entrenarte con la Primera? ➤

“A fines del último campeonato seguro que ningún hincha imaginó que se iba a armar un equipo como el que se armó. Eso ilusionó al hincha y también a nosotros.”

OIIIOIIIOOOIIII IIOIIIOOOI / OIOII OIOOIOOIO

LA PELOTA domada en el pecho de Gabriel.

En su primer campeonato tras la lesiรณn, festejรณ a lo grande.

EL SIMBOLO / GABRIEL MILITO

➤ –Que fue todo muy rápido. A mí me sirvió muchísimo estar en la Selección juvenil, eso me permitió acelerar los procesos. Un chico del club quizás tiene que ir subiendo categoría por categoría, pero a mí, después de jugar el Sudamericano Sub-17 de 1997, cuando estaba pasando de la Séptima a la Sexta, me dijeron: “Gaby, tenés que ir a Reserva”. O sea que adelanté tres años de golpe y a los 16 empecé a jugar en la Reserva. En ese momento el entrenador de los grandes era Gareca y Gordillo estaba con la Reserva.

Mi primera concentración para un partido de Primera fue con Gareca, en un partido contra Colón que perdimos 2-0. No entré, pero tenía unos nervios bárbaros…

En ese momento ni me esperaba que me tocara concentrar y compartí la habitación con Ezequiel Amaya, que también se concentraba por primera vez. Después, jugamos de nuevo contra Colón para ver quién entraba en la Libertadores y perdimos de nuevo. Ahí se fue el Flaco y a la fecha siguiente agarró el Tapón.

Un par de fechas después, contra Ferro en Avellaneda, debuté reemplazando al Luli Ríos cuando faltaba 10 minutos. Ganamos 2-0. Fue todo tan rápido que ni pude ponerme a pensar si estaba para jugar o no en la Primera de Independiente.

–¿Qué sentiste estos años de campañas muy malas, cuando siempre Independiente fue un club acostumbrado a pelear arriba?

–No fue nada fácil, pero tampoco se le puede echar toda la culpa a los jugadores. Porque por el lado de la conducción, el club tampoco se pareció en nada al de otras épocas, el de la Gran Familia Roja. Antes, Independiente era un club modelo a nivel mundial, había superávit todos los años, se compraba a los me-

que sos mejor. ¿Te ves parecido a Trossero?

–De él como jugador no me acuerdo mucho, pero mi viejo y sobre todo mi abuelo, que es vitalicio desde hace 55 años, me contaron que era un monstruo. Sé que era un defensor fuerte, zurdo, y que hacía muchos goles. Tuve la suerte de tenerlo de técnico y por su gran experiencia como seis, supo darme consejos que me sirvieron. Por ejemplo, por mi costumbre de salir siempre jugando, me pedía: “Gaby, a veces sí y a veces no”.

Por ahí me decía después de repasar algún partido: “Ves, en esta jugada, la tendrías que haber puesto allá, en la Cordero”. Tácticamente también me aportó un montón. Además tengo una muy buena relación con él.

–Muchas veces pareciera que te lucís más cuando Independiente se queda con diez jugadores o cuando las papas queman. ¿Te motiva estar en desventaja?

–Cuando uno está en desventaja trata de empujar un poco desde el fondo. No nos podemos quedar. Cuando vas ganando todo es más fácil porque las cosas salen, pero cuando estás abajo, la desesperación te lleva a desordenarte. Y quizás así tenés que gritar y correr el doble… Pero eso no se da sólo en mí sino en el equipo en general. Eso nos pasó contra River: faltando 10 minutos nos empezamos a desordenar, porque ya era lo mismo; el 1-1 o el 2-0 era lo mismo. Uno respeta un sistema de juego hasta un tiempo, cuando vas perdiendo es otra cosa.

–Después de tu vuelta tras la lesión, confesaste que habías recuperado “la felicidad”. ¿Sos infeliz sin el fútbol?

–No es que sea infeliz, pero la felicidad completa para mí es que mi familia esté bien, que estén contentos, y

“Cuando perdimos contra River no se nos cayó la estantería porque, a pesar de la derrota, seguimos primeros y eso marcó que veníamos haciendo bien las cosas.”

jores. Hoy es todo a préstamo. Me acuerdo de que en la Novena, cuando recién empezaba, nos pagaban un premio por ganar, era poquito, no sé, diez pesos, pero hoy hasta a los de Primera nos cuesta arreglar los premios.

–¿Por qué desde que se fue Rotchen, Independiente no encontró un dos titular que formara una dupla estable atrás con vos?

–Lo que pasa es que Pablo era un dos diferente, la rompía, un crack. Yo tuve la posibilidad de jugar algún partido con él y puedo asegurar que es distinto, no es un dos que se encuentra todos los días. Cuando él se fue costó reemplazarlo, y los que ocuparon su lugar no se pudieron consolidar en el puesto. Ahora está Franco, que anda muy bien, y creo que fue uno de los más parejos del equipo.

–Trossero dijo una vez que jugás parecido a él, pero 20/EG

en lo personal poder jugar, más allá de los resultados y de que esté circunstancialmente caliente si me toca perder. Estoy feliz por jugar, porque mi familia está bien, porque estoy de novio… Uno empieza a valorar todo esto cuando le pasan cosas como las que me pasaron a mí en los últimos tiempos. Con lo de la lesión y lo de mi viejo aprendí a valorar ese tipo de cosas.

Quizás antes no pensaba de esta manera. Ahora también quiero ganar siempre, pero le doy prioridad al tema de jugar y, si me toca perder, sé que las reglas del fútbol también son ésas. Ahora no por eso voy a negar la emoción enorme que significa ganar el primer título con el club de toda la vida y del que soy hincha.

Gabriel Milito, campeón del Rojo por primera vez a los 22 años. Un premio merecido e insólitamente postergado �

alejandro del bosco

LA POSTURA del capitรกn. Siente que si no grita, no estรก jugando bien.

LA CAMPAÑA / PARTIDO POR PARTIDO

“PIANO A PIANO” El Tolo Gallego propuso una versión libre del famoso refrán italiano y los jugadores le respondieron de un modo espectacular. Un repaso por los momentos inolvidables de la campaña roja: los condimentos que le dieron sabor a la previa, las frases para el recuerdo y las alternativas más salientes de cada partido.

por elias perugino

22/EG

FIESTA ROJA en Avellaneda. Una constante a lo largo del campeonato.

LA CAMPAÑA / PARTIDO POR PARTIDO

EL TOLO SE QUEDO PENSANDO. Estiró el “eh…” lo más que pudo y, al final, largó lo primero que se le vino a la cabeza. Obligado por el periodista a tirar una sentencia que pareciera ingeniosa, exprimió al máximo su impronta y le puso se sello a la campaña que se venía. La pregunta del cronista lo agarró con la guardia baja: “Merlo dijo que Racing iría ‘paso a paso’ y salió campeón, ¿cuál es tu frase para Independiente?”. Apurado como cuando se le iba uno de esos habilidosos que tan bien solía marcar, el técnico de Independiente zafó con un “piano a piano”. Pobre Tolo: quiso decir “piano, piano”, apelando al refrán itálico “piano, piano, se va lontano”, en referencia a que, con tranquilidad, se puede ir muy lejos. Pero le salió “piano a piano”. Y aquí estamos, entonces, recorriendo cada eslabón de la cadena roja como el Tolo quería: piano a piano, partido a partido...

PIANO I: 2-0 A LANUS LA PREVIA: Fiebre roja a cada paso. Después de pintar las tribunas del estadio, los hinchas reventaron las boleterías. Durante julio se hicieron 1.200 socios nuevos, mientras que otros 2.000 renovaron sus abonos de platea. Mientras se activaban las reuniones para traer un punta –¿Fuertes? ¿Sosa?– y el benefactor Grinbank moría por sumar a Pusineri, los dirigentes luchaban para evitar las inhibiciones que, por falta de pago, presentaron los jugadores Galván, Bustos y Sala, hecho que hacía peligrar el debut de los refuerzos.

Y en el complejo de Dominico también pasaban cosas. El Tolo se iba de rosca practicando pelota parada –“No puede ser que haga diez meses que Independiente no mete un gol de tiro libre”– y los periodistas lo mataban a bocinazos. ¿Qué pasó?

El técnico no los dejó ver un entrenamiento y les permitió ingresar al predio media hora después de

lo previsto. Entonces los cronistas se vengaron tocando las bocinas de sus 11 autos. “¿Quién cumple años, que festejan tanto?”, se desentendió el Tolo.

UNA FRASE: “No pensamos en el descenso, sólo en hacer una gran campaña.” (Leo Díaz).

EL PARTIDO: Victoria durísima, aunque muy merecida. Pareció que se complicaba cuando Flores le atajó un penal a Fede Domínguez. Pero se encaminó sobre el final con los goles de Silvera y Eluchans. A propósito: el Cuqui la metió luego de bancarse que Carlos Galván le volara medio diente incisivo superior de un codazo. ➤ ➤ La noche, que había empezado con una descomunal fiesta de banderas y bengalas, se cerró con un buen augurio: la victoria sirvió para romper una racha de 14 partidos sin victorias. Cinco meses en lo que todo había sido amarguras.

PIANO II: 1-1 CON GIMNASIA LA PREVIA: El miércoles anterior, el Tolo rompió todas las marcas. No sólo entrenó a puertas cerradas, sino que también cerró la confitería de Dominico, entre las 11.30 y las 13.15, para que el plantel comiera el asado de la cábala. Los pibes de inferiores tuvieron que esperar a que terminaran para picar algo en el barcito…

Cierra el libro de pases y hay apuro por definir algunas cosas. La AFA otorga diez días más de plazo para cerrar lo de Pusineri, debido a la convocatoria de San Lorenzo. Y se produce un batacazo en el rubro defensores. No llegan ni Lucas Alesandria ni Adrián González. El elegido es el lateral Raúl Damiani, libre de Newell’s, que se transforma en el séptimo integrante del grupo con algún pasado leproso. Los otros son Américo Gallego (DT), Roque Alfaro (AC), Pablo Guiñazú, Hernán Franco, Castagno Suárez y Leo Díaz.

UNA FRASE: “Vamos por ser historia. Y la his-

toria la escriben los campeones”. (Milito).

EL PARTIDO: Un buen rendimiento en una cancha complicada. La victoria estaba casi en el buche tras el gol de Fede Domínguez. Independiente controló el campo y la pelota, también dispuso de las situaciones. Pero no supo resolverlo y pagó en el minuto final, cuando Leo Díaz salió mal en un centro y permitió el inmerecido empate de Choy.

Al Tolo le hicieron falta varias horas para sacudirse la calentura. Pero dejó una frase que el grupo supo asimilar para el futuro: “Los partidos duran 94 minutos, no nos podemos distraer.”

PIANO III: 3-1 A OLIMPO LA PREVIA: ¡Qué semanita tuvieron que aguantarle los muchachos al Tolo! Estaba loco porque al equipo le faltaba contundencia. Y los torturó con los números en la mano: en las dos primeras fechas habían creado 33 situaciones de gol, pero sólo convirtieron 3. Un porcentaje bajísimo, realmente. Afuera hubo buenas noticias: se concretó la incorporación de Pusineri y se acordó que Taranto sería el sponsor a partir del clásico con Racing.

UNA FRASE: “Quiero ser el dos del campeón.

Estuve en la peor campaña de la historia y ahora quiero estar en una de las mejores”. (Franco) EL PARTIDO: Hubo que remontar la cuesta.

Olimpo se puso arriba con un gol en contra de Leo Díaz –se llevó por delante una pelota impulsada por Carrario– e Independiente lo dio vuelta con una gran noche de Insúa. La tribuna fue otro carnaval, potenciado por el infartante debut de Las Diablitas. Y camuflado entre los alcanzapelotas estuvo un fana famoso: el tenista Gastón Gaudio.

PIANO IV: 4-1 A RACING LA PREVIA: Se afirma la cábala del asado de los miércoles, pero cunde la incertidumbre. ¿Se jugará

CAMINO A LA GLORIA FECHA 1 / 27 de julio de 2002

FECHA 2 / 4 de agosto de 2002

FECHA 3 / 10 de agosto de 2002

FECHA 4 / 19 de agosto de 2002

INDEPENDIENTE 2 LANUS 0

GIMNASIA 1 INDEPENDIENTE 1

INDEPENDIENTE 3 OLIMPO 1

RACING 1 INDEPENDIENTE 4

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; L. Ríos, Castagno Suárez y Guiñazú; D. Montenegro e Insúa; Silvera. DT: Américo Gallego.

LANUS: Flores; Hoyos, Galván y G. Ramón; Romero, S. García, Carboni, Eros Pérez y Leo Rodríguez; A. López y Bustos Montoya.

DT: Daniel Córdoba.

GOLES: ST. 42’ Silvera (I); 46’ Eluchans (I).

CAMBIOS: ST. 16’ Emanuel Rivas por Insúa (I); 17’ Galetto por Leo Rodríguez (L); 21’ Eluchans por Guiñazú (I); 23’ Risso por Bustos Montoya (L); 37’ Salomón por Eros Pérez (L).

DETALLE: ST. 32’ Flores (L) le atajó un penal a F. Domínguez (I).

CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Daniel Giménez.

GIMNASIA: Olave; San Esteban, G. Noce y Goux; Madrid, Pautasso, Larrosa y Choy; L. Lobos, Enría y Turienzo. DT: Carlos Ramacciotti.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; L. Ríos, Castagno Suárez y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

GOLES: PT. 26’ F. Domínguez (I). ST. 44’ Choy (G).

CAMBIOS: ST. Arce por Turienzo (G); 28’ Eluchans por Insúa (I); 35’ A. Montenegro por L. Ríos (I); 39’ Castillo por Larrosa (G); 40’ Brusco por G. Noce (G).

CANCHA: Gimnasia.

ARBITRO: Héctor Baldassi.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; L. Ríos, Castagno Suárez y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

OLIMPO: Aguirre; Marra, Laspada, Medina y Tavio; Mannara, Pietravallo, R. Martínez y J. Fernández; Abaurre y Carrario. DT: Julio Falcioni.

GOLES: PT. 12’ L. Díaz (I), en contra; 40’ Castagno Suárez (I). ST. 18’ Insúa (I); 25’ F. Domínguez (I).

CAMBIOS: ST. 3’ Carrió por Pietravallo (O); 21’ Desagastizábal por Abaurre (O); 33’ Delorte por Mannara (O) y Eluchans por Guizanú (I); 44’ Rivas por Insúa (I).

CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Angel Sánchez.

RACING: Campagnuolo; Pumar, Maidana y Ubeda; G. Rivarola, Bastía y Arano; S. Romero y Peralta; M. Estévez y D. Milito. DT: Osvaldo Ardiles.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; L. Ríos, Castagno Suárez y Guiñazú; D. Montenegro e Insúa; Silvera. DT: Américo Gallego.

GOLES: PT. 15’ L. Ríos (I); 22’ S. Romero (R); 44’ Silvera (I). ST. 32’ y 39’ D. Montenegro (I).

CAMBIOS: PT. 10’ Belloso por D. Milito (R); 22’ Villavicencio por Insúa (I); 24’ Morigi por G. Rivarola (R). ST. 17’ Pavlovich por Pumar (R); 23’ Pusineri por Ríos (I); 25’ Eluchans por Guiñazú (I).

EXPULSADOS: PT. 19’ G. Milito (I), por juego brusco. ST. 11’ M. Estévez (R), por doble amonestación.

CANCHA: River (local Racing).

ARBITRO: Héctor Baldassi.

anibal greco

ROLFI MONTENEGRO fue la gran preocupación para todos los rivales, no sólo para Vélez.

o no en Racing? La Academia no tiene okey el circuito de televisión para garantizar la seguridad y se habla de reprogramarlo para el lunes 19 de agosto (feriado) para no postergarlo. Que en Racing, que el Monumental… Idas y vueltas, mientras el equipo busca contundencia en los entrenamientos y Montenegro sueña despierto: “Ojalá le meta mi primer gol a Racing.”

Ah... el presagio de goleada empezó en las boleterías. Una vez confirmado River, los hinchas rojos agotaron las populares el primer día, mientras que Racing sólo vendió el 10%.

UNA FRASE: “Los caudillos no existen más, lo mío es el equilibrio.” (Castagno Suárez) EL PARTIDO: Un goce para el espíritu rojo. Por varias razones: el fútbol de alto vuelo, el doble debut del Rolfi en la red –tremenda su corazonada–, por la fiesta en la popu y por la pólvora exquisita que ya mostraba Silvera. Es cierto, hubo errores arbitrales, como aquel gol mal anulado a Maxi Estévez. Pero no alcanzaron para disimular una gran producción. ¿Una bronca? La expulsión de Milito.

PIANO V: 1-1 CON NEWELL’S LA PREVIA: Mucho gaste para Racing, motorizado por los afiches callejeros que reflejaba un listado de las 50 empresas argentinas más admiradas con una leyenda: “Qué lástima, en esta tabla tampoco figurás. Mucha preocupación por la fisura del meñique izquierdo del pie de Franco: “Me duele una barbaridad, pero voy a jugar infiltrado.”

Mucha confianza para el pibe Matías Villavicencio, elegido para reemplazar a Milito. Y mucho tole tole por la novela de Guiñazú. “No puede jugar, hay una cláusula que lo impide”, decían desde Rosario.

“Esa cláusula no existe. Si Gallego quiere, puede usarlo”, retrucaban desde Avellaneda.

UNA FRASE: “Si le ganamos a Newell’s, so-➤

FECHA 5 / 24 de agosto de 2002

FECHA 6 / 1º de septiembre de 2002

FECHA 7 / 6 de septiembre de 2002

FECHA 8 / 13 de septiembre de 2002

INDEPENDIENTE 1 NEWELL’S 1

VELEZ 1 INDEPENDIENTE 2

INDEPENDIENTE 7 COLON 1

CHACARITA 2 INDEPENDIENTE 6

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Villavicencio, Franco y F. Domínguez; L. Ríos, Castagno Suárez y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

NEWELL’S: Passet; Vella, Grabinski, Crosa y Adinolfi; Liendo, Ponzio, Domizi y Manso; Rosales y Sacripanti. DT: Julio Zamora.

GOLES: PT. 38m Rosales (N). ST. 9’ F. Domínguez.

CAMBIOS: ST. 17’ Rivas y Pusineri por Insúa y L. Ríos (I), 22’ Lagorio por Sacripanti (N), 27’ Eluchans por Guiñazú (I), 30’ Marino por Liendo (N) y 37’ Rodas por Manso (N).

CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Oscar Sequeira.

VELEZ: Sessa; Dudar, Fuentes y Uglessich; Falcón, Somoza, Bustos, Jonas Gutiérrez y P. Pérez; Husain y Nanni. DT: Carlos Ischia.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; L. Ríos, Castagno Suárez y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

GOLES: PT. 2’ Silvera (I). ST. 13’ Nanni (V), 36’ Franco (I).

CAMBIOS: ST. 5’ Valdemarín por Husain (V), 22’ Gracián por P. Pérez (V), 24’ Pusineri por L. Ríos y Rivas por Insúa (I), 38’ Arias por Somoza (V) y Eluchans por Montenegro (I).

EXPULSADO: ST. 49’ Franco (I), por doble amonestación.

CANCHA: Vélez.

ARBITRO: Angel Sánchez.

INDEPENDIENTE: Albil; Serrizuela, Villavicencio, G. Milito y F. Domínguez; L. Ríos, Castagno Suárez y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

COLON: Irigoytía; Morant, Píccoli, Herbella y A. Pereyra; Capurro, Romagnoli, Toresani y J. Delgado; Parodi y Carignano. DT: Jorge Fossati.

GOLES: PT. 13’ J. Delgado en contra (I), 19’.

D. Montenegro (I) y 43’. Silvera (I). ST. 4’ Leonel Ríos (I), 22’ Silvera (I), 28’ Rivas (I), 33’ Romagnoli (C) y 42’ Silvera (I).

CAMBIOS: ST. Bontemps por Píccoli (C) y Blanco por Parodi (C); 11’ Mina Polo por J. Delgado (C), 20’ Pusineri por L. Ríos (I), 27’ Rivas por D. Montenegro (I) y 30’ Eluchans por Guiñazú (I) CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Sergio Pezzotta.

CHACARITA: Navarro Montoya; Furios, Gamboa y Pena; S. Romero, Rivero, Rosada y Mignini; M. Delgado; Torales y Di Paolo. DT: José Pastoriza.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; L. Ríos, Castagno Suárez y Guiñazú; D. Montenegro e Insúa; Silvera. DT: Américo Gallego.

GOLES: PT. 11’ M. Delgado (C), 18’. Insúa (I), 29’, 33’ y 39’ Silvera (I), 36’ Insúa. ST. 5’ Insúa (I) y 23’ Pena (C).

CAMBIOS: ST. R. Díaz por Di Paolo (C) y Pusineri por L. Ríos (I), 12’ Rivas por Silvera (I), 19’ Pedernera por S. Romero (C) y Cella Ruggeri por Rivero (C) y 25’ Eluchans por D. Montenegro (I).

CANCHA: Vélez (local Chacarita).

ARBITRO: Oscar Sequeira.

anibal greco

LA CAMPAÑA / PARTIDO POR PARTIDO

EL GRITO loco de Castagno Suárez, actor principal en el gol de la dura victoria ante Estudiantes.

➤mos candidatos al título.” (Insúa).

EL PARTIDO: Vibrante y emotivo. Otra vez la camiseta azul para alimentar una cábala. Y otra vez un racimo de situaciones que no se concretan, al punto que tres tiros pegaron en los palos. Jugó Guiña, por supuesto. Y Castagno Suárez, el líder silencioso, se puso la cinta de capitán que por un mes no podría usar Milito. Fue empate con sabor a poco, pero ambos quedaban compartiendo la punta. Y eso no estaba mal.

PIANO VI: 2-1 A VELEZ LA PREVIA: Predominó la angustia por el secuestro de Jorge, el papá de Milito, liberado pocas horas antes del partido. El Tolo les hizo el bocho para que se cuidaran con las amarillas: “En cinco

partidos nos pusieron veinte amarillas, no puede ser…”. Y metió mil fichas para que mejoraran la puntería. En uno de los arcos de Dominico colgó un par de aros para que practicaran desde afuera del área. No sólo había que embocarle al arco, sino pasarla por el aro…

Cunde la onda del rapado. Maquinita en mano, Serrizuela va eligiendo víctimas. Esta vez, Ríos.

UNA FRASE: “Esta victoria se la dedico a mi viejo y a todos los que sufrieron por él.” (Milito) EL PARTIDO: Gaby jugó por pedido de su padre –estuvo en la platea– y la rompió. El desarrollo fue cerradísimo, con chances para ambos. Desequilibraron dos asistencias de Serrizuela, claves para los goles de Silvera y Franco. Lo reconoció el propio Gallego: “El empate hubiera sido lo más justo.”

Pero eso le importó muy poco a Fede Domínguez, que mostró la remera que tenía debajo de la camiseta, dedicada a su hermano Eduardo: “Perdón por esto”. Perdón, pero se mataba de risa…

PIANO VII: 7-1 A COLON LA PREVIA: Inhabilitado Leo Díaz por una cláusula del préstamo, Gallego confirma a Damián Albil tres días antes del partido. Mientras se levanta una polvareda que pone en duda la localía. Finalmente, el juez Battafarano aceptó el recurso de Independiente y no dio lugar al pedido de suspensión del Comité Provincial de Seguridad Deportiva. La cancha había sido clausurada el lunes previo, a pedido del ex comisario Gallina, por no cumplir con la reglamentación que prohíbe el ingreso de banderas mayores a 2x1 ni el uso de pirotecnia, no cumplido por el Rojo frente a Olimpo y Newell’s.

UNA FRASE: “Tenemos hambre de gloria, ganas de hacer historia.” (Guiñazú).

EL PARTIDO: Un paseo descomunal. Un concierto de lo mucho y bueno que el equipo fue capaz de hacer cuando sintonizó dos armas letales: precisión y velocidad. Hubo toques, lujos, golazos… Para todos los gustos.

PIANO VIII: 6-2 A CHACARITA LA PREVIA: Después de ver lo que le pasó a Colón, Fernando Gamboa, de Chaca, enciende el alerta: “Salvo del arquero, hay que cuidarse de todos.”

La maquinita de Serrizuela continúa con su raid.

Arranca la semana amenazando a Eluchans, y anuncia a Milito y al Tolo como víctimas en carpeta. Al final, peló a Eluchans.

UNA FRASE: “Antes, mi hijo me decía papá; ahora, pelado botón.” (Guiñazú).

EL PARTIDO: Otra exhibición. Y otra tripleta de Silvera, ya encaminado hacia la cima de la tabla de

CAMINO A LA GLORIA FECHA 9 / 22 de septiembre de 2002

FECHA 10 / 29 de septiembre de 2002

FECHA 11 / 4 de octubre de 2002

FECHA 12 / 12 de octubre de 2002

INDEPENDIENTE 1 RIVER 2

HURACAN 0 INDEPENDIENTE 2

INDEPENDIENTE 3 ARSENAL 2

TALLERES 1 INDEPENDIENTE 4

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; L. Ríos, Castagno Suárez y Guiñazú; D. Montenegro e Insúa; Silvera. DT: Américo Gallego.

RIVER: Comizzo; Garcé, Demichelis, C. Ayala y R. Rojas; L. González, G. Pereyra y V. Zapata; D´Alessandro; A. Domínguez y Fuertes. DT: Manuel Pellegrini.

GOLES: ST. 1’ L. González (R), 42’ D´Alessandro (R), 44’ Pusineri (I).

CAMBIOS: ST. Astrada por G. Pereyra (R), 16’ Pusineri y Rivas por Insúa y L. Ríos (I), 19’ Cuevas por A. Domínguez (R), 28’ Jersson González por Luis González (R), 30’ Eluchans por Guiñazú (I).

CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Claudio Martín.

HURACAN: Schulmeister; Graieb, Pranich, Lobos y Lavallén; Alonso, Monsalvo, Avalos y Zermattén; Comba y Fleita. DT: Carlos Babington.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; Pusineri, Castagno Suárez y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

GOLES: PT. 37’ Pusineri (I). ST. 38’ Silvera (I).

CAMBIOS: ST. Villa por Comba (H); 25’ L. Ríos por Pusineri (I); 29’ Cochas por Avalos (H); 36’ Eluchans por Insúa (I); 43m Trecco por D. Montenegro (I).

CANCHA: Huracán.

ARBITRO: Angel Sánchez.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; Pusineri, Castagno Suárez y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

ARSENAL: Limia; Cristian Alvarez, C. Ruiz, V. Molina y D. Espínola; Vespa, P. González, Esmerado y Andrizzi; J. Morales; S. González. DT: Jorge Burruchaga.

GOLES: PT. 9’ J. Morales (A), 11’ S. González (A), 36’ Pusineri (I) y 43’ Insúa (I), de penal.

ST. 6’ Silvera (I).

CAMBIOS: ST. 20’ Piersimone por Andrizzi (A) y L. Ríos por Pusineri (I), 28’ Eluchans por Insúa (I), 37’ Trecco por D. Montenegro (I), Cantero por Vespa (A) y Grondona por J. Morales (A).

CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Claudio Martín.

TALLERES: L. Islas; Bressán, Galarza, Smigiel y V. López; Devallis, S. Carrizo, J. Lux y Bustos y La Paglia; Quinteros. DT: Sergio Batista.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; Pusineri, Castagno Suárez y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

GOLES: PT. 12’ D. Montenegro (I), 16’ La Paglia (T), 26’ Silvera (I). ST. 25’ C. Gómez (I), 30’ Silvera (I).

CAMBIOS: ST. 16’ Christian Gómez y L. Ríos por Insúa y Pusineri (I), 22’ C. González por Devallis (T), 30’ Solana por S. Carrizo (T), 32’ Pernía por Montenegro (I).

EXPULSADO: ST. 24’ V. López (T), por doble amonestación.

CANCHA: Estadio Córdoba.

ARBITRO: Daniel Giménez.

torneo. Fede Domínguez fue desequilibrante por

anibal greco

EL PARTIDO con Chacarita fue uno de los más vibrantes del

abajo y también luchó en la cancha por arriba.

artilleros. La popu lo premió con un grito: “Para Silvera, la Selección.”

PIANO IX: 1-2 CON RIVER LA PREVIA: Se venía un partido clave y el mejor elogio que podía hacérsele a Independiente partió de Manuel Pellegrini, el técnico millonario: “En Independiente todos piensan y hacen lo mismo.” Implacable, Serrizuela dejó sin pelos a Albil.

Y el Tolo, acaso atado a un presagio, dijo: “Si le ganamos a River, nos rapamos Milito y yo”.

UNA FRASE: “Independiente es precisión y velocidad, River es gambeta.” (Gallego) EL PARTIDO: Tremendo. Con ambos jugándose en cada ataque. Con Independiente más voraz, transformando a Comizzo en figura. Con River más práctico y certero saliendo de contra, como la que D’Alessandro aprovechó para clavar el segundo. Cayó el invicto rojo, y desde la tribuna de River le dedicaron un cantito irónico a Gallego: “Cortate el pelo, la p… que te parió.” Pero el Tolo, como para levantar el ánimo de su tropa, sorprendió con una frase pletórica: “Ahora lo digo con todas las letras: Independiente va a salir campeón”.

PIANO X: 2-0 A HURACAN LA PREVIA: El Tolo vio terreno fértil para meter un cambio que venía maquinando desde fechas atrás: Pusineri por Ríos. Dedicó sus esfuerzos a mantener la moral del grupo y trató de prestarles poca atención a los dardos que tiraba Carlos Babington, su archienemigo desde que tuvieron un problema personal cuando pugnaban por la dirección técnica de River. “Los triunfos contra él los disfruto más”, tiró el Inglés. “La envidia es dolorosa”, se apiadó el Tolo.

UNA FRASE: “Contra River perdimos una batalla, no la guerra.” (Castagno Suárez).➤

FECHA 13 / 20 de octubre de 2002

FECHA 14 / 27 de octubre de 2002

FECHA 15 / 2 de noviembre de 2002

FECHA 16 / 9 de noviembre de 2002

INDEPENDIENTE 1 ESTUDIANTES 0

INDEPENDIENTE 3 CENTRAL 1

NUEVA CHICAGO 2 INDEPENDIENTE 2

INDEPENDIENTE 1 UNION 0

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; Pusineri, Castagno Suárez y Guiñazú; D. Montenegro e Insúa; Silvera. DT: Américo Gallego.

ESTUDIANTES: Docabo; Ramos, Quatrocchi y Colotto; A. Donnet, A. Zapata, Aquino y Krupovisea; Pompei; Farías y Pavone. DT: Oscar Malbernat.

GOL: ST. 29’ Aquino (E) en contra.

CAMBIOS: PT. 37’ L. Ríos por Serrizuela (I), 41’ Kmet por Krupoviesa (E). ST. 18’ Rivas por Insúa (I), 32’ Zúñiga y H. Cardozo por Pavone y Aquino (E), 36’ Christian Gómez por Montenegro (I).

EXPULSADOS: PT. 17’ Guiñazú (I) y Ramos (E), por agresión.

CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Héctor Baldassi.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Damiani, Franco, G. Milito y F. Domínguez; Pusineri, Castagno Suárez y Eluchans; D. Montenegro e Insúa; Silvera. DT: Américo Gallego.

CENTRAL: Castellano; Ferrari, Talamonti, D. Díaz y Cárdenas; M Quinteros, Erroz, Gvo. Barros Schelotto y De Bruno; Mandra y Figueroa. DT: César Menotti.

GOLES: PT. 32’ Silvera (I). ST. 1’ Figueroa (C); 5’ y 31’ D. Montenegro (I).

CAMBIOS: PT. 16’ Papa por D. Díaz (RC). ST. 22’ P. Sánchez por De Bruno (C) y L. Ríos por Insúa (I); 28’ C. Delgado por Figueroa (C); 30’ Christian Gómez por Pusineri (I); 34’ Rivas por D. Montenegro (I).

EXPULSADOS: ST. 6’ Eluchans (I), por doble amonestación.

CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Roberto Ruscio.

CHICAGO: Velázquez; Arguello, C. García, Barbona y Ortiguera; Serrano, Huerta, J. Santana y Couceiro; Carreño y Ceballos. DT: Néstor Gorosito INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Damiani, Franco, G. Milito y F. Domínguez; Pusineri, Bazán y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera.

DT: Américo Gallego.

GOLES: PT. 11’ F. Domínguez (I). ST. 14’ Couceiro (Ch); 35’ Silvera (I), de penal; 37’ Serrano (Ch), de penal.

CAMBIOS: ST. L. Ríos por D. Montenegro (I), 21’ Testa por Ortiguera (Ch), 28’ Rivas por Insúa (I), 29’ A. Montenegro por Bazán (I), 38’ Amaya por Couceiro (Ch), 44’ Castellanos por Carreño (Ch).

CANCHA: Vélez (local Chicago) ARBITRO: Daniel Giménez.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y F. Domínguez; Pusineri, Castagno Suárez, Guiñazú; Insua y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

UNION: Nereo Fernández; F. Ortíz, Raggio y Mosset; A. González, Priotti Norberto Fernández y Humoller; L. Torres, R. Capria; y Silva Pro. DT: Néstor Craviotto.

GOL: PT. 15’ Pusineri (I).

CAMBIOS: ST. Perezlindo por Norberto Fernández (U), 16’ Zapata por L. Torres (U), 29’ C. Gómez por D. Montenegro (I), 32’ Basualdo por Humoller (U), 36’ Eluchans por F. Domínguez (I).

CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Oscar Sequeira.

leo la valle

LA CAMPAÑA / PARTIDO POR PARTIDO

SILVERA pierde entre Cavallo y Adrián González. Banfield sorprendió en Liniers.

➤EL PARTIDO: Pavada de debut para Pusineri: entró como titular y metió el primero antes de que terminara el primer tiempo. Flor de espina, además, para los hinchas del Globo, ya que el gol lo convertía un ex de San Lorenzo. Ni se imaginaban que el puñal definitivo se los clavaría un ex del club, Andrés Silvera, que convirtió uno de los goles más lindos del campeonato. ¿Babington y Gallego? Ni se miraron.

PIANO XI: 3-2 A ARSENAL LA PREVIA: Ocurrió lo imaginable. Desde la contra despacharon dardos por la vinculación de la familia Grondona a ambos clubes. “No somos una sucursal de Independiente, es ridículo pensar que está todo arreglado”, dijo el vice de Arsenal,

Miguel Silva, tratando de apagar el fuego. Mientras tanto, Leo Díaz era rapado. Y el Tolo seguía en la suya y tiraba la bronca porque los medios filmaban mucho los partidos de Independiente, cosa que servía para que les tomaran la mano…

UNA FRASE: “Creo en el fútbol espectáculo.”

(Gallego) EL PARTIDO: Un parto. Arsenal se puso 2-0 en 12 minutos. Los mismos plateístas que recibieron a Burruchaga con aplausos, lo insultaron grosso al término del primer tiempo. ¿Cómo lo dio vuelta el Rojo? Con una interesante conjunción de fútbol y temperamento. Y también porque un error arbitral lo ayudó en un momento clave. Si el árbitro Martín no cobraba el inexistente penal a Guiñazú, que sirvió para el 2-2, la cosa podía complicarse.

FECHA 17 / 17 de noviembre de 2002

FECHA 18 / 24 de noviembre de 2002

BANFIELD 2 INDEPENDIENTE 1

INDEPENDIENTE 1 BOCA 1

BANFIELD: Luchetti; Barraza, A. González, Sanguinetti y Cocca; Moreno y Fabianesi, P. Fernández, Cavallo y W. Jiménez; Cervera y Colautti. DT: Luis Garisto.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Villavicencio, G. Milito y Pernía; Pusineri, Castagno Suárez y Guiñazú; Insúa y D. Montenegro; Silvera. DT: Américo Gallego.

GOLES: PT. 10’ Insúa (I). ST. 22’ A. González (B), 42’ W. Jiménez (B).

CAMBIOS: PT. 28’ C. Gómez por D. Montenegro (I) y Bilos por Cervera (B). ST. 15’ J. L. Sánchez por P. Fernández (B); 26’ Rivas por C. Gómez y L. Ríos por Pusineri (I); 46’ D. Giménez por W. Jiménez (B).

CANCHA: Vélez (local Banfield) ARBITRO: Angel Sánchez.

INDEPENDIENTE: Leo Díaz; Serrizuela, Franco, G. Milito y Eluchans; Pusineri, Castagno Suárez y Guiñazú; D. Montenegro e Insúa; Silvera. DT: Américo Gallego.

BOCA: Abondanzieri; Burdisso, Schiavi y D. Crosa; M. Donnet, Cascini, Battaglia y C. Rodríguez; Tevez; M. Delgado y G. Barros Schelotto. DT: Oscar Tabárez.

GOLES: PT. 38’ Guillermo Barros Schelotto (B). ST. 42’ Pusineri (I).

CAMBIOS: ST. 23’ Rivas por D. Montenegro (I); 30’ L. Ríos por Guiñazú (I); 38’ C. Gómez por Eluchans (I).

CANCHA: Independiente.

ARBITRO: Héctor Baldassi.

28/EG

alberto raggio

CAMINO A LA GLORIA INSUA acosado por Cascini.

PIANO XII: 4-1 A TALLERES LA PREVIA: Desde el Monumental se oyen quejas por algunos fallos arbitrales que favorecieron a Independiente. Gallego los cruza como cuando era jugador: “Ellos son los mejores… hablando, je.”

Dos toques de atención antes de viajar a Córdoba: 1) Silvera se contracturó en una práctica. 2) Franco arrastra una fatiga muscular en el muslo derecho. Estaban en duda, pero llegaron…

UNA FRASE: “Siempre vamos a tener problemas atrás porque atacamos. Cuando lo atacan, al Real Madrid también le hacen goles”. (Gallego) EL PARTIDO: El Tolo festejó su partido 19 como entrenador rojo con otra gran exhibición futbolística. Más allá de los escasos centímetros que estaba adelantado el Rolfi cuando metió el primero, dio una lección de aprovechamiento de los espacios en ataque. “Es el mejor del campeonato”, sentenció Islas, que soportó un golazo de Gomito Gómez, debutante en el torneo. ¿La tribuna? Una pinturita. Diez mil hinchas viajaron desde Avellaneda.

PIANO XIII: 1-0 A ESTUDIANTES LA PREVIA: Crecen los rumores de una futura venta de Milito al Real. Grinbank, el mesías, confiesa que “con este equipo siento la misma adrenalina que cuando traje a los Stones.” Y el Tolo, que huele algo feo, aprieta las clavijas: “Esta es la gran chance para ser campeón, no hay que relajarse…”

UNA FRASE: “Quiero hacerle el gol del campeonato a Boca.” (Silvera) EL PARTIDO: Uno de los huesos más duros. Trámite áspero y cerrado. Afuera Guiñazú por expulsión. Afuera Serrizuela por lesión. Y mucho huevo adentro, hasta que un cabezazo de Castagno Suárez rebota en Aquino y se mete para sellar la ventaja mínima. “Pensé que perdíamos”, confesó Gallego en la conferencia de prensa, mientras de fon-

do se sentía el relato de los 5 goles que Banfield le metía a River para dejarlo 5 puntos abajo.

PIANO XIV: 3-1 A CENTRAL LA PREVIA: La ansiedad fue la principal compañera. No por la distensión que dejó afuera a Serrizuela, sino porque se venía el River-Boca. “Un empate estaría bien”, decía el Tolo. Congregados en el estadio dos horas antes, los hinchas gritaron los goles de Delgado como si los hubiera hecho Silvera. Y se dispusieron a disfrutar de una victoria que los dejara ocho puntos arriba.

UNA FRASE: “Tenemos medio título.” (Milito) EL PARTIDO: El equipo resolvió el compromiso con autoridad. Ni siquiera lo inquietó el empate transitorio de Figueroa. Siguió en la suya y lo volcó con dos golazos del Rolfi.

PIANO XV: 2-2 CON CHICAGO LA PREVIA: Si bien se luchó contra el aburguesamiento, fue imposible abstraerse del clima festivo que dominó cada entrenamiento de la semana. Nada les hizo cosquillas, ni siquiera los rumores de una supuesta incentivación de Boca a Chicago a través de un ex compañero, Ariel Carreño.

UNA FRASE: “Si Gallego quiere que ataje, yo

me pongo los guantes.” (Pusineri) EL PARTIDO: Independiente nunca pudo sostener el rendimiento. Y Chicago lo complicó con fervor. El Sargento Giménez inventó un penal para cada lado y el empate fue justo.

PIANO XVI: 1-0 A UNION LA PREVIA: Todos los cañones le apuntaron a la recuperación de Montenegro, herido en un tobillo. El Rolfi le dio duro y parejo a la arena y llegó con lo justo, infiltración mediante.

UNA FRASE: “Al final del torneo no importa cómo jugás, lo que vale es ganar.” (Pusineri) EL PARTIDO: Complicado por la lluvia, el viento y los nervios. Lo abrió el gol de Pusineri y pudieron liquidarlo algunas contras, pero faltó claridad.

El Rojo lo ganó con más garra que brillantez. Y tuvo que soportar una baja inesperada: la fractura de Domínguez. Seis puntos sobre nueve por jugar.

PIANO XVII: 1-2 CON BANFIELD LA PREVIA: Rumores al por mayor aludiendo a una supuesta incentivación de Boca a Banfield.

Preocupación porque el Rolfi y Serrizuela estaban entre algodones. Cruces dialécticos con los jugadores xeneizes, enojados por la mudanza del Tala-

dro a Liniers. Y la huida de Cococho, un hincha amuleto, hacia las huestes del Maestro Tabárez.

UNA FRASE: “Mirá si vamos a depender de Cococho. Los periodistas son divinos...” (Gallego) EL PARTIDO: Un rival bien plantado, cortando los circuitos de Independiente. El gol de Insúa abrió un partido cerrado, con Leo Díaz transformado en figura. Y en la recta final, ya sin el Rolfi, la mejor producción del equipo de Garisto se plasmó en la red. Fue un golpe duro. Boca había ganado y se ponía a tres puntos en la antesala del partido clave. Un golpe que convocaba al fuego sagrado.

PIANO XVIII: 1-1 CON BOCA A PREVIA: Semana caliente. Declaraciones cruzadas, cánticos desde la vereda de enfrente –“Están todos cagados...”–, concentración anticipada para buscar serenidad.

UNA FRASE: “Calentitos los panchos.” (Gallego).

EL PARTIDO: Jugado al límite, como se debe hacer en una final. Más fluidos los circuitos de Boca, que se puso en ventaja y luego no supo liquidarlo.

Más discontinuo Independiente, pero con el temple funcionando a mil. Y esa personalidad lo condujo al empate a tres minutos del final. Un empate que tendía una alfombra roja para la consagración... ●

SOCIOS / FEDERICO INSUA-ROLFI MONTENEGRO

A PURO talento. Un cabeza entre el Pocho y el Rolfi, entre Insúa y Montenegro, emblemas del mejor fútbol de Independiente.

por ignacio levy / foto: martin sorter

PINGPONG 10 Los dos fantasistas del campeón recuerdan algunos momentos top de la campaña del modo que mejor saben hacerlo: a un toque. Un veloz ida y vuelta con los máximos generadores de fútbol del equipo que regaló los pasajes más lujosos del torneo.

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SOCIOS / FEDERICO INSUA-ROLFI MONTENEGRO

UNA CATARATA de baba cae de los palcos del sector Erico empapando las plateas locales y revienta contra la orilla del alambrado salpicando los bancos de suplentes. Nace en la boca de los mismos socios de antaño que, meses atrás, con la garganta en erupción, hacían temblar a cardiólogos y fonoaudiólogos suplicando por volver a beber un vaso del más añejo fútbol de la casa. La sensación térmica ahora es alta y ya han pasado los peores torbellinos de insultos dirigidos a inmigrantes sin la identificación requerida.

La sequía de títulos daba miedo, pero la de fútbol

DM: El día que obtuvimos el campeonato, obviamente. Para mí, un momento insuperable.

4) LA SEMANA MAS DURA FI: Y… la más difícil fue la que vino después de la derrota contra River. Era la primera vez que perdíamos en todo el campeonato. Y la previa a Boca.

DM: La posterior al partido contra Chicago, porque me tocó tener que recuperarme de una lesión en el tobillo y hasta último momento no sabía si iba a poder jugar el siguiente partido.

5) EL MEJOR VIAJE EN MICRO FI: Todos. Sinceramente no me puedo quedar con

uno porque fueron muy parecidos e igual de alegres. El grupo es bárbaro y durante todo el año fuimos cantando en el viaje a la cancha. Si tengo que optar por alguno, no sé, me quedo con todos los que jugamos de locales, por el recibimiento de la gente cada vez que llegamos al estadio.

DM: Es difícil decir uno solo, pero el que más recuerdo es el viaje de ida a la cancha de River para jugar el clásico contra Racing.

6) LA VICTORIA MAS DIFICIL FI: Contra Estudiantes, fue un partido durísimo.

DM: Eh… Contra Estudiantes, también, a pesar de

“LA SEMANA MAS DIFICIL FUE LA QUE VINO DESPUES DE LA DERROTA CONTRA RIVER. ERA LA PRIMERA VEZ QUE PERDIAMOS EN EL CAMPEONATO, Y NOS BAJONEO UN POQUITITO.”

1) EL GOL QUE MAS GRITASTE FEDERICO INSUA: El que le hice a Olimpo de Bahía Blanca, en el segundo tiempo. Porque todavía íbamos 1 a 1 y no pintaba fácil.

DANIEL MONTENEGRO: Los dos goles que metí en el partido contra Racing. Fueron el tercero y el cuarto, y los festejé un montón a los dos.

2) EL GOL QUE MAS SUFRISTE FI: El que nos metió Serrano de penal, en el empate con Chicago. Estábamos ganando 2-1 y se pusieron 2-2 cuando faltaban cinco minutos…

DM: La verdad es que no hubo ninguno en especial. Siempre te duele que te hagan un gol.

3) EL MOMENTO MAS LINDO FI: No hay dudas de que lo mejor de todo fue haber ganado el título, pero el día que le ganamos a Racing también estuvo bueno, fue inolvidable.

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alberto raggio

daba ataques de nervios. Más de diez años atrás había quedado el vaivén del reloj que sostenía Bochini ante los asientos de una platea hipnotizada.

Sólo Garnero había conseguido un presente de 10 en 1994, con aquella asociación lírica que compuso junto a Gustavito López. Desde entonces, pocas gotas dulces cayeron sobre los paladares negros, a excepción de aquel período menottista que revivió la esencia, pero no logró saciar la sed de las vitrinas. Entonces, la apuesta era triple para evitar que se marchitaran los más idílicos ejemplares de Avellaneda: romper el candado de los promedios, llegar al campeonato y jugar al fútbol.

De atrás para adelante, empezaron Federico Insúa y Daniel Montenegro, dos especímenes de raza, jugadores del verbo jugar, 10 más 10 en el ataque.

Un fútbol en extinción les permitió dar la vuelta y extraer infinitos hilos de saliva de una platea tan exigente como exquisita. Toco y voy, toco y toco, toco y vení, toco al Cuqui, toco a la red, toco por un lado, voy por el otro. Así, como un pingpong. Un pingpong de 10…

EL POCHO llevó la 10 en la espalda. Se la ofreció Néstor Clausen cuando llegó y él aceptó el reto.

que se jugó en Avellaneda, fue muy difícil.

7) EL ENTRETIEMPO MAS ALEGRE FI: El del partido contra Colón, primero por cómo estábamos jugando y después porque terminamos el primer tiempo ganando 3-0.

DM: Y… no sé, alegre, alegre, ninguno. Uno no puede entrar riéndose a un entretiempo.

8) EL FOUL QUE MAS TE DOLIO FI: Que me acuerde, uno que me hizo Couceiro cuando jugamos contra Chicago. De hecho, a raíz de ese golpe quedé lesionado y tuve que salir.

DM: El que me hizo Huerta, también en el partido

que empatamos contra Chicago. Después de eso estuve a punto de perderme el partido ante Unión.

9) LA SALIDA MAS ESPECTACULAR FI: Sacando la última, no voy a elegir una sola, me quedo con dos: primero, la del partido contra Central, y después, la del día cuando jugamos contra River. Fueron impresionantes.

DM: Uh… Me acuerdo de las salidas contra Colón, con River, con Racing… Siempre en Independiente son bárbaras, no importa la cancha.

10) LA MAYOR CALENTURA FI: Y… quizá mi mayor calentura en este torneo

haya pasado por el tema de ser reemplazado. A uno no le gusta salir nunca y entonces, cuando le toca, se pone mal. ¿Cuál fue el día que más me fastidió salir de la cancha? Contra Estudiantes.

DM: El día del partido contra Chicago, cuando me lesioné el tobillo.

PORMENORES de una historia con fútbol al por mayor. Y un futuro trazado con puntos suspensivos… “¿Hasta cuándo seguiré en Independiente?

Ehhh, no sé, en diciembre se verá”, adelanta Insúa, y Montenegro sostiene que “de acá en adelante,

“EL FOUL QUE MAS RECUERDO ES EL QUE ME HIZO HUERTA, DE CHICAGO. A RAIZ DE ESE GOLPE QUEDE LESIONADO Y TUVE QUE

anibal greco

SALIR. Y LO SENTI HASTA EL FINAL DEL CAMPEONATO.”

EL ROLFI jugó con el 23 en la camiseta –igual que en Huracán–, pero con otra 10 en el alma.

por lo que dice mi contrato, jugaré en el club seis meses más. Después veremos”. Ambos llegaron al Rojo por obra y gracia de Daniel Grinbank, quien se sentó especialmente con Insúa a una mesa de café para convencerlo, y se empecinó en capturar al Rolfi como fuera: “Antes de que se concretara el pase, había intentado traerlo tres veces y por distintos motivos no se había dado. Es el jugador que más me gusta de la actualidad”, aseguró el empresario. Y tanto como él, los quería Gallego. Para que jugaran, para que hicieran jugar y para que hicieran babear. Juntos, obvio. “Solamente en España me pusieron algunos partidos ‘por la banda‘, como le dicen ellos. Pensaban que podía jugar ahí porque era rápido. Pero después siempre fui 10, y acá no me pareció raro que me pusieran con otro volante creativo, porque yo jugué así la mayoría de las veces. En Huracán, estuve con Sixto Peralta y después con Lucho González. Siempre traté de complementarme y cumplir con mi función”, afirma Montenegro, mientras Insúa destaca que “lo importante era lograr que no nos anularan con un solo marcador a los dos”.

En los números son el 10 y el 23, por una cuestión de quién llegó primero y porque no es posible jugar con dos 10 en un mismo equipo. El Pocho fue el destinatario de la camiseta más pesada: “Me la ofreció Clausen cuando llegué y lo tomé como una linda responsabilidad”. El Rolfi aclara que “no fue un tema que hayamos hablado entre nosotros, ni con nadie. Algunos jugadores eligieron sus números, pero la mayoría acató lo que decidió el técnico.

Yo me quedé con la 23 porque la había usado antes en Huracán. En aquella oportunidad, había tres camisetas para elegir y la que más me gustaba era ésa”. Diferentes espaldas, idéntica filosofía. Con la costumbre de mimar a la pelota, quedaron fundidos en la historia como el número 20 del Independiente campeón, ese doble 10 que volvió a empalagar a los más indelebles paladares negros ● 33/EG

EL DREAM TEAM produccion: maxi goldschmidt, tomas ohanian e ignacio levy

34/EG

UN EQUIPAZO / LAS DIABLITAS

INFERNALES. Arriba: Adriana, Denise, Lorena y Yamila. Abajo: Sabrina, Soledad y Tamara.

Las Diablitas causaron tanta sensación como los muchachos del Tolo. Con sus coreografías sugerentes y una indumentaria que invitó a sumergirse en el mejor de los infiernos, provocaron ovaciones comparables a las que levantaron los goles de Silvera y los lujos del Rolfi. Conózcalas un poco más...

35/EG

LAS DIABLITAS / UN EQUIPAZO

ADRIANA CALVO (30)

SABRINA GARAYCOCHEA (23)

TAMARA GONZALEZ (22)

“En los tiempos libres me gusta leer y mis

“Soy fanática de los deportes, por eso estoy

“Me gusta mucho el hip hop. Tengo amigos

libros preferidos son los de psicología. En el

haciendo el profesorado de educación física.

músicos y siempre vienen a casa a tocar para

horóscopo soy de Libra. Antes era de Boca o

Me encantan la natación y la gimnasia deporti-

mí, cuando agarro la batería no me para nadie.

de River, pero ahora soy hincha del Rojo a

va. Soy de Virgo y me gustan todos los chicos

Del Rojo, el jugador que más me gusta es el

morir. Mi jugador preferido es Leo Díaz.”

del plantel, no me puedo quedar con uno solo.”

Rolfi Montenegro, la tiene atada.”

“DIABLO: nombre general de los ángeles rebeldes arrojados por Dios al abismo”. Por lo menos eso se lee en las páginas de un viejo diccionario rojo. Entonces, por deducción y en pocas palabras, estas siete chicas serían ángeles que el Barbudo nos arrojó hace tres meses desde el cielo (¡gracias a Dios!). Angeles –perdón, Diablitas– rubias, morochas y pelirrojas, vestidas de rojo, listas para salir a la cancha, matar y volver al infierno que, en este Apertura, sin lugar a dudas, estuvo más encantador que nunca.

“Todo nació con la idea de realizar un show en la previa de los partidos de Independiente. Nos presentamos en un casting y entre 400 chicas, por suerte, quedamos nosotras. Ahora todas somos fanáticas del Rojo”, cuenta Denise Bell, 29 años, quizás la más famosa de las siete por ser la inspiradora del hit “mostrá las tetas, la p... que te parió” la tarde en que su escote dijo basta y se rindió ante la presión, regalando a las cámaras de TV imágenes para repetir y repetir en super-híper cámara lenta.

“En mi caso mucho no cambió mi vida desde que soy Diablita –aclara Adriana Calvo, 30 años, bailarina, actriz y cantante–, porque yo ya trabajaba en el mundo del espectáculo. La verdad, mucho no me gustaba el fútbol, sólo me prendía en algún partido de Argentina. Ahora me gusta más, seguí toda la campaña del Rojo campeón.”

“Digamos que yo soy la más caradura de todas –se prende Soledad Velázquez, 20 años, la más joven del grupo–. Antes no cantaba ni bailaba. Las vi a las chicas en la cancha y empecé a llamar al club, a la sede, a todos lados, para preguntar cómo podía hacer para sumarme a Las Diablitas.

Tanto insistí que conseguí una prueba y me fue bastante bien. Después del show, me cambio, me pongo un gorro y me voy a la popu con mi novio.

Por suerte no me reconocen, si no…”

36/EG

EL DICCIONARIO sigue arrojando definiciones. “Diablo: persona a la que se compara con el demonio por traviesa, temeraria o astuta”. ¿Las Diablitas traviesas, temerarias y astutas? Vuelva a la página anterior y mire la foto de apertura otra vez. Mammmita…

“Salir a la Doble Visera es algo re lindo –se sincera Tamara, 22 años, bailarina y profesora de hip hop– por la pasión de la gente. Los hinchas nos tratan muy bien y siempre recibimos mucho cariño. Eso sí: nunca nos cruzamos con los jugadores; ni una vez, no nos dejan. Quizás los desconcentramos un poquito, ¿no?”

“Es verdad –confirma Lorena Liggi, 23 años, bailarina, ex integrante de la revista del dúo Artaza y Cherutti–, no quieren que veamos a los jugadores para que no se digan cosas raras. Nosotras salimos, hacemos nuestro show y nos vamos. No

SOLEDAD VELAZQUEZ (20) “Estudio veterinaria y estoy haciendo el CBC en Ciudad Universitaria. Por suerte nadie me reconoce, porque no soy muy sociable en la facu. Soy de Escorpio y mi jugador preferido es Gaby Milito; es el mejor de la defensa, me encanta.”

LORENA LIGGI (23)

YAMILA REINA (23)

DENISE BELL (29)

“Estudié ingeniería en la UBA, pero ahora dejé,

“Disfruto mucho cuando paseo a mi perra y,

“Me gusta hacer todo tipo de gimnasia, además

ya que no tengo tiempo. Me gusta todo lo que

como buena cordobesa, me encanta dormir la

hago aparatos todos los días para mantener la

sea canto y actuación. Soy de Acuario y mis

siesta, aunque hace tanto que no lo hago que

figura. Soy de Capricornio y de los chicos del

jugadores preferidos con Milito y Silvera. Pero

ya ni me acuerdo. Soy de Sagitario y como

equipo campeón, sin dudas, me quedo con Fede

todos en el equipo son facheros.”

hombre me quedo con Insúa, es un bombón.”

Insúa, es el más lindo de todos.”

“¿SI GALLEGO NOS MIRA DE REOJO? Y... EL TOLO SE HACE EL DURO. PERO MIRA, SABE QUE SUS CHICAS SON LAS MAS LINDAS. A LOS JUGADORES NO LOS CONOCEMOS, AUNQUE NOS ENCANTARIA...” somos como las porristas de Boca y de Racing.

Igualmente las Diablitas somos únicas, no tenemos comparación...”. Denise, además, contesta y deja bien clara la pregunta del millón.

–¿Gallego no las mira de reojo, ni les dice nada?

–Y… el Tolo se hace un poco el duro. Pero mira, sabe que sus chicas son las más lindas...

LA RUTINA de Las Diablitas no es sencilla y menos lo fue en los partidos previos a la obtención del campeonato. Arriba a las 7 de la mañana, alguna recorrida por las radios o canales de televisión, poco tiempo para comer, y más trabajo, y clases de canto a la tarde. “Trabajamos desde las 9 de la mañana hasta las 2 del día siguiente –cuenta Yamila Reina, cordobesa, ex conductora de un programa de tevé para chicos–. Además algunas grabamos el disco que acaba de salir y estábamos todo el día de acá para allá. Es cansador, pero, a la vez, gratificante. Ni siquiera tiempo para novio nos queda. ¿Quién aguanta a una chi-

ca como nosotras, con esos horarios?”. Vuelva a la página anterior, vea la foto otra vez y contéstele (consejo: no grite, su mujer lo puede escuchar...)

Las Diablitas no sólo juegan en la cancha y amenazan con meter uno de los temas del CD entre los hits del verano. Finalizado el campeonato, también tienen planeado realizar alrededor de 180 shows en todo el país, por lo que todas cancelaron sus vacaciones. “Las canciones las eligen WAM y Sony Music –cuenta Sabrina Garaycochea, profesora de educación física y hermana de Leonardo, ex jugador de Racing–. Digamos que ocupamos el hueco que hay hoy en día, porque están las Bandana, que tienen una repercusión importantísima, pero que apuntan a un público más adolescente. Nuestra idea es llegar a los chicos y también a la gente más grande, que nos sigue mucho.”

A la hora del fútbol, todas se declaran conocedoras y tiran abajo el mito de que las mujeres no saben nada sobre el tema: “Me parece que Independiente dio un ejemplo de fútbol en todo sentido.

Hizo una muy buena campaña y jugando muy bien”, comenta Yamila, admiradora incondicional de Milito y Silvera. Lorena, la capitana de Las Diablitas –siempre llega primera a todos lados y se encarga de la charla técnica antes de salir a la cancha– tuvo un pasado de pisadas, caños y rabonas en su Mar del Plata natal. “Siempre jugábamos con las chicas del barrio. A los chicos les molestaba porque decían que era un deporte exclusivo para ellos. Yo jugaba bastante bien, pero era tanto lo que nos molestaban que tuve que dejar. Obvio, siempre me ponía los colores del Rojo”, aclara.

EL DICCIONARIO REGALA las últimas palabras. Diablo: Aplíquese a la persona que con costumbres escandalosas se mete a dar buenos consejos”. ¿Las Diablitas escandalosas? Bueno, eso queda a criterio de cada hincha de Independiente. Si lo desea, puede volver a la foto de apertura.

Tranquilo, su mujer no le puede decir nada. Después de todo, usted está leyendo una revista en homenaje al Rojo campeón, ¿o no? ● 37/EG

RETRO / TODOS LOS CAMPEONES

CUNADE CRACKS Si algo une a los 14 equipos de Independiente campeones, es el respeto por el buen juego. Impulsados por hinchas de paladar negro, fueron lujosos colectivamente y le ofrendaron individualidades inolvidables al fútbol argentino: Erico, De la Mata, Sastre, Grillo, Artime, Bertoni, Bochini, y siguen las firmas...

por carlos irusta / fotos: archivo el grafico

Y PENSAR QUE TODO ARRANCO con un grupo de vendedores y cadetes de la gran tienda “A la Ciudad de Londres”. Eso fue para agosto de 1904: los hombres se juntaron para tomar un café y sacarse el gusto de formar un equipo propio. Así que el encargado de la zapatería, Rosendo Degiorgi, fue el presidente provisorio. Será porque todos se habían ganado la independencia futbolera, vaya uno a saber. Pero así nació el Independiente Football Club, en un bar cercano a la esquina de Hipólito Yrigoyen (entonces Victoria) y Perú.

Treinta años más tarde –ahora con cancha propia y todo–, Independiente lograría su primer campeonato de la AFA con números aplastantes: 25 ganados, 3 empates, 4 derrotas; y un total de 115 goles, o sea un promedio de 3,59 por partido. Vilariño, De la Mata, Erico, Sastre y Zorrilla eran una máquina de golear. Y el astro era Arsenio Erico: “Era todo lo que tenía que tener un forward –escribió Juvenal en El Gráfico–: el maestro del suspenso.

Cuando venía con la pelota atada al botín derecho, dejaba al back en el camino, lo enganchaban, se caía, parecía que iba a perderla, pero, por un mila-

38/EG

gro de equilibrio, recuperaba la vertical y la seguía llevando para gambetearse a otro...”.

Capaz de hacer taquitos en el aire, el paraguayo –llamado también Trampolín Invisible– sería el símbolo de esa pasión roja por el fútbol bien jugado, por el buen trato del balón y esa necesidad permanente de buscar la victoria en todo momento. Si aquel 1938 fue el de Erico, con 43 goles, no le iba demasiado atrás De la Mata, quien totalizó 27.

Erico se plantó en los 43 goles el 18 de diciembre, ante Lanús. Sucede que los cigarrillos 43 habían ofrecido 2.000 pesos a quien marcara, justamente, 43 goles. Erico –quien por otra parte pitaba de esa marca– se plantó a los 35 del primer tiempo: empezó a tirarlas afuera. Igual, peligro no había: Independiente ganó 8 a 2…

Un año más tarde, efectivamente, los Rojos volvieron a salir campeones marcando 103 goles a favor con 37 en contra. Erico hizo 40, pero De la Mata anotó el más hermoso de todos. “Me la tiró Bello con la mano desde el área penal –recordaría luego el jugador– y bajé a recibirla más atrás de la media cancha, casi como un defensor. Empecé a gambe-

tear contrarios. Me pasé a todos los que encontré en el camino. Moreno y Minella… dos veces a cada uno, creo… Vassini… A Santamaría lo hice pasar de largo… el último fue Cuello. Cuando llegué al área no daba más. Levanté la cabeza dos veces, como hay que hacer. Sirne me tapaba el primer palo, pero apareció Erico y se abrió un poco. Entonces le pegué de zurda: la metí abajo, entre su pierna y el poste”. Semejante apilada –la más hermosa del fútbol argentino en canchas locales– fue el 12 de octubre de 1939. Independiente ganó 3-2, y De la Mata –quien andaba por los 19 años– pasó a ser Capote. Jugó entre 1937 y 1950 y, a lo largo de 362 partidos, marcó 151 tantos, el segundo máximo goleador en la historia de Independiente.

Erico, a su vez, que había venido del Paraguay escapándole a la guerra de su país con Bolivia, sumaría 130 goles en 96 partidos por tercer año consecutivo.

Los 5.400 socios se convirtieron en 15.500, y ese apetito casi feroz por el buen fútbol, sin embargo, debería esperar casi una década para hacer realidad el sueño de campeón… ➤

LA MAGIA de Ricardo Bochini es la mejor síntesis histórica del fútbol que siente el hincha de Independiente.

39/EG

RETRO / TODOS LOS CAMPEONES

➤ RECIEN EN 1948, Independiente volvió a salir campeón. Antonio Sastre había dejado el club en 1941, tras haber jugado 340 partidos. Con sus 112 goles, se convirtió en el tercero de la historia roja. El Cuila, campeón en 1938 y 1939, fue, por cierto, todo un símbolo… Erico se despidió en 1945 y, con sus 193 goles en 325 partidos, pasó a la historia grande del fútbol argentino. Los dos, Sastre y Erico, se fueron con el pase en blanco. Cervino, De la Mata, Deleva, Mario Fernández (goleador con 15 anotaciones) y Mourín fueron la nueva delantera.

Sin embargo, la consagración final traería otros nombres, ya que hubo una huelga de jugadores.

Racing iba primero con 35 puntos, contra 34 de

pectáculos. De esos años le quedó a Independiente el gusto por el buen fútbol…”.

LO CIERTO ES que hubo sangría al extranjero, que apareció un jugador de la estatura de Ernesto Grillo (194 partidos con la camiseta roja, 89 goles) y que Independiente debió esperar 12 años, o sea 12 campeonatos, para volver a festejar. Sólo quedan un par de mojones que no pueden pasarse por alto: el gol de Grillo a los ingleses, y el 6-0 al Real de Di Stéfano en 1953. Y el subcampeonato de 1954: Abraham; Mousegne, Violini; Britos, José y Emilio Varacka; Michelli, Cecconato, Lacasia (o Bonelli), Grillo y Cruz: le ganaron a Boca, Racing y

pues Independiente ganó en ambos casos la Copa Libertadores.

En 1967, la AFA modificó la estructura de los campeonatos que se mantenía desde 1931. Se jugaron, desde entonces, dos torneos: el Metropolitano (con la participación de equipos afiliados directamente a la AFA) y el Nacional (con la intervención de los mejores conjuntos del país). Independiente llegó a la semifinal del Metropolitano y la perdió 20 ante Racing. Pero en el Nacional, los Rojos fueron demoledores: en sólo 15 partidos sumaron 43 goles a favor, con un promedio cercano a los 3 goles por partido. Si se tiene en cuenta que ganaron 12 encuentros, perdieron sólo uno y empataron 2,

PARA MUCHOS, EL GUSTO DE LOS ROJOS POR EL BUEN FUTBOL SE AFIANZO EN LA DECADA DEL 40. MIENTRAS OTROS PRIORIZABAN LOS RESULTADOS, INDEPENDIENTE CREIA EN EL BUEN JUEGO. San Lorenzo y perdieron partidos imposibles…

La década de los 60 sería –es– un momento culminante en la vida de Independiente. Se sumaron 46.259 socios y un montón de conquistas. Tres campeonatos (1960, 1963 y el Nacional 1967), bicampeón de la Libertadores (1964/65). Eran los tiempos del “fútbol espectáculo”. Para no quedarse atrás, los Rojos contrataron a cinco uruguayos: Leiva, Rolan, Duskas, Cacho Silveira y Méndez. Habría que sumar a Rubén Navarro y a Pipo Ferreiro.

Y añadir, surgidos de las inferiores, a Raúl Emilio Bernao, Osvaldo Mura, Marcos Conigliaro y Carlos Rambert. ¿Resultado? Un señor equipo que, en 1963, dará la vuelta olímpica: 14 victorias, 9 empates, 6 derrotas, 49 goles a favor, 42 en contra.

Serían, aquellos años 1964 y 1965, inolvidables,

Independiente. Faltaban cinco fechas y la AFA decidió que jugaran los amateurs. Los pibes ganaron 3, empataron uno, perdieron uno. Con una victoria sobre Racing incluida (1-0), Independiente salió campeón. Ganados: 17 partidos, empatados: 7, perdidos: 6. Hicieron 65 goles, le convirtieron 42.

Uno de aquellos pibes sería con el tiempo técnico de Independiente. Nito Veiga recordaría así: “Concentrábamos debajo de la tribuna Cordero. Jugábamos a la lotería, al billar, comíamos asados. Nos pasábamos horas escuchando a Fernando Bello y a Vicente de la Mata, el conductor del equipo dentro de la cancha. Si en esos tiempos no logramos tantos campeonatos fue porque River, Boca y Racing compraban siempre jugadores. Era cuestión de filosofía, Independiente quería dar buenos es-

también en este rubro hicieron estruendo, con un 86,67% de efectividad. El técnico fue Osvaldo Brandao. Y en el ataque brillaron Bernao (“Un jugador genial, frío; el público lo resiste, el equipo lo quiere”, escribió Juvenal en El Gráfico), Savoy, Artime, Yazalde y Tarabini, con la participación de Mura, Diéguez o Vicente de la Mata (hijo). No sólo eso, porque en la defensa estuvieron Santoro, Monges y Pavoni; Ferreiro, Pastoriza y Acevedo.

Artime, con 11 goles, fue el goleador, superando por uno a Yazalde, quien en un resumen final anotaría 72 goles en 113 encuentros. A la historia, como suele decirse, le faltaban mejores capítulos…

AQUEL 27 DE JULIO DE 1970, Héctor “Chirola” Yazalde recibió la pelota, la bajó con el

LOS 13 TITULOS ANTERIORES TORNEO

PTS

PJ

G

E

P

GF

GC

PORC.

JORN.

FECHA

RIVAL

CANCHA

1938

53

32

25

3

4

115

37

82,81

ULT

18/12/38

Lanús

Independiente

RES. 8-2

1939

56

34

27

2

5

103

37

82,35

32

19/11/39

Platense

Platense

2-0 4-1

1948

41

30

17

7

6

65

42

68,33

29

8/12/48

Gimnasia (LP)

Banfield

1960

41

30

17

7

6

49

33

68,33

ULT

27/11/60

Atlanta

Atlanta

0-1

1963

37

26

14

9

3

53

25

71,15

ULT

24-nov

San Lorenzo

Independiente

9-1

1967 (N)

26

15

12

2

1

43

14

86,67

ULT

17/12/67

Racing

Independiente

4-0

1970 (M)

27

20

12

3

5

43

25

67,50

ULT

27/7/70

Racing

Racing

3-2

1971 (M)

50

36

20

10

6

57

26

69,44

ULT

3/10/71

Gimnasia (LP)

Independiente

2-0

1977 (N)

26

18

11

4

3

37

18

72,22

FINAL

25/1/78

Talleres (Cba.)

Talleres (Cba.)

2-2

1978 (N)

31

20

13

5

2

41

20

77,50

FINAL

2-0

1983 (M)

48

36

16

16

4

54

38

66,67

ULT

22/12/83

1988/89

55

38

22

11

5

58

32

72,37

37

1994 (Cl.)

26

19

8

10

1

32

13

68,42

ULT

40/EG

10/1/79

River

Independiente

Racing

Independiente

2-0

25/5/89

Dep. Armenio

Ferro

2-1

28/8/94

Huracán

Independiente

4-0

SEGUNDO

A PTS

GOLEADOR

GC

TECNICO

2

Arsenio Erico

43

Ronzoni/Cuesta Silva

River

6

Arsenio Erico

40

Ronzoni

River

4

Mario Fernández

15

Fernando Bello

River

2

D’Ascenzo

15

Roberto Sbarra

River

2

Mario Rodríguez

16

Armando Renganeschi/Manuel Giúdice

Estudiantes

2

Luis Artime

11

Oswaldo Brandao

River

0

Aníbal Tarabini

14

Manuel Giúdice

Vélez

1

José Pastoriza

13

Vladislao Cap

Talleres (Cba.)

0

Norberto Outes

11

José Omar Pastoriza

River

0

Norberto Outes

15

José Omar Pastoriza

River

San Lorenzo

1

Jorge Burruchaga

15

José Omar Pastoriza

Boca

8

Alfaro Moreno

14

Jorge Solari

Huracán

1

Sebastián Rambert

7

Miguel Angel Brindisi

anibal greco

ARSENIO ERICO, el máximo goleador histórico del fútbol argentino. El paraguayo dejó su huella en los campeones de 1938 y 1939.

pecho y metió un zurdazo. Fue “Cuando Yazalde se sentió Pelé”, como tituló El Gráfico. Con aquel golazo, Independiente, como visitante, le ganó 32 a Racing y se consagró campeón del Metropolitano. Fue, aquél, un partido para ganar o ganar. River le había ganado 6-0 a Unión de Santa Fe en el partido adelantado del viernes. El domingo, la lluvia obligó a suspender el clásico de Avellaneda. Independiente sólo tenía un camino: ganar o ganar.

Y ganó. Con aquel zurdazo de Yazalde, con ese 32, Independiente superó a River por 43 goles a 42. Y, sin embargo, don Manuel Giúdice renunció…

Si en 1971 la actuación en el Nacional fue decepcionante, la Copa Libertadores, en cambio, otorgó grandes satisfacciones. En el 73, en Roma, logra por primera vez la Copa Intercontinental, disputada entre sudamericanos y europeos: 1-0 al Juventus. No fue, aquél, un gol más, ni mucho menos.

Fue un gol convertido por un pibe de 19 años, que había debutado en Primera diecisiete meses antes: Ricardo Enrique Bochini. Símbolo fundamental de pasión roja por el buen trato del fútbol y la capacidad goleadora. Si algo necesitaba El Bocha para mostrarse en todo su esplendor, fue la aparición de otro grande: Ricardo Daniel Bertoni.

Queda en pie un testimonio. Hable, Bocha, lo escuchamos… “Mi identificación con Independiente viene de allá por noviembre de 1969, cuando vine a préstamo a la Séptima División. Debuté en Primera el 25 de junio del 72, contra River. Con Bertoni nos entendíamos de memoria. Fue con una pared bárbara que hicimos con él que metí el gol en Roma.

En 1976, hice el gol más lindo de mi vida en Montevideo, cuando me gambeteé a siete uruguayos. El 25 de enero de 1978 yo cumplí 24 años, metí el gol del empate contra Talleres (2-2) y festejé mi primer título de Argentina, el Nacional. Al año siguiente repetimos, con un 2-0 a River: le hice esos dos goles al Pato Fillol… Yo sé cómo piensa el hincha, tengo su mismo gusto futbolístico…” ➤

FESTEJA el Rojo del 83.

41/EG

anibal greco

RETRO / TODOS LOS CAMPEONES

LA APILADA histórica de Vicente de la Mata a River, en 1939. Un golazo emblemático del fútbol argentino. Desde ese día, De la Mata fue Capote.

➤ EN 1971, INDEPENDIENTE logró el Metropolitano, gracias a 13 goles marcados por Pastoriza, con 20 victorias, 10 empates y 6 derrotas. Y pasarían 6 años hasta el próximo título, el Nacional de 1977. Fue, por cierto, un partido disputado a todo o nada. Habían empatado 1-1 en Avellaneda. La revancha, entonces, fue a todo o nada, porque los goles de visitante valían doble. Aquella revancha fue dramática: 25 de enero de 1978, fecha marcada a fuego en el corazón de los Rojos. Arrancaron ganando con gol del Beto Outes. A los 15 del segundo tiempo, Barreiro marcó un penal inexistente: 1-1, barajar y empezar de nuevo. ¿De nuevo? ¡Y de qué manera! A los 30, Boccanelli puso la mano y venció a Rigante. Reaccionaron todos y expulsaron a tres: Trossero, Galván y Larrosa. Pastoriza no perdió la calma y metió a Bertoni y Biondi por Brítez y Magallanes. Hasta que llegó el zurdazo del Bocha, el empate, la consagración y el delirio; delirio con gusto a hazaña. Inolvidable…

Bertoni fue transferido al Sevilla; llegaron Chocolate Baley, Carlos Fren y Barberón. Otra vez la final, ahora ante River, con empate sin goles en el Monumental; y el 2-0 en Independiente, con goles de Bochini, un 10 de enero de 1979: 41 goles en 20 partidos, 13 ganados, 5 empatados, 2 perdidos…

Fue en esa década –y en sólo tres años, entre 1977 y 1980– que el Beto Outes se puso quinto en el ranking histórico de los Rojos, con 90 goles en 173 partidos.

“En esa década fuimos más famosos que el Santos –sentenció Ricardo Elbio Pavoni–, viajamos 42/EG

por todo el mundo, ganamos cuatro Copas Libertadores de América, tres Interamericanas y la Intercontinental, en 1973. La nuestra es una amistad para siempre…”

EN 1983, SE REENCONTRARIA Independiente con otro campeonato local: el Metropolitano. Una fecha con Nito Veiga como técnico, unos partidos con la dirección de la Subcomisión de Fútbol, y luego el reencuentro con el Pato Pastoriza. Y un gran mediocampo: Ricardo Giusti, Claudio Marangoni, Jorge Luis Burruchaga y Ricardo Enrique Bochini. La cuota de suspenso llegó hasta la última fecha. Con un punto sobre San Lorenzo, el Rojo debió medirse con Racing –por entonces ya descendido, aunque ya se sabe cómo son los clásicos– y una victoria inapelable: 2-0, con goles de Giusti y Trossero. Aquel 22 de diciembre de 1983, cerró una campaña de 48 puntos logrados, con 54 goles a favor y 38 en contra, y con Burruchaga, con 15 goles, como el más efectivo del plantel. Habían pasado cinco años y volverían a pasar otros tantos más hasta la nueva conquista.

A Pastoriza lo reemplazó Roberto Ferreiro en la dirección técnica; volvió Pastoriza, pero se fue dejándole el lugar al Indio Solari. Al principio hubo alguna resistencia, pero luego el equipo se fue armando: Pereira al arco, Clausen, Monzón, Delgado y Ríos en la defensa; Bianco, Ludueña, Insúa y Bochini en el medio; y Reggiardo y Alfaro Moreno adelante.

El campeonato de 1988 fue el único en la histo-

ria que, en caso de empate, agregaba un punto al ganador en la definición por penales. Independiente, por su lado, y Boca, por el otro (y de la mano de Pastoriza), pelearon todo el campeonato. En la vigésima fecha, con goles del Bocha y Alfaro Moreno, Independiente le sacó ventaja a Boca y la aprovechó. El 25 de mayo de 1989, tras ganarle 2-1 a Deportivo Armenio en Ferro, se consagró campeón. Era el título número 12 del Rojo. Faltaba todavía uno más…

EN 1991, Bochini largó el fútbol y dejó atrás una brillante carrera, con 638 partidos y 97 goles, todos en Independiente. Pastoriza reemplazó a Solari y al poco tiempo fue el turno del Bocha, quien junto a Carlos Fren asumió la conducción técnica, pero duró poco. Pasaron Nito Veiga, Pavoni (en forma interina), Pedro Marchetta… y Miguel Brindisi en 1994. Con él, arribó el colombiano Albeiro Usuriaga. Comienzo irregular, un técnico que va encontrando el camino, una derrota (la única) frente a San Lorenzo, dos ausencias importantes (Islas y Perico Pérez fueron a Estados Unidos con la Selección), una arremetida final. Es que tras ganarle a Banfield (4-0), empatar con Boca (1-1) y golear a Gimnasia (5-1), llegó el último partido, el final, y con el puntero. El Huracán de Héctor Cúper tenía un punto de ventaja y le bastaba con empatar. El Rojo fue aplastante: 4-0, “con fútbol de lujo, eficaz y hermoso al mismo tiempo”, como calificó El Gráfico. ¿Quién podría creer entonces que pasarían ocho años para volver a festejar? �

ANALISIS / LAS FIGURAS SILENCIOSAS

SEIS CARTAS GANADORAS LEO

HERNAN

LEONEL

LEO DIAZ llegó de Colón, donde recibía de promedio veinte o treinta pelotazos por partido. Y podía tener alguna falla o le podían hacer algún gol, pero solía tener grandes actuaciones la mayoría de las veces. Sin embargo, atajar en Independiente es distinto porque al arquero le llegan 5 o 6 pelotas. Un error le puede costar el resultado. Entonces no es lo mismo atajar en un club que en otro. Y a Leo le costó adaptarse al grupo, al club, a la hinchada y a la presión de un equipo que debía salir campeón. Pero el director técnico confió en él cuando no estaba en su mejor momento, porque sabía que finalmente se iba a revertir esa situación. Y por suerte, así fue: rindió como todos nosotros esperábamos. El cuerpo técnico había depositado todas las expectativas en él desde el principio. De hecho, lo trajeron con la esperanza de que atajara en un equipo que estaba para campeón.

Y quedó demostrado que además de ser un muchacho muy tranquilo, conoce perfectamente el oficio. Por eso consiguió algo fundamental en un arquero, que es transmitirles confianza y tranquilidad a sus compañeros para que puedan trabajar bien. Además, como persona, es un pibe de diez, muy trabajador y buen compañero ●

ME ALEGRA MUCHISIMO este título, tanto por Hernán Franco como por Independiente.

Desde México no puedo seguir el equipo más que por los resúmenes que dan en televisión, pero, sin dudas, puedo afirmar que un campeón se arma de atrás. De ahí en adelante, comienza a construirse el equipo. Pero también es fundamental el grupo humano. Seguramente, el sentirse cómodo en el plantel y la comunicación con los otros defensores fue la clave para que Franco se pudiera adaptar a una posición que no era la de toda su vida. Y no sólo adaptarse, sino también conformar una defensa sólida, porque es la única manera de que Independiente llegara hasta donde está hoy.

Además, el hecho de que sea alto también es importante por el tema de las pelotas aéreas.

En fin, aunque la dos no pese tanto como la diez, ser campeón como defensor de Independiente creo que es lo máximo en la parte de clubes. Es un orgullo aportar una copa más a las vitrinas de Independiente. Y la realidad es que no es fácil ser el último hombre de un equipo que ataca mucho y que, a veces, te deja obligado a enfrentar un mano a mano o a defender en inferioridad numérica. Por eso, felicito a Franco por el logro y ojalá se repita la vuelta olímpica, por él y por Independiente ●

A DIFERENCIA de lo sucedido en el torneo pasado, donde tuvo la responsabilidad de generar desequilibrio y ser uno de los conductores de un equipo con muy poca experiencia, en este Apertura, rodeado de jugadores importantes con los que asociarse y sin tanto peso sobre su espalda, logró soltarse y demostró su buena media distancia y gran técnica individual. Creo que algo parecido les pasó a Andrés Silvera y a Pablo Guiñazú. Por eso, el aporte del Toti fue muy importante, más que nada, en los primeros partidos.

Pienso que mucha gente se debe haber sorprendido cuando salió del equipo, tras jugar un flojo partido ante River. Pasa que Pusineri, es un volante al que Gallego pidió con mucha insistencia y al que mantuvo como titular porque le rindió. Son dos futbolistas diferentes. Leonel posee la característica de arrancar de atrás y llegar con la pelota dominada, mientras que Lucas pica más por sorpresa y tiene 4 o 5 jugadas netas de gol por partido. A pesar de terminar como suplente, Toti siempre cumplió con el equipo.

Pienso que le falta un poco de experiencia para ubicarse en la cancha, pero es un jugador muy lujoso, físicamente dotado y con un ida y vuelta muy importante ●

DIAZ

FRANCO

RIOS

pepe santoro

pablo rotchen

jose maria bianco

(fue 10 veces campeon con independiente entre 1962 y 1974)

(campeon del clausura 1994 y las supercopas 1994 y 1995)

(campeon del torneo de primera division 1988/89)

44/EG

Detrás de las figuras más carismáticas que presentó el equipo del Tolo Gallego, asomó otro puñado de jugadores que tuvo un aporte fundamental para lograr el título del Apertura. Seis glorias de Independiente, que fueron campeones en sus respectivas épocas y que jugaron en sus mismos puestos, los ponen bajo la lupa y les hacen un merecido reconocimiento.

PRODUCCION: MARCELO ORLANDINI E IGNACIO LEVY

DIEGO

CASTAGNO SUAREZ

LUCAS

PABLO

INDEPENDIENTE encontró en Castagno Suárez a un jugador muy respetuoso de su puesto.

Me refiero a que está siempre delante de la línea de cuatro, alistado en el medio, y que cubre bien las espaldas de los laterales. Porque Serrizuela ataca, Fede Domínguez también, y Milito, cada vez que puede, se manda. Por eso, Castagno es la goma de auxilio de todos. Si él no hubiera estado en tan buen nivel, habrían quedado muchos espacios descubiertos.

Más allá del paladar de la gente del Rojo, cualquier hincha del fútbol argentino no se guía por si los jugadores tienen una gran técnica o no.

Si hay un volante que corta, va a todas, corre, recupera y entrega la pelota redonda... El hincha se da cuenta. Además, hay que destacar que Diego es un cinco fuerte, que da mucha lucha en el medio y posee una gran experiencia.

Es el termómetro del equipo respecto a cómo queda parado en el aspecto defensivo. Si ahora se ve que corre más que en Colón, quizá tenga que ver con las responsabilidades que le da el técnico. En Independiente es el único hombre del medio exclusivo para la marca, por más de que Guiñazú y Pusineri pongan muchas ganas para ayudarlo. En síntesis, fue una pieza muy importante en la estructura del equipo. Un jugador símbolo ●

LUCAS FUE UN JUGADOR fundamental para el campeonato, sobre todo en las últimas fechas. Se ganó un lugar en base a su garra, temperamento y decisión para definir los partidos. Su virtud es la aparición por sorpresa. Se hace protagonista cuando pisa el área adversaria. Por momentos parece que no participa mucho del juego, pero es porque está marcando y ocupando algún lugar clave en el medio. A su gran sacrificio para recuperar la pelota y tenacidad para ir siempre adelante, le suma sus buenos movimientos en ataque. Por el esfuerzo en la marca, no se nota que alguna vez fue delantero. Es un jugador que el adversario no debe descuidar. Y cuando esto pasa quiere decir que el futbolista es realmente bueno. Lucas es más combativo y menos lírico que Ríos, un gran pibe de las inferiores, y le ganó el lugar porque en el fútbol de hoy se precisa más guerra. Pusineri supera a Toti en la agresividad deportiva que experimenta en competencia.

En mi época era diferente. Los volantes teníamos más técnica y la característica de servir la pelota. Casi ni pateábamos al arco. Había que darles la pelota a Yazalde y a Artime, que no te pasaban una. En este torneo, cada vez que Silvera se tiró atrás, generó los espacios para que Lucas llegara seguido al gol ●

ESTE EQUIPO me encanta porque tiene jugadores de gran categoría. Y Guiñazú es una de las tres piezas clave, junto con Montenegro y Milito. Pablo es uno de los distintos, no le demos vueltas. Tiene buen trato de pelota, pique corto y un gran traslado en velocidad. La verdad, este pibe es medio Savoycito. Sin embargo, y no es por mandarme la parte, no la maneja tanto como yo. Es cierto, a mí me ponían de wing, pero no me gustaba porque tenía que esperar a que me llegara la bocha. Y yo necesitaba tener contacto con la pelota, al igual que él, por sus características de enganche. Otro aspecto para resaltar es su velocidad mental, algo que yo también tenía. A mí me dejaban un espacio y no me agarraban más. Con Guinazú pasa lo mismo.

Pablo le puede aportar mucho a Independiente porque tiene la edad justa, experiencia, dinámica e inteligencia. Y si no llega tanto al gol es porque hay compañeros que tienen más vocación para pasar al ataque. Por ejemplo, Domínguez se va y Pablo siempre le hace el relevo.

Un buen volante por izquierda tiene que ser ofensivo, contar con un gran ida y vuelta y ser muy sacrificado, como en mis tiempos jugaban los número ocho. Y hay que decir que este pibe cumple con todos los requisitos ●

PUSINERI

GUIÑAZU

hugo “perico” pérez

osvaldo luis mura

raul savoy

(campeon del torneo clausura y la supercopa 1994)

(gano los torneos de 1963 y 1967 (N) y las libertadores de 1964 y 1965)

(gano los torneos de 1963 y 1967 (N). y la copa libertadores de 1964 y1965)

45/EG

PERSONAJES / JUAN JOSE SERRIZUELA – FEDERICO DOMINGUEZ

DOSTIPOS AUDACES Independiente se dio un lujo grande: disfrutó de los laterales más ofensivos del fútbol argentino. Integrantes de un tándem letal, Juan José Serrizuela y Federico Domínguez tienen una historia con demasiados puntos en común. Muchos más que el simple hecho de ir y venir por las bandas enfundados en una camiseta roja. por ignacio levy / fotos: alejandro del bosco

EL DIABOLICO ROBOT engendrado por Grinbank y Gallego tiene dos brazos simétricos: largos, velludos y fornidos. Cuando uno va, el otro viene. Y si los dos van simultáneamente, empieza a gestarse un abrazo de gol. Juan José Serrizuela es el extremo derecho y Federico Domínguez el izquierdo, en un cuerpo armónico que se endurece en el ombligo con Castagno Suárez, y que activa las defensas con Milito y Franco cuando los brazos se alejan desprotegiendo la zona más frágil del torso. “Uhhh… los centrales se ponen insoportables cuando nos mandamos juntos al ataque. Pero nosotros nos reímos, porque subimos al mismo tiempo cuando advertimos que el equipo no lo va a sufrir. O sea, nos vamos si podemos y si nos damos cuenta de que vamos a lastimar”, confiesa Domínguez y su secuaz acota: “Hablamos muchísimo entre los defensores. A veces ellos nos retan, y otras nosotros los reta46/EG

mos a ellos. Pero es parte del juego y de la comunicación que tenemos dentro de la cancha”.

El recorrido de los dos brazos tuvo un vértice en el aplauso de este Independiente, pero desde hace muchos años sus vidas presentan vivencias en común. En el barrio Curva de Berraymundo, en Florencio Varela, la mesa de una familia ocupaba media cuadra. Miguel Oscar Serrizuela y Pastora Clementina Luna pasaban allí sus días junto a sus diez hijos, que, de mayor a menor, formaban así: Miguel Angel, Virginia, José Tiburcio, Antonio, María, Roxana, Juan José, Susana, Gisela y Daniel. Mientras tanto, en Villa Crespo, José Domínguez y su esposa, Noemí, tenían una menor concurrencia a la hora de la cena, ya que tan sólo Federico, Eduardo y Viviana completaban el grupo familiar. Hasta ahí, la imagen no refleja nada similar entre la superpoblada mesa de los Serrizuela, y la más acotada de la familia Domínguez. Pero al

subir el volumen de esos recuerdos se escuchan las mismas charlas, las mismas discusiones, el mismo énfasis para debatir sobre esa pasión que Miguel y José, los dos jefes de familia, se encargaron de impregnar en sus herederos: el amor al fútbol.

“En mi casa todos son muy futboleros, hasta mi vieja. Incluso, mi hermano Miguel Angel sabe mucho de fútbol”, dice Serrizuela. Y Domínguez confiesa que “en esos tiempos jugábamos todo el día a la pelota con mi hermano y con mi viejo. Eduardo y yo, de chicos, nos hicimos de River como él”.

De ese modo, quizá, se haga más fácil comprender por qué José Tiburcio llegó a jugar un Mundial; por qué Juan José y Federico brillan en Independiente; por qué Daniel Serrizuela está creciendo en el césped de Lanús; y por qué Eduardo Domínguez se afianza en Olimpo de Bahía Blanca.

Cuestiones de familia, de almuerzos polémicos➤

EL ESCUDO del Rojo otra vez arriba.

Serrizuela y DomĂ­nguez fueron el desequilibrio por las bandas.

47/EG

PERSONAJES / JUAN JOSE SERRIZUELA – FEDERICO DOMINGUEZ

➤por un fallo arbitral, de cunas de césped, de escarpines con tapones. Así nacieron y empezaron a trabajarse los brazos de este Independiente.

“Hoy, son los mejores marcadores de punta del país”, aseveran Gallego y Grinbank.

Y las semejanzas no terminan en el núcleo familiar, sino que se extienden a sus carreras futbolísticas. Ambos surgieron a la fama como Pekerman Boys. “Eso nos permitió hacer una experiencia bárbara cuando éramos chicos. Además fue importante por la jerarquía que ganamos y por Pekerman, que te hace crecer mucho como juga-

varios goles fueron firmados por Federico. Claro, Serrizuela y Domínguez, versión atacantes, cuentan con la ventaja de conocer mejor que ningún delantero los puntos débiles de los marcadores.

“Es así, principalmente en los centros. Cuando desbordamos sabemos que le duele a un defensor, porque es lo mismo que nos pasa a nosotros cuando nos atacan. Entonces intentamos sacar provecho de eso”, asegura el ex jugador de Vélez.

Justamente en sus tiempos de fortinero, Domínguez recibió una premonición de un hombre calvo que pareciera tener cierta sapiencia futbolera:

“Carlos Bianchi les regalaba una caja de Dom Perignon a los defensores cuando hacían un gol. Y el día que metí el primero me dijo que no me iba a regalar nada porque yo iba a hacer más de 50 goles a lo largo de mi carrera. Ojalá se haya quedado corto…” Ahora Fede sumó 33 tantos… A pesar de esa voracidad, Serrizuela destaca que “el Tolo también remarca la importancia de no descuidar los sectores que tenemos que atender nosotros”.

El protagonismo en ambas áreas, durante los dos tiempos de cada partido, los convirtió en delante-

“TIRAR UN CAÑO ES DIEZ VECES MAS LINDO QUE ROBAR UNA PELOTA. DE CHICO ME PONIAN DE DELANTERO Y HACIA GOLES, POR ESO ME GUSTARIA JUGAR ARRIBA EN ALGUN PARTIDO.” juan jose serrizuela

dor”, expresa Domínguez, quien fue campeón del Mundial Sub 20 en Qatar, mientras que Serrizuela festejó el mismo título en Malasia 97. Para más coincidencias, los dos tuvieron un paso fugaz y poco feliz por España, ya que Domínguez no encontró su lugar en el Espanyol, en 1998, y Serrizuela tuvo una experiencia para el olvido en el Mallorca, un año después: “Me sentí discriminado porque el técnico, Fernando Vázquez, no quería a los argentinos, y los dirigentes no me apoyaron.

Por eso, aunque me quedan varios meses de contrato, no voy a volver a jugar en el Mallorca, es algo que no siento”.

CON ESE ARCHIVO de vivencias en común, aterrizaron en la Doble Visera, cuando xeneizes y millonarios se peleaban por capturarlos. Domínguez se inclinó por el Rojo “porque vino a buscarme con más decisión. River y Boca siempre especularon y recién se movieron para incorporarme cuando yo ya tenía casi todo arreglado con Independiente. Además, me gustó mucho la propuesta del Tolo y todo lo que se estaba armando con los jugadores que venían”. En tanto, Serrizuela también se inclinó para Avellaneda “por el interés que demostraron los dirigentes. Eso es fundamental para el jugador y para la persona. Por eso elegí Independiente, antes que Racing, Boca y River. Incluso, el Tolo también me llamó. Eso es algo que uno valora mucho”. Y el Diablo concretó así el trasplante de brazos. Con el fin de apuntar exclusivamente al polo norte de la tabla de posiciones: “Nunca nos fuimos a dormir pensando en el promedio. Sabíamos que se había armado un plantel para pelear arriba”, sostienen los dos.

Gallego tiró de la soga para arrimarlos a Independiente. Y, cuando los tuvo, les pidió y les repitió que se fueran al ataque, que sorprendieran. Por eso tantas jugadas de gol llegaron vía Tiburón y 48/EG

SERRIZUELA fue clave colocando asistencias, tanto de pelota parada como en movimiento.

ros titulares de los picados matutinos. “Cuando juega adelante, a Juan le gusta ir por afuera para llegar a tirar el centro”, afirma Domínguez. Y Serrizuela revela que “Fede en los picados es nueve, nueve, punta, punta. Se va arriba tranquilo y se queda de Pipo Pescador paradito en el área”. Les gusta la red y ambos tienen un pasado ligado a los gritos… “En el baby era goleador. Siempre hice goles, es algo que me encanta”, dice el 3, mientras el 4, también ex puntero, no da por terminada su etapa de atacante: “En casi todas las inferiores jugué de 5, pero de chico me ponían de delantero y

hacía goles, así que si en algún momento me toca hacerlo otra vez no tengo ningún problema. Me gustaría jugar arriba algún partido”. El detalle es que ambos extremos del Rojo son, ante todo, defensores. Por eso, Domínguez afirma que “sin ninguna duda, prefiero ganar 1-0 antes que 15-14, por más que a mí me tocara hacer un montón de goles. Porque primero mi función es marcar y no me gusta que me hagan goles”. Admite que disfruta tanto defendiendo como atacando. En cambio, Serrizuela está convencido de que “tirar un caño, es diez veces más lindo que robar una pelota”.

Sus morfologías, como sus historias, también tienen cosas en común. Y la primera curiosidad surge al ver sus largos cabellos al viento, sobrevivientes de la epidemia terminal de tijeretazos que dejó pelado a medio plantel. Extrañamente, estos dos miembros quedaron exentos de pasar por el coiffeur. Pero no es casualidad: “La realidad es que la historia de las rapadas surgió un día y se convirtió en una cábala, hasta que se empezó a correr el rumor de que nos iban a pelar a nosotros dos, a Milito y a Castagno Suárez. Ahí nos juntamos y suspendimos todo. Por eso, después se

“CUANDO DESBORDAMOS SABEMOS QUE LE DUELE A UN DEFENSOR, PORQUE ES LO MISMO QUE NOS PASA A NOSOTROS CUANDO NOS ATACAN. ENTONCES INTENTAMOS SACAR PROVECHO DE ESO.” federico dominguez

creó la banda de los pelados y la banda de los pelos”, explica Federico, poniéndole una sonrisa al duro momento que le toca vivir en el epílogo del torneo, tras haber sufrido la fractura del quinto metatarsiano del pie derecho en el partido contra Unión. “Me puse un poco fastidioso por eso, pero lo tomo con calma y paciencia, porque sé que no es una lesión grave y que les tocó a muchos jugadores, como Beckham o Ibagaza, que después volvieron a jugar normalmente”, dice el lateral izquierdo y queda claro que no habrá brazo a torcer. Igual, su compañero de expediciones al ataque lo acompaña en la pena: “Yo lo quiero muchísimo y por eso sufro con lo que le pasó. Unos días atrás me había tocado pasar a mí por una distensión y ahora le tocó a Fede algo un poco más jodido. Sinceramente, lo siento mucho porque es una muy buena persona”.

DOMINGUEZ aportó su cuota de gol. Una lesión le impidió festejar el título desde adentro.

LOS BRAZOS se cruzan en la mesa de la concentración y por las noches abrazan sueños en blanco y celeste. “Uno tiene la expectativa de ser convocado para la Selección mayor y se esfuerza al máximo por una oportunidad. Después, el hecho de que Bielsa me conozca desde antes, por haberme dirigido en Vélez, no creo que influya en nada, porque él ve mucho fútbol y conoce a todos los jugadores”, garantiza Domínguez.

Entre ellos, se llevan bárbaro y sus caras no desentonan con el clima feliz que se respira en la Avellaneda colorada. “No pensé que los hinchas iban a estar tan fanáticos y tan enfermos por la camiseta de Independiente. Porque realmente son enfermos. Yo conozco gente, como mi cuñado, que llegó a llorar por una derrota. Acá me di cuenta de que le gente del Rojo es muy fanática y por eso revienta todos los estadios”.

No es para menos. Independiente volvió a levantar una copa. Con los dos brazos juntos ● 49/EG

ENTREVISTA / EL PADRE DE LA CRIATURA

DANIEL GRINBANK, EL DIOS DEL DIABLO Cabeza visible del grupo inversor que acercó a las principales figuras del plantel, el empresario reconoce que en algún momento sintió como si jugara a “El Gran DT”. Gozó como pocos con la consagración, y dejó una sentencia: “Si no hubiera empezado con este proyecto, Independiente estaría por irse a la B.” por ignacio levy / foto: alejandro del bosco

LA MISA DE LOS DOMINGOS estaba perdiendo color en el Sagrado Corazón de la Doble Visera. Los fieles mostraban rostros afligidos y la fe aminoraba con la marcha de los años. Aquel monasterio que había criado desde monaguillos a tantos clérigos de fantasía, ya no contaba con un futuro prometedor. Todo era melancolía entre un pasado colmado de eucaristías con vino en Copa y un presente pobre de hostias y esperanzas. Hasta que el Todopoderoso decidió dar pie a sus santas obras... En el nombre de Grinbank, de Racing y del espíritu infernal.

Siempre invisible, siempre presente y lejos del altar. El Dios del Diablo había sido crucificado pocos meses atrás, cuando formó parte de la cúpula eclesiástica. “Fue un error haber intervenido en la política del club. Me ponían carteles recriminándome el último puesto del Apertura. Y eso me rompía más las pelotas que cuando me escribían drogadicto en las paredes”, es palabra de Daniel Grinbank.

Con esa cruz en sus espaldas, tenía claro que no quería volver a ser parte del mismo proceso.

Prefería esperar las elecciones para que le dieran los votos de confianza a su nueva iniciativa aquellos que lo habían condenado a la crucifixión. “Pero no había tiempo para esperar. Si no hubiera tomado la decisión de comenzar con este proyecto, Independiente estaría por irse a la B”. Los nervios aumentaban con el volumen de las plegarias. Y entonces su amor al templo del Rojo Místico lo obligó a ponerse en acción.

Ni al hombre, ni a la mujer. El creó el Fondo de Inversión y los mecanismos que permitirían sustentar los bautismos de Serrizuela, Domínguez, Montenegro, Insúa y Pusineri. “Decían que con la plata que trajimos al Rolfi se podían haber comprado más jugadores. En el pasado lo hicieron y así nos fue… La premisa era traer tipos muy superiores a los que había en el 50/EG

club”. Así empezó a gestarse la resurrección del nuevo Independiente. Gallego comunicó sus preferencias, la dirigencia le dio permiso para actuar y la gente volvió a comulgar.

Profeta de su propio emprendimiento, Grinbank se convirtió en un comprador ambulante y, poco a poco, fue sumando apóstoles a su ilusión. “Todas las negociaciones comenzaban con una cita en un café, para venderles la idea y convencerlos de que cobrarían en tiempo y forma. Hoy les agradezco a los jugadores que confiaron en mí, cuando Independiente venía de ser último”. Es que el Sumo Pontífice del Infierno Rojo no quería hombres de relleno, sino nombres que garantizaran un futuro paraíso.

“Independiente siempre compró jugadores medio pelo. Esta vez la apuesta era a los mejores números del país”. Curiosamente, la elección del Pastor no pasó por las manos de Grinbank, aunque reconoce que “Gallego siempre me había gustado. Mis técnicos preferidos eran el Tolo y el Maestro Tabárez”.

Su anhelo de ver un renacer gestado por sus manos se puede imaginar. Pero no cuánto significa eso para un hombre que vivió desde el pesebre bajo las órdenes de una Biblia colorada. “Esta pasión es de toda la vida. Mi viejo tenía un palco en el sector Erico y, desde los 5 años, me llevaba con él. Es más, me iba a poner Carlos Ernesto por Cecconato y Grillo. Pero como mi abuelo falleció en esos días, me pusieron Daniel, por él, y Ernesto, por Grillo; aunque cuando yo estudiaba sociología decía que era por el Che Guevara”.

Desde aquellas noches de Copas en la parroquia de Avellaneda, Grinbank se sonrojó y empezó a deleitarse con los regalos de sus Reyes Magos.

“Mi primer ídolo fue Mario Rodríguez, pero además vi jugadores fantásticos, como Pavoni, Mura, Bernao… hasta llegar a Bochini, lo máximo, y los demás de los años 80”. Desde entonces, Da-

niel construyó un santuario de camisetas, que ya cuenta con más de 40, entre las que se destaca una de piqué. “Era de Bernao y fue una de las primeras que tuve”, revela.

Aquella saturación de obsequios dorados y vueltas olímpicas lo mal acostumbró y, por eso, los últimos años significaron una estaca en el corazón. “Fueron tan decadentes en lo institucional, que se me hacía difícil resignarme o acostumbrarme a eso. Después de viajar en Primera, uno no quiere ir más en Turista”, asegura Grinbank. Y en su sonrisa se vislumbra el sector negro de su paladar: “Fuimos campeones con el Zurdo López en el 95, y yo estaba a las puteadas. No me agradaba cómo jugaba el equipo. Pero, en las últimas fechas de este tor-

neo, quería salir campeón como sea, colgado del travesaño, 1 a 0, y con gol sobre la hora”.

La desazón que generó el último puesto estaba con todo Independiente. Y con su espíritu. “Se tocó fondo. No fue azar, sino la consecuencia de un montón de años con políticas equivocadas”.

Pecados denunciados, errores al poner o sacar plata de la canastita. Todo hacía al presente de una institución camino a la perdición. “Traían jugadores que no estaban para jugar en Independiente. Por ejemplo, lo de Guadalupe fue tragicómico. Era para reírse, no daba ni para tenerle bronca. Fue el sublime, simbolizaba la decadencia de Independiente”, afirma sin piedad.

Por esas violaciones a los mandamientos de una historia gloriosa, Grinbank bajó a la tierra

FANA DEL ROJO, Grinbank se dio el gusto de facilitar la llegada de jugadores muy valiosos para la campaña.

para dar una mano y darse una alegría: “Esto es el sueño de cuando jugaba a ‘El Gran DT’.

Con la diferencia de que acá estoy jugando en serio. No es idéntico, porque el equipo lo arma Gallego, pero sí en el hecho de haber traído jugadores que funcionaron. Pasar de últimos a campeones, es increíble”. En ese paso del purgatorio al edén, tres hombres lideraron la cabina de control. El Señor explica de qué jugaba cada uno: “Galano es un presidente que asumió luego de la huida de Iso y tuvo la inteligencia de actuar sin un ataque de protagonismo absurdo. Ducatenzeiler es mi amigo, un tipo honesto que quiere emprender un cambio profundo en Independiente. Y yo soy un hincha que en algún momento fue dirigente, que hoy es empresario haciendo cosas con Independiente y que, definitivamente, no va a estar ligado a la vida política del club”.

Paradójicamente, en un torneo de fundamentalismo Rojo, Grinbank no pudo desahogarse como en otros tiempos: “Las broncas, como el coincidir o no con un cambio del técnico, antes las exteriorizaba más, pero ahora tengo menor libertad porque lo que diga se puede tomar a mal. Además es importante mi equilibrio, porque hay inversores que confiaron en mí y que no son de Independiente”. Su fanatismo alcanza para él y para repartir entre toda la iglesia Diabólica. Se comprueba observándolo un domingo. “La ceremonia empieza entrando rápido en el estadio para escapar de los periodistas, porque llego muy tenso. Ya en la cancha, me hincha las pelotas que la música tape las canciones de la hinchada. Por eso no me gustó que me adjudicaran el show previo, con el cual yo no tengo nada que ver. Después, durante los partidos, este año escuchaba en la radio los resultados que incidían en la lucha por el campeonato y por el descenso”.

Ese espíritu maligno del promedio quedó lejos en la memoria. Sin embargo, Grinbank envía una señal de atención. “Este título es de lo más importante que me pasó en la vida. Pero lo único que se logró es un poco de aire. Quien crea que con esto se terminaron los problemas está equivocado, porque la parte institucional está como el orto”. Entonces, el próximo desafío será evitar que se repita la historia del vecino académico. Que no se desmantele el equipo y que no se vuelva al año 500 Antes de Grinbank.

“Será difícil. El tiempo que hay entre el campeonato y la Libertadores complica todo, porque no te da los recursos en dólares y se hace más difícil retener a los jugadores”. Será la preocupación del mañana. Hoy nada les importa a los creyentes del diabolicismo, que deliran como nunca y proclaman alabanzas para el “Señor” Grinbank ● 51/EG

PRIMERA PERSONA / CONFESIONES DE UN GOLEADOR

por andres silvera

Figura clave y brillante goleador del campeonato, el Cuqui revive los momentos principales de la campaña que llevó a Independiente a lo más alto luego de ocho años de sequía. Un testimonio íntimo y conmovedor escrito con la pasión y la emoción que sólo puede expresar un protagonista estelar.

MI REVANCHA

martin sorter

PRIMERA PERSONA / CONFESIONES DE UN GOLEADOR

ME PARECE MENTIRA estar viviendo un momento de tanta felicidad. Después de todo lo que sufrimos la temporada pasada, cuando quedamos marcados como los protagonistas de la campaña más pobre de toda la historia del club, nos merecíamos una reivindicación de este tipo.

Y cuando digo nos merecíamos, los incluyo a todos sin distinción: hinchas, dirigentes, jugadores y cuerpo técnico.

Aquellos que pasamos por los momentos más duros estamos festejando con un sabor más especial todavía. Teníamos mucha bronca guardada, muchas ganas de demostrar que éramos dignos de la historia de un grande como Inde-

en los entrenamientos, pero no había vuelta que darle. Aunque metiera cinco goles en una práctica, el domingo jugaba otro.

Cuando asumió el Tolo Gallego me volvió el alma al cuerpo. Sentí que volvía a pelear en igualdad de condiciones con mis compañeros.

Y eso me dio una gran motivación para encarar el desafío que siempre me había propuesto, que era triunfar y quedar en la historia grande de Independiente.

Más allá de mis condiciones naturales y de todo lo que me enseñaron los técnicos que tuve en Comodoro Rivadavia, como Víctor Doria, me parece que la base de mi buen campeonato estu-

De a poco se fue formando un equipazo. No sólo llegaron excelentes jugadores, sino tipos con mucha hambre de gloria, algo muy importante a la hora de los partidos clave. Desde el primer día nos mentalizamos para salir campeones. Jamás se nos cruzó por la cabeza el promedio del descenso, algo que preocupaba mucho a los hinchas antes de empezar el campeonato.

A propósito de los hinchas, creo que fueron un jugador más. Lo demostraron desde el amistoso con Libertad, antes de empezar el campeonato. Llenaron la cancha como si fuera un clásico y no pararon de apoyar al equipo, algo que fue aumentando con el correr de las fechas. Pa-

“CUANDO LLEGO GALLEGO, ESTABAMOS MUERTOS. DUDABAMOS DE NUESTRAS CONDICIONES. NECESITABAMOS UN TIPO COMO EL PARA VOLVER A CREER. NOS MENTALIZO PARA SER CAMPEONES.” pendiente. Y por suerte lo pudimos cristalizar con esta conquista espectacular.

Yo también lo tomo como una revancha personal. Como mi revancha. Sólo yo y aquellos que siempre han estado junto a mí, sabemos por lo que tuve que pasar. Llegué a Independiente con todas las ilusiones. Había hecho una buena temporada en Unión y me tenía una fe ciega para triunfar en un grande de la Argentina.

Arranqué bien, con un golazo a Vélez en el debut, pero después pagué muy caro el precio de no haber hecho una pretemporada a full, porque cuando llegué a Independiente ya la habían hecho. Tuve dos desgarros y eso me quitó la continuidad que necesitaba para demostrar mis condiciones.

Para colmo, cuando se fue Enzo Trossero –el técnico que confió en mí para que llegara a Independiente– agarró el equipo Néstor Clausen y me tuvo muy poco en cuenta. Esa etapa fue durísima. La pasé realmente mal. El técnico no me daba explicaciones y yo trataba de matarme

LOS GOLEADORES ROJOS AÑO

JUGADOR

1937 1938 1939 1956 1966 1967 N 1982 M 1999 C 2002 A

Arsenio Erico Arsenio Erico Arsenio Erico Ernesto Grillo Luis Artime Luis Artime Carlos Morete José Luis Calderón Andrés Silvera

GOLES 47 43 40 17 23 23 20 17 16

N: Nacional. M: Metropolitano. C: Clausura. A: Apertura

54/EG

vo en la fe que me transmitió Gallego y en la pretemporada. Ya lo comenté: antes había jugado casi sin base. Y ahora no sólo pude hacer el trabajo a full, sino que también me dieron una dieta para que pudiera subir de peso. A mí siempre me costó recuperarme de un partido a otro.

Pero desde que me dieron una dieta más balanceada, pude sostener esos tres o cuatro kilitos fundamentales para sentirme más fuerte, con aire para correr sin problemas durante los noventa minutos, con polenta para soportar el choque con los defensores contrarios.

Les soy sincero: nunca me propuse ser el goleador del campeonato. Me conformaba con rendirle al equipo para lograr el objetivo, pero no me importaba si el goleador era yo u otro. Tampoco me volví loco cuando se decía que iban a traer un nueve. Yo sabía que con una pretemporada encima le podía pelear el puesto a cualquiera. Y estaba tranquilo porque el Tolo pidió que no me vendieran. Tenía confianza en mí, algo muy importante para todo jugador.

ra nosotros, es una satisfacción muy especial haber conseguido el título del modo que lo hicimos: respetando ese paladar tan exquisito que tiene históricamente el hincha de Independiente. Tal vez bajamos un poco el nivel en los partidos finales, producto de la presión por asegurar el título. Pero siempre fuimos protagonistas. Jamás renunciamos a jugar con generosidad por el espectáculo, como le gusta a la gente. En ese sentido, creo que mantuvimos una coherencia impresionante.

El cuerpo técnico hizo un trabajo espectacular desde el arranque. Había que levantar moralmente a un plantel como el nuestro, ¿eh? Cuando llegó Gallego, nosotros estábamos muertos.

No creíamos en nosotros mismos. Dudábamos hasta de nuestras propias condiciones. Necesitábamos un tipo como el Tolo, que es compinche del jugador, pero también exigente y muy claro con lo que pide cuando debe serlo. Dejó al desnudo cuáles eran nuestras limitaciones y nuestros errores, cosa de que no volviéramos a cometerlos, pero también nos hizo ver un montón de virtudes individuales y colectivas. Y muchísimas cosas que podríamos ir mejorando si teníamos constancia y aplicación en el trabajo. En fin, el Tolo nos mentalizó para salir campeones. Respetando a todos, pero manejando la convicción de que no éramos menos que nadie.

A lo largo del torneo hubo momentos muy lindos. Tanto míos como del equipo. Pero rescato, por encima de todo, la convicción para jugar ofensivamente siempre, en todas las canchas. A nosotros nadie nos regaló nada. Salimos a buscar nuestra suerte en cualquier parte. Y siempre lo hicimos en base a fútbol. Yo digo que ➤

OPINION SILVERA DEJO su huella en las áreas adversarias, pero también brilló cada vez que se tiró atrás para organizar el juego.

Por Elías Perugino

EL PUNTA IDEAL

alejandro del bosco

Además de los goles, Silvera expuso un gran repertorio de recursos técnicos a lo largo del Apertura.

CUANDO LO DIRIGIA en Unión, Nery Pumpido le adivinaba rasgos propios de Enzo Francescoli. Y desde que brilla en Independiente, el periodismo lo bautizó “el Kluivert argentino”.

Ante semejantes comparaciones, y sin perder de vista la natural propensión de los argentinos a las exageraciones, cabe la pregunta: ¿Andrés Silvera está a la altura de dos “fuoriclase” como el uruguayo y el holandés?

Si se traslada el interrogante al propio interesado, la respuesta será una sonora carcajada. Pero el rendimiento del Cuqui en el Apertura fue cosa seria. Muy seria.

Por condiciones técnicas y participación en la dinámica ofensiva del equipo, Silvera se mostró como el punta ideal. Un jugador con capacidad para desequilibrar por todo el frente sin distinción de perfiles. Una referencia rotunda en el área –por ductilidad para el cabezazo y el latigazo de su anticipo– para rubricar el desequilibrio que el equipo provocó por las bandas. Un nueve con categoría de diez, portador de un pie sensible para salir de la zona de fuego y entreverarse en la gestación tejiendo fútbol con la propiedad del más pintado de los fantasistas. Un centrodelantero con gambeta para armar desde atrás o desarmar al rival en la individual.

Salvando las distancias que establecen las trayectorias, al Silvera 2002 no le quedó mal la comparación con aquellos dos monstruos indiscutibles del planeta fútbol. Se pareció al Enzo en la elegancia del tranco, en el panorama que enarboló cada vez que circuló por tres cuartos de cancha, en el timing para salir y volver a entrar. Y tuvo puntos de contacto con la Pantera del Barcelona en la exquisitez de sus definiciones y en la frialdad para elegir la mejor opción en la zona más caliente de la cancha.

Jugó para ganarse la comparación con las estrellas, por más que eso le siga causando gracia… ● 55/EG

alejandro del bosco

PRIMERA PERSONA / CONFESIONES DE UN GOLEADOR

UN MOMENTO inolvidable de la campaña. El Cuqui Silvera convierte el segundo gol rojo en el clásico frente a Racing, en el Monumental.

➤ los dos rasgos distintivos de este Independiente fueron el buen fútbol y la contundencia.

La manera de generar juego y el modo en que definimos. Y en eso tuvieron que ver todos, del primero al último jugador. Porque en Independiente la saben mover todos, hasta los del fondo. Por eso hicimos diferencia.

Además, aquellos más exquisitos, como pueden ser Montenegro, Insúa o Guiñazú, pusieron una cuota de sacrificio muy importante al servicio del equipo. Todos se comprometieron con todos. Los que tenían como función principal marcar, también se animaron a jugar. Y los que tenían como misión jugar, también aportaron a la hora del sacrificio.

A medida que iban pasando los goles me entusiasmé con la posibilidad de ser el goleador del torneo, pero no estaba obsesionado. Ni con eso, ni con batir el récord de Palermo. Pero cada gol me servía para afirmar ese sentimiento de revancha bien entendida. El año anterior me había quedado con la sangre en el ojo. Y no estaba dispuesto a abandonar el club sin dejar una buena imagen. Por eso dije que celebré más el cie56/EG

rre del libro de pases, que me garantizó la continuidad en el club, que el gol a Racing, que igualmente fue importantísimo.

Aunque tuve la fortuna de hacer varios, me parece que el más lindo se lo hice a Huracán. Porque arranqué desde la mitad de la cancha, dejé a varios en el camino y pude definir muy bien.

Pero todos fueron valiosos, hasta el que le hice a Chicago de penal. ¿El momento que más recuerdo? Todos, porque este grupo vivió la campaña intensamente. Desde los partidos importantes del principio hasta las goleadas con Colón y Chacarita; desde la derrota con River, que nos dolió bastante, hasta esta consagración. Siempre estuvimos con la motivación en alza, con la adrenalina a full. Muy conscientes de cuál era el gran objetivo.

A la hora de las dedicatorias, uno siempre se acuerda de aquellos que están cerca; aquellos que fueron el sostén en los días donde las cosas no eran color de rosa. Obviamente, de la familia y de los amigos, tanto de aquí como de Comodoro. Sé que aquellos que me conocieron en la

Comisión de Actividades Infantiles y en La Proveeduría, mi equipito de baby, deben estar muy felices con todo lo que me está pasado. Esta alegría es para ellos.

Pero también se lo quiero dedicar a todos los hinchas de Independiente, que nos apoyaron de un modo espectacular a lo largo de toda la campaña. Vivieron el partido como uno más de nosotros, reventaron las canchas, armaron fiestas increíbles en las tribunas y gozaron como hacía tiempo no lo hacían. Ellos se lo merecen más que nadie.

Por ahora no quiero pensar en el futuro. Sé que esta campaña quizá me abra puertas en el exterior, ya que Independiente es una vidriera muy grande en el mundo entero. Pero no estoy desesperado ni nada por el estilo. Las cosas vienen solas. Si se tiene que dar, se dará. Y si no, seguiré en Independiente, donde me siento cómodo, querido y respetado. Por suerte, puedo disfrutar este momento con una gran tranquilidad interior. Sencillamente, porque cumplí con mi deseo personal, que era dejar escrito mi nombre en la mejor historia de Independiente �

NUMEROS ROJOS / ESTADISTICAS POR ROBERTO GLUCKSMANN

LA FICHA DE LOS CAMPEONES JUGADOR

LUGAR DE NACIMIENTO

FECHA

PESO

ALT.

PJ

MJ

GC

T

E

S

DEBUT Y CAMPAÑA EN INDEPENDIENTE FECHA RIVAL PJ

GC

TL

TI

Díaz, Leonardo Nicolás

Santa Fe (Santa Fe)

5/9/72

82

1,84

18

1620

0

18

0

0

27/7/02

2-0 vs. Lanús (L)

18

0

1

0

Serrizuela, Juan José

Avellaneda (Bs. As.)

25/1/77

77

1,82

17

1477

0

17

0

1

27/7/02

2-0 vs. Lanús (L)

17

0

2

2

Franco, Hernán Diego Ceferino

Cruz Alta (Córdoba)

26/1/74

79

1,87

17

1529

1

17

0

0

19/8/01

4-1 vs. Vélez (V)

44

2

1

0

Milito, Gabriel Alejandro

Bernal (Bs. As.)

7/9/80

79

1,77

18

1549

0

18

0

0

21/12/97

2-0 vs. Ferro (L)

107

2

1

0

Domínguez, Federico Hernán

Lanús (Bs. As.)

13/8/76

75

1,81

16

1431

4

16

0

1

27/7/02

2-0 vs. Lanús (L)

16

4

4

2

Ríos, Leonel

Capital Federal

17/11/82

70

1,77

18

883

2

9

9

7

25/2/01

2-1 vs. Lanús (L)

42

3

1

0 0

Castagno Suárez, Diego Cristian Rosario (Santa Fe)

10/10/72

81

1,84

18

1620

1

18

0

0

27/7/02

2-0 vs. Lanús (L)

18

1

1

Guiñazú, Pablo Horacio

Gral. Cabrera (Córdoba)

26/8/78

73

1,73

18

1428

0

18

0

7

26/8/01

1-1 vs. Racing (L)

51

1

1

0

Montenegro, Daniel Gastón

Capital Federal

28/3/79

72

1,72

19

1453

6

19

0

13

13/2/00

1-3 vs. Boca (L)

38

13

1

0

Insúa, Federico

Capital Federal

3/1/80

74

1,79

19

1380

7

19

0

14

17/2/02

2-1 vs Racing (V)

37

10

1

0

Silvera, Néstor Andrés

Comodoro Rivadavia (Chubut)

14/3/77

77

1,85

19

1677

16

19

0

1

19/8/01

4-1 vs. Vélez (V)

43

20

1

0

Rivas, Emanuel Benito

Quilmes (Bs. As.)

17/3/83

65

1,75

12

255

1

0

12

0

25/5/01

0-1 vs. Gimnasia LP (L)

20

2

1

0

Eluchans, Juan Eduardo

Tandil (Bs. As.)

14/4/80

69

1,77

15

407

1

3

12

1

17/11/00

1-0 vs. Argentinos (V)

41

3

1

0

Montenegro, Ariel Alfredo

Capital Federal

3/11/75

76

1,77

2

26

0

0

2

0

13/2/00

1-3 vs. Boca (L)

40

5

1

0

Villavicencio, Matías Sebastián

Berazategui (Bs. As.)

18/9/81

79

1,80

4

338

0

3

1

0

7/12/01

1-0 vs. Chicago (L)

22

0

1

0

Pusineri, Lucas Andrés

Capital Federal

16/7/76

74

1,79

16

962

6

10

6

5

19/8/02

4-1 vs. Racing (V)

16

6

2

1

Albil, Damián Gonzalo

Lomas de Zamora (Bs. As.)

9/12/79

73

1,81

1

90

0

1

0

0

26/11/00

3-1 vs. Unión (L)

3

0

1

0

Trecco, Pablo Daniel

Carhué (Bs. As.)

24/8/81

65

1,69

2

10

0

0

2

0

18/2/00

2-1 vs. Lanús (V)

3

0

1

0

Gómez, Christian Gustavo

Capital Federal

7/11/74

68

1,72

7

134

1

0

7

1

29/8/97

3-2 vs. Huracán (L)

74

9

1

0

Pernía, Mariano Andrés

Capital Federal

4/5/77

79

1,78

2

103

0

1

1

0

22/10/00

2-1 vs. Los Andes (V)

46

2

1

0

Damiani, Raúl Hernán

Roldán (Santa Fe)

29/4/79

65

1,71

2

180

0

2

0

0

27/10/02

3-1 vs Central (L)

2

0

1

0

Bazán, Oscar Alfredo

Capital Federal

8/4/81

71

1,74

1

74

0

1

0

1

2/11/02

Botero, Alejandro

Pereira (Colombia)

8/10/80

82

1,86

0

0

0

0

0

0

No debutó

Cuba, Pablo Alberto

Córdoba (Córdoba)

8/10/79

76

1,75

0

0

0

0

0

0

17/2/02

2-2 vs. Chicago (V) 2-1 vs. Racing (V)

1

0

1

0

0

0

1

0

14

1

1

0

Botero y Cuba integraron el banco de suplentes, pero no llegaron a ingresar en ningún partido.

Aclaraciones: PJ: partidos jugados. MJ: minutos jugados. GC: goles convertidos. T: Jugó como titular. E: entró durante los partidos. S: salió y fue reemplazado. TL: títulos locales en su carrera. TI: títulos internacionales en su carrera. /Las fechas y rivales del debut y partidos jugados y goles convertidos están referidos exclusivamente a Independiente. En cambio en títulos locales e internacionales se incluyen los obtenidos con otros clubes, siempre en Primera División.

LA CAMPAÑA FECHA

EXPULSADOS

RIVAL

C

R

GOLES PROPIOS

PROPIOS: 4

1

27/7/02 Lanús

L 2-0 Silvera y Eluchans

JUGADOR

MOTIVO

MIN.

2

4/8/02 Gimnasia

V

1-1

F. Domínguez

Milito

FECHA RIVAL

4

Racing

Juego brusco

19’

Héctor Baldassi

3

10/8/02 Olimpo

L

3-1

Castagno Suárez, Insúa y F. Domínguez

Franco

6

Vélez

Doble amonestación

89’

Angel Sánchez

4

19/8/02 Racing

Agresión mutua

17’

Héctor Baldassi

51’

Roberto Ruscio

V 4-1

D. Montenegro (2), Ríos y Silvera

Guiñazú

13

Estudiantes

5 24/8/02 Newell’s

L

F. Domínguez

Eluchans

14

Rosario Central Doble amonestación

6

V 2-1

1/9/02 Vélez

1-1 7-1

Silvera y Franco

7

6/9/02 Colón

L

8

13/9/02 Chacarita

V 6-2

Silvera (3) e Insúa (3)

9 22/9/02 River

L

Pusineri

10 29/9/02 Huracán

V 2-0 Pusineri y Silvera

11 4/10/02 Arsenal

L 3-2

12 12/10/02 Talleres (Cba.)

V 4-1

Silvera (2), D. Montenegro y C. Gómez

13 20/10/02 Estudiantes

L

1-0

Aquino en contra

14 27/10/02 Rosario Central L

3-1

1-2

Silvera (3), D. Montenegro, Ríos, Rivas y Delgado e/c.

Pusineri, Insúa de penal y Silvera

ARBITRO

RIVALES: 4

M. Estévez (Racing), P. González (Arsenal), V. López (Talleres) y L. Ramos (Estudiantes)

PENALES

D. Montenegro (2) y Silvera

A FAVOR: 3. CONVERTIDOS: 2. DESVIADOS: 0. ATAJADOS: 1 JUGADOR FECHA RIVAL RESULTADO ARQUERO

15 2/11/02 Nueva Chicago V 2-2

F. Domínguez y Silvera de penal

F. Domínguez

16 9/11/02 Unión

L

Pusineri

Insúa

11°

Arsenal

Convertido

Limia

Claudio Martín

17 17/11/02 Banfield

V 1-2

Insúa

Silvera

15°

Nueva Chicago

Convertido

Velázquez

Daniel Giménez

18 24/11/02 Boca

L

Pusineri

19 1/12/02 San Lorenzo

V 3-0 Insúa, Silvera y Pusineri

1-0 1-1

1°

Lanús

Atajado

Flores

ARBITRO

Daniel Giménez

EN CONTRA: 1. CONVERTIDOS: 1 (J. C. Serrano, Nueva Chicago).

C: condición en la que disputó el partido. R: el resultado del encuentro.

Staff Secretario General de Redacción: Carlos Poggi.

Secretarios de Redacción: Juan Manuel Durruty,

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INFORME / EL ROJO POR DENTRO

LA VIDA INTIMA DEL NUEVO CAMPEON Jorge Touriño y Hugo Torrado, los incansables utileros de Independiente, revelan detalles desconocidos del equipo sensación: las cábalas, la guerra de vendas, las particulares caminatas de Gallego, todo... Y la rematan con dos perlitas: anécdotas de otros vestuarios campeones y un imperdible uno por uno del plantel. por ignacio levy / foto: alejandro del bosco

EN EL SILENCIO de la desierta Doble Visera, el agua roza el punto de ebullición y la pava suena como tapones contra el piso, en el corazón de la utilería. Sin embargo, los botines aún están quietos y vacíos, bajo los bancos largos y las repisas repletas de remeras dobladas y planchadas hasta la obsesión. Al lado, la tribuna de las Virgencitas está colmada, sin opciones de reventa ni espacio para una estampita. Apenas van seis horas del nuevo día y el mate pone play en la rutina de Hugo Torrado, utilero por herencia, profesión y vocación.

Comienza así un día tipo en la vida del Diablo.

Unos minutos más tarde se suma Nelson, el portero de la entrada que está sobre Cordero, y también Jorge Touriño, el otro director táctico de la indumentaria en el vestuario. Poco a poco, se va gestando la sobredosis de yerba mate junto a la sala del control antidoping, y en la utilería de Independiente la leyenda suplica: “Traigan bizcochos que pavas sobran”. Entonces, entra en acción Andrés Silvera, Sarmiento de la mateada, fanático de la puntualidad. “Llega a las 8 y siempre trae galletitas o algo para comer. Es el primero en caer, y enseguida se suma a la ronda de verdes. En realidad, antes que él, viene Gallego a eso de las siete y media, pero, en cuanto deja sus cosas, se va a la cancha a caminar unas vueltas. Después aparecen Franco, el Pocho Insúa, Raúl Damiani... se van acoplando todos en la utilería hasta que llega un momento en el que Jorge y yo tenemos que salir”, cuenta Torrado, hijo de Santiago, quien fue utilero de Independiente durante más de 40 años. “Esto para mí es una cuestión de familia e, incluso, mi hijo ya está trabajando de utilero en las inferiores”, expresa Hugo, de 53 años. Pero Jorge, con una década más en su bolsito, no se queda atrás, ya que su madre era cocinera en la pensión de Independiente cuando él arrancó en la utilería, en 1982.

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Ya dos décadas pasó Touriño en Independiente, entre Bochini y Fede Insúa, pero este año ha sido especial para los gendarmes de utilería. Fueron siete los años sin abrir las vitrinas y ellos los sufrieron como buenos vitalicios: “Si el club anda mal, te duele mucho. Por eso, yo no me imagino trabajando en otro lado. Empecé acá y acá voy a terminar”, afirma Jorge.

Este año cambiaron los resultados, mejoró el ánimo, se olvidó la época de copas flacas y todo fue color de Rojo. No sólo al final, sino durante todo el torneo: “En el vestuario se percibía desde el principio que este plantel estaba para campeón.

Ellos decían ‘piano a piano’, pero estaban convencidos de que iban por el campeonato, y se notaba fuera de la cancha”. Quizá por eso, los utileros hayan aceptado que su nido funcionara como peluquería más de una vez: “Uhhhh… acá adentro pelaron a varios, e incluso al masajista le pasaron la máquina por la cabeza. Le dejaron un manchón blanco y se tuvo que pelar. Nosotros esperábamos para ver cuál sería la nueva víctima”, reconocen al unísono. Y Hugo, un total descabellado, se jacta de su inmunidad: “Yo ya vine pelado de entrada. Fui un innovador. En ese sentido son todos mis hijos… El Tano Pernía me dice Papi”.

EN EL CONTEXTO de esa relación casi paternal, se hace difícil imaginar el clásico ritual posterior al partido: utileros vs. jugadores, en la típica contienda por determinar quién se lleva la camiseta. Y efectivamente Jorge garantiza que no existe tal disputa. “Noooo, no nos manguean camisetas… ¡se las llevan directamente!”, afirma.

“Tienen muchos compromisos y yo los entiendo.

Que un primo, que un amigo, que un conocido, que un hermano… son tantos que no dan abasto con las remeras y también se tienen que llevar los pantaloncitos”, agrega Torrado.

Sin embargo, a pesar del saqueo que soportan, ninguno de los dos se queja de los vestuarios

pospartido en esta campaña. “Ahí están todos contentos y la utilería parece un loquero. Después de ganarle a Central, sacaron un bombo, se pusieron a saltar y a cantar y nos metieron a nosotros también. Es un grupo muy lindo”, confiesan. Pero Hugo se ve obligado a sacar a la luz un tema difícil: “La guerrilla”, una interna feroz que destroza la armonía del grupo. “Sí, en plena utilería se arma una batalla en el medio de las duchas. Cada uno agarra sus vendas y empieza a pegarles a los otros. Entonces, tengo que andar corriendo agachado detrás de ellos, juntando las vendas”.

Era inevitable: al juntarse dos utileros, las anécdotas empiezan a chorrear por debajo de la puerta. Basta mirar la cara de Jorge y prestarle

atención: “Hay tantas… un día, en la cancha de Atlanta, el Negro Clausen no sabía si el campo estaba embarrado, entonces salió a jugar con un botín de tapones altos y otro de tapones bajos”.

Reseteá y va de nuevo: “Me acuerdo de que una vez el Tiburón Serrizuela salió de la ducha todo enjabonado, se metió desnudo en el consultorio del médico y fue corriendo a abrazarlo…”. No termina el relato de Touriño, cuando Torrado arremete con una suya y más moderna: “La última joda fue una que le hicieron a Bazán. Cuando salió de bañarse, se puso un zoquete y, al calzarse el segundo, le paso el pie de largo porque le habían cortado la media por la mitad”. ¿Quién fue? “Noooo, no pienso decir que fueron los Montenegro”, responde Hugo entre carcajadas,

EL SANTUARIO rojo y sus dos almas, los utileros Jorge Touriño y Hugo Torrado.

y agrega: “A Rivas no lo embroman tanto porque es el bebé del grupo. Además, es el más mimado por nosotros”. En el polo opuesto están Pichi Franco y el Cholo Guiñazú que, con sus constantes provocaciones, no hicieron más que desatar el espíritu batallador de la dupla Torrado-Mouriño: “Esos dos cacarean todo el día diciendo que son campeones de truco. Cuando los agarremos nosotros los vamos a partir al medio”, garantizan.

Rolfi, su hermano Ariel y Matías Villavicencio son los cabecillas de la alegría y los reyes del vestuario, aunque Villa se convierta frecuentemente en el arquero de las gastadas. Los motivos los revela Hugo: “Lo cargan por cómo baila.

Hasta él dice que es un desastre, pero para mí es un ídolo. Aunque no haya cantantes en el plantel, hay varios que se mueven así como bailando. Y fijate que no dije ‘bailando’… dije ‘se mueven así como bailando’”.

Con o sin gracia para quebrar las caderas, la música es tan importante como la pelota en este Independiente. Por eso, Torrado cuenta que “siempre, antes de salir a la cancha, pongo un tema de La Nueva Luna. Se convirtió en una cábala, a tal punto que nosotros guardamos el compact en la misma caja que los documentos y lo llevamos a la cancha. El musicalizador en la semana es Serrizuela”. Hay cumbia y la carencia de buenos bailarines se compensa con Las Diablitas. Aunque, claro, ellas ni se cruzan con los jugadores, dado que atraviesan el vestuario mientras se desarrolla la charla técnica. Así y todo, el dúo dinámico reconoce que tuvo un serio inconveniente con las señoritas: “El gran problema que tuvimos con Las Diablitas fue que las calzas venían muy chicas y se nos hacía difícil ponérselas, porque les quedaban muy ajustadas…”

YA SUMERGIDO entre historias de vestuarios, el cerebro de Touriño rebobina y se frena cuando llega a Ricardo Enrique Bochini: “El Bocha era muy tranquilo. Explotaba en la cancha y en el vestuario era uno más. No se hacía el héroe, ni el astro… era muy sencillo. Se ponía lo que le dabas y jamás hacía problemas por la ropa, ni por nada. Y en ese sentido Juan José Serrizuela es igual: nunca te hace ningún drama”. Comparan costumbres de vestuario y detalles imperceptibles. A ellos nada se les escapa… “En algo Leo Díaz es idéntico a Balbuena: los dos son chuecos.

Por el medio de las piernas del Mencho pasaba un barril y Díaz es chueco, chueco, chueco… una vez le tuve que cambiar los botines porque los tenía todos rotos y abiertos. ‘Hugo, mirá cómo tengo los botines’, me dijo. Yo lo miré y le dije ‘bueno, usalos para juntar puchos’”.

De las anécdotas a las cábalas se hace sinuoso el camino, porque ahí los utileros mantienen ➤ 59/EG

INFORME / EL ROJO POR DENTRO

SECRETOS DE UTILERIA LEO DIAZ

JUAN JOSE SERRIZUELA

“Un tipo tranquilo, aunque con los buzos que usa últimamente nos tiene intrigados a todos, porque parece que está corriendo en la Fórmula 1. Anda vestido de mameluco y nada más le falta el casco. Todos le preguntamos si no tiene calor con esos buzos y él dice que no. En fin, ahora no sabemos, pero cuando largue el fútbol seguro se pasa al automovilismo.” �

“El hombre de la música. Esa es su gran diversión. Cada tanto se porta con unos bizcochitos para el mate y, gane o pierda, siempre trae buena onda. Tiene el perfil bajo que tenía el Bocha en el vestuario, pero con la música es terrible. Instaló la cumbia en el plantel y, por su fanatismo, hasta llegó a planificarse la visita del grupo La Nueva Luna a un entrenamiento en la Doble Visera.” �

HERNAN FRANCO

GABRIEL MILITO

“Es el señorito del equipo. En este plantel de Independiente prácticamente no hay jugadores serios, pero si uno los observa todos los días se da cuenta de que Franco es el más seriecito de todo el grupo. Es de los que llegan más temprano a las prácticas y siempre está firme en la ronda de mates. Por sobre todas las cosas, es un flaco macanudísimo.” �

“Uhhh… Todo. Gaby es todo dentro de este plantel, qué te vamos a decir. A pesar de ser uno de los más jóvenes, es una de las voces de mando que tiene el grupo y nadie acá adentro te va a negar que es un tipazo. Por eso fue tan dura para todos nosotros la semana en la que secuestraron a su padre. No veíamos la hora de que todo terminara bien.” �

FEDERICO DOMINGUEZ

LEONEL RIOS

“El coqueto. En cuanto llega al vestuario, lo primero que hace es pararse enfrente del espejo para acomodarse su pelito y su cintita. Es muy puntilloso con todas esas cosas. Y además anda siempre muy bien empilchado. No hay un solo día en el que no tenga los zapatos impecables. Al margen de eso, es uno de los pibes más callados del plantel.” �

“Con Toti tenemos una cábala, pero no la podemos contar, porque hasta ahora siempre nos dio resultados y esperamos que siga funcionando. Lo que podemos decir es que es un pibe bárbaro y que, cuando le tocó salir del equipo, siguió siendo igual que siempre. De hecho, con Lucas Pusineri se llevan bárbaro y eso demuestra que tiran para el mismo lado.” �

LUCAS PUSINERI

DIEGO CASTAGNO SUAREZ

“Es un caso especial, porque dentro de la utilería es todo lo contrario a lo que ustedes ven en la cancha. Ahí parece un toro, te corre y te come. En cambio, de la puerta del vestuario para adentro es muy tranquilo. Lo único que pide es tener siempre sus canilleras listas y que le pongamos pomada en la punta de los botines, para que no se le gasten.” �

“Un referente. Lo respetan mucho y especialmente los chicos le prestan mucha atención cuando habla en el vestuario, le dan mucha bola. Sólo lo gastan un poquito con las camisas floreadas o coloridas que se pone todos los días. A veces nosotros le preguntamos si se le acabó la tela al sastre... Quizá por eso es que le hacen camisas de dos o tres colores.” �

ROLFI MONTENEGRO

FEDERICO INSUA

“Es bravo, el Rolfi, che, especialmente cuando se junta con el hermano. Pero en el fondo es muy buen tipo. Siempre, cuando va a buscar sus botines, trae su par y también el de algún compañero. Además, desde que llegó a Independiente nunca lo vimos de mal humor y está siempre en busca de alguno para hacerle una broma. En ese aspecto, es igualito al Tapón Gordillo.” �

“Fanático de los Rolling Stones, pero también de la cumbia. Siempre se enloquece cuando se junta con los Montenegro y es uno de los artífices de la famosa guerrilla de vendas que se arma en el medio de las duchas. Igual, a veces, él prefiere no participar, aunque lo obligan… porque, si no se prende, lo agarran y le pegan un vendazo cuando se está cambiando.” �

PABLO GUIÑAZU

ANDRES SILVERA

“Hace algo que nunca vimos a otro jugador: les corta las puntas a las medias. En cuanto le damos un par nuevo, él saca una tijera y lo corta. Un día lo atacamos y le dijimos: “¡Ey, qué hacés!”.

Pero ahora ya sabemos cómo es. Creemos que lo hace porque tiene el pie chico y el talón de la media le queda atrás. Entonces, la corta para poder acomodársela y se pone un zoquete abajo.” �

“La humildad total. Es puntual y tranqui, pero también hace de las suyas… Cada vez que sale de las duchas se trae su toallón y el de todos sus compañeros. Entonces, después, tienen que salir todos mojados a buscarlos. Lo mejor de Cuqui es que siempre es igual. Se habla de que lo venderían a España o a Italia, aunque a él nunca lo escuchamos hablar de eso.” �

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➤el secreto de sumario. Aseguran que este plantel tiene pocas y, según Jorge, “ninguna es tan llamativa como la que tenía Faryd Mondragón. El prendía tres velas en un rincón del vestuario: una blanca, una roja y una azul. Delante colocaba unas estampitas con Virgencitas de Colombia y rezaba, porque era muy religioso”.

Finalmente, Jorge y Hugo se cruzan miradas y ceden a contar al menos el ritual de ellos dos: “Jorge ve los partidos desde el túnel y yo me quedo en el vestuario. Aunque me ponga loco, aguanto los noventa minutos adentro escuchando la radio a todo lo que da, mientras barro el piso o camino por la utilería. Contra Central, le estaba limpiando una zapatilla al Profe porque se le había embarrado y, cuando escuché el gol de Rolfi, la revolee y casi rompo un tubo de luz”. Y ése no fue el momento más tenso para Hugo, ya que en Vélez se dio el único tropezón de los utileros en esta temporada: “Olvidarte un par de botines es como que te hagan un gol en contra y, por suerte, eso no nos pasó nunca. Pero tuvimos un problemita en el Fortín de Liniers, cuando no aparecían las canilleras de Pusineri. El se puso mal porque siempre juega con las mismas y son como un amuleto. Le tuvimos que dar otras y no le gustó. Por suerte, después las encontramos y todo se arregló”.

AHORA SOLO FLOTA alegría bajo la sombra de la Visera. Torrado y Touriño aseguran que ése es el sello de este plantel, aun en la derrota.

Pero, a mitad del camino a la gloria, un episodio apagó la euforia y vistió de pánico el ambiente del vestuario. “El secuestro de Jorge Milito fue muy jodido para todos. Nosotros esperábamos que se terminara cuanto antes. Y cuando apareció… ohhhh, verlo entrar a Gaby en el vestuario, una vez que el viejo ya estaba en la casa, fue una satisfacción inmensa. En ese momento, él juntó al grupo y le contó cómo habían sido las cosas. Después todo fue abrazos y alegría”.

Antes y después de ese pozo, el Rojo estuvo en la cumbre, de fiesta, reventando estadios y, según Torrado, también teléfonos… “Los lunes nos volvemos locos atendiendo llamadas de la gente de Tandil o Rosario que quiere saber cuándo empieza la venta de entradas. Es increíble, pero hasta los entrenamientos se llenan de gente, y todos los días caen cualquier cantidad de camisetas y banderas para que firmen los jugadores.

Es hermoso”.

Hugo y Jorge levantan las cosas del mate y retoman el trabajo o, como dicen ellos, “la pasión”.

Empieza el movimiento en el aparato circulatorio de la Doble Visera y el ruido de los tapones contra el piso suena como el agua en la pava.

Pero ahora es verdad. La utilería está en marcha y los botines ya no están vacíos: llevan adentro al nuevo campeón �

PERFIL / AMERICO GALLEGO

¡TOLON, TOLON! Venía más golpeado que Independiente, burlado y castigado por sus últimas campañas y por algunas frases antológicas. Sin embargo, el Tolo apeló a su orgullo y terminó ganando su batalla personal. Perfil de un hombre curtido y frontal, sanguíneo y conocedor como pocos de cómo se le pelea con sacrificio a la vida.

por diego borinsky / fotos: anibal greco

TENIA MUCHA RAZON Américo Rubén Gallego aquel 10 de abril, cuando después de la primera práctica en la Doble Visera con su flamante equipo, tras diez meses de abstinencia laboral que para él son como treinta por su ansiedad y la imperiosa necesidad que tiene de respirar fútbol, se sinceró con su habitual espontaneidad: “Acá me juego muchísimo de mi futuro como entrenador. Si me va mal, muchos van a decir que no sirvo como técnico”. Pequeña corrección: muchos ya decían que no servía como técnico.

Aquel 10 de abril se encontraban dos desahuciados: Independiente, los retazos de un Indepen62/EG

diente que hacía tiempo ya había perdido el rumbo institucional con las consecuencias deportivas que ello implica, acosado como nunca en su vida por el infame descenso; y el Tolo, poco menos que elevado al altar de la ridiculez, humillado por un ambiente que no le perdonó sus frases inoportunas y los dos títulos perdidos en forma increíble sobre el epílogo de los mismos. Que no tiene carácter, que Ramón y Passarella le habían dejado armado los equipos y por eso fue campeón, que es cagón y sólo sirve como acompañante, que tiene miedo, que no sabe nada, que no dirige nunca más...

Un día antes de asumir, los socios de Independiente habían expresado todo su fastidio con un “banderazo de la bronca”. Estaba claro que no era el mejor momento para andar haciendo pruebas con su capacidad de conducción. Mucho menos lo fue después de los primeros siete partidos en los que se sentó en el banco, los que completaron el Clausura 2002 y que terminaron por dejar al Rey de Copas, al Orgullo Nacional, último de veinte por primera vez en su historia. El Tolo había prometido cinco victorias en esa serie pero le chingó feo y no ganó ni uno. Tampoco pudo salir airoso en los siguientes tres amistosos. Lindo muerto tenía para levantar: ¡0 de 10! ➤

EL GESTO SERIO hasta el final. El Tolo todavía no entró del todo en el corazón de la gente, pero recuperó su autoestima.

PERFIL / AMERICO GALLEGO

➤ Cuentan que tras el penoso 1-2 contra Banfield de la última fecha del Clausura, el Tolo tocó las fibras íntimas de sus jugadores con un grito que retumbó en el vestuario: “Yo no me quiero ir al descenso”. Hayan respondido o no por ese mensaje, a Gallego habrá que reconocerle un mérito indiscutible: el hombre consigue que sus jugadores le respondan, que se jueguen enteros por él. Se hace querer.

Concluida la pretemporada en Necochea, con la mayoría de los refuerzos ya alistados bajo sus órdenes, feliz porque sentía que comenzaban a entenderlo, asomó su sonrisa de labios gruesos entre los periodistas que cubrían la práctica y

¿QUIEN ES AMERICO GALLEGO, EL TECNICO CAMPEON? El mismo se definió en El Gráfico hace un par de meses: “Un luchador. Un tipo que nació en Morteros, Córdoba, y que a los 2 años se fue a Rosario con su mamá y empezó a transitar una vida difícil, sin padre y con cuatro hermanos”. Se podría agregar a ese autorretrato la dedicatoria que uno de sus mentores, el Flaco Menotti, le regaló impresa en un póster del equipo del 78: “A doña Carmen, mamá de Gallego, por la nobleza de su hijo, mi afecto y mis mejores deseos”.

Criado en una familia de muy bajos recursos, el Tolo y sus hermanos decidieron adoptar el ape-

jo para que no entrara el barro. Se divertía de chico con costumbres que hoy parecen de la prehistoria y moldeaba su carácter: “¿Sabés cómo peleaba de chiquito? Yo iba a cazar palomitas torcazas y, si las cazaba el otro, le buscaba lío nada más que para pelearme; era peleador yo”.

No la tuvo fácil en buena parte de su vida el Tolo –apodo que heredó del caballo Bartolo con el que jugueteaba en su niñez–, y en esa dirección se puede entender una de sus referencias más frecuentes a la hora de hablar sobre sus equipos. Por eso más de una vez aseguró que la Selección fracasó en el Mundial 82 porque le faltó hambre de gloria. Y por eso hace unas semanas

“FUI BICICLETERO, VERDULERO, CHURRERO. DE TODOS LOS TRABAJOS, EL DE HIELERO FUE EL QUE MENOS ME GUSTO. TENIA QUE LLEVAR LAS BARRAS Y ME QUEMABAN LAS MANOS...” se despachó con una de sus clásicas sentencias, esas frases que, por momentos, lo encumbran como un adivino de poderes sobrenaturales y por otros lo acercan al precipicio de la torpeza y la burla: “¡Cuánta gente! ¡Cómo saben que vamos a puntear todo el campeonato!”. Y después se puso serio: “No hay excusas. No lo voy a decir… o sí, me conformo sólo con el campeonato, quiero pelear arriba. Si tengo que pensar en la promoción con este equipo que me armaron, me tengo que pegar dos tiros en la cabeza. No es que esté agrandado, pero tenemos que mirar arriba”.

Paladeó su primera victoria, el domingo 14 de julio, contra Libertad de Paraguay (2-0). A partir de entonces, ya nadie lo detendría en su carrera hacia el título.

llido de su madre después de que el padre los abandonara. “Para mí es un orgullo llevar su apellido, para mí fue madre y padre a la vez”, se emociona el Tolo. Su mamá falleció unos días después de la conquista del Mundial 78 y eso lo afectó mucho, porque “justo cuando podía darle algunas satisfacciones y un bienestar, se me viene a morir”. Su papá está vivo pero el Tolo ni habla con él, no le interesa. “Soy muy taurino, muy cabeza dura”, se justifica. Y está todo muy claro.

En su infancia trabajó de todo: fue bicicletero, verdulero, churrero. “De los trabajos que tuve, el de hielero fue el que menos me gustó, tenía que llevar las barras de casa en casa y me quemaban las manos”, reconoce. La madre les compraba a él y a sus hermanos las zapatillas Flecha que se rompían, y ellos les tenían que poner cartón aba-

SIEMPRE PELEA ARRIBA Esta es la síntesis de los torneos dirigidos por Gallego en forma completa. En el Clausura 2002 sólo condujo a Independiente en 7 partidos. En el Clausura 2001, renunció antes de disputarse la última fecha.

TORNEOS LOCALES Apertura 94 Clausura 2000 Apertura 2000 Clausura 2001 Apertura 2002

G 12 12 10 13 13

TORNEOS INTERNACIONALES G Supercopa 94 1 Libertadores 2000 5 Mercosur 2000 6 Libertadores 2001 5

64/EG

E 7 6 7 2 4

P 0 1 2 3 2

GF 31 44 41 47 48

GC 14 17 24 25 19

PTS. 31 42 37 41 40

EFECT. 82% 74% 65% 76% 75%

POSICION Campeón Campeón Segundo Segundo Campeón

E 3 3 2 1

P 0 2 2 4

GF 4 18 17 18

GC 3 13 14 11

PTS. 5 18 20 16

EFECT. 63% 60% 67% 53%

POSICION Cuartos de final Cuartos de final Semifinal Cuartos de final

señaló que este Independiente le recuerda a la Selección del 78 “porque tiene mucho hambre, porque hay pocos jugadores que ganaron algo”.

Marcas de la vida que le dicen. Marcas que no se borran.

Si el trabajo fue un compañero inseparable desde que nació, también influyó decisivamente en su carrera como futbolista. A comienzos de los 70, ya fichado en Newell’s después de surgir de Alianza Sport –el cuadrito del barrio–, el Tolo trabajaba en una fábrica de ventiladores. Y se desató la huelga. “Se trabajaba mucho y se ganaba poco –revive-. Y fuimos a la huelga. Duró bastante tiempo, como un mes, hasta se hizo una olla popular. Allí me decidí. Hablé con mi familia, les dije que ese tiempo lo iba a aprovechar para entrenar y matarme por el fútbol. Esa huelga cambió mi vida”.

Allí comenzó una carrera plagada de éxitos. Debutó en Newell’s a fines del 74, después fue convocado en 1975 con otros “nenes” como Passarella, Tarantini, Valdano y Trobbiani para disputar el Torneo Esperanzas de Toulon con la Selección juvenil y obtuvo su primer título. Fue campeón mundial en 1978 y todos aún recuerdan cómo despejó a la tribuna la angustia de un país; ese disparo de Rensenbrik que dio en el palo derecho de Fillol y era el 1-2 en el último minuto de la final. “Me puse tan nervioso que le di con la canilla”, recuerda. Campeón del Nacional 81 con River, después fue el capitán de la gesta única que le dio al Millo el campeonato local, su primera Libertadores y la única Intercontinental.

Siempre alegre, siempre centro de la escena en los grupos que integró, siempre decisivo por temperamento y entrega, el Tolo-jugador no ➤

LA INDICACION con Fede DomĂ­nguez a un costado. Vive a full los partidos, a veces demasiado. Eso le pasa facturas a su salud.

archivo el grafico

PERFIL / AMERICO GALLEGO

ASI EMPEZO ESTA HISTORIA… “Con un pie en Avellaneda y otro en Núñez”, tituló El Gráfico, el 26 de agosto de 1980, la nota que acompañaba esta foto, con un poder adivinatorio que hoy causa asombro. Porque, finalmente, un año después, Américo Gallego se sumaría al conjunto de Núñez, más tarde lo dirigiría en dos ocasiones y, por último, terminaría recalando en Avellaneda para conducir los destinos del Rojo. Por aquellos días, el Tolo ya era un reconocido futbolista campeón del mundo con Argentina y varios clubes lo tenían en sus planes. “Quiero progresar, una venta sería importante para mí. Además, estoy cansado de viajar cada quince días a Buenos Aires en micro”, argumentaba el Tolo. Los dirigentes de Newell’s pedían 1.250.000 dólares por el pase, una fortuna para aquel momento. El Gitano Juárez, uno de los entrenadores que más marcó a Gallego en su carrera, era el DT del Rojo. Julio Grondona, presidente de Independiente en uso de licencia, confirmaba en esa nota el interés por el volante. Finalmente, la historia quedó trunca hasta este 2002 �

➤ era ningún nene de pecho en su búsqueda del éxito. “Me dejaba la uña del dedo meñique bien larga y cada vez que pasaba alguno le metía unos uñazos terribles en la cabeza. Bochini se ponía loco porque era medio peladito; hoy es otra cosa, son todos nenes buenos”, admite ahora que ya no juega y la causa prescribió. Si se observa con detenimiento la foto de esta página, podrá comprobarse que el hombre no miente.

El Gitano Juárez, Juan Carlos Montes, Menotti y Griffa fueron los técnicos que más lo marcaron.

De Griffa destaca que le daba vitaminas de pibe y que lo fue a buscar varias veces a su casa cuando le agarraban sus rabietas porque lo ponían de tres. “Si no fuera por Griffa, hoy estaría trabajando en un taller metalúrgico”, reconoce.

El germen del técnico que lleva adentro comenzó a aflorar en sus últimos años como jugador.

“En el 86 ya era medio lento y mandaba, me ponía como un policía de tránsito: vení acá, andá allá”, revive. El Bambino veía que le estaba serruchando el piso y por eso le gritaba en las prácticas: “¿Por qué no te vas a hacer el curso de técnico, Gallego? Si son dos años nada más.

Andá y después vení a dirigir a River”.

Le hizo caso. A Menotti le preguntó por el futuro. “Usted ve bien el fútbol y aparte, por cómo se paraba tácticamente en la cancha, puede ser un gran entrenador”, diagnosticó el Flaco. Unos meses después de retirarse, en 1988, Menotti le 66/EG

dio cabida en River: lo puso como mano derecha de Cayetano Rodríguez para ver rivales. En esa época le insistió a su amigo Passarella para que hiciera el curso como entrenador y a comienzos de 1990 arrancó su ciclo como ayudante, que incluyó tres títulos ganados. Después obtuvo el Apertura 94 en forma invicta y volvió para acompañar a su amigo en la Selección. Hasta que se produjo la división definitiva tras el Mundial 98: “Me terminé de decidir en el Preolímpico de Mar del Plata. Les ganábamos 2-0 a Brasil, y Daniel quería hacer otro gol mientras yo quería meter un cambio para tener la pelota. Al final nos empataron. Ahí me di cuenta de que quería independizarme”. ¿COMO ES AMERICO GALLEGO, EL TECNICO CAMPEON? Es transparente y poco calculador, por lo general responde lo primero que se le viene a la cabeza. Por eso acumula en su colección frases antológicas, como aquella de que “si pone a Palermo, yo pongo a Francescoli” antes del decisivo choque copero con Boca en el que Palermo, rengo, selló un 3-0 histórico. Bocón, pero sincero.

Es desconfiado también, sobre todo si no conoce al que está enfrente. Por eso, ya como DT y durante bastante tiempo, llevaba a las entrevistas un grabador propio para que no osaran pasarlo.

Es pasional y sanguíneo. Dirigiendo a River, en un

partido de verano (¡de verano!) contra Racing, casi se muere de un bobazo y terminó cambiando banco de suplentes por camilla de hospital.

“Empecé a sentir un calor en el pecho y me asusté”, confiesa.

Es fanático de los asados y lo suficientemente abierto en un medio muy cerrado para asumir que necesitaba terapia y no descargar así su ansiedad en la familia: por eso fue al psicólogo hace más de un año. Considera a Bianchi y a Bielsa como los mejores entrenadores argentinos. Siente una particular devoción por Maradona, desde que tuvo el honor de darle el primer pase en el debut del Diez en la Selección, en 1977; aunque hubo un paréntesis de 10 años en los que no se hablaron: “Diego es un tipo sensible, que te da lo que no tiene. A mí me ayudó mucho. Y yo también lo defendí en los partidos de las patadas que le daban”.

Tiene tres hijos, todos varones. Y también un curioso récord como DT, casi un guiño para acercarse a un hincha que aún no terminó de enamorar: enfrentó cinco veces a Racing y ganó las cinco, con 11 goles a favor y 1 en contra.

Tuvo sus méritos en esta campaña. Bancó a muerte a Silvera cuando el Cuqui se estaba yendo, apostó a un juego ofensivo juntando a futbolistas de “buen pie”, le encontró un lugar a Franco, transmitió su personalidad ganadora. Sí, su personalidad ganadora. Esa que ya nadie se animará a poner en duda... �