El Arte del Terror - Edición Día de las Brujas

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ELEMENTAL EDITORAÇÃO Presenta

EL ARTE DEL TERROR Edición

Día de las Brujas


El Arte del Terror Edición

Día de las Brujas

DONNEFAR SKEDAR E. N. ANDRADE FABY CRYSTALL J. J. DE SOUZA LÉO BARGOM Traducción: BRIAN AGUSTÍN GONZÁLEZ

ISBN: 9781370484539 ELEMENTAL EDITORAÇÃO © 2017


FICHA DEL LIBRO Elemental Editoração, 1ª Edición — 2017 Copyright © 2015 Elemental Editoração ISBN: 9781370484539 Título original: A Arte do Terror – Edición Día de las Brujas Copyright original © 2015 Elemental Editoração Copyright esta traducción © 2017 Elemental Editoração Creación de la cubierta: Elemental Editoração Diseño y edición: Elemental Editoração Traducción: Brian Agustín González Examen de Portugués: Donnefar Skedar Faby Crystall J.J. de Souza Léo Bargom E. N. Andrade

1. Colección 2. Cuento 3. Portugués 4. Horror 1. Título 2. Libro Digital 3, Colección

Todos los derechos de esta obra están reservados sólo para el autor, cualquier forma de reproducción no autorizada por expresa por el autor, se considerará un delito conforme a lo dispuesto en la ley de derechos de autor.


SUMARIO

FICHA DEL LIBRO PRESENTACIÓN ADVERTENCIA NOTA 1 — ALAMOA, LA BRUJA DE FERNANDO DE NORONHA (Léo Bargom) 2 — EN BUSCA DE LA OTRA MITAD (Faby Crystall) 3 — LA HORA MUERTA (J. J. de Souza) 4 — UNA DAGA ENSANGRENTADA, UN CAMINO DE SANGRE Y UNA VENTANA QUEBRADA (E. N. Andrade) 5 — EL EXORCISMO (Donnefar Skedar) ENLACES


Presentación Este proyecto está siendo realizado con dos intenciones: a) Poner nuestros textos al alcance de una gran variedad de público lector b) Acrecentar el interés del lector en nuestros trabajos, hechos de forma independiente. Todos los autores presentados en esta colección se han conocido (virtualmente), gracias al publicar cuentos de terror en la página

Recanto das Letras (en español “rincón /recoveco de las Letras. Si bien el tiempo ha transcurrido

y muchas cosas han cambiado, la pasión por la escritura y la emoción por la creación de historias ha permanecido y es debido a eso que surge este proyecto denominado El Arte del Terror (Nombre original en portugués “A Arte do Terror). Pero esto no se trata en absoluto de una simple reunión de amigos de escritura, la verdadera intención es ofrecer a los lectores interesados en la temática textos de calidad, hasta ahora desconocidos por ser cuentos independientes almacenados en un único lugar. Con la era digital este proyecto podrá ser lanzado en diversos lugares consiguiendo no solo nuevos lectores, sino también nuevos autores para nuevos volúmenes. Para quien seguía el sitio Recanto das Letras entre los años 2010 y 2015, será posible el recordar algún texto o algún autor. Mas para quien aún no conoce nada, este libro tiene el objetivo de ser una tarjeta de presentación para conocer a cada escritor y su historia hasta la presente fecha... Finalizamos diciendo solamente que este es un proyecto independiente y por tanto agradeceremos a los buenos lectores que colaboren con el mismo, para así mantener el nivel de cultura y entretenimiento en nuestro país y en todo lugar donde este libro esté disponible. En caso de ser un autor y quiera participar de una edición o en otro proyecto, envié por favor un correo electrónico a: elementaleditoracao@gmail.com.


ADVERTENCIA Los textos a continuación son de cuño ficticio, ninguno de los datos o de los nombres presentados son reales. Cualquier semejanza con alguien o con algún hecho ocurrido en la realidad es mera coincidencia. Todos los autores han creado los textos para el entrenamiento del lector, no estando envueltos en ninguna cuestión de las presentadas a continuación. Respetamos todas las razas creencias o religiones. Se pide cautela al hojear las siguientes páginas, pues todos los textos contienen palabras soeces y acciones que pueden ser fuertes para algunos lectores, por tanto, al iniciar la lectura tenga lo dicho anteriormente, ya que esta es una compilación de cuentos de terror y no de temática infantil, así mismo agradeceremos el que no comentario sobre la existencia de palabras o acciones ofensivas, puesto que hemos usado este aviso para alertar a nuestros lectores oportunamente.


NOTA Este es un proyecto independiente, esta edición “especial” conmemoraremos la fiesta de Halloween o Día de las Brujas. Este Volumen ha tenido la participación de autores que no han estado presente en el Volumen I del proyecto. Todos los cuentos son diferentes y son de autores que han sido parte el sitio Recoveco de las Letras (Recanto das Letras en portugués). Los textos han sido revisados por los autores y todo ha sido realizado de forma independiente, pedimos disculpas si hay erroes y esperamos que a la brevedad tener nuevas actualizaciones con revisiones que permitan ofrecer la mejor lectura para todos. Finalmente, el sello Elemental Editoração, agradece por esta lectura.


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ALAMOA, LA BRUJA DE FERNANDO DE NORONHA LÉO BARGOM A bordo de un velero con casco de acero de cincuenta pies de envergadura, equipado por un motor

MWM

Sangre Baujahr, seis cilindros y otros lujos; el piloto Danillo navega mar adentro en dirección al puerto de Santo Antônio en Fernando de Noronha. El mar está muy agitado y obliga al navegante a demostrar sus habilidades; el final de la tarde trae el anuncio de una gran tempestad que crea una extraña y pavorosa imagen al fusionarse con la inmensidad del mar. Descontraído o desatento Eduardo contempla aquella imagen sin demostrar reacción alguna, Samuel llega cerca de Eduardo con la intención de bromear, mas este no muestra voluntad alguna de corresponder a su intención, desilusionado retorna junto a los amigos que beben y diviértanse mientras el velero corta el mar. Danillo llama la atención de todos y apunta hacia el puerto de Santo Antônio. Como guía del grupo hasta la llegada a la Isla de Fernando de Noronha, Danillo explica que los grandes navíos tienen que mantenerse a una distancia de quinientos metros por causa del naufragio del carguero griego, Eleni Stathatos que hundióse el viente y ocho de octubre de mil novecientos viente y nueve. Producto de un grave incendio que envolvió al carbón y al material ferroviario que el gran navío transportaba hacia Argentina. El velero aproximase al amarradero natural hecho de piedras, usado como puerto en la isla, Henrique, Paula, Bianca y Samuel comienzan a juntar sus pertenencias para descender, mas Eduardo no toma ninguna iniciativa y permanecer observando el horizonte embelesado por la imagen de la tempestad que comienza a obscurecer el cielo y el mar. Danillo acercase a Eduardo e intenta convencerlo para que descienda y corra hacia la posada antes del arribo de la tormenta. Con suma lentitud empieza a recoger sus pertenencias, mientras sus amigos sonríen para animarlo. — Eso es mi chaval, estás llegando al paraíso y ni pareces animado, te gustará la isla, la adorarás. - Dice el piloto, intentando animar al joven que responde con una leve sonrisa. — Eso es, gozaremos la isla, yo no he soportado todo esto para ver a mi amigo triste y avergonzado por causa del rechazo de una novia que siquiera te merece. — Comenta jactándose y burlándose de Eduardo. — Vamos Eduardo, sonríe y gocemos el paraíso. — Dice Paula intentando animar al colega. — Apúrate, no querrás que nos mojemos, ve la borrasca que viene, los rayos cruzan el firmamento, vamos olvida a Sabrina, quien sabe si aquí no encontrarás una más linda y mejor que ella — Agrega Bianca sonriendo.


10 — Es verdad, la noche aquí promete mucho y después de la tormenta disfrutaremos la noche en la isla — Concluye Samuel intentando animarlo más. El mozo luego de

tanto incentivo acaba por reaccionar y siguiendo a los amigos hacia la posada. Todos

despídanse de Danillo, informándole el día en que desean recogidos para el regreso. El piloto toma la dirección opuesta a la tempestad, pues tiene que retornar a Recife, donde otros clientes aguárdalo. Mientras van al vehículo que los llevará a la venta, todos admiran profundamente la belleza de la isla; Eduardo en particular queda prendado con la Piedra del pico. En ese atardecer ya casi obscuro por causas climáticas, todo parece envolverse en tinieblas en la isla. Los rayos cortan el infinito, como si unieran el cielo con las aguas del océano en medio de sombras cada vez más espesas. De repente, Eduardo notar una luminosidad diferente en la Piedra del Pico, una luz extraña que lo hipnotiza y atráelo de manera superlativa, más la borrasca prácticamente encima de ellos, ocasiona que vuelva en si súbitamente. Apenas llegan a la posada, la lluvia empieza a caer violentamente. Eduardo vuélvase aprensivo una vez más, con su pensamiento fijado en la extraña luz observada. Los amigos empiezan a

divertirse con bromas y bebidas

alcohólicas, más el joven parece no estar allí, su cabeza está realmente perdida y nadie logra sacarlo de su sopor... Sin que nadie lo perciba, El mancebo llega hacia la terraza de la posada y observa por la piedra en la lejanía. Poco tiempo demora para que vuelva a percibir el resplandor, mientras la lluvia disminuye y la noche invita a caminar hacia el enigma... Al llegar a la playa de la Concepción, en cercanías a la Piedra del Pico, Eduardo pudo percibir que el haz de luz que salía de la piedra iluminaba la arena blanca de la playa hasta llegar a las olas agitadas del mar. La visión era tan encantadora y fascinante, que la llovizna que lo golpeaba, no importable en lo más mínimo. Al cerrar los ojos y abrirlos nuevamente para limpiar el agua de lluvia que escurría por su rostro, el mancebo percibió un espectro revelado por la luz, lo cual ocasionó que el corazón le saltará en el pecho de miedo, sin embargo, al observar con más calma pudo descubrir que la aparición era de una hermosa mujer, que parecía danzar en torno al rayo de luz. Eduardo curioso aproxímese para ver mejor a aquella mujer... Ya muy cerca de ella, contempló su piel blanca, sus cabellos dorados y su total desnudez. Mientras la veía danzar todo el mundo parecía paralizado en torno a esa mujer que levitaba sobre la arena blanca de la playa. Ni la lluvia, ni los rayos productos de la tempestad podían irrumpir en aquel escenario semejante al paraíso. La danzarina con su mirada brillante era una tentación, parecía a Eva en el paraíso tentando a Adán, su mano extendida convidaba a Eduardo quien sin pensarlo acercase aún más a ella.... Encantado en la sigue mientras el haz de luz ilumina el camino. Alama lo lleva hasta la Piedra del Pico, mientras revela con toda su belleza y con su desnudez el espectáculo... En ese instante Samuel despierta de su borrachera y empieza a procurar a en la venta, en su desesperación despierta a todos y pregunta al recepcionista de la posada si ha visto a su amigo en algún sitio; el mismo responde que lo hubo visto algunas horas antes yendo en dirección drogado o encantado. — Eduardo no dijo nada, apenas salió caminando en la lluvia en dirección a la lluvia — Repite sumamente preocupado Henrique. — Eso mismo, nada dijo, solamente observó en dirección a la Piedra del Pico y salió bajo la lluvia — Replica el recepcionista del lugar.


11 — ¿Usted no sabe lo ha podido acontecer? ¿Estaba con alguien? — Pregunta Bianca con preocupación. — Él ha ido solo, quizá atraído por la luz que aparece en ese lugar los viernes; si es así encontrará a la aparición que mucha gente ha visto, la bruja Alamoa. En ese caso corre verdadero peligro, si lo quieren vivo vayan rápido a ese sitio antes que la piedra ciérrese y la luz apáguese. — Explica con los ojos afligidos el recepcionista. - Eso es una leyenda, no existe esa tal de Alamoa, no puedo creer que todavía cuenten esa historia aquí, eso nunca ha sido confirmado ¡Solo engañan turistas con ese ardid! — Dice Samuel con rabia en su voz. — Si es verdad o no es lo de menos ¡Ve a confirmarlo, puede que ya sea tarde para salvar a su amigo! ¡Tenéis que llegar a Piedra del Pico antes que la luz extíngase... Sin pensar o demorar más, los cuatros amigos apresurase para llegar a la Piedra del Pico. AL llegar a la playa, avistan la roca con mayor nitidez y hallan una luz flagrante que sale tímidamente de una hendidura en la gran piedra... En la arena blanca, las pisadas muestran el camino que Eduardo ha realizado. Henrique y los demás las siguen con prisa, más el camino tornase difícil de realizar...Parecen impedidos por una fuerza maligna y no pueden acercarse a la parte más alta de la roca. Sus fuerzas desparecen y sus pies pesan increíblemente... Eduardo encantado y enamorado por la belleza de la mujer de cabellos dorados, no percibe que empieza a entrar a través de la hendidura de la piedra; la luz comienza a perder intensidad, mas nada importa. El mozo continúa encantado por la danzarina que lo atrae cada vez hacia lo profundo. En ese mismo momento, luego de un colosal esfuerzo, sus amigos alcanzan la parte alta de la estructura, gritan su nombre, mas él parece no oír absolutamente nada, está hechizado con la belleza de Alamoa que flotando a poco centímetro del suelo danza y gira moviendo sus cabellos dorados sobre su cuerpo desnudo. La hendidura comienza a cerrarse lentamente, Samuel, Bianca, Paula y Henrique gritan desesperados, mas nada consiguen … El mancebo con la mente perdida no lograr percibir el peligro que corre... La abertura cierras por completo, la luz brillante extenúense, el clima cambia de imprevisto; las nubes desaparecen y la luna llena comienza a emitir sus rayos sobre la Piedra del Pico y las arenas de la playa de la Concepción; una lechuza corta el firmamento y vuela en círculos sobre el lugar, mientras emite un sonido horripilante. Los amigos de Eduardo sienten escalofríos y todo permanece en silencio por un largo instante... El mozo despierta de su encanto justo después del cierre de la hendidura, ahora no hay ninguna luz brillante, sino la más terrible obscuridad, la hermosa mujer comienza a transformarse, sus ojos brillantes no existen más y su cuerpo tan atractivo no pasa de un esqueleto. Todo hubo tomado otra forma y el terror comienza a succionarle la vida... Por algunos días sus gritos de pavor retumbaron por todo el sitio, mas con el correr de las jornadas sus amigos perdieron toda esperanza de encontrarlo y todo tornó a la normalidad en aquella isla misteriosa. El encanto de la bruja Alamoa habían cobrado otra víctima, aumentando el número de desaparecidos. Las explicaciones son solo necesarias cuando algún cuerpo es encontrado en la vera del mar, en ese caso las autoridades locales hablan de “suicidio”. Después de un tiempo, una nueva tempestad comienza a aparecer con los rayos cortando el cielo, el ciclo de la luna ha sido completado y la luz brillante empieza emerger de la hendidura en la Piedra del Pico. Si alguien desavisado camina esta noche por la funesta playa, tendrá como único destino el ser víctima de los encantos de la luz y de la danzarina misteriosa...


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EN BUSCA DE LA OTRA MITAD FABY CRYSTALL Estaba perdida en mis pensamientos, sin rumbo ¿Qué podía hacer? Mis poderes habían comenzado a debilitarse, precisaba de un ritual o alguna cosa que reavivara la llama dentro de mí. Vagaba por el valle, en busca de algo, mas, ¿Qué era lo que me faltaba?... Resolví regresar al castillo, fui hasta el viejo baúl de la abuela, senté me en su mecedora preferida y dispuse me a pensar profundamente; de repente el espejo de almas habló: — Évora. ¿por qué su alma llora? Su tristeza me ha despertado. ¡Cuéntamelo! —¡Espejo! Tú que has acompañado a mi abuela y a mi madre durante tanto. Ahora que eres mío conoces mi alma mejor que yo misma; siento me extraña, mis poderes disminuyen, estoy cada vez más débil ¿Qué debo hacer? — Évora, Évora, solo existe una cosa que resolverá sus dudas, debe hallar el viejo Libro del Espejo de tu tatarabuela Morgan, en él encontrarás las respuestas. Mas prepárese, las respuestas seguramente le harán temblar. — No entiendo, si sabes algo, ¿Por qué no lo cuentas? ¿Por qué tanto misterio? — Porque mi querida Évora, lo que descubrirás es una larga historia de 700 años, que envuelve a toda tu familia. Comencé entonces una búsqueda desesperada del libro, fui hasta el desván donde mi madre guardaba las cosas de nuestros antepasados, nada pude hallar, fui al sótano de nuevo, procuré en todos los baúles... Hasta que encontré una pequeña caja de madera cerrada con un candado, recordé la llave que cargo como pendiente en mi cuello, la coloqué...¡Finalmente lo conseguí! .... Finalmente, había hallado lo que procuraba, el Libro del Espejo, donde estaba registrada toda nuestra historia familiar, donde mi tatarabuela Morgana había dejado plasmados todas sus magias, todos sus hechizos y la maldición que pesaba sobre nosotras. En el libro había registrado un enfrentamiento que tuvo con un mago llamado Elián, del cual estaba perdida enamorada, él había querido hurtar todo el poder de la abuelita, mas ella pudo vencerlo... Sin embargo, antes de ser desterrado a otra dimensión, el mago lanzó una pesada maldición sobre todas las mujeres de la familia: "Generación en generación, viviréis eternamente procurando la otra mitad y cuando esa hora llegue sus poderes disminuirán hasta desaparecer por completo. ¡Y si el corazón es engañado por un amor no correspondido vosotras mismas os quitareis la vida! A partir de eso pude comprender, porque todas mis antecesoras habían sido suicidas y ¡Yo encaminabame hacía eso también! Realmente muy preocupada, regresé a conversar con el espejo: — Espejo, no puedo entender lo que las anotaciones de la abuelita quieren decir.


13 — Mi dulce Évora, Usted sufre de soledad, mas no es una soledad común. Precisa de su otra mitad, de un verdadero amor. ¡cosa que las otras no pudieron conseguir! — ¿Otra mitad? ¿Verdadero amor? ¡No creo en eso! Eso no podía estar pasando conmigo. Resolví por tanto salir a pasear por el valle un poco más, buscando sentirme un poco mejor.... Salí del castillo y traspasé los portones hasta arribar al valle, anduve escuchando el estacionamiento de aquellos malditos, hasta de imprevisto una voz habló tras de mí: — ¿Por qué paseas en un lugar tan feo, chavala? Hace un tiempo que vengo observándote y este no es lugar para ti — ¿Quién eres para decir cuál es mi lugar? — Discúlpame, me llamo Cézar ¡No quería asustarte! — ¿Asustar a una bruja? ¿Es una broma? ¿Qué haces aquí Cézar? — Estoy prisionero en otra dimensión, no puedo salir, por lo que siempre estoy vagando, esperando que, a alguien interesante para conversar, lo cual es muy difícil. Solo cuando otros iguales a ti salen en busca de alguna cosa para sus pociones o hechizos. — Yo vengo aquí solamente para pensar. ¿Qué es lo que te impide salir? — Hablemos de otras cosas ¿Dónde vives? — En un castillo, mas. ¡preciso irme ahora! — Regresa Évora ¡Quiero que vengas otras veces! — Está bien ¡Regresaré pronto! Regresé corriendo hacia los portones, pasé por nuestro cementerio familiar, hasta llegar al castillo. Fue entonces que recordé que no le había dicho mi nombre ¿Cómo podía saberlo?... Pasé la noche intentando entender como Cézar había descubierto mis nombres y debo confesar estaba encantada con él. Aquella noche tuve sueños ardientes con él, lo cual incomodó me mucho, pues nunca había sentido una cosa igual, de repente oí a alguien llamándome... Fui hasta mi ventana, miré y nada. ¡Debo ser una bruja en crisis! Resolví por tanto ir al día siguiente a ver a Cézar en el valle nuevamente. Traspasé una vez más los portones y allí estaba él, lindo, sentando sobre una piedra esperándome. — Has demorado Évora. ¿Por qué no has venido antes? — ¿Cómo sabes mi nombre? — Sé alguna cosa, estoy encarcelado aquí, mas sé un poco, sobre todo. Reímos juntos y a pesar de estar en un lugar extraño, uno hacía compañía al otro... Fui cada vez más seguido a aquel sitio; hasta que un día resolví encontrar una forma de llevar Cézar conmigo, sentía mis poderes más fuertes, por lo que subí al desván en búsqueda del viejo Libro de las Sombras de mi madre, el espejo dioses vuelta y dijo: — Dulce Évora ¡No siempre las cosas son como parecen! — No vengas con enigmas ahora, ¿Puedes ayudarme? Sino quédate quieto, preciso liberar a mi amor — Joven, ¿Sabe por qué él está allí? Él es el ...


14 — Quédate quito espejo, lo liberaré y lo traeré conmigo al castillo hoy, la primera noche de luna llena del sexto mes. Salí del sótano, dejando al espejo murmurando algo, al encontrar lo que tanto necesitaba... Regresé al valle levando conmigo el libro y todo lo que requería para completar el ritual de liberación. Le pedí entonces que pusierase en el centro de un pentagrama e invoqué las palabras mágicas, en ese momento fue envuelto por un humo negro espeso y su apariencia dulce y linda mutó en la de un viejo arrugado con vestimentas rasgadas... Sus largas uñas cogieron mis brazos con fuerza y él dijo: — Évora, Évora, deberías haber oído al espejo, no soy Cézar, soy Elian y finalmente tú me has liberado de la prisión en que la maldita había me colocado. ¡Ahora tu castillo y tus poderes serán míos! Comenzó a succionar mis poderes a gran velocidad, mas antes de perder la fuerza por completo, logré liberarme de sus garras: — ¡No! Maldito me has engañado, has jurado todo este tiempo amor hacia mí y todo lo que querías era ser liberado. Serás maldito sobre la tierra. Vivirás como nada y ningún poder tendrás... Solo serás digno de odio. Te he liberado, mas ningún ser te observará y así como las mujeres de mi familia, tú mismo tomarás tu podrida vida. Yo continuaré en la busca de mi otra verdad, mas tú solamente serás un puñado de polvo... Poco después, Elian comenzó a desafinar, sus poderes no regresaron y transformase en una criatura solitaria del castillo... Tras lanzar la maldición sobre decidí hasta la cima de un peñasco y a pesar de ser una bruja decidí saltar... Ahora solo soy un espíritu, un espíritu que vaga por el valle, en busca una otra mitad, que nunca he de encontrar.


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LA HORA MUERTA J. J. DE SOUZA ¿Usted no recuerda nada señor Fábio? El psiquiatra colocó el anotador encima de su regazo. Fábio había comenzado aquel tratamiento días atrás, después de lo ocurrido, del accidente en la madrugada, de las constantes noches de insomnio en las cuales siempre levantaba se a las tres de la de la mañana; la hora muerta, como decía el manual de brujería que estaba leyendo. A su lado un cadáver femenino de unos treinta años, del otro un hombre cuyo rostro no podía ver. Él no conseguía soportar el mirar a aquella figura demoníaca, que a veces parecía hombre y a veces mujer. Una noche fue cogido por la policía, permaneció detenido, mas gracias a su tío, el diputado, consiguió salir del presidio y comenzar ese tratamiento en la clínica. No gustaba del lugar, todo lo que quería era librarse de aquella cefalea y enterrar sus memorias. Siempre el Día de las Brujas, salía y tenía aquellos recuerdos; el peor de ellos: Su hija muerta al lado de su mujer, después que un automóvil cruzara el semáforo en rojo. — No, como le dicho al delegado, no recuerdo nada. Lo he contado innumerables veces, en el accidente sufrí un fuerte golpe en la cabeza, una conmoción, después de eso no recuerdo más nada. El psiquiatra era un joven con cabellos negros peinados a un lado, y aunque no usaba anteojos, movía demasiado los parpados para ser una persona sin necesidad de corrección visual. Tenía además un tic nervioso, después de cada palabra emitida miraba hacia arriba. Era delgado, cruzaba las piernas con la elegancia y destreza de un atleta y con anotador registraba todo lo que Fábio decía. Dr. Kleiton de Assis Roch, formado en la USP (Universidade de Sao Paulo), hizo un doctorado en Francia, terapeuta de orientación lacaniana, tenía una voz firme, un aire simpático propio de las personas que gustan y saben lo que hacen. El psiquiatra era muy culto, rara excepción en el ambiente de la medicina, tenía conocimientos en filosofía y considere base hegeliano, a pesar de todos y de todo, era como Lacan un hombre seguro de sus símbolos. Esto lo había llevado a graduarse en filosofía UFRJ (Universidade Federal de Rio de Janeiro), una batalla campal por el conocimiento, hecha para alimentar el ego. Exhausto ese mismo, fue elegido jefe de un centro de investigaciones psiquiátricas. De esta manera continuó su carrera hasta convertirse en una de las mayores autoridades del país en la materia... Según el cotilleo de la clínica, el Dr. Kleiton era sin dudas el mayor psiquiatra del Brasil. El joven psiquiatra alejó la silla que estaba crujiendo e incomodando a su raciocinio, no gustaba de esa silla, en verdad la odiaba, tal vez por eso ponía se tan incómodo con ella, una silla común, sin decoración especial, todo demasiado simple, no había clima de hospital, siquiera el olor. Quizá por esos motivos Fábio disfrutaba el lugar, incluso más que la calle, donde había vivido dos años.


16 — Usted ha estudiado, Fábio, ha sido un individuo con una vida plena. Según su ficha era un alumno notable, sin embargo, abandonó la carrera de medicina. No lo culpo, tantas veces pensé en abandonar mi carrera, creo que en el segundo año fue cuando lo pensé con mayor seriedad. — El psiquiatra bebió un sorbo de agua y continuó con el paciente que hallaba más interesante - Personalidad fuerte, combativo marxista. ¿Usted es aún marxista? O ¿Solo era una rebeldía adolescente, como sucedió conmigo? Fábio habíase retirado de la universidad a causa de la pobreza de su familia, aquel psiquiatra no tenía la menor idea de loó que estaba hablando, cuando se es pobre es muy complejo el estudiar. Su padre, un biólogo, cayó en la ruina después que su empresa presentara bancarrota. Una empresa de reciclaje en la cual trabajaba con su hermano; ese diputado que lo había ayudado a evadir la prisión. Avergonzado con las deudas sufrió un año después un severo accidente cerebro-vascular, lo cual derrumbó las oportunidades de Fábio, puesto que debió retornar a su hogar a cuidar de los padres... La madre postrada de una enfermedad degenerativa que la mató a los pocos meses de su regreso, el padre también impedido por causa del ataque cerebral, solo quedaba le ese tío evangélico, en aquella época en su primer mandato como diputado. El hombre que había arruinado la sociedad de su padre, a quien Fábio odiaba. Luego del ataque sufrido por su padre, ningún amigo apareció para ayudar a la familia, el dichoso tío apenas ayudaba con cifras mínimas de dinero y medicamentos, estaba realmente solo.... -Que tragedia, mas ya hemos hablado de eso, usted superó todo. Si pudiera ¿Volvería a estudiar? ¿Quisiera ser médico? — Concluyó el psiquiatra, Fábio estaba inquieto, pues estaba llegando el Día de Las Brujas. — Está llegando — Dijo observando fijamente al médico. — AH, su paranoia con el Día de las Brujas, cálmese nada ocurrirá — Ocurrirá, todos estos años ha acontecido. Fábio miró a los ojos al doctor, era la primera vez que se concentraba en sus ojos, y dijo: — Usted debería oírme, ella matará a todos lo que intenten impedir... — ¡Es una visión pesimista! Aun así, respeto su opinión. ¿Acaso no cree que toda profesión tiene sus riesgos?... — Creer en lo sobrenatural, no está mal, mas usted está obsesionado. Ha creado un personaje para echarle todas las culpas, debería evolucionar, construir cosas, mejorar. Fábio levantase y miró el diploma en la pared. — Formado en la USP. Claro que no precisamos decir porque este diploma está en la pared, la USP es la mejor, este otro diploma. ¿Es al honor y al mérito? — Él rió —

Todo esto es trofeo, mas usted aún no ha enfrentado su

sexualidad, tuvo dificultades de aceptación en el segundo año — Fábio, que estaba con la barba crecida, pasó su mano por la misma — ¿Su novio es enfermero? O psiquiatra sonrió — Mi novio es abogado. — ¡Ella lo matará! — Respondió Fábio. El psiquiatra volvió a sonreír, mientras pensaba: “Este delirio de la bruja, brujo, fantasma es irritante. Ha quedado empantanado en eso y no puede salir”. Fábio continuó hablando. — No es que sea homofóbico, he tenido dos amigos homosexuales, uno de ellos un gran sociólogo y el otro un policía militar. Creo que el mundo es libre, quiero decir, el mundo de los demás, pues yo estoy preso en vida por el


17 error de alguien, mas ella siempre está atrás de mí porque cree que el error ha sido mío. Un error que me ha quitado lo que importa en la vida. — Él fue hasta la ventana, a pesar de las rejas, era posible ver el campo sembrado en frente. — ¿Usted no es libre? — ¿Yo? — Fábio observaba fijamente el campo. — ¿Cómo alguien que despierta todas las madrugadas del Día de las Brujas desde hace seis años, en un punto de la ciudad al lado de una mujer muerta, puede decir que tiene libertad? — Usted puede tener sonambulismo, una forma de autonomía de partes remotas del cerebro. Fabio tenía los ojos enrojecidos cuando respondió: — La última vez que me esposaron, tres policías murieron y nadie sabe cómo ocurrió. — Las personas ponense violentas en estado sonámbulo. — Nada de sonambulismo. Hay un demonio tras de mí, una maldita bruja o un brujo, un ser maligno. He sido siempre ateo y ahora tengo a ese demonio, cuyo rostro no consigo ver, persiguiéndome. Siento dolor cunado estoy en su presencia, justo aquí — Señaló su cabeza. — Si dio existe, no ayuda a nadie, principalmente a mí— Fábio rió, era una risa amarilla, de quiene está enfermo en el alma. — No sé si creo en dios, gusto de pensar en lo trascendente. Usted sabe, el simbolismo es anterior al lenguaje, la razón aún no es sustentable, precisa de muletas, parece ser un barniz, una película tenue y débil. Varias cosas son hechas por impulso, sin que nuestro cerebro tome conciencia. Podemos, por ejemplo, beber una bebida alcohólica, simplemente por sugestión interna, nada en relación a la razón. Después coger un automóvil y matar a un niño, todo muy irracional y primitivo. Fábio escuchó aquello de la boca del psiquiatra que nunca aceptaría al demonio que lo acompañaba, el mal sin rostro ue venía directamente del infierno cada vez que sentía dolor. — Dr. Kleiton — Llamó la enfermera. — La policía está aquí, el inspector Dantas, quiere hablar con nuestro paciente. —Negativo, nada de policía, ahora que está hablando, después de días de un estado catatónico. — Él dice que tiene un mandato... Que la mierda del Día de las Brujas está llegando y el tal Fábio matará nuevamente, porque lo ha hecho los últimos años, él me ha dicho palabras muy vulgares que estoy omitiendo...- Antes que la enfermera terminara de hablar, entro un hombre pequeño y calvo de levita y corbata, seguido de dos acompañantes, un hombre y una mujer, ambos armados y con el distintivo en el cuello. —Dr. Kleiton, médico psiquiatra, es un inmenso placer — Comentó la mujer. —Nair. ¿El psiquiatra es quien trata a los locos? ¿O es el psicólogo? A decir verdad, agrédanme los psicólogos, mi madre intentó arreglarme y envíame al psicólogo unas cien veces, siempre he sido un poco loco. — Dice el inspector — Soy Psiquiatra, y no gusto del término “loco”. ¿Quién es usted? ¿Puede salir de mi silla? Estoy en el medio de un tratamiento — Dantas, mi nombre es Marcel Dantas, trabajo para la policía. Esos son los agentes José y Nair. No valen nada, uno es loco y la otra una pirada, ni los electrochoques podrían arreglarlos. Estamos aquí para aprender al sospechoso. ¿Cómo es su nombre? - Golpease la cabeza- Vamos Nair ¿Cómo es el nombre del delincuente que tiene una mierda de diputado como tío y siempre mata mujeres? — Fábio — Responde Nair.


18 — Ese hijo de puta. — Él no está listo, el trauma le ha causado amnesia, no recuerda nada. Usted solo está molestado, mi paciente ha estado catatónico por días sin responder palabra alguna. Fábio Miró a la investigadora, tenía unos cincuenta años, usaba pantalones vaqueros muy ajustados y una blusa fuera de moda, el hombre era más joven, tenía un gorro con la publicidad de un supermercado. Mientras tanto, cansado, bufando, totalmente fuera de peso; el encantador Inspector Dantas pedía un café y sentabase en el sofá. — Precisamos llegar a un acuerdo — Dice Dantas cruzando las piernas y pasando la mano por la calva — El joven tenía sangre de la víctima en la mano, en las últimas veces el arma homicida en la otra; en la últimas cinco, mejor dicho, porque en la sexta mató utilizando queroseno y no había nadie más en los lugares para testimoniar a favor o en contra. Para mí el caso está cerrado, es culpable sin dudas. Hay más de mil crímenes sucediendo en las calles y no puedo perder más mi tiempo con uno solucionado. El psiquiatra levantase, él parecía mucho más que todos allí, fue hasta el sillón donde estaba el inspector y hablo en voz baja muy cerca del oído del policía. Fábio vio con curiosidad como cogía un papel y entregabalo al inspector — ¿Usted sabe leer Dantas? — Esa vez Fábio casi rió. — Esta es una orden judicial, el señor Fábio está najo mis cuidados. El papel fue arrojado hacia el rostro del psiquiatra. — Eso es política doctor. El tío de este miserable es diputado, solo por eso no está en la cárcel...

Fábio soñaba con Ana Lucia en el momento del accidente, cuando despertó sudando frío y trémulo, eran las tres de la mañana, aún estaba en la clínica... Era el Día de las Brujas. Pusóse contento porque no había ningún muerto, y por estar todavía en aquel lugar. Todas las personas estaban durmiendo y él sabía que el demonio aparecería para conversar. Cuando miró hacia un lado, allí estaba él. Todo ponense gélido cuando aparece. — Sabes que tu descanso acaba aquí. Tú debes obedecer — ¿Quién eres? — Siempre la misma pregunta, yo soy la parte tuya que murió en aquel accidente junto con tu hija y tu esposa. Soy el dolor que consume, tú me has llamado desde las profundidades, has procurado tu alma negra y por eso he venido. Porque el dolor tiene que salir, la mujer que golpeaste con tu automóvil fue la culpada. El rostro no podía ser visto, más la voz era de una mujer, en lugar de rasgos faciales humanos apenas podían se ver unos inmensos ojos felinos rompiendo la obscuridad total, el temor, su cabeza comenzó a doler, su nariz empezó a sangrar... Aquel día de las Brujas nuevamente Fábio apareció en una calle obscura. A su lado una joven con el rostro desfigurado por la violencia y el vestido rasgado. Las manos de Fábio tenían sangre, el mismo puñal o uno de la misma apariencia estaba en su mano derecha. Hubo asesinado otra vez, mas ¿Por qué? Precisaba salir de allí, regresar a la clínica, mas estaba completamente desnudo. ¿Cómo atravesaría la clínica de ese modo? Retiró los andrajos que vestía la joven y envolvió su cintura, fue corriendo hasta una esquina donde había un automóvil parado, lanzó una piedra contra el vidrio, ninguna alarma sonó, había aprendido a hacerlo de la manera correcta, entonces pudo regresar a la clínica, entró por la parte de atrás, tomó un baño para limpiar la sangre y acostase. Sus ojos estaban pesados, ahora él sabía que era quien cometía los crímenes, más lo olvidaría por la mañana.


19 — He dormido demasiado anoche, mas hasta donde sabemos. Usted no ha salido de la habitación — Dijo el psiquiatra ¿Ya lo sabía? Aquel maricón lo sabía, no importaban le las víctimas, solo deseaba estudiar el caso Fábio estaba preocupado, más el psiquiatra mostraba tranquilidad en la voz, parecía estar bromeando con Fábio. — Ha sucedido nuevamente y usted lo sabe — Comentó Fabio. — Sí, es cierto. He llamado a la policía para entregarlo, estoy examinando el vídeo de la fuga, más creo que levantará preguntas sobre la naturaleza humana — ¡Que mierda! ¡Una mujer ha muerto! Explotó Fábio. — y usted pagará por ello, el inspector Dantas ha llamado, ha dicho que quiere nuestros vídeos de vigilancia, más le diré que desde diciembre del año pasado nuestras cámaras no funcionan. A mí no interésame El aire del médico era de hipocresía. El demonio estaba allí Fábio sintió su presencia — ¿Su familia murió en un accidente en la madrugada? — ¡Ah! Fábio no prestaba atención. Su cefalea estaba regresando. — Su familia. ¿Usted ha perdido a su familia, al regresar manejando ebrio de una fiesta? — No era yo quien manejaba, era mi mujer. Le dije esa noche que eran las tres de la mañana, no gusto de ese horario, la ciudad parece muerta... — Fábio tenía mucho dolor de cabeza, podía oír la respiración de su hija de siete años, a su mujer conversando sobre cosas de la fiesta, de la obscuridad de las tres de la madrugada, el dolor el dolor... Fabio sacó el puñal que escondía en la cintura y con un movimiento rápido cortó la garganta del psiquiatra. Fue en ese momento que el inspector Dantas entré y disparó a Fábio. — ¿Él está aquí? — preguntó mientras agonizaba — No, querido, solo yo, tú y el psiquiatra cuya garganta has cortado Dantas apretó el botón de emergencia, nadie respondía ¿No había nadie más en esa clínica?... Al levantarse sintió una presencia obscura, giró y escucho una voz interrogar: — ¿No cree en brujas policía? — Acertó cinco puñaladas en el pecho de Dantas... Después que él cayó, la figura maligna cortó la cabeza del investigador y la arrojó por la ventana, cayendo la misma sobre el techo de un automóvil. Todo el suceso fue atribuido más tarde a Fábio. Mas mientras tanto la Bruja, sigue libre procurando su próxima víctima.


20

UNA DAGA ENSANGRENTADA, UN CAMINO DE SANGRE Y UNA VENTANADA QUEBRADA E. N. ANDRADE Era Día de las Brujas y en la ciudad Colinas Jóvenes, como en todo el país, los niños estaban preparando sus disfraces junto a sus padres., Andréa y Denzel no conseguían ponerse de acuerdo, su madre había comprado disfraces ridículos de Chewbacca y Darth Vader y los dos intentaban transformarlos en algo mejor, junto con la ayuda del hermano mayor Tyler. Cuando de repente en la ventana del cuarto algo llamó la atención. — ¡Puta mierda! — Exclamó Tyler al percibir que un automóvil paraba en frente de la casa vieja que un día había pertenecido a los Weber, más que ahora estaba completamente abandonada Los dos pequeños corriendo hasta la ventana, para espiar junto con su hermano la novedad de la jornada. Un hombre fuerte y robusto de cabello lamido descendió del automóvil, el camión de la mudanza no tardó en llegar y en empezar a trabajar. Andréa y Denzel regresaron a trabajar en sus disfraces, no había nada raro en tener un nuevo vecino. Tyler estaba por seguirlos, cuando de imprevisto vio a dos hombres de la mudanza cargando un ataúd. — ¡¿Qué coño es eso?! — Quejosa y el vecino giró el rostro hacía él, como si lo hubiera oído... El mozo cerró las cortinas rápidamente — ¡Tyler James! ¿Cuántas veces tendré que decir que no digas palabrotas delante de tus hermanos? — Su madre dijo apareciendo de repente cargando muchas bolsas. — Perdón madre, estaba tan distraído no he visto que llegaba. — Ve hasta el automóvil y ayúdame con las bolsas — Ordenó Tyler acompañó a su madre, Lucia, ella había comprado muchas calabazas, dulces y otras cosas para comer junto con decoración para el Día de las Brujas... El mozo ya casi había terminado cuando en uno de los retornos encontró a su madre conversando con el nuevo vecino. Él moviese de manera muy sensual. ¿Estaban flirteando? Podía apostar que sí. Tenía que intervenir, mas ese hombre no era normal, daba miedo... —¡Tyler! No te quedes parado y ven a ayuda. — Ella gritó y el hombre desagradable encáralo levantando las cejas y con una sonrisa que estaba muy lejos de ser simpática. El joven atravesó el césped hasta llegar a ellos mirando hacia el suelo, no quería ver a ese hombre; su madre continuaba flirteando con él. — No seas mal educado. ¡Saluda al señor Juanez! — ¿Hola? — Tyler dijo aún sin encararlo. — Es un placer conocerte Tyler, Lucia querida, Dime Matías, ya somos buenos amigos y aún somos jóvenes — Dijo el vecino como una voz tan increíblemente seductora que hasta Tyler sintiese atraído. Su madre rió con las mejillas enrojecidas, más el muchacho la interrumpió


21 — Entonces usted tiene un ataúd de verdad... — Comentó mientras examinaba su reacción. — ¡Tyler no seas indiscreto! — Lucia reprendió, aún más colorada. — No hay problema. Claro que tengo uno, jovencito, después de todo es el Día de las Brujas y prefiero celebrarlo a lo grande. Irritado, el mancebo cogió la última calabaza y salió de allí, mas antes de llegar a la cocina pudo oír a su madre encantada diciendo: — ¿Por qué no vienes a comer conozco Sr, Juanez??... Quise decir Matías. — Será un inmenso placer. El calaba cayó al piso y destrozase Paras las ocho y media, Lucia había conseguido esculpir las calabazas y disponerlas por toda la baranda, dentro de la casa estaba todo perfecto, humo artificial en el suelo, luces titilantes, telas de araña falsas y mucho ponche color sangre. En el cuarto Tyler conversaba con sus hermanos. No habían podido cortar los disfraces de la Guerra de las Galaxias, porque eran muy costosos, por tanto, no tenían otra opción que usarlos. El hermano mayor únicamente usaba una daga de verdad y una máscara de viernes 13... Espiaban por la venta, el vecino estaba por llegar. — Vosotros seréis amables con el tal Matías, de esa manera tendré una posibilidad de escapar, abriré la llave de la regadera y fingiré estar bañándome. Mamá sabes que siempre demoro cuando lo hago, entonces saldré por la ventana e iré hasta la casa de él para descubrir todo lo que pueda, debéis mantenerlo vigilado, incluso si va al sanitario y si por algún motivo decide regresar a su casa, id a mi habitación y hacedme señas con las luces. ¿Habéis entendido? —Comentó Tyler nervioso, temía que los pequeños echaran todo a perder. — Sí. He entendido. — Dijo Denzel. — ¡Yo también! — Andrea confirmó. Tyler sonrió a ambos, un sudor frío corría por su cabeza. — Él está viniendo, proteged a mamá y no olvidéis el plan. La campana retumbó por toda la casa, abrió la ventana y utilizó el árbol para descender. La calle estaba obscura, los vecinos habían decorado el barrio y había mucha gente fuera, no existía un peligro real. ¿O sí?... La casa del nuevo vecino era la más sombría, el mozo sintió que penetraba en el túmulo de un demonio al traspasar el umbral. Un túmulo el cual nadie debía cruzar... El mancebo sacó sé la máscara de su rostro y apretó los ojos para ver mejor. Cerró la puerta, todo estaba tan obscuro y lleno de polvo... Exploró hasta llegar a la sala de estar, no había nada en ella ¡Estaba vacía ¿Cómo podía ser? Él hubo visto el camión de la mudanza y algunos muebles ¿Cómo podía entonces la sala de estar encontrarse completamente vacía?... Pasos en el umbral, golpes en la puerta. Su corazón disparó sé de improvisto. Sentó sé en el suelo y desesperadamente esperó que los visitantes se fueran. —

¿Dulces o travesuras? — Alguien Preguntó.

— Cállate idiota, no vive nadie allí a boca idiota. — Otro dijo. El mozo los oyó alejarse, más al estar echado en el suelo pudo de repente oír sonidos provenientes del sótano ¡Había alguien allí! Pusóse en cuatro patas y reptó hasta la primera puerta que encontró lo más suave posible... Estaba


22 cerrada, su única opción era la chimenea, encogiese hasta que pudo hacer entrar su cuerpo por completo en aquel pequeño lugar. Los sonidos hicieron ser más evidentes, hasta que vio una silueta cruzar la sala hasta la puerta... Ella estaba de espaldas al mozo, era una mujer tan atractiva que el mancebo sintió ganas de salir de escondite y besar sus pies — ¡Entren queridos! — Dijo con voz dulces y los niños entraron La puerta cerrase otra vez y los pequeños siguieron a la mujer hacia algún lugar. ¿Por qué no sentían miedo? ¿Por qué no dudaron el seguirla? No importaba, Tyler también quería seguirla... Estaba a punto de salir cuando algo encima de él pertúrbalo, había algo moviéndose por la chimenea, lo que fuera estaba yendo directo a su encuentro... Puso las manos en la boca, para no emitir sonido alguno, más en ese movimiento dejó caer la daga que sostenía haciendo un poco de ruido al impactar la misma contra el suelo lleno de ceniza. El barullo hizo eco por la habitación y logró que la mujer retornara al lugar. Él no sabía dónde estaba, más presentía que estaba muy cerca. Algo mojado chorreó por su nariz, una gota, dos gotas, cinco. Algo escurría por su rostro, él temblaba, mas no podía moverse... Estaba cerca, demasiado cerca, sintió un soplo caliente en su nunca, un escalofrió lo dominó, sintió otro soplo y casi gritó... Al levantar los ojos hacia arriba, pudo notar unos ojos rojos encendidos en la obscuridad... Algo tocó su cabeza y antes que consiguiera gritar fue empujado hacia la cima... Matias había sido adorable en la cena, más cuando él decidió regresar a su hogar, los pequeños entraron en pánico, no pudieron fingir, por tanto, cuando apenas el vecino puso un pie fuera de la casa. Fueron hasta la recamara de su hermano y mayor y apretaron el interruptor varias veces de manera frenética — ¡Vayamos a contarle a mamá! — Andrea dijo pavorosa. — No estúpida ¡Vayamos a ayudarlo! — Denzel replicó. Su madre apareció en el cuarto ene se momento. — ¿Ayudar a quién? — Interrogó con la mano en la cintura. ¡Estaba atrapados! — ¡A Mati mamá! ¡Vamos a ayudarlo a decorar su casa, está tan apagada... — Denzel mintió! Lucia sonrió feliz, sus hijos habían aceptado a su nuevo pretendiente y aceptó que ellos salieran hacia la casa de él, hasta dióles unas calabazas... Ella no salió y dedicase a la limpieza del hogar

mientras sus hijos diviértanse

fuera... Después vio un filme de terror y cayó en un profundo sueño estando en el sofá. Cuando abrió los ojos ya era de día. Alarmóse al percibir que hubo dormido de más, no recordaba si sus hijos habían regresado, corrió hasta la recamara, Tyler estaba enrollado en la cama; fue hasta el cuarto de los más pequeños, también estaba enrollados. Más calmada vio por la ventana hacia la casa de Matías, dos hombres cargaban un ataúd en un camión de mudanza, no había más vecino... Un miedo, una intuición terrible tomó cuenta de cuerpo, porque resolvió revisar a los hijos. Sentada a los pies del lecho cogió las sabanas y destapó sus cuerpos, los cuerpos de los pequeños estaban ensangrentados con múltiples heridas... Desesperada puso se a llorar, más aún existía la posibilidad que Tyler estuviera bien. Regresó a su cuerpo, mas él no estaba allí, en su lugar encontraban se una daga ensangrentada, un camino de sangre y una ventana quebrada...


23

EL EXORCISMO DONNEFAR SKEDAR Los ojos del muchacho estaban rojos y sangrando, como si una hemorragia ocular interna estuviera agrediendo su rostro. Sus gritos suplicando piedad, eran los más terribles sonidos que un ser humano pudiera oír en toda su vida. Todos querían ayudar, mas nadie sabía qué hacer. Jonathan de apenas 10 años de edad estaba sintiendo en la piel lo que es ser dominado por un demonio perverso. Él estaba poseído desde el momento en que había cogido el libro de brujería enterrado en la quinta de su hogar. Al principio sus padres estaban seguros que el niño había sido mordido por una cobra, puesto que el lugar donde vivían era rondado por serpientes de variadas clases, sin embargo, el médico de la región no consiguió hallar herida alguna en el cuerpo del infante. Además, los síntomas eran realmente extravagantes y desconcertantes; solamente la llega de una tía proveniente del extranjero rebeló la verdad de los padecimientos... Nadie quiso para mientes en el relato de la invitada, consideraban lo una mera superstición de lugares alejados. Sin embargo, la tía logró que el sacerdote local fuera llamado para confirmar sus dichos. El prelado asustase al entrar en la casa, la energía negativa era realmente intensa en aquel lugar... El pequeño Jonathan moraba apenas con sus padres, su tía había venido de otro país por causa de la fiesta de Noche de Brujas que sería realizada en la casa de otro familiar en la ciudad vecina. El sacerdote explicó al padre y a la tía del niño, los únicos en permanecer junto al enfermo que gemía víctima de la fiebre (su madre no hubo soportado la escena y encerrase en su recamara llorando). Él mostró a sus interlocutores pasajes bíblicos sobre demonios y sus formas de poseer cuerpos humanos. El padre de Jonathan, aun siendo ignorante en el tema, era muy religioso y frecuentaba la misa en la parroquia local todos los domingos. La tía por su parte oyó atentamente todo y absorbió el máximo de información posible. Ella conocía la posesión demoníaca a través de historias relatadas en el país donde vivía. El prelado anunció además que no tenía los estudios específicos para realizar un exorcismo, más que podía realizar un ritual para saber si sería necesario llegar a tal instancia. El padre afligido por las manchas negras en el cuerpo su hijo, comentó lo que había ocurrido semanas atrás cuando el infante halló el libro de brujerías. La tía demostró un inmediato interés en el libro, alegando que había hecho un breve estudio sobre rituales y brujerías en la iglesia que frecuentaba. El padre confirmó que el mismo continuaba en la quinta de la casa cubierto por la tierra removida. Ella cogió el libro entre su manos, el libro no tenía en si señal de maldad ,sin embargo su escritura no era legible al estar en una lengua desconocida para todos ellos; al hojearlo notaron que habían diseños en secuencia que sugerían una especie de ritual o sacrificio: En ellos una mujer tenía relaciones sexuales con un demonio y luego con un hombre, después quedaba preñada y al dar a luz realizaba un sacrificio de un animal de gran tamaño derramando la


24 sangre encima de un libro, el cual era finalmente enterrado en la huerta de la casa. Los diseños eran esclarecedores sobre la situación, mas no rebelaban como ayudar al infante. El presbítero volvió a ofrecer el ritual para descubrir la entidad dentro del pequeño y el padre del mismo aceptó... El día 31 de octubre, en plena celebración del Día de las Brujas, el sacerdote llegó a la casa para realizar el procedimiento. Pidió al padre del muchacho que lo dejará sin camisa y a su tía que permaneciera en la cabecera de la cama enfrente a él asegurando una segunda biblia. La madre mientras tanto estaba en su habitación llorando y rezando a la vez; nadie más estaba en la casa, por lo que el prelado inicio el ritual con una oración especial anotada en su vieja biblia... Al pronunciar las primeras palabras en dirección al cuerpo del infante, el mismo comenzó a retorcerse y a lanzar gemidos de dolor.... Luego de que el presbítero lanzó agua bendita sobre el poseído, sus ojos comenzaron a abrirse mostrando el intenso color de la sangre, que no tardó en empezar a escurrir por su rostro... Las convulsiones aumentaron su fuerza, la tía acercó se y sujetó sus brazos, el padre que había estado inmóvil por el pavor, sujetó sus piernas, mientras el sacerdote seguía lanzando palabras en latín... El demonio finalmente rebeló su presencia a través de los labios del infante, su voz era aterradora y parecía un trueno, decía cosas que solamente el prelado podía entender; los dos hablaban mientras el cuerpo del pequeño seguía retorciéndose furiosamente … Al ser bañado otra vez por agua bendita, el demonio soltó un grito terrible y varias heridas aparecieron de repente en cuerpo del jovencito, como si un cuchillo invisible hubiera atacado su tersa piel. Un olor insoportable empezó a salir del cuerpo de la víctima, un hedor que apenas podían soportar, cuando estaban a punto de desmayarse por causa de la putrefacción el sacerdote soltó su última palabra en voz alta y demonio dejó de hablar... El cuerpo de Jonathan quedó inmóvil en la cama, su padre y su tía dejaron del sujetarlo y el presbítero dijo amén con un aire cansado cerrando su vieja biblia y observando al niño... Cuando él dioses vuelta para hablar con el padre de la criatura, el niño tomó de imprevisto impulso y con sus uñas largas y llenas de tierra de la huerta agredió el rostro del sacerdote. El padre corrió para retirarlo de encima del prelado, mas era demasiado tarde, sus brutales zarpazos hubieron herido el cuello haciendo que la sangre chorreara por doquier. El demonio berraba como un animal herido mientras intentaba zafarse de los brazos del hombre, más cuando la tía cometió el error de aproximarse, logró romper el bloqueo del padre y abalanzó se sobre ella El ser que dominaba el cuerpo de Jonathan, mordió con ferocidad el rostro de la mujer, ella gritaba con inmenso dolor mientras su carne era arrancada por los poderosos colmillos, el demonio mientras tanto sonreía y gozaba.... El padre del infante desesperado llamó a su esposa, mas ella no aparecía por la puerta abierta; entonces un instinto de rabia y miedo invadió su alma e hizolo coger el velador que estaba a su lado dar un brutal golpe en la cabeza de la criatura que todavía masticaba la carne retirada del rostro de la mujer. El niño cayo hacia un lado, mas su confusión duró apenas un segundo y dioses vuelta para encarar a su agresor...


25 Con los ojos derramando sangre y masticando lo que parecía ser la lengua de su tía, fue caminando muy lentamente en dirección a su padre. Cuando llegó a su lado con suma facilidad penetró con su puño el vientre del hombre y arrancó su corazón palpitante El hombre fue cayendo a los pocos segundos perdiendo su conciencia, mas antes de cerrar sus ojos para siempre, pudo divisar como su mujer entraba en la recamara y abrazaba al ser que aún tenía su corazón en sus manos... Lo último que pudo oír fue la voz de la mujer que sonó como una despedida: — Vayámonos hijo, vayámonos de este lugar...


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J. J. DE SOUZA LÉO BARGOM E. N. ANDRADE FABY CRYSTALL DONNEFAR SKEDAR BRIAN AGUSTÍN GONZÁLEZ

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